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Entre la esperanza y la luz

contra la maldad y batalla
Hace tiempo en el siglo XII, en Japón se vivió
una guerra por el control del poder
protagonizado por los Shori y aku no.
En Japón existía un imperio llamado kyoto en
donde gobernaba un niño llamado Nozomu,
los consejeros y sabios de aquel lugar creían
que el niño era hijo de Inari que es la deidad
de la fertilidad, el arroz, la industria y el éxito.
En general, según ese niño fue una bendición
para el pais ya que antes de su llegada había
una gran escasez de comida acompañada por
una ola de desastres, también mucha tristeza,
aseguran que han visto abrirse el cielo, y de el
salía unos brazos que tenían en manos a un
bebé que desde que llegó término la
hambruna y abunda el alimento.
El niño, consejeros y sacerdotes vivían en el
templo de Amidayi ellos vivían cómodos, pero
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al otro lado de ese imperio en las costas de
ese pais que es Japón existía otro imperio
llamado Kiyomori era un pueblo que a
diferencia de kyoto tenia muchas carencias a
pesar de que vivían cerca del mar parecía que
no encontraban comida.
Yoshitsune que era el emperador de aquel
lugar llamado Kiyomori mandaba a su clan
“Aku no” al imperio kyoto al principio pedían
comida pero los consejeros de Nozomu se los
negaba así que por esa razón intentaban
saquear la ciudad, pero los Shori que era el
clan de Kyoto siempre los detenían y eso
hacia mas furioso a Yoshitsune, un día Benkei
el líder del clan Aku no; pensaba enviar
solamente a un espía para investigar a ese
lugar y ver que es lo que hace tener mucha
abundancia y así fue Benkei se lo comentó al
emperador que envió a Yami como espía.
Yami se encaminó a Kyoto enseguida que
llegó encontró una estatua de un niño al verlo
le pregunto a un pueblerino y así se pudo
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enterar que el niño era venerado por acabar
la hambruna después de eso estuvo
investigando un poco más, pero todos le
decían lo mismo que el primer aldeano le
había dicho.
Esa tarde regresó a Kiyomori sin levantar
sospecha alguna, se presentó ante
Yoshitsune, el comentó que el niño era hijo de
Inari y por eso tenían tanta prosperidad, con
eso dicho pensaban que hacer para
exterminar al niño.
Al otro día volvieron a reunirse el emperador
con Benkei les habían informado que en unos
días celebrarían una fiesta en honor al
pequeño emperador así que estarían
organizando, jamás pensarán en su plan
maestro: atacar entre las sombras a los
guardias de Kyoto, para apoderarse de sus
soldados, asesinar al pequeño emperador
conquistar el templo Amidayi para así tener el
control de todo Japón, comenzaron a planear
todo para esa emboscada.
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Después de tanta espera; llega el gran día, en
kyoto desde muy temprano preparaban el
templo para celebrar la fiesta del niño, la
celebración iniciaba con un rito que daría
inició a la impactante fiesta que prometía la
mejor del año, al mediodía comenzó la
ceremonia al terminar de ella, iniciaba el
banquete y la música era un día para celebrar
todos disfrutaban, los consejeros de Nozomu
les permitió a clan Shori poder estar en la
fiesta para ver que todo estuviera en orden,
ante esto bajaron la guardia ya que se habían
despojado de su armamento pero hasta ahora
todo esta en calma.
Mientras llegaba el anochecer los “Aku no” se
adentraban sigilosamente en la fortaleza de
Kyoto, mientras preparaban su ataque
escabullándose por todos los lugares e
rincones de Kyoto.
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Al anochecer en el templo Amidayi
encendieron las 100 lámparas simbolizando la
larga vida antes de que se vaya el sol, todos
los que asistieron a la fiesta siguieron
bailando alentados por las risas, la alegría
pero también por las palmadas de Jóvenes e
ancianas que se dejaban llevar por la música.
Justo a medianoche, conforme los tríos se
volvían más lentos un gran viento gélido
invadió la sala apagando todas las lámparas,
el silencio se apoderó de todo el lugar, todos
estaban abrumados por la situación, sin luz
estaba tan oscuro; pero esa oscuridad era el
escenario perfecta para que el clan “aku no”
atacara a todos los que habitaban aquel
lugar, fue entonces cuando la oscuridad que
habitaba en el corazón de los soldados de Aku
no reino en ellos apoderándose de toda su
oscura alma, teniendo como prioridad fue
crear caos y sembrar terror a las demás
personas, mataron e mutilaron tanto como
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adultos e niños, varias familias unían fuerza
para proteger a los suyos pero en los
soldados los rodeaba una fuerza descomunal,
por lo tanto sus movimientos eran rápidos,
hábiles e mortales.
Todos lados se podía escuchar gritos, quejidos
junto con llantos de dolor y una gran
amargura, un hombre de edad avanzada
pedía piedad por su vida a un soldado pero el
se burlo para después degollarlo, riéndose a
carcajadas tras ver como la cabeza cayó como
un piedra, su sangre chorreaba por el piso,
apenas se alcanzaba ver con la luz tenue de la
luna, tras ver eso una mujer corrió hacia el
cuerpo del hombre, gritando entre lágrimas,
el soldado estaba por matarla pero de pronto
un hombre alto con una armadura
resplandeciente le detuvo la espada para
después apuñalarlo en el estómago dejó que
la mujer escapara pero tan pronto la mujer
volteó cayó muerta al suelo por una estocada
de otro soldado que estaba cerca, aquel
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hombre que trató a la mujer era en realidad
Hikari ;el líder de el clan defensivo de kyoto:
los Shori, Hikari quien se había ocultado entre
las sombras ahora por fin llegó para proteger
al imperio.
-¡protejan a Nozomu!- dijo Hikari, pronto
llegó un sacerdote que huyó con el niño en
brazos hacia la cima del edificio Amidayi ya
que el templo contaba con 3 pisos, el mas alto
es donde habitaba, siendo el refugio donde se
dirigían para asegurar la existencia del
pequeño emperador, Hikari ordenó a dos de
sus soldados para custodiar a Nozomu el
exclamó-¡ síganme, pelearemos hasta el fin
por Kyoto!- y enseguida salieron para matar a
sus enemigos.
Mientras Benkei también les dijo a sus
soldados
-pelearemos y mataremos todo lo necesario
para que no quede nadie-.
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Entonces una ola de soldados peleaban hasta
que llegó un punto que parecía nunca
acabarse, era la guerra infinita hasta que uno
de los clanes pereciera, Benkei se aprovecho
del descuido del clan Shori y se apresuró a ir al
templo junto con otro soldado sin que Hikari
se diera cuenta, a cada minuto que pasaba,
los Shori se debilitaban cada vez más y los
Aku no; los fortalecía el gran odio hacia los
demás, aún así no perdían la esperanza por
que el hambre y determinación de proteger al
imperio les daba fuerza, Hikari se percató de
que Benkei no estaba y le habló a Kôfuku que
era un soldado de confianza para Hikari.
-Benkei no esta-dijo Hikari
-creo que fue al templo para matar al niño en
la cima del templo-le dijo Kôfuku sin apartar
la mirada- corre, alcanza al Benkei antes de
que sea tarde-le digo, Hikari tras escuchar
esto corrió hasta la cima del templo , nervioso
por lo que esperaba ver, y lo que vio a
continuación fue una de las escenas mas
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desgarradoras que había contemplado en
toda su vida, lanzando un fuerte grito de
dolor tras ver a los sacerdotes en el suelo
desangrados, tras recibir una serie de
apuñaladas a cada uno juntos con los
soldados, entre fuertes sollozos se lanzo hacia
el cuerpo del niño que yacía, inmóvil sin vida.
En aquel lugar no había nadie solo el,
sollozando por la muerte del pequeño que le
había tomado un gran cariño, era su misión
cuidarlo hasta la muerte, el pensar su muerte,
el saber que no estuvo allí para protegerlo
hizo que le doliera el alma, tras desatar una
ola de furia y tristeza en el, no pudo
contenerse mas, lágrimas caían de su rostro
hasta el cuerpo muerto de su principito, sabia
perfectamente quien era el culpable de su
desgracia mas no fue en busca de el, estaba
8profundamente lastimado, pensado que
nadie mas estaría allí, Benkei regresó al
cuarto donde había matado a Nozomu pero
esta vez para matar a Hikari, el se levanto
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pronto pero parece que no tenia fuerzas para
seguir, Benkei se aproximó a el, el un leve
forcejeo le logra hacer heridas profundas en
brazos y piernas hasta que lo dejo en el suelo.
-no vale la pena matarte, tu dolor y desgracia
te matará antes que yo- dijo Benkei y fue a
tomar el reino para quedarse en el, Hikari
estaba tan herido que se desvaneció junto al
cuerpo del pequeño, Benkei reía a carcajadas,
su sangre fluía por el filo de su espada, el
tenía salpicaduras de sangre en el rostro,
manos, codos , un poco herido pero estaba en
perfecto estado, pronto los Shori han perdido
la batalla, los Aku no han ganado la victoria,
pronto Benkei le ordenó a uno de sus soldados
que fueran con Yoshitsune para comunicarle
que el han ganado y asesinado a todos, aquel
soldado, se encaminó a Kiyomori, mientras
que los demás buscaron sobrevivientes para
tomarlos como prisioneros.
Al amanecer, Yoshitsune se presentó en
Kyoto, Benkei lo recibió, Yoshitsune dudaba
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que el niño estaba muerto, pero Para que
confirmará Benkei lo condujo al lugar donde
se encontraba el niño, satisfecho con la
muerte de Nozomu, pidió que cocinaran el
corazón, cerebro, e vísceras del niño para así
asegurar su victoria.

Benkei se cansó de que le dieran órdenes, se

acercó a una ventana junto con Yoshitsune, el
lo engaño diciendo que veía a un soldado
escapar, tras escuchar esto, Yoshitsune se
asomó por aquella ventana fue así que tuvo
oportunidad para empujarlo para que cayera
hasta su cabeza se destruyó al instante,
matándolo, Benkei feliz de que se quedaría
como el nuevo emperador, les contó que el
emperador cayo accidentalmente pero que el
se quedaría como su nuevo supremo
emperador.
Por increíble que parezca, por obra de dios o
el mismo demonio, Hikari aun seguía vivo
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lloraba junto al cadáver del niño, aunque
agonizaba por el dolor, se revolcó en la
sangre, moho e huesos que estaban, ya
empezaban a resecarse, Hikari no paraba de
llorar, temblando de repugnancia e
impotencia hacia el mismo, contra Benkei, a
Yoshitsune, por que fueron capaces de
masacrar a toda la ciudad, por encima de
todos al pequeño Nozomu, era una carga con
la que no podía soportar, pero que muy
pronto llegaría a su fin. El hedor que
penetraba en sus fosas nasales acabó por
despresar los últimos vestigios de razón que el
quedaban, pronto se acabaría si dolor, hasta
que por fin murió dando un gran suspiro antes
de que su vida se apagará. Después de toda la
masacre que ocasionaron Benkei se
autonombro el emperador de Kyoto, todos los
sobrevivientes de aquel trauma fueron
sometidos a duros castigos y restaurar todo el
lugar, pasado el tiempo, kyoto fue restaurada
pero su esplendor no volvió a ser la misma, se
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enfrentaban a la hambruna que se desató
durante la batalla, países vecinos dejaron de
aliarse con Benkei, se enteraron de la gran
injusticia que ocasionó, todos sabían que ese
día que celebraban era risas y alegrías se
convirtió en dolor e tristeza, esta vez kyoto y
Kiyomori dejo de existir ahora aquellos
imperios se habían unido para ser Itami cada
día mueren mas gente en ese lugar y para su
desgracia nadie vive, nadie sonríe y nadie
vuelve a vivir allí, quien llega a vivir en este
insólito lugar, muere del dolor y melancolía
que se alcanza a sentir desde kilómetros antes
de entrar, Benkei nunca se preocupo por el
bienestar, solo lo abruma y años mas tarde el
muere por la melancolía de que nunca fue
feliz, aun cuando ya había obtenido todo lo
que anhelaba, esta es la triste; desgarradora
tal vez siniestra historia de el pueblo
fantasma llamado ahora Itami: el dolor
encarnado quienes vivieron en ese día de
masacre donde todo el mundo llora.