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También el apóstol Pablo dio relevancia al amor cuando escribió en 1ª de Corintios 13 que todo lo que hacemos y decimos
debe estar fundamentado en el amor, sin él, todo es inútil, podemos leer en el verso 7 que el amor: todo lo sufre, todo lo
cree, todo lo espera, todo lo soporta.
Todos los seres humanos tenemos la capacidad de expresar el amor de distintas maneras, a esto se le llama “los lenguajes
del amor”. Como cristiano, el niño debe conocer cuáles son estos lenguajes, y como puede expresarlos y a quien van
dirigidos, dando con ello testimonio de que Cristo mora en su corazón.
VERDADES BIBLICAS.
Este contacto se da y se recibe de manera afirmativa, es decir que, quien lo da y quien lo recibe, debe estar de acuerdo en
aceptarlo y su intensidad dependerá del grado de confianza, de la personalidad e incluso de la manera en que
fueron educados quienes practiquen este tipo de lenguaje del amor.
Un apretón de manos, un abrazo, un toque por medio del cual alguien quiera demostrar afecto, amistad o amor debe ser
aceptado por la otra parte, pero también debe ser entendido si hay un rechazo.
Es recomendable que Usted, como padre o madre, practique este lenguaje del amor con su hijo (a), para reforzar una
relación familiar sana.
“Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya
entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer”. 1ª de
Corintio 1:10
Es el uso de palabras para expresar amor, cariño, ánimo, respeto, admiración y aceptación… generalmente este tipo de
lenguaje del amor es más aceptado entre quien lo da y lo recibe, pero debe ser sincero (decir lo que sientes), debe ser
amable (sin adulación ni sarcasmo).
Decirles a tus hijos que estás orgulloso (a) de ellos, reconocer que han hecho bien las cosas, puede tener un gran efecto
positivo.
Por el contrario, usar palabras negativas, ofensivas, sarcásticas o hirientes, dejan huellas imborrables de dolor y fracaso en
el corazón de tus hijos.
“Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende
un pequeño fuego!
Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a la semejanza de Dios. De
una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así”. Santiago 3:5, 7, 9 y 10
EL LENGUAJE DE TIEMPO DE CALIDAD.
Es compartir nuestro tiempo con las personas que amamos, valorando su compañía y haciendo y compartiendo
actividades que fortalezcan la unión familiar, la amistad o el compañerismo.
Muchas veces se requiere solo una mejor organización de nuestras actividades, decir que “no tenemos tiempo”
para pasar tiempo de calidad con nuestros seres amados, demuestra falta de amor, de interés e incapacidad para
darle la prioridad a las cosas que la tienen.
No permita que sus hijos pasen tiempo con personas que pueden ser una influencia negativa en su vida.
“Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo,
porque los días son malos”. Efesios 5:15 y 16
Los regalos no siempre tratan del precio, sino más bien de lo que significa el tiempo y el esfuerzo de buscar algo
que a la otra persona sabes le gustará”. No importa si el regalo es grande o pequeño, siempre y cuando tenga que
ver con la persona a quien se le brinda. Por ejemplo, puede dejar pequeños notitas con mensajes en lugares
inesperados, dar un presente hecho por usted, etc.
“¿Qué padre de vosotros, si su hijo le pide pan, le dará una piedra? ¿o si pescado, en lugar de pescado, le dará
una serpiente? ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión? Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas
dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?”
Lucas 11:12 y 13
Las personas que tienen este lenguaje demuestran su amor a través de un servicio útil o favor.
Por más sencilla que pueda parecer esta la actividad, es de gran importancia ya que, al final puede estar sacando
a la otra persona de algún apuro o de alguna situación difícil.
Sus hijos pueden practicar este lenguaje del amor realizando tareas de la casa, haciendo un favor a alguien que
lo necesite, o enseñarle alguna actividad que le pueda traer algún beneficio (un oficio, explicarle alguna tarea
escolar, brindarle compañía, etc).
El primer paso para una convivencia armoniosa es conocer lo que le gusta y lo que no le gusta a la persona con que
vamos a practicar cualquiera de los lenguajes del amor.
A veces la pareja te va a pedir algo que aún no sabe usted dar, y para eso se necesita mucha tolerancia, afecto y sobre
todo amor, para aprender y comprender lo que pide.
Conozca y practique a detalle cada uno de los lenguajes del amor, ya que se puede aprender a manifestarlos en mayor
medida a través de acciones sencillas.
TE INVITAMOS A QUE COMENTES ESTE RESUMEN CON TUS HIJOS Y NO TE OLVIDES DE LEER LA
PALABRA DE DIOS Y DE ORAR.