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DÍA 4: EL AMOR ES UN PACTO

“Adonde tú vayas, iré yo, y donde tú mores, moraré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios mi Dios.” (Rut 1:16)
Ver al matrimonio como un contrato es como decirle a tu pareja: "Te tomo para mí y veremos si funciona". Sin
embargo, verlo como un pacto hace que digas: "Me entrego a ti y me comprometo a este matrimonio para
toda la vida".
Todo matrimonio es llamado a ser una imagen terrenal del pacto celestial de Dios con la iglesia. Debe revelarle
al mundo la gloria y la belleza del amor incondicional de Dios por nosotros. Jesús dijo: "Así como el Padre me
ha amado a mí, también yo los he amado a ustedes. Permanezcan en mi amor" (Juan 15:9 NVI). Deja que sus
palabras te inspiren a ser un canal del amor de Dios para tu pareja. Ahora es el momento, para renovar tu
pacto de amor con toda sinceridad y entrega.

El desafío de hoy

Escribe una renovación de tus votos matrimoniales entrégalos en un sobre cerrado al sacerdote.

__Haz una marca aquí cuando hayas completado el desafío de hoy.

¿Qué te ha revelado Dios durante estos 4 días? ¿Cómo ha cambiado tu visión del matrimonio?

“Para siempre se ha acordado de su pacto.” (Salmo 105:8)

Tus tareas están finalizadas, con estos pequeños gestos que pueden cambiar en algo tu manera de demostrar amor y
la forma en que tu pareja lo percibe, agradece a Dios por esta experiencia y pide que siga fortaleciendo tu matrimonio
y tu familia.

“Señor, abre mis ojos para que pueda ver la verdad,

y mis oídos para que pueda escucharla. Abre mi corazón para recibirla por fe.

Renueva mi mente para conservarla en esperanza.

Doblega mi voluntad para que pueda vivirla con amor.

Recuérdame que soy responsable cuando la escucho.

Ayúdame a desear obedecer lo que dices en ella.

Transforma mi vida para poder conocerla.

Carga mi corazón para poder comunicarla. Habla ahora, Señor.

Dame pasión para conocer y seguir tu voluntad.

Nada más. Nada menos.”

Amén.

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