Sinceramente, esta carta es muy espontánea, no tenía la motivación
suficiente para hacerla, pero no me cuesta nada, quería empezar diciendo que... tú eres tan importante para mí como el sol para la tierra, ya que tú iluminas mi camino, si te vas, estaré triste y oscuro, esperando a que la reflexión de tu luz refleje mi rostro a la velocidad de la luz de nuevo. También me haces sentir como si fuera un astronauta volando a menor gravedad en la Luna, a 6.5 m/s. Me haces sentir rayos de luz eléctrica en mi estómago de materia oscura. El CO2 que exhalas llega a una Turbina Pelton dentro de mi corazón y produce la energía de mi día. Después de este discurso tan cursi, te propongo algo muy revelador, Si tú eres un planeta, ¿puedo ser tu Luna? (o si quieres podemos olvidar que esto pasó y seguimos siendo planetas distintos pero amigos :P)