generalmente espinosos y floridos, que alcanzan entre 2 a 5 metros de alto y rara vez se pueden elevar tanto como 20 metros trepando sobre otras plantas. Se denomina ROSA a la flor de los miembros de este género y rosal a la planta. Angiosperma. Dicotiledóneo. Tallo: arbusto de tallos semileñosos, casi siempre erectos, dotados de Aguijones. Hojas: Pecioladas, folíolos con el borde aserrado. Flor: Corola Dialipétala (Pétalos separados), generalmente aromáticas, completas y hermafroditas. Cáliz: dialisépalo (Sépalos separados) de 5 piezas de color verde. Androceo: compuesto por numerosos estambres dispuestos en espiral. Gineceo: apocárpico (compuesto por varios pistilos separados). Nectario presente, que atrae insectos para favorecer la polinización, predominantemente entomófila. Fruto: el producto fecundo de la flor es una infrutescencia conocida como cinorrodón, fruto compuesto por múltiples frutos secos. Corte transversal de una rosa Reproducción por acodo Reproducción por esquejes o estacas Estaca o esqueje: La estaca es una rama pequeña que después se separa de la planta y se siembra en la tierra, inmediatamente, le salen unas raíces que se desarrollan rápidamente y se convierten en una nueva planta. Acodo Simple: Consiste en tomar una rama, quitarle las hojas, doblarla e introducirla en el suelo para que pueda criar raíces propias. El clima apropiado para el buen crecimiento de las rosas es el templado. Ella gusta mucho de climas frescos y no soporta el verano intenso, pero algunas pueden crecer en los climas cálidos tropicales, aunque este hecho hace que su floración disminuya considerablemente. Prefiere temperaturas primaverales, suaves y frescas. Es capaz de tolerar una amplia gama de tipos de suelo.