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UNIDAD 3.

REMEDIACIÓN DE SITIOS CONTAMINADOS CON HIDROCARBUROS

3.1 Remediación de sitios contaminados con hidrocarburos: Implementación, uso y desarrollo


de las acciones correctivas basadas en análisis de riesgos - objetivos de limpieza y
determinación del riesgo

Expositor: Ing. CHRISTIAN LENOIR


Email: christianlenoir@aesdisab.com.ar

SINOPSIS

El presente documento pretende resumir los conceptos relacionados a la metodología conocida


como Acción Correctiva Basada en Riesgo (Risk-Based Corrective Action), a los fines de
permitir al lector conocer los alcances y usos, elementos, origenes y aplicabilidad de ésta
herramienta, así como el uso de la misma en la República Argentina.

En su publicación “El Riesgo Aceptable”, W. W. Lowrance describe la seguridad como


“evaluación del grado de aceptabillidad de un riesgo”, en tanto que define riesgo como “la
medida de la probabilidad y gravedad del daño, que podría infligirse a la salud del hombre”,
conllevando a la conclusión: “Es seguro todo aquello cuyos riesgos se consideran aceptables”.

Dada la naturaleza subjetiva de la seguridad, en que intervienen valores personales, la


seguridad no puede medirse en sí, sino que sólo pueden medirse los riesgos (uno no puede
juzgar hasta qué punto una persona podría o querría soportar un riesgo).

En el campo ambiental, el concepto de análisis de riesgo ha surgido hace menos de una


década, como respuesta a la necesidad de priorizar la asignación de recursos, cuando los
mismos no son ilimitados. De éste modo, según la magnitud de una situación ambiental
reconocida, se establecerá un nivel de riesgo consecuente que permita jerarquizar la prioridad
de atención del sitio.

Es una herramienta de dos vías, en el sentido que permite, definiendo previamente un nivel
aceptable de riesgo en un punto de exposición (POE, Point of Exposure), determinar los niveles
objetivo de Compuestos Químicos de Interés (COCs, Chemicals/Constituents of Concern) en el
área fuente.

Sin embargo, mientras la primera acepción de uso es fácil de comprender, la segunda requiere
definir la correspondencia a “nivel aceptable de riesgo”.

Durante años, agencias de prestigio internacional como la USEPA (Environmental Protection


Agency, Agencia de Protección Ambiental de los EE.UU. de Norteamérica) han avocado sus
esfuerzos a la realización de estudios toxicológicos, a fin de cuantificar niveles de riesgo
“aceptables” para los seres humanos en lo concenrniente a la exposición a una amplia gama de
compuestos químicos.


Según Definición ASTM E1527-00 “Standard Practice for Environmental Site Assessments: Phase 1
Environmental Site Assessment Process”: El término “Situación Ambiental Reconocida” se refiere a la
presencia posible o real de cualquier sustancia peligrosa o derivado de petróleo en una propiedad, bajo
condiciones que indiquen un pérdida presente o pasada, o un riesgo inminente de pérdida de cualquier
sustancia peligrosa o derivado del petróleo hacia las estructuras de la propiedad o hacia el suelo o agua
subterránea o superficial de la propiedad.
En cuanto al tipo de compuestos, existe una gran divisoria entre los compuestos cancerígenos y
los no cancerígenos. Esto ha derivado en la estandarización de dos escalas independientes de
riesgo, a saber, el índice de riesgo (Hazard Quotient, HQ) para los compuestos no
cancerígenos, y el nivel de riesgo incremental de cáncer (Incremental Carcinogenic Risk Level,
I.C.R.L.), para los carcinógenos.

El primero se define, según estándar ASTM E-1739-95 “Standard Guide for Risk-Based
Corrective Action Applied at Petroleum Release Sites”, como la razón entre el nivel de
exposición a una químico de interés durante un período de tiempo determinado y la dosis de
referencia para dicho químico, derivada para un período de tiempo de exposición similar; en
tanto que el I.C.R.L. se define como el potencial para incrementar efectos carcinognénicos a la
salud humana debido a la exposición a químicos de interés.

El HQ se basa en una escala de cero a uno, representando dicha escala, en el marco de un


análisis de riesgo, la sumatoria de los cocientes entre dosis recibida y dosis de referencia para
todos los COCs y vías de exposición involucradas. Obviamente, éste suposición es
conservadora en cuanto que asume que habrá una exposición completa y contínua para todas
las vías y compuestos involucrados.

El I.C.R.L., por su parte y en el mismo contexto, varía entre cero y un valor que se sitúa
correspondientemente entre 1.10-4, 1.10-5 o 1.10-6. Éstos tres valores dependen de cuan
conservador se quiera ser, y suelen estar ligados al riesgo mismo de ocurrencia de un impacto
(cantidad de vías de exposición, tipo de zonificación, etc.). El I.C.R.L. es un concepto
estadístico. Un nivel de 1.10-N indica que se considera que hasta un caso de cáncer cada 10N
habitantes es producto de causas ajenas (cigarrillo, radiación, etc.). Casos adicionales por
sobre ese umbral serán atribuidos al escenario bajo estudio. Estadísticamente, se considera
que un caso de cáncer cada 10.000, 100.000 o 1.000.000 de habitantes (según el criterio de
riesgo elegido) se debe a causas “naturales” o “ajenas” sobre las que no se tiene control; por
ello, ese umbral constituye el rango de riesgo aceptable.

En la Argentina, el uso del análisis de riesgo ha cobrado importancia en los últimos años debido
al auge internacional de ésta herramienta y al gran potencial de aplicación dentro de la
problemática nacional, más aún considerando las siempre difíciles tareas de asignación de
recursos, planeamiento estratégico y toma de decisiones.

Cabe señalar al respecto, la incorporación de los criterios de RBCA a nivel nacional, en diversas
normas, como en el cuaderno de trabajo IRAM 29550, que define el uso de análisis de riesgo
para sitios con derrames de hidrocarburos; la Ley Nacional Nº 25612, que menciona el análisis
de riesgo como criterio para la gestión de residuos, o el Decreto Nº 592/02 de la Provincia de
Santa Fe.

En el año 1995, ASTM (American Society for Testing and Materials) publicó y adoptó la Norma
ASTM E1739-95, “Standard Guide for Risk-Based Corrective Action Applied at Petroleum
Release Sites” (Guía Estándar para Acciones Correctivas Basadas en Riesgo Aplicadas a Sitios
con Liberación de Petroderivados), sentando la base de lo que sería el auge actual del análisis
de riesgo.

El criterio RBCA (o “Rebecca”, como se lo suele denominar), es una integración del estudio
preliminar ambiental y monitoreo, en combinación con prácticas de evaluación de riesgo y
exposición recomendadas por la USEPA..
El proceso RBCA se implementa escalonadamente, con niveles de sofisticación creciente de
colección y análisis de datos. Las suposiciones propias de los primeros escalones del proceso
se ven reemplazadas en etapas posteriores por datos e información específica del sitio.

Las primeras etapas (TIER I) son más conservadoras, y consideran diversos parámetros
estándar para el sitio, estableciendo consecuentemente niveles objetivo conservadores (RBSLs,
Risk-Based Screening Levels, Niveles de Evaluación/Selección Basados en Riesgo).

En las etapas posteriores (TIER II, TIER III), muchas de las suposiciones previas son
reemplazadas con datos específicos, como la permeabilidad, contenido de carbono orgánico en
suelo, etc. De éste modo se acotan los niveles objetivo (SSTLs, Site Specific Target Levels,
Niveles Objetivo Específicos del Sitio), dado que se reduce el nivel de incertidumbre, con la
introducción de datos reales que reemplazan las suposiciones conservadoras.

Según el resultado del análisis de cada etapa del proceso, el analista evalúa la necesidad de
continuar los estudios hacia los escalones siguientes.

El proceso de análisis de riesgo (RBCA) descrito por ASTM consiste de 6 pasos fundamentales:

1. Evaluación Preliminar del Sitio


2. CLASIFICACIÓN DEL SITIO
3. Evaluación TIER I
4. Evaluación TIER II
5. Evaluación TIER III
6. Acción Correctiva

En cualquier instancia puede procederse a una etapa posterior, mas nunca a una inferior. El
motivo del escalonamiento es la distribución eficiente de recursos, ya que las etapas no solo
evolucionan en complejidad, sino que se ven asociadas a una incremento del costo de
implementación.

EVALUACIÓN DEL SITIO

Consiste en definir el o los químicos de interés, impactos ambientales evidentes (si existieran),
receptores ambientales y humanos potencialmente impactados (por ejemplo, trabajadores,
residentes, cuerpos y cursos de agua, etc.), y vias de transporte significativas (flujo subterráneo,
dispersión atmosférica, etc.), reunir información y documentación histórica relevante así como
un relevamiento visual del sitio. Éste estudio se corresponde a la aplicación de evaluaciones de
acción correctivas denominadas de Fase I, según guía de procedimientos ASTM E1527-00
“Standard Practice for Environmental Site Assessments: Phase 1 Environmental Site
Assessment Process”.

CLASIFICACIÓN DEL SITIO

Los sitios se clasifican según su urgencia para el requerimiento de acciones de respuesta


inmediata (como por ejemplo, el caso de un vuelco de camión). Asimismo, Se asignan los
escenarios propios del caso bajo estudio. Ésta clasificación debiera constituir un proceso
dinámico, y la prioridad asignada debe ser revisada conforme evolucionen las acciones
practicadas y la información recopilada.

EVALUACIÓN TIER I
Se utiliza una tabla de niveles guía, siguiendo un criterio “pasa / no pasa”, para determinar si las
condiciones del sitio satisfacen los criterios para un cierre rápido ante la autoridad de aplicación
o ameritan un estudio más profundo. Se presentan en dicha tabla concentraciones en agua,
suelo y vapores para múltiples escenarios y compuestos y tipos de hidrocarburos (naftas,
gasoil, etc.). Los RBSLs usados en las tablas de TIER I se desarrollan a partir de escenarios de
exposición estándar, siguiendo datos toxicológicos y de exposición máxima razonable (RME,
Reasonable Maximum Exposure) recomendados por la USEPA. Los valores RBSL suelen
presentarse como rangos de valores, según el rango de riesgos o usos de la propiedad.

EVALUACIÓN TIER II

La evaluación TIER II provee la opción de determinar SSTLs y puntos de cumplimiento. Es


importante destacar que tanto el análisis de tipo TIER I como el TIER II se basan en el logro de
niveles similares de protección al hombre y al ambiente (por ejemplo, I.C.L.R de 10-4 o 10-6). Sin
embargo, en la evaluación TIER II, las suposiciones no específicas del sitio y puntos de
exposición del TIER I son reemplazados por variables e información reales. Más aún, ésta
etapa requerirá una evaluación más profunda del sitio (ensayos intrusivos como recolección de
muestras, etc.). Las ecuaciones de cálculo utilizadas para la determinación de los RBSLs
pueden incluso ser utilizadas para la determinación de los SSTLs, sustituyendo la información
“estándar” por la específica del sitio. Éstos requisitos adicionales de información a menudo
resultan útiles para el modelaje de transporte y destino de contaminantes (Fate and Transport
Models).

EVALUACIÓN TIER III

La evaluación TIER III requiere en general un incremento notable de esfuerzo para su


ejecución, dado que involucra evaluaciones probabilísticas y modelos más sofisticados de
transporte y destino de compuestos de interés, así como otros análisis complejos, y sucede en
detalle, complejidad y costo a la evaluación TIER II.

El costo de ésta etapa se evalúa en contraposición al de la medida correctiva que determina el


TIER II, a los fines de convalidar su aplicación, por costo-beneficio.

PROGRAMA DE ACCIÓN CORRECTIVA

La última etapa del proceso RBCA permite identificar medios costo-eficientes para el logro de
las metas correctivas fijadas. Ésta etapa incluye programas de atenuación natural, la
implementación de controles institucionales, o acciones de remediación.

Si las concentraciones de COCs en el sitio sobrepasan los RBSLs y SSTLs en el punto de


cumplimiento (PC, Point of Compliance) o en el área fuente, o ambos, y se determina que el
nivel RBSL o SSTL deberá ser utilizado como valor objetivo de acciones de remediación, se
desarrollará un plan de acciones correctiva o de remediación (RAP, Remedial Action Plan) a fin
de reducir el potencial para impactos adversos. Ante ésta situación, podrán reducirse las
concentraciones de los compuestos químicos de interés a valores menores o iguales a los
niveles objetivo, o podrá acotarse (o eliminarse) la exposición mediante controles institucionales
o de ingeniería adecuados al caso. A tal efecto, debe recordarse la pirámide del riesgo:
FUENTE

RIESGO

VIA DE RECEPTOR
TRANSPORTE

El riesgo se basa en tres pilares, sin alguno de los cuales cesa su existencia. El riesgo puede
eliminarse tanto por la eliminación de la fuente (concepción clásica), como por la eliminación del
receptor, o la eliminación de la vía de transporte. Los últimos dos conceptos a menudo suscitan
dudas, debido al planteo que el alejamiento del receptor o eliminación de la vía de transporte no
soluciona la causa de origen, si bien éstas acciones sirven para la mitigación de un impacto y
para la consideración de acciones correctivas inmediatas.

Por ejemplo, ante la liberación de amoníaco en una planta, se puede evacuar a los obreros
(receptores) para evitar el riesgo, o se pueden suministrar equipos de respiración autónoma o
máscaras de gas (que cortarán la vía de transporte principal: la aérea). Esto no implica que el
vuelco pueda prescindir de una respuesta de emergencia y acciones correctivas, a fin de
eliminar la fuente.

Otro ejemplo podría suponer la perforación accidental de la capa de arcillas que divide un
acuífero libre de mala calidad (no potable) de uno confinado o semiconfinado de mejor calidad
(como puede ser el caso de los acuíferos Pampeano y Puelches). Dicha perforación crearía una
vía preferencial de migración de contaminantes y afectaría al acuífero de buena calidad. El
agregado de un sello con bentonita y cemento evitaría el riesgo de contaminación, eliminando la
vía de transporte (la perforación que une ambos acuíferos), y se consideraría una medida
efectiva para la eliminación definitiva del riesgo asociado.

Es de común aceptación la presentación de análisis de riesgo como sistemas de planillas de


cálculo, dado que los fundamentos de origen para el cálculo de las tablas de comparación
(RBSL –Risk Based Screening Levels- o SSTL –Site Specific Target Levels-) se sustentan en
diversos cálculos toxicológicos y modelísticos. Éstas permiten tanto la estimación de niveles de
riesgo, como el análisis inverso, para determinar qué nivel objetivo llevará a un nivel
predeterminado y aceptable de riesgo, y están diseñados para completar todos los cálculos
requeridos para análisis TIER I y TIER II según el proceso de planeamiento ASTM RBCA.
Siguiendo datos específicos del sitio provistos por el analista ambiental, el análisis de RBCA
combina el modelaje de transporte y destino y las funciones de caracterización de riesgo para
completar las siguientes tareas:

 Concentraciones de exposición
 Ingesta media diaria
 Niveles de riesgo base
 Niveles Objetivo Basados en Riesgo
Comúnmente se utiliza un sistema de modelos analíticos vinculados a bases de datos internas
de factores estándar de exposición y datos químicos y toxicológicos para diversos compuestos.
Las hojas de cálculo RBCA calculan tanto los niveles de riesgo base, o niveles objetivo para
todas las vías completas de exposición identificadas por el usuario.

Los pasos principales de cálculo son los siguientes:

 Concentraciones de exposición: Basadas en concentraciones representativas de los


COCs presentes en el medio afectado de la zona fuente, las concentraciones máximas en
régimen estable en el punto de exposición (POE) se calculan usando los modelos
analíticos de transporte y destino identificados en el Apéndice X.2 de la norma ASTM E-
1739. Para la realización de éstos cálculos, se evalúa la partición entre fases (por
ejemplo, volatilización desde el suelo al aire) y transporte lateral desde la fuente al POE
(por ejemplo, transporte de contaminantes por vía aérea o por migración en agua
subsuperficial). Los tipos de fuente y vias de exposición opcionales incluídas se sintetizan
a continuación:

Tipo de Fuente Vía de Exposición


Suelos Superficiales Inhalación de Volátiles y Particulados
Contacto Dérmico con el Suelo
Ingesta de Suelo y Polvo
Lixiviado a Agua Subsuperficial/Ingesta
Suelos Subsuperficiales Inhalación de Volátiles
Lixiviado a Agua Subsuperficial/Ingesta
Agua Subterránea Ingesta de Agua
Inhalación de Volátiles

 Ingesta Media Diaria: En base a los factores de exposición seleccionados, se calcula la


dosis media diaria de químicos para cada receptor y vía de exposición conforme a
lineamientos EPA (Connor et al., 1995). Éstos valores se utilizan en los cálculos de riesgo
base para cada vía de transporte completa.

 Caracterización de Riesgo Base: Los riesgos a la salud humana asociados a la


exposición a COCs se calculan sobre la base de las dosis medias diarias y los parámetros
toxicológicos para efectos carcinogénicos y no carcinogénicos. Para cada vía de
exposición completa, se calculan tanto los resultados individuales como los acumulados,
para cada químico de interés cancerígeno o no cancerígeno.
 Niveles Objetivo de Remediación: El sistema de cálculo para análisis RBCA tiene la
capacidad de 1) comparar datos del sitio contra RBSLs (Risk Based Screening Levels) de
TIER I, computados éstos utilizando parámetros pre-ingresados según se detalla en
ASTM E-1739, o 2) calcular niveles específicos SSTL (Site Specific Target Levels) de
TIER II basados en información de caracterización del sitio provista por el usuario. Para
cada medio fuente afectado (por ejemplo, agua subsuperficial, o suelo) el programa
informa las concentraciones objetivo para todas las rutas de exposición identificadas e
identifica los valores objetivo aplicables (mínimos) para la remediación del área fuente.

SELECCIÓN DE PARÁMETROS

En referencia a los valores a especificar para los parámetros de ingreso, dichos parámetros,
requeridos para cada modelo de transporte y destino (fate and transport), pueden agruparse en
las siguientes categorías:

 Medición de Valores Específicos del Sitio: Se requieren para los parámetros que 1)
exhiben un grado de variabilidad amplio en el sitio (o sea, en órdenes de magnitud) y que
pueden afectar en forma significativa las predicciones del modelo, y 2) requieren de una
caracterización debido a la falta de datos o mediciones específicas del sitio. Por ejemplo,
la conductividad hidráulica, gradiente hidráulico, dimensiones del área fuente, etc.
 Estimación de Parámetros Razonables: Son indicados para parámetros que 1) exhiben
un grado moderado de variabilidad -menos de 100%- y 2) pueden ser caracterizados
sobre la base de estimados genéricos sin producir modificaciones sustanciales a las
predicciones modeladas. Algunos ejemplos incluyen la porosidad del suelo, el peso del
suelo, y contenido volumétrico de aire y humedad, etc.
 Valores de Parámetros Químico Específicos: Propiedades físicas y químicas de los
compuestos de interés ,que deberán ser caracterizados sobre la base de valores
publicados por laboratorios. Ejemplos de ellos incluyen la Cte. De Henry, Coeficientes de
difusión en aire y agua, y Coeficientes de partición o sorción carbono-agua u octanol-agua
(KOC, KOW).

GUÍAS PARA EL MODELAJE

Las siguientes guías se aplican en general al común de modelos analíticos utilizados para la
caracterización de condiciones de exposición crónica.

Modelos de Volatilización: Éstos definen la razón de concentraciones, en régimen estable,


entre el aire en el POE y la concentración en el suelo o agua subyacente en el área fuente.

Modelos de Lixiviado suelo-a-agua subterránea: Siguiendo los lineamientos del apéndice


X.2 de la norma ASTM E-1739, un factor de atenuación por dilución puede calcularse como el
producto de 1) un factor de dilución de lixiviado a agua subterránea dividido por 2) un
coeficiente de partición de lixiviado de suelo, lo que provee una relación de régimen
estacionario entre la concentración de un COC en la masa de suelo afectada y la
concentración resultante en la zona capilar subyacente del agua subterránea. Éste modelo es
aplicable tanto a contaminantes orgánicos como inorgánicos, debiendose tener la precaución de
elegir la ecuación adecuada para la estimación del coeficiente de sorción suelo-agua.

Modelos de Transporte Lateral de Agua Subsuperficial: Para considerar la atenuación de


concentraciones en agua afectada entre la fuente y el POE, el modelo analítico de Domenico es
de común aplicación en los procesos de análisis RBCA. El modelo utiliza una fuente de
penetración en plano vertical completa o parcial, perpendicular a la dirección de flujo, para
simular la liberación de compuetos orgánicos desde la zona de mezcla al agua subterránea.
Una vez en el flujo del agua subterránea, el modelo considera las fuerzas de advección,
dispersión, sorción y biodegradación. Siguiendo una concentración representativa de cada COC
en el área fuente, el modelo puede predecir las concentraciones de la pluma en régimen
estacionario aguas abajo de la fuente. Otra versión útil de éste modelo es provista por el
software “BIOSCREEN” 1.4, modelo desarrollado para el Centro de la Fuerza Aérea para la
Excelencia Ambiental (AFCEE), de la base aérea Broks en San Antonio, Texas, EE.UU.. El
modelo predice las concentraciones a lo largo del eje de la pluma, y considera al receptor (POE)
como ubicado aguas abajo sobre éste mismo eje.

Modelos de Transporte Lateral en Aire: Los sistemas de cálculo para análisis RBCA incluyen
en general un modelo de dispersión gausiano tridimensional a fin de considerar la migración de
contaminantes aéreos desde el área fuente a un receptor ubicado viento abajo. Comúnmente,
el modelo incorpora dos suposiciones conservadoras, a saber, 1) la altura de la zona fuente es
equivalente a la “zona de respiración” (altura a la que respira un ser humano) y 2) un receptor
ubicado exactamente viento abajo en forma ininterrumpida. El factor de atenuación natural para
la via de transporte se calcula como la relación, en régimen estacionario, entre la concentración
del área fuente en el suelo afectado y la concentración, en el POE ubicado viento abajo, de
vapores orgánicos ambientales o particulados. El modelo requerirá el ingreso de datos
referentes a las dimensiones y concentración de COCs en la zona fuente de suelo afectado, así
como velocidad media del viento y coeficientes de dispersión vertical y horizontal para el cálculo
de los concentraciones de COCs derivadas en el aire ambiente del POE.

CONCLUSIONES

En base a lo expuesto, se considera que la metodología RBCA constituye una herramienta de


extrema utilidad para la ingeniería ambiental, por cuanto permite la estimación del riesgo en un
punto de exposición, asociado a un impacto en el área fuente, o bien la determinación de
concentraciones objetivo que llevarán a un nivel de riesgo aceptable.

Ésta caracterización de riesgo permite una priorización de sitios y asegura un cumplimiento


ordenado y eficiente de las acciones, permitiendo una adecuada asignación de recursos y
dando mayor importancia a las situaciones que requieren atención prioritaria.

A su vez, ésta metodología se encuentra respaldada por un marco normativo sólido, basado en
la Norma madre emitida por ASTM (E1739-95), y adoptada por la mayoría de los Estados
Norteamericanos como base para las guías locales de análisis de riesgo. En el país, la difusión
internacional de ésta herramienta ha suscitado el interés general en el tema, y diversas normas
han dado aplicación a la metodología RBCA. Entre ellas, vale destacar el cuaderno de trabajo
IRAM 29550, la Ley Nacional 25.612, y el De. 592/02 de la Pcia. de Santa Fé.

El futuro de ésta metodología es prometedor, y hoy los resultados logrados y la experiencia


acumulada nos permiten asegurar que el análisis de riesgo se constituye como una herramienta
indispensable en el campo de la ingeniería ambiental. Esperamos por medio de seminarios,
congresos, foros, etc., se concientice acerca del valor que reside en el uso y aplicación de éste
concepto, y se contribuya a la radicación definitiva del RBCA dentro del marco normativo
nacional.
Evaluación Preliminar del Sitio
Se lleva a cabo una invest igación del sit io para organizar la
información exist ent e referent e a químicos de int erés, ext ensión del
PASO 1
medio afect ado, vías de migración preferenciales y recept ores.

Clasificación del Sitio y Acción de Respuesta


Acción Correctiva Interina
Se clasifica el sit io según los escenarios especificados y se implement a
Llevar a cabo una remoción parcial de la fuent e PASO 2
la acción de respuest a necesaria. El sit io se reclasificará
para reducir el riesgo y la clasificación del sit io..
cont inuament e según la información recabada.

Evaluación TIER I
Se ident ifican fuent es posibles, vías de t ransport e y de exposición. Se
seleccionan los niveles RBSL apropiados de las t ablas guía para
PASO 3
T IER I. Se comparan ést os valores cont ra las condiciones del sit io

No ¿Los compue stos de


Sí ¿ Es factible una
No ¿Son apropiadas

interés superan los re media c ión hasta los acciones correctivas PASO 4
RBSLs? niveles RBSL? interinas?

Sí No
Evaluación TIER II
Se recolect a la información complement aria requerida. Se siguen los PASO 5
procedimient os propios de la evaluación T IER II, y se comparan las
condiciones del sit io con los niveles SST L de las t ablas para T IER II

No Sí No Sí
¿Los compue stos de ¿ Es factible una ¿Son apropiadas
interés superan los re media c ión hasta los acciones correctivas PASO 6
SSTLs? niveles SSTL? interinas?

Sí No

Evaluación TIER III


Se recolect a la información complement aria requerida. Se siguen los PASO 7
procedimient os propios de la evaluación T IER III, y se comparan las
condiciones del sit io con los niveles SST L de las t ablas para T IER III

No Sí Sí
¿Los compue stos de ¿Son apropiadas
interés superan los acciones correctivas
PASO 8
SSTLs? interinas?

No
Programa de Acción Correctiva
Se ident ifican medios cost o-efect ivos para las met as de acción
correct iva, incluyendo at enuación nat ural, cont roles inst it ucionales y/o
remediación . Se implement a la alt ernat iva más convenient e.
PASO 9

No
¿Se requiere continuar
con el monitore o?

Monitoreo
Llevar a cabo programa de monit oreo según se requiera, para No se requiere acción post erior PASO 10
confirmar que se sat isfacen los objet ivos de acción correct iva
REFERENCIAS

“El Riesgo Aceptable: Ciencia y Seguridad” (“Of Acceptable Risk”) – Ediciones Tres Tiempos –
William W. Lawrence – Los Altos, California, EE.UU., 1976

“Parameter Estimation Guidelines for RBCA Modelling” - NGWA Petroleum Hydrocarbons


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American society for Testing and Materials, 2000, “Standard Practices for Environmental Site
Assessments: Phase 1 Environmental Site Assessment Process”, ASTM E-1527-00, West
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Connor, J.A., J.P. Nevin, R.T. Fisher, R.L. Bowers, y C.J. Newell, 1995a. RBCA Spreadsheet
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Connor, J.A., J.P. Nevin, M. Malander, C. Stanley, y G. DeVaull, 1995b. Tier 2 Guidance Manual
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