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Il. EL FILOSOFAR DE ORTEGA ‘Aunque son muchos y muy diversos los aspectos y matices que caben la obra de Ortega, ivamente en cinco apartados, concluyendo con una presenta- cién general y panorémica d é Estos cinco apartados son los sigui B)EL Conjunto de de circunsi po ©) El método Jericd, que es como denominé a su forma de trabajar. D) Su idea de filosoffa, E) El concepto de “vida” (y el racic no), que resulta imprescin- dible en cualquier exposicién de su pensamiento 9 Periodos de la evolucién del pensamiento de Ortega: objetivismo (1902-1914), perspectivismo (1914-1923) y el raciovitalismo (desde 1923 en adelante). Aunque es posible destacar algunas rupturas entre los ‘momentos de su obra, se acepta generalmente que existe una ci tinuidad a lo largo de todo su pensamiento filos6fico y que cada cambio de etapa tan s6lo es una maduracién de la situacién anterior. No obstante, bastantes criticos creen que a Ortega le falt6 una siste- ‘matizaci6n definitiva de su pensamiento. En un primer momento, qui obra més importante de este periodo es Meditaciones del Quijote ( ‘Los problemas de esta etapa son Espatia y su desfase soci técnico, etc., en relaciéi ORTEGA Y GASSET Medtacén dee tenis {Qué entender por “Europa”, en el ideario orteguiano? Europa es progreso y modernidad, tanto en la vida civil, como en la politica, uni- , 1a ecuacién para Ortega resulta (conocimiento veraz)”. la “objetividad” y la Sélo asi, afirma, seria posible lograr el mismo progreso moral y ‘material al que han Hlegado el resto de las més importantes naciones ccuropeas, a las que su actitud cientifica frente a la realidad es la que les, ha reportado mayor conocimiento y una ciencia y técnica superiores. Este periodo puede sintetizarse con las siguientes palabras de Ortega: “la verdad no tiene otro camino que la ciencia: la fe sélo lleva a creer. Benditas nos son las buenas intenciones; pero preferimos los buenos ét ‘Sobre una apologia de la inexactitud”; OC, I, p. 122) 2) Perspectivismo y circunstancialidad. En una segunda etapa, lleva a cabo Ortega un programa filoséfico propio cuyo eje central es la idea de cireunstancia (lo circunstancial, accidental y pasajero de lo humano). Enuncia asf —precisamente en Meditaciones del Quijote— wna de las tesis fundamentales de toda su filosofia posterior (incluida la Meditacién de la técnica): “Yo soy yo y mi vo a ella no me salvo yo” (Meditaciones del sunstancia” en Ortega? Para nuestro autor, este ‘érmino tiene tres significados distintos, aunque no contrarios sino com- plementarios, a saber: 1) paisaje concreto de cada individuo (la generacién de cada uno), esto es, el lugar y la situaci6n hist6rica en que estamos condena- dos a realizar nuestra b) lo que nos es dado ¢ impuesto en nuestra vidi des) que se nos presentan: aquf es estrictamente ral”, que es el sentido mas maduro y mejor explicado por nuestro autor, y que es el que encontramos en Meditacién de la técni De este modo, cuando decimos que la de Ortega es una filosofia ccunstancial, nos referimos a que en ella se trata de que la verdadera cap- 1-1 fescer do Onegs erspectiva vital en la que nos hallamos situados, desde la “circunstan- cia’ en que estamos inmersos. La verdad, lo real, el universo, la vida se guiebran en facetas innumerables, cada una de las cuales da hacia un jeto: lo que cada sujeto capta es un aspecto real del mundo, la de cada uno de nosotros) a tolerancia reciproca. ¢s algo tan sencillo como el punto de vista de cada cual. Ortega lo explica de una manera elemental, por ejemplo: las mon- tafias de Gredos, que objetivamente siempre son las mismas y solo son ellas mismas, son, sin embargo, tante de Segovia que por otro de Madrid. Son las mismas, pero son vis- tas diferentemente. Eso es el “perspectivismo”, que no es otra cosa que un cierto “rel llegar a caer en el absurdo del “todo vale”, porqui las cosas”, hay das conductas. los puntos de vista, de enfoque, en la comprensién de las cosas. Convendrfa sefialar que Ortega adopta esta postura “perspectivista” porque lo que quiere es desprenderse del “objetivismo” de su pensamien- to anterior, en el cual proponta que Ia verdad estaba en los objetos, tal y ‘como la ciencia los mostraba. Esa postura es ahora superada en favor de un enfoque polifacético, con lo que se enriquece el conocimiento. 3) Raciovitalismo El paso siguiente al “perspectivismo” es el “raciovitalismo”, que ya es una declaracién confesa y madura de su posicionamiento filos6fico: inmer- so en la racionalidad, por supuesto (porque sin raz6n no hay vida humana), Ortega quiere atin “mas racionalidad”, pero sefialando que la razén pura crece en su capacidad si a ella se le aftaden En esta tervera y idea de principio en Leibniz (1958), entre otras. El principal propésito de Ortega en este momento es conciliar dos ideas, sin renunciar a ninguna de ellas: (a) la racionalidad, tra ariego (Todo se puede al en Occidente desde el pensami ‘ar mediante ideas y conceptos), aun- ORTEGA Y GASSET Medtacén de a tonics (b)la vida, entendida desde el siglo XIX como un “impulso” impara- ble para la existencia (que en términos tradicionales es Ia fuerza del sentir; los impulsos). "Sv los6ficas tradicionales tas de Ja gran mayorfa de las corrientes filo- soficas desde mediados del siglo XIX, en el que el complejo concepto “vida” ha cobrado protagonismo). Por eso, Ortega, en esta tercera fase de su pensamiento, se inicia apo- yaindose en Nietzsche (1844-1900), aunque menos corrosivo, con una critica al racionalismo, iniciado por Séerates y seguido por muy impor- tantes “disefpulos” que abarcan el pensamiento occidental desde bien, en el drea del conocimiento, la vida y los instintos —esenciales ara la vida y para vivir— tenfan que someterse a los dictados de la raz6n, En este campo, la opiniGn de Ortega es diferente: lo racional y lo irra- ional no se oponen, sino que lindan; no son cosas antagénica complementarias; para él, superando incluso las més atrevidas logistas, 1a razn —Ia racionalidad— resulta ser s6lo una forma y fun- cién de la vida Precisamente, el tema de nuestro tiempo consiste, dice Ortega, en someter la raz6n a la vitalidad, localizarla dentro de lo biol6gico, supeditada a lo espontiineo... La razn pura, mantiene, tiene que ceder, de alguna al protagonismo de la razén vital; o bien combinar la 's impulsos vitales) con la necesaria exigencia de “racio- lista declarado (no pretende reducit logia o a los instintos), y tampoco quiere desvalorizar el 1B fosoter ce Oreoa De ahf el nombre de raciovitalismo, Es decir, no imponer a la realidad las estructuras de la razén, cayen- do asf en el idealismo, sino destacar la fuerza creativa de la vida en el impulso de la razén, a,\a hora de establecer los fenémenos expli de la reatidad humana. vitalismo (puro), sino rac valor de la raz6n, per ‘Ontega también cree superar la modernidad histérica (La Iustracién), donde han imperado la raz6n pura y el idealismo. El “raciovitalismo”, por lo tanto, puede formularse ast ve el mundo y el mundo es lo visto por mt” (Qué es filosofi (0 el sujeto, como creia jor se afiade Ia de la segunda etapa: “yo soy a ella no me salvo yo”, tenemos BD Las condiciones de posibilidad del pensamiento Ortega opina que para comprender a cualquier pensador o corriente filosofica hay que comenzar situéndolo en su “circunstancia filos6 es decir, en el conjunto de circunstancias 0 condiciones que pueden blecerse para comprender cualquier situacién, y que él mismo las cali ca como las “condiciones de posibilidad del pensamiento”, y kas con- structura en que el pensamiento estudiado se basa; sus la evolucién habida: lo que Ortega llama el “subsuelo @)Mcontra quien se proce tiene un “adversa 108 este mismo proceder a la hora de examinar el pensa- (0 realizarse la siguiente pregunta: ;Cudles son idad en el pensamiento de Ortega? miento orteguiano, es ORTEGA Y GASSET- Meatactn de a tcrica 1) El subsuelo (herencias remotas). Segin Ortega, el subsuelo esté cons- jido por capas profundas y originadas en lo antiguo del pensar colec- ma del que se nutre el pensamiento occidental 2) El suelo (herencias inmediatas). El suelo es de constituci6n recien- nes fundamentales de las que EL suelo en Ortega esté compuesto disolucién de! yeokant ‘mo, principalmente. Y, en concreto, de entre los pensadores que le influyen cabe destacar a Nietzsche y a Dilthey, y de las corrientes filosoficas a la fenomenologia. De Nietzsche aprende Ortega dos cosas: que todo acto vital es una categorias de la vida y la tesis del embargo, Ortega reformulard esta raleza es a las cosa ia al hombre (Ia historia es la natu- mbre, del ser humano). n con la fenomenologia se puede decir que es a partir de desde donde desarrolla su m modo de expresarse ala manera de me 3) Eladversario. El adversario, dice Ortega, existe ala fuerza puesto que todo pensar es un pensar en contra de alguien; es decir, nuestros pen- ‘0s se plasman en oposicién a otro pensar anterior que hay a la 'y cuyo pensamiento nos parece erréneo, indebido, y que reclama ser superado, {Quién es el adversario de Ortega? Sin duda, es el fildsofo aleman Martin Heidegger (1889-1976). Efectivamente, la figura de Heidegger se levanta ante Ortega como un filésofo fuera de serie, pero también dice de sus escritos (especial- mente de Ser y tiempo), que, en pleno siglo XX, repite con excesiva frecuencia que la filosoffa es “la pregunta por el Ser”. iglo XX es por la vida en tanto que rea- 1-1 ficeotar co Ontegs Cuadro resumen: Las condiciones Ideas principales | Propuestas de Ortega del pensar El sery larazén pura | Sin embargo, la razin Subsuelo que nacen con Sécrates | sélo es una funcion de Plats), Ja vida. 1. Nietwsche: EI J Bex auc hombre como animal | 4° Sect fundamen ‘mejora. an 2. El método Jers ‘una personal “orteguiana det método fenomenolégico 1) El ser es tiempo. Considera al hombre en su biograti esencialmente bisqueda racionalvtalismo, 2) El mundo es, sobre ado, resistencia al “vivir” (en general, téenica al problema det_ | conjunto de Adversario | Heidegger | 4. La tenia es causa ‘europeo, por eso hay etornar el sentido de la téenica asus orfgenes téenicos, esto es, ala iega, que se 55. Condena al hombre fen la “época de la técnica” a Ia angustia en ou propia meaividal. hhombre através de la onic 4) La téenica es ‘consubsian hombre y le teva a desarroilar sus mejores posibilidades humanas. ORTEGA Y GASSET: Mectacin 3 atone que la constituye es la subjetividad (y Ja racionalidad pura que la acompaiia y como ejemplo: Descartes), de modo que la filosofia modema se presenta como idealista y racionalista, Pero también es verdad que toda época tiene su fin, que es cuando queda susti y cada nueva época tiene otro destino y otra mi (que realizar (que tam Ortega cree que el objetivo de la modernidad ya ha Negad y comprender el mundo (de explicarlo medi ioderno y muy del siglo XX. iempos” significa, por un lado, superar defini- tivamente el realismo, especialmente en su vertente delist; pero adem, apostar por una transforma lismo. En apretadasintesis, cuenta Ortega en qué seca esa supeacin del para los antiguos, para los modemnos, desde el signi idad” (se conoce de las cosas lo que el pens ir” —por jidad con uno mismo y con las cosas: el raciovitalismo, EI método Jericé El nombre esté sacado de una conocida imagen btblica: ciudad de Jeric6, que fue un continuo dar vueltas en tomo hasta que sus habitantes fueron derrotados. Esta historia biblica se convier- te en una metdfora del plan propuesto por Ortega, que consiste en “dar lrededor de Ios significados de un hecho o situacién, tratando de alcanzar y desvelar su naturaleza (y asf él trabaja en sus escritos). Lo que se averigua o desvela de este modo es el contenido histérico y vital del asunto indagado desde sus origenes hasta la diltima de sus manifestaciones. Ortega utiliz6 este proceder tanto sobre temas secundarios como sobre cues ales en filosofta: sobre la caza 0 el saludo; sobre personajes como Goethe o Veldzquez; sobre la cultura, la vida, y, eviden- temente, sobre la técnica ibargo, el modo de expresar el contenido de sus indagaciones lamar Ortega “meditaci - Una “meditaci jiado por el método Jericé, que sigue la trayectoria del movi- 11-1 fesoar do Onega D Idea de filosofia siste en el conocimiento y estudio radi- Conocimiento que se sustenta sobre las siguientes caracteristicas: 1) Ia radicalidad, porque dice que la raz6n de la filosofia es la rebel- dfa contra la realidad tal y como de modo natural se nos presenta yy tal y como Ia acepta nuestra conciencia ingenua; la filosofia, por ’imos y primeros, y se esfuerza 0. 1omia, dado que no puede tomar prestadas las verdades tadas por otros saberes: la filosofia es una ciencia sin ersalismo, pues, a diferencia de la especialidad de la cien- cia, a la filosofia le interesa el Universo entero y en general; esto ; de ant que la sea “un habla que nos desvele el ser de las cosas” Pero esta definicién/aproximacién de/a la filosofia de Ortega no la da 41 de una vez y por todas, desde el comienzo de sus escritos, sino que la va madurando a I cidn en su pensamiento (vista anteriormente; pig. 13.) BF La vida (y el raciovitalismo) ‘Cuando Ortega habla de vida lo hace desde una perspectiva no slo dis- tinta, incluso antagénica, a lo que pueda entender un bidlogo, un antrop6- también a vida, segtin a” no es lo que “naturaleza huma- nna”, que todo eso es el vivir animal. No, por supuesto que no, porque eso es una vida bioldgica, simplemente animal y evolutiva, sino que el “vivir ” t6rico, social y personal). Que la vida sea “biogréfica e individual” significa que se trata, no tanto de la vida en general 0 en abstract, sino de la vida de cada cual y,ademds, que cada cual la vea bajo su perspectiva y circunstancia. Esto ¢s, precisamente, lo que le confiere a esa vida, profundamente humana y una pretensién: la pretensién de ser st0 0 Io otf. ¥y que hablar del individuo (de cada individuo), sino cosa si tanto individual como social, es hallarnos ar la pretensién de lo que queremos ia (hist6rica y personal). Es cierto que sino que nos encontramos, sin muestra cca) en la que tenemos que Vi ncia previa, sumergidos en una circ tar pres 5. OCIO ¥ NEGOCI Y ESTILOS DE SER H [Las lecciones V, VI y VIT respon« este campo temitico} Que la singularidad técnica del ser humano le otorga la ventaja del ocio es alg 6lo el hombre puede ser “ entendido como libre de oci s perentorias, pero como un “no tener nada que hacer”, que es como habitualmente solemos entenderlo (ver leccién V). El término “ocio” aqué * aquf no quiere decir inactividad, sino todo lo con- trario: es quedar liberado de ciertas necesidades para estar disponible para otras, como por ejemplo pensar, crear, invent. Con el ocio proporcionado por la técnica (gracias al ahorro del esfuerzo y la consecuente aparicién de un tiempo libre), el hombre se dedica a pensar; tanto a pensar en nuevos planes de futuro (tener pers- pectivas) como en pensarse a s{ mismo (su proyecto de vida personal y I Elflosotar de Ontege Y ese ocio se consigue gracias al esfuerzo de ocuparse en inve! ofrece tiempo libre y disponibl po libre y disponible para seguir pensando, inventando y maquinando, ‘Veamos el proceso que sigue Ortega: el ser humano es un ser indigen- que consiste en “no- lo que tiene que ser, un alguien que es To que no es atin; es, por tanto y por lo pronto, un proyecto de vida o pro- grama de ser. La al seres se por llegar a ser lo que quiere ser, por realizarse a sf mismo. {De dénde obtiene 1a materia prima para realizarse, para llegar a ser? jente del tinico elemento real que tic nto, afanarse, esforzar- El mundo es un conjunto de px des y dificultades), que son 10 puede el ser hur tades y aprovech Ortega que “la vida ngenieril” En esta situaci6n de tener q la, “prende el hecho de la técnica”, Asf pues, queda claro que el hombre, quiera on sf mismo, pues la vida le es dada, pero hacer”. Asf la vida es un problema que el que cada cual la suya. Resolvers es lo mismo, autofabricarse El ser humano es el técnico de su propia vida. En este sentido y co a humana es produccién y el hombre una especie de técnico que s sf mismo (s6lo después de esta mente humanas: el pensamiento, la Contemplado ef hombre desde esta perspectiva, ede que desconcertante—co fe hay hombre sin téc nica, se hace ahora completamente comprensible (y acertada): es un error sostener 0s de su tiempo parecen defender~ que el ser humano es un animal casualmente dotado con talento téen elo contrario: el hombre tiene una tarea muy distinta de tarea extranatural (hacerse a sf mismo, autoprodu tesis inicial - mundo. Por ORTEGA Y GASSET Metacion de fa tenes Hay, sin embargo, un invento humano que cae fuera de la técnica (un ia): el proyecto de vida; o como Ortega dice: se convierten en los in pre-téc- res cultura les) es emo y cuando se desarro ademés, el invento invariable en grupo humano que no haya desarrollado formas culturales y 16 no son otra cosa que el modo que tienen de responder a las di vivir en la naturaleza; los inventos varfan porque dependen de los dist estilos de vida con que e! hombre puede desarrollar ese primer impul Ortega aporta claridad sobre la cuestién sefialand 8 estilos de ser hombre 0 programas vitales en los que ser humano ha concretado su ser: el “bodhisatva” hind, Grecia aristocrética (siglo VI), el republicano-de Roma y el ae Epoca del Imperio, el asceta medieval, go renacentista (siglo XvD.el Qbrer, el gentleman, ete, Cada v\>Sestos estilos 0 modos de ser es un estilo 0 modo de presionar el mundo. |A) El primer modelo que se acomete es el bodhisatva (budista; lec cién VI). Para el bodhisatva existit consiste en fundirse en un Todo y jas de lo que Ortega aspit fa a vivir como no viviente, a anular el mundo y la 1s culturales, el budista opta por crear téenicas que las reformas en el cuerpo y la mente del etc) y no en forzar la naturaleza ca occidental). Por eso, mientras jon y no el benefi- itomovil. ue el i de inventos materiales, el europeo inventa B) El segundo modelo que se presenta es el del gentleman (lecciones ). ,Qué es un gentleman’ Es e! heredero de la aristocracia ingle- sa del siglo XVI, muy diferente del resto de aristécratas de otros paises (que conforman una clase cerrada y con ocupaciones tipicas: guerra, as expen pope devi ~ wn seguridad si se refiere a cade os one rnd ien como on ml ep 1-1 osoar a8 Onaga |. diplomacia, etc.); el gentleman inglés es un tipo de hombre abierto, luchador y moderno. Aparece como tal en el XIX, como prototipo de exis- tencia que vale para todo el mundo: tanto el burgués como el obrero pue- den ser gentleman. ¥ lo pueden ser porque este modo de ser hombre no implica aristocraticismo: no heredan grandes medios de vida, sino que tiene que luchar para conquistarlos; es més, es gentleman en tanto que luchador en la vida. Por esto, el gentilhomme francés o el Junker alemén son su opuesto (de la nobleza francesa y alemana, respectivamente). Ya se habré entendido que el gentleman no es una persona, sino un “sistema de normas vitales”, de modo que quien se acoge a este sistema de reglas se torna gentleman. Ser gentleman, por tanto, mas que una con- quiere, un comportamiento: el que se toma en i su programa de vida, jerto y dispone de un poco de cuanto las necesidades biisicas las ha tiempo para ello. En fin, que la técnica es funcién del variable programa humano, de los distintos estilos de vida que en cada época y lugar se dan. En lo tinico que coinciden todos ellos, aun en distinta intensidad, es el cardcter ex natural del ser humano: tanto la vida del bodhisatva (estatica y m va) como la del europeo (dinémica), son modos de vida extranaturales. Extranaturalidad que signif realizarse en Ia naturaleza, de modo que cada uno de los estilos de vida suponen y evidencian una contradiccién con esa misma naturaleza 6. LAS COSAS Y SU SER: PRE-COSA, COSA, INSTRUMENTO, ANIMAL, SER HUMANO. {La leeciin VII responde a este campo temstico] Ortega se nos presenta aqui en una de sus vertientes mas radicates: 1nos propone analizar los “supuestos” de la técnica, esto es, “lo mds esen- cial en la esencia de la técnica” (y que,en su opinién, suelen pasar desa percibidos). Para el 9, retoma el clisico hilo conductor met ‘0 para preguntar- ORTEGA Y GASSET Medtacin de etnies son lo esencial de una cosa, que en este caso es la pregunta por la t6e- fica, esa cosa sin la cual el hombre no es. ara descubrir qué es una cosa lo que hacemos “des-cubrirla” (des~ ‘yelarla, quitarle sus velos); 0 bien, “des-hacerla”: dejar de lado tal como se nos uparece en su funcionamiento (su forma) e ir a sus ingredientes, aislindolos y definiéndolos. Al hacer esta operacién (enumerar sus ingredientes, sus supuestos, todo lo que ella implica si ha de ser tal cosa), m1 de una cosa se nos convierte en el conjunto de sus ingre- dientes, que son a los que Ortega llama la “pre-cosa’”. "es el ser esencial de la cosa (sus componen- ue esti, pero no se ve) ¥ por tanto lo ‘queremos captar la esencia de algo. ‘a que se vaya a obtener “el algo” (por ejemplo, siel agua es un compuesto de hidrégeno y oxigeno,en ‘determinadas proporciones, no significa que teniendo hidrégeno uw oxige- no, uno de sus componentes, por separado, que vayamos a obtener agua); cs decir, una cosa es la “pre-cosa” y otra (muy distinta) es la “cosa” método que Ortega usa ahora es un método genealdgico que con- siste en buscar el origen vital de algo (de un hecho, de un artefacto, de ‘una persona, ete.). Al buscar la “pre-cosa”, lo que pretende Ortega es que <ésta nos muestre “la cosa en su start nascendi””, en su nacimiento y ori- ‘gen, precisamente porque sélo se conoce bien lo que, en unto u otro sen- 'se ve nacer. Este método no acepta nada como ya hecho, sino que todo lo remite a ver e6mo se hace algo. Por eso, para saber qué cosa es la técnica hay que ir a la pre-técnica (es decir, la pre-cosa de la cosa téc~ : por tanto, para comprenderla bien no hay que tomarla como el hecho concluido que ya vemos, como lo que nos es dado sin més, cor lo que ya esté ahi ante nosotros y empezar a definirla, sino que se debe hacer una tarea arqueol6gica o genealdgica, averiguando de dénde viene la técnica, cémo ha nacido y se ha consolidado, qué relacién tiene con el ferpreta en su circunstancia do geneal6gico 1) No basta poder hacer algo para que Io hagamos, ni basta que el hombre posea inteligencia técnica para que la técnica exista. La intell- ica es una capacidad, pero la técnica es el ejerci ide esa capacidad, que muy bien podia quedar sin desarrollar. Por lo tanto, aparece una clara distincién entre “capacidad técnica” bre y “ejercicio real” de esa capacidad; 0 lo que es lo mismo: luce a Ortega a dos conclusiones: 1 fosotar de Onaga Esto nos lleva a la segunda conclusién: humanos: ser humano decir, animal y ser humano no hay que sino por su capacidad imaginativa que es capaz de crear in mientras que el animal no. Y esa imaginacién le sirve al ser humano tanto para inventar aparatos técnicos como para idear e imaginar su proyecto de vi cubrir es que ‘una imagin: creadora, puede con: tuirse en capacidad técnica. 7. LOS ESTADIOS DE LA TECNICA: TECNICA DEL AZAR, ‘TECNICA DEL ARTESANO Y TECNICA DEL'TECNICO,, {Las lecciones IX y X responden a este campo temitico]. A la hora de organizar las etapas de la evolucién de la técnica, opina Ortega, hay que rechazar criterios superficiales, como el de la ap: Ejemplos de ello son la pélvora, la imprenta, la brifjula y el compas ‘as antiguas que no tuvieron su utilidad hasta mediados del siglo Cuando aparecieron no habfa conciencia de su valor y poder y hubo que esperar hasta el siglo XV para “ser entendidos”. A la hora de establecer un criterio para referirs nica, Ortega aboga por cambiar el criterio de ORTEGA Y GASSET Metactn ea tonic 1a”). Por eso, no hay que referirse a un descubri- ino al grado confianza general de lo que la mente icar (ademés de ejecutar) principio se pueden establecer tres estadios en la evo- 2. La técnica del artesano. 3. La técnica del ingeniero (“técnico”, dice Ortega). 1. La téenica del azar Corresponde a los pueblos primitivos de todos los tiempos, cuando el ser humano atin no tiene conciencia del poder de a mente para los des- cubrimientos, que son producto del azar 0 de la casualidad, lo: 1) 10s logros técnicos (los aparatos) son muy escasos; ») ademas no hay gran diferencia con lo que realiza la naturaleza y son considerados como “casi” naturales; ©) no hay especialistas, aunque sf que se produce una “divisién social del trabajo” (trabajos de hombres y trabajos de mujeres); 4) no hay conciencia de que se puede “inventar” (es decir, no hay conciencia de un problema, de su planteamiento y de c6mo bus- car las maneras de solucionarlo); son descubrimientos del azar, de casualidad; descubrimientos tienen, por tanto, una consideracién mégica ‘El hombre no se sabe inventor de sus propios inventos”. 2. La técnica del artesano Corresponde a las culturas histéricas desde el V milenio a. C hasta el siglo XVII. ‘Sus caracterfsticas son: 1a) Las técnicas han aumentado enormemente y empiezan a ser impor- tantes, aunque no hasta el extremo de que la pérdida de algin cono- cimiento técnico signifique un retroceso a un estadio primitivo. técnicas se han hecho més complicadas y se precisan “espe- 8 artesanos”) para wne un trabajo diferenciado de un “panadero” o de ‘un “carpintero”, por ejemplo). ‘una conciencia clara del poder de la téc~ 11- foster do Onega 4) Se precisa se una educacién en la técnica (los maestros y los aprendices). ) Lo importante e: dicién se impone a guardaba en secreto sus “formulas magicas” para evitar que copiara, con lo que contribufa a que no hubiera innovacién; pién- sese en un “maestro” perfumero 0 en un fabricante de instrumen- tos musicales, que guradan celosamente sus “secretos” para seguir manteniendo su clientela). En esta fase, la técnica s6lo produce instrumentos para manipular la naturaleza (herramientas y utiles), pero no llega a producit méquinas (que son caracteristicas del sigui g) Siel proceso de elaboracién de una técnica consiste en dos ” (el téenico) y “ejecutar! stadio en Ia ev artesano es, a la par e indi 2 3. La técnica del tée Corresponde a los siglos XIX y XX de Europa y América. Es la época fabril, en la cual el ser humano pasa a formar parte de un proceso técni- co y productivo superior, del cual es un engranaje y no es el protagonis- ta, como en la época artesanal. Se caracteriza por lo sis a) Crecimiento im cién como de ejecucién, que super ) La humanidad ha creado una tan fabulosa sobrenaturaleza artifi- cial que induce a pensar que todos esos instrumentos y aparatos existen en el mundo por s{ mismos y desde siempre como dones ofrecidos y no como esfuerzos humanos, que es lo mismo que pensaba el hombre primitivo de lo que la naturaleza le off ) La aparici6n de la maquina invierte la relacién entre el uter el hombre: en épocas anteriores, los utensilios y herramientas ser- vian al hombre, la azada para labrar la tierra; el hacha y la sierra para cortar madera, etc.; ahora es el hombre quien sirve a la miéquina: “Una fadbrica es hoy un artefacto independiente al que ‘ayudan en algunos momentos unos pocos hombres, cuyo papel resulta modestisimo”. ORTEGA Y GASSET Modtactn dea een ©) Obrero y téenico, como papeles sociales, se separan. Aparece Ia figura del ingeniero. ;cnico sabe y tiene conciencia de que puede inventar cualquier ism 10, lo que Hlamariamos la “tecn« .s decir, el conjunto ordenado de ideas y pensamien- fin y que posibilitan y permiten la produc~ aparatos ¢ instrumentos, esta produceién de “tecnologia”, es, pues, in genérico que sirve para transformar la jo a una necesidad 0 descubri- a (el darse cuen- iva y creativa suma,es la capacidad; mientras que la “técni- 8. ELTECNICISMO ANTIGUO Y EL TECNICISMO MODERNO. [Las lecciones XI y XII responden a este campo temitico, asf como las explicaciones correspondientes en la “Guta de lectura”). {Qué hay que entender por “el tecnicismo de la téen ‘Ortega usa el término “tecnicismo” de una manera un tanto singular (quizé hasta provocativa): no le da el sentido que corrientemente damos esa palabra, como una expresi6n propia de una especialidad: “enlucir”, para la abogacfa 0 “ es la conciencia del humano de poder jcismo, por jen no hay técnica sin capacidad técnica falta la “pues- ismo de Ia téenica procede Ortega a ani dios de la técnica’ Por poco que contrast se nos revela que el tec los dos primeros estadios con el tercero, woderno (el del tercer estadio, el del 1 E fosotr de nega la aparicién de la méquina sustituyendo al mero instrumento se da en poco més de dos siglos-, un extraordinario salto cuant bién haber superado el timido avance que sup cla confusa y poco operativa de obrero y técnico) se logra una de conciencia técnica. El tecnicismo antiguo (los dos primeros estadios de la técni azar y del artesano) se caracteriza por la ausencia de cualquier método de invencién. Efectivamente, el * (que nunea se le puede considerar como tal) no tiene previsto método alguno para dise- far mentalmente el fin propuesto, we que hacer para lograrlo, por lo que se dedica jo que pueda ser congruente al propésito establet La clave para entender este proceder reside en que ese medio es bus- cado para cada caso concreto y particular que se tiene entre mano: XVI como el momento his gua el cambio radical hacia el tecnic io lo cifra en una nueve mente afecta tanto a la técnica como a cexplica el mundo). Ahora bien, esta nueva forma de pensar, ,surge como consecuencia de las nuevas estrategias para resolver problemas précticos © por la manera de elaborar nuevas ideas?; Io cierto es que ambas ocu- rico en que se fra- 10 moderno (y la ciencia moder- que dedicé gran parte de su vida a inventar artfi Ese es, también, el modo en que Galileo hereda Ia idea de m y con la que funda dicha ciencia. Le importa much que la ciencia fisica né asunto a despreciar, sefiala Ortega, al Calilen rerteneciernn al ORTEGA Y GASSET Meatacin de a tonica académica, sino a partir de Pues bien, el nuevo tecnicismo va a proceder de la misma manera que ir, esto es, descomponer en partes el wwestigar los resultados parciales Ge los que ha surgido, o lo que es lo mismo, genealégicamente buscar las causas, Es decir, el tecnicismo moderno tiene su propio método de ferente a todos los anteriores: estudiar y reducirlo a sus propiedades n del fenémeno bajo estudio; jo una hip6tesis (un supuesto) 10 que retina los elementos a los que el fend- meno fue reducido; realizar una segunda resolucién que ponga a prucba anterior mediante la experimentacién. del ténico— se convierte en algo independient segura de sus propios logros. Y también, deja de ser considerada como 120 ligado al azar o lo mégico, al adquirir el mismo seguro camino de jencia: el método cient Il. LECTURA: MEDITACION DE LA TECNICA 9 Introduccién . El contexto histérico (la circunstancia histérica) de la Meditacién de la técnica y el deber de estar a la altura de los tiempos. El origen de est vio obligado a pi lenos publicaran sin su autori sa argentina)-, responde a textos periodisticos escritos para La Nacién y proceden de unas lecciones impartidas en el afio 1933 en la Universidad de verano de Santander. Poco antes, habfa escrito dos de sus libros mas importantes: ;Qué es {filosofia? (1929) y La rebelién de las masas (1930), que son donde y cuando Ortega consolida su reforma radical de iando asi el periodo maduro de su trayectoria filoséfica: el raciovitalismo. ‘También es un momento biogrificamente trascendental: en 1929 Ontega dimite de su cétedra universitaria por solidaridad con los estu- diantes contra la ley de Reforma Universitaria impuesta por la dictadura de Primo de Rivera. Cuando, en 1930, la recupera, escribe el articulo zuela” y se convierte “profesor en la Universidad”, lo que significa que ahora las preguntas de sus escritos van encaminadas a indagar sobre el saber radical (la metafisica) y el contenido de la realidad radice vida), de modo que la idea principal de sus es estar yo en la cireunstan Es en este contexto ee ORTEGA Y GASSET Mediactn da tcnica de una época en que Ortega est mas que nunca a la altura de su tiem- po,y la valfa de este libro es tal que, se puede decir, también esté a la altura de nuestros tiempos presentes. El carécter anticipatorio de la Meditacién de la técnica ast lo justifica: defiende tanto a la técnica (los logros materiales alcanzados) como el estudio de la técnica (la tecnolo- ‘en un momento en que los intelectuales de la época més bien Ia des- valorizaban, y 1a reivindica como la “salvacién” del hombre en una ropa en crisis Ese estar a /a altura de los tiempos ya no lo abandonard Ortega. de las meditaciones, con la razén histGrica y vital en acci6n, se pregu ta cémo construir y vivir en Europa. En esta conferencia, Ortega se pre a Heidegger (su adversario): una altemativa ismo tecnolégico. objetivismo Ortega habia sostenido que Europa era el destino y salvacién de Espafia, ahora -en 1949- afirma que la recuperacién de Europa -una Europa devastada pot la guerra— tiene que pasar por relacionar su idea de vida (de fuertes connotaciones mediterré- vacién de a técnica es el nuevo elemento confi- gurador de la cultura y de la salvacién; esto es, propone, mediante la téc- del sentido vital de una geograffa cultural (Europa) \s devastadas por la guerra 2. Bl contexto filoséfico (Ia circunstancia filoséfica): el pro- blema de la técnica en la primera mitad del siglo XX. ELS de agosto de 1951, en el Coloquio en Darmstadt sobre “Hombre yy espacio”, Ortega lee su conferencia “El mito del hombre allende la téc- en plena confrontacién con Heidegger; en esta conferencia -ela- borada desde el raciovitalismo y basada en sus reflexiones de la Meditacién de la técnica se plantea c6mo habilitar el espacio de lo humano y cémo reconstruir una Europa fisica y culturalmente en ruinas. En el anilisis que hace Ortega de la época en que se ubica la Meditacién de la Técnica, destacan otros tres temas fundamentales: politica y arte. En esto, Ortega viene a coincidir con otros pensa- APT |W Lectura: Meciacn 3 a tence dores europeos (con Heidegger en El origen de la obra de arte (1935) y con Benjamin en La obra de arte en la época de la reproductibilidad, (1936)). La cuestién de fondo de las tres obras es el destino de los pue- blos en un tiempo de masificacién, es decir, de una vida inauténtica (Ortega) o de existencia inauténtica (Heidegger) La reflexi6n y Ia alternativa que ofrecen los pensadores europeos “Heidegger y Benjamin incluidos— a la situacién que se vive en Europa en los afios 30 es ta y, a excepcién de Ortega, la mayorfa son con- trarios a la técni Para Heidegger, la solucién de la crisis europea pasa por retornar al sentido de la técnica en sus origenes no técnicos, esto es, a la én ga, que germina del arte. Ortega responde que este modo de entender la técnica es inconsistente y cierra las verdaderas posibilidades de llevar al hombre a la plenitud de su “naturaleza” humana (no se puede regresar a lo que en la Meditacién de la técnica llama Ortega la “t€cnica del azar”). técnica hace que el arte pierda el gla- ‘mour del que disfruta por su exclusividad, ya que los medios técnicos facilitan su reproduccién mecéni iciona el con- cepto roméntico de arte; de este modo, la masala masificacién- inten- ta duplicar y reproducir lo irrepetible; ésa, diré Benjamin, es la marca de lacrisis europea y el aporte negativo de la té ‘Sin embargo, para Ortega, lo que la técnica fa tiempo libre, es la libertad, el ocio, que es la creatividad; y como la altenativa ofrece in basada en la relacién equilibrada entre el hombre ido y los valores de la técnica: la articul construir una salida de nuestra modernidad. ORTEGA Y GASSET - Medtacén de le tenes No respondo de la exactitud de estas cifras. Los «tecnécratas» de quienes proceden, son demagogos y, por tanto, gente sin exactitud, poco escrupulosa y atropellada. Pero lo que tenga ese cuadro numéri- ‘60 de caricatura y exageracién, no hace sino poner de manifiesto un fondo verdadero e incuestionable: la casi limitacién de posibilidades en la técnica material contempordnea. Pero la vida humana no es s6io lucha con la materia, sino también lucha déThomibré Con su aln ué Cuiadro puede Eurameérica oponer a 56 Comorrepertotio de técnicas del alma?_jNo.ha sido,en este orden, muy supetior él Asia profunda? Desde hace afios suieio con un posible curso en que se muestren frente a frente las técnicas de Occidente y las técnicas del Asia. G Guia de lectura “INTRODUCCION” AL CURSO {QUE ES LA TECNICA? [IDEA PRINCIPAL: La falta de coordinacién entre la universidad y la técnica (a sociedad) ha llevado a Europa a la crisis de sus valores}. Ortega inicia su exposicién con una afirmacién definitiva: “Sin la ic fo nunca. Ast, sin mds ni lante del humanismo orteguiano: el ser humano es el eje y el cen- tro de todo pensamiento y elaboracién no lo que tiene que hacer es lograrse a 2) que para acceder a comprender tener claras (aumano)” y El “ser humat hhacerse humano~ resulta ser una supera- cidn cualitativa de las fuerzas naturales de la evolucién, El ser humano tiene que convivir en una doble dimensién: Ia animal y Ia humana, que es el distanciamiento de la animalidad. Esa superaci6n se logra gracias a la técnica; 0 mejor, gracias a las capacidades imaginativas del ser humano —que el animal no tiene- es capex tp hacer trenis.o lon echrecniiaies dhl cunie webesl someneder tun problema (dificultad) e imaginar un método para superarlo. El huma- rnismo orteguiano es la afirmacién de que hemos Wegado a ser lo que somos gracias a los esfuerzos dedicados a la elaboracién técnica. Con estos precedentes ideolégicos resulta posible introducirse en su pensamiento y entender la afirmacién de que sin técnica no existifa el hombre. Por eso, a Ortega le resulta extremadamente ccémo, siendo la técnica algo tan fundamental para humano, que la universidad, que se supone que las exigencias humanas (el conocimiento de si de comprender tencia del ser sancta santorum de miento, estudio, ensefianza y divulgacién de la técnica puesto que se la puede considerar como la generadora del ser humano. La pregunta, por tanto, que uno puede hacerse es la siguiente: “;Cusl 1e el hombre es el grado (nivel) de ensefianza/conocimiento que ti ‘medio actual sobre el papel de la técnica en su vida‘ influencia en el de actuacién humana y que aun- que es innegable es que hoy en dia, Sin embargo, el conos ienen sobre el poder y las posi “individuo educado por la Universidad se queda paralitico porque no tiene conocimiento alguno de sus factores.” Pero tampoco los especialistas son capaces de explicar los problemas de la humanidad. . dice Ortega, que existe un conocimiento parcializado en jen cierto es que no hay una ense- ca” en la que se integren todas sus dimensiones, desde la hist6rica a la metafisica, antropolégica y m Todo esto hace pensar que s daria, Esta disociacién entre el mundo universitario y el técnico afecta muy perjudicialmente al ser humano porque Ia universidad, que deberfa ser el ‘zedfinein del taseneiilered. cooultn caus 2 tavernas de deste enlactones. la considera como una actividad secun- ORTEGA Y GASSET - Medtacén dole éeicn Por eso, Ortega expone que los fracasos de la actual (la Europa en crisis) se deben precisamente a Ia disoci existe entre universidad y sociedad (ser humano; técnica). La universidad ‘ya no es el sitio donde ios seres humanos pueden hallar remedios a sus

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