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Una pradera es un bioma, es decir, un conjunto de ecosistemas en el que predominan los terrenos
llanos cubiertos de pastizales y de hierbas de tipo gramíneas, casi sin árboles. Presenta un clima
templado en verano y frío en invierno, con precipitaciones moderadas. También se la denomina
estepa o sabana.
Una cuarta parte de la superficie continental está cubierta por praderas de las que, gran parte,
fueron intervenidas por el ser humano y destinadas a la industria agroganadera por las propiedades
del terreno. Por eso es común encontrar sectores de árboles distribuidos en filas que fueron
plantados por el humano para que frenen los fuertes vientos.
Las praderas del hemisferio sur se ubican entre el trópico de Capricornio y el Polo Sur y suelen
presentar más lluvias que las del hemisferio norte que se ubican entre el trópico de Cáncer y
el Polo Norte y suelen ser más cálidas y templadas durante todo el año
La vegetación de la pradera se caracteriza por ser tupida pero baja, es decir, casi sin plantas
leñosas o árboles. Predominan plantas herbáceas de tipo gramíneas, matorrales, pastos y juncos.
Algunos ejemplos son: el girasol, el trébol, los juncos, los limoncillos y las flores como los índigos
silvestres.
La fauna de la pradera se caracteriza por ser diversa, allí habitan: venados, liebres, zorros,
lechuzas, bisontes, reptiles, arañas, armadillos, perritos de la pradera (que son de la familia de las
marmotas) y aves, como los patos y los gansos. En las praderas que fueron alteradas por el
accionar del humano se encuentran vacas, ovejas, cerdos, cabras y gallinas.
La intervención del ser humano en las praderas ha generado grandes cambios en el bioma, como
la alteración del suelo, la flora y la fauna. Gran parte de las praderas del mundo están destinadas a
la industria agrícola y ganadera, debido a que tienen un suelo llano y propicio para el cultivo y para
la cría de ganado.
En las praderas se suelen realizar cultivos intensivos de maíz, trigo, soja, girasol y se suelen criar
animales como cerdos, vacas, gallinas, ovejas y corderos. Son terrenos explotados por la industria
para el beneficio del ser humano, aunque en la actualidad existe cada vez mayor presión social y
ambiental para moderar ese tipo de actividades.