MATERIAL COMPILADO – ESCUELA DE GOBIERNO

1. Presentación

Los objetivos de este curso online son ambiciosos, ya que eliminando el tecnicismo queremos
que adquieras las capacidades necesarias para mejorar tus competencias en Ciberseguridad,
aprenderás donde están los riesgos, las amenazas y las vulnerabilidades. Los ciberataques
están en continuo crecimiento, y no podemos pretender quedarnos ajenos a ello teniendo en
cuenta lo que esto significa: perdida de datos, reputación y tiempo. En resumen y derivado de
lo anterior, una cantidad incuantificable de dinero y hay que aprender a defenderse y proteger
nuestros activos de ciberdelincuentes.

Durante esta semana aprenderemos los principales conceptos

2. Objetivos

3.1 Objetivo General

• Dar a conocer las principales definiciones de lo que es la ciberseguridad, el

ciberespacio y cómo operan.
• Desambiguar la enorme cantidad de términos que aparecen cada vez más nombrados

Objetivos Específicos

• Entregar herramientas para la comprensión de las distintas especialidades y

subespecialidades que se ven en este ámbito.

LA SEGURIDAD COMO UNA NECESIDAD ESENCIAL

Al saber cuáles son los tipos de seguridad que existen, es más sencillo entender la
importancia que tiene la implementación de estrategias que salvaguarden la integridad de las
personas, de las organizaciones y el patrimonio de las compañías.

Seguramente el lector habrá escuchado también los términos “Seguridad Nacional” y

“Seguridad Ciudadana” que, como derivado de lo anterior y por extensión, refieren a la
sensación de estabilidad, calma o predictibilidad beneficiosa para un país, una ciudad, etc.

Note, por favor, que siempre hablamos de “sensación”, ya que, y esto es un concepto
fundamental: siempre podemos hablar de “MITIGAR” los riesgos y las amenazas. Jamás
podremos hablar de “ELIMINARLOS” por completo.

En la quinta dimensión de conflicto, el ciberespacio, sucede EXACTAMENTE lo mismo:

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¿Qué son las DIMENSIONES de conflicto?

Se llama ambiente, dimensión o campo operacional, en términos militares, a las distintas

dimensiones que puede tener un conflicto armado: tradicionalmente a través de tierra,
mar, aire y espacio, como las cuatro dimensiones tradicionales, y el ciberespacio como una
nueva y quinta dimensión. Al ser considerado una dimensión particular, merece el
desarrollo de capacidades específicas para su defensa y explotación.

Este nuevo y artificial dominio es visto cómo elemento estratégico para las naciones, estados,
organizaciones, criminales, grupos o individuos quienes competirán por controlarlo, generando
así conflictos como parte de una contraposición de intereses.

En la Cumbre de Varsovia que tuvo lugar en julio de 2016, se hizo el reconocimiento del
ciberespacio como el quinto dominio de las operaciones militares

El ciberespacio también está tomando relevancia dentro la seguridad nacional de los

distintos países; dónde los actores más simples, pueden ser una amenaza para las grandes
potencias, también por ser el escenario principal para la ciberguerra, porque pueden ser
afectadas las infraestructuras críticas de un país (como la electricidad, el sistema financiero, las
telecomunicaciones, etc) y a través de este pueden ser efectuados distintos tipos ataques
cibernéticos.

Se hace necesario que definamos este quinto dominio, y demos respuesta a estas preguntas
¿qué es el Ciberespacio?, ¿que lo compone?

Buscando una definición acertada del Ciberespacio, este término aparece por primera vez en
las novelas de william gibson, “quemando cromo” de 1982 y se popularizó en la novela
neuromante de 1984: “El Ciberespacio, Una complejidad inimaginable. Líneas de luz dispuestas
en el no-espacio de la mente, agrupaciones y constelaciones de datos…, el propio terreno de lo
virtual, donde todos los medios se juntan (fluyen) y nos rodean”. Neuromante

En la actualidad, el concepto de ciberespacio suele asociarse a Internet. Todo aquello que se

desarrolla en Internet, a través de sitios web, correos electrónicos, redes sociales, etc., no
tiene lugar en un país específico, más allá de la ubicación concreta de los servidores y de los
usuarios. El ciberespacio, de todos modos, es más amplio que Internet.

En este punto, si bien hay una infinidad de definiciones del ciberespacio, tomaré la relativa a
las normas ISO, que ha sido incorporada a la mayoría de las estrategias de ciberseguridad de
las naciones sudamericanas:

“…es el espacio virtual determinado por la conexión entre personas a través de redes ...”

Esta definición, en general parece la más adecuada para una estrategia nacional, habida
cuenta que: incluye al humano (que consciente o inconscientemente puede afectar a la
interconexión) y además, deja claro el concepto precedente que podemos definir como: “El

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ciberespacio es MAS que Internet”: la red de telefonía celular es parte del ciberespacio, las
redes cerradas y no conectadas a internet son parte del ciberespacio y un largo etcétera.

Si bien algunas personas utilizan los términos «ciberespacio» e «Internet» como sinónimos,
es más correcto entenderlos de forma jerárquica: podemos pensar que Internet se encuentra
en el ciberespacio, que el gran conjunto de páginas y aplicaciones a las que accedemos desde
nuestros dispositivos se alojan en este dominio infinito e intangible, donde también tendrán
lugar experiencias futuras que no forman parte del concepto de Internet.

Supongamos que una persona que vive en Alemania establece una relación de amistad a
distancia con otra que reside en Paraguay. Ambos intercambian mensajes, participan de
videoconferencias y se envían postales digitales. Ese vínculo se desarrolla en el ciberespacio:
no existe un encuentro físico, ya que sus ubicaciones geográficas son muy distantes, pero esto
no quita que se forme vínculo virtual comparable con el de una amistad tradicional.

La regulación legal del ciberespacio suele ser motivo de conflicto debido a las propias
características virtuales de este ámbito. Los gobiernos tienen dificultades para imponer sus
legislaciones y, de esta manera, los delitos que se cometen en este entorno son difíciles de
perseguir y de juzgar. Pese a esta cuestión, muchos activistas defienden la independencia y la
autonomía del ciberespacio, exigiendo que las autoridades estatales no ejerzan controles ni
cometan actos de censura.