AXIOLOGIA JURIDICA
Conforme avanza la historia y el Occidente se va industriaiizando, los gru-
pos duminantes latinoamericanos van evolucionando. Algunos intentan conser
var la vieja estructura heredada de los espaioles, pero otros comprenden que el
ce de las nuevas formas econdmicas y sociales que acompanan al proceso de
industrializacion, es avasallador, e intentan ponerse a tono con la historia. Mas,
por el hecho de constituir cl grupo privilegiado, su tendencia modernizante
choew con sus propios intereses, En efecto, la revolucién industrial supone una
dindmica capitalista fundada en ly democracia representativa. Y en América La-
tina el advenimiento de esta democracia pone en peligro Ios intereses de aquellos
mismios que pretenden la industrializacion, Porque esta dindmica
genera nuevas
jos grupos privilegiados, Por eso.
la dinica salida que tienen estos grupos es, de wn lado, recurrir a regimenes de
fuerzas sociales que lienden a desplazar a los vi
fuerza que, hablando de orden, paz y progreso, protejan sus intereses y, de otro
lado, apoyarse en el gran capital ex tranjero que, por intermedio de ellos, penetra
en nuestros paises y necesita una defensa eficiente de sus inversiones.
Se produce, asf, una dinémica de enfrentamiento entre los grupos privile-
giados que apoyan a los regimenes de fuerza y que representan al gran capital
extranjero y otras fuerzas sociales, como la pequetia burguesia, el proletariado
naciente. los campesinos marginados. y. sobre todo, los grupos mestizos que no.
logran ser aceptados politica y socialmente por los criollas que pugnan por rom-
per la rigida estructura social, econdmica y cultural impuesta por la clase domi-
nanic. Esta dindmica explica el fameso movimiento pendular entre la libertad y
la dictadura que curacteriza Ja historia de América Latina. Las nuevas fuerzas exi-
gen un nuevo orden. La democracia representativa con su garantia de los dere-
chos humanos permite la constitucion de este nuevo orden. Pero el grupo domi-
nante, apoyado por el capita! extranjero, no lo permite. E] capital extranjero
interviene, de una manera u otra. para hacer imposible la estabilizacién de los
regimenes demoeraticos. En esta pugna entre las fuerzas demoerdticas y lus fuer-
zas reaccionarias, surgen intentos de transaccion. Lideres politicos de impacto
carismatico como Irigoyen y Battle en las primeras décadas del siglo, y mas ade-
lamte Vargas y Peron, intentan dar salida a las enormes presiones de los grupos
mencionados. Pero, darles salida, conciliando intereses con Ios de los antiguos
grupos privilegindos. Estos intentos de conciliacion han sido Hamados “populis-
mo” por los politicdlogos latinoamericanos. Mas el populismo esta destinade al
fracaso, porque el surgimienio de nuevas fuerzas sociales tiene una dindmica in-
contenible, Y esta dindmica hace que las nuevas fuerzas tiendan a alcanzar el
poder definitivo. Llega siempre un momento en que los movimientos populistas
son detenidos, en que debido u las maniobras de los grupos tradicionales secun-
dados por las maniobras de los paises inversionistas, todo lo construido se de-
rumba y se recae en el viejo sistema. Lo que se habfa ganado en derechos hu-34 FRANCISCO MIRO QUESADA
manos, se vuelve a perder bajo la dictadura militar o la civil, apoyada por el me-
canismo castrense (10).
En este proceso mediante el cual el capital imperialista, respaldado por su
respectivo gobierno, interviene en la politica interna de las naciones latinoame-
ricanas, sale a relucir la ideologia del rol civilizador. Esta es la segunda etapa de
la dominacién occidental en nuestros paises, Occidente es la fuente de la civiliz
cién y del espiritu. Tiene una misi6n histOrica: civilizar a la humanidad, hacer
que todos los pueblos asciendan a la condicion de civilizados. Sdlo cuando se
cumpla esta meta serdn libres, sus ciudadanos podran realizarse plenamente co-
mo seres humanos, Se alcanzard, por fin, una sociedad en la que los derechos hu-
amanos estén garantizados por el Estado, y las naciones del mundo entero habran
aleanzado su plenitud.
Vemos, asi, que el Occidente se apoya en una ideologia liberal, demoera-
tica, que proclama el respeto por los derechos humanos, para justificar su pe-
netracion economica. Y, por eso, cuando sus intereses estén en juego, interfiere
con la accion de aquellos que pretenden aplicar de manera auténtica las propias
ideas proclamadas por los occidentales. El latinoamericano se encuentra, en estas
circunstancias, frustrado por la inautenticidad occidenia). En una primera etapa,
en nombre del cristianismo se le somete a la servidumbre: en una segunda etapa.
en nombre de la libertad, de os derechos humanos y del progreso. se le somete
a la dictadura. La razon es siempre la misma: el occidental Jn considera inferior.
Cuando quiso cristianizarlo lo considerd como un nif, como un ser intelectual-
mente débjl que debia ser guiado para poder salvarse. Naturalmente, una de las
recomendaciones de los salvadores es que debia obedecer a su patron ibérico.
Luego, cuando quiso civilizarlo, lo consideré como un hombre atrasado, semi-
salvaje, que habia que educar y para ello era menester que siguiera los dictados
de las potencias civilizadoras, Su libertad, su civilizacién, quedaban remitidas a
un Iejano futuro. En el presente debia trabajar como se le indicaba. no estaba
preparado por si mismo para tomar su destino én sus propias manos (11).
La filosofia de lo americano nos sevela, como consecuencia de estos and-
lisis, un hecho fundamental que permite comprender el sentido de nuestra his-
toria: el ser del latinoamericano consiste en la exigencia de ser reconocido. Por-
que su ser de hombre le fue segateado, porque fue considerada como un ser
inferior, sin la capacidad de hacer lo que los hombres superiores de Occidente
podian realizar, porque se le negé el derecho de disponer de su destino al igual
que los poderosos pueblos de allende Jos mares, porque se le consideré inculto
y barbaro, porque fue despreciado, el hombre.de Latinoamérica exige ser reco-
nocido en cuanto hombre. Exige que se le permita hacer lo que los demas pro-
claman gue debe hacerse, que se Je permits vivir con la misma libertad con que
viven aquellos que cantan loas a la libertad, reclama el respeto que, segun losAXIOLOGIA JURIDICA 35
grandes pensadores de Occidente, debe concederse a todos los seres humanos.
EL fundamento ltimo de nuestro ser, el principio sobre el cual se funda
nuestra manera de ver el mundo es, asi, lo que podria denominarse un humu-
nismo de reconocimiento. Y es sobre esta base como la filosofia latinoameri-
cana fundamenta su concepcién de los derechos humanos. Los derechos huma-
nos no son sino la consecuencia del reconocimiento del valor intangible de la
condicién humana (12).
La exigencia de reconocimiento permite comprender una serie de moda
lidades de Ja cultura latinoamericana. Explica por qué en la pintura y en Ia lite-
ratura se produce un vigoroso movimiento indigenista, por qué grandes cxpo-
nentes de la poesia, en el siglo XX, como Neruda y Vallejo, son socialistas, por
qué el latinoamericano tiene un “coniplejo de inferioridad” frente al europe
y al norteamericano. complejo que lo induce a superarse culturalmente para mos-
trar que él también tiene la misma capacidad creadora. Una de las manifestacio-
nes mas interesantes de esta condicidn, ¢s cl hecho de que la filosofia latino-
americana ha dedicado muchos esfuerzos a meditar sobre sus propius posibilida-
des y sobre el sentido que debe tener su creucién, Para algunos filésofos latino-
americanos, la mision de la filosofia latinoamericana es hacer aportes a la filoso-
fia universal ubordando los grandes lemas que interesan a la comunidad filosd-
fica de Occidente. Para otros, en cambio, debe orientarse a interpretar nuestra
realidad y a revelar nuestro ser, Debe ser una ftlosofia de lo americana. Cada uno
de los grupos aspira a realizar una filosofia auténtiea, que no sea mera copia del
pensamiento importado, sino que sea una contribucion creadora, que merezca
realmente el nombre de filosofia
La filosofia occidental, dicen los del segundo grupo, nace para responder a
problemas de su circunstancia histérica, no para especular sebre temas plantea-
dos en otras circunstancias, por otros hombres. Para que la filosofia pueda ser
auténtica, debe surgir de los problemas de su propia comunided, De alli, la ne-
cesidad de erear una filosofia de lo americano. Pero, sea como sea, ambos grupos
se plantean la necesidad de hacer una filosofia auténtica, que no sea una mera
copia de la filosofia de moda en Occidente, Y este afin de autenticidad no hace
sino revelar, en forma dramética, el afin de ser reconocido por aquellos mis-
mos que, primero, nos sojuzgaron y, luego, dominindonos econémica y politi-
camente, nos ignoraron como creadores de cultura.
La filosufia de la liberucién y del Tercer Mundo
Después de una enconada polémica entre ambos grupos filoséficos, se supera el
enfrentamiento y cada uno reconoce la importancia de la posicidn contraria (13).
La filosofia de lo americuno se sigue desarrollando y llega a constituir un gran
movimiento que, por inevitable dindmica interna, desemboca en wna filoso-