¿Luna de Gusano?

Uno de los espectáculos naturales más recomendables que ofrece el cielo nocturno es, sin duda, la
gran luna llena que tiene lugar durante el mes de marzo, que además se puede contemplar a
simple vista, disfrutando de todo un paisaje iluminado por nuestro satélite, que se muestra más
grande y brillante de lo habitual.

La superluna del mes de marzo es la que se conoce como Luna de Gusano, un nombre que tiene
una explicación ancestral y que hace referencia a la Luna llena que se podrá ver el 18 de marzo de
2022, este mismo viernes. 

El nombre de esta Luna llena fue atribuido en la década de 1930 por Maine Farmer's Almanac,
quien comenzó a publicar los nombres de las lunas que utilizaban los nativos americanos, tal y
como recoge la Nasa.

De hecho, fueron las tribus más al sur las que llamaron a esta superluna de marzo "la Luna
Gusana", por dar inicio a la primavera y al renacer de la naturaleza. Más cerca de nuestro clima y
más allá de cualquier apodo, la luna llena de marzo brinda una estupenda oportunidad de
descubrir sus misterios. ya que cuando se derretían por esta época las heladas que se habían
producido en los meses de frío, aparecían en el suelo los moldes que habían dejado las lombrices. 

"Tiene sentido que solo las tribus del sur llamaran a esto la Luna del Gusano", recoge la NASA, ya
que, cuando los glaciares cubrieron la parte norte de América del Norte, acabaron con las
lombrices de tierra nativas. Así, cuando los glaciares se derritieron hace unos 12.000 años, los
bosques más septentrionales volvieron a crecer sin lombrices de tierra. 

Otros nombres que se le da a esta gran Luna del mes de marzo son: 

 Luna de Cuervo: fue el nombre usado por las tribus más septentrionales del noreste de los
Estados Unidos, debido a que el graznido de este ave señala el final del invierno. 
  Luna de la Corteza: se llamó así porque la capa de nieve se convierte en una corteza al
descongelarse durante el día y congelarse durante la noche.

 Luna de la Savia (o del Azúcar): este era el momento para tocar los arces

La Luna nos espera, paciente, milenaria, sublime para que vayamos estas noches a su encuentro.