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fockdar J SCHWEME AAEAiCa LATA EM Ld Ebap HME Lb MAIO, fkey , 1998. oxperun om DE LAS ISLAS A TIERRA FIRME: LA FASE’ CARIBENA Y LAS CONQUISTAS POSTERIORES Sep aren orem En una sociedad que ha existido de forma ininterrumpida en una misma region por espacio de algunos siglos tienen que darse fuertes distin- Cones regionales y diversas tradiciones de pensamiento, al tiempo que los - cambios en la misma son graduales y acumulativos. No obstante, cuando i tin pueblo es trasladado masivamente a un nuevo entorno, las cosas evolu cionan de modo algo diferente. Aunque los recién llegados traten de con servar el mayor numero de sus pautas méntales v de, comporramiento, Tas. Gavrancias los forzarin @ realizar ajuste a gran escala en los primeros) afios de su presencia’en la nueva region, y ello para sobrevivir y conseguir’ sus Goatives aprouimades, Rapiéamente aprouimados. Rapidamente cristalizan un conjunto de pra cas y un nuevo vocabulario que después, y durante largos espacios de tiem- po. cambian muy poco. Si la nueva sociedad se extiende rapidamente sobre tina amplia regién, como ocurrié en Hispanoamérica, se dard und gran uni- formidad en ciertos elementos: formas de gobierno local, practicas comer- Gales e incluso Ia lengua hablada, a pesar de una variacion regional en la nueva base local. ‘Las razones por las que nuevas regiones experimentan una répida cris talizacion cultural e institucional seguida de un periodo de cambio lento son muchas y complejas, aunque, si hacemos nuestra la afirmacién de.que las Sociedades humanas innovan lo menos posible para un espacio de tiempo Gado, el resto del razonamiento se hace comprensible. En el caso que nos ocupa, son més importantes algunos de los mecanismos especificos. Muchas sociedades de nuevo cuiio han reverenciado y recompensado a sus prime- ros pobladores. En las Indias espatiolas, esta tendencia adoptaria la forma de una desmedida consideracion por la «antigiedady. Los pobladores mas présperos y respetados eran los que levaban més tiempo en un territorio, y los recién Hegados recibieron de buena gana Jos consejos de los autécto- nos de mas experiencia al plantearse como habrian de hacerse las cosas. Los pobladores mas antiguos fueron siempre quienes dirigieron las operaciones t én las todavia nuevas regiones, y una vez en ellas, como jefes y consejeros, encauzaron las cosas de modo ya familiar para ellos. Naturalmente, surgie- ton cambios en cada aspecto y cada nivel de la existencia; al cabo de largos intervalos de tiempo aparecerian nuevos dialectos regionales y subculturas. a : 65 Escaneado con CamScanner Las nuevas regiones dejarian de serlo. Pero, mientras tanto, la wradicion ca ¥ as ital y sede principal, papel este que habia po aS ae ve ar deee he tape Gael Cate ES aravals Sa es eepan ja ala presencia de ue podriamas mas la forma de esporédicas re nas legaron a compreader el alcance y el carter dt desarvolaron bajo rizados con la experiencia portugues ares y allegados, des locales para cualq d genovés-portugues e sobre tod Colin y sino también muchos de los marineros’ andaluces que tripularon sus asi como | nts Padiola, estaban dispuestos a emlar la experiencia ya atar a América de forma anéloga a Africa 0 qui bargo, América no i India. Y, lo que es més import icén y precedente, ‘EL CURSO DE LOS ACONTECIMIENTOS EN EL CARIBE ica por pro ibrar gobernadores espaioles a imente 0% ‘una importancia face, decisvos fueron mis bien que Espaia se lanz6 de leno a exploar los terés americanos y que Brasil aparecié en principio. gue parecia contar con la mayor poblacin indigena de cualquiera de islas, Tras un breve periodo de ensayo, Santo Domingo, en la costa su 66 ial inclinacin a aceptar un Tormas ibéricas de ocupa- Escaneado con CamScanner jemefos, movimiento dor ~y la ead en, 1502~ del caer fay Nas de Orade, Ea EES a _—_ tepresentacion de inmigrantes procedeates de todas las re- con el de «Repibliea Dominicana». La fen centros urbanos de un Nuevo Mundo para as actividades sodoeconémicas o incluso la acciéa militar parece uca solucida tan eviden- jografica y minera para icicamente de las ish rura euro armplasterras interiores de las que se nutra la ciudad se viecon muy poco ‘uropeizadas y experimentaron tna notable devadeacia. Al tiempo que

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