Serie: Discipulado de honra y generosidad

Tema: Honra y generosidad producen gran multiplicación

Tema 11
Pbro. Eusebio Méndez
www.ccnven.net/site/discipulado

Honra y generosidad producen gran multiplicación

1. El valor de la honra

1.1. El significado bíblico de la palabra honra deriva del hebreo kabôd que indica
gloria. Honrar a Dios y a los padres, por ejemplo, implica alabar y estimarlos a
través de la obediencia, el respeto, la admiració n y la retribució n. Sinó nimos de
honra son: respeto, estima, gloria y admiració n.

1.2. La honra indica la preservació n de virtudes personales como: la rectitud, la

integridad y la decencia.

1.3. El significado bíblico de honra es "peso", se refiere a que la persona o personas a

quienes vas a honrar, tienen peso e importancia en tu vida.

2. Manifestando principios de honra a través de:

2.1. La obediencia. Cuando no hay obediencia no hay honra.

2.1.1. La honra no se exige, la honra se da de forma natural. Honra significa

mostrar respeto, consideració n hacia algo, realizar una prueba pú blica de
respeto, admiració n, estima hacia una persona, dar honra o distinció n a
algo o a alguien.

2.1.2. En la Biblia, en el libro de Génesis, encontramos la historia de Abraham y

su hijo Isaac. Aquí, se relatan los hechos de un hombre que decidió
obedecer y honrar a Dios por encima de todo, aun por encima de sus
propios intereses, al punto de tener que desprenderse de su hijo Isaac, el
hijo de la promesa.

2.1.3. Ese tipo de honra, donde se está dispuesto a dejar y a entregar todo, es la
honra y la obediencia que Dios está demandando de sus hijos.

2.2. Honramos a Dios presentándonos delante de él por completo, aunque nos

cueste sacrificio hacerlo. Así que, hermanos, os ruego por las misericordias de
Dios, que presentéis vuestros cuerpos en sacrificio vivo, santo, agradable a Dios, que
es vuestro culto racional. Romanos 12:1

2.3. Honramos a Dios trayendo alabanza. Salmos 50:23. El que sacrifica alabanza
me honrará…
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2.3.1. Apocalipsis 5:13. Y entonces oí a toda criatura en el cielo, en la tierra,

debajo de la tierra y en el mar que cantaban: «Bendición y honor y gloria y
poder le pertenecen a aquel que está sentado en el trono y al Cordero por
siempre y para siempre».

2.4. Honramos a Dios con el corazón, no solo de labios. Esto quiere decir sin
hipocresía, porque a lo que no se le pone el corazó n, es algo que no queremos
hacer realmente.

2.4.1. Dice, pues, el Señor: Porque este pueblo se acerca a mí con su boca, y con sus
labios me honra, pero su corazón está lejos de mí, y su temor de mí no es más
que un mandamiento de hombres que les ha sido enseñado. Isaías 29:13.

2.4.2. Hipócritas, bien profetizó de vosotros Isaías, cuando dijo: 8Este pueblo de
labios me honra; mas su corazón está lejos de mí. Mateo 15:7.

2.5. Honramos a Dios por medio de nuestro servicio. …Si alguno me sirviere, mi
Padre le honrará. Juan 12:26.

3. La honra y la generosidad siempre van unidas

3.1. La Sunamita practicó la honra con su generosidad. 2º Reyes 4:8-11.

Aconteció también que un día pasaba Eliseo por Sunem; y había allí una mujer
importante, que le invitaba insistentemente a que comiese; y cuando él pasaba por
allí, venía a la casa de ella a comer.  9  Y ella dijo a su marido: He aquí ahora, yo
entiendo que este que siempre pasa por nuestra casa, es varón santo de Dios.  10  Yo
te ruego que hagamos un pequeño aposento de paredes, y pongamos allí cama,
mesa, silla y candelero, para que cuando él viniere a nosotros, se quede en él. Y
aconteció que un día vino él por allí, y se quedó en aquel aposento, y allí durmió.

3.2. Ver. 17- 21. Mas la mujer concibió, y dio a luz un hijo el año siguiente, en el tiempo
que Eliseo le había dicho.
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3.3. Y el niño creció. Pero aconteció un día, que vino a su padre, que estaba con los
segadores;  19  y dijo a su padre: ¡Ay, mi cabeza, mi cabeza! Y el padre dijo a un
criado: Llévalo a su madre.  20  Y habiéndole él tomado y traído a su madre, estuvo
sentado en sus rodillas hasta el mediodía, y murió.  21  Ella entonces subió, y lo puso
sobre la cama del varón de Dios, y cerrando la puerta, se salió

3.3.1. Cuando lo vio muerto no se entregó a lo imposible, lo puso en la cama

de su generosidad.

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3.4. En momentos de crisis, no entro en desesperació n. No paró hasta ir al lugar

correcto para hablar de su problema (v: 24-26) Después hizo enalbardar el asna, y
dijo al criado: Guía y anda; y no me hagas detener en el camino, sino cuando yo te lo
dijere.  25  Partió, pues, y vino al varón de Dios, al monte Carmelo. Y cuando el varón
de Dios la vio de lejos, dijo a su criado Giezi: He aquí la sunamita.

3.4.1. Fue ante el varó n de Dios, no contó la situació n difícil a su esposo, no

reveló su angustia a Giezi.

3.5. La honra y la generosidad por revelación, siempre ahuyentarán la muerte y

la esterilidad. (vs36-37) Entonces llamó él a Giezi, y le dijo: Llama a esta
sunamita. Y él la llamó. Y entrando ella, él le dijo: Toma tu hijo.  37  Y así que ella
entró, se echó a sus pies, y se inclinó a tierra; y después tomó a su hijo, y salió.

3.6. La honra y la generosidad accionan lo profético para establecer vida y

orden. No acepta la muerte en su hijo.

3.7. Mantiene le enfoque correcto. (vs 24) Después hizo enalbardar el asna, y dijo al
criado: Guía y anda; y no me hagas detener en el camino, sino cuando yo te lo dijere.

4. Principios de generosidad. Siembra y cosecha.

4.1. La honra te lleva a la generosidad, esta te lleva a la siembra, y la siembra te lleva a

la cosecha de lo milagroso. Las cosechas no son obra de la casualidad, sino
producto de una inversió n siempre en fe y propó sito.

4.2. Siempre cosecharemos de acuerdo a la calidad de lo que sembramos. Gá latas

6:7. «No se engañen: de Dios nadie se burla. Cada uno cosecha lo que siembra.»

Lucas 6:38. «Den, y se les dará: se les echará en el regazo una medida llena,
apretada, sacudida y desbordante. Porque con la medida que midan a otros, se les
medirá a ustedes».»

4.3. Siempre cosecharemos de acuerdo a la cantidad de lo sembrado. 2ª Corintios

9:6. «Recuerden esto: El que siembra escasamente, escasamente cosechará, y el que
siembra en abundancia, en abundancia cosechará.»

4.4. La siembra es una anticipación de la cosecha, por lo que se requiere paciencia,

ya que el proceso no es de la noche a la mañ ana.

4.5. Es necesario destruir lo que atente contra la vida de la cosecha: malas

confesiones, amargura para dar, críticas sutiles, ellas hacen nulos tus esfuerzos
para cosechar.

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4.6. Todo lo que sembramos debemos hacerlo para Dios porque Él es quien hace
producir nuestra semilla. 2ª Corintios 9:10. El que le suple semilla al que
siembra también le suplirá pan para que coma, aumentará los cultivos y hará que
ustedes produzcan una abundante cosecha de justicia.

4.7. Lo primero que hace un buen sembrador es elegir la semilla. Se cosechará el

fruto de la semilla que se sembró . Lucas 6:38. Den, y se les dará: se les echará en el
regazo una medida llena, apretada, sacudida y desbordante. Porque con la medida
que midan a otros, se les medirá a ustedes.

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Recordemos las actividades que tenemos en nuestra Visión en las siguientes

semanas:

Viernes 7 y sá bado 8 de abril: Conferencia simultánea V.E.N. “Vida, Espíritu y Nación”.

Miércoles 19 de abril: Fiesta de las familias.

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Los turnos del Plan de Oración 24/7 de Moglie, continú an con las congregaciones del
presbiterio Centro Oriente: de Yare, Santa Lucía, Nueva Cúa, San Casimiro, Paracotos,
La Raiza, Los Teques, San Antonio, Carrizal, San Diego, San Pedro y Anaco