Está en la página 1de 70
El desarrollo psicosocial en los primeros tres ahos Soy como UN Nite que trata de hacerlo toda decirlo todo y serlo todo, todo al mismo tiempo Joba Havtford,°Li ¢Sabia que. * clorgullo, la vergiienza y la culpa son algunas de las iltimas emociones que se desarrollan? la conducta altruista es bastante comiin entre los nis pequefios? # enciertas culturas es comtin que fos infantes reciban euidados de cinco ‘o-mas personas en una hora determinada y que sean rutinariamente amamantados por mujeres distintas a la madre? ‘© enalgunas culturas no existe una etapa del desarrollo como fa de los “terribles dos aiios"? 4 elcontflcto con los hermanos 0 los compaiteros de juego ayuda a fos, nilfios pequefios a aprender a negociar y resolver disputas? * clefecto del empleo de los padres y de las guarderias es mucho menor que ciertas caractetisticas familiares como la sensibilidad de ta madre hacia su hijo? E” son s6lo algunos de los interesantes ¢ importantes femas que ‘vamos a revisar en este capitulo. En él detallamos el paso de la depen- dencia de la infancia a la independencia de la nfiez. Examinamos primero los fundamentos del desarrolio psicosocial: las emociones, el temperamen- to, el género y las primeras experiencias con los padres. Exponemos las opiniones de Erikson que conciernen al desarrollo de la confianza y la au- tonomia. Estudiamos las relaciones con los cuidadores, el surgimiento del sentido del yo y los cimientos de la conciencia. Exploramos las relaciones con los hermanos y con otros nifios. Luego examinamos el efecto cada vez mas generalizado del empleo de los padres y de las guarderias. Por tiltimo, analizamos el maltrato y la negligencia, que son més comunes en la infancia yla nfiez temprana, y lo que puede hacerse para proteger a los nilios de estos tipos de daito. Al finatizar el capitulo, podré responder las preguntas de la Guia de estudio contigua, SUMARIO Fundamentos det dosarrollo psicosocial Emociones + Tarperamento + Las imeres experiencias sociales: el bobs en la familia» Gnero: :Cudn tfrentes son los nies de las nites? Aspectos dol desarrollo on la Infancia Aspectos del desarrollo en ta niflez temprana £1 surginionto do! sonido dol yo * De- serrolo de fa autonomia * Las rafces el desarrollo moral: socalizecién e interme: eacién Contecto con otros nifios Hermancs * Soclbitied con otros nos Los hijos die padres que trabajen Etectos do! empleo materno * Cu- edo intent emprano Mattrato: abuso y nogiigencia Mattato: hochos y ciras + Factores {que contribuyen: ia parspectiva aco- igica * Co ayudar a as temilas on problomes * Etectos argo azo de! mattrato Apartado 6-1 westigacién en accién, eCémo afecta la depresién posparto fl desarrollo temprano? 2S0n necesarias las batallas con tos nifos pequetios? 47 Oude y o6mo se desa- ‘rola as emoctones y como los exprosan los beds? nersnnallcnd! Mezca relative ‘mente constanto de emociones, temperamento, pensamiento y Conducta que hace tinica a una persona, emoclones Reaccionss subj. twas ala experiencia asociadas ‘con cambios sil6gices y con- ‘ductuates. 178 Parte? Comienzos 4. Cuando y cémo se desarrolian las emociones y cOmo las expresan tos bebés? 2, Como muestran los infantes las diferencias de temperamento y qué tan durade. as son esas diferencias? 3. {Qué papel desempefian los padres en ef desarrollo temprano de la personalidad? 4. Cuando y cémo aparecen las diferencias de género? 5. Como adquieren los infantes confianza en su mundo y cémo establecen ape~ gos? 4Cémo interpretan ellos y sus cuidadores las sefiales no verbales del otto? 6. iCudndo y cémo surge el sentido del yo mismo? {Cémo ejercen los nifios peque- fios la autonomia y desarrollan las normas de conductas socialmente aceptabies? 7. 1Cémo interactian los infantes y los nifios pequetfos con los hermanos y con otros nifios? 8. 4Cémo influyen el empleo de los padres y las quarderias en el desarrollo de fos infantes y los nifios pequefios? {Cudles son las causas y consecuencias del maltrato y la negligencia hacia los nifios? Qué puede hacerse al respecto? Eee Fundamentos del desarrollo psicosocial ‘Aunque los bebés comparten patrones comunes de desarrollo, desde el inicio cada uno ‘muestra una personalidad distinta: la mezcla relativamente constante de emociones. tempe- ramento, pensamiento y conducta que hace tinica a cada persona (Eisenberg, Fabes, Guthrie y Reiser, 2000). Un bebé puede estar alegre casi siempre mientras que otro se mo- Testa con facilidad. Un pequefio juega contento con otros nifios, otro prefiere jugar solo. sas formas caractersticas de sentir, pensar y actuar (que reflejan influencias congenitas y ‘ambientales) influyen en la manera en que los nifios responden a los demas y se adaptan a su mundo, Desde ja infancia, el desarrollo de la personalidad se entrelaza con las relaciones sociales (tabla 6-1), combinacién a la que se conoce como desarrollo psicosocial. ‘En nuestra exploracién del desarrollo psicosocial vamos a estudiar primero las emo- cones, esto es, los componentes bésicos de la personalidad; luego veremos el temperamen- to, o disposicion, y después las primeras experiencias sociales del bebé on Ia familia. Mis adelante estudiaremos la manera en que los padres modelan las diferencias conduetwales entre nifios y nifias, ociones, ‘Las emociones, como la tristeza, la alegria y el miedo, son reacciones subjetivas ante di- vversas experiencias que se asocian con cambios fisioligicos y conductuales (Sroute, 1997), Las personas difieren en la frecuencia con que experimentan una emocién par ticular, en los tipos de sucesos que la producen, en las manifestaciones fisicas que mues- tran y en Ja manera en que actiian como resultado, La cultura influye en lo que siente gente acerca de una situacién y en la forma en que expresa sus emociones, Por ejemplo. ‘algunas culturas asiticas que otorgan prioridad a la armonia social, desalientan tn ex presién de la ira pero dan mucha importancia a la verelenza. En la cultura estalount dense, que hace hincepié en fa autoexpresidn, autoafirmacién y autoestima, suele past to contrario (Cole, Bruschi y Tamang, 2002). Hitos destacados del desarrollo psicosocial de infantes. y nifios pequefios, de! nacimiento a los 36 meses: Edad aproximada fen meses Corscteristicas os Los nines estan ablertos a la estiuacin, Empiazan a mostrar interés y ‘uiasidad,y sonrien con tactsd 2 a gore. 268 Pusden anticipar lb que ost a punto de sucedor y expermertan deco: 126n cuando no ccure. Lo demuestan enojandose 0 actuand con reco, Soren, arulan y rien con racuence. Este 9s un periodo de despertar 0c y de los pdmerosinercambios reciwocas ene al babe y el cua. 69 Partician en juegos sociales y tratan de obtener respuestas do fa gente Habana otros bebés, ls tocany los engatusan para hacer que respondan, ‘Expresan emoclones inde derenciads, tales como alogra, tame, ojo y sorprece, 2 ‘Se lacionan més estrechamente con su cidade principe, sknten tomer ‘ante los desconocices y actin tidamente en stuaciones nuovas. Cuando Ccumplen un afo comunican sus emacs con mayor clara y mussran ‘tados de dro, amtnvatoncia y maces dol sentmionto, 1248 Exploren su ambionte, para locus se apoyan en las personas a las que ‘estén més apegados. A medida que dominen el ambinto aaquieran més ‘confanza y se muestran ms entsiastas por aferarse. 18.96 En ocasiones muestan ansioded porque se dan Cuenta da lo mucho que se ‘estén separando de sus cuidadoros. Eaboran eu conciencia de aus ita Gores mediante la fantasia, juego y la ideniicacén con fs adutos. Fuerte: Adapt do Sut, 1979, Primeros signos de la emocién No hay lugar a dudas cuando una recién nacida es desdichada: suelta un lanto desgarrador, agita brazos y piernas, y endurece el cuerpo. Es ms dificil saber cuando estd contenta, Durante el primer mes los recién nacidos suelen tranquilizarse ante el sonido de una voz humana o cuando son tomados en brazos. Sonrien cuando sus manos se mueven al unisono para jugar a las palmaditas. A medida que. pasa el tiempo Jos bebés responden mis a las personas, sonrien, arrullan, alargan la ‘mano y, al final, se acercan a ellas. Esos primeros indicios o sefiales de los sentimientos de los bebs son indicadores importantes del desarrollo: loran cuando quieren o necesitan algo; cuando desean so- cializar, sonrien o rien. Cuando sus mensajes obtienen respuesta, aumenta su sentido de ‘conexién con la otra persona, Su sentido de control sobre el mundo también se incre- menta cuando ven que su llanto les procura ayuda y comodidad y que sus sonrisas y risas provocan, a cambio, lo mismo, Mejora su capacidad para participar de manera activa en la regulacién de sus estados de activacién y su vida emocional. Llanto_ Bs ia manera més eficaz (y en ocasiones la tinica) en que los bebés pueden co- ‘municar sus necesidades, Algunas investigaciones identificaron cuatro patrones de lanto (Wolff, 1969) el basico Hanto de hamnbre (un llanto ritmico que no siempre se asocia con el hambre); el Hanto de enojo (una variacién del lanto ritmico en el cual pasa un exceso de aire por las cuerdas vocales); el anto de dolor (an inicio repentino de llanto fuerte sin significado preliminar, que en ocasiones es seguido por la retencién del aliento); y el anto de frustracién (dos o tres Hantos interminables sin retencién prolongada del alien- 10) (Wood y Gustafson, 2001). ‘A algunos padres les preocupa malcriar a sus bebés silos levantan siempre quello ran. En un estudio, las demoras en la respuesta al alboroto parecian reducirlo durante tos primeros seis meses, posiblemente porque los bebés aprendieron a ocuparse por si mismos de las pequefias molestias (Hubbard y van [Jzendoorn, 1991), Sin embargo, si Capitulo 6 El desarrollo psicosocial en los primeros tres afios. 179 Jos padres esperan hasta que los Hlantos de angustia se consiv {an en chillidos de ira, puede ser una tarea mucho mis compli cada tranguilizar al bebé; y si ese patron se experiment vc manera repetida, puede interferir con el desarrollo de ta dad del nifio para regular 0 controlar su estado emocior A. Thompson, 1991). En condiciones ideales, el métadlo ms adecuado para facilitar el desarrollo es impedir el malestar. lo que hace innecesario tranquilizarl. E I \ i Sonrisas y visas Las primeras sonrisas, apenas perceptible, curren ce manera expontinea poco después del nacimient parecer como resultado de la actividad subcortical del sister | nervioso, Esassonriss involuotarias aparecen a menudo rante los periodos de suelo MOR (consulte el capitulo 4) y | lle ea fa i fics, yen ecsione fine, en gues erden Fecaencia durante los tres primeros meses & media teh pen comic sas eccses, Lopes een roto gue mada lx cortez (Srode, 1997) ‘rose sn eb load amb en sac or fies peered vere de ign ges Me ees sersciones sues como movimiento dlcadososapar en hy | | t do, En Ja tercera semana, casi todos los infantes empiezan a sonreir cuando estan alerts Y prestan atencién a la voz y los gestos de asentimiento del euidador. Mas 0 menos «tl mes de edad, las sonrisas se hacen mas frecuentes y mas sociales. Durante el segun. do mes, a medida que se desarrolla el reconocimiento visual, los bebés sonrien mi ciertos estimulos visuales, como los rostros que conocen (Sroufe, 1997; Wolff, 1963). En el cuarto mes, los infantes se rien a carcajadas cuando los besan o les hacen cos: Vrsootec ne quillas en el estomago. A medida que crecen, participan de manera mas activa en inte: cambios jubilosos. A los seis meses pueden soltar risitas en respuesta a sonidos inusules de la madre o al hecho de que ésta aparezca con una toalla sobre su rostro; un bebé ile ePuede.. 10 meses tratard entre risas de volver a taparle el rostro con la toalla si ésta se cae. Este % explcarel significado de _-—_ cambio refleja desarrollo cognoscitivo; cuando rien ante lo inesperado los bebés demues- fos patones de fanto, tran que saben qué esperar. Al invertir los papeles demnestran conciencia de que pueden sowisay rea? hhacer que las cosas pasen, La risa también ayuda a los bebés a liberar tensidn. como ‘cuando temen a un objeto amenazador (Sroufe, 1997). {Cudindo aparecen las emociones? El desarrollo emocional es un proceso ordensi- | do que desplicga una serie de emociones complejas a partir de otras mas simples. De acuerdo con un modelo muy popular del desarrollo emocional (Lewis, 1997; figura 6-11. poco después del nacitniento los bebés muestran signos de satisfaccién, interés y alle ‘cin, Son respuestas reflejas dfusas, principalmente fisiolbgicas, a la estimulacién senso rial © a procesos internos. Durante los siguientes seis meses, esos. primeros estados ‘emocionales se diferencian en verdaderas emociones: alegria, sorpresa, tristeza, rept nancia y luego enojo y temor, como reacciones a suicesos que tienen significado para el ‘omociones autoconseientes __Bifto. Como veremos en una seccién posterior, el surgimiento de esas emociones bisiv=s Emociones (como elbochorne. la © Primatias esté relacionado con el reloj bioldgico de la maduracién neurologice empatiay ia envi) que Sepen- Las emociones autoconscientes, como el bochomo, la empatia y la envidia, solo ap don de conciencia de simisme. yecen después de que os nifios han desarrollado la concieneia de si mismos: la compre conciencia de simismo Darse sin cognoscitiva de que poseen una identidad reconocible, separada y diferente del ‘uonta de que la exstonciay &! resto de su mundo. Esta conciencia de si mismo parece surgir entre los 15 y los 24 meses ‘uncionamiento propios estén : Sepatados do ede ois powso- — ¥ €8 Hecesaria para que los nifios puedan percatarse de que son el centro de atencion. as y cosas, identificarse con lo que “otros” sienten o para desear tener lo que tiene otra persona. ‘emoclones sutoevalustvas ‘Més 0 menos a los tres afios, una vez que adquirieron la conciencia de si mismos Emociones (como el opullo, ademés de una buena cantidad de conocimiento acerca de los estdndares, reglas y mi Ja vergenza y la culpa) que aceptadas por su sociedad, los nifios adquieren la capacidad de evaluar sus pensam Fear race eanenest deel tos, sus planes, sus deseos y su conducta en relacién con lo que se considera socialmente Soe te apropiado, Sdlo entonces pueden demostrar sus emociones autoevaluativas de orgu|lo. "ormas i contcta sociamente P acoptadas cculpa y vergiienza (Lewis, 1995, 1997, 1998). 180 Parte 2 Comienzos pee ers Figura 6-1 Satisiaccion interes ‘ASicsion iterencacién dots ernociones trea pores 1 Las eraconas pares 0s: skye soba Yea, Sagres cBomvernisc rows dare Snow scorers wo tn corcncn Soe ep na onmonatic ator Sharmcane maa cre ‘Sina vcmaraess tao anata onmnctn taonacrart woe orbs te sce Nr tn Civiee on aur Epreo tovracs oman lscor eayaniooe stove. eve pon ro toe so Sano osc sconce too dbo rhe Soran pace ar ett pepe sien Rae not vn Doles 18 ‘los 24 meses aay dt ‘de romea yledoai | i De2% asares Empatia y altruismo A un invitado del padre de Alex, un nifio de 18 meses de edad, _empatia Gapacidad para ponor- i iso y rode ., se en el ugar do otra persona y 8 quien el pequeio no conoca, se le cay su pluma al piso y rod debajo de un arma- $= enol ua do oa po io donde no podia alcanzarla. El nifio, suficientemente pequefio, gated debajo del armario, recuperé la pluma y la entregé al invitado, Al actuar movido por ‘84 preocupacién por un desconocido sin una expectativa de recompensa, * Alex demostré conducta altruista (Warneken y Tomasello, 2006). : Conductas altruistas como la de Alex son bastante comunes. En un ‘experimento, nifios de 18 meses ayudaron en seis de 10 situaciones en las que el experimentador tenia problemas para alcanzar una meta, pero no lo © hicieron en una situacién similar en que cl experimentador no parecta tenet problemas, por ejemplo, cuando dejaba caer una pluma de manera delibe- rada, Dichas conductas pueden reflejar empatia, Ia capacidad creciente para imaginar lo que puede sentir otra persona en una situacién particular (Zahn- Wexler, Radke- Yarrow, Wagner y Chapman, 1992). Esta capacidad para “ponerse en el lugar de otra persona” parece surgir en el segundo afio y aumenta con la edad (Eisenberg, 2000; Eisenberg y Fabes, 1998). _ Crecimiento del cerebro y desarrollo emocional EI desarrollo del cerebro después del nacimiento se relaciona de manera estrecha con los cambios en la vida emocional: las experiencias emocionales no sélo son influidas por el desarrollo del cerebro sino que también pueden tener efec- tos duraderos sobre su estructura (Mlot, 1998; Sroufe, 1997). Cuatro cambios importantes en la organizacibn del cerebro suceden TE CaeeE casi al mismo tiempo que los cambios en ef procesamiento emocional ue no se camporian a la atara de as nor (chore, 1994; Sout, 197; consult a figura 48), Durante los tes prime- us decane rues» emendre ros meses, a medida que la corteza cerebral incrementa su funcionalidad medida qu y la culpa se desarale etre ls edades de? y medio empieza la diferenciacién de las emociones basicas, lo que pone en juego yj afox Capituio 6 El desarrollo psicosocial en los primeros tres afios 181 Va ePuede.. deta fs secuencia tp ca del supimiento de las ‘emociones bésica, las que impican conciencia {dost mismo y las emo ones evauativas, y ‘explicar su relacién con ‘41 dosarrello cogneset voy neurogiea? Pregunta 2 de la guia {0éme mussiran los nfantes las diforencias de tempera- mento y qus tan duraderas son esas dferencias? temperamento Disposiciin 0 ‘stio caractertico de avercarse yy reaccionar ante las situaciones. 182 Parte 2 Comienzos peroepeiones cognoscitivas. Disminuyen el suelo MOR y Ia conducta refleja, como por cjemplo la sonrisa neonatal espontanea, El segundo cambio ocutte alrededor de los nueve 0 diez meses, cuando los buhay Jrontates empiezan a interactuar con el sistema limbico, asiento de las reacciones emocin- nales. Al mismo tiempo, algunas estructuras limbicas como el hipocampo crecen ¥ se hracen mas parecidas a lus adultas. Las conexiones entre la corteza frontal, el hipotilins yeel sistema limbico, que procesa la informacidn sensorial, pueden facilitar fa relacion entre las esferas cognoscitivas y emocionzlles. A medida que esas conexiones se vuclven mas compactas y complejas, el bebs puede experimentar ¢ interpretar varias emociones al mismo tiempo. El tercer cambio tiene lugar durante el segundo aito, cuando fos infantes desarvollan Je conciencia de si mismos, las emociones que implican dicha conciencia y una mayor capacidad para regular sus emociones y actividades. Esos cambios, que coinciden con ‘una mayor movilidad fisica y conducta exploratoria, pueden estar relacionados con la mielinizacién de los lébulos frontales El cuarto cambio ocurre alrededor de los tres afios, cuando las alteraciones hormo- nales del sistema nervioso auténomo (involuntario) coinciden con la aparicién de las emociones evaluativas. Al desarrollo de emociones como Ia vergilenza puede subyacerles un alejamiento del dominio del sistema simpético, la parte del sistema auténomo que prepara al cuerpo para la accidn, a medida que madura el sistema parasimpético, la par~ te del sistema auténomo que participa en la excrecion y Ia excitacién sexual Los factores neurolégicos también pueden participar en las diferencias de tempera- mento (Mlot, 1998), tema que estudiaremos a continuacién, Temperamento En ocasiones el temperamento se define como la forma caracteristica, basada en la bio- Jogia, en que una persona se aproxima y reactiona ante la gente y las situaciones. Se le ha deserito como el cémo de la conducta: no lo qué hace la gente, sino cémo lo leva a ‘cabo (Thomas y Chess, 1977). Por ejemplo, dos nifios pequefios pueden tener la misma capacidad e igual motivacién para vestirse por s{ solos, pero uno puede hacerlo con ma- yor rapidez que el otro, mostrar mayor disposicién @ ponerse un conjunto nuevo y a istraerse menos siel gato salta a la cama. Algunos investigadores examinan el tempera mento en términos més generales, Un nifio tal vez no actie de la misma forma en todas las situaciones. Ademas, el temperamento no s6lo influye en la manera en que los niiios se aproximan y reaccionan ante el mundo exterior, sino en la manera en que regulan st funcionamienio mental, emocional y conductual (Rothbart, Ahadi y Evans, 2000) El temperamento tiene una dimensién emocional, pero, a diferencia de las emocio- nes que vienen y van, como el temor, el entusiasmo y el aburrimiento, es bastante estable y duradero, Las diferencias individuales entre temperamentos, que se cree que s¢ derivian de la estructura biolégica basica de una persona, constituyen el nticleo de Ia persomli- dad en desarrollo. Estudio de los patrones de temperamento: el Estudio Longitudinal de Nueva York Para entender mejor cémo influye el temperamento en ta conducta, veamos el ‘caso de tres hermanas. Amy, la mayor, fue una bebé alegre y tranquila que comia, dormit y evacuaba en horarios regulates. Acogia cada dia y a la mayoria de la gente con una sonrisa, y la tinica sefial de que estaba despierta durante la noche era el tintineo del ju ‘guete musical en su cuna, Cuando Brooke, la hermana del medio, se despertaba, abria lat boca para llorar antes incluso de abrir fos ojos. Dormia y comia poco y de manera irre- ‘gular; refa y loraba con fuerza, y & menudo estallaba en pataletas; tenia que ser conven- ciida de que las personas y las experiencias nuevas no eran una amenaza antes de que aceptara relacionarse con ellas. La hermana menor, Christina, era de respuestas mode radas, positivas y negativas. Le desagradaban la mayoria de las situaciones nuevas. er si se le permitia avanzar a su propio ritmo, a la larga se interesaba y se involucraba, 2 , ni ‘Tres patrones de temperamento (de acuerdo con el Estudio Longitudinal de Nueva York) Ni téir ito “a No “eno para animarae! Latnenadad de a esos de aro, bo ouane do nino Teneony por” La Raded ea ace, no al torlorogdorpoevas ve delve” requsrrepevs. ea arate anes come rapt ose mroceace ‘ve arbor sori caress espn Dena novecsy cambio. Fasponde rela Browckd yalcaTbo, Responds de mene ala novedad y eanbo Dusaola con pn roto ret Duane cre de mares rosa Der y came con mls edad uw deste y aera, wo a, pap Sn ner ead Go tit cae. comes nas cone, Ea lertopaa acne russ akrnios. Mesa une esp. hil rranio ‘Sonrie @ los desconocidos. ‘Se muestra suspicaz ante los desconocidos. a a tos ee catimulos fun ips Seeder conc als tusones Seadpcon nse ruoms ste SEUTHO conn unto, sone Nose fone ameyora dels hsiscores _Peecoor ala fustactn con pats con pace abort Se opt pono ale tras yg co Seats conlnitoda ke mvs ues. Dasara de mera dba aro por ia gon nove, ie ruven otis Gaspte do oe! ‘iones repetidasy sin presi. Fuente: Acad de Thoms, Ay. Chess, “Gans ard Evolution of Behavera Disorces: From rer o Ey Raut Ut’, en Arnecan Jeu of Pay, 1H) 1984, pp. 1-9, Cony © 1984 oe fa Amarcan Psy Asselin, Roped cen autores. ‘Amy, Brooke y Christina cjemplifican los tes tipos principales de temperamento que ‘encontré el Estudio Longitudinal de Nueva York. En este estudio pionero sobre el tempe- ramento, los investigadores siguieron a 133 infantes hasta la adultez; examinaron cual era st nivel de actividad, cudn regulares eran sus habitos de alimentacién, suefio y evacua- cién; con qué facilidad aceptaban a personas y situaciones nuevas; cémo se adaptaban a Jos cambios en sus rutinas; cual era su grado de sensibilidad al ruido, alas huces brillantes ¥.a otros estimulos sensoriales; con cuanta intensidad respondian; si su estado de animo teridia‘a Ser agradable, alegre y amistoso o desagradable, desdichado y poco amistoso; y si persistian en las tareas 0 se distraian con facilidad (A. ‘Thomas, Chess y Birch, 1968). Los investigadores pudieron ubicar a la mayoria de los nifios del estudio en una de tres categorias (tabla 6-2). + Cuarenta por ciento cran niios “faciles” como Amy: por lo general eran felices, su nifios “ciles" Nios con tem- funcionamiento biologico era ritmico y aceptaban las nuevas experiencia. aramento por lo gonera fez, rtmos botgicos regulars y Gon + Diez. por ciento eran lo que los investigadores llamaban nilios “difiites” como dlisposicin a aceptar las nuevas Brooke: més irritables y dificiles de complacer, con ritmos biolbgicos irregulares y __°xberiencias mis intensos en la expresion de sus emociones. nitios “aces Nios con tem poramento lta, rimos Bo: + Quince por ciento eran nifios “lentos para animarse” como Christina: afables pero len lagieos segues yrespuestes {os para adaptarse a personas y situaciones nuevas (A. Thomas y Chess, 1977, 1984). _emocionalas intensas. Muchos nifios (entre ellos 35% de Ja muestra del Estudio Longitudinal de Nueva __Nifios cuyo tomparamento por York) no encajan de manera perfecta en ninguna de esas tres categorias Un bebé puede 0 general €s afable pero que se comet y dormir de manera regular pero temer a los desconocidos. Un nifo puede ser estan vate speedo fécil la mayor parte del tiempo, pero no siempre. Otro pequefio puede ser lento para anaes adaptarse a los alimentos nuevos pero hacerlo con rapidez a las niferas nuevas (A. ‘Thomas y Chess, 1984). Un nifio puede reir a carcajadas pero no mostrar frustracion intensa, y uno con habitos regulares de evacuacién puede mostrar un patron irregular de suefio (Rothbart eta, 2000). Todas esas variacones son normale Capitulo 6 El desarrollo psicosocial en los crimerostresafios 183 pee ee ermemars asin fre de yey tetas US cha ateeio a as emacionsn, com la nevesdad ge un cio lemperamento foil bbondad del ajuste Adecuacién dl temperamento de un rio a las exigencias y las esticelones Parte 2 Comienzos {Qué tan estable es el temperamento? El temperamento parece ser en gran medida innato, probablemente hereditario (Braungast, Plornin, DeFries y Fulker, 1992; Emde et ai, 19925 Schmitz et al., 1996; A. ‘Thon y Chess, 1977, 1984) y bastante estable, Los bebés recién nacidos muestratn patrones diferentes de suefio, inquietud y actividad, diferencias que, hastx cierto punto, tienden & persistir (Korner, 1996; Korner et ai., 1985). Grw pos de investigadores que usaron categorias similares a las del Estudio Longitudinal de Nueva York descubrieron que el temperamento a lt eval de tres afios permite hacer una buena prediecién de la personalidad it los 18y 21 aftos (Caspi, 2000; Caspi y Silva, 1995; Newman, Caspi, Moffitt Silva, 1997), Sin embargo, eso no significa que el temperamento esté completumen: te formado al nacer. El temperamento se desarrolia a medida que aparecen varias emociones y capacidades de autorregulacién (Rothbart et al, 2000) y puede cambiar en respuesta al trato de los padres y a otras experiencias de la vida (Belsky, Fish c Isabella, 1991; Kagan y Snidman, 2004), En cl temperamento también repercuten pricticas de crianza influidas por ta cultura. En Malasia los infantes tienden a ser menos adaptables, a descon- fiar mas de las nuevas experiencias y a responder con mayor prontitue! « los estimalos que los bebés estadounidenses, Estas actitudes pueden deber- se a que no ¢s frecuente que los padres malayos expongan a los nifios pe- quefios a situaciones que requieren adaptabilidad ni que tos alienten de paiial (Banks, 1989), ‘Temperamento y ajuste: la bondad del ajuste De acuerdo con el Estudio lone inal de Nueva York, la clave para lograr una adaptacién sana es la bondad del ajuste. la ‘correspondencia entre el temperamento del nifio y las exigencias y restricciones del ain- biente de las que el nifio debe ocuparse. Pueden ocurrir problemas si se espera que un nifio muy activo permanezca inmévil por largos periodos, si a uno Jento para anim: se le empuja de manera constante a nuevas situaciones, 0 si a uno persistente se le leit de manera reiterada de proyectos absorbentes. LLos padres que reconocen que un nifio actia de cierta manera debido a tendenciss innatas y no por terquedad, pereza o estupidez son menos propensos a sentir cul ansiedad y hostilidad, a creer que perdieron el control o mostrar rigidez o que son imp. cientes, Pueden anticipar las reacciones del nifto y ayudarlo a adaptarse, por ejemplo. si Jo introducen de manera gradual a nuevas circunstancias o le advierten en forma tempr na de la necesidad de detener una actividad. \ | | ‘Timidez y osadia: influencias de la biologia y la cultura Como hemos mencioni- do, el temperamento parece tener una base biolégica. En una investigacién longitudinal con cerca de 500 nifios que se inicié en la infancia, Jerome Kagan y sus colegas estuclia- ron un aspecto del temperamento llamado inkibicin ante lo desconacido 0 timider, ste estd relacionado con la osadia 0 la cautela con que el nifio se acerca a los objetos 0 tuaciones desconocidas. ‘Cuando se les present6 a los cuatro meses una serie de nuevos estimulos, alrededor de 20% de los infantes loraron, agitaron los brazos y piernas y en ocasiones arqueaion la espalda; a este grupo se le lad inhibido o “altamente reactivo”. Cerca de 40% mos- 116 poco malestar 0 actividad motora y era mas probable que sonriera espontaneamente: 4 estos nifios se les etiqueté como desinhibidos o “poco reactivos”. Los investigadores sugirieron la posibilidad de que los nifios inhibidos nacieran con una amigdala inusta~ mente excitable, una parte del cerebro que detecta y reacciona a los sucesos poco fami liares y que participa en las respuestas emocionales (Kagan y Snidman, 2004), Los bebés que fueron identificados como inhibidos o desinhibidos parecian i; ner en cierta medida esos patrones durante la nifiez (Kagan, 1997; Kagan y Snidinsn. 1991, 1991b, 2004), junto con algunas diferencias especificas entre las caracteristicas fisiol6gicas. Los nilios inhibidos eran mas propensos a tener una estructura corporal delgada, cara estrecha y ojos azules, mientras que los nifios desinhibidos eran mas altos, sas pesados y con mas frecuencia tenian ojos marrones. Adcmés, los primeros mostra- ban frecuencias cardiacas mas altas y menos variables y mayor dilatacién de las pupilas (Arcus y Kagan, 1995). Es posible que los genes que contribuyen a generar la teactivi dad y la conducta inhibida o desinhibida también influyan en esos rasgos fisiol6gicos (Kagan y Snidman, 2004), Las diferencias conductuales entre esos dos tipos de nifios tendian a suavizarse en la adolescencia temprana, aunque se mantenian las distinciones fisiolégicas. Sin embargo, menos de 5% de cada grupo desarrolié las caracteristicas conductuales del otro tipo. Por ejemplo, algunos nifios muy reactivos ya no parecian tan timidos, pero no mostraban la espontaneidad relajada caracteristica de los poco reactivos (Kagan y Snidman, 2004). A la edad de 15 afios, habia una mayor desconexién entre la conducta y la biol edades nds tempranas. Aun asi, més individuos reactivos eran sometidos a desconocidas y reportaban ansiedad acerca del futuro (Kagan, Snidman, Kahn, y Towsley, 2007). Esos hallazgos indican, de nuevo, que la experiencia puede moderar 0 acentuar las tendencias tempranas. Era més probable que los nifios pequefios propensos a ser teme- rosos y timidos se mantuviesen igual a los tes afios si sus padres aceptaban las reaccio- nes del nifio. Si éstos alentaban a sus hijos a aventurarse a nuevas situaciones, los pequefios tendian a reducir su inhibicién (Park, Belsky, Putnam y Crnic, 1997). En otra investigacién, cuando las madres tespondian de manera poco sensible a los bebés de ‘conducta inhibida, ta inhibicién tendia a mantenerse estable o a incrementarse. Esos autores sugirieron que la poca sensibilidad en la conducta de cuidado puede alterar los sistemas neuronales que subyacen a las reacciones al estrés y la novedad (Fox, Hane y Pine, 2007). Otras influencias ambientales, como ef orden de nacimiento, la raza w origen @tnico, la cultura, las relaciones con los maestros y los compaiieros, asi como sucesos impredecibles también pueden reforzar o suavizar el sesgo temperamental original de un nifio (Kagan y Snidman, 2004). Las primeras experiencias sociales: el bebé en la familia Las pricticas de cuidado infantil y los patrones de interaccién muestran grandes varia- ciones alrededor del mundo, las cuales dependen de la visién que tenga la cultura de la naturaleza y las necesidades de los infantes. En Bali se cree que los bebés son ancestros renacidos o dioses traidos a la vida en forma humana, por lo cual deben ser tratados con suma dignidad y respeto. Los beng de Africa occidental piensan que los bebés pequefios pueden entender todos los idiomas, mientras que la gente del atolén Ifaluk en Micronesia ‘cree que los bebés no pueden entender ningiin idioma y en consecuencia los adultos no Jes hablan (DeLoache y Gottlieb, 2000). En algunas sociedades, los infantes tienen mélkiples cuidadores. Entre los efe de Africa central, 1os bebés suelen recibir atencién de cinco o ms personas a determinada hora y son rutinariamente amamantados por otras mujeres ademas de la madre (Tronick, Morelly e Ivey, 1992). Entre los gussi de Kenia occidental, donde la tasa de mortalidad infantil es alta, los padres mantienen a los infantes cerca de ellos, responden con rapidez ‘cuando Horan y los alimentan cuando lo solicitan (LeVine, 1974, 1989, 1994). Lo mismo sucede entre los forrajeros aka (cazadores y recolectores) de Africa central, quienes se

También podría gustarte

  • Caso 3.SDS
    Caso 3.SDS
    Documento1 página
    Caso 3.SDS
    SARA MARIA BORQUEZ SIQUEIROS
    Aún no hay calificaciones
  • Informe de Belarmino
    Informe de Belarmino
    Documento2 páginas
    Informe de Belarmino
    SARA MARIA BORQUEZ SIQUEIROS
    Aún no hay calificaciones
  • 16 PF Calificación
    16 PF Calificación
    Documento4 páginas
    16 PF Calificación
    SARA MARIA BORQUEZ SIQUEIROS
    Aún no hay calificaciones
  • Roles de Grupo
    Roles de Grupo
    Documento1 página
    Roles de Grupo
    SARA MARIA BORQUEZ SIQUEIROS
    Aún no hay calificaciones
  • Cartel Lola
    Cartel Lola
    Documento1 página
    Cartel Lola
    SARA MARIA BORQUEZ SIQUEIROS
    Aún no hay calificaciones
  • Desarrollo Humano
    Desarrollo Humano
    Documento5 páginas
    Desarrollo Humano
    SARA MARIA BORQUEZ SIQUEIROS
    Aún no hay calificaciones
  • ANALFABETISMO
    ANALFABETISMO
    Documento15 páginas
    ANALFABETISMO
    SARA MARIA BORQUEZ SIQUEIROS
    Aún no hay calificaciones
  • NEUROPSICOLOGÍA
    NEUROPSICOLOGÍA
    Documento3 páginas
    NEUROPSICOLOGÍA
    SARA MARIA BORQUEZ SIQUEIROS
    Aún no hay calificaciones
  • Analisis de Mercado
    Analisis de Mercado
    Documento3 páginas
    Analisis de Mercado
    SARA MARIA BORQUEZ SIQUEIROS
    Aún no hay calificaciones
  • Modelos en La Evaluación Psicológica Sara Borquez
    Modelos en La Evaluación Psicológica Sara Borquez
    Documento3 páginas
    Modelos en La Evaluación Psicológica Sara Borquez
    SARA MARIA BORQUEZ SIQUEIROS
    Aún no hay calificaciones
  • Eje Hipotálamo-Hipofisario
    Eje Hipotálamo-Hipofisario
    Documento4 páginas
    Eje Hipotálamo-Hipofisario
    SARA MARIA BORQUEZ SIQUEIROS
    Aún no hay calificaciones