Razón: Los enfoques esencialistas de la educación sexual se basan en la idea de que
la sexualidad humana es un hecho natural e inmutable que puede ser categorizado en
términos binarios de género, y que debe ser enseñado desde una perspectiva moralista y heteronormativa. Estos enfoques ignoran la diversidad sexual y de género, así como la realidad de que la sexualidad humana es compleja y fluida, y puede cambiar y evolucionar a lo largo de la vida. Por esta razón, es importante superar los enfoques esencialistas de la educación sexual a la hora de implementar la Educación Sexual Integral (ESI). La ESI busca ofrecer una comprensión amplia y compleja de la sexualidad humana, que reconozca la diversidad y complejidad de la misma, y que esté libre de prejuicios y estereotipos. Además, los enfoques esencialistas pueden perpetuar la discriminación y la exclusión de grupos marginados, como las personas LGBT+, y pueden impedir que estas personas reciban la información y la atención que necesitan para tomar decisiones saludables y seguras en cuanto a su sexualidad. Al superar los enfoques esencialistas de la educación sexual, la ESI puede contribuir a promover la igualdad de género, la inclusión y la no discriminación, y a fomentar el desarrollo de relaciones sexuales y afectivas saludables y respetuosas.