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Himno - A Jesucristo Ven Sin Tardar Himno - Cristo la Roca ( En Las Olas Inmensas)

A Jesucristo ven sin tardar, En las olas inmensas de embravecido mar,


Que entre nosotros hoy él está; Que asaltan de mi alma la pobre embarcación,
Y te convida con dulce afán, De rodillas a Cristo clamé, y el huracán
Tierno diciendo: "Ven". Deshecho fue al instante a la voz de Dios.

Coro CORO
¡Oh cuán grata nuestra reunión,
cuando allá, Señor, en su mansión, Es Cristo la Roca, el ancla de mi fe;
contigo estemos en comunión Los males, lamentos, y ayes de temor,
gozando eterno bien! Terminarán por siempre, con mi supremo Rey;
Es Jesucristo mi refugio.
Piensa que él sólo puede colmar
Tu triste pecho de gozo y paz; Me guarda de peligros, de pruebas, de dolor;
Y porque anhela tu bienestar, El manda que los vientos no agiten tempestad
Vuelve a decirte: "Ven". Los mares se detienen, la ola reposó,
Y en Cristo fijo el ancla, confiando más.
Su voz escucha sin vacilar,
Y grato acepta lo que hoy te da. Mi dulce salvador, sí, mi hermoso amigo y Dios,
Tal vez mañana no habrá lugar. Que libra de tristezas y aleja amarga hiel:
No te detengas; ven. Por fe yo iré al cielo, mansión del ser de amor,
La fuente inagotable de dicha y bien.
Cuán Grande es Él Al dulce hogar, al cielo de esplendor.
Señor, mi Dios, al contemplar los cielos, Le adoraré, cantando la grandeza
El firmamento y las estrellas mil. De su poder y su infinito amor.
Al oír tu voz en los potentes truenos
Y ver brillar al sol en su cenit. Himno - Cuando allá se Pase Lista

Cuando la trompeta suene en aquel día final


coro
Y que el alba eterna rompa en claridad,
Mi corazón entona la canción. Cuando las naciones salvas a su patria lleguen ya,
¡Cuán grande es Él! ¡Cuán grande es Él! Y que sea pasada lista allí he de estar.
Mi corazón entona la canción.
¡Cuán grande es Él! ¡Cuán grande es Él! CORO
///Cuando allá se pase lista,///
A mi nombre yo feliz responderé.
Al recorrer los montes y los valles
Y ver las bellas flores al pasar.
En aquel día sin nieblas en que muerte ya no habrá,
Al escuchar el canto de las aves Y su gloria el Salvador impartirá,
Y el murmurar del claro manantial. Cuando los llamados entren a su celestial hogar,
Y que sea pasada lista allí he de estar.
Cuando recuerdo del amor divino,
Que desde el cielo al Salvador envió. Trabajemos por el Maestro desde el alba al vislumbrar,
Siempre hablemos de su amor y fiel bondad,
Aquel Jesús que por salvarme vino,
Cuando todo aquí fenezca y nuestra obra cese ya,
Y en una cruz sufrió y por mi murió.
Y que sea pasada lista allí he de estar.

Cuando el Señor me llame a su presencia,


Yo sigo sin cesar,
El Cuidará de Mi (Cómo podré estar triste?) Y todas sus bondades
Me da sin limitar,
 
Y todas sus bondades
¿Cómo podré estar triste?
Por siempre me ha de dar.
¿Cómo entre sombras ir?
¿Cómo sentirme solo
Siempre que soy tentado,
Y en el dolor vivir?
O si en la prueba estoy,
Si Cristo es mi consuelo,
Más cerca de El camino,
Mi amigo siempre fiel,
Y protegido voy;
Si aun las aves tienen
Si en mí la fe desmaya
Seguro asilo en El,
Y sufro de ansiedad,
Si aun las aves tienen
Tan sólo El me levanta,
Seguro asilo en El.
Me da seguridad,
Coro:
Tan sólo El me levanta,
¡Feliz, cantando alegre,
Me da seguridad
Yo vivo siempre aquí;
Si El cuida de las aves,
Cuidará también de mí!
"Nunca te desalientes",
Oigo al Señor decir,
Y en Su palabra fiado,
Hago al dolor huir.
A Cristo, paso a paso
El Vino A Mi Corazón Y yo quiero esa cruz do murió mi Jesús
Por salvar al más vil pecador.
¡Cuán glorioso es el cambio operado en mi ser
Viniendo a mi vida el Señor!
Hay en mi alma una paz que yo ansiaba tener: Coro:
La paz que me trajo su amor. ¡Oh! Yo siempre amaré esa cruz.
En sus triunfos mi gloria será.
Coro:
Y algún día en vez de esa cruz,
//¡El vino a mi corazón!//
Mi corona Jesús me dará.
Soy feliz con la vida que Cristo me dio,
Cuando el vino a mi corazón.
Aunque el mundo desprecie la cruz de Jesús,
Ya no voy por la senda que el mal me trazó, Para mi tiene suma atracción.
Do sólo encontré confusión; Porque en ella llevo el Cordero de Dios
Mis errores pasados Jesús los borró, Mi pecado y mí condenación.
Cuando él vino a mi corazón.

En la cruz do su sangre Jesús derramó


Ni una sombra de duda oscurece su amor,
Hermosura contemplo en visión.
Amor que me trajo el perdón:
La esperanza que aliento la debo al Señor, Pues en ella el Cordero inmolado murió
Cuando el vino a mi corazón. Para darme pureza y perdón.

Yo seré siempre fiel a la cruz de Jesús,


En el Monte Calvario Sus desprecios con él sufriré.
Y algún día feliz con los santos en luz,
En el monte Calvario se vio una cruz,
Para siempre su gloria tendré.
Emblema de afrenta y dolor.
En la Viña del Señor El que quiera trabajar Hallará también lugar
En la viña del Señor.
Yo quiero trabajar por el Señor, En La Cruz
Confiando en su palabra y en su amor,
Quiero yo cantar y orar, Me hirió el pecado, fui a Jesús, Mostrele mi dolor;
Perdido errante, vi su luz, Bendíjome en su amor.
Y ocupado siempre estar
En la viña del Señor.
Coro
En la cruz, en la cruz, Do primero vi la luz,
Coro: Y las manchas de mi alma yo lavé Fue allí por fe do vi a Jesús,
Trabajar y orar, Y siempre feliz con él seré.
En la viña, en la viña del Señor;
Sí, mi anhelo es orar, Sobre una cruz mi buen Jesús Su sangre derramó
Por este pobre pecador, A quien así salvó.
Y ocupado siempre estar,
En la viña del Señor.
Venció a la muerte con poder Y el Padre le exaltó;
Confiar en él es mi placer. Morir no temo yo.
Yo quiero cada día trabajar,
Y esclavos del pecado libertar. Aunque él se fue solo no estoy, Mandó al Consolador;
Conducirlos a Jesús, Divino Espíritu que hoy Me da perfecto amor.

Nuestro Guía, nuestra Luz,


En la viña del Señor.

Yo quiero ser obrero de valor,


Confiando en el poder del Salvador;

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