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Mi nombre es Bertha Ángela Taipe Cori

Me fui a los 16 años con mi esposo y me casé a los 17 años, pero al momento de casarme
sentí que no debería casarme, pero ya estaba en el consejo con toda su familia de mi esposo
y mi mamá y mis hermanos menores, solo miré a mi alrededor y dije en mi: ya estoy aquí
no puedo hacerle esto y si lo quiero y le amo y esto es para toda la vida, tendré mi familia.
Pasó 2 años, quedé embarazada y nos fuimos a un cuarto alquilado. Ahí a veces que venía
mareado y traía a su amigo borracho, y yo lo boté a su amigo porque tenía miedo que nos
pasé algo a mí y a mi hijo, mi esposo se molestó y me quiso pegar un puñete, pero tiró a la
pared, ahí tenía a mi hijo 4 meses de nacido. Pasó un año después compramos un terreno y
lo construimos, estuvimos bien hasta que entró un día los delincuentes a mi casa y mi
esposo se había ido de viaje a Lima a traer mercadería de segunda, mi herma me acompañó
en esa oportunidad, tenía 15 años o catorce no recuerdo bien la edad. Pasó que al regresar le
contamos a mi esposo y a la familia, pasaron los días mi esposo tenía que viajar de nuevo y
me dijo que te acompañe tu hermana Nancy, claro dije yo, pero para eso ella ya estaba
embarazada no se sabía de quién, entonces ella buscaba abortar, vino ese día en la tarde
aproximadamente de 6 a 7 de la noche y ese día mi esposo no regresó, yo esperé hasta las 2
de la madrugada en el patio quemando trapos viejos, regresó casi a las 4 o 5 de la mañana y
me dijo que se encontró con unos amigos y se pusieron a tomar. Pasó 2 días, mi hermana
vino a la casa a vivir con nosotros de lo cual mi esposo dormía en la patiadera de la cama y
yo en arriba, a mi hermana le preparamos una cama en la misma habitación, pasaron los
días y meses mi esposo comenzaba a tratarme mal, me decía levántate temprano, rápido
tienes que cocinar para que vaya trabajar tu hermana, lavaba, cocinaba, limpiaba, hacía de
todo mientras mi hermana estaba durmiendo todavía en su cama y me hacía servirle su
comida, esa era la rutina de todos los días, a ella le trataba con amabilidad y a mí me
miraba con rabia y cólera, no le parecía nada bien lo que yo hacía y me parecía algo raro.
Habían días que llegaban juntos y en otros que mi hermana llegaba primero y luego de 5
minutos mi esposo. Pero 3 o 2 meses decidimos traer a mi mamá y 2 hermanitos porque no
teníamos casa y Vivian alquilado y por falta de pago los desalojaron, éramos muy pobres.
Mi mamá y yo estábamos juntos y no nos dábamos cuenta hasta unos meses que era
navidad 25 de diciembre, preparamos comida y mi esposo se puso a tomar ahí en la casa y
mi hermana se fue de viaje a la selva, el 26 le escucho a mi esposo decirle a mi mamá que
la amaba a mi hermana y que quería irse con ella, en ese momento llegué le pegué dándole
puñetes en su pecho, él solo me miró luego mi mamá me dijo cállate y él se subió por las
paredes y se fue no se a dónde y regresó en la tardes, yo solo lloraba, sentí que el mundo se
había caído en mi cabeza, me sentí desesperada, todo era llorar, el 27 me dejó mi esposo y
viajó a la mina a trabajar pero yo sabía que no era así y le dije: y tú hijo, y él me contestó
que no le importaba. Pasaron 2 días mi tía llegó de la selva y me dice que mi esposo está
allá con mi hermana diciendo que yo le había quitado a su esposo y que los hijos que tenía
en ese momento eran de él y el dijo que sí, yo dije eso no es verdad tía. Vino mi cuñada y
me dejó para ir a la selva y yo le dije: no, si quieres que viaje yo no pelearé por un hombre.
Por eso yo me sentía sola, solo quería morir junto con mi hijo, pasó un mes regresaron mi
esposo y mi hermana, regresé con él por pedido de su hermana y mi suegra y por mis hijos
y por mi porque lo amaba mucho pero él nunca pidió disculpas, lo hice por mi parte y
regresé con él a vivir a mi casa, cuando caminaba por la calle de la nada molesto me decía;
tu hermana era mejor tú, yo solo callaba y lloraba, me sentía mal culpable de que no podía
irse con mi hermana, mejor nunca hubiera vuelto con él, pero nunca lo decía a él del dolor
que sentía. Cada día toma más licor por el sufrimiento de no estar con mi hermana y luego
me insultaba decía que yo no valía que era una basura. Mi dolor era muy fuerte, nunca se lo
deseo a nadie. En otra oportunidad ya me pegó a cachetadas y yo me defendí dándole una
patada entre las piernas, entró mi cuñada y le dijo cómo le vas a pegar. Y delante del bebé
me pegó porque no le dejé llevarse todo el dinero porque se tomaba y lo perdía y no habría
para la comida. Pasó meses y dios él seguía tomando en Lima, mi cuñada Catalina le
encontró abrazados con una mujer los dos borrachos y le reclama y él dijo que era su
comadre, él llegó al día siguiente con otra ropa, con sandalias, sin mercadería y sin dinero,
le miré y le tiré una cachetada y se me fue a mi cuarto. Pasó 5 años y quedé embarazada de
mi segundo hijo, luego nació comenzaron los insultos cada vez que tomaba diciendo, eres
una basura, en qué momento me he embarrado contigo, no tenía respeto por mi mamá que
escuchaba todos los insultos, solo me miraba y se ponía triste, cuando le hice un comentario
a mi cuñado diciendo que mi esposo Roberto toma mucho y se gasta el dinero, él me dio un
lapo en la boca diciendo cállate. Por lo cual comenzó a sangrar mi nariz manchando mi
ropa y a mi hijo que estuve teniendo en mis brazos, mi cuñado le dijo no le pegues, luego
pasó 4 meses de esos viajes regresó a Lima decidiendo que una de las vecinas habría salido
a buscar a Lima diciendo que era su esposo y le llevó al hotel para salvaguardalo y que
unos vecinos lo habían visto. Pero en realidad él le había seducido a la chica de 15 años y le
había llevado a Lima, yo reclamé a la chica y a su mamá, y la chica dijo él me ha llevado a
Lima y que estuvieron en el hotel de lo cual él se negó, yo no podía ir a Lima porque tenía
que atender a mis hijos y trabajar o avanzar en reparar y pintar la cocina del segundo piso lo
que vendimos en la feria de los domingos. En una oportunidad vino su amigo al puesto de
ventas y me dijo señito vaya a Lima y yo le dije por qué y él dijo yo sé porque te digo anda
ve, pero no podía porque tenía que trabajar y cuidar a mis hijos. Pasaron los años y todos
los lunes se iba a Lima, nunca se quedaba, aunque le decía quédate esta semana, decía
tengo que ir por mercadería y yo tenía que seguir trabajando reparando la cocina que él
traía, desarmando, llevar, pintar, soldar y armar. Pasaron los años, así sin darme cuenta del
tiempo hasta el 2016 que me eligieron como presidenta de pistas y veredas de mi barrio, se
ponía incómodo cuando iba al consejo a hacer trámites, y cuando recibo un beso como
saludo de parte de otras personas varones. Y me decía por eso que yo no quiero que tu
estudies para que no estés andando así. Él siempre me quiso tener ignorante para no saber
mis derechos, tú como sabes de dignidad, derechos, seguramente el señor carnicero te
enseñó, me exigía dejar el cargo, por eso tenía constantes celos y maltratos de mi esposo
Roberto, a pesar de que cumplo con mis obligaciones de trabajar, cocinar, tener todo limpio
mi casa, y el 2017 viajé a Lima, mi esposo Roberto se adelantó, yo fui al día siguiente en un
bus público, al rato vino su sobrina Yhovana y su esposo y me preguntaron cómo me fue en
el viaje de lo cual yo respondí que me fue bien porque hace tiempo no había tenido.

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