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Unidad 3. Remediación de Sitios Contaminados Con Hidrocarburos
Unidad 3. Remediación de Sitios Contaminados Con Hidrocarburos
SINOPSIS
Es una herramienta de dos vías, en el sentido que permite, definiendo previamente un nivel
aceptable de riesgo en un punto de exposición (POE, Point of Exposure), determinar los niveles
objetivo de Compuestos Químicos de Interés (COCs, Chemicals/Constituents of Concern) en el
área fuente.
Sin embargo, mientras la primera acepción de uso es fácil de comprender, la segunda requiere
definir la correspondencia a “nivel aceptable de riesgo”.
Según Definición ASTM E1527-00 “Standard Practice for Environmental Site Assessments: Phase 1
Environmental Site Assessment Process”: El término “Situación Ambiental Reconocida” se refiere a la
presencia posible o real de cualquier sustancia peligrosa o derivado de petróleo en una propiedad, bajo
condiciones que indiquen un pérdida presente o pasada, o un riesgo inminente de pérdida de cualquier
sustancia peligrosa o derivado del petróleo hacia las estructuras de la propiedad o hacia el suelo o agua
subterránea o superficial de la propiedad.
En cuanto al tipo de compuestos, existe una gran divisoria entre los compuestos cancerígenos y
los no cancerígenos. Esto ha derivado en la estandarización de dos escalas independientes de
riesgo, a saber, el índice de riesgo (Hazard Quotient, HQ) para los compuestos no
cancerígenos, y el nivel de riesgo incremental de cáncer (Incremental Carcinogenic Risk Level,
I.C.R.L.), para los carcinógenos.
El primero se define, según estándar ASTM E-1739-95 “Standard Guide for Risk-Based
Corrective Action Applied at Petroleum Release Sites”, como la razón entre el nivel de
exposición a una químico de interés durante un período de tiempo determinado y la dosis de
referencia para dicho químico, derivada para un período de tiempo de exposición similar; en
tanto que el I.C.R.L. se define como el potencial para incrementar efectos carcinognénicos a la
salud humana debido a la exposición a químicos de interés.
El I.C.R.L., por su parte y en el mismo contexto, varía entre cero y un valor que se sitúa
correspondientemente entre 1.10-4, 1.10-5 o 1.10-6. Éstos tres valores dependen de cuan
conservador se quiera ser, y suelen estar ligados al riesgo mismo de ocurrencia de un impacto
(cantidad de vías de exposición, tipo de zonificación, etc.). El I.C.R.L. es un concepto
estadístico. Un nivel de 1.10-N indica que se considera que hasta un caso de cáncer cada 10N
habitantes es producto de causas ajenas (cigarrillo, radiación, etc.). Casos adicionales por
sobre ese umbral serán atribuidos al escenario bajo estudio. Estadísticamente, se considera
que un caso de cáncer cada 10.000, 100.000 o 1.000.000 de habitantes (según el criterio de
riesgo elegido) se debe a causas “naturales” o “ajenas” sobre las que no se tiene control; por
ello, ese umbral constituye el rango de riesgo aceptable.
En la Argentina, el uso del análisis de riesgo ha cobrado importancia en los últimos años debido
al auge internacional de ésta herramienta y al gran potencial de aplicación dentro de la
problemática nacional, más aún considerando las siempre difíciles tareas de asignación de
recursos, planeamiento estratégico y toma de decisiones.
Cabe señalar al respecto, la incorporación de los criterios de RBCA a nivel nacional, en diversas
normas, como en el cuaderno de trabajo IRAM 29550, que define el uso de análisis de riesgo
para sitios con derrames de hidrocarburos; la Ley Nacional Nº 25612, que menciona el análisis
de riesgo como criterio para la gestión de residuos, o el Decreto Nº 592/02 de la Provincia de
Santa Fe.
En el año 1995, ASTM (American Society for Testing and Materials) publicó y adoptó la Norma
ASTM E1739-95, “Standard Guide for Risk-Based Corrective Action Applied at Petroleum
Release Sites” (Guía Estándar para Acciones Correctivas Basadas en Riesgo Aplicadas a Sitios
con Liberación de Petroderivados), sentando la base de lo que sería el auge actual del análisis
de riesgo.
El criterio RBCA (o “Rebecca”, como se lo suele denominar), es una integración del estudio
preliminar ambiental y monitoreo, en combinación con prácticas de evaluación de riesgo y
exposición recomendadas por la USEPA..
El proceso RBCA se implementa escalonadamente, con niveles de sofisticación creciente de
colección y análisis de datos. Las suposiciones propias de los primeros escalones del proceso
se ven reemplazadas en etapas posteriores por datos e información específica del sitio.
Las primeras etapas (TIER I) son más conservadoras, y consideran diversos parámetros
estándar para el sitio, estableciendo consecuentemente niveles objetivo conservadores (RBSLs,
Risk-Based Screening Levels, Niveles de Evaluación/Selección Basados en Riesgo).
En las etapas posteriores (TIER II, TIER III), muchas de las suposiciones previas son
reemplazadas con datos específicos, como la permeabilidad, contenido de carbono orgánico en
suelo, etc. De éste modo se acotan los niveles objetivo (SSTLs, Site Specific Target Levels,
Niveles Objetivo Específicos del Sitio), dado que se reduce el nivel de incertidumbre, con la
introducción de datos reales que reemplazan las suposiciones conservadoras.
Según el resultado del análisis de cada etapa del proceso, el analista evalúa la necesidad de
continuar los estudios hacia los escalones siguientes.
El proceso de análisis de riesgo (RBCA) descrito por ASTM consiste de 6 pasos fundamentales:
En cualquier instancia puede procederse a una etapa posterior, mas nunca a una inferior. El
motivo del escalonamiento es la distribución eficiente de recursos, ya que las etapas no solo
evolucionan en complejidad, sino que se ven asociadas a una incremento del costo de
implementación.
Consiste en definir el o los químicos de interés, impactos ambientales evidentes (si existieran),
receptores ambientales y humanos potencialmente impactados (por ejemplo, trabajadores,
residentes, cuerpos y cursos de agua, etc.), y vias de transporte significativas (flujo subterráneo,
dispersión atmosférica, etc.), reunir información y documentación histórica relevante así como
un relevamiento visual del sitio. Éste estudio se corresponde a la aplicación de evaluaciones de
acción correctivas denominadas de Fase I, según guía de procedimientos ASTM E1527-00
“Standard Practice for Environmental Site Assessments: Phase 1 Environmental Site
Assessment Process”.
EVALUACIÓN TIER I
Se utiliza una tabla de niveles guía, siguiendo un criterio “pasa / no pasa”, para determinar si las
condiciones del sitio satisfacen los criterios para un cierre rápido ante la autoridad de aplicación
o ameritan un estudio más profundo. Se presentan en dicha tabla concentraciones en agua,
suelo y vapores para múltiples escenarios y compuestos y tipos de hidrocarburos (naftas,
gasoil, etc.). Los RBSLs usados en las tablas de TIER I se desarrollan a partir de escenarios de
exposición estándar, siguiendo datos toxicológicos y de exposición máxima razonable (RME,
Reasonable Maximum Exposure) recomendados por la USEPA. Los valores RBSL suelen
presentarse como rangos de valores, según el rango de riesgos o usos de la propiedad.
EVALUACIÓN TIER II
La última etapa del proceso RBCA permite identificar medios costo-eficientes para el logro de
las metas correctivas fijadas. Ésta etapa incluye programas de atenuación natural, la
implementación de controles institucionales, o acciones de remediación.
RIESGO
VIA DE RECEPTOR
TRANSPORTE
El riesgo se basa en tres pilares, sin alguno de los cuales cesa su existencia. El riesgo puede
eliminarse tanto por la eliminación de la fuente (concepción clásica), como por la eliminación del
receptor, o la eliminación de la vía de transporte. Los últimos dos conceptos a menudo suscitan
dudas, debido al planteo que el alejamiento del receptor o eliminación de la vía de transporte no
soluciona la causa de origen, si bien éstas acciones sirven para la mitigación de un impacto y
para la consideración de acciones correctivas inmediatas.
Por ejemplo, ante la liberación de amoníaco en una planta, se puede evacuar a los obreros
(receptores) para evitar el riesgo, o se pueden suministrar equipos de respiración autónoma o
máscaras de gas (que cortarán la vía de transporte principal: la aérea). Esto no implica que el
vuelco pueda prescindir de una respuesta de emergencia y acciones correctivas, a fin de
eliminar la fuente.
Otro ejemplo podría suponer la perforación accidental de la capa de arcillas que divide un
acuífero libre de mala calidad (no potable) de uno confinado o semiconfinado de mejor calidad
(como puede ser el caso de los acuíferos Pampeano y Puelches). Dicha perforación crearía una
vía preferencial de migración de contaminantes y afectaría al acuífero de buena calidad. El
agregado de un sello con bentonita y cemento evitaría el riesgo de contaminación, eliminando la
vía de transporte (la perforación que une ambos acuíferos), y se consideraría una medida
efectiva para la eliminación definitiva del riesgo asociado.
Concentraciones de exposición
Ingesta media diaria
Niveles de riesgo base
Niveles Objetivo Basados en Riesgo
Comúnmente se utiliza un sistema de modelos analíticos vinculados a bases de datos internas
de factores estándar de exposición y datos químicos y toxicológicos para diversos compuestos.
Las hojas de cálculo RBCA calculan tanto los niveles de riesgo base, o niveles objetivo para
todas las vías completas de exposición identificadas por el usuario.
SELECCIÓN DE PARÁMETROS
En referencia a los valores a especificar para los parámetros de ingreso, dichos parámetros,
requeridos para cada modelo de transporte y destino (fate and transport), pueden agruparse en
las siguientes categorías:
Medición de Valores Específicos del Sitio: Se requieren para los parámetros que 1)
exhiben un grado de variabilidad amplio en el sitio (o sea, en órdenes de magnitud) y que
pueden afectar en forma significativa las predicciones del modelo, y 2) requieren de una
caracterización debido a la falta de datos o mediciones específicas del sitio. Por ejemplo,
la conductividad hidráulica, gradiente hidráulico, dimensiones del área fuente, etc.
Estimación de Parámetros Razonables: Son indicados para parámetros que 1) exhiben
un grado moderado de variabilidad -menos de 100%- y 2) pueden ser caracterizados
sobre la base de estimados genéricos sin producir modificaciones sustanciales a las
predicciones modeladas. Algunos ejemplos incluyen la porosidad del suelo, el peso del
suelo, y contenido volumétrico de aire y humedad, etc.
Valores de Parámetros Químico Específicos: Propiedades físicas y químicas de los
compuestos de interés ,que deberán ser caracterizados sobre la base de valores
publicados por laboratorios. Ejemplos de ellos incluyen la Cte. De Henry, Coeficientes de
difusión en aire y agua, y Coeficientes de partición o sorción carbono-agua u octanol-agua
(KOC, KOW).
Las siguientes guías se aplican en general al común de modelos analíticos utilizados para la
caracterización de condiciones de exposición crónica.
Modelos de Transporte Lateral en Aire: Los sistemas de cálculo para análisis RBCA incluyen
en general un modelo de dispersión gausiano tridimensional a fin de considerar la migración de
contaminantes aéreos desde el área fuente a un receptor ubicado viento abajo. Comúnmente,
el modelo incorpora dos suposiciones conservadoras, a saber, 1) la altura de la zona fuente es
equivalente a la “zona de respiración” (altura a la que respira un ser humano) y 2) un receptor
ubicado exactamente viento abajo en forma ininterrumpida. El factor de atenuación natural para
la via de transporte se calcula como la relación, en régimen estacionario, entre la concentración
del área fuente en el suelo afectado y la concentración, en el POE ubicado viento abajo, de
vapores orgánicos ambientales o particulados. El modelo requerirá el ingreso de datos
referentes a las dimensiones y concentración de COCs en la zona fuente de suelo afectado, así
como velocidad media del viento y coeficientes de dispersión vertical y horizontal para el cálculo
de los concentraciones de COCs derivadas en el aire ambiente del POE.
CONCLUSIONES
A su vez, ésta metodología se encuentra respaldada por un marco normativo sólido, basado en
la Norma madre emitida por ASTM (E1739-95), y adoptada por la mayoría de los Estados
Norteamericanos como base para las guías locales de análisis de riesgo. En el país, la difusión
internacional de ésta herramienta ha suscitado el interés general en el tema, y diversas normas
han dado aplicación a la metodología RBCA. Entre ellas, vale destacar el cuaderno de trabajo
IRAM 29550, la Ley Nacional 25.612, y el De. 592/02 de la Pcia. de Santa Fé.
Evaluación TIER I
Se ident ifican fuent es posibles, vías de t ransport e y de exposición. Se
seleccionan los niveles RBSL apropiados de las t ablas guía para
PASO 3
T IER I. Se comparan ést os valores cont ra las condiciones del sit io
Sí No
Evaluación TIER II
Se recolect a la información complement aria requerida. Se siguen los PASO 5
procedimient os propios de la evaluación T IER II, y se comparan las
condiciones del sit io con los niveles SST L de las t ablas para T IER II
No Sí No Sí
¿Los compue stos de ¿ Es factible una ¿Son apropiadas
interés superan los re media c ión hasta los acciones correctivas PASO 6
SSTLs? niveles SSTL? interinas?
Sí No
No Sí Sí
¿Los compue stos de ¿Son apropiadas
interés superan los acciones correctivas
PASO 8
SSTLs? interinas?
No
Programa de Acción Correctiva
Se ident ifican medios cost o-efect ivos para las met as de acción
correct iva, incluyendo at enuación nat ural, cont roles inst it ucionales y/o
remediación . Se implement a la alt ernat iva más convenient e.
PASO 9
No
¿Se requiere continuar
con el monitore o?
Sí
Monitoreo
Llevar a cabo programa de monit oreo según se requiera, para No se requiere acción post erior PASO 10
confirmar que se sat isfacen los objet ivos de acción correct iva
REFERENCIAS
“El Riesgo Aceptable: Ciencia y Seguridad” (“Of Acceptable Risk”) – Ediciones Tres Tiempos –
William W. Lawrence – Los Altos, California, EE.UU., 1976
American society for Testing and Materials, 1995, “Standard Guide for Risk-Based Corrective
Action Applied at Petroleum Release Sites”, ASTM E-1739-95, Philadelphia, PA, EE.UU.
American society for Testing and Materials, 2000, “Standard Practices for Environmental Site
Assessments: Phase 1 Environmental Site Assessment Process”, ASTM E-1527-00, West
Conshohocken, PA, EE.UU.
Connor, J.A., J.P. Nevin, R.T. Fisher, R.L. Bowers, y C.J. Newell, 1995a. RBCA Spreadsheet
System and Modelling Guidelines Version 1.0, Groundwater Services Inc., Houston, Texas,
EE.UU.
Connor, J.A., J.P. Nevin, M. Malander, C. Stanley, y G. DeVaull, 1995b. Tier 2 Guidance Manual
for Risk Based Corrective Action, Groundwatrer Services Inc., Houston, Texas, EE.UU.
Domenico, P.A. y F. W. Schwartz, 1990. Physical and Chemical Hydrogeology, Wiley, New
York, NY, EE.UU.