ACOSO LABORAL

CASO DE MALTRATO LABORAL

El maltrato y el hostigamiento laboral se verifican en todos los ámbitos y

de múltiples maneras, a continuación, relataremos brevemente mediante
una historia uno de los diferentes casos de acoso laboral:

Clara comparte lo que le tocó vivir cuando era camarera en un restaurante,

ella trabajaba sólo tres o cuatro turnos porque necesitaba tiempo para sus
talleres de murga y percusión. Por otro lado, en su empleo hubo un cambio
de dueños, empezó haber presentismo y a pagarles en negro. Al nuevo
encargado no le gustaba que tuviera una vida fuera del restaurante y le
redujo los pocos turnos que tenía. También empezó a gritarle frente a los
demás y a robarle en la cara las propinas que le dejaban en las mesas. Así
mismo, le exigía más rapidez, más mesas, más de todo. y si llegaba un
minuto tarde, la insultaba. Cuando se atrasaban con los pagos del sueldo y
ella preguntaba, le decía que, por eso, por preguntar, y le pagaba de última.
Y llego hasta el punto de empujarla cuando pasaba con la bandeja hacia el
salón. Con la justificación de que era, lenta y decía que caminara más
rápido. Con la frase “Y si no te gusta, ya sabía dónde está la puerta”.

El maltrato no paraba, Al contrario, al encargado no le gustaba ir los

domingos a la mañana, llegaba de muy mal humor y se las agarraba con
ella, que había trabajado el sábado hasta las tres de la mañana. Cuando
pasaba, siempre hacía un comentario insultante. Y después de oír eso tenía
que salir al salón con la mejor sonrisa. Pon mejor cara porque si no te echo,
le decía, burlándose. ella no sabía qué hacer.

Clara recuerda que trataba de olvidarse mientras veía pasar las horas, los
platos, los clientes. Pero un domingo sintió que no soportaba más. “Pasaba
un compañero con una bandeja con cuchillos y se le cruzó una idea loca.
Dije: “agarro uno y se lo clavo. Lo mato”.

Clara se encerró en el baño y se puso a llorar, salió al rato con la cara

hinchada. Hasta ahí había llegado. “Decidió que no seguía más, se fue sin
dinero, sin otro trabajo, nada. Simplemente dije basta. El contador de la
empresa, cuando me hizo la liquidación, le aseguró que él no sabía nada de
lo que pasaba. ella sentía que en ese momento que por fin se terminó la
cadena que había arrastrado durante cuatro años. ¡No entiendo cómo
pueden soportar tanto! Creo que esa clase de maltrato, que se vive a
cuentagotas, día a día, tiene algo contaminante. se puede acostumbrar,
padecer, es caso no saber cómo liberarse. Por suerte, en un instante, y se
dio cuenta y se liberó.

Teniendo en cuenta el anterior relato, podemos resaltar algunas conductas

que constituyen el acoso laboral1, en este caso se encuentra entre el grupo
de maltrato laboral2
1. Los actos de agresión física, independientemente de sus
consecuencias: Cuando la empujaba cuando pasaba con la bandeja
hacia el salón.

2. Las injustificadas amenazas de despido expresadas en

presencia de los compañeros de trabajo: Con la justificación de
que era, lenta y decía que caminara más rápido. Con la frase “Y si no
te gusta, ya sabía dónde está la puerta”.

3. los comentarios hostiles y humillantes de descalificación

profesional expresados en presencia de los compañeros de
trabajo: Cuando pasaba, siempre hacía un comentario insultante

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1. La ley 1010 de 2006 que regula el acoso laboral clasifica los tipo, modalidades o clases
de acoso laboral.
2. El artículo 7 de la ley 1010 de 2006 señala expresamente las siguientes conductas de
acoso laboral