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La Luna es el satélite natural de la Tierra, es tan solo 3,66 veces más pequeña y órbita la Tierra

a una distancia media de 385000 km. Como cualquier objeto con masa, la Luna crea a su
alrededor un campo gravitatorio tal como se dice sobre la ley de gravitación universal de
Newton. Esta ley nos dice que un objeto puede ejercer una fuerza de atracción sobre otro
objeto, y esta fuerza disminuye con el cuadrado de la distancia entre ambos objetos.

La Tierra, al estar dentro del campo gravitatorio de la Luna y tener volumen, atraviesa una
infinidad de líneas de campo.

Por lo que cada parte de superficie de la Tierra recibirá una fuerza de atracción, hacia la Luna,
de diferente magnitud. Esto es causante de la fuerza de marea.

Se sitúa imaginariamente 3 puntos sobre la superficie de la Tierra, entonces, en punto A está


situado a un punto más cercano a la Luna, el punto B, en el punto más lejano, y el punto C,
situado en un lugar intermedio sobre la superficie de la Tierra (entre A y C, medido
verticalmente).
Si se mide las fuerzas netas (ocasionadas por la Luna) que recibe cada punto, el punto A recibe
una fuerza neta hacia la Luna, mientras que en el punto B, la fuerza neta que recibe es en
sentido contrario (a la del punto A). En el punto C, la fuerza neta es perpendicular a las otras
dos, va dirigido hacia el centro de la Tierra.

Como resultado se obtiene un “abultamiento de la Tierra” en el eje que va dirigido hacia la


Luna (donde está situado el punto A y B) y un achatamiento en el perpendicular (donde está
situado el punto C), adquiriendo así, forma de elipsoide. Aunque, como la Tierra es de roca y
rígida, lo que evidencia más esta fuerza son los fluidos que hay en ella (como el agua y el aire).

El efecto que más podemos notar en nuestras vidas cotidianas es el ascenso y descenso de las
mareas (de ahí donde recibe el nombre esta fuerza).

El abultamiento sigue a la luna en su traslación (respecto a la Tierra), pero suponiendo que la


Tierra estaría estática. Entonces cuando se le introduce el movimiento de la Tierra (rotación),
este abultamiento no coincide, exactamente, con la línea que une la Tierra y la Luna, sino que
está por delante, debido a la rotación terrestre.
Y este adaptamiento genera un nuevo suceso, que es que la Luna rote cada vez más lenta y se
aleje de la Tierra cada vez más.

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