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Título: “Un paso entre la vida y la muerte”

1º Samuel 20. 3
 La muerte. Está establecido para todos los hombres, que mueran una sola vez y
después el juicio… Hebreos 9. 27 (todos mueren…)
 Cada vez que hay un nacimiento, hay un anuncio de una nueva muerte, un hombre que
nace es un hombre sentenciado a morir. (solo que el hombre sabe cuando nació, mas no
sabe cuando a de morir).
 Lo cierto es que la vida del ser humano es algo de lo más pasajero. Salmo 103. 15 y 16,
el hombre como la hierba son sus días, florece como la flor del campo, que pasó el
viento por ella y pereció, y su lugar no la conocerá más…
 Entre las personas existen diversas formas de asumir la idea de la muerte.
o Algunas personas le temen demasiado, pero pese a esto no se preparan.
o Otras personas piensan que el tener que morir algún día, le quita importancia
a la vida.
o Otros prefieren ignorar la idea de tener que morir algún día, para así no
complicarse con tantas cosas.
o Otros dicen que la muerte es el fin de todo para cada cual, y por eso no les
interesa la idea de prepararse para ese día.
o Hay quienes piensan que la muerte es el descanso a las penas de la vida; (es
por eso que muchos pretenden acelerarla, con el suicidio).

 Hay algo importante que el hombre debe saber, y es que la vida está en las manos de
Dios. Tanto el vivir del hombre, como el morir, Deuteronomio 32. 39 Yo hago morir
y yo hago vivir, y no hay quien pueda librar de mi mano.

La vida de cada ser humano se encuentra a solo un paso de la muerte…


 Eclesiastés 8. 8 dice que no hay hombre que tenga potestad sobre el espíritu para
retener el espíritu, ni potestad sobre el día de la muerte; y no valen armas en tal
guerra, ni la impiedad librará al que la posee…

 Una persona puede tener la vida más exitosa y brillante, llena de proyectos, metas,
ideales, pero cuando llega el momento de su muerte se convierte en el ser más
impotente, porque no hay armas en tal guerra, porque el hombre no tiene potestad
sobre ese día, puesto que el derecho de determinar hasta cuando vive el hombre, es un
derecho que le pertenece a Dios…

 Lucas 12. 15, el rico insensato que toda su vida la utilizó almacenando riquezas, pero
cuando consideró que ya tenía lo suficiente para vivir sin afanes y pensó que no tenía
ninguna otra necesidad, Dios dispuso para él la muerte repentina y además de no saber
ni siquiera de quien sería su fortuna, también perdió su alma. (Dios lo llamó necio), (de
que le aprovecha al hombre si gana el mundo pero pierde su alma, o que
recompensa…).
 La muerte es el fin de la vida física del hombre, mas no es el fin del alma del hombre,
pues cada persona que muere, inmediatamente queda expuesta o a la vida eterna o a la
condenación eterna, Daniel 12. 2 y muchos de los que duermen en el polvo de la
tierra serán levantados, unos para vida eterna y otros para vergüenza y confusión
perpetua.

 El Señor Jesucristo afirmó esto claramente cuando en Juan 5. 28 y 29 dice que viene la
hora cuando los que están en los sepulcros oirán su voz; y los que hicieron lo bueno
saldrán a resurrección de vida, y los que hicieron lo malo a resurrección de
condenación.

 Cuando una persona muere sin prepararse en su vida con Dios, muere físicamente y
también espiritualmente. Es por eso que Satanás quiere que las personas mueran sin
arrepentimiento, y todo el tiempo ha tenido la muerte como una de las armas para
hacer que muchas personas se pierdan eternamente…

 Por esta razón el Señor Jesucristo murió en la cruz, para tomar el lugar del hombre que
estaba condenado a morir física y espiritualmente, y por eso dice: Oseas 13. 14 Yo los
libraré de la muerte, oh muerte yo seré tu muerte, o sepulcro yo seré tu destrucción.

 Ahora el hombre tiene la oportunidad de prepararse para el momento de la muerte, a


fin de obtener la vida eterna con el Señor… Juan 5. 24 el que oye mi palabra y cree al
que me envió, tiene vida eterna, y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte
a vida…

 1ª Timoteo 1. 10 Cristo quitó la muerte y sacó a la luz la vida y la inmortalidad por


medio del evangelio…

 A donde quiera que el hombre anda, a donde quiera que se dirige, se encuentra a un
paso entre la vida y la muerte…

Pero el que anda en Cristo puede decir: aunque ande en valle de sombra de muerte no
temeré mal alguno porque tú estarás conmigo…

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