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D.S.B.

COLEGIO BETHANIA
FORMACION HUMANISTICA
CATEDRÁTICA: LIC. LUISA MARÍA DE OBIOLS

TEMARIO
TEMA No. 8
EL ABORTO

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1. EL ABORTO

TEMA No. 8

EL ABORTO

ATENTADOS CONTRA LA VIDA HUMANA NACIENTE

Como todos sabemos, el matrimonio es el único lugar sagrado que tiene la


autoridad para la procreación de los hijos. Pero en la actualidad, encontramos
muchos métodos anti-vida, entre los cuales tenemos el aborto, la eugenesia, la
anticoncepción, la esterilización y la fecundación in vitrio, los cuales dan una
mentalidad abortiva a la humanidad.

1. EL ABORTO

Concepto:
“La palabra aborto proviene del latín “Abortus” derivado de abotrior, que
significa opuesto a nacer.

Este término significa muerte o desaparición prematura; aunque


actualmente se utiliza para designar la expulsión casual o intencional del embrión
o feto, no viable, del útero de la madre.

En realidad, se podría definir, como la acción de provocar la muerte en


condiciones imposibles de supervivencia. Si se define el aborto por el hecho de la
expulsión del seno materno, es porque ésta va unida a la muerte del embrión; bien
por que la expulsión sea la causa misma o por que una vez muerto el feto en el
organismo materno, tiende a desembarazarse de la materia muerta y la expulsa.
Se entiende aquí, por el feto, todo ciclo vital, iniciado por la fecundación del óvulo
por el espermatozoide hasta que adquiere la capacidad mínima para sobrevivir
fuera del seno materno. En consecuencia, la expulsión del óvulo, una vez
fecundado, ya se considera aborto.1

1.2 División:

Existen varias clases de divisiones dependiendo de los autores, por lo


general se distinguen 3 tipos de abortos: el natural o espontáneo, voluntario o
criminal y el aborto indirecto.

1
Ferrer, Sarmiento, Adeva y Escós.

2
1.2.1 ABORTO NATURAL O ESPONTANEO
El aborto es espontáneo, voluntario, casual, natural, cuando las causas que
lo provocan no dependen de la voluntad de los hombres. Es decir, que es un acto
involuntario, que precisamente por involuntario carece de imputabilidad moral. Es
un accidente fuera del alcance y de la responsabilidad humana.

1.2.2 ABORTO PROVOCADO (CRIMINAL O DIRECTO)


El aborto procurado, provocado, intencional, artificial y voluntario es cuando
está causado por la intervención directa del hombre.

En este sentido una definición del aborto, tal como se entiende cuando se
usa sin más palabras, “es la muerte de un feto humano, viable o inviable, causado
por la actividad libre del hombre”. 2

El aborto es provocado cuando se realiza o bien matando al hijo en el seno


de la madre o bien forzando su expulsión y dejándolo morir luego.

El aborto directo puede ser: provocado como medio o provocado como fin.

1.2.2.1 PROVOCADO COMO FIN


Este aborto es cuando, lo que se desea es únicamente deshacerse del niño
directamente, es decir, matar al niño.

1.2.2.2 PROVOCADO COMO MEDIO


Este aborto es cuando se mata al niño, pero lo que se quiere es conseguir
otro fin, no por eso deja de ser aborto directo y por lo tanto aborto criminal.

Mediante él se pretende la consecuencia de otros fines distintos, por


ejemplo, la salud de la madre. En este caso la voluntad occisita, va, al menos,
implícita en la decisión voluntaria de una acción que en su desarrollo producen la
interrupción voluntaria del embarazo. La intención (salud de la madre) no cambia
la malicia objetiva primaria de los actos que la conducen al aborto.

1.2.2.2.1 ABORTO EUGENÉSICO


Este es un aborto directo, y por lo tanto criminal. Consiste en matar
directamente, en el vientre de la madre, a niños que tienen alguna malformación.

2
Gómez Pérez, Rafael. Problemas Morales de la Existencia Humana. Pág. 92

3
Las actuales técnicas médicas permiten la supervivencia de niños con
graves taras congénitas, esto ha planeado una polémica sobre la conveniencia de
mantenerlos con vida. Intervienen en este tipo de aborto la máscara del egoísmo.

El continuo desarrollo de los métodos de diagnóstico prenatal, con la


frecuente eliminación de los niños hallados anormales, podría abrir la vía a un
eugenismo a gran escala.

1.2.2.2.2 ABORTO TERAPÉUTICO


Este también es un aborto directo y por lo tanto criminal. Es cuando se
busca la muerte del niño, su expulsión del seno materno, para lograr la salud total
de la madre.

Actualmente, este aborto está obsoleto, ya que, por todas las técnicas de la
medicina, y con una asistencia prenatal adecuada, es inexistente.

El aborto terapéutico casi siempre se puede evitar con una asistencia


prenatal correcta y con todos los medios de que se dispone actualmente. Desde la
unión de los gametos (óvulo y espermatozoide) hay vida humana como un
proceso, lo que sigue es el nacimiento.

El feto, en ciertas circunstancias, puede ser considerado un injusto agresor


a la vida de la madre por lo tanto sería lícita la legítima defensa, pero el ser que se
ha formada es inocente y por lo tanto nadie tiene derecho a quitarle la vida en
ninguna circunstancia, es inocente en el más completo sentido de la expresión.
También lo es en el caso de que el embarazo se haya producido como
consecuencia de una violación. La madre lleva en su seno a otro ser humano,
para el que tiene una serie de deberes durante nueve meses, de ella depende la
vida del hijo.

En el aborto terapéutico se salva la vida de la madre antes que la del niño,


esto es totalmente ilícito. Se trata de un caso límite, al extremo de que en la
práctica es casi inexistente, y en el caso hipotético de que se diera, no sería lícito,
porque no se puede hacer un mal para conseguir un bien.

1.2.2.3 ABORTO INDIRECTO


“Es el causado como efecto secundario e inevitable, previsto, pero no
querido, solo permitido (tolerado), de una acción en si buena, exigida por razones

4
graves y proporcionales del efecto malo del aborto, que nunca es querido y, si se
puede evitar, se evitará”.3

Un ejemplo del aborto indirecto sería que para curar a la madre de


enfermedades graves se suministraran fármacos que podrían tener como efecto
secundario la muerte del niño; sólo en caso de extrema necesidad se emplean
medicinas que pueden tener efectos abortivos, y siempre con pleno conocimiento
y consentimiento de los padres del niño.

Para poder dictaminar sobre la licitud del aborto indirecto, se siguen las
reglas de los principios de acción del caso de doble efecto o voluntario indirecto.

2. IMPLICACIONES ETICAS
“La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde
el momento de la concepción. Desde el primer momento de su existencia, el ser
humano debe ver reconocido sus derechos de persona, entre los cuales, está el
derecho inviolable de todo ser humano a la vida…”4

Desde el siglo I, la Iglesia ha afirmado la malicia moral de todo aborto


provocado. Esta enseñanza no ha cambiado y no cambiará; permanece invariable.
El aborto, es decir, querido como un fin o como un medio, es gravemente contrario
a la ley moral…

La cooperación formal a un aborto constituye una falta grave. La Iglesia


sanciona con pena canónica de excomunión este crimen contra la vida humana…
con esto la Iglesia no pretende restringir el ámbito de la misericordia; lo que hace
es manifestar la gravedad del crimen cometido, el daño irreparable causado al
inocente a quien se da muerte, a sus padres y a toda la sociedad.

El derecho inalienable de todo ser humano inocente a la vida constituye un


elemento constitutivo de la sociedad civil y de su legislación… puesto que debe
ser tratado como una persona desde la concepción, el embrión deberá ser
defendido en su integridad, cuidado y atendido médicamente… como todo ser
humano.

3
Vega Ponce, Alberto. Madre ¿Cuento Contigo? Editores de Revistas, S.A. de C.V., México, 1990.
Pág. 16
4
(CFR) Catecismo de la Iglesia Católica. Asociación de Editores del Catecismo. España. Pág.
499-501.

5
El diagnóstico prenatal es moralmente lícito, si respeta la vida e integridad
del embrión humano, y si se orienta hacia su protección o hacia su curación…
pero se pondrá gravemente a la ley moral cuando contempla la posibilidad, en
dependencia de sus resultados, de provocar un aborto: un diagnóstico que
atestigua la existencia de una enfermedad no puede ser sentencia de muerte…

Se deben considerar lícitas las intervenciones sobre el embrión que no le


expongan a riesgos desproporcionados, que tengan como fin su curación o
supervivencia individual.5

La importancia humana y moral que tiene el aborto es que, por un lado, en


él se encuentra en juego la vida de millones de seres inocentes, y por otro, la ruina
de todos los derechos humanos que sustentan el derecho a la vida.

En el juicio ético, todo aborto directo, terapéutico o eugenésico es ilícito,


porque supone la muerte de un inocente. A veces es preciso decir que el fin bueno
(salvar a la madre) no justifica el acto malo (la muerte querida del bebe). Hay que
tener en cuenta que el conflicto de deberes procura la vida de los dos con los
medios adecuados y lícitos. El aborto terapéutico es un argumento de propaganda
aparentemente aceptable, por el cual los partidarios del aborto intentan justificarlo
en todos los casos.

Por desgracia, muchas personas, entre ellas médicos, quieren hacer el


aborto terapéutico el remedio de todos los riesgos del embarazo; el embarazo
fatiga, y tanto más cuanto menos aceptado es. El aborto terapéutico se convertirá
así en la solución de todos los problemas sociales y psicológicos, el remedio al
miedo del embarazo.

Pero el aborto nunca puede ser una solución médica, terapéutico quiere
decir que lleva a curar y esto no sería curar, sino matar o sea que el aborto
terapéutico, es un fracaso de la medicina.6

5
Ibid.
6
(Cfr) Jerone Lejeune y otros. Déjalos vivir.

6
3. DEL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA
Para que tengamos claros los juicios éticos y morales sobre este
terrible mal que está aquejando la conciencia de los hombres, veamos lo que dice
la Iglesia en el nuevo Catecismo de la Iglesia Católica.

El aborto
2270
La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el
momento de la concepción. Desde el primer momento de su existencia, el ser
humano debe ver reconocidos sus derechos de persona, entre los cuales está el
derecho inviolable de todo ser inocente a la vida (Cf. CDF, instr. "Donum vitae" 1,
1).

Antes de haberte formado yo en el seno materno, te conocía, y antes que nacieses te tenía consagrado (Jr 1,
5; Jb 10, 8-12; Sal 22, 10-11).
Y mis huesos no se te ocultaban, cuando era yo hecho en lo secreto, tejido en las honduras de la tierra (Sal
139,15).

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Desde el siglo primero, la Iglesia ha afirmado la malicia moral de todo aborto
provocado. Esta enseñanza no ha cambiado; permanece invariable. El aborto
directo, es decir, querido como un fin o como un medio, es gravemente contrario a
la ley moral.

No matarás el embrión mediante el aborto, no darás muerte al recién nacido.


(Didajé, 2, 2; Bernabé, ep. 19, 5; Epístola a Diogneto 5, 5; Tertuliano, apol. 9).

Dios, Señor de la vida, ha confiado a los hombres la excelsa misión de conservar


la vida, misión que deben cumplir de modo digno del hombre. Por consiguiente, se
ha de proteger la vida con el máximo cuidado desde la concepción; tanto el aborto
como el infanticidio son crímenes abominables (GS 51, 3).

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La cooperación formal a un aborto constituye una falta grave. La Iglesia sanciona
con pena canónica de excomunión este delito contra la vida humana. “Quien
procura el aborto, si éste se produce, incurre en excomunión latae sententiae” (
CIC can. 1398), es decir, “de modo que incurre ipso facto en ella quien comete el
delito” ( CIC can. 1314), en las condiciones previstas por el Derecho (Cf. CIC can.
1323-1324). Con esto la Iglesia no pretende restringir el ámbito de la misericordia;
lo que hace es manifestar la gravedad del crimen cometido, el daño irreparable
causado al inocente a quien se da muerte, a sus padres y a toda la sociedad.

2273

7
El derecho inalienable de todo individuo humano inocente a la vida constituye un
elemento constitutivo de la sociedad civil y de su legislación:
“Los derechos inalienables de la persona deben ser reconocidos y respetados por
parte de la sociedad civil y de la autoridad política. Estos derechos del hombre no
están subordinados ni a los individuos ni a los padres, y tampoco son una
concesión de la sociedad o del Estado: pertenecen a la naturaleza humana y son
inherentes a la persona en virtud del acto creador que la ha originado. Entre esos
derechos fundamentales es preciso recordar a este propósito el derecho de todo
ser humano a la vida y a la integridad física desde la concepción hasta la muerte
natural” (CDF, instr. "Donum vitae" 3).

“Cuando una ley positiva priva a una categoría de seres humanos de la protección
que el ordenamiento civil les debe, el Estado niega la igualdad de todos ante la
ley. Cuando el Estado no pone su poder al servicio de los derechos de todo
ciudadano, y particularmente de quien es más débil, se quebrantan los
fundamentos mismos del Estado de derecho... El respeto y la protección que se
han de garantizar, desde su misma concepción, a quien debe nacer, exige que la
ley prevea sanciones penales apropiadas para toda deliberada violación de sus
derechos”. (CDF, instr. "Donum vitae" 3).

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Puesto que debe ser tratado como una persona desde la concepción, el embrión
deberá ser defendido en su integridad, cuidado y atendido médicamente en la
medida de lo posible, como todo otro ser humano.
El diagnóstico prenatal es moralmente lícito, “si respeta la vida e integridad del
embrión y del feto humano, y si se orienta hacia su protección o hacia su
curación... Pero se opondrá gravemente a la ley moral cuando contempla la
posibilidad, en dependencia de sus resultados, de provocar un aborto: un
diagnóstico que atestigua la existencia de una malformación o de una enfermedad
hereditaria no debe equivaler a una sentencia de muerte” (CDF, instr. "Donum
vitae" 1, 2).

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Se deben considerar “lícitas las intervenciones sobre el embrión humano, siempre
que respeten la vida y la integridad del embrión, que no lo expongan a riesgos
desproporcionados, que tengan como fin su curación, la mejora de sus
condiciones de salud o su supervivencia individual” (CDF, instr. "Donum vitae" 1,
3).

“Es inmoral producir embriones humanos destinados a ser explotados como


“material biológico” disponible” (CDF, instr. "Donum vitae" 1, 5).

“Algunos intentos de intervenir en el patrimonio cromosómico y genético no son


terapéuticos, sino que miran a la producción de seres humanos seleccionados en
cuanto al sexo u otras cualidades prefijadas. Estas manipulaciones son contrarias

8
a la dignidad personal del ser humano, a su integridad y a su identidad” (CDF,
instr. "Donum vitae" 1, 6). 7

7
Catecismo de la Iglesia Católica. www.vatican.va

9
BIBLIOGRAFIA

Ferrer, Sarmiento, Adeva y Escós.

Vega Ponce, Alberto. Madre ¿Cuento Contigo? Editores de Revistas, S.A. de


C.V., México, 1990.

Gómez Pérez, Rafael. Problemas Morales de la Existencia Humana. Editorial


Magisterio Español. Decimocuarta edición. España, 1990

Catecismo de la Iglesia Católica. Asociación de Editores del Catecismo. España.

Jerone Lejeune y otros. Déjalos vivir. Editorial Rialp. Madrid España. 1995

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