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Revista de la Asociación Geológica Argentina 71 (1): 92 - 99 (2014)

LOS CALCRETES DEL SUDESTE DE LA PROVINCIA DE LA


PAMPA: CARACTERIZACIÓN Y ORIGEN
Mariela P. Etcheverría y Alicia Folguera

Servicio Geológico Minero Argentino, Buenos Aires. E-mail: marietcheverria@hotmail.com

Resumen

El paisaje en el extremo sudeste de la provincia de La Pampa, Argentina, está caracterizado por un relieve de mesetas muy di-
sectadas entre las que se encuentran grandes bajos. Éstas, rematan en calcretes parcialmente cubiertos por depósitos eólicos.
Regionalmente se han distinguido tres niveles de calcretes que fueron determinados por su altura relativa y por los diferentes
grados de preservación de sus características geomorfológicas primarias. Cada uno de ellos representa la culminación de un
ciclo depositacional, tres en total, que tuvieron lugar durante el Mioceno tardío-Plioceno. El objetivo de esta contribución es
caracterizar los dos niveles más antiguos y establecer su origen. Para ello se analizó el contexto regional, se describieron perfi-
les de detalle y se tomaron muestras para efectuar estudios de microscopía óptica. La morfología de los perfiles, los espesores
y las evidencias de actividad biológica (laminación y fábrica beta) concuerdan con las características típicas de los calcretes pe-
dogenéticos, a su vez, indican que en la región hubo períodos con reducido aporte clástico, con estabilidad tectónica y un clima
semiárido y régimen de temperatura del suelo térmico.

Palabras clave: Calcrete pedogenético, fábrica beta, pisolito, peloide

ABSTRACT

The calcretes from the southeast extreme of the La Pampa province: characterization and origin
The landscape in the southeastern extreme of La Pampa province in Argentina is characterized by highly dissected plateaus
with to large shallow areas, which end in calcretes partially covered by eolian deposits. Regionally, there are three levels of cal-
cretes distinguished according to their relative height and the different degrees of preservation of their primary geomorpholo-
gic features. Each level represents the end of a depositional cycle, which took place during the late Miocene-Pliocene. The aim
of this contribution is to characterize the two oldest levels and to determine their origin. For that purpose, the regional context
was analyzed, profiles were described in detail and some samples were collected for their microscopic studies. The profile mor-
phology, their thicknesses and the evidence of biological activity (thinning and beta fabric) coincide with the typical features of
pedogenic calcretes which, in turn, demostrate the existence of well-drained soils and also indicate that this region had periods
of reduced clastic input, tectonic stability and a semiarid climate during those periods and termic soil.

Keywords: Pedogenic calcrete, beta fabric, pisolith, peloid

INTRODUCCIÓN 2012), correspondiente al Programa Na- ellos son comunes en toda la zona este
cional de Cartas Geológicas de la Repú- de la provincia son escasas las contibru-
En el extremo sudeste de la provincia de blica Argentina del Servicio Geológi- ciones sobre el tema. Existen antiguas
La Pampa se preservan relictos de anti- co Minero Argentino (SEGEMAR). El referencias en trabajos de índole regio-
guas planicies aluviales que conforman principal objetivo es caracterizar los cal- nal como Tapia (1935), quien describió
un paisaje caracterizado por un conjun- cretes aflorantes en el sudeste de la pro- la existencia de tres niveles diferentes a
to de mesetas muy recortadas, ubicadas a vincia de La Pampa, más precisamente los los que denominó niveles de piedemon-
diferentes alturas, que rematan en poten- ubicados en el sector comprendido entre te y los de Grober (1947) y García y Gar-
tes calcretes y profundos valles longitudi- los paralelos 38° y 39° S y el límite inter- cía (1964), quienes propusieron posibles
nales ocupados por salinas y lagunas ta- provincial La Pampa-Buenos Aires y el orígenes y condiciones paleoclimáticas.
les como La Blanca Grande y Colorada meridiano 64° 30' O, y determinar su ori- Otros trabajos más modernos son los de
Grande, entre otras. gen, como así también las condiciones pa- Vogt et al. (1999) quienes los estudiaron
La presente contribución es parte de las leoclimáticas y tectónicas imperantes al regionalmente, abarcando gran parte de
tareas llevadas a cabo para el levantamien- momento de su formación (Fig. 1). la provincia de La Pampa, y los de Cal-
to de la Hoja Geológica 3963-I, Río Co- Hasta el momento poco se sabe del ori- mels et al. (1996) y Lanzillota (2006), que
lorado a escala 1:250.000 (Folguera et al. gen de estos depósitos calcáreos. Si bien analizaron los aflorantes en las barrancas
Los calcretes del sudeste de La Pampa. 93

de las salinas Grandes de Anzoátegui y


del valle Daza respectivamente. Linares
et al. (1980) y la mayoría de los autores an-
teriormente mencionados consideraron a
los calcretes como la sección cuspidal de
los depósitos clásticos infrayacentes. Sin
embargo, García y García (1964) los in-
terpretaron como depósitos más moder-
nos. Posteriormente, Folguera y Zárate
(2009) determinaron que no correspon-
dían a un solo ciclo de sedimentación y
le dieron carácter formacional. Más re-
cientemente, Etcheverría et al. (2009) en
proximidades a la localidad de La Ade-
la caracterizaron macro y microscópica-
mente un nivel de calcrete aflorante en la Figura 1: Mapa de ubicación.
barranca norte del río Colorado. (Fig. 2). Existe un basamento ígneo me- del río Colorado-Calcrete II (Ciclo II) y
tamórfico subaflorante de edad protero- Areniscas de La Blanca Grande-Calcre-
METODOLOGÍA zoica-paleozoica. Las unidades mesozoi- te III (Ciclo III). La columna se comple-
cas constituyen afloramientos pequeños ta con unidades pleistocenas y holocenas,
Para caracterizar los calcretes aflorantes y aislados y están representadas por are- entre ellas sedimentos eólicos, areniscas
en el área de estudio se analizó el con- niscas y areniscas conglomerádicas ro- fluviales y depósitos coluviales, aluviales
texto regional mediante observaciones e jas, de edad cretácica superior, asignadas y evaporíticos.
interpretaciones geológicas, para ello se a la Formación Colorado por Casadío et Geomorfológicamente en el modelado
utilizaron imágenes Landsat y ASTER a al. (1999; 2000). Los registros más anti- del paisaje dominaron principalmente los
escalas 1:250.000 y 100.000 y se procesa- guos del Neógeno corresponden a los se- procesos fluviales y eólicos que, asocia-
ron, mediante el programa Global Map- dimentos marinos limoarcillosos de la dos a probables ascensos tectónicos del
per, imágenes SRTM para efectuar mo- Formación Barranca Final (Kaasschieter área, generaron un paisaje mesetiforme
delos de elevación digital con el propósito 1965), del Mioceno medio a tardío, aflo- que pasa gradualmente hacia el este a un
de lograr una correcta valoración de los rantes en las partes más bajas de algunas paisaje suavemente ondulado, dado por la
diferentes niveles de calcretes presentes. de las grandes depresiones. Posteriormen- cubierta loéssica que enmascara este re-
Durante las tareas de campo se descri- te al retiro del mar Paranense comienza lieve previo. Gran parte de la región está
bieron perfiles de detalle en las secciones la sedimentación continental con la depo- formada por una extensa planicie aluvial
más completas, ya que lateralmente algu- sitación de las limolitas y areniscas de la muy disectada, donde se han detectado
no de los sectores que integran el perfil Formación Cerro Azul (Llambías 1975). al menos tres antiguos niveles pedemon-
suelen presentar menor desarrollo o fal- La edad de esta unidad, de amplia distri- tanos, que evidencian distintas etapas de
tar y se recolectaron muestras representa- bución en la región, fue asignada bioes- reactivación y erosión. Esta forma de re-
tivas. Los colores se obtuvieron por com- tratigráficamente a la edad mamífero (pi- lieve generó un paisaje con mesetas esca-
paración con los patrones cromáticos del so-edad) Huayqueriense, que señalaría, lonadas y profundamente recortadas por
Rock-Color Chart Commitee (1963). La de- tentativamente, una edad miocena tardía una importante disección, que llega a for-
terminación de las micromorfologías de entre 8,7 y 6,8 Ma (Montalvo y Casadío mar cerros testigo como el del Morro del
los calcretes se hizo mediante estudios de 1988; Verzi et al. 1999; Verzi et al. 2008; Siete, que rematan en calcretes los que
microscopía óptica sobre secciones del- Verzi y Montalvo 2008). Sobre esta últi- protegen de la erosión por lo que es co-
gadas, mientras que para el tamaño de ma se disponen los ciclos depositaciona- mún que se formen aleros y cornisas.
grano de las fracciones clásticas se siguió les granocrecientes I, II y III del Mioce- La disección es tan importante que el área
el orden establecido por la escala granulo- no tardío-Plioceno, los cuales se apoyan se halla surcada por grandes bajos sin sa-
métrica de Udden-Wentworth. sobre el inmediato inferior mediante con- lida que presentan formas longitudinales
tactos discordantes (Folguera y Zára- que son imponentes por su gran ampli-
CONTEXTO GEOLÓGICO Y te 2011); ciclos que Folguera et al. (2012) tud y profundidad. Estas zonas depri-
GEOMORFOLÓGICO propusieron subdividir internamente de midas en algunos casos alcanzan la cota
acuerdo a la litología y que denominaron de 0 m o valores por debajo del nivel del
La estratigrafía de la región comprendi- como Areniscas de Los Viejos-Calcrete I mar (bajos Colorada Grande, La Blanca
da por este trabajo está poco estudiada (Ciclo I), Formación Río Negro-Rodados Grande, Negro, de los Chanchos y Gran-
94 M. P. Etcheverría y A. Folguera

El Calcrete I, de edad miocena tardía


(Folguera et al. 2012), muestra el mayor
grado de disección relativo, es de color
blanquecino rosado y su perfil tipo cons-
ta, de abajo hacia arriba, de un sector de
transición, uno laminado en partes bre-
chado y uno pisolítico (Fig. 3). El sector
de transición está formado por el mate-
rial hospedador invadido por carbonato
de color castaño grisáceo (10YR 7/4) que
lo brecha parcialmente y forma tabiques
irregulares, de espesores variables, que lo
atraviesan en todas direcciones. El lami-
nado es en general muy consolidado, de
color castaño muy claro (10YR 8/2) y es-
tá constituido por láminas subparalelas,
algo onduladas y con espesores que van
desde 0,1 a 1 cm; este sector en partes, y
principalmente hacia arriba, se encuentra
brechado y recementado por carbonatos
castaño oscuros (10YR 6/2), pasa en for-
Figura 2: Esquema geológico regional, modificado de Folguera et al. (2012). ma transicional al pisolítico. Éste último
des de Anzoátegui). Los bajos tienen una y sus espesores no son constantes lateral- está bien consolidado y compuesto por
red de drenaje del tipo centrípeto con co- mente; sobreyacen de manera discordante cuerpos elipsoidales de hasta 6 cm, que le
lectores efímeros, y la mayoría, en las par- a depósitos aluviales del paleo-sistema del dan aspecto botroidal muy irregular, in-
tes más profundas, contienen barreales, río Colorado y están parcialmente cubier- tegrados por clastos de calcrete blanque-
lagunas temporales y depósitos evaporíti- tos por depósitos eólicos del Pleistoceno- cino (5Y 8/1) recubiertos por capas con-
cos en cuyas márgenes suelen existir acu- Holoceno. céntricas de material carbonático castaño
mulaciones eólicas que forman campos El Calcrete I, el más antiguo, se halla a muy claro (10YR 8/2).
de dunas. una altura de 225 m s.n.m. y su espesor La microscopía reveló que el material hos-
Los laterales de mesetas y bajos tienen pe- es variable, el máximo medido es de 2 m pedador es una arenisca muy fina, de 0,10
dimentos y depósitos de bajadas. También mientras que el mínimo es de 1,10 metros. mm de tamaño de grano promedio, com-
es común en ellos ver pequeñas cárcavas Se dispone sobre un depósito de arenis- puesta por clastos subredondeados a su-
o surcos generados por la erosión hídrica, cas y areniscas conglomerádicas (Arenis- bangulosos y prismáticos a equidimen-
dada por escurrimientos esporádicos con- cas de Los Viejos) que en parte son su ma- sionales, formados por pastas volcánicas
centrados; y conos de deyección producto terial hospedador. El Calcrete II se ubica a (andesitas y basaltos), cuarzo, feldespato,
de remoción en masa. 130 m s.n.m., su espesor máximo y míni- vidrio incoloro, minerales opacos, piroxe-
mo es de 1 m y de 0,70 metros. Sobreyace no, metamorfitas y hornblenda. El mate-
CARACTERIZACIÓN a areniscas y conglomerados polimícticos rial hospedador está cementado por car-
DE LAS MACRO Y (Rodados del río Colorado). El Calcre- bonato de calcio. Este último modificó
MICROMORFOLOGÍAS DE te III se encuentra a una altura de 70 m la fábrica de la roca, pues al precipitar co-
LOS CALCRETES s.n.m., tiene 0,5 m de espesor promedio rroyó y desplazó los granos de forma tal
y se ubica sobre areniscas finas y conglo- que éstos flotan dentro de este cemento.
Se han distinguido en la región tres nive- merados (Areniscas de la Blanca Grande). El sector laminado está integrado por la-
les de calcretes que fueron determinados La distribución areal de cada uno de estos minillas irregulares algunas integradas
por su altura relativa y por los diferentes niveles se puede observar en la figura 2. por clastos procedentes del material hos-
grados de preservación de sus caracterís- Hasta el momento se han estudiado de- pedador, otras formadas por cristales de
ticas geomorfológicas primarias. Con ca- talladamente los dos niveles de calcretes calcita de diferentes tamaños y otras don-
da uno de ellos culminan diferentes ci- más antiguos, el Calcrete III aún no ha de prevalecen los rasgos de fábrica beta.
clos depositacionales que tuvieron lugar sido caracterizado y en esta contribución Es así como se definen laminillas (de has-
durante el Mioceno tardío-Plioceno. Es- sólo se lo utiliza como marco de referen- ta 2 mm) donde abundan granos con bor-
tos depósitos tienen una suave pendiente cia geológico-geomorfológico y para co- des corroídos y otros recubiertos, peloides
hacia el este (de aproximadamente 0,08%) rrelación. cementados por carbonatos micríticos
Los calcretes del sudeste de La Pampa. 95

hasta esparíticos y cavidades irregulares,


algunas rellenas por carbonato esparíti-
co y otras tapizadas por ópalo. Alternan
con delgadas láminas (de hasta 7 mm) de
carbonato micrítico con diferente conte-
nidos de arcilla y materia orgánica y de
carbonato micrítico masivo (Fig. 4). Es
común también observar nódulos disór- Figura 3: Perfiles esquemáticos
ticos y restos de tejidos radiculares (cor- de los Calcretes I y II y su corre-
teza) donde se han preservado las paredes lación con el perfil de calcrete
pedogenético idealizado de Es-
de las células (Fig. 5). Entre las láminas teban y Klappa (1983) extraído
suelen intercalarse laminillas irregulares, de Alonso-Zarza (2003). 1. ma-
muy finas y discontinuas de hasta 0,4 mm, terial hospedador, 2. transicio-
nal, 3. pulverulento, 4. nodular,
compuestas por ópalo coloforme y por
5. laminar, 6. masivo (hardpan),
calcedonia fibrosa y radiada. 7. suelo activo. La escala verti-
El Calcrete II, de edad pliocena (Folgue- cal es común a los tres perfiles.
ra et al. 2012), es en general de color blan-
quecino y su perfil tipo, de abajo hacia
arriba, consta de un sector de transición,
uno pulverulento y uno laminado en par-
tes brechado (Fig. 3 y 6). El de transición
está formado por una arenisca rosado-
grisácea (5YR 7/2), que es el material hos-
pedador del carbonato, que en parte lo Figura 4: Fotomicrografía de
cementa y en parte lo brecha formando una porción del sector laminado
del Calcrete I donde se observan
tabiques irregulares de espesores varia- laminillas irregulares formadas
bles. El pulverulento es friable, homogé- por granos recubiertos y peloi-
neo, color castaño muy claro (10 YR 8/2) des, cementados por carbonatos
micríticos hasta esparíticos (a),
y está compuesto por material hospeda- que alternan con delgadas lámi-
dor con abundante carbonato y escasos nas de carbonato micrítico con
nódulos. El laminar está bien consolida- diferente contenidos de arcilla y
materia orgánica (b).
do y formado por finas láminas ondulo-
sas subhorizontales diferenciables por el ca y además corroyó y desplazó los granos bonato micrítico muy finamente lamina-
tamaño de grano de los clastos y el color, de forma tal que éstos flotan dentro de él. do (Fig. 7).
las láminas con fracción más gruesa son La laminación está dada por la alternan-
castaño grisáceas (10YR 7/4) mientras cia de laminillas con espesores que oscilan CORRELACIONES
que las con fracción más fina son castaño entre 0,4 y 5 mm, formadas principalmen-
muy claras (10 YR 8/2). La parte superior te por material clástico tamaño arena fina Con el fin de de integrar regionalmente
del sector laminar se halla brechada, en y muy fina. El carbonato, asociado a arci- todos los niveles de calcretes estudiados
cuerpos de hasta 2 cm, y recementada por llas y materia orgánica, constituye el 60% hasta el momento se establece la siguien-
carbonato muy fino de color castaño muy de las láminas donde predomina la frac- te correlación (Cuadro 1).
claro (10 YR 8/2). ción arena fina y el 80% de las formadas García y García (1964) establecieron pa-
El estudio de las secciones delgadas con- por la fracción arena muy fina. Además, se ra la región del sudeste de provincia de La
firmó que el material hospedador es una presenta en forma de peloides, de pisoli- Pampa dos tipos fundamentales de cal-
arenisca compuesta por clastos subredon- tos y rellenando huecos irregulares, dando cretes a los que describieron brevemente
deados a subangulosos y de forma prismá- lugar a una típica fábrica beta. Los pisoli- y asignaron al Pleistoceno superior. Am-
tica a equidimensional, compuestos por tos son de carbonato micrítico con creci- bos tipos se corresponden con los Calcre-
pastas volcánicas (andesitas y basaltos), miento concéntrico a partir de un grano tes I y II aquí estudiados, dada la disposi-
cuarzo, feldespato, vidrio incoloro, mi- o de un clasto brechoso. Los huecos son ción areal que ocupan y las unidades a las
nerales opacos, piroxeno, metamorfitas redondeados e irregulares y están rellenos que sobreyacen.
y hornblenda cementados por carbonato. o tapizados por carbonato esparítico. En Calmels et al. (1996) caracterizó el calcre-
Este último modificó la fábrica del sedi- los sectores brechados las laminillas apa- te aflorante en las barrancas de las salinas
mento, ya que al precipitar brechó la ro- recen fracturadas y cementadas por car- Grandes de Anzoátegui y adjudicó la va-
96 M. P. Etcheverría y A. Folguera

aporte freático. Lo consideraron de edad


pleistocena. Este calcrete, de acuerdo a su
cota y a las unidades que sobreyace, se co-
rrelaciona con el Calcrete II de esta con-
tribución, mientras que el nivel más joven
lo hace con el Calcrete III.
Escosteguy et al. (2011), en la región ale-
daña a Choele Choel y norte del río Ne-
gro describieron brevemente un delgado
calcrete que sobreyace a facies interme-
dias-distales de antiguos abanicos aluvia-
les. Por cota y unidades infrayacentes se
lo correlaciona con el Calcrete II.

DISCUSIÓN
Se ha corroborado la presencia de tres
niveles diferentes de calcretes dadas sus
características geomorfológicas. Ellos
ponen de manifiesto la existencia de pa-
leosuperficies e indicarían que su forma-
ción se llevó a cabo en diferentes lapsos a
medida que se producía la disección del
paisaje en forma escalonada.
Figura 5: Fotomicrogra-
Los calcretes se desarrollan con mayor ra-
fía de una porción del sec- pidez en sustratos con tamaño de grano
tor laminado del Calcrete grueso (Alonso-Zarza 2003). Si bien aquí
I donde se observa tejido
los materiales hospedadores son areniscas
radicular (corteza) petrifi-
cado rodeado de cemento finas y muy finas, éstas habrían sido lo su-
microesparítico. Sin (a) y ficientemente permeables para favorecer
con analizador (b). la circulación descendente de soluciones
riación de carbonato en el perfil a cambios Lanzillota (2006), estudió en detalle vadosas saturadas en carbonato cálcico.
climáticos sobre la base de los intervalos dos niveles de calcretes aflorantes en las Diferentes procesos (físicos, químicos y
de temperaturas necesarias para que pre- proximidades de Valle Daza, les asignó biológicos) provocaron la precipitación y
cipite el carbonato de calcio. Lo considera- un origen pedogenético y edades poste- por ende la formación de las costras cal-
ron de edad pleistocena. Este nivel, sobre riores al Mioceno tardío. De acuerdo a las cáreas.
la base de su altura relativa y de las unida- cotas a las que se hallan estos calcretes se- Los rasgos macro y micromorfológicos
des que a las que sobreyace, se correspon- rían más antiguos que los aquí estudia- observados en los dos calcretes más an-
de con el Calcrete II de este trabajo. dos y se correlacionarían con los niveles tiguos (desarrollo de perfil y fábrica beta,
Vogt et al. (1999) analizaron la génesis de “4” (340-350 m) y “5” (390 m) de Vogt et entre otros) indican que la precipitación
las toscas de la meseta de La Pampa y de- al. (1999). del carbonato ocurrió en el ambiente va-
terminaron, de acuerdo a las cotas, la pre- Etcheverría et al. (2009), en la región sur doso superficial de la pedogénesis. La va-
sencia de siete niveles de calcretes y de di- establecieron la presencia de dos niveles riabilidad de espesores reflejaría variacio-
ferentes facies que son comunes a todos. de calcretes. Al más antiguo, ubicado en la nes laterales relacionadas a la topografía y
Según estos autores se habrían generado barranca norte del río Colorado en proxi- a microrelieves. Los perfiles tipo que pre-
en un ambiente palustre en el que el car- midades a la localidad de La Adela, lo ca- sentan son comparables a parte del per-
bonato fue fijado por cianobacterias. Las racterizaron macro y microscópicamente. fil ideal de un calcrete pedogenético (Es-
edades que propusieron cubren el inter- De acuerdo a la micromorfología y a las teban y Klappa 1983, en Alonso-Zarza
valo Plioceno-Pleistoceno superior. Si- particularidades del perfil sugirieron que 2003) (ver Fig. 3).
guiendo este esquema los calcretes aquí se habrían formado por pedogénesis. La Los perfiles y los espesores promedio de
estudiados se corresponderían con los presencia, en menor medida, de fábrica ambos, a los que se suman las evidencias
que estos autores consideraron como los alfa les hizo suponer que se produjo re- de actividad biológica (laminación y mi-
dos niveles más jóvenes. cristalización o bien que hubo un posible cromorfología de fábrica beta) concuer-
Los calcretes del sudeste de La Pampa. 97

CUADRO 1: Correlación regional de los diferentes niveles de calcretes.


García y García Calmels et al. Vogt et al. Lanzillota Etcheverría Escosteguy Este trabajo
(1964) (1996) (1999) (2006) et al. (2009) et al. (2011)
Nivel de 440 m s.n.m. meseta
del Fresco
Nivel de 410 m s.n.m. cruce ruta
18 y 13
Nivel de 390 m s.n.m. El Durazno
Nivel de 350-340 m s.n.m. Fortín Costra calcárea de la
Viejo-Cerro Patagua superficie de erosión I
Cerro Patagua
Nivel de 290-280 m s.n.m. valle Costra calcárea de la
de Quehué superficie de erosión II
Loma Alta
Costra calcárea Nivel de 240-230 m s.n.m. Calcrete I
lagunas Colorada Grande Naicó-valle de Quehué 225 m. s.n.m
y Blanca Grande, salina
El Chancho
Costra calcárea Costra calcárea Nivel de 180-140 m s.n.m. Calcrete nivel I Calcrete Calcrete II
zona austral Salinas Grandes de sobre aluviones que cubren el Río Colorado-La Adela Choele Choel- 130 m s.n.m
Anzoátegui Pampeano norte del río Negro
Calcrete nivel II Calcrete III
sector sur del salitral 70 m s.n.m
Grande

dan con las características de los calcre- se brecha y se recementa. Si el proceso pe- turales. La alternancia de láminas ricas en
tes pedogenéticos. Este tipo de calcretes dogenético disminuye un sector brechado material clástico y en carbonato sugieren
se genera en sedimentos bien drenados y puede estar reflejando ciclos de humecta- que entre cada episodio de sedimentación
por encima de la freática. ción-desecación, mientras que si se detie- hubo tiempo para la generación de raíces,
El sector de transición se generó por la ne demuestra principalmente el accionar las que posteriormente murieron ante un
desagregación del sustrato, esto habría de raíces. Este último, puede ser lo sufi- nuevo aporte clástico y el espacio por ellas
ocurrido en la evolución inicial de los per- cientemente importante como para for- ocupado fue reemplazado por calcita.
files debido a la pedogénesis del material mar un sector pisolítico, tal como ocurre Las cavidades irregulares vacías y relle-
parental y al movimiento descendente del con el Calcrete I. nas por carbonato esparítico representan
agua a través de él. El sector pulverulen- En ambos calcretes, un origen pedogené- moldes y calcos de raíces, mientras que la
to se habría generado en una etapa más tico queda evidenciado por rasgos micro- presencia de tejidos radiculares petrifica-
avanzada donde el carbonato se acumu- morfológicos típicos de una fábrica be- dos en el Calcrete I, donde se han preser-
ló en forma discontinua pero siempre aso- ta. Entre éstos se hallan los peloides y los vado las paredes de las células, indican que
ciado a la presencia de raíces y microor- pisolitos (que indican acción microbiana el proceso de calcificación comenzó cuan-
ganismos. Para el origen del laminado se principalmente fúngica), mientras que do la planta estaba todavía viva (Alonso-
propone la acción directa de las raíces, los huecos irregulares, la laminación y Zarza 1999; 2003).
donde en un paso más de la evolución del las láminas fracturadas y cementadas por El Calcrete I presenta sílice amorfa que se
perfil la precipitación del carbonato obs- carbonato micrítico laminar, sumados a manifiesta en forma de laminillas irregu-
truye los espacios porales e impide el paso los restos de tejidos radiculares (observa- lares de ópalo coloforme y de calcedonia
del agua a niveles inferiores, lo que pro- dos en el calcrete I) ponen de manifiesto fibrosa y radiada intercalados entre lámi-
voca que los sistemas de raíces en su es- la existencia de raíces. nas y ópalo que tapiza cavidades. Su exis-
trategia para obtener agua, cambien sus Según Alonso-Zarza (2003) la existen- tencia tiene tres posibles orígenes: dada la
diseños y comiencen a extenderse lateral- cia de láminas con material terrígeno es presencia de granos corroídos, 1) podrían
mente, su posterior calcificación habría típica de ambientes donde la sedimenta- ser precipitados provenientes de la sílice
dado lugar a este sector. Según Alonso- ción es escasa y episódica. En los dos ni- movilizada como consecuencia de la al-
Zarza (2003) el incremento de carbonato veles se observaron laminillas con mate- teración de feldespatos y vidrios volcá-
de calcio en el perfil dificulta el desarrollo rial clástico de diferente tamaño de grano, nicos ocasionados por actividad fúngica
de la biota, y los procesos pedogenéticos lo que estaría poniendo en evidencia que (Vogt et al. 1999); 2) haberse generado du-
disminuyen o se detienen. Seguidamente, existió un escaso aporte sedimentario sili- rante el proceso de calcretización, don-
la costra calcárea al quedar expuesta o so- coclástico episódico de posible origen eó- de el carbonato disuelve la sílice, la cual
metida a nuevos procesos pedogenéticos lico, a juzgar por sus características tex- migra y luego precipita; 3) la sílice fibrosa
98 M. P. Etcheverría y A. Folguera

Figura 6: a) Aspecto general


que presentan los afloramien-
tos del Calcrete II. Nótese la
forma de alero que adopta por
erosión diferencial el sector
laminado; b) Detalle donde se
observan los diferentes secto-
res del perfil.

bable origen eólico hace suponer que el CONCLUSIONES


polvo eólico fue la principal fuente.
Grober (1947) propuso para la zona un En la región estudiada se han diferencia-
régimen climático de inviernos fríos y do geomorfológicamente tres niveles de
húmedos y de veranos secos y relativa- calcretes asignados por (Folguera y Zára-
mente cálidos. Calmels et al. (1996) sugi- te 2011) al Mioceno tardío-Plioceno. Los
rieron un clima cálido y Vogt et al. (1999) dos más antiguos han sido analizados en
los asociaron a condiciones de muy fuer- detalle mientras que el más moderno ha
te aridez. El clima es uno de los factores sido utilizado como marco de referencia
condicionantes de la ubicación del máxi- y de correlación. Ellos representan pa-
mo contenido de carbonato en el perfil leosuperficies que indican ascensos tec-
del calcrete. Tanto Calmels et al. (1996), tónicos que dispararon cambios de nivel
para el calcrete correlacionado con el Cal- de base en el área.
crete II, y Vogt et al. (1999) para el corre- Los sedimentos hospedadores fueron lo
lacionado con el Calcrete I, calcularon el suficientemente permeables para permi-
contenido de carbonato a lo largo de los tir la circulación descendente de solucio-
perfiles y demostraron que el mayor con- nes saturadas en carbonato cálcico.
tenido se ubica en la parte media a supe- Dadas las características macro y micro-
rior de ambos, donde alcanza un 85 %. morfológicas que presentan ambos cal-
Esta ubicación, de acuerdo a los gráficos cretes se determinó que su origen es pe-
de profundidad versus concentración de dogenético y que se habrían generado
carbonato de Wright y Tucker (1991), in- por encima de la freática en un ambiente
Figura 7: Fotomicrografía de una porción del sec-
dica que el clima imperante al momento donde la topografía variaba lateralmente
tor brechado del Calcrete II donde se observa una
laminilla compuesta por material clástico (a), frac- de su formación habría sido un semiári- y donde existían microrelieves. Además,
turada en forma perpendicular y cementada por do térmico, donde la temperatura máxi- este ambiente recibía un aporte terrígeno
carbonato micrítico muy finamente laminado (b). ma del suelo es mayor a los 15ºC pero no escaso y episódico de origen eólico.
y radiada ha sido relacionada a la activi- supera los 22ºC. Se considera que la fuente principal de
dad de cianobacterias por Alonso-Zarza El desarrollo de un perfil de calcrete ne- carbonato habría sido el polvo eólico y
(2003), éstas requieren directa exposición cesita una superficie geomórfica relati- que los precipitados de sílice amorfa pro-
solar lo que sugiere que su formación se vamente estable durante el tiempo que vienen de la sílice movilizada por la acti-
habría llevado a cabo en la interfase cal- se requiera para que actúen los procesos vidad fúngica y por el proceso de calcre-
crete-atmósfera. De acuerdo a las micro- pedogenéticos y diagenéticos (Machet- tización.
morfologías observadas se propone que te 1985 en Alonso-Zarza y Jones 2007) Se propone que el paleoclima imperante
la combinación de los procesos 1 y 2 se- es por ello que se los puede utilizar para al momento de la formación de los calcre-
rían los responsables de la precipitación identificar paleosuperficies. De hecho la tes fue del tipo semiárido con un régimen
de la sílice. preservación de estas superficies de se- de temperatura del suelo térmico.
Según la literatura el carbonato puede dimentación miocena tardía y pliocena La existencia de estas costras calcáreas en
provenir de variadas fuentes, entre ellas respectivas, dan indicios de importantes la región permite interpretar la alternan-
el agua de lluvia, el polvo eólico y el ma- cambios en el nivel de base del área, lo que cia de períodos de gran estabilidad donde
terial hospedador. En nuestro caso la pre- permitió sugerir ascensos de origen tectó- prevaleció la estabilización de la superfi-
sencia de finas láminas clásticas de pro- nico tal como lo hiciera Folguera (2011). cie y el desarrollo de la biota, con escaso
Los calcretes del sudeste de La Pampa. 99

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