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Tres amores ★222★

Después de dudar mucho, Fabio se inclino y le susurro:


- Si no estoy equivocado, Sir Luinyer está ahora en Colina
del Jardín Norte
El pobre hombre agitado no podía creer lo que escucho y se
quedó boquiabierto ante el anuncio de Fabio
- Me temo que ni siquiera podemos llegar a la residencia,
aunque nos abramos paso hasta allí. Pero ya que no s
encontrar bien ¿por qué no se adelanta y te echas una
siesta?
Dante quedó en silencio y se bajó del auto, se dirigió a la
habitación en la que paso incontables días con Gala. Su mente
estaba en un estado de animo muy complejo cuando
vislumbro las fotos en la habitación. De pie enfrente de ellas,
se perdió en un hilo de pensamientos, recordando todo los
buenos tiempos. Magdalena llamo a la puerta y entro con una
comida

- Señor Dante ¿Por qué no come esto? Acabo de hacerlas


para usted, siempre fueron las favoritas de su infancia
- Gracias
Dante tomo asiento y comenzó a saborear la comida que
Magdalena le preparo. De pie junto al agotado hombre, ella
no resistió las ganas de llorar y acabo moqueando junto a
Dante. De manera irónica, él la encontró graciosa y le
pregunto
- ¿Qué le ocurre? ¿Por qué lloras si todo está bien?
Magdalena murmuro
- Estoy triste por todas las cosas que tienes que pasar,
tanto que no puedo imaginar la cantidad de estrés que
tienes que soportar ¡Parece que has envejecido en la
noche, cuando solo han pasado algunos días!
Dante se acaricio la mejilla y murmuro para sí mismo
- ¿Envejecí de la noche a la mañana?
En ese momento Fabio apareció y ordeno
- Señora Vizcaya ¿Por qué no regresa a si habitación y lo
deja en paz por el momento? Lleva casi una semana sin
dormir
- ¿hablas en serio? ¿Cómo puede permitir que descuide su
salud? Si uno no duerme lo suficiente eso le pasará
factura…
Magdalena estaba por regalar a Dante cuando Fabio la detuvo
y le aseguro
- Esa es justo la razón por la que tenemos que dejarlo en
paz
A Fabio le costó bastante para convencer a Magdalena de que
dejara tranquilo a Dante. Una vez que regreso le dijo a Dante
asegurándole:

- No debes tomar en serio sus palabra, ya que exagero las


cosas para intimidarte
- Quizás no se equivoqué porque puedo sentir que no
estoy en mi mejor momento, no puedo creer que me
toque sentirme tan inútil
- Seguro que es porque está agotado. ¿Llamo a Regina
para que lo revise?
- Eso no será necesario, porque no hay nada que ella
pueda hacer cuando solo estoy agotado.
- Bien, supongo que tienes razón. Es más tenemos que
ponernos en contacto con el Doctor Tao si te pasa algo.
Después de los innumerables incidentes por los que habían
pasado, Fabio se preguntaba si Regina se podía considerar
como una doctora calificada. Cuando Dante escucho a Fabio
mencionar a Tao recordó que el renombrado doctor le
pregunto si experimento algo extraño con sus ojos
“¿Me pasará algo en los ojos?
¡Bum!
Dante se sobresalto con el estruendo, se volvió con las cejas
fruncidas, incapaz de guardarse las preocupaciones para si
mismo, busco su celular e intento llamar a Gala, pero para su
consternación no podía comunicarse con ella, porque lo tenía
bloqueado.
Dante dejo su celular a un lado y se quedó mirando al frente
en silencio.
- ¡Señor Licano! Tranquilícese. Me pondré en contacto
con ellos en su nombre.
Unos segundos después de que Fabio intentara comunicarse
con Ágata, la mujer al otro lado de la línea respondió y
pregunto de forma petulante.
- ¿Qué quieres?
- ¡está a punto de llover! ¿Está bien la señorita Lobo?
- En estos momentos está durmiendo tranquilamente,
después de terminar el té inductor de sueño que le
preparo el doctor Tao. Ni siquiera el fin del mundo la
despertara y mucho menos los truenos ¿El señor Licano
te encargo que preguntarás por ella?
Fabio murmuro
- Si, no pudo localizarla porque ella lo tiene bloqueado por
lo que…
- La señorita Loco está muy bien. Gracias por preguntar,
pero no es necesario que llames en el futuro – Ágata
colgó la llamada dando por terminada la conversación
Fabio se giro y miro a Dante como una sonrisa tímida
pregunto:
- ¿la escucho?
- Supongo que no me necesitan – murmuro Dante para si
mismo y camino en dirección al baño
Fabio preocupado que el pasará algo al hombre pregunto
- ¿En verdad está bien? ¿Debo llamar a alguien para que
lo atienda?
- ¡fuera de mi vista!
A pesar de la reprimenda, Fabio sintió una sensación de alivio
al ver que Date aún tenía fuerzas para meterse con los demás.
Dante por su parte se desvistió y pensó en darse un baño
luego de toda una semana agitada, pero le empezó a picar la
nariz. En el momento en que intento rascarse, abrió los ojos al
sentir que brotaba algo de ella, salió de la bañera y se miro en
el espejo
“Por Dios estoy sangrando…”
Su mente estaba en un estado de incertidumbre porque nunca
había experimentado algo así. Una vez paso varias noches en
vela durante la oferta pública inicial de la Corporación
Supremus, pero no fue nada grave.
“Es innegable que es el momento mas estresante de mi vida y
agotador que pueda tener. Pero esto es demasiado. ¿Será
grave? ¡Gala experimento algo similar cuando fue
envenenada! ¿me han envenado a mí también?”
Los ojos de Dante parpadearon con desesperación al pensar
que fue envenenado, pero no fue así cuando recordó que no
sintió ningún dolor aparte de tener la visión borrosa y la nariz
sangrando.
“He sido muy precavido todo este tiempo. ¡Los alimentos que
consumía fueron examinados para asegurarme que todo está
bien! Así que no creo que me hayan envenenado”
Se había perdido en otro hilo de pensamientos cuando
escucho el celular sonar. Por lo tanto se enrolló una toalla en
la cintura y salió del baño. Tomo el celular y oyó que su hija
se dirigía a él
- Papá
- Kira ¿Qué pasa? ¿No te sientes bien? ¿Paso algo?
- No puedo dormir porque te extraño. ¿Cómo estás papá?
¿Has solucionado las cosas por tu parte? – Kira moqueo
y pregunto
- Estoy bien Kira, no tienes nada de que preocuparte –
Dante no podía soportar compartir con su hija su estado
actual
- Papá una vez que este bien ¿Me vas a llevar a casa?
- Por supuesto que sí mi Kira, te llevaré a casa una vez
que estés recuperada, a partir de ahora haz caso a las
instrucciones del doctor Tao ¿Vale?
La niña moqueando dijo
- Está bien papá, la verdad, no estoy dispuesta a dejar a
mamá y Liam no está dispuesto a dejarte. Sin embargo
hemos llegado a un acuerdo y quedamos en enviar a
Liam con mamá en el peor de los casos. Al menos el
puede mantener a mamá a salvó – Kira hizo una pausa y
añadió – de la misma manera Dereck y yo volveremos
contigo para que no intentes ninguna tontería cuando
mamá no esté ¿Puedes no culpar a Liam por ser
travieso? Te ama tanto como nosotros
Dante respondió con la voz temblando contra su voluntad
- ¡nunca los culpare a ninguno de ustedes! Soy muy
consciente de las preocupaciones y de las cosas que
debemos hacer.
- Papá… e….en…. – Kira tenía miedo de exponerse, así
que se escondió en el edredón y añadió - ¡Hay alguien
en la habitación de mamá!
Dante asustado por lo que su hija le decía que saco a relucir,
repitió
- ¿Qué? ¿Me estás diciendo que están pasando tiempo en
su habitación?
- Si, aunque es un hombre muy guapo y simpático, no
quiero estar cerca de él, no lo quiero porque ese señor
no es mi padre.
Dante se puso ansioso y repitió la pregunta
- Kira ¿Estás segura que ahora está en la habitación de tu
madre?
- Si, se fue a la habitación de mamá después de ponerse la
pijama. Y hasta ahora no ha salido – Kira estaba dudosa,
pero aún así pregunto en voz baja – leí que una mujer se
quedó embarazada luego de pasar la noche con un
hombre, papá ¿Esperamos otros hermanos dentro de
unos meses?
- ¡Noo! ¡Ese no será el caso!
- ¿Eh?
De repente el hombre al otro lado pregunto
- Kira ¿Quieres algunos de los panecillos calientes de la
Señora Vizcaya?
- Si, pero no puedo comer ninguno ya que mamá no
puede hacerlos.
Dante se seco el cabello y le pregunto
- ¿te llevo unos panecillos? ¿Tienes sueño?
Kira se emocionó con la sugerencia de su padre y empezó a
saltar de la alegría
- ¡No tengo sueño! ¡Estoy deseando verme contigo papá!
¿Cuándo vas a venir?
Dante miro el reloj y anuncio
- En estos momentos son las 8 y media, estaré allí en 30
minutos, a las 9 en punto
- Excelente papá, te espero
Después de colgar la llamada Dante le indico a Fabio que
consiguiera unos panecillos calientes de la cocina. Este
preocupado por el estado de Dante, le pregunto con el ceño
fruncido
- ¿Qué intenta hacer con esos cuando se supone que está
durmiendo?
Irritado por la pregunta del joven, Dante le repitió
- ¡solo deja de meter las narices en mis asuntos!
Fabio fue y regreso con los panecillos calientes y le pregunto
- ¿Puede al menos decirme a dónde va cuando ya se está
haciendo tarde?
En vez de decirle a Fabio su destino, Dante salió de la
mansión luego de tener las llaves en sus manos. Fabio fue en
silencio tras él ya que tenía que algo malo le pudiera ocurrir al
agotado hombre.
Dante se detuvo cuando estaba a punto de llegar a Colina del
Jardín Norte. Se bajó del auto y entro a hurtadillas en el
recinto.
Había todo tipo de seguridad alrededor de la residencia Lobo
para garantizar la seguridad a sus inquilinos. Por lo tanto
ningún hombre común y corriente podía colarse. Pero Dante
no era un hombre común y corriente. Se cómo en el ático y
entro en la habitación de Kira por la ventana.
La niña que estaba sentada en la cama, sostenía con firmeza
su peluche en los brazos esperando que llegara su padre. Kira
se asusto mucho cuando escucho un ruido procedente de la
ventana. Pero se alegro al comprobar que era su padre que
había llegado, corrió a su dirección y grito:
- ¡Papá!
Dante la tomo en brazos y puso la palma de la mano en la
frente de Kira, preguntando en tono preocupado
- Kira ¿Te encuentras mejor?
- No estoy del todo bien, pero no es gran cosa ¿Dónde
están mis panecillos calientes?
Dante le entrego el antojo de la niña que traía
- Aquí tienes, vamos pruébalos
- Muchas gracias papi. Tengo mucha hambre ya que solo
cene una ración de avena – Kira empezó a masticar los
bollos que su padre le traía.
- Cómelos con calma y deja de meterte todos los bollos en
la boca, solo puedes comer uno ya aún no te sientes
bien.
Kira le respondió con un asentimiento de cabeza, indicando
que no estaba en contra de la idea en absoluto. Dante le
preparo un vaso de leche caliente después de buscar el cartón
de la leche en la habitación.
- Aquí tienes un vaso de leche por si necesitas bebé algo
Kira rodeo el cuello de su padre con los brazos y le dijo
- Gracias papá ¿No es estupendo que podamos volver a
estar un tiempo en familia?
- Estoy seguro que no tardaremos mucho en volver a estar
juntos como una familia de 5. Solo dame chance, haré
que ocurra pronto.
La niña se emociono y le pregunto:
- Hurra ¿ Vamos a vivir por fin como una familia de 5
cuando mamá y yo nos recuperemos?
Dante le acaricio las mejillas y insto:
- Intentaré a ver si es posible ¿Por qué no te adelantas y te
arropas? Yo pasaré a ver cómo está tu madre
Kira temía que el dúo se enzarzara en otro conflicto. Así que
agarro la mano de su padre y le pregunto
- ¿Puedes prometer que no te meterás con mamá? – él la
beso en la mejilla y le aseguro
- Tienes que calmarte porque no me voy a meter con ella.
Sigue adelante y da por terminado el día, nos vemos
pasado mañana.
Kira asintió y miro a su padre que se marchaba con cara de
agravio mientras volvía a escabullirse por la ventana.
Los que estaban apostados fuera de la habitación, escucharon
el sonido chirriante de la ventana, pero en cuanto se
volvieron, Dante ya no estaba por ningún lado. Pensaron que
vieron cosas y no le prestaron atención. Después de todo no
sería sorpresa que las ventanas crujieran durante un aguacero
fuerte.
Dante se coló en el balcón de Gala, notaba como el corazón
se le aceleraba, pensando que se volvería loco si Luinyer
estaba con Gala en la cama. En cuanto forzó la cerradura y
entro a hurtadillas en la habitación de Gala, vio a Luinyer
repantigado en el sofá con una bufanda alrededor.
Mientras que tenía un camisón blanco y dormía como un
tronco en la cama, tenía las piernas y el trasero descubierto
luego de darse la vuelta en la cama.
Dante frunció el ceño al pensar que Luinyer la había visto así.
Mientras él caminaba en dirección a Gala para arroparla,
Luinyer casi se despertó de su sueño debido a la conmoción.
En un intento de detenerlo, Dante se apresuró a acercarse y le
lanzó un potente golpe en el cuello para dejarlo inconsciente.
Así que Luinyer se desmayo. En ese momento Dante lo
sostuvo y evitó que cayera.
Por muy celoso que estuviera Dante, sabía que Luinyer no
quería hacer daño, para ser precios él solo estaba allí para
mantener a Gala a salvó ya que podía sufrir mucho cuando
caía una fuerte lluvia. Por lo tanto no tenía intención de
hacerle daño a Luinyer. Una vez que resolvió eso, fue al
balcón para correr la cortina.
Los que estaban afuera de la residencia vieron una silueta
junto a la ventana, pero no le prestaron atención al pensé que
era Luinyer.
Dante cerró la puerta por dentro se quitó el abrigo y se unió a
Gala en la cama, la abrazo fuertemente. El té inductor de Tao
funcionó a las mil maravillas. Gala no mostró signos de estar
despierta a pesar de las acciones de Dante. Al contrario
termino acurrucándose en los brazos del hombre.
Dante la miro a los ojos y la beso en la frente. Estaba
abrumado por los retos que les esperaban y esperaba que las
cosas salieran bien al final del día. Ahora necesitaba dormir
más que nunca después de la agitada semana que pasó. Una
vez que coloco la alarma para despertarse del sueño a las 5 de
la mañana, se quedó dormido junto a Gala.
Luinyer que ese había quedado dormido en el sofá, no estaba
consciente de que su supuesta prometida estaba en brazos de
otro hombre delante de él.
Ágata pensó que el té inductor del sueño de Tao era muy
impresionante ya que Gala permaneció dormida durante la
noche que duró el aguacero. Oyó el alboroto pero no le prestó
atención. Antes de marcharse le dio instrucciones a los que
estaban en la puerta.
- Quiero que todos estén atentos a cualquier tipo de
actividad sospechosa. Si hay alguna infórmenme de una
vez
- Si.
Incapaz de resistir por más tiempo el cansancio reprimido,
Dante no tenía intención de intentar alguna tontería, aunque
Gala estuviera entre sus brazos. Se quedó dormido y durmió
como un tronco durante todo el aguacero después de estar
despierto durante casi una semana.
A Gala le ocurrió lo mismo, se sintió segura acurrucada en los
brazos del hombre que tenía a su lado. A pesar de estar
inconsciente, podía sentir el cálido abrazo del hombre.

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