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HERALDOS

DEL REINO – Parte III


EL LLAMADO DE LOS ATALAYAS

A. Dios está reclutando un ejército de mensajeros que serán clave en el avance de sus planes y
de la gran comisión en los últimos tiempos. Si este mensaje precursor no se traduce en
decisiones radicales y trascendentes que nos alineen al plan de Dios, algo está fallando.

B. Estas personas han sido consumidas por este llamado sagrado. Más que un mensaje en sus
bocas, ellos se han convertido en el mensaje con sus vidas. Son cartas abiertas leídas por todos y
voces que claman en los desiertos. Están dispuestos a dejar todo por responder en esta generación,
y el llamado ha llegado hasta sus huesos (Jer. 20:9).

C. La Biblia profetiza sobre estos “mensajeros” que se manifestarán en medio del caos,
confusión y decepción de los últimos tiempos.
Jesús los llamó “heraldos”, que llevarían este anuncio de que “el Rey está viniendo a reinar sobre las
naciones” hasta lo último de la tierra.
Pablo se identificó con esta asignación al llamarse a sí mismo “heraldo” (1 Ti. 2:7; 2 Ti. 1:11, NVI).
Daniel los llamó “entendidos” que enseñarán justicia a la multitud (Dn. 12:3).
Isaías, Jeremías y Ezequiel los llamaron “atalayas”.

“7 ¡Cuán hermosos son sobre los montes los pies del que trae alegres nuevas,
del que anuncia la paz, del que trae nuevas del bien, del que publica salvación,
del que dice a Sion: Tu Dios reina! 8 ¡Voz de tus atalayas! Alzarán la voz, juntamente darán
voces de júbilo; porque ojo a ojo verán que Jehová vuelve a traer a Sion. 9 Cantad alabanzas,
alegraos juntamente, soledades de Jerusalén; porque Jehová ha consolado a su pueblo,
a Jerusalén ha redimido. 10 Jehová desnudó su santo brazo ante los ojos de todas las naciones,
y todos los confines de la tierra verán la salvación del Dios nuestro”. Isaías 52:7-10

“16 Así dijo Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas,
cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma.
Mas dijeron: No andaremos. 17 Puse también sobre vosotros atalayas, que dijesen:
Escuchad al sonido de la trompeta. Y dijeron ellos: No escucharemos.
18 Por tanto, oíd, naciones, y entended, oh congregación, lo que sucederá”. Jeremías 6:16-18


D. Daniel, Jeremías y Ezequiel, son profetas claves para estudiar en nuestra generación. Su
asignación fue ser atalayas en medio del exilio a Babilonia. La Biblia dice que en los tiempos
finales el reino espiritual que oprimirá el mundo será Babilonia (Ap. 17:5). El estilo de vida, mensaje
y principios de estos tres profetas nos muestran un ejemplo y prototipo de la Iglesia que brilla y
avanza en medio de la Babilonia moderna. Ezequiel es la persona que más representa el
llamado de un atalaya:

“Y me dijo: Hijo de hombre, alimenta tu vientre, y llena tus entrañas de este rollo que yo te doy.
Y lo comí, y fue en mi boca dulce como miel”. Ezequiel 3:3

“Hijo de hombre, yo te he puesto por atalaya a la casa de Israel; oirás, pues, tú la palabra de mi boca,
y los amonestarás de mi parte”. Ezequiel 3:17

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“2 Hijo de hombre, habla a los hijos de tu pueblo, y diles: Cuando trajere yo espada sobre la tierra,
y el pueblo de la tierra tomare un hombre de su territorio y lo pusiere por atalaya,
3 y él viere venir la espada sobre la tierra, y tocare trompeta y avisare al pueblo,
4 cualquiera que oyere el sonido de la trompeta y no se apercibiere, y viniendo la espada lo hiriere,

su sangre será sobre su cabeza. 5 El sonido de la trompeta oyó, y no se apercibió; su sangre será sobre él;
más el que se apercibiere librará su vida. 6 Pero si el atalaya viere venir la espada
y no tocare la trompeta, y el pueblo no se apercibiere, y viniendo la espada, hiriere de él a alguno,
éste fue tomado por causa de su pecado, pero demandaré su sangre de mano del atalaya.
7 A ti, pues, hijo de hombre, te he puesto por atalaya a la casa de Israel,

y oirás la palabra de mi boca, y los amonestarás de mi parte”. Ezequiel 33:2-7



Dios le da a un atalaya:

1. Una visión profética (“viene la espada”)
2. Una voz clara (“trompeta”)
3. Un propósito (“apercibir/advertir/preparar a las personas”)
4. Una responsabilidad (“no usar la voz y no cumplir el propósito, traerá demanda de
parte de Dios”)

LA FUNCIÓN DEL ATALAYA:

1. REGISTRAR: Torre hecha comúnmente en lugar alto, para registrar desde ella el campo o el mar
y dar aviso de lo que se descubre.

“Un atalaya vive en las alturas y registra todo profundamente”

2. DESCUBRIR: Eminencia o altura desde donde se descubre mucho espacio de tierra o mar.

“Un atalaya tiene un estilo de vida de intimidad que le da revelación de lo que está oculto”

3. APRECIAR: Estado o posición desde la que se aprecia bien una verdad.

“Un atalaya tiene un sistema de valores alineado a la cultura del cielo y no a la de Babilonia”

4. AVISAR: Hombre destinado a registrar desde la atalaya (lugar) y avisar de lo que descubre.

“Un atalaya encuentra una forma clara y creativa de anunciar lo que Dios le ha mostrado”

• Hay muchas profecías que se hicieron sobre nuestra generación. ¿Vamos a responder al
llamado supremo de ser HERALDOS DEL REINO?


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