5-Fundamente por escrito la tendencia evolutiva y señale procesos de adaptación,

especialización, convergencia, divergencia, paralelismo, etc. en las extremidades de los

diferentes grupos de vertebrados estudiados.

Una de las tendencias evolutivas en cuanto a los animales terrestres la reducción de huesos
distales en las extremidades, es decir del número de falanges y dedos, llegando a un
número básico de cinco y también la conservación de tres huesos proximales
(húmero-radio-ulna y fémur-tibia-fíbula). Además los vertebrados estudiados presentan
diversas modificaciones:
Adaptación: en animales corredores hay una tendencia a aumentar la longitud de la pata
para, a su vez, aumentar la longitud de la zancada, para eso se alargaron los elementos
distales de la pata, se volvieron más robustos los dedos centrales y se disminuyeron los
dedos periféricos. Por ejemplo, los caballos y los jabalíes son dos especies digitígradas, los
primeros descargan todo su peso sobre un único dedo y los segundos sobre dos, ambos
cubiertos por pezuñas.
Especialización: los anuros poseen modificaciones para el salto, los huesos del
zeugopodio están unidos en una radioulna y la tibiofibula está muy desarrollada. Además
las falanges también se desarrollan para proyectar membranas interdigitales.
Otro ejemplo de especialización es el caso del Aye-aye que posee falanges en las
extremidades anteriores muy desarrolladas y delgadas para atrapar sus presas dentro de
los árboles.
Convergencia: las patas de los caballos (Perisodáctilos) y los ciervos (Artiodáctilos) son
estructuras similares que evolucionaron en diferentes linajes evolutivos , pero ambos son
ungulados, es decir que ambos grupos se apoyan sobre las uñas para correr. Ambos
grupos poseen una reducción de dedos y una elongación de sus extremidades para poder
correr más rápido.
Los cetáceos y las tortugas marinas poseen aletas para poder nadar, en el caso de los
primeros estos poseen falanges supernumerarias en sus cinco dedos y los huesos húmero,
radio y ulna son bastante compactos y cortos, mientras que las tortugas poseen el número
básico de falanges alargadas y los otros tres huesos son menos compactos y más
alargados. Por esto se puede inferir que estas estructuras se desarrollaron
independientemente, no a partir de un ancestro en común.
Divergencia: los cetáceos han desarrollado extremidades anteriores diferenciadas de
los demás grupos de vertebrados terrestres, no tienen separaciones digitales y la cintura
pélvica con las extremidades posteriores se han atrofiado y reducido. Anuros y Urodelos a
pesar de ser ambos anfibios divergen notablemente en la composición de sus
extremidades, los primeros poseen patas caminadoras y los segundos poseen patas
especializadas para el salto. Estas estructuras mencionadas se desarrollaron a partir de una
característica basal en común, que se fueron modificando por presiones ambientales
diferentes.
Paralelismo: tanto aves como murciélagos poseen alas para el vuelo activo, los huesos
de las extremidades anteriores extienden su longitud, en el caso de los murciélagos son las
falanges las que comprenden las alas, sus dedos están conectados por el patagio y en las
aves son los huesos húmero, radio y ulna los encargados de realizar el aleteo, mediante la
inserción de músculos y el desarrollo de plumas.