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CURSO DE ASTROLOGIA

NIVELACION UCLA
PROGRAMA 2º AÑO

Dictado por Ariadna Flores Vitelli


Astróloga

Temario:
 Cap.1. Repaso práctico de las Casas, sus lugares y personajes.
 Cap.2. Repaso de la fuerza de los planetas por dignidades y por astrodinas
 Cap.3. Repaso de los tránsitos, con énfasis en la conjunción Júpiter-Saturno
 Cap.4. Los juicios generales y el índice de destino
 Cap.5. Revolución solar. Relocación. Astocartografía angular y de azimut
 Cap.6. Partes arábigos en revolución solar. Técnicas de aprovechamiento y precaución
 Cap. 7. Repaso de Progresiones
 Cap. 8. Repaso de Direcciones y Atacires, con Flores Armónicas
 Cap. 9. Repaso de Harmogramas (tránsitos, progresiones, direcciones)
 Cap.10. Aspectos exóticos (visto en Nivelación I)
 Cap. 11. Estrellas bebenias (visto en Nivelación I).

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Material recopilado en el año 2020 por Ariadna Flores, Astróloga.
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NIVELACION UCLA II

Cap.3. Repaso de tránsitos, con énfasis en la conjunción Júpiter-Saturno.

El ritmo cósmico impreso en el Cielo se manifiesta en acontecimientos en la Tierra, gracias a


la Sincronicidad, con el devenir de los días, las lunas y las estaciones.

Con la Astrología se intenta develar cómo el hombre queda marcado por estos ritmos,
interpretando su promesa natal y el desarrollo de la misma con los ciclos cósmicos,
recordando que el individuo no experimentará cosas que no estén presentes en forma
potencial en su carta natal. Tampoco se puede olvidar que la calidad de la experiencia
dependerá del manejo del individuo en el cual inciden otros factores que no son astrológicos
(genética, crianza, entorno, etc.). Es importante acotar que cada persona guarda en su
memoria sus experiencias y cuando éstas son activadas nuevamente por alguna
configuración planetaria, la reacción dependerá no sólo de la energía involucrada sino
también del recuerdo acumulado asociado a dicha energía.

Para predecir acontecimientos y sus posibles fechas se utilizan diversas técnicas


astrológicas, entre las cuales se encuentran los Tránsitos, la Revolución Solar, las
Progresiones, las Direcciones Primarias, las Lunaciones, etc.

Así como cada día se convierte en noche y la noche vuelve a ser día, así las figuras
planetarias cambian infinitamente, debido a los movimientos de los planetas. Esto significa
que la carta natal no es estática, sino que sigue una evolución a medida que los planetas
siguen su rumbo alrededor del Sol día tras día, año tras año, siglo tras siglo, etc. Tenemos
épocas buenas y épocas malas, periodos agradables y otros en lo que todo parece venirse
abajo. Pero nada permanece en el mismo estado y todos los momentos pasan.

Este movimiento planetario interminable es lo que se conoce como Tránsitos y nos permite
atisbar lo que podría venir próximamente, a fin de prepararnos mejor para los
acontecimientos, en lugar de luchar contra la corriente. Es importante resaltar que las
oportunidades se dan y la gente apropiada aparece, y estos dos factores tienden a unirse a
nuestra vida, cuando el tiempo está maduro. Si “forzamos la barra”, tal vez consigamos lo
que queremos pero no lo que necesitamos. De modo que con la Astrología aprendemos que
existe un tiempo para todo, lo que no significa que nos quedemos sentados sin hacer nada
esperando que las cosas nos caigan del cielo, sino que más bien aprovechamos para ver qué
podemos hacer para mejorar nuestros ciclos.

Los tránsitos nos dan pistas, y si no los tomamos con responsabilidad, seremos víctimas de
las circunstancias, pero si los asumimos con conciencia podremos tener un mejor control de
nosotros mismos y de nuestro entorno.

A medida que los planetas se mueven en el cielo, van haciendo aspectos a los planetas de la
carta natal. Estos aspectos se relacionan con nuestros procesos internos que resultarán en
acontecimientos que se verán en lo externo. Estudiar los aspectos formados por los tránsitos
nos permitirá predecir las posibles alternativas para la resolución de un evento que se
avecina. Los planetas natales en la carta son los llamados “promisores” (porque son la
promesa natal), y los que transitan formando aspectos son los llamados “significadores”
(porque dan el significado de la energía que activará un evento). Sin embargo, dependiendo
de la bibliografía consultada, se podrá encontrar que la definición es totalmente al contrario:
significador el planeta natal, y promisor el planeta en tránsito, alegando que el planeta natal

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lleva su significado hacia donde se mueve mientras transita, y la promesa se cumple con un
determinado tránsito. A saber:

Denominamos “significador” a todo elemento de la carta natal que se encuentra fijo y que
por sus características es el portador de los significados de la casa que representa o de un
significado sobre el que posteriormente actuarán los “promisores” que prometen modificar o
enriquecer con sus diferentes características interpretativas y en el tiempo en que
mensuremos su movimiento mediante la clave que hayamos decidido utilizar, aquello que
nos indica el “significador”.
Ref: “Entre Direcciones y Atacires… entre Tránsitos y Progresiones…. ¿qué sistema utilizar?”, publicado por Néstor
Echarte, el 29/06/2014.
http://www.urania.com.ar/index.php/astrologia/investigaciones/18-entre-direcciones-y-atacires-entre-transitos-y-
progresiones-que-sistema-utilizar

Entre los planetas en tránsito se puede esperar diferentes sucesos dependiendo de su


movimiento y de su arquetipo. Los planetas personales se mueven más rápidamente
(tránsitos cortos o rápidos) y los sociales y transpersonales se mueven lentamente (tránsitos
largos o lentos).

La diferencia entre los tránsitos lentos y los rápidos, es que los primeros marcan
acontecimientos importantes y decisivos, tendencias a largo plazo que pueden ser muy
significativas; mientras que los segundos indican cambios de ánimo o actitud diaria, o
situaciones pasajeras, “casualidades”. Los planetas rápidos son disparadores del momento
en que ocurrirá el acontecimiento significativo indicado por los planetas lentos.

3.1.- Tránsitos Fáciles y Difíciles.

El antiguo enfoque de tránsitos “buenos” y “malos” ha cambiado en la Astrología moderna.


Nada es bueno o malo, simplemente es, y los resultados dependerán del enfoque que
nosotros mismos damos a los acontecimientos. Además, los tránsitos son necesarios para la
evolución del ser, sean “buenos” o “malos”.

Los tránsitos “difíciles” significan momentos de tensión o fases críticas de un ciclo, pero no
son necesariamente “malos”. Ellos se experimentan a través de presiones, fricciones,
ansiedades o resistencias que nos impulsan a resolver los problemas en vez de ignorarlos.

Los tránsitos “fáciles” significan momentos en que las cosas encajan y fluyen sin trabas o las
fases críticas finalmente se resuelven, pero no son necesariamente “buenos”. Ellos se
experimentan a través de alegrías, oportunidades, ayudas, sensación de expansión o
liberación que nos llevan a la tranquilidad y la relajación. Esto puede ser un arma de doble
filo, pues la comodidad de estos tránsitos nos impide reaccionar ante las dificultades.

El hecho de que un tránsito sea “fácil” o “difícil” tampoco se puede atribuir a trígonos o
cuadraturas respectivamente, si hablamos de aspectos. Depende de la combinación de
planetas involucrados y del tipo de contacto que ellos tengan a su vez en la Carta Natal. Por
ejemplo, aunque se trate del mismo aspecto, una conjunción de Júpiter sobre el Sol no
tendrá el mismo efecto que una conjunción de Saturno sobre ese mismo Sol.

Tampoco puede decirse que un tránsito “bueno” o “malo” depende siempre de un planeta
“benefactor” o “maléfico”. Por ejemplo, Júpiter no causará el mismo efecto por trígono que
por cuadratura.

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Por lo tanto, la interpretación de los tránsitos es todo un arte en el que se combinan


planetas, aspectos, la energía natal, la energía del tránsito y mucho de conocimiento e
intuición del astrólogo. Además, la interacción con el consultante es primordial, a fin de
establecer el tipo de proceso que está viviendo y hacia dónde se encamina el mismo, ya que
una casa sobre la que ocurre un tránsito tiene muchos significados. Por ejemplo, un tránsito
por la Casa VIII habla de crisis, de muerte, pero también de administración del dinero ajeno.
¿Cuál de los temas está afectando al individuo en cuestión? Sólo la comunicación entre el
astrólogo y el consultante lo puede aclarar para llevar a una mejor orientación. No se trata
de adivinar.

Recordemos que “los astros inclinan pero no determinan”. Nuestra fortaleza interna y
nuestras propias capacidades harán que un tránsito difícil pueda ser derrotado. Asimismo,
nuestras debilidades podrán desbaratar las bondades de un tránsito positivo. Cualquier
tránsito que nos traiga un mensaje de cambio que nosotros no escuchemos por estar
aferrados a pautas de comportamiento, desembocará en acontecimientos desagradables.

3.2.- Orbes para los Tránsitos.

No hay una norma exacta para los Tránsitos. En general se habla de 2º antes y 2º después
del grado partil del tránsito en cuestión. Sin embargo, este orbe se puede ampliar y hay
quien trabaja con 5º antes y después. En general se usan orbes más amplios para planetas
rápidos y orbes más cerrados para planetas lentos. Otros en cambio plantean que, para
planetas rápidos, el orbe antes puede ser hasta de 5º y el efecto puede sentirse antes del
aspecto partil y deja de sentirse casi inmediatamente después del mismo, es decir, no hay
orbe después. En cambio, para los planetas lentos el efecto no sólo empieza antes, sino que
puede continuar aun después de haber superado el aspecto partil por 3º ó 4º (como el
sonido de un gong que va disminuyendo progresivamente). En lo que todos parecen
coincidir es en que el efecto de los tránsitos se siente antes de llegar el aspecto partil, por
días, semanas o incluso meses, en especial si se trata de planetas lentos o cuando los
planetas se ponen “estacionarios” (cambiando de directo a retrógrado o viceversa).

3.3.- Uso de las Efemérides.

Si deseamos saber cómo están moviéndose las energías planetarias, podemos mirar las
Efemérides por un periodo de tiempo determinado. Allí encontraremos las posiciones
planetarias día a día, las cuales podremos dibujar sobre la carta natal para ver qué aspectos
se forman entre los significadores y los promisores, a fin comprender las tensiones y las
oportunidades que se están presentando. A medida que se mueven los planetas, vemos las
fechas en que ocurren los aspectos partiles, así como las fechas que incluyen los orbes antes
y después del aspecto partil, para así calcular el rango de tiempo en que se activarán los
acontecimientos. Combinando aspectos y tiempos, se podrá entonces tomar decisiones
importantes en las fechas más apropiadas.

Un mismo planeta natal podrá estar aspectado al mismo tiempo por diferentes planetas en
tránsito, formándose así un punto sensible en la carta, por lo que es esperable un proceso
importante o un acontecimiento. Si además los planetas involucrados en el tránsito están en
contacto en la carta natal, el tránsito se sentirá más intensamente que si no lo están. Es lo
que se conoce como tránsitos activos y pasivos (el hecho de que sean pasivos no significa
que no pasará nada).

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3.4.- Ciclos y retornos.

Los planetas transitan alrededor del zodiaco y cada cierto tiempo regresan a su punto de
partida, que es la posición que tenían al momento de nuestro nacimiento. El llegar de nuevo
a ese punto inicial es lo que se conoce como el retorno de un planeta. Dependiendo de la
velocidad de cada uno, los retornos ocurren en diferentes tiempos.

El retorno solar ocurre cada año, así como el de Mercurio y el de Venus. El de Marte es cada
dos años. El de Júpiter tarda 12 años y el de Saturno entre 28 y 30 años. El retorno lunar lo
vivimos cada 28 días.

En cuanto a los planetas transpersonales, el retorno de Urano ocurre a los 84 años. Y no


tenemos retornos de Neptuno ni Plutón pues no vivimos lo suficiente como para completar
un ciclo de estos planetas que son extremadamente lentos.

El ciclo para completar un retorno suele dividirse en cuatro cuadrantes, que se manejan de
forma similar al ciclo lunar:

Cuadrante IV:
Evaluar Cuadrante III:
resultados. Cosechar la
Recompensas. experiencia,
Cerrar ciclo. ver resultados,
Planificar inicio llegar a la cima
de un nuevo ciclo

Cuadrante I: Cuadrante II:


Aprender, Aplicar lo
iniciar aprendido

3.5 – Los planetas, sus tránsitos y ciclos.

A continuación se explicará brevemente el efecto que los planetas en tránsito pueden


significar sobre una carta natal. Los tránsitos más sensibles son los que ocurren sobre los
planetas personales, especialmente Sol y Luna, pues se viven de una forma más directa a
través de acontecimientos tangibles. Cuando los tránsitos son a planetas sociales o
transpersonales, los efectos podrían ser menos evidentes, aunque pasado un tiempo, la
persona podrá reconocer los cambios en su forma de actuar o de pensar ante ciertas
circunstancias, el cambio de enfoque o actitud con su entorno. Aun así, no se descarta que
puedan ocurrir acontecimientos externos visibles.

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Mercurio.
Los tránsitos de mercurio darán un matiz intelectual y lógico al acontecimiento que se pueda
activar. También podrían darse negociaciones, o podrían llegar noticias importantes. Eventos
relacionados con comunicación también podrían activarse. Indica cambios de enfoque
mental y de atención cuando transita las casas y planetas.

Tomando en cuenta la capacidad de Hermes de bajar al inframundo y salir de allí, no sería


de extrañar que un tránsito de Mercurio nos traiga algún “insight” importante. Depende de
nosotros utilizar la capacidad de nuestro Hermes para iluminar nuestro entendimiento y
procesar aspectos de la sombra, es decir, no conformarnos con la mente concreta, sino
aventurarnos en la oscuridad. Seguramente esto será más fácil para alguien con Mercurio en
Escorpio, Piscis, Casa 12 o Casa 8.

Cuando Mercurio se pone retrógrado son muy comunes las historias de documentos
extraviados, errores en los escritos, fallas mecánicas de los vehículos, fallas en los equipos
electrónicos, malos entendidos en las comunicaciones, trampas, etc. Sin embargo, no
podemos olvidar nuestro libre albedrío. Podemos aprovechar los tránsitos de Mercurio
retrógrado para hacer una reflexión interior, concentrarnos para evitar la confusión de
nuestra mente y evitar que se nos pierdan las cosas, concluir tareas inacabadas, pagar
cuentas pendientes, aclarar conceptos oscuros, investigar, escribir y realizar todo aquello
que nos pida profundidad de pensamiento. Sin embargo, sí puede ser conveniente aplazar
decisiones importantes para cuando esté directo nuevamente, pues hay un cambio de
energía y los resultados pueden ser diferentes a los esperados. Al realizar pronósticos
anuales, no es necesario ver cada tránsito de Mercurio, sino los momentos en que se pone
retrógrado.

Venus
Los tránsitos de Venus podrían activar momentos en los que nos sentimos más bellos o
populares, o deseamos tomar alguna acción para mejorar nuestra imagen. Podrían ser una
ayuda para conocer personas, establecer algunos contactos para buenas negociaciones,
sociabilizar, disfrutar de momentos placenteros o estimular la generación de recursos
materiales. Todo dependerá de sobre cuál planeta transita y el tipo de aspectos que se
forman. No debemos olvidar que Venus tiene una faceta de celos, posesión, amor trágico y
destrucción.

Cuando Venus se pone retrógrado es buen momento para llevar la energía hacia adentro,
revisar cómo están nuestras relaciones, evaluar nuestro sistema de valores, ahorrar,
examinar nuestra propia imagen, posponer la compra de artículos de lujo (joyas, obras de
arte y similares), así como ropa, zapatos y accesorios de vestir. Puede ser conveniente
aplazar decisiones importantes para cuando esté directo nuevamente, pues hay un cambio
de energía y los resultados pueden ser diferentes a los esperados. Al realizar pronósticos
anuales, no es necesario ver cada tránsito de Venus, sino los momentos en que se pone
retrógrado y algunos toques en puntos clave de la carta. Venus retrograda cada 19 meses
aproximadamente y dura cerca de seis semanas así.

Marte
Marte retrograda durante unos 80 días cada 2 años aproximadamente. Cuando lo hace,
puede permanecer hasta 7 meses en un signo. Mientras está directo, tarda
aproximadamente 2 meses en recorrer cada signo y su orbe de influencia puede ser de unos
5 días al aspectar un punto concreto de la carta natal, pues es un planeta de tránsito rápido.

Por estar relacionado con la acción y energía puede tener efectos sobre el cuerpo físico, la
seguridad en sí mismo, el deseo de triunfar, el deseo sexual y sentirse resistente, o que se
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dispare el mal carácter. En general, sus tránsitos dan mucha fuerza y vitalidad al planeta
que aspecta, incrementan la actividad en la esfera de la vida según la casa por donde
transita. Dependiendo de ciertos aspectos difíciles, un Marte en tránsito podría desencadenar
algún accidente, corte o quemadura, pero no se puede decir que siempre Marte presagia
este tipo de acontecimientos. Cuando retrograda, puede traer lentitud en las actividades o
dificultades para satisfacer deseos. Es momento para recargar la energía, cuidando de no
auto-agredirse. Evitar, en lo posible, cirugías pues Marte rige el bisturí.

Júpiter
Los tránsitos de Júpiter darán una fuerza especial a la casa que recorre durante un año.
Señala áreas de expansión (incluyendo la física). Como va directo, luego retrograda y vuelve
a ponerse directo, puede tocar tres veces un punto importante de la carta. Podríamos
esperar que durante este tiempo se active la prosperidad, el éxito, la protección, los viajes,
los regalos, los estudios superiores o la religión. Pero esto no ocurrirá sin la apropiada
actitud personal. Y también dependerá de los aspectos tensos o “ligeros” que se activen con
el tránsito. Si no se comprende el Júpiter natal ni se ha trabajado con la energía jupiteriana,
el tránsito por sí solo no puede hacer milagros. Podría volverse incluso auto-indulgencia y
pereza, o exceso de diversión, comida o bebida. No hay que olvidar que Júpiter se mimetiza,
por lo tanto puede distorsionar el evento que estamos viendo o la imagen de las personas en
nuestro entorno.

Los ciclos de Júpiter duran 12 años, por lo que una persona con una vida media de 80 años
puede tener 6 ó 7 retornos de Júpiter. Las experiencias de los cuatro cuadrantes, de tres
años cada uno, se resumen en la siguiente Tabla:

Cuadrante Aprendizaje
I Bien usado: aprender son satisfacción.
Mal usado: la promesa de aprender algo nuevo, mas no hacerlo.
II Bien usado: adquirir experiencia con entusiasmo.
Mal usado: no estar preparado para mostrar las propias capacidades.
III Bien usado: llegar a la cumbre, alzarse hacia lo alto.
Mal usado: la expansión se apoya en el atrevimiento más que en el
conocimiento.
IV Bien usado: disfrutar las candilejas, comenzar un nuevo proyecto.
Mal usado: pocas recompensas que recoger.

La evolución del ciclo también dependerá de otros factores: tránsitos, progresiones, actitud
personal, etc. Además, nadie usa totalmente las características positivas o negativas, por lo
general se hace una mezcla de ambas. Esto vale también para el ciclo de Saturno.

Cuando Júpiter está retrógrado (natal), el individuo prefiere desarrollar sus propias creencias
religiosas y filosóficas, sus ideales e incluso su moral, antes de aceptar lo que le enseñan.
Busca respuestas intuitivas y las halla en su propio interior. Ve el cuadro completo sin
desviarse en los detalles. Este planeta retrograda una vez al año y permanece así durante
cerca de 4 meses. Durante su retrogradación, revisamos nuestra fe, filosofía de vida,
nuestra relación con la alegría de vivir.

Saturno
Saturno en cambio dará a la casa que esté transitando su sello y énfasis, durante unos 2,5
años. Hay que reconocer que todo en la vida requiere de algún tipo de límites. Saturno
mantiene nuestro cuerpo en forma (huesos, piel), nos da capacidad de concentración,
autodisciplina, organización y responsabilidad. Nos da sentido de éxito, orden, prudencia,

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deber, dirección y ambición. Nos puede traer un ascenso, toma de nuevas


responsabilidades, echar nuevos cimientos, comenzar a construir algo. Pero dependiendo de
nuestra actitud, podemos sentir deseos de renunciar, o frustración y restricción. Se pueden
experimentar dificultades profesionales, debilidades físicas, separaciones, pérdidas, exceso
de responsabilidades o tristeza. Si el natal está mal aspectado podemos reaccionar con
egoísmo, bajeza o avaricia.

Los ciclos de Saturno duran de 28 a 30 años, por lo que una persona con una vida media de
80 años puede tener 2 ó 3 retornos de Saturno. En el retorno podemos vivir un momento de
crisis, de revisión de lo hecho y replantear lo que se hará, de desechar lo que ya no es útil.
El no permite pasar a una etapa más elevada hasta que sus exigencias no hayan sido
cumplidas, él nos prueba de tanto en tanto y nos muestra lo insensato que es engañarse a sí
mismo. Saturno nos dice: “toma lo que quieras de la vida, pero paga el precio”. Las
experiencias de los cuatro cuadrantes, de siete años cada uno, se resumen en la siguiente
Tabla:

Cuadrante Aprendizaje
I Bien usado: lo que se aprende una vez permanece aprendido para siempre.
Mal usado: se es empujado a un rincón, no hay tiempo suficiente para
realizar todos los estudios necesarios.
II Bien usado: desarrollar al máximo el potencial.
Mal usado: se carece del valor necesario para poner en práctica lo aprendido;
sentimiento de inseguridad.
III Bien usado: actuar de forma sólida y práctica para el logro.
Mal usado: deseo de mejorar el nivel social o avasallar a los demás de una
forma egoísta.

IV Bien usado: recoger las semillas bien sembradas, de forma convencional y


profesional, re-evaluar las necesidades y, con paciencia, empezar de nuevo.
Mal usado: las recompensas no son las esperadas y se pensará, con
preocupación, cómo hacerlo mejor la próxima vez.

Cuando Saturno está retrógrado (natal) el efecto es el opuesto a su naturaleza común: el


maestro puede convertirse en un uso negativo. La persona mira dentro de sí y no le gusta lo
que ve, teme ser rechazada, evita exponerse a situaciones de rechazo, necesita que le
animen constantemente y puede haber falta de ambición. Pero si se usa positivamente, al
mirar dentro de sí, la persona, desde temprana edad, tendrá claro adónde va, quién es y lo
que tiene que hacer para llegar a su meta, de una manera discreta y serena. Podrían verlo
como una persona muy seria. Este planeta retrograda una vez al año y permanece así cerca
de 5 meses. Durante su retrogradación nos toca revisar nuestro concepto sobre la autoridad
y nuestra relación con las normas, lo estructurado y lo convencional.

La conjunción Júpiter Saturno.

Ya hemos estudiado esta conjunción en Astrología Mundana:


Se inicia con la conjunción mayor en Aries. 20 años después se da en Sagitario (conjunción
menor), 20 años después en Leo y 20 años después repite en Aries. Repetidas unas 12
veces, se cambia de Triplicidad (conjunción media).

Habla de profecía y unificación de pueblos en torno a unas leyes determinadas. Hay que
valorar cuál de ellos, Júpiter o Saturno, es más fuerte, pues esto indicará la naturaleza de
los acontecimientos venideros.

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Ahora bien, ¿esta conjunción aplica no sólo a ciudades sino también a individuos? Podríamos
tener hasta 4 ciclos de 20 años en nuestras vidas personales, muy probablemente dentro de
la misma triplicidad. Habría que estudiar en qué lugar de la carta natal ocurre cada
conjunción y ver qué procesos se desarrollan durante los 20 años que ha marcado dicha
conjunción.

Particularmente en este año 2020, estamos siendo testigos de un cambio de triplicidad, por
lo tanto somos individuos privilegiados que podremos vivir este proceso en nuestro corto
periodo de vida.

Como ejemplo, veamos el siguiente caso: Esta persona nace en 1961. Justo unos
meses antes de su nacimiento ocurrió una
conjunción a 25ºCapricornio.
En el año 1980, la conjunción, que se
esperaba en Virgo, ocurrió a los 9ºLibra,
en la cúspide de C3. En esa época la
persona está en la universidad y se
prepara para su desarrollo profesional. En
ese periodo de 20 años se muda a otra
ciudad, trabaja viajando por el interior del
país. Luego termina un post-grado y
trabaja con viajes internacionales hasta
comprar su vivienda propia (negocio
propio, C4).
En el año 2000, la conjunción ocurre a
22ºTauro, en C10 y cuadrando a Urano en
C1. Inicia un periodo de independencia
profesional, desarrollando incluso dos
profesiones distintas (química y
astrología).
En la conjunción de 2020, en el 0ºAcuario
en C6 sobre Saturno, se espera una
renovada (y última) etapa laboral,
trabajando on line.

Urano
La acción de Urano es súbita e inesperada, a veces puede ser violenta. Es el que despierta y
alerta. Cuando está retrógrado (natal) refuerza la necesidad de ser diferente y romper la
tradición desde temprana edad. Se busca la libertad personal y puede crear un impulso a
dominar a los demás y más si está en una casa angular (ejemplo de esto son unos cuantos
líderes políticos y dictadores). Cuando se pone retrógrado por tránsito, se puede esperar el
mismo efecto, nos toca revisar nuestra relación con la novedad, nuestra capacidad para
aceptar cambios y oportunidades imprevistas. Urano retrograda durante 5 meses cada año.

Los tránsitos de Urano son bastante lentos, ya que permanece en cada signo por 7 años,
por lo que un aspecto que haga Urano a un planeta natal se puede sentir por un año,
tomando en cuenta el triple movimiento: hacia adelante, retrogradación y nuevamente
hacia adelante. Un tránsito uraniano puede trae cambios inesperados, atracciones súbitas,
iluminación mental, estimulación intelectual, intuición, originalidad, comprensión de asuntos
metafísicos, un agudo pensamiento creativo, el disfrute de cosas poco habituales. Si alguien
prefiere la estabilidad y la rutina, un tránsito uraniano puede sentirse como excesivo, puede
causar temor. Para los que no cuentan hasta 10 antes de hacer las cosas, los tránsitos
uranianos pueden causar excesiva precipitación y movimientos erráticos.

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Urano tiene un ciclo de 84 años, por lo que es posible que muchas personas puedan llegar a
ver un retorno de Urano. Permanece en cada cuadrante por 21 años.

Un resumen del ciclo de Urano se puede ver en la siguiente Tabla:

Cuadrante Crisis de Urano


I Urano cuadratura Urano:
La persona es un adulto (21 años), ya terminando su formación, la cual
comenzará a poner en práctica preparándose para el futuro, pero con base
en la excitación de las novedades y no en la responsabilidad saturnina.
II Urano oposición Urano:
La persona tiene ya 42 años y ha pasado 21 años desarrollándose y
buscando una posición en el mundo. Ahora le toca juzgar si le gusta lo que
consiguió.
III Urano cuadratura Urano:
La persona tiene 63 años y al considerar sus antiguos errores y remediarlos,
puede crear un nuevo estilo de vida.
IV Si la persona está en sintonía con la energía de Urano, nunca se quedará
sentada indolente, se encontrará tiempo para hacer todas esas cosas que
siempre se desearon y lograr la iluminación.

Neptuno
La acción de Neptuno es sutil y gradual. Nos puede “anestesiar”, engañar, adormecer hasta
el día en que se disipa la niebla y entonces vemos la realidad, y con ella, viene la desilusión.
Cuando está retrógrado (natal) puede tener diferentes resultados, dependiendo de si está
bien o mal aspectado. Si está mal, se volverá más brumoso y no ayudará a esclarecer las
cosas, la persona vivirá en un mundo irreal, engañándose a sí mismo, o se puede volver el
propio salvador-víctima. Si está bien, se puede volver muy perceptivo, utilizando desde
temprana edad cualquier habilidad de nacimiento (pintores, poetas, compositores). Neptuno
retrograda durante 5 meses cada año y en ese periodo nos toca revisar nuestra relación con
la fantasía, la imaginación, la espiritualidad, la percepción y los engaños.

Los tránsitos de Neptuno son sumamente lentos, pues permanece en un signo entre 13 y 15
años, avanza de 2º a 5º por año, por lo que su efecto puede durar cerca de dos años cuando
hace aspecto a un planeta natal. Él es el tejedor de sueños, por lo que un tránsito
neptuniano nos puede traer ilusión, idealismo, cristales de colores. Pero bien usado nos
puede traer iluminación, inspiración, imaginación y pensamiento creativo. Puede despertar
sentimientos de compasión e intuición, percepciones veladas o incluso fraudes o engaños. El
grado de atención que prestemos a nosotros mismos indicará si seremos víctimas de
Neptuno y lo utilizaremos de forma positiva.

Plutón
Plutón retrograda durante unos 5 meses cada año. Los otros 7 meses está directo. Es un
planeta de tránsito muy lento, recorre cerca de 1º a 3º por año, por lo que su orbe de acción
puede ser de tres años. Cuando hace aspectos importantes a planetas o ángulos natales va
sembrando las semillas del cambio y la transformación. Dichas semillas brotarán cuando un
tránsito más rápido active la misma área que Plutón tocó previamente. El efecto de Plutón
es generar poder, intensidad, energía concentrada y sostenida, regeneración, la habilidad de
empezar de nuevo a reconstruir, el deseo de hacer las cosas a gran escala con una gran
masa de energía. Pero también puede significar obsesiones, terremotos, levantamientos,
fuerza bruta, cambios dramáticos o elementos criminales.

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El Plutón en tránsito actúa a niveles profundos de la psique y los efectos son sentidos
intensamente en nuestro interior. El dolor o la violencia pueden ocurrir antes de que se
produzca el nuevo cambio y la regeneración. Podemos sufrir experiencias de muerte de
algún pariente o relación, o “simplemente” vivir la muerte de una vieja actitud interna que
debe ser eliminada porque obstaculiza nuestro desarrollo. Se dice que su acción es
inevitable, porque Plutón se asegura de que renunciaremos a lo viejo aniquilándolo
totalmente, hasta que no quede nada. Plutón exige que un ciclo termine y comience uno
nuevo. Plutón no nos deja otra opción que cambiar o morir. Cuando se pone retrógrado
puede aumentar nuestra fuerza interior para las transformaciones, pero debemos cuidarnos
de trastornos internos.

Sol y Luna
A 1º por día, el efecto del Sol sobre un punto importante de la carta será de unos 3 días, en
cambio el efecto de la Luna será de aproximadamente 6 horas, porque se mueve
aproximadamente 14º por día. Los acontecimientos serán disparados con gran velocidad,
por lo que sólo se podrán predecir si se revisa la carta con suficiente antelación, o mejor
aún, revisando los procesos que se activan según los tránsitos de los planetas lentos, para
luego intentar ver las fechas críticas con los tránsitos de los planetas rápidos. La Luna
influye sobre los asuntos diarios, el humor y las emociones. En el lapso de un año será muy
difícil tomar en cuenta su movimiento para efectos predictivos, pues ella se vive
diariamente. Podrá resultar un disparador en la medida en que se combina con otros
aspectos que predispongan un acontecimiento. Igualmente ocurre con el Sol, aunque sus
aspectos pueden ser importantes para considerar temas relacionados con el empleo y las
oportunidades profesionales (el éxito), para temas de salud e intervenciones quirúrgicas. En
cuanto a las retrogradaciones, Sol y Luna nunca se ponen retrógrados en sus tránsitos. Los
efectos del Sol y la Luna son efímeros, pues actúan más como disparadores de otros efectos.
Sólo en los Eclipses, los efectos de Sol y Luna serán importantes.

Durante los eclipses ocurre un “juego” psicológico, en el que la razón y la emoción se


confabulan para llevar a la conciencia lo que tenemos oculto, y así comenzar o terminar
procesos y proyectos que nos permitirán progresar en la vida. Para profundizar en este tema
se recomienda ver el material del taller de Lunaciones y Eclipses.

En general, se considera el paso de la Luna por signo y por fase para realizar actividades
cotidianas: siembra, poda, corte de cabellos y uñas, dietas, firma de papeles, inicios de
proyectos, solicitud de préstamos y temas de salud. Por regla general, no debe realizarse
una operación cuando la Luna esté transitando por el signo que rige la zona del cuerpo que
se va a operar. Tampoco es bueno operarse con Luna Llena o en Escorpio, debido a que es
más difícil la cicatrización y hay más propensión a las hemorragias.

Con respecto a los ciclos, Sol y Luna se toman en cuenta para sus respectivas Revoluciones.

3.6.- El trío de la transformación: Urano-Neptuno-Plutón

El trío Urano-Neptuno-Plutón se encarga de hacernos evolucionar mediante la vivencia de


crisis. Pero cada uno tiene su forma de sacudirnos: Urano nos despierta repentinamente,
Neptuno nos confunde y luego nos quita el velo, Plutón nos socava las bases. Juntos
destruyen lo que hemos construido pero que está sobrando para nuestro crecimiento como
individuos.

Estas crisis se pueden observar con los ciclos de los planetas y los tránsitos a puntos
sensibles de la carta natal.

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Material inicialmente recopilado por Ariadna Flores, Astróloga. Año 2020.
e-mail: astroariflores@gmail.com
CURSO DE ASTROLOGIA. NIVELACION UCLA II 12

Urano rompe y desorganiza las estructuras existentes para dar lugar al progreso. No destruye
negativamente, destruye para crear. Rompe la tradición y anuncia el futuro. Su acción es abrupta,
inesperada e impredecible. Puede traer ruptura de relaciones. La acción uraniana se manifiesta con
repentinos cambios en la vida; un aspecto mayor por progresión o tránsito puede traer cierre de
capítulos para comenzar otro con un nuevo escenario, en especial si el contacto es al Sol. Si el Urano
natal está mal aspectado, su tránsito puede traer caos, inestabilidad, tensión y nerviosismo, puede
producir fracasos, trastornos, accidentes. Si se resiste al cambio, el dolor será mayor. Es preferible
soltar, para ayudar al proceso de cambio.

Neptuno tiene una acción velada, las cosas nunca son lo que parecen por donde transita Neptuno, sus
promesas finalmente se reducen a un mínimo porcentaje de cumplimiento. Al contrario de Urano, no
se rebela contra las estructuras, sino que se resigna o se aleja. Y disuelve los límites. Con un tránsito
neptuniano hay que practicar la discriminación para evitar caer en las ilusiones. El no nos traerá
asuntos materiales, sino intangibles: idealismo, inspiración, creatividad. Por donde transita, algo puede
disolverse y desaparecer de la existencia de un modo muy sutil o de una manera muy imperceptible.

Plutón influye en el destino a nivel masivo y con una tremenda fuerza. Es la aniquilación total y la
regeneración. Nos enfrenta al tema de la muerte, nos libera de las formas inútiles al espíritu, elimina lo
que no necesitamos. Sus tránsitos generan dolor e intensidad interior.

Neptuno y Plutón se mueven tan lento, que una persona podrá sentir la cuadratura Plutón-Plutón, la
cuadratura Neptuno-Neptuno, y a lo sumo, la oposición Neptuno-Neptuno.

Por lo general puede ocurrir que los diferentes ciclos ocurran cercanos en el tiempo, generando un
“sacudón” importante a la persona. Por ejemplo, la famosa “crisis de los 40” es una combinación de las
cuadraturas de Neptuno-Neptuno y Plutón-Plutón al mismo tiempo, o una de esas cuadraturas al
mismo tiempo que la oposición Urano-Urano, sin olvidar que al mismo tiempo puede estar ocurriendo
la oposición Saturno-Saturno. Pero hay que tener en cuenta que cada persona tiene sus propios ciclos
y que la órbita de Plutón es muy excéntrica, por lo que su cuadratura se alcanza a diferentes edades
según el signo en que haya estado el Plutón natal. Por ejemplo: los nacidos con Plutón en Tauro,
vivieron la cuadratura a los 84 años; los que lo tuvieron natal en Géminis vivieron la cuadratura a los
75 años; los que lo tuvieron natal en los primeros grados de Cáncer, vivieron la cuadratura a los 59
años; los que lo tuvieron natal a finales de Cáncer, vivieron la cuadratura a los 46 años. Los que
nacieron recientemente, con Plutón en Escorpio, vivirán su cuadratura a los 33 años. Luego Plutón
comenzará de nuevo a bajar su velocidad, por lo que los ciclos se volverán a agrandar.

La cuadratura Neptuno-Neptuno ocurre entre los 40-42 años y puede traer distorsión de lo que uno
cree que necesita. Es importante analizarse antes de tomar decisiones importantes. Puede no ser el
mejor momento para hacer cambios aunque hayan sido bien pensados, pues existe el peligro de
dedicarse a hacer cosas imprácticas. El individuo puede sentirse atontado, incompetente y confundido,
o evadir responsabilidades domésticas o profesionales.

Con la cuadratura Plutón-Plutón se dejan de lado las cosas que ya no son esenciales, aunque de forma
dramática. Pueden reaparecer problemas que se creían superados y que estaban en el inconsciente.
Puede haber ruptura de relaciones. También pueden despertar nuevas capacidades que estaban
latentes. Con esta cuadratura no se recomienda hacer inversiones ni sociedades, ni tampoco rituales
mágicos (puede no tenerse control de la energía y los resultados pueden ser desastrosos).

La vivencia de estas crisis dependerá de cómo el individuo está manejando las dos caras de cada
moneda trascendental.

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Material inicialmente recopilado por Ariadna Flores, Astróloga. Año 2020.
e-mail: astroariflores@gmail.com

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