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Oración por los difuntos

para rezar en el cementerio


San Agustín solía decir “una flor sobre su tumba se marchita,
una lágrima sobre su recuerdo se evapora. Una oración por su
alma, la recibe Dios”.

Si vas al cementerio hoy o el Día de los Fieles Difuntos, reza


esta oración por su alma:

Oración por los difuntos para rezar en el cementerio

Monitor: En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu


Santo. Todos: Amén.

Monitor: Bendigamos al Señor que, por la resurrección de su


Hijo, nos ha hecho nacer a una esperanza viva. Todos: Bendito
seas por siempre, Señor.

Monitor: Hermanos, todos tenemos familiares y amigos que


han muerto. Hoy los recordamos a ellos y a todos los que han
fallecido y los encomendamos a la misericordia de Dios.

En este cementerio nos unimos para afirmar nuestra fe en Cristo


que ha vencido la muerte y nuestra esperanza de que Él
vencerá también nuestra muerte y nos reunirá con nuestros
seres queridos en su Reino de Gloria. Que esta celebración nos
anime a ser fieles al Señor y a seguir los buenos ejemplos que
nuestros familiares nos dejaron en su vida.

Comencemos reconociendo nuestros pecados ante el Señor


(momento de silencio).

Tú que resucitaste a Lázaro del sepulcro, SEÑOR, TEN PIEDAD.

Tú que has vencido la muerte y has resucitado, CRISTO, TEN


PIEDAD.

Tú que nos has prometido una vida eterna contigo, SEÑOR, TEN
PIEDAD.
Monitor: El Señor todopoderoso tenga misericordia de
nosotros, perdone nuestros pecados y nos lleve a la vida
eterna. Todos: Amén.

Lector: Lectura de la carta del apóstol San Pablo a los Romanos


(6, 3-4. 8-9).

“Hermanos: Los que por el bautismo nos incorporamos a Cristo,


fuimos incorporados a su muerte. Por el bautismo fuimos
sepultados con él en la muerte para que, así como Cristo fue
resucitado de entre los muertos por la gloria del Padre, así
también nosotros andemos en una vida nueva... Por tanto, si
hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con
él; pues sabemos que Cristo, una vez resucitado de entre los
muertos, ya no muere más; la muerte ya no tiene dominio
sobre él”. Palabra de Dios. Todos: Te alabamos, Señor.

Monitor: Hermanos, invoquemos con fe a Dios Padre


todopoderoso que resucitó de entre los muertos a su Hijo
Jesucristo para la salvación de todos.

Para que afiance al pueblo cristiano en la fe, la 28 esperanza y


el amor, roguemos al Señor. Todos: Te lo pedimos, Señor.

Para que libere al mundo entero de todas sus injusticias,


violencias y signos de muerte, roguemos al Señor.

Para que acoja e ilumine con la claridad de su rostro a todos los


que han muerto en la esperanza de la resurrección, roguemos al
Señor.

Para que reciba en su reino a (Se pueden decir nombres), y a


todos los difuntos de nuestras familias, roguemos al Señor.

Para que nuestra visita y nuestras ofrendas de flores, velas y


comida sean signos de nuestra fe en la vida más allá de la
muerte, roguemos al Señor.

Para que la fe en Cristo mueva nuestros corazones para dar


frutos de solidaridad y de justicia, roguemos al Señor.

Monitor: Oremos, hermanos, como Jesús mismo nos enseñó.


Todos: Padre nuestro... Dios te salve María... Gloria al Padre...

Monitor: El Dios de todo consuelo, que con amor inefable creó


al hombre y en la resurrección de su Hijo ha dado a los
creyentes la esperanza de resucitar, derrame sobre nosotros su
bendición. Todos: Amén.

Monitor: Él nos conceda el perdón de nuestras culpas a los que


vivimos en este mundo y otorgue a los que han muerto el lugar
de la luz y de la paz. Todos: Amén.

Monitor: Y a todos nos conceda vivir eternamente felices con


Cristo, al que proclamamos resucitado de entre los
muertos. Todos: Amén.

Monitor: Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y


Espíritu Santo descienda sobre nosotros y nos acompañe
siempre. Todos: Amén.

Monitor: Dales, Señor, el descanso eterno Todos: Y brille


para ellos la luz perpetua.

Monitor: Que las almas de todos los fieles difuntos por la


misericordia de Dios descansen en paz. Todos: Amén.
5 oraciones que puedes ofrecer a Dios
por tus difuntos:
1. Oración por los niños difuntos

Señor, tú que conoces nuestra profunda tristeza por la muerte


del (de la) niño(a) (nombre de la persona), concede a quienes
acatamos con dolor tu voluntad de llevártelo(a), el consuelo de
creer que vive eternamente contigo en la Gloria. Por Jesucristo,
nuestro Señor. Amén.

2. Oración por un difunto joven

Concede, Señor, la felicidad de la gloria eterna a tu siervo(a) N.


a quien has llamado de este mundo cuando el vigor de la
juventud embellecía su vida corporal; muestra para con él (ella)
tu misericordia y acógelo(a) entre tus santos en el canto eterno
de tu alabanza. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

3. Oración por un padre, madre y abuelos difuntos

¡Oh Dios! Nos mandaste honrar padre y madre. Por tu


misericordia, ten piedad de mi padre (madre) y no recuerdes
sus pecados. Que yo pueda verlo (la) de nuevo en el gozo de
eterno fulgor. Te lo pido por Cristo, nuestro Señor. Amén.

4. Oración por un difunto que se suicidó o sufrió un


accidente

Escucha, Señor, las súplicas de tu pueblo unidas a las lágrimas


de dolor que sentimos por la muerte inesperada de nuestro(a)
hermano(a) (nombre de la persona), y haz que alcance tu
misericordia y goce para siempre de la luz de aquella patria en
que no hay más sufrimiento ni muerte. Por Jesucristo, nuestro
Señor. Amén.
Oración en el cementerio el día de los fieles difuntos

La costumbre de visitar los cementerios el día de difuntos es una buena


oportunidad para orar por ellos y afirmar nuestra fe en la resurrección.
Proponemos para esta ocasión la siguiente celebración.

A/. En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. T/. Amén.

A/. Bendigamos al Señor que, por la resurrección de su Hijo, nos ha


hecho nacer a una esperanza viva. T/. Bendito seas por siempre,
Señor.

A/. Hermanos: Todos tenemos familiares y amigos que han muerto. Hoy
los recordamos a ellos y a todos los que han fallecido y los
encomendamos a la misericordia de Dios. En este cementerio nos
unimos para afirmar nuestra fe en Cristo que ha vencido la muerte y
nuestra esperanza de que él vencerá también nuestra muerte y nos
reunirá con nuestros seres queridos en su reino de gloria. Que esta
celebración nos anime a ser fieles al Señor y a seguir los buenos
ejemplos que nuestros familiares nos dejaron en su vida. Comencemos
reconociendo nuestros pecados ante el Señor (momentos de silencio).

 Tú que resucitaste a Lázaro del sepulcro, SEÑOR, TEN PIEDAD.


 Tú que has vencido la muerte y has resucitado, CRISTO, TEN
PIEDAD.
 Tú que nos has prometido una vida eterna contigo, SEÑOR, TEN
PIEDAD.
A/. El Señor todopoderoso tenga misericordia de nosotros, perdone
nuestros pecados y nos lleve a la vida eterna. T/: Amén.

L/. Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (6, 3-4. 8-9).

“Hermanos: Los que por el bautismo nos incorporamos a Cristo, fuimos


incorporados a su muerte. Por el bautismo fuimos sepultados con él en la
muerte para que, así como Cristo fue resucitado de entre los muertos por
la gloria del Padre, así también nosotros andemos en una vida nueva…
Por tanto, si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos
con él; pues sabemos que Cristo, una vez resucitado de entre los
muertos, ya no muere más; la muerte ya no tiene dominio sobre él”.
Palabra de Dios. T/. Te alabamos, Señor.

A/. Hermanos: Invoquemos con fe a Dios Padre todopoderoso que


resucitó de entre los muertos a su Hijo Jesucristo para la salvación de
todos.

 Para que afiance al pueblo cristiano en la fe, la 28 esperanza y el


amor, roguemos al Señor. Todos: TE LO PEDIMOS, SEÑOR.
 Para que libere al mundo entero de todas sus injusticias, violencias
y signos de muerte, roguemos al Señor.
 Para que acoja e ilumine con la claridad de su rostro a todos los
que han muerto en la esperanza de la resurrección, roguemos al
Señor.
 Para que reciba en su reino a N. y N. (se pueden decir nombres) y
a todos los difuntos de nuestras familias, roguemos al Señor.
 Para que nuestra visita y nuestras ofrendas de flores, velas y
comida sean signos de nuestra fe en la vida más allá de la muerte,
roguemos al Señor.
 Para que la fe en Cristo mueva nuestros corazones para dar frutos
de solidaridad y de justicia, roguemos al Señor.
A/. Oremos, hermanos, como Jesús mismo nos enseñó.

T/. Padre nuestro… Dios te salve María… Gloria al Padre…

A/. El Dios de todo consuelo, que con amor inefable creó al hombre y en
la resurrección de su Hijo ha dado a los creyentes la esperanza de
resucitar, derrame sobre nosotros su bendición. T/. Amén.
A/. Él nos conceda el perdón de nuestras culpas a los que vivimos en
este mundo y otorgue a los que han muerto el lugar de la luz y de la
paz. T/. Amén.

A/. Y a todos nos conceda vivir eternamente felices con Cristo, al que
proclamamos resucitado de entre los muertos. T/. Amén.

A/. Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo y Espíritu Santo


descienda sobre nosotros y nos acompañe siempre. T/. Amén.

A/. Dales, Señor, el descanso eterno T/. Y brille para ellos la luz


perpetua.

A/. Que las almas de todos los fieles difuntos por la misericordia de Dios
descansen en paz. T/. Amén.
Oraciones para los difuntos en el cementerio
La vida es un pasaje, pero somos los hijos del único Dios. Solo es
necesario tener fe. Pues sus palabras fueron muy claras, cuando Jesús
le dijo a Marta que su hermano vivirá. Ya que el que piensa en Él, no
morirá jamás.
Amado Padre Celestial, estamos aquí reunidos,
para despedir a este hermano, que nos has brindado.
Pues todos somos tus hijos, por el hecho de que Tú,
nos creaste desde el barro, en el principio de los
tiempos, dándonos la tierra como regalo.
 
Agradecidos por permitirnos compartir con él,
durante su travesía aquí en este plano terrenal.
Ahora, sabemos que está en el reino de los cielos,
ya que fue una persona honesta, de buenos
sentimientos y de gran corazón.
 
Lo mejor y más importante, es que siempre se
mantuvo fiel a ti, a tu palabra, a tu existencia.
Pues no hubo otro Padre para Él que no seas
Tú. El amor a tu ser, lo sostuvo firme, fuerte,
con la destreza de seguir hacia delante.
 
Por ello, te pido Rey del universo, que perdones
sus pecados. Para que en este instante viva en
paz en tu reino. Que pueda acompañarte, por
la eternidad. Muchas gracias.
 
Amén.
Señor Jesús, los aquí presentes nos postramos
a tus pies. Con el propósito de pedirte por el alma
de nuestro prójimo. Que hemos de colocar su
cuerpo en este cementerio, pero su espíritu volverá
contigo. Pues tu soplo de vida, al final vuelve a ti.
 
Tenemos la certeza, de que es un creyente entregado
en cuerpo y alma a ti. Ya que sus metas y proyectos
los colocaba en tus manos. Así como su salud, familia,
amigos y seres queridos, por el hecho de que entendemos
que eres el camino que todo hombre debe seguir.
 
Sabemos, mi Señor, que el que cree en ti, no morirá
para siempre, lo has dejado muy claro en tu palabra.
En esas enseñanzas que les diste a tus discípulos, con
el objetivo de esparcirla a los millones de personas
que existen, incluyendo a sus generaciones.
 
Asimismo, mi Señor, tenemos conocimiento de que
hay que estar sin culpas. Por ello rogamos perdón,
por los pecados cometidos, pues aunque ya no
hable en persona física, puedes juzgar su sentir.
 
Permítele tener un lugar en el cielo, a esta alma
que vivió por ti. Pues somos tus siervos, tus hijos
y el único propósito que deseamos, es agradarte
y alejarnos de mal de este mundo.
 
Amén.
 
Oh, mi Salvador, guía a los aquí presentes,
para que no se pierdan. Pues el sendero a
seguir eres Tú. Nos comprometemos a andar
como lo hiciste Tú, mientras andabas en
el mundo, con los seres humanos.
 
Te imploro, mi Deidad, que le des el descanso
eterno, la felicidad que se merece al morir
en ti. Pues de ahora y por siempre estará
libre de cansancio, y emociones impuras.
 
Por eso te suplico que a todos, nos des
el discernimiento, en las caídas que tenemos
cuando esa humanidad nos brota. Queremos
poder evitar los impulsos dañinos en contra
del semejante e incluso con nuestro ser.
 
Gracias, por escuchar esta súplica que
realizamos con la mayor bondad. Por
acamparnos en cualquier momento.
En el nombre de Jesús.
 
Amén.
Divina oración para difuntos en
su aniversario luctuoso
El día del aniversario luctuoso de un difunto, no se celebra que una
persona muera; solo se busca recordar lo mucho que se le quiere
aunque haya pasado el tiempo. Teniendo en cuenta que nos volveremos
a encontrar, pero mientras tanto podemos dedicar un rezo de
ceremonia para un muerto.
Índice

1.  ¿Cómo se debe de rezar en un aniversario luctuoso?


2.  Reza para acompañar a un familiar fallecido en el aniversario de su
muerte
3.  Hermosa oración para el aniversario de la muerte de un familiar fallecido
4.   ¿Cómo rezar en un aniversario luctuoso?

¿Cómo se debe de rezar en un aniversario


luctuoso?
Algunas iglesias han establecido un modelo de programación de rezos
para difuntos en su aniversario de fallecimiento. Donde se logra pedir por
su alma para que por medio de este ritual encuentren paz. Puesto que
con su muerte no se sabe si lograron pedir perdón de pecados en
vida. Pero con los rezos que se le realizan, se sabe que el amor de Dios
es infinito y los librara de todo pecado tras su fallecimiento.
La manera de rezar para difuntos, es a través del rosario y una persona
encargada hará el comienzo y lo finalizará rogado por su alma.  Este
ritual también se puede hacer como en forma de oración, donde se eleva
una petición con nuestras palabras. Allí se expresa la misericordia y el
amor de Dios para difuntos en su aniversario luctuoso por el
fallecimiento. Solo queda que te unas a este devoto ritual en honor a ese
familiar.
Reza para acompañar a un familiar fallecido
en el aniversario de su muerte
Siempre que puedas realiza un ritual de un año de fallecido de tu
familiar, para que este tenga paz. Puesto que su cadáver fue colocado
en un lugar, pero su alma no se sabe si está en un buen lugar. Es por
eso que si tu familiar tiene un año de fallecido, acompaña a los demás en
su aniversario luctuoso.
Así mismo, tras el fallecimiento de un familiar, lo mejor es rezar para que
tenga descanso por la eternidad. No obstante, para difuntos es
complicado arrepentirse antes de morir. Es por ello, que nosotros
siendo sus familiares, debemos orar en su aniversario luctuoso para que
sea libre de pecados.

Hermosa oración para el aniversario de la


muerte de un familiar fallecido
En esta gran oración para un difunto con intercesión de la Virgen de
Guadalupe para lograr el descanso. Donde hallaremos la paz que
necesitan para estar tranquilos. No importa si ya paso suficiente tiempo,
pero si deseas hacer el aniversario luctuoso tras su fallecimiento, hazlo.
Porque le ayudaras a estar tranquilo su alma, mientras que su cadáver
está en otro lugar.
Poderoso Dios,
Tú tienes el control
sobre todas las cosas.
 
Sabes cómo duele el vacío
de extrañar a un ser humano.
Y también tienes en cuenta
cuánto dolido su
ausencia hasta este día.
 
Por eso hoy, el día del Aniversario luctuoso
del ser que quería y ha partido al cielo,
¡Te pido, por favor, por esa persona!
Pero también por nosotros.
 
Para que nos entregues fortaleza,
nos permitas y aceptar su ausencia,
tras su fallecimiento.
Que su alma pueda resplandecer
con abundante luz en la eternidad
y siga descansando en paz.
 
Además de todo que su espíritu
se haya elevado por lo alto en el cielo,
tal como lo merecía.
 
Sabemos, bendito Dios,
que así era tu voluntad.
Y aunque la vida nos ha separado,
por su fallecimiento,
en nuestro corazón está tan
vivo como siempre.
 
Hazle saber el respeto
y el amor tan grande
que le sigo teniendo.
 
Porque nunca voy a olvidar
a mi ser querido, a esa persona
que me hizo reír tanto en vida.
 
Por medio de la oración
encuentro el aliento que necesito
para seguir viviendo.
 
Llenarás este vacío de amor y
palabras cálidas que me hacen sentir,
que mi ser querido aún está a mi lado.
 
En el aniversario luctuoso de su muerte,
te imploro que su espíritu,
tengo un descanso verdadero.
 
Asimismo, que se encuentre
a la diestra de Dios Todopoderoso
y de su hijo Cristo Jesús.
 
Aunque la muerte deja
un dolor grande e inigualable,
la oración está llena
de paz y serenidad.
 
Para sentir la presencia
de cualquier persona,
que partió del mundo terrenal. 
Una razón importante
de orar a Dios con toda
nuestra fuerza.

En el aniversario luctuoso de su muerte,


las personas queridas que quedamos,
estamos recordándoles y
también desafiamos pruebas.
 
De un corazón que se siente desalentado,
pero que con paciencia y tolerancia
se encuentra una salida.
 
Voy a vivir tan fuerte,
siempre recordando,
la alegría que había en él.
De esta manera, él puede
sentir en su alma que sigue conmigo.
 
De igual forma, escuchar
estas palabras de aliento,
mi hermoso Dios,
que nunca me desampara.
 
Esperaré al final de los tiempos
y que puedas revivir a mi ser querido.
Así volvernos a ver y encontrarnos en
la eternidad.
 
¡Clamamos a ti, Señor!
Cada vez que vuelvan
a caer las lágrimas,
por el sentimiento de extrañarlo.
 
Ayúdanos a no preguntarnos por qué
ya no está y torturarnos con lo
que pudo ser y no fue.
 
Que todas las tristezas
que hemos sentido
en nuestro corazón,
se conviertan en cosas
maravillosas para
el ser querido.
 
¡Rogamos a ti, amado Padre!
Eres digno de las súplicas y alabanzas,
además recibes a aquellos que se fueron.
 
Tienes el poder y control
de todo lo que pasa
y lo que sentimos.
 
Por esa razón, acompáñanos
a cerrar los ojos, para rogar a ti
con muchas ganas.
 
En mi corazón existe
una gran parte de consuelo,
porque sé que mi ser querido
está en el seno de tu misericordia.
 
Lo que me llena de esperanza
saber que se encuentra mejor que aquí
en la tierra. Por qué en Cristo
viviremos para siempre hasta la eternidad.
 
Te doy gracias, Padre.
Por atender mis súplicas
con amor, por ser benevolente
con lo que tanto necesito.
 
Además, Señor Cristo Jesús,
también te doy infinitas gracias
por perdonar los pecados de mí
ser querido.
Por eso está en la diestra
de Dios Todopoderoso.
 
Amén.

 ¿Cómo rezar en un aniversario luctuoso?


Lo importante es que todos en el momento estemos conectados con el
espíritu y alma. Para en esa forma poder llevar el mensaje para difuntos
que todavía se encuentra presente en los corazones. En algunos
aniversarios luctuosos con oraciones por los hijos fallecidos, cambian la
lápida y agregan oraciones de gran valor.
El aniversario luctuoso es una forma de agradecer a Dios por la vida, y para difuntos, en su muerte.
Por eso, únete en este rezo que se realiza y hazlo en familia por tu ser querido.
Una oración en honor a las
madres fallecidas
Continuamente te rezamos, Señor, por nuestra madre.
La recordamos con paz y con amor ante Ti,
seguros de que ella vive,
como estamos seguros de que vives Tú
y de que tu amor dura para siempre.
La recordamos cuando estaba entre nosotros...
A veces, nos parece sentir el calor y el sosiego
de su presencia protectora
como cuando vivía aquí,
mucho más para nosotros que para sí misma.
Dale, Señor, tu amor, dale tu vida. Dale tu paz.
Tenla muy cerca de Ti.
Sea feliz y ruegue ante Ti por nosotros.
Ayúdanos a vivir lo que ella nos enseño,
más con amor que con palabras.
A rezarte como ella, a quererte como ella,
a hacer de Ti y de los demás, igual que ella,
el sentido de nuestra vida.
Y si por descuido o por debilidad en algo te faltó,
perdónala, Tú que sabes lo que es ser Padre y Madre
y conoces como nadie el amor y el perdón
sin medida ni límites...
Perdónale sus faltas por lo mucho que amó a todos.
Gracias, Señor, por esta oración que nos llena de paz
en el recuerdo de nuestra madre.
Amén.
Oración por un padre que ya ha fallecido
Señor, gracias por dejarme hablar contigo; extraño a mi padre que está
ahora contigo en el cielo. En este momento te pido me des fuerza, es uno
de mis momentos más difíciles, pero tú eres mi refugio. Dios mío, tú eres mi
refugio, te doy gracias por la vida de mi padre, gracias por ser un regalo en
mi vida; mi padre fue un regalo precioso, por favor, llévalo contigo a tu
reino.

Padre Dios, hace ya (menciona hace cuánto tiempo perdiste a tu


padre) que mi papá se unió a ti en tu gran reino en el cielo; no mentiré
diciéndote que ha sido fácil, cada día lo extraño un poquito más y le lloro un
poco. Me diste la dicha de tener a un papá excelente, que me cuidó y me
dio todo el amor posible.

Hoy está contigo y me hace falta, pero sé que está bien, pues tú estás con
él dándole todo. Quiero agradecerte por haberlo puesto en mi vida y decirte
que fue el mejor papá del mundo; quisiera pedirte que le dijeras que no pasa
un segundo en el que no piense en él, siempre está presente.

Quiero que sepa que lo llevaré presente en mi corazón y en mi mente y que


de ahí nadie lo quitará, y también que mis hijos, y los hijos de mis hijos
sabrán de él y que fue el mejor papá que pudo bríndame esta vida. Mi Señor,
sé que le harás llegar mis palabras y le darás un gran abrazo. Amén.
Señor Mio, hoy vengo ante ti a buscar consuelo, mi padre ah muerto y me
cuesta aceptar su partida, se que este en un lugar mejor, pero la herida que
tengo es difícil de cerrar. No se que será de mi vida, ya que mi padre fue mi
luz en un lugar lleno de oscuridad, fue mi guía y mi sustento en mis
momentos de tristezas y derrotas.
Te lo llevaste, decidiste que su tiempo termino en la tierra y era momento de
volver al cielo, ahora desde el cielo se que el me cuida.
Pero aún así Dios Mio es doloroso recordar, es triste ver como pasa el
tiempo y ya no lo puedo abrazar.

El pecho se me cierra y en ocasiones ya no puedo respirar, el dolor y la


agonía invaden mi cuerpo, ya que nunca me imagina una vida sin el, pero
se fue, y ahora esta contigo, sentado a tu lado y guiando cada paso que
doy.

Padre Amado fuiste y serás el mejor hombre que conocí, doy gracias a ti
Señor por darme tan increíble persona como lo es el, bondadoso,
amorosos, lleno de ideales y virtudes.

Me queda de el su sabiduría, humildad e inteligencia, es más de lo que


pude esperar en mi vida, y es que los ojos se me llenan de lagrimas y la
mano me tiembla al escribir esta oración a mi padre fallecido.

Solo te pido Señor que puedas darme Paz y tranquilidad, que pueda
encontrar fortaleza en sus recuerdos y sabiduría en sus enseñanzas.
Tengo su voz grabada en mi mente, siento su presencia en cada momento y
se que el me ve desde el Cielo.

Dios mio solo espero que el tiempo y tu palabra pueda sanar el dolor que
hoy siento, el dolor por su partida y perdida, se que así lo quieres y así sera.

Dame fuerza Señor para afrontar este triste día, lleno de llanto y amargura
por un perdida muy dolorosa que me deja al borde del abismo, dame fuerza
Señor para seguir adelante y pueda recordar a mi Padre en todo momento.

Papa desde donde me veas siéntete orgulloso de mi, ya que por ti es quien
yo soy y por tus enseñanzas me volví una mejor persona. Señor
todopoderoso y eterno dame Paz.
Amén.
Oración Para un Hermano Fallecido

El luto nunca es fácil de superar y más cuando se trata de una pérdida tan cercana
como un hermano. Me atrevo a decir que la muerte de un hermano nunca se
olvida, solo se aprende a vivir con ella. Pero la vida sigue y debemos fortalecernos,
por eso te presento 3 oración para un hermano fallecido. Solo Dios puede consolar
un dolor tan grande.

A los amigos los escogemos, más un hermano es un regalo de Dios para nuestra
vida. Los hermanos siempre estarán para nosotros, a pesar de la distancia. Ya que
no podrás ayudarlo más físicamente, lo más importante que puedes hacer por él
ahora, es orar por su paz y tranquilidad. Y que el Padre Eterno lo reciba en su
morada.

Te recomendamos leer: ¿Cuándo y cómo murio el apóstol Juan?

Índice [Mostrar]

Oración por el alma de mi hermano

Oración Para un Hermano Fallecido

Padre amado, en este momento me acerco a ti con un corazón quebrantado, no


tengo palabras para decirte. Este dolor tan grande por la muerte de mi hermano
me invade, solo quiero pedirte por él. Recíbelo en tu Santo Reino Señor, perdonas
todos sus pecados, ten misericordia de su alma.

Hazme saber que su alma descansa en paz, localízalo en tu misericordia Señor. Que
cuando sea la hora de despertar e ir a tu trono, el entre con vestidura blancas
amado Dios. Te ruego Señor que me des fortaleza y paz en estos momentos tan
dolorosos para mí. Gracias Padre por nunca abandonarnos, sé que el alma de mi
hermano fallecido descansa en paz. En el nombre de Jesús, amén.
Oración por la pérdida de un hermano

Señor todopoderoso, me inclino ante ti, con un corazón quebrantado, destrozado y


arrepentido para hacer esta oración para un hermano fallecido. Para que puedas
dar consuelo a mi alma abatida en estos momentos, danos la fortaleza a la familia,
paz y tranquilidad de mis padres. No permita que este dolor nos atormente.

Ayúdanos Padre amado a entender porque mi hermano ha fallecido, porque te lo


llevaste. Hazme ver el propósito divino tras su partida, porque en estos momentos,
mi corazón y mi mente no logran entenderlo. Libra mi corazón de la angustia, de la
ira, el rencor, sobre todo líbrame de no pecar contra ti con mis pensamientos.

Solo tu Dios puede darle descanso a mi alma de este dolor que me embarga. Te
pido Padre que cuides de mí, de mis padres y familiares. Dárdanos con tu preciosa
y poderosa sangre envía ángeles alrededor de mi hogar y de mi familia. Perdona los
pecados de mi hermano cuando esté ante el trono de justicia.

Oración por la pérdida de un hermano

Oración Para un Hermano Fallecido

Dios bendito, ya hace tiempo te llevaste el alma de mi hermano, es por esto que te
imploro en este momento. Te ruego que le des el descanso eterno. Perdóname por
no haberle expresado cuanto lo amo, te lo llevaste muy pronto.

Gracias te doy Padre, porque a pesar de que me duele su partida, tengo la certeza y
convicción de que ahora está en un lugar mejor. Creo que el alma de mi hermano
está sentado a tu lado, allá en el cielo y sé que en algún momento nos volveremos
a encontrar para nunca más separarnos.

Estoy confiado y agradecido porque lo hiciste una buena persona, gracias por el
hermano que me regalaste. Perdona sus pecados y permite que su alma alcance la
serenidad. Ten misericordia y que pueda alabarte y glorificarte junto a tus santos
en la morada eterna. Gracias Dios, amén.

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