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La donación de órganos implica la extracción de un órgano sano de un donante, ya sea vivo o fallecido, para ser trasplantado a un receptor cuyo órgano ha dejado de funcionar. Cualquier persona puede registrarse como donante de órganos y tejidos independientemente de su edad, género, religión, raza o etnia. Los órganos que se pueden donar en vida incluyen uno de los riñones, parte del hígado o parte de los pulmones, mientras que después de la muerte
La donación de órganos implica la extracción de un órgano sano de un donante, ya sea vivo o fallecido, para ser trasplantado a un receptor cuyo órgano ha dejado de funcionar. Cualquier persona puede registrarse como donante de órganos y tejidos independientemente de su edad, género, religión, raza o etnia. Los órganos que se pueden donar en vida incluyen uno de los riñones, parte del hígado o parte de los pulmones, mientras que después de la muerte
La donación de órganos implica la extracción de un órgano sano de un donante, ya sea vivo o fallecido, para ser trasplantado a un receptor cuyo órgano ha dejado de funcionar. Cualquier persona puede registrarse como donante de órganos y tejidos independientemente de su edad, género, religión, raza o etnia. Los órganos que se pueden donar en vida incluyen uno de los riñones, parte del hígado o parte de los pulmones, mientras que después de la muerte
La donación de órganos es una cirugía en la que se toma un órgano
sano de una persona (el donante) y se pone en el cuerpo de otra persona (el receptor) cuyo órgano ha dejado de funcionar. El donante del órgano puede estar vivo o haber fallecido.
¿Quiénes se pueden registrar como donantes
de órganos? Casi todas las personas se pueden registrar como donantes de órganos y tejidos. Hay donantes de órganos de todas las edades, géneros, creencias religiosas, razas y etnias. Se puede uno inscribir para donar órganos y tejidos una vez fallecido o como donante en vida.
Los órganos que se pueden donar en vida son:
Uno de los riñones: Después de la donación, el riñón
restante seguirá siendo capaz de depurar los desechos del organismo. Los riñones son el órgano donado con más frecuencia. Una parte del hígado: Después de la donación, las células hepáticas que quedaron crecerán hasta que el hígado quede casi del mismo tamaño que tenía. Una parte del pulmón, del páncreas o de los intestinos: Aunque estos órganos no vuelven a crecer, no los necesitamos completos para poder llevar una vida plena y saludable.