¡Cuéntame Un Cuento!

¡Cuéntame
un cuento!
Fábulas y cuentos de todos los
tiempos para divertirse y
reflexionar
Con juegos y actividades
Alfreduki Puki Tuki

Cuentos para divertirse y reflexionar
¡Cuéntame un cuento! Fábulas y cuentos de todos los

tiempos para divertirse y reflexionar. Todos los
derechos reservados. No está permitida la
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recopilación en un sistema informático, ni la
transmisión por medios electrónicos, mecánicos, por
fotocopias, por registro o por otros métodos, salvo de
breve extracto a efectos de reseña, sin la autorización
por escrito del editor o el propietario del copyright.®
México, 2022
2
¡Cuéntame un cuento!
DEDICATORIA
A mis sobrinos:
Diana, Daniel, Karen,
Marianne, Stephania y
Ángel
3
ÍNDICE
página
Antes de leer tus cuentos favoritos ……………. 7
1. Acres de diamantes …………………………………….. 8

2. Arregla al hombre ………………………………………. 9
3. Buscar en el lugar equivocado ……………………. 10
4. Colaboración ………………………………………………. 11
5. Comer para trabajar …………………………………… 12
6. Come tú mismo la fruta ……………………………… 13
7. Dar de forma diferente ………………………………. 14
8. Dar la vida por una hermana ……………………… 16
9. El águila gallina ………………………………………….. 17
10. El arco y la flecha ……………………………………….. 18
11. El arte de matar dragones ………………………….. 18
12. El bien que se hace con bien se paga ………….. 19
13. El buen lector ……………………………………………… 23
14. El burro y el caballo ……………………………………. 24
15. El burro y el tigre ………………………………………… 25
16. El chico y su mamá …………………………………….. 26
17. El ciego y el cojo …………………………………………. 26
18. El científico y la muerte ……………………………… 27
19. El ciervo y los perros ………………………………….. 28
20. El dragón transformado en pez …………………. 29
21. El escorpión y la rana …………………………………. 30
22. El flautista de Hamelín ………………………………. 31
23. El funeral del tío Jorge ……………………………….. 32
24. El gato del gurú …………………………………………… 33
25. El gigante egoísta ……………………………………….. 34
26. El hombre árbol ………………………………………….. 35
27. El hombre, el niño y el burro ……………………… 37
28. El hombre que simulaba tocar la flauta …….. 38
29. El juego de las damas …………………………………. 39
30. El ladrón de pollos ……………………………………… 40
31. El león que se creía cordero ………………………. 41
32. El león y el ratón ………………………………………… 42
33. El león y la zorra …………………………………………. 43
34. El león y su ejército …………………………………….. 44
35. El leopardo y los monos ……………………………… 45
4
36. El lobo y el perro …………………………………………. 46

37. El niño que pudo hacerlo ……………………………. 47
38. El país de los castores libres ………………………. 49
39. El pajarito que persistió ……………………………… 54
40. El Papa y el borrachito ……………………………….. 55
41. El paracaidista y el sabelotodo …………………… 57
42. El patito feo ………………………………………………… 59
43. El pato y la serpiente ………………………………….. 61
44. El periodista mentiroso ……………………………… 62
45. El perro que lo perdió todo …………………………. 62
46. El perro y su dueño ……………………………………. 63
47. El pozo ………………………………………………………… 64
48. El príncipe y su arco …………………………………… 65
49. El ratón que no sabía ser ratón ………………….. 66
50. El rey dificilísimo ……………………………………….. 67
51. El rey Midas ………………………………………………… 68
52. El rey y los pasteles …………………………………….. 69
53. El rico observador ………………………………………. 71
54. El valiente Wallenberg ……………………………….. 72
55. El viejo que sembraba palmeras ………………… 73
56. Eso a mí ya no me toca ……………………………….. 75
57. La desconfianza terrible …………………………….. 76
58. La gallina de los huevos de oro ………………….. 76
59. La lechuza se muda de casa ……………………….. 77
60. La princesa y el esclavo ………………………………. 78
61. El señor que amaba a los dragones ……………. 80
62. El traje nuevo del rey ………………………………….. 81
63. El zorro mutilado ……………………………………….. 82
64. El zorro y la estatua ……………………………………. 83
65. Esperando al conejo ……………………………………. 83
66. Historia del pesimismo ……………………………… 84
67. Jalar los tallos de los girasoles …………………… 86
68. La almeja y la garza ……………………………………. 87
69. La anciana en la playa ………………………………… 88
70. La cabra que se vistió de tigre ……………………. 89
71. La chica que podó el pasto …………………………. 89
72. La elefanta y la perrita ……………………………….. 90
73. La importancia de la paciencia ………………….. 91
74. Las dos amigas y sus hijos …………………………. 92
75. Las ranas que pidieron un rey ……………………. 93
76. La serpiente y la lima …………………………………. 94
77. La tortuga y la hormiga ……………………………… 95
5
78. La unión hace la fuerza ………………………………. 96

79. La zorra y el cuervo …………………………………….. 97
80. La zorra y la cigüeña …………………………………… 98
81. Lo que le gusta mi novia de tí ……………………. 99
82. Los amigos y el oso …………………………………….. 100
83. Los cazadores de gansos ……………………………. 101
84. Los cazadores y los gansos ………………………… 102
85. Los cuatro hermanos y el león …………………… 103
86. Los dos amigos …………………………………………… 105
87. Los dos caballeros ………………………………………. 105
88. Los dos cazadores ………………………………………. 106
89. Los dos empresarios del agua ……………………. 108
90. Los dos hermanos ………………………………………. 109
91. Los dos ladrones y el burro ………………………… 111
92. Los tres cerditos …………………………………………. 112
93. Los tres deseos ……………………………………………. 114
94. Los tres toros y el león ………………………………. 116
95. Más amor al dinero que a la vida ……………….. 119
96. Mentira y franqueza …………………………………… 120
97. Muchos caminos ………………………………………… 121
98. Pedro y el lobo …………………………………………….. 122
99. Pobrecita Yo ………………………………………………… 124
100. ¿Por qué se le grita a una persona? ……… 126
101. ¿Quién le pone el cascabel al gato? ……… 127
102. Ratón de campo y ratón de la ciudad …… 129
103. Requisitos para ser ciudadano …………….. 132
104. Reunión de viejitos sabios ……………………. 133
105. Ricitos de Oro y los tres osos ……………….. 134
106. ¿Será bueno o malo? …………………………….. 135
107. Sopa de piedra ………………………………………. 136
108. Soy fuerte, soy el que manda ……………….. 138
109. Tierra de ratones ………………………………….. 139
110. Triste engaño ……………………………………….. 140
111. Utilizar el mal para bien ………………………. 142
112. Vivir muy juntos …………………………………… 143
113. Y tú ¿qué me vas a dar? ………………………… 143
Fuentes consultadas …………………………………………. 145
6
ANTES DE LEER TUS CUENTOS

FAVORITOS…
Me he dedicado a reunir los cuentos que me han

gustado desde que era un niño. Para mí no hay nada más
delicioso que leerlos o escucharlos. Hay cuentos que he leído
una y otra vez y mi imaginación no deja de llevarme a viajes
fabulosos y además me han dejado enormes enseñanzas
para vivir la vida de manera más inteligente.
Espero que tú los disfrutes tanto como yo.
Lee el libro como gustes, puedes empezar desde un
inicio o ir directo a tus favoritos. Ojalá los puedas leer
toditos.
Ojo: algunos cuentos son muy cortos porque la
intención es reflexionar sobre la situación que plantean.
Al final de cada uno puse enlaces que te pueden
servir para reflexionar o jugar, que te invito muy seriamente
a hacerlos. Algunos son crucigramas, sopa de letras, armar
frases y otros son pequeños examencitos para saber qué
tanto te quedó claro el cuento o para reflexionar sobre él.
Todos los enlaces están con letra azul y tienen una manita a
la derecha. Adelante. Es todo tuyo.
Con cariño:
Alfreduki Puki Tuki
7
ACRES DE DIAMANTES
Allá en algún
país africano sucedió la
siguiente historia.
Ponle mucha atención
que tiene una gran
enseñanza.
Alí Hafed era un

granjero que tenía
enormes deseos de
encontrar diamantes
por lo que vendió su
granja y se fue por el mundo a buscarlos. Con el dinero de la
venta de su granja se dedicó a buscar la mina que tanto
deseaba pero… no lo logró. Alí murió triste y sin poder
lograrlo.
Mientras tanto el comprador de su granja paseaba
cierto día por cerca de un arroyo que pasaba por su granja y
vio un piedra que le llamó la atención. La tomó en sus
manos y la llevó a su casa.
Un amigo que fue a visitarlo vio la piedra y le dijo que
era el diamante más grande del mundo.
¡Tal granja era la mina de diamantes más grande del
mundo!
La verdad es que todos tenemos en nuestra persona

una gran mina de diamantes que necesitamos descubrir,
aprovechar y enriquecernos con ella.
Russel H. Conwell
SOPA DE LETRAS
ARMA LA FRASE
8
ARREGLA AL HOMBRE
El presidente de
una gran nación se
encontraba preparando un
discurso que sería de gran
importancia para la gente.
Su hija, que tenía ocho
años de edad no dejaba de
correr, gritar y jugar. Su
papá no se concentraba y le
repetía constantemente
que se tranquilizara. La
niña seguía jugando.
De repente, el presidente, un tanto desesperado se
puso a pensar qué hacer para entretener a la niña. Fue a su
recámara y extrajo una revista, la abrió y vio un mapa,
arrancó la hoja y la recortó en varios pedazos. Se los dio a su
hija para que los armara. Volvió a concentrarse en su
discurso.
Habían pasado sólo dos minutos cuando la niña
estaba de vuelta. Sorprendido de lo rápido de su hija le
preguntó:
- ¿Cómo le hiciste, hija? ¡Fue muy rápido!
- Muy fácil, papi, al principio no sabía cómo pero al
voltear algunos trozos me di cuenta que detrás
estaba un cuerpo humano así que lo ordené y rápido
lo solucioné. “Arreglé a la persona y el mundo quedó
arreglado”.
SOPA DE LETRAS
¡PARA REFLEXIONAR!
9
BUSCAR EN EL LUGAR EQUIVOCADO
Un borracho salió
de la cantina muy de
noche. De repente
escuchó que se le cayó
algo. Comenzó a hurgar
en los bolsillos de su
pantalón, luego en los de
su saco y también en los
de su camisa.
- ¿Dónde diablos
quedó mi
moneda de la suerte?
Se dirigió a un poste que tenía una gran lámpara
encendida. Se agachó y siguió buscando.
Otro borrachín que pasaba lo vio y le preguntó:
- ¿Qué hace, amigo?
- Estoy buscando mi moneda de la suerte?- le
respondió.
- Yo le ayudaré a buscarla - los dos se agacharon y
siguieron buscando la moneda.
- ¿Dónde exactamente la perdió, amigo?
- Afuera de la cantina.
- ¿Y por qué la estamos buscando aquí?- preguntó el
segundo borracho algo molesto.
- Pues porque aquí hay más luz.
Anthony de Mello
QUIZ SOBRE LA FÁBULA
10
COLABORACIÓN
Juan era un niño de mucha energía. Le gustaba hacer

muchas cosas. Cierto día la
maestra le dejó mucha
tarea y después de comer
se preparó para hacerlo. Le
ayudó a su mamá a
recoger los trastes y
limpió la mesa. Sus papás
estaban encantados con él
pues era muy dedicado.
Ese día la maestra le dejó
hacer un gran dibujo en
una cartulina para lo que
necesitaba tener toda la mesa limpia y sin objetos que se lo
impidieran. Tenía que mover un enorme florero que estaba
al centro de la mesa. Sudó, lloró y gritó pero el florero no se
movió. La mamá se le quedó viendo.
- ¿Ya hiciste todo lo que podías, hijo? - le preguntó su
mamá.
- Ya. Todo.
- ¿Seguro?
- Sí y no puedo moverlo.
- ¿Estás seguro que hiciste todo?
- Sí, mamá, - contestó un tanto desesperado.
- No es cierto, hijo. Yo estoy aquí dispuesto a ayudarte
y no me has pedido que lo haga.
SOPA DE LETRAS
PARA REFLEXIONAR
11
COMER PARA TRABAJAR
Había un rey que

tenía fama de ser muy sabio
y justo.Al rey también le
gustaba conocer a su gente
para buscar formas de
hacerles mejor la vida. El
rey estaba sorprendido.
Había escuchado que en su
reino habitaba una persona
muy famosa por comer
mucho.
Lo mandó llamar. El
comelón llegó y de
inmediato lo hicieron pasar
frente al rey.
- ¡Es cierto que comes mucho? - le preguntó el rey.
- Sí, majestad. Como mucho.
- ¿Como cuánto comes?
- ¡Me como lo que seis hombres juntos!
- El rey estaba asombrado.
- Y dime ¿trabajas lo mismo que lo que comes?
- No, majestad, no alcanzo a trabajar lo que seis
hombres.
- Pues si todos fuéramos como tú el reino
empobrecería y todos moriríamos de hambre,
incluido tú. De ahora en adelante te ordeno que sólo
comas lo que trabajas.
SOPA DE LETRAS
12
COME TÚ MISMO LA FRUTA
Un maestro
tenía fama de contar
muchas fábulas y
cuentos, pero no se los
explicaba a sus
alumnos.
Se le acercó uno
de ellos y le preguntó:
- Maestro, tú nos
cuentas fábulas y cuentos muy interesantes, pero
nunca nos dices lo que significan.
El maestro no les respondió. Guardó silencio unos
instantes. Al fin le respondió:
- ¿Te gusta la fruta?
- Por supuesto, maestro.
- ¿Te gustaría que alguien te la diera masticada?
Anthony de Mello
¡VAMOS A REFLEXIONAR LA FÁBULA!
13
DAR DE FORMA DIFERENTE
Brenda quería
hacer algo. En su
corazón bullía una idea
que cada vez que la
pensaba se emocionaba.
Todos los días al salir de
su trabajo tomaba su
flamante camioneta y
minutos antes de llegar
a su casa atravesaba un
barrio lleno de gente
diferente a ella. Los veía
pobres, sucios,
desaliñados. A veces
sentía temor y subía los
cristales para prevenir
cualquier mala
experiencia.
No le gustaba
pasar por ahí pero no había otra ruta. Era la única que le
permitía llegar a su colonia. Estaba a punto de entrar la
temporada navideña y había recibido un jugoso aguinaldo.
Llegó a un semáforo y se detuvo. Los pensamientos llegaron
a su mente. ¿Qué haría con su dinero? Pensó en un viaje o
¡En cambiar la camioneta!… De repente tocaron su cristal.
Era una viejecita que le pedía limosna. Brenda sólo movió la
cabeza en señal de no y siguió su camino. Llegó a su casa. Se
quitó los zapatos y suspiró. La imagen de la anciana volvió a
su cabeza. No le dio nada y tenía mucho dinero disponible.
La idea de hacer algo por esa gente le seguía
rondando la mente. Pero no quería sólo darles. Necesitaba
hacer algo más. Algo que inspirara a las personas a salir de
14
su pobreza. Podría darles una limosna pero el hambre y la

miseria no desaparecerían. Creía que cuando a los pobres
cuando sólo se les da siguen siendo pobres. Darles es como
un calmante que sólo se alivia el dolor, pero continúa la
enfermedad, porque la pobreza es una enfermedad. Y de las
peores. Algo tenía que hacer.
Al día siguiente se levantó. Su cara brillaba. Tenía la
inspiración. Crearía una asociación que ayudara a las
personas a construir su propio futuro. Daría becas a niños
que se esforzaran en sus estudios. Iría con la gente a
proponerles salir de su apatía y que dejaran de levantar la
mano sólo para recibir limosnas. Apoyaría con su aguinaldo
a quienes quisieran poner un negocio. No les regalaría el
dinero, la gente tendría que devolverlo para poder prestarlo
a otras personas.
Brenda renunció al viaje. La camioneta no fue
cambiada. Fue al barrio y tocó a las puertas. Hubo algunos
que aceptaron el reto. Sentía, por primera vez en su vida,
que lo que hacía tenía sentido. Se comprometió a hacer
crecer su proyecto. Nada la detendría.
Alfreduki Puki Tuki
QUIZ PARA REFLEXIONAR
RELACIONA LAS COLUMNAS
15
DAR LA VIDA POR UNA HERMANA
Una niña estaba muriendo de una enfermedad de la que su

hermano mayor se había recuperado.
El médico dijo al chico:

- Si le damos de tu sangre se salvará, si no, no. ¿Estás
dispuesto a dársela?
Los ojos del chico se llenaron de miedo. Por unos
instantes guardó silencio y al fin dijo con los ojos llenos de
lágrimas:
- Está bien, lo haré.
Una hora después comenzó la transfusión. El chico

preguntó al médico:
- Dígame doctor ¿cuánto tardaré en morir?
En ese momento, el médico comprendió que el chico

había creído que al dar su sangre a su hermana él moriría y
que había estado dispuesto a dar su vida por ella.
Anthony de Mello
REFLEXIONEMOS LA FÁBULA
16
EL ÁGUILA GALLINA
Un granjero trepaba por

los riscos de una montaña y se
encontró con un nido de águila
que tenía un huevo. Lo tomó y se
lo llevó a su granja. Al poco
tiempo el huevo eclosionó y salió
el pollo de águila quien en unos
instantes empezó a hacer como
los demás pollos:
- Picaba la tierra buscando
gusanos como los pollos.
- Tomaba agua como los
pollos.
- Movía las alas como los pollos.
- Correteaba a los demás pollos peleando todo aquello
que pareciera comida.
Se comportaba como los pollos.
Cierto día se le ocurrió voltear al cielo y vio una majestuosa
águila volar.
- ¿Qué es eso?- preguntó a la gallina más cercana.
- Es un águila, la reina de los cielos.
- Es impresionante.
- Sí que lo es. Pero tú y yo somos diferentes. Somos
gallinas. Sigamos rascando el suelo y deja al águila
en el cielo.
El águila murió creyendo que era una gallina.
Anthony de Mello
SOPA DE LETRAS SOBRE LA FÁBULA
¡DALE CLIC!
17
EL ARCO Y LA FLECHA
Dos aprendices de arqueros decían:

- Mi arco es tan bueno que no necesita flecha.
El otro contestaba:
- Mi flecha es tan buena que no necesita arco.
Llegó el maestro y les dijo:
- Sin arco ¿cómo puede dispararse la flecha.
Sin flecha ¿de qué sirve un arco? Las dos
cosas son importantes, la una sin la otra de
poco o nada sirven.
Jan Fei Dsi
SOPA DE LETRAS
EL ARTE DE MATAR DRAGONES
Cho Ping tenía fama

de ser muy dedicado y
estudioso. No hacía nada si
no tenía absoluto
conocimiento. Un día
decidió aprender el
dificilísimo arte de matar
dragones. Estudió muchos
años, gastó gran parte de su
dinero hasta conocer a nivel de experto todo sobre el asunto.
18
Cuando creyó que ya estaba listo ya no había

dragones.
Chuang Dsi
QUIZ PARA REFLEXIONAR LA FÁBULA
EL BIEN QUE SE HACE CON BIEN SE PAGA
Esta es una historia que

sucedió cuando todavía los
animales hablaban. Y eso
pasó hace muchos, muchos
años.
Cierto día salió un
leñador a cortar leña.
Llevaba su hacha muy
afilada pues quería
terminar pronto su trabajo.
Al entrar al bosque escuchó de repente que alguien se
quejaba y pedía auxilio. fue rápidamente y para su enorme
sorpresa se dio cuenta que estaba una gigantesca serpiente
debajo del tronco de un árbol.
- ¡Ayúdame! - dijo la serpiente.
- ¿Pero qué te pasó? - Gritó el hombre.
- ¡Primero ayúdame, si no lo haces moriré!
El leñador caminó hacia una de las orillas del árbol y
con todas sus fuerzas levantó el tronco y la serpiente pudo
salir. Se estiró, crujieron sus costillas.
- Muchas gracias por haberme salvado, ahora en
recompensa te voy a comer.
19
- ¿Qué? ¡Estás loca! ¡Te acabo de salvar la vida! -gritó

el leñador totalmente sorprendido.
- ¿Qué no sabes que el bien que se hace con mal se
paga? -dijo la serpiente mirando enojada al leñador.
- Estás muy equivocada.
- Mira, para que veas que tengo la razón
preguntaremos a tres animales, si los tres dicen que
tengo la razón te como sin remedio.
- De acuerdo. Ya verás que tengo la razón.
- No. Tú verás que yo tengo la razón.
La serpiente y el leñador se internaron en el bosque.
Lo primero que se encontraron fue a una gallina.
- Gallinita hermosa queremos que nos ayudes a
resolver un problema- la gallina no dejaba de
picotear en el piso buscando gusanos.
- Díganme, ¿en qué puedo ayudarlos? - dijo por fin la
gallina.
- Salvé a la serpiente de morir aplastada por un tronco
y ahora me quiere comer. Dice que el bien que se
hace con mal se paga.
- Es cierto, cómetelo serpiente. Es cierto, el bien que
se hace con mal se paga.
- ¡Pero…! -el hombre estaba temblando.
- Sí, así es. Yo todos los días pongo un huevo con
mucho cariño y llega la señora del leñador y me lo
quita y el día en que no ponga me mandará al caldo.
Cómetelo.
La serpiente se le acercó amenazadoramente al
leñador.
- ¡Espera, faltan dos!
- Está bien, esperaré.
Siguieron avanzando por el bosque. Se toparon con
un burro. quien comía sabrosamente el pasto.
- Amigo burrito, queremos que nos ayudes con un
problema- le dijo el leñador. El burro no dejaba de
comer. Después de un rato levantó la cabeza.
20
- ¿Qué pasó?- dijo.

- Resulta que salvé a la serpiente de morir aplastada
por un árbol y ahora me quiere comer. Dice que el
bien que se hace con mal se paga. Yo digo que es al
revés: el bien que se hace con bien se paga.
- Cómetelo serpiente. Cómetelo.
- ¿Pero por qué?- saltó hacia atrás el hombre porque
la serpiente se relamía la boca.
- Yo todos los días trabajo muy duro para el hombre. Si
algún día no lo hago bien me da palos y cuando ya
soy viejo y no le sirvo me mata y utiliza mi cuero. Yo
le hago bien y él me paga con un mal. Cómetelo.
La serpiente se le acercó al leñador quien estaba
sudando copiosamente.
- Falta uno. Lo prometiste.
- Yo lo que quiero es ya no verte sufrir- le dijo la
serpiente.
- Gracias, pero falta uno.
- Está bien, nomás porque me gusta cumplir mi
palabra. Debes de saber que tengo mucha hambre.
Siguieron avanzando. Se encontraron a un coyote
que estaba acostado y medio dormido.
- Amigo coyotito, amigo coyotito. Queremos que nos
ayudes a resolver un problema.
- ¿Qué pasó? -dijo el coyote.
- Salvé a la serpiente de morir aplastada por un árbol y
resulta que ahora me quiere comer porque dice que
el bien que se hace con mal se paga.
- ¡Qué cosas!- respondió el coyote.
- Responde ya - dijo la serpiente - o me los como a los
dos.
- Yo necesito saber cómo pasaron las cosas.
- ¿Qué quieres decir? - silbó furiosa la serpiente.
- Pues que es importante saber si realmente el hombre
te hizo un bien para que te lo puedas comer.
- ¿Y qué propones?- dijo de nuevo el ofidio.
- Que vayamos al lugar donde pasaron las cosas.
21
- ¡Qué lata contigo!- dijo la serpiente enfurecida.

- Estoy de acuerdo - dijo el leñador.
- Bueno, vayamos.
Leñador, serpiente y coyote dieron la vuelta y
regresaron al lugar del encuentro. Ahí estaba el tronco y el
hacha.
- Aquí fue -dijo el leñador.
- Pues yo no veo que el leñador te haya hecho algún
bien, tú estás fuera y él también. Necesito que
reconstruyan los hechos.
- Lo haremos, ¡rapidito!
De inmediato el hombre levantó el tronco y la
serpiente se colocó debajo de él.
- ¿Ya? ¿Estás contento? -dijo la serpiente.
- Yo no veo que el tronco esté sobre ti, podrías salir
fácilmente.
El hombre bajó el tronco que atrapó de nuevo a la serpiente.
- ¿Puedes salirte? - preguntó el coyote.

- No.
- Inténtalo. Vamos haz todo tu esfuerzo. Quizás sí
puedes.
La serpiente se retorció, se puso morada como
gusano, bufó y siguió retorciéndose. Rendida dejó de
moverse.
- Muy bien- dijo el coyote- ya estamos como al
principio. El hombre no te ha hecho ningún bien así
que ya no puedes comértelo.
La serpiente estaba furiosa pero tuvo que aceptar
que era verdad lo que le decía el coyote.
- ¡Me has salvado la vida! No sé cómo pagártelo.
- Yo sí sé. Fíjate que hace días que no como ni un
huesito.
- Pero…
- No. No te espantes no te voy a comer, pero si tuvieras
algún borreguito me daría mucho gusto.
22
- No te voy a dar un borreguito, te daré dos. Ve en la

tarde por ellos al rancho.
El leñador llegó a su casa y le dijo a su mujer.
- Mete dos borregos en un costal, en la tarde se los
llevaré al coyote.
- ¿Qué? ¿Borregos? ¿Al coyote? El viejo se ha vuelto
loco. Yo sé cómo tratar a un coyote-. De inmediato
tomó un costal y metió dos perros de los más bravos
y le entregó el costal a su marido- Aquí están, como
lo pediste.
El leñador tomó en sus manos el costal y se lo llevó al

coyote quien agradeció al hombre y se fue al bosque. Una
vez ahí abrió el costal, saltaron los perros que le pusieron
una correteada como nunca la había tenido.
Cuento tradicional mexicano
QUIZ SOBRE EL CUENTO
EL BUEN LECTOR
Había un alumno que tenía fama

de leer muchos libros. Había leído los más
famosos del momento. Cierto día se
encontró con el Corán, el libro sagrado de
los musulmanes. Rápidamente fue
corriendo con el libro a preguntarle a su
maestro si lo consideraba un buen libro. El
maestro le respondió:
- La pregunta no debería de ser si el
libro es bueno, la pregunta sería
¿estoy dispuesto a aprender de él?
23
Recuerda que es importante leer pero es más

importante leer bien.
Anthony de Mello
VAMOS A REFLEXIONAR SOBRE LA LECTURA
EL BURRO Y EL CABALLO
Cierto día un burro de un caballo se quejaba:

- ¡Quién fuera
caballo! ¡Sí que le
tengo envidia!
Nadie me vería
flaco, triste y
melancólico y todo
mundo me cuidaría.
Pero no, soy un
burro y a palos me
tratan, que si hago
mucho para que me
aplaque, que si hago
poco para que siga.
Si yo fuera caballo puros buenos tratos recibiría.
En ese preciso momento ve salir a un caballero que a todos

anuncia:
- Voy a la guerra, tengan listo mi caballo.
El burro al escuchar tremendo notición dice:

- ¡Bendito Dios que me hizo burro que ir a morir a la
guerra no lo deseo por mejor caballo que fuera!
24
Félix María Samaniego
REFLEXIONEMOS LA FÁBULA. DA CLIC AQUÍ.
EL BURRO Y EL TIGRE
El gobernador de
una ciudad nunca había
visto un burro así que
decidió conseguir uno. Una
vez que lo conoció lo soltó
en la montaña.
Un tigre lo vio pero
como tampoco nunca había
visto uno pensó que era un
dios. Decidió observarlo a distancia. Un día el burro rebuznó
y el tigre se espantó y echó a correr con todas sus fuerzas.
Pero al rato regresó lleno de curiosidad para ver qué más
hacía el supuesto dios. El burro siguió rebuznando y el tigre
se acostumbró.
Poco a poco el tigre se fue acercando más. En una
ocasión el tigre se acercó y rozó al burro. En otra ocasión lo
empujó. El burro se enojó y pateó al tigre.
- ¿Eso es todo lo que puede hacer este dios?- pensó el
tigre. De un salto cayó encima del burro, lo mató y lo
devoró.
Pobre burro. Al principio le pareció poderoso al tigre.

Luego su rebuzno le pareció terrible, pero lo que lo perdió
fue la patada pues con ella firmó su propia sentencia de
muerte.
Liu Dsung-Yuan
25
EL CHICO Y SU MAMÁ
Una mujer estaba muy molesta con su hijo de 15 años pues

siempre que salían él caminaba unos pasos delante de ella.
- ¿Qué es lo que te avergüenza de mí?- le preguntó la
mamá.
- Nada de eso, mamá.
- ¿Entonces…?
- Lo que pasa es que te ves tan joven que no me
gustaría que mi novia se pusiera celosa.
La mamá estaba fascinada por las palabras de su

hijo.
Anthony de Mello
EL CIEGO Y EL COJO
Había llovido muy fuerte en el país por lo que los ríos

llevaban fuerte corriente y
en algunos lugares los
puentes quedaron
inservibles.
Al paso de los días
el nivel del agua bajó, sin
embargo todavía era
peligroso atravesar un río
sin el debido cuidado.
26
Un cojo llegó como pudo a la orilla del río. Ahí estaba

un ciego.
- Oiga, soy cojo y por lo que veo usted no puede
ver el camino y yo sí.
- Y usted no puede atravesar el río.
- Exacto- dijo el cojo.
De inmediato el ciego se cargó al cojo a su espalda y
el cojo le dijo el camino. Al poco rato estaban los dos del otro
lado aprovechando lo mejor de cada uno.
Juai Nan Dsi
SOPA DE LETRAS
EL CIENTÍFICO Y LA MUERTE
Había una vez un científico

tan listo y presumido que
logró clonarse a sí mismo
varias veces. Lo hizo de
manera tan perfecta que
era prácticamente
imposible distinguir quién
era el original.
Un día se enteró de
que la Muerte lo andaba
buscando así que se puso
manos a la obra y logró copiarse 12 veces.
La Muerte llegó y trató de encontrar al original y no
pudo hacerlo. Desanimada por su fracaso se fue.
Pero la Muerte es muy perseverante, así que regresó.
Tenía un plan. Regresó de nuevo y dijo:
- Quien hizo tantas reproducciones de sí mismo de
verdad que es un genio. Todas parecen perfectas
pero… no lo son. Tienen un pequeño defecto.
27
- ¡Imposible! ¡No puede ser! ¡Todo lo hice perfecto!-

gritó el científico original.
En ese momento la Muerte se dio cuenta quién era el
que buscaba y se lo llevó.
- Tú eres lo imperfecto. ¡Presumido!
Anthony de Mello
EL CIERVO Y LOS PERROS

Un cazador se
encontró a un cervatillo y
decidió criarlo. Se lo llevó a su
casa. En cuanto lo vieron sus
perros se relamieron los
bigotes con la intención de
comérselo. El cazador al ver
esto decidió acostumbrar a los
perros a la presencia del
cervatillo por lo que todos los
días lo llevaba hasta que pudo dejarlo en su compañía y los
perros lo aceptaron y jugaban con él todos los días.
El cervatillo creció y creyó que era amigo de los
perros por lo que un día de un salto salió de la casa del
cazador y corrió por la calle del pueblo. Vio a lo lejos una
jauría de perros y se dirigió a ellos para jugar, los perros al
verlo saltaron sobre él y se lo comieron.
Sian Shan Ye Lu
28
EL DRAGÓN TRANSFORMADO
EN PEZ
Un hermoso dragón blanco bajó del cielo y llegó a un lago

helado. Al momento de
tocar el agua se
convirtió en pez y
comenzó a nadar
alegremente. Un
pescador lo vio y trató
de atraparlo con un
arpón hiriéndolo en un
ojo. Una vez fuera del
alcance del pescador,
el dragón volvió a su
forma y regresó al
cielo a quejarse con el Todopoderoso.
- Castiga al pescador-dijo el dragón- hirió mi ojo.
- ¿Qué forma tenías cuando te lastimó- dijo el
Todopoderoso.
- De pez.
- ¿Pero que no es él un pescador?
Fábula china
29
EL ESCORPIÓN Y LA RANA
Una rana estaba sentada a la orilla del río lista para
saltar al agua y atravesarlo, en
eso llega un escorpión y le
dice:
- Amiga rana, ¿me
ayudas a pasar el río?
- Por supuesto que no,
me picarás.
- De ninguna manera, si
te pico moriremos los
dos.
La rana se quedó en
silencio pensando un rato. Al fin le dijo al escorpión:
- Lo he pensado muy bien y tienes razón. Súbete a mi
espalda.
El escorpión rápidamente se subió a la resbalosa

espalda de la rana. Saltó la rana al agua y comenzó a
atravesar el río.
Iban a medio río cuando la rana sintió un terrible
dolor en la espalda.
- ¿Por qué me has picado? - gritó espantada la rana.
- Porque soy un escorpión y eso es lo que hago.
- ¡Pero lo prometiste!
- Lo siento, no pude evitarlo.
- Ahora los dos moriremos.
Poco tiempo después la rana y el escorpión
desaparecieron debajo de las aguas del río.
Esopo
SOPA DE LETRAS
30
EL FLAUTISTA DE HAMELÍN
Allá por el año 1500,
en un pueblo llamado
Hamelín, en Alemania,
sucedió esta terrible
historia. Dicen que el
pueblo tenía una plaga de
ratas. Por todos lados
abundaban estos roedores y
la gente ya no sabía qué
hacer.
Por ahí pasó un
aventurero quien prometió
quitarles la plaga a cambio
de un pago generoso en monedas de oro. La gente aceptó. De
inmediato el aventurero sacó una flauta y tocó una música
que hizo salir a todas las ratas del pueblo que de inmediato
lo siguieron. El flautista llevó a las ratas al río más cercano y
se ahogaron.
Habiendo terminado su trabajo el músico regresó al
pueblo a pedir su pago pero la gente no quiso pagarle y esto
lo enfureció. De inmediato comenzó a tocar la flauta y todos
los niños del pueblo comenzaron a salir y seguirle.
Abandonaron el pueblo y no se supo nunca más de ellos ni
del flautista.
Hermanos Grimm
MEDITEMOS EL CUENTO
ENCUENTRA LA FRASE
31
EL FUNERAL DEL TÍO JORGE
Un matrimonio regresaba cansado del funeral de su

tío Jorge que había vivido
con ellos durante 20 años
creando tantos problemas
que estuvieron a punto de
divorciarse.
- Mi amor, tengo algo
que decirte-dijo el
marido.
- Dime.
- Si no fuera porque te
quiero mucho no
habría soportado a
tu tío ni un solo día.
- ¿Mi tío? ¡No inventes! - dijo ella con cara de horror-.
Yo pensé que era tu tío.
Anthony de Mello
EL GATO DEL GURÚ
¿Qué es un gurú? Es un maestro

que enseña a ser mejor persona. Aclarado
esto… ¡continuemos!
Todos los días el gurú iniciaba sus

reuniones con sus alumnos. Cuando
empezaba la sesión llegaba su gato y se
paseaba por donde le daba la gana
subiéndose a las rodillas de los presentes
32
y jugueteando con lo que le llamara la atención, por

supuesto que esto distraía de las enseñanzas de su dueño.
Llegó el día en que el gurú pidió que lo amarraran a
la pata de su silla. Desde entonces, todos los días y antes de
empezar la reunión se amarraba al gato de la pata de la silla
donde se sentaba el gurú.
Murió el gurú y fue nombrado otro y al gato lo
seguían amarrando.
Murió el gato y el nuevo gurú pidió otro gato
amarrado a la pata de su silla antes de empezar la reunión.
Los nuevos gurúes no empiezan sus reuniones si no
tienen un gato amarrado a la pata de su silla.
Anthony de Mello
EL GIGANTE EGOÍSTA
En un pueblecito
muy bonito había un jardín
donde los niños iban a jugar
cada que podían. El jardín
era realmente hermoso.
Había muchos tipos de
flores, los árboles daban
muchos tipos de frutas y los
pájaros cantaban
levantando sus alas llenas
de vistosos colores.
33
Decían que el jardín era de un gigante pero nadie lo

había visto.
Un día regresó el gigante, vio a los niños y gritó:
- ¿Qué hacen aquí? ¡Fuera! ¡Es mi jardín y sólo mío!
Los niños huyeron espantados. El gigante levantó un
enorme muro y después colocó un letrero que decía: “NO
INTRUSOS, QUIEN ENTRE SERÁ CASTIGADO”. Los niños
estaban desconsolados. Ya no tenían donde jugar. Lo
intentaron en la calle pero había mucho polvo y piedras.
Todos los días iban a pasear fuera del jardín pero sólo veían
el letrero que les recordaba que no debían entrar.
- ¡Qué bien se está aquí sin latosos! - dijo el gigante.
Pasó el tiempo, el verano se fue y llegó el otoño.
Después llegó el invierno. La nieve y el hielo estaban muy
contentos y estaban muy decididas a quedarse todo el
tiempo que fuera necesario.
Pasaba el tiempo y la primavera no llegaba. El
gigante se asomaba por la ventana y veía que las flores no
crecían y que los árboles no daban fruto.
- Espero que la primavera no tarde -dijo el gigante
preocupado y sirviéndose una enorme taza de
chocolate.
Afuera de su propiedad todo reverdecía. La
primavera llegaba y los pájaros cantaban.
Pasaron los meses más largos del mundo.
Un día el gigante se dio cuenta que en un rincón de
su jardín había un rayo de sol y estaba floreciendo una flor.
Se acercó y se dio cuenta que el rayito provenía de un
agujero hecho por los niños quienes al ver al gigante
huyeron despavoridos.
- ¡Qué egoísta he sido! - dijo el gigante- ¡Hey! ¡No
corran! ¡Regresen a jugar! - El gigante tomó con sus
enormes manos un gigantesco martillo y derribó el
muro. Pronto la luz del sol entró, los pájaros
regresaron, a los árboles se les cayó la nieve y las
flores comenzaron a crecer.
34
Los niños regresaron y comenzaron a jugar con el

gigante.
Un niño pequeño no podía subir a un árbol. El
gigante se le acercó y lo ayudó.
- Este será su jardín. Aquí jugaremos todos felices y lo
cuidaremos de corazón.
Óscar Wilde
ENCUENTRA LA FRASE
EL HOMBRE ÁRBOL
Don Juan estaba molesto. Y
mucho. Se le hacía un
verdadero acto cobarde que
alguien lastimara un árbol.
- ¿Qué te hizo el árbol?
- Nada - respondió el
niño.
- ¿Acaso te pegó con sus
ramas? ¿Crees que el
árbol dijo “ahí viene ese
niño, voy a darle lata”?
- No.
- ¿Te quitó algo?
- No.
- ¿Te hizo bullying?
- No.
- Quiero saber, entonces, por qué lo rompiste. Míralo.
Difícilmente se va a recuperar. Es un árbol bebé y le
quebraste el tronquito principal. Quizás te
desquitaste con él por algo que alguien más te hizo.
35
Quizás se te hizo chistoso. Quizás te sientes rebelde y

quisiste demostrarle al árbol que tú eres más fuerte
que él. Pero no te pusiste con alguien de tu tamaño ni
de tu fuerza. Te pusiste con alguien que no puede
defenderse. Déjame decirte que las buenas personas
no lastiman, no hacen el mal y sobre todo cuidan a
los que hacen el bien y un árbol sólo hace bien.
Dicen que don Juan pocas veces habla. Pero aquella

ocasión su corazón había sido agredido. Los árboles eran sus
hijos. Creía que eran las criaturas más hermosas y buenas de
la Tierra porque daban mucho pidiendo muy poco a cambio.
Don Juan les daba su tiempo, hablaba con ellos y éstos le
respondían con un silencioso mover de sus hojas.
Al día siguiente, el niño tocó a la casa de don Juan,
llevaba en sus manos dos arbolitos.
- Bien, muchacho. Muy bien.
- También traigo para pegarlo- . El niño mostró una
vieja cinta.
- Eres buena persona. Gracias. Ojalá lo podamos
rescatar.
El niño se hizo un gran discípulo de don Juan, ambos
siembran sin parar.
Don Juan ya no pide más. Los años le pesan pero está
contento. El niño lo acompaña y juntos hacen del mundo un
lugar un poquito más verde.
Alfreduki Puki Tuki
SOPA DE LETRAS
36
EL HOMBRE, EL NIÑO Y EL BURRO
Cierto día muy de madrugada se levantó un hombre, corrió

rápido a despertar a su hijo.
- Es hora, hijito.
Vámonos al mercado.
Tenemos que vender
el burro.
- Ay, otro ratito más.
- Se nos hará tarde.
Àndale, apúrate.
- Está bien, papá, ya
voy.
El hijo se levantó y
pronto estuvo con su papá
quien ya tenía listo al burro.
- Desayunaremos en el mercado - dijo el papá.
Los dos caminaron y el burro iba por delante. Pronto
se encontraron con un vecino que les dijo:
- ¿Por qué caminan si tienen al burro?
El hombre de inmediato subió a su hijo. Apenas
avanzaron unos metros cuando se escuchó:
- ¡Qué niño tan grosero, no mira que el pobre hombre
está viejo y cansado!
El papá le dijo al niño que se bajara.
- ¡Qué señor tan abusivo! No se da cuenta que el niño
apenas puede caminar.
El hombre le pidió al niño se subiera al burro y de
pronto escuchó:
- ¡Qué par! Va el pobre burro apenas pudiendo caminar
y esos dos muy despreocupados. Van a matar al
pobre burro.
El papá le dijo a su hijo:
- ¿Qué piensas, hijo, de lo que dice la gente?
- Que todos opinan lo contrario. Nadie está de acuerdo.
37
- Por eso digo que no hay que hacer mucho caso a lo

que diga la gente o nunca lograremos nada -
completó el papá.
ENCUENTRA LA FRASE
MEDITEMOS UN POCO…
EL HOMBRE QUE SIMULABA TOCAR LA

FLAUTA
En China había un príncipe llamado Shuan al que le
gustaban las orquestas. En
ocasiones los músicos
llegaban a ser hasta 300.
Un hombre vio la
oportunidad de ganar dinero
perteneciendo a la orquesta
del príncipe. Fue con él y le
dijo que sabía tocar la flauta.
De inmediato el príncipe lo
contrató y le asignó un
sueldo que el hombre
agradeció.
Pasaron los años y
un día murió el príncipe.
Subió al trono el hijo del
príncipe Shuan quien
anunció que todos los músicos serían examinados. El
hombre de la flauta desapareció.
Jan Fei Dsi
SOPA DE LETRAS
38
EL JUEGO DE LAS DAMAS
El juego de las
damas chinas parece algo
muy fácil.
Chiu, el mejor
jugador de China tenía dos
discípulos. Uno de ellos,
Meng, seguía con mucha
atención lo que su maestro
decía; el otro, Li, se la
pasaba pensando en convertirse en un cazador de cisnes con
arco y flechas.
Tuvo Li la oportunidad de tomar clases de tiro de
arco y lejos de concentrarse Li se la pasaba pensando en
aprender a cazar tigres.
Basta decir que Chiu fue el que aprendió a jugar
damas y Li ni uno ni lo otro.
Mencio
CRUCIGRAMA SOBRE LA FÁBULA
39
EL LADRÓN DE POLLOS
Había un hombre que robaba pollos a sus vecinos.

- No es bueno robar-
le dijeron varios de
ellos.
- Voy a cambiar. Lo
prometo. El
próximo mes
robaré sólo un
pollo, después lo
haré cada dos
meses. Después
cada seis meses y al
final una vez al año.
Sobra decir que el
hombre no cumplió su
palabra y sus vecinos lo apresaron y lo entregaron a las
autoridades quienes le aplicaron un justo castigo: trabajaría
hasta reponer todo lo robado.
Mencio
40
EL LEÓN QUE SE CREÍA CORDERO
Una joven oveja caminaba por la sabana cuando se encontró

a un cachorro de león abandonado. Se compadeció de él y se
lo llevó a su rebaño.
Ahí el león creció
como las demás ovejas:
pastaba y bebía como oveja
y hasta hacía sonidos como
oveja. Así pasaron los años.
Cierto día, un viejo
león olió las ovejas y se
acercó al rebaño dispuesto
a comerse a la que estuviera
más descuidada, pero cuán
enorme fue su sorpresa al
observar al joven león que
convivía con ellas
sintiéndose una más.
Eso no lo podría creer.
Pensó en hacer algo al respecto. De inmediato lanzó
un rugido y las ovejas huyeron espantadas junto con el
joven león.
El viejo león lo alcanzó y lo derribó de un zarpazo.
- No me comas, mi carne es desagradable - gimió el
joven león.
- No te comeré . No te me antojas. Pero antes de
dejarte libre quiero que me acompañes al río.
- ¿Qué quiere usted de mí?
- Ya lo verás- . El viejo león lo llevó a empujones.
Cuando llegaron al río hizo que se vieran los dos con
su reflejo en el agua-. ¿Qué es lo que ves?
- Veo dos leones, pero no me veo a mí.
- ¡Porque tú eres un león!
- ¡Por supuesto que no! ¡Soy un cordero!
- De ninguna manera. ¡Eres un león! - lo dijo rugiendo
de manera poderosa.
En ese momento, el joven león sintió que una fuerza
interior despertaba dentro de sí.
- ¡Soy un león!- gritó con fiereza.
41
El joven león se dio cuenta que toda su debilidad

había desaparecido. Era un león y se sentía lleno de poder. El
miedo que sentía creyéndose oveja había desaparecido.
Desde ese momento decidió ya no pensar, ni sentir,
ni actuar como oveja.
Anónimo
ENCUENTRA LA FRASE
EL LEÓN Y EL RATÓN
El león se encontraba descansando a pata estirada en
la sabana. Por allí pasó un ratón y se tropezó con su cola. El
león despertó, miró al
ratón y rugió furioso.
- ¡Cómo te atreves a
despertarme,
ratón!
- Perdone usted
señor, no quería
hacerlo.
- No te perdono, te
comeré sin
remedio.
El ratón temblaba
de miedo. Aún así le dijo al
león:
- Perdóneme la vida. Si algún día usted me necesita yo
lo ayudaré.
- ¡Ja, ja! - rio el león - Te perdono no porque quiera
sino porque me has hecho reír. Vete y ya no me des
lata.
Pasados los días el león vagaba por la sabana cuando
pisó una cuerda que al jalarla hizo le cayera una pesada red.
42
El león furioso trató de romperla con sus poderosas garras,

pero cada vez que lo intentaba se enredaba más. Estaba
cansado. Sus rugidos fueron escuchados por el ratón quien
rápido corrió hasta donde estaba el león. Rápidamente royó
con sus afilados dientes partes de la red y así el león pudo
escapar.
- Te debo la vida, amigo ratón.
- Para eso son los amigos, para apoyarse. si uno no
puede hacer algo y otro sí es justo hacerlo.
Félix María de Samaniego
SOPA DE LETRAS
EL LEÓN Y LA ZORRA
Cuentan los que saben que el león, el rey de la selva,
se iba haciendo cada vez
más viejo por lo que se le
hacía más difícil cazar, así
que pensó en una trampa.
Buscó una cueva y mandó
decir a todos los animales de
su estado de salud. Cuando
lo iban a visitar los atrapaba
de un zarpazo y se los comía
llenándose los cachetes.
Pasó por la cueva una
zorra que había escuchado la
noticia.
- Señor león ¿está usted muy enfermo?

- Sí, mucho, pasa para que lo veas.
- Prefiero saludarlo desde afuera.
- ¿Acaso no me crees? - rugió el león haciendo
retumbar la cueva.
- Claro que sí, veo que muchos animales han venido a
visitarlo.
- Claro, soy su rey.
43
- Pero, dígame una cosa ¿cómo es que veo pisadas de

entrada pero no veo de salida?
El león se quedó callado. Sabía que había sido

descubierta su trampa y se puso furioso. Pero tampoco la
zorra se quedó para averiguar cómo se sentía el león.
Esopo
SOPA DE LETRAS
CONSTRUYE LA FRASE
EL LEÓN Y SU EJÉRCITO
El león tiene muchos planes para su reinado. Quiere

armar un poderoso ejército ha anunciado. Sus consejeros le
han recomendado
que lo tenga siempre muy
preparado. A los elefantes los
cargó con troncos para
construir su murallas, a los
lobos les puso armaduras y
espadas, a los monos pidió se
encargaran de distraer al
enemigo, al zorro de enviar
señales falsas y al oso dé los
golpes finales.
- ¿Qué haremos con el
conejo y con el burro? -
dijo el buitre riéndose
de estos animales- el conejo tiene miedo y el burro
no entiende nada.
- Al conejo le pediremos que lleve los correos y
mensajes-dijo el león con un rugido-. Al burro con
44
sus rebuznos que anuncie que está lista la tropa. Y a

ti, buitre, dejarás limpio de desperdicios hasta el
aire. Todos en mi reino son muy importantes.
EL LEOPARDO Y LOS MONOS
Un leopardo trepó a los

árboles, tenía hambre de
comer mono pero estos lo
vieron y echaron carcajadas.
Le tiraron nueces y piedras,
todos de la fiera se
burlaban.
Una nuez le pegó en plena

cara al gato y éste cayó al
suelo fingiendo un rato,
los monos bajan a ver qué
ha pasado, sorprendidos de
que al leopardo le han
atinado.
Unos bailan sobre el difunto, otros le jalan la cola, se hace

la bulla, se hace la fiesta,
- sí que está muerto- dijo uno.
remedando al gato con sus gestos.
45
Los monos hicieron fiesta hasta cansarse, en eso se

levanta el de las zarpas y de unos cuantos manazos a más de
uno atrapa.
Todos gritan y chillan, nadie puso atención a la astucia de la

fiera, prefirieron cantar y bailar antes que pensar que el gato
así los iba a pillar.
EL LOBO Y EL PERRO
Un lobo flaco se encontró con un perro que lucía gordo y

bien comido. Se le acercó y
con algo de envidia le
preguntó:
- Amigo perro, ¿cómo
le haces para verte
tan bien?
- ¡Huy, fácil! Vivo con
mis amos y ellos me
dan de comer y todo
lo que necesito.
- ¿Yo podría hacerlo?
- preguntó el lobo.
- Claro que sí. Siempre
habrá un lugar para dos. Además el otro día escuché
que querían un compañero para mí.
- Eso está muy bien. Me gusta la idea. ¿Y qué tengo que
hacer a cambio?
- Tienes que mover la cola y espantar a los ladrones.
46
- Eso es fácil. Soy muy feroz.

- Vamos, entonces.
Cuando caminaban el lobo se fijó que el perro tenía el
cuello pelado.
- Y eso que tienes en el cuello, ¿qué es?- preguntó el
lobo lleno de curiosidad.
- Nada que sea importante.
- ¡Quiero saber! -insistió el lobo.
- Es la marca del collar que me ponen.
- ¿Collar? ¿Qué no andas libre?- preguntó asombrado
el lobo.
- A veces, pero eso no importa.
- ¡Claro que importa! ¿De qué sirve tener la panza
llena y mover la cola si eres un esclavo y no eres libre
de hacer lo que más te gusta? -concluyó el lobo y de
inmediato se echó a correr sin volver la vista atrás.
La Fontaine
PENSAR LA FÁBULA
SOPA DE LETRAS
EL NIÑO QUE PUDO HACERLO

Anónimo
Dos niños
llevaban toda la mañana
patinando sobre un lago
helado cuando, de
pronto, el hielo se
rompió y uno de ellos
cayó al agua. La corriente
interna lo desplazó unos
metros por debajo de la
parte helada, por lo que
para salvarlo la única
opción que había era romper la capa que lo cubría.
47
Su amigo comenzó a gritar pidiendo ayuda, pero al ver que

nadie acudía buscó rápidamente una piedra y comenzó a
golpear el hielo con todas sus fuerzas.
Golpeó, golpeó y golpeó hasta que consiguió abrir una grieta
por la que metió el brazo para agarrar a su compañero y
salvarlo.
A los pocos minutos, avisados por los vecinos que habían
oído los gritos de socorro, llegaron los bomberos.
Cuando les contaron lo ocurrido, no paraban de preguntarse
cómo aquel niño tan pequeño había sido capaz de romper
una capa de hielo tan gruesa.
-Es imposible que con esas manos lo haya logrado, es
imposible, no tiene la fuerza suficiente ¿cómo ha podido
conseguirlo? -comentaban entre ellos.
-Un anciano que estaba por los alrededores, al escuchar la
conversación, se acercó a los bomberos.
-Yo sí sé cómo lo hizo -dijo.
-¿Cómo? -respondieron sorprendidos.
El anciano respondió:
-"No había nadie a su alrededor para decirle que no podía
hacerlo".
48
EL PAÍS DE LOS CASTORES LIBRES

Inspirado en Farenheit 451 de Ray Bradbury
Contado por Tío Patota
Castorilandia estaba
por elegir a su presidente. La
competencia entre los
políticos había sido feroz,
sin embargo, el señor
Castorlux fue elegido por
una gran mayoría.
Todos los castores
estaban muy contentos y
salieron a festejar a su nuevo
presidente quien desde el
edificio de la presidencia los saludaba con las manos en alto.
- Queridos castores, es un honor para mí ser su
presidente- les dijo con voz pausada y solemne- los
quiero mucho y deseo que sean los castores más
felices de la Tierra.
Todos escuchaban atentamente el discurso. Pocos
pestañeaban.
Los quiero tanto que no quiero que se enfermen. Quiero
que la pasen bien. Y como muestra de mi aprecio en
la primera acción de mi gobierno les voy a regalar
una televisión e internet a todos. Y no será una
televisión pequeña sino grande. Una que ocupe una
pared completa de su casa.
Hubo un estallido de felicidad. Nadie podía creer que
su presidente fuera tan bueno.
A partir de mañana comenzará la entrega de televisiones
e instalación de internet en todas las casas. Ninguna,
por muy lejos que esté se quedará sin este regalo.
Aplaudan a su presidente que los quiere.
49
Castorilandia era una fiesta. Había quienes lloraban.

La sorpresa era enorme. Al fin tendrían la televisión que
tanto deseaban.
- Quiero pedirles un favor que, ciertamente, no es para
mí, sino para ustedes mismos-dijo el mandamás.
- ¡El que sea! - gritaron miles de voces.
- Cuando les entreguen la televisión y les instalen
internet entreguen sus libros. Sí, esos objetos sucios
y empolvados que sólo hacen mal. ¿Por qué les pido
esto? Miren, modernos estudios dicen que la lectura
hace pensar y al pensar se mueren neuronas y si
mueren neuronas ustedes se enfermarán. Además se
acaban los árboles al hacer libros. Mejor ocuparemos
esa madera en los muebles donde pondrán la
televisión. Los amo, querido pueblo, y no permitiré
que les pase nada malo.
Todo el pueblo de Castorilandia reventó de felicidad.

Esa noche nadie durmió. En todos los hogares había una
gran fiesta.
Tal como lo había prometido, al día siguiente
enormes camiones llevaban en sus cajas las televisiones al
pueblo. La gente estaba feliz con su aparato nuevo y su red
de internet. Desde luego que gustosos entregaban sus
polvorientos libros.
- “Enciende tu TV y entrega tus libros”- era el lema de
los distribuidores de televisores.
Millones recibieron su televisión. Millones
entregaron sus libros.
- Son objetos anticuados- decían unos.
- Son objetos que enferman- decían otros.
El responsable del programa de “Enciende tu TV y

entrega tus libros” era Alfrelux, un castor que tenía fama de
ser muy cumplido en lo que sus jefes le pedían.
50
Cierto día llegó a una casa a hacer entrega del

paquete.
- Llegó el programa “¡Enciende tu TV y entrega tus
libros!”- dijo pero nadie respondió. Tocó más fuerte.
Se escucharon ruidos en el interior- Sabemos que
está ahí, señora Renalux. Abra por favor.
- No quiero su programa.
- ¿Qué?- dijo sorprendido Alfrelux-. No puede usted
negarse a recibirlo. Es para todo el pueblo.
- No lo quiero. Prefiero mis libros.
- Está usted loca. O peor aún, está usted enferma.
- ¿Ha leído alguna vez usted un libro, señor Alfrelux?-
dijo la señora Renalux abriendo la puerta y leyendo
el gafete del agente.
- Yo sólo leo instrucciones y lo que me piden mis jefes.
- Entonces nunca lo entenderá- dijo suspirando
Renalux.
- Eso no importa. Nosotros entraremos a su casa, le
instalaremos el paquete prometido por el gobierno y
usted nos entregará sus libros. Lo hará por las
buenas o por las malas.
Al día siguiente apareció una noticia terrible. Una

señora completamente enferma se negaba a entregar sus
libros. Parecía una loca desquiciada.
- Vean lo que sucede por leer. La gente se enferma. No
lean, señores. Hacerlo enferma- dijo el presentador
de noticias.
Después de la señora Renalux comenzaron a
aparecer otros casos. Alfrelux solicitó permiso para ser más
duro con los rebeldes. El permiso le fue concedido de
inmediato.
- De ahora en adelante, quien tenga libros y no los
entregue será considerado un drogadicto y un
delincuente- dijo el presidente en el noticiero.
51
Un día después cada camión que salía con paquetes

de televisores lo acompañaba otro que recogía los libros y en
los cuales se les quemaba hasta reducirlos a cenizas.
Alfrelux empezó a notar que varios rebeldes eran
personas muy buenas, educadas y que hablaban muy bien.
No creyó lo que decían los noticiarios. Y peor: la
presentación de la señora Renalux fue sumamente
exagerada. Nada había sido así.
A la mañana siguiente decidió tomar uno de los

libros a escondidas. Quería saber lo que realmente
provocaba leer. Después de su labor llegó a su casa y vio a su
esposa viendo la enorme televisión. La saludó y ella apenas
respondió. Alfrelux se metió a su recamara, ahí comenzó a
leer.
Cada día que pasaba hacía lo mismo. Al parecer leer
era muy diferente a lo que se presentaba en televisión y a lo
que decía el presidente. Algo no estaba bien.
Durante muchas semanas Alfrelux siguió haciendo
lo mismo.
Un sábado decidió salir a conocer la ciudad. Tomó el
transporte público. No había lugares desocupados por lo que
iba de pie.
- Hola, yo te conozco - le dijo una chica que tenía un
asombroso parecido a su esposa - no me gusta lo que
haces.
- Disculpe señorita, no la conozco -dijo Alfrelux.
- Eso no importa- le dijo sonriendo- debes saber que
yo soy una drogadicta y delincuente.
- ¿Lees?- preguntó curioso.
- Por supuesto.
- Sabes que eso es un delito muy grave. Podría llevarte
a la cárcel en este momento.
- Lo sé, pero sé que no lo harás. Algo me dice que no lo
harás.
- ¿Por qué estás tan segura?
52
- Porque veo en tus ojos que no crees lo que se dice en

la televisión.
- Es algo exagerado.
- ¿Algo? Diría que prácticamente todo- la chica
oprimió el botón para bajarse- si algún día quieres
saber de mí, visítame. Vivo en el País de los Castores
Libres
- No sé dónde está ese país.
- Sabrás llegar. Mi nombre es Brenlux-. En ese
momento el autobús paró y la misteriosa chica bajó.
Alfrelux estaba sorprendido.
Rato después llegó a su casa y siguió leyendo. Tan
ensimismado estaba que no se dio cuenta que su esposa
había entrado a la habitación.
- ¡Mi esposo es un drogadicto y un delincuente!-
pensó y salió.
Al día siguiente Alfrelux llegó a su trabajo. Se subió

al camión e iniciaron la ruta. Se dio cuenta que estaban en la
calle donde estaba su casa. El camión paró frente a su
domicilio.
- ¿Qué hacemos aquí? - Preguntó al chofer.
- Lo siento jefe, órdenes de más arriba.
Alfrelux no lo podía creer. Se bajó de inmediato del
camión y antes de entrar a su casa la puerta se abrió. Era su
esposa que cargaba las maletas.
- No puedo estar con un drogadicto y delincuente- le
dijo.
- Está usted arrestado, señor Alfrelux, usted el famoso
“superpolicía” es un delincuente y un drogadicto.
- ¡Aléjense!-gritó y empujó al chofer y a otros agentes
que habían llegado al arresto.
Alfrelux logró escapar. Fue una terrible noticia para
todo Castorilandia que el gran representante del programa
más importante del presidente Castorlux fuera perseguido
por ser un delincuente y un drogadicto.
53
Mientras tanto, Alfrelux, después de pasar muchas

dificultades logró llegar al País de los Castores Libres. Ahí le
sorprendió observar a los castores leyendo en plena calle.
Muchos lo saludaron. Parecía un país diferente y próspero.
- Sabía que vendrías- era Brenlux quien le hablaba -
ahora todo será diferente y maravilloso. Porque leer
y estar en el cielo son casi lo mismo.
¡RESUELVE EL CRUCIGRAMA!
QUIZ SOBRE EL CUENTO
EL PAJARITO QUE PERSISTIÓ
Esta es una historia que

se cuenta en muchas tierras.
Cuentan que una vez se
desató un gigantesco incendio
en la selva. Los animales
huyeron para salvar sus vidas. El
elefante tomó a sus hijos, avisó
a sus hermanos y todos
huyeron. el majestuoso león y
sus compañeros abandonaron la
selva. el poderoso leopardo bajó
del árbol donde dormitaba y
escapó. Monos, aves, antílopes,
todos huían a gran velocidad.
Un pajarito que habitaba
un frondoso árbol vio la
estampida de los animales y
preguntó al gorila:
- ¿Qué pasa señor Gorila? ¿Por qué todos corren?
54
- ¿No te has dado cuenta? ¡Se quema la selva! ¡Sálvate

mientras puedas!
- ¡Pero tengo hijos!
- ¡Déjalos! - Gritó el gorila con voz de trueno.
- ¿Qué? ¡Son mis hijos! -El pajarito no podía creer lo
que dijo el gorila. -Este es mi hogar. Lo ha sido desde
hace mucho. No puedo simplemente huir-. De
inmediato el pajarito voló hacia el río más cercano y
con su piquito cargó agua para apagar el fuego.
- ¿Qué haces? - Le preguntó una gacela.
- Apago el fuego que quema mi hogar.
- ¡Vas a morir!
- ¡De ninguna manera!- se defendió el pajarito y
continuó trayendo agua en su piquito. Estaba
cansadísimo, pero seguía sin parar.
- ¡Volvamos y ayudemos al pajarito!- Gritaron varios
animales.
Los dioses vieron lo que hacía el pajarito. Estaban
sorprendidos. Juntaron las nubes en tal cantidad que pronto
cayó una tormenta que apagó el incendio.
Cuento africano
EL PAPA Y EL BORRACHITO
Hace unos quinientos
años, los consejeros del Papa le
pidieron que corriera a los
judíos de Roma. El Papa convocó
a un debate. Si el retador le
ganaba al Papa, los judíos
podrían quedarse, si no, se irían.
55
Nadie quería participar puesto que creían que nadie

podría ganarle al Papa.
Un borrachito vio los carteles y decidió participar.
Todos los que lo supieron estaban sorprendidos cuando
vieron que se apuntaba con mucho orgullo.
Llegó el día del debate. El Papa estaba rodeado de
cardenales y monjas y frente a él tenía al borrachito que ese
día había decidido no tomar y vestirse lo más decente
posible.
El Papa levantó lentamente la mano apuntando con
su dedo al cielo. Luego trazó en el aire un amplio círculo. De
inmediato el borrachito apuntó al suelo.
El Papa pareció desconcertado pero de inmediato
levantó de nuevo el dedo y lo apuntó al rostro del borrachito.
El borrachito de inmediato levantó su mano y apuntó con
tres dedos al Papa quien volvió a quedar sorprendido.
Entonces el Papa sacó una manzana de una de sus
bolsas y comenzó a comerla. El borrachito traía un pedazo
de torta y también la sacó y se la comió.
El Papa dijo con voz fuerte:
- He perdido el debate. Los judíos pueden quedarse.
Llenos de felicidad los judíos rodearon al borrachito y se lo
llevaron. Por otro lado, los cardenales y las monjas rodearon
al Papa y le preguntaron:
- ¿Qué ha sucedido, Su Santidad? ¡Todo fue tan rápido!
El Papa estaba realmente sorprendido. Sacó un
pañuelo y se secó el sudor.
- Ese hombre es un gran sabio y un gran maestro. Yo
comencé señalando el cielo dando a entender que el
Universo completo es de Dios pero él de inmediato
me recordó que hay un lugar llamado infierno. Yo
levanté la mano diciendo que hay sólo un Dios, pero
él me sorprendió al decirme con sus tres dedos que
Dios posee tres personas. Yo estaba muy lleno de
sorpresa así que decidí desviar el debate sacando una
manzana para indicar lo que dicen los modernos
56
estudios de que la Tierra es redonda pero él contestó

sacando su torta para indicarme que la biblia dice
que la Tierra es plana. Por lo que ven ustedes, tuve
que reconocer que me había ganado.
Por otro lado, los judíos estaban con el borrachito.

- ¿Qué fue lo que pasó?- Preguntaron llenos de
curiosidad.
- Todo fue un montón de tonterías. Primero el Papa
me dijo con su dedo que los judíos tenían que irse
muy lejos, yo le respondí que no y señalando el suelo
le dije que aquí nos quedaríamos. Luego me insultó
apuntándome con su dedo diciendo que yo era un
tonto. Yo le respondí que él era tres veces tonto. Vi
que tenía hambre porque sacó su manzana y como
yo también tenía hambre pues saqué mi torta.
Anthony de Mello
CRUCIGRAMA SOBRE LA LECTURA
CONSTRUYE LA FRASE
EL PARACAIDISTA Y EL SABELOTODO
Cierto día un
paracaidista saltó de un
avión pero como soplaba
fuerte viento cayó más de 10
kilómetros de lo esperado. Al
bajar, la tela quedó atorada
en un árbol y desde lo alto
comenzó a gritar pidiendo
auxilio. Así estuvo durante
varias horas. Por ahí pasó un
muchacho que tenía cara de
57
inteligente. El chico le preguntó al paracaidista:

- ¿Qué haces ahí arriba?
El paracaidista le contó al chico lo sucedido.
- Puedes decirme ¿dónde estoy?
- Arriba de un árbol- le respondió el chico.
- Oye, tú has de sacar puros dieces en la escuela.
- Cierto, ¿Cómo lo supo?
- Se ve.
- Y además sé que el árbol en el que está usted arriba
es un pino gris.
- Pareces un sabelotodo.
- Eso me dicen en la escuela-dijo el chico en tono
presumido- Además el conocimiento es poder.
- ¿Y de qué te sirve saber tanto si no sabes lo más
importante que es ayudarme a bajar?- dijo el
paracaidista.
- Eso no lo sé- dijo el chico levantando los hombros.
El conocimiento sólo es poder si sabes aplicarlo de lo

contrario sólo se es como un perico que habla pero que no
sabe lo que dice.
Anthony de Mello
SOPA DE LETRAS
¡REFLEXIONEMOS!
58
EL PATITO FEO
Mamá pata
empollaba sus huevos con
gran cariño. Todos los
días les dedicaba mucho
tiempo para darles el calor
necesario.
Por fin los patitos
rompieron el cascarón. Sin
embargo, uno de ellos era
más grande y tardó un
poquito más en romperse.
Pero por fin lo logró.
Los demás patitos y la mamá misma vieron que era
diferente: negro, más grande, el cuerpo se veía torpe. No les
causó gracia.
- Es feo- dijo uno.
- No se parece a ninguno- dijo otro.
- Fuchi- dijo otro.
Mamá pata también lo miró diferente y el patito
recién salido del cascarón sintió algo en su corazón que no
le hizo sentirse bien.
De inmediato los llevó a nadar. Todos se arrojaron al
agua felices y contentos, el patito feo también lo hace pero
nada de diferente forma lo que hace que sus hermanos se
rían de él nuevamente.
Luego mamá pata los llevó a la granja. Ahí buscan
todos que comer. Ahí estaban otros animales.
- ¡Qué feo es!- dijo la gallina.
- ¡Qué desgarbado es?- dijo el ganso.
- ¡Qué negro es! - dijo el pavo.
Y todos lo picotearon.
- ¡Ojalá te coma el gato, pato feo! - dijo uno de sus
hermanos.
59
- ¡Ojalá te muerda el perro, pato feo!- dijo el ganso.

- ¡Ojalá no estés con nosotros!- dijo el pavo.
Nadie lo quería. Hasta su mamá pensó en cómo hacer
que se fuera.
Y el Patito Feo se fue. Saltó la cerca y huyó.
Camina mucho y se encuentra con patos y gansos
que huyen despavoridos ante truenos que se escuchaban.
Era una cacería. El Patito Feo decide seguir su camino. De
pronto se suelta la lluvia. El aguacero casi lo mata de
pulmonía. Pero afortunadamente se recupera gracias a una
viejecita que vivía con su gato y una gallina. De repente se
sintió bien tratado por la anciana pero extraña nadar y
chapotear en el agua. De nuevo se va.
Ve una bandada de aves que levantan el vuelo. Se
veían muy hermosas. Le entraron ganas de ser como ellas.
Son cisnes. Algo se mueve de nuevo en su corazón con
aquellas aves que se alejaban volando a gran velocidad.
Pasa el tiempo y llega el invierno. Como pudo logró
sobrevivir en un pantano. Ahí encuentra comida y las cañas
le dan protección.
Llega la primavera. De nuevo aparece una banda de
cisnes que le llaman la atención poderosamente. Quiere
acercárseles pero tiene miedo de que le den picotazos. Algo
en su interior lo empuja a hacerlo. Cuando llega con las
aves, éstas se le acercan y comienzan a acariciarlo con sus
picos. De pronto ve su imagen reflejada en el agua y se da
cuenta que es como ellos. No es un pato ni es feo.
Simplemente es un hermoso cisne. Después de tanto
sufrimiento y tanto buscar está en el lugar al que pertenece
y con aquellos que le quieren.
Hans Christian Andersen
QUIZ SOBRE LA FÂBULA
ENCUENTRA LA FRASE
60
EL PATO Y LA SERPIENTE
Andaba de vago un
pato
y mientras andaba
presumía diciendo:
- Nadie puede lo que
yo puedo, soy de
agua, tierra y cielo.
Si se me antoja
vuelo, si me da la
gana me pongo a
nadar y si quiero me
voy caminando por el suelo.
Una serpiente lo escuchó y le dijo:

- No sea usted presumido, señor pato, pues ni corre
como un venado, ni vuela como el águila, ni mucho
menos nada como el delfín. Cierto que puede hacer lo
que dice, pero lo hace sin gracia y sin destreza, al
menos eso me parece a mí.
Al pato le dio vergüenza lo que dijo de sí mismo y se

alejó de ahí calladito.
Tomás de Iriarte
61
EL PERIODISTA MENTIROSO
En una pequeña
ciudad hubo un accidente y
la gente se reunió llena de
curiosidad. Un periodista
fue informado del asunto y
rápido fue para tomar nota
e informar a su televisora.
Pero era tanta la gente que
no podría avanzar.
Se le ocurrió una
idea:
- ¡Déjenme pasar! ¡Por favor! ¡Soy el padre del
accidentado!
La gente lo dejó pasar. Cuando llegó con la víctima
descubrió que el accidentado era un mono.
Anthony de Mello
EL PERRO QUE LO PERDIÓ TODO

Un perro traía un enorme
pedazo de carne en su
hocico, caminaba por la
orilla de un río buscando
un lugar donde comérselo
tranquilamente.
Jadeando volteó a ver el
agua y vio a otro perro que
62
traía un trozo más grande que el suyo.

Se detuvo y se acercó al agua.
Quería también ese pedazo por lo que abrió el hocico
gruñendo cayéndosele al río su propio trozo y quedándose
con ninguno.
Esopo
QUIZ PARA PENSAR
FRASE SOBRE SABER DECIDIR
EL PERRO Y SU DUEÑO
Su amo estaba
enfadado.
- No estás cumpliendo
tu parte en el trato. He
notado que aunque
nunca te llame pronto
estás y no haces fila y
eso no me gusta,
porque flojeas todo el
día.
Desde que llegó a la casa ese
fue el trato:
- Espantarás a los
ladrones y yo te daré buen caldo.
Y así quedó y pasó el rato.

Pero el perro dormía el día entero.
Eso sí, a la hora de comer era el primero.
El perro le responde:
63
- Oh querido amo, tiene usted razón, yo flojeo así

porque perro he nacido, no fui burro para trabajar.
Ante tal insolencia, el amo le contesta:

- ¡Aquí no quiero flojos! ¡O cumples o te marchas! Vete
de mi casa y verás en otras lo que pasa.
El perro se fue malagradecido. Tocó de puerta en

puerta una por una pero mala fue su fortuna. En unas
recibió palos, en otras puros huesos quebrados.
Al fin regresó con su amo y éste se alegró.

- Ya vine, amo, estoy muy arrepentido por haberlo a
usted perdido.
- Pasa, perro mío, eres bienvenido, pero no olvides
que el contrato sigue en pie, sigue en su sitio.
- De acuerdo, yo haré mi parte más que bien.
Y ahí termina la historia de este perro que dejó lo

malagradecido y cumplió con la parte del trato establecido.
Alfreduki Puki Tuki
EL POZO
La gente del pueblo

necesitaba agua.
Un hombre llamado
Juai les propuso cavar un
pozo cerca del camino que
64
llevaba al pueblo. Todos dijeron que sí y pusieron una fecha.

Llegado el día nadie apareció sólo el hombre que
había organizado al pueblo. Trabajó muy duro y después de
muchas horas lo terminó.
La gente estaba muy contenta y acudía al pozo a
sacar agua y calmar su sed.
Pero un hombre cayó en él y se ahogó.
A partir de ahí todos los habitantes del pueblo
hablaron mal del hombre que había hecho el pozo y lo
expulsaron del pueblo.
Yen Meng Dsi
EL PRÍNCIPE Y SU ARCO
En la antigua China había un príncipe llamado Chuan

a quien le gustaba disparar flechas con su arco. También le
gustaba que le dijeran que era muy bueno haciéndolo y se
molestaba si sus súbditos no lo felicitaban por su habilidad.
La verdad es que no podía cargar con arcos de más de 10
kilos. Cuando lo cargaba todo mundo lo homenajeaba y le
decía:
- ¡Alteza, su arco debe pesar unos treinta kilos!
¡Nadie puede manejar un arco así, sólo usted!
Y eso hacía sentir al príncipe muy orgulloso.
Aunque tenía un arco de 10 kilogramos él creyó toda su vida
que pesaba 30. Eran 10 de hecho y 30 de nombre. La fama no
la merecía pero tanto el pueblo como el príncipe prefirieron
estar contentos a decir la verdad.
Yin Wen Dsi
65
EL RATÓN QUE NO SABÍA SER RATÓN
Un ratón vivía con

miedo a los gatos.
Temblaba de pavor tan
sólo con imaginar que
se lo comieran. Un día
salió a buscar de comer
y para su suerte se
topó con un mago
quien al verlo le
preguntó por qué tenía
tanto miedo. Al
escuchar sus motivos el mago se compadeció y lo
convirtió en gato.
Pero el nuevo gato comenzó a tenerle miedo a
los perros.
Lo convirtió en perro.
Pero comenzó a tenerle miedo a las panteras.
El mago lo convirtió en pantera.
Entonces tembló de miedo al pensar en los
cazadores.
El mago se dio por vencido y lo convirtió de

nuevo en ratón diciéndole: - Nada puedo hacer por ti
si tú no haces nada por ti mismo. El miedo está en tu
corazón y sólo tú podrás quitártelo.
Leyenda hindú
CRUCIGRAMA SOBRE EL CUENTO DEL RATÓN
66
EL REY DIFICILÍSIMO
Federico Guillermo fue un rey de Prusia que vivió en

el siglo XVIII. No tenía buen carácter sino que era gruñón y
malhumorado. Con frecuencia caminaba solo por la calle
con su bastón que a veces utilizaba para golpear a la gente
que encontraba haciendo algo que él consideraba incorrecto.
Debido a eso, la gente que lo veía trataba de huir
antes de que el rey se diera cuenta.
En cierta ocasión, un ciudadano escuchó los golpes
del bastón del rey y no alcanzó a escapar por lo que hizo el
intento de meterse al jardín de una casa pero no pudo
debido a la cerca.
- ¡Oiga, usted!- dijo el rey- ¿A dónde va?
- A esta casa - dijo el señor a la vez que le temblaban
las piernas.
- ¿Es su casa? - gruñó el rey.
- No.
- ¿Casa de un amigo?
- No, majestad.
- ¿Entonces, por qué quiere entrar si no es su casa?
El ciudadano decidió decir la verdad para no ser

acusado de ladrón.
- La verdad es que lo vi y me dio miedo de su Majestad.
El rey se puso rojo de coraje. Agarró al ciudadano de

los hombros y lo sacudió:
- ¿Cómo te atreves a tenerme miedo? ¡Soy tu rey! ¡A mí
me tienes que amar! ¡Ámame, tonto! ¡Te ordeno que
me ames!
Anthony de Mello
67
EL REY MIDAS
Puede ser que ya hayas escuchado hablar de este rey.

Puede ser que no.
De no ser así te
contaré la fábula.
El rey Midas existió y
de él hay muchas leyendas.
Nació en Frigia que sería hoy
parte del país de Turquía en
los años 740 y 696 antes de
Cristo.
Dionisio, el dios del
vino se apareció en la tierra
un día con todos sus
acompañantes y organizaron
una gran fiesta. Hubo bebida
y mucho baile. La hicieron
para todos los habitantes de
la ciudad. Entre ellos estaba
Sileno que había sido maestro de Dionisio al que le gustaba
emborracharse de vez en cuando. Esta vez lo hizo y se quedó
dormido en la calle. De esto se dio cuenta Midas y lo trajo a
su casa donde lo cuidó y alimentó. Dionisio supo de la buena
acción de Midas y se presentó ante el rey.
- Me he dado cuenta de que trataste muy bien a mi
maestro. Te concederé un deseo.
El rey, sin mucho pensarlo dijo de inmediato:
- Quiero que todo lo que toque con mi dedo se
convierta en oro.
- ¿Seguro estás de tu deseo?
- Sí, muy seguro- dijo el rey Midas y en ese momento
Dionisio desapareció.
El rey comenzó a tocar todo lo que se le antojaba: su
manto, su cama y otros muebles se volvieron
68
inmediatamente de oro. Estaba fascinado. Hasta el perro

que vino a saludarlo se convirtió en oro. Llegó el momento
de comer y quiso probar una manzana pero ésta se convirtió
de inmediato en oro. Quiso beber y al instante el agua pasó a
ser oro líquido. El rey Midas se preocupó. De ser así no
tardaría en morir. El colmo de todo fue que su hija vino a
verlo y al tocarlo se convirtió en una estatua de oro.
Espantado acudió a rezarle a Dionisio quien, apiadándose de
él, le pidió que se fuera a lavar las manos en el río Pactolo. El
rey obedeció de inmediato. Aprendida la lección el rey fue un
gran sabio que supo aconsejar al reino de lo importante que
es pensar bien lo que se quiere antes de pedírselo a los
dioses.
Mito griego
EL REY Y LOS PASTELES
Hace once siglos

reinó en Inglaterra el rey
Alfredo El Grande.
Al inicio de su
reinado decidió conocer a
sus súbditos para ver
cómo vivían. Se disfrazaba
de viajero y visitaba a la
gente.
Un día llegó
a una choza que
estaba habitada por
unos campesinos.
Estaba muy
cansado y se bajó del caballo para pedir hospitalidad.
Tocó a la puerta y le abrió una mujer.
69
- Señora, soy un viajero y estoy muy cansado del viaje.

- Pase usted, le daré agua, descansará en esa cama y
luego seguirá su viaje.
- Oh, es usted muy amable- . El rey tomó agua y luego
se fue a descansar a la cama que la señora le había
indicado. Al despertar, el olor de los pasteles llenaba
la choza.
- ¡Qué bueno que ya despertó! ¿Le puedo pedir un
favor?
- Todo lo que usted quiera, señora.
- Tengo que ir a comprar unas cosas. ¿Le puedo pedir
que vigile los pasteles que en 10 minutos estarán?
- Con gusto. Puede ir usted tranquila a resolver sus
asuntos.
La señora salió.
El rey en ese momento tomó la silla y se acercó a la
estufa a vigilar los pasteles pero al poco rato se puso a
pensar en los innumerables problemas del reino y olvidó los
pasteles.
Al poco rato llegó la señora y vio con horror que sus
pasteles se habían quemado. Se enojó con el huésped por no
cumplir su palabra.
- Mujer, no me regañes, debes saber que soy el rey y
que tengo muchos problemas que resolver.
- Discúlpeme, señor rey, pero usted me ha dado su
palabra y si no es capaz de cuidar unos pasteles a los
que ha prometido atender menos podrá atender los
problemas del reino.
El rey no dijo nada. Estaba avergonzado. Regresó a

su castillo y mandó le enviaran los mejores pasteles que la
cocina real pudiera hacer.
RULETA SOBRE LA FÁBULA
70
EL RICO OBSERVADOR
Un hombre que era vagabundo y pobre se presentó a

la casa de otro que era muy rico.
El rico lo vio desde la pantalla de su oficina y mandó
llamar a una empleada y le dijo:
- ¿Ve usted a ese hombre pobre?
- Sí- respondió ella.
- ¿Se ha fijado que tiene los zapatos rotos y que por ahí
se le asoman los dedos de sus pies?
- Sí.
- ¿Se ha fijado que tiene su camisa rota y su chaqueta
sucia?
- Sí.
- ¿Se ha fijado que tiene la barba crecida y llena de
basura?
- Sí.
- ¿Se fija que se toca el estómago? Seguramente es por
hambre.
- Sí- continuaba diciendo la empleada.
71
- Me duele verlo así. Me parte el corazón por lo que le

pido a usted baje y pídale que se aparte rápidamente
de mi vista.
Anthony de Mello
EL VALIENTE WALLENBERG1
Raúl Wallengerg lo
tenía todo. Su familia era
una de las más ricas de
Suecia. Sin embargo,
sentía que algo le faltaba
así que dejó su país en
1944 y se fue a Hungría
que en ese entonces estaba
ocupada por los alemanes.
¿Y qué fue a hacer allá?
¡Rescatar judíos! Se
presentó como enviado del
rey de Suecia a repartir
pasaportes. Cuando los
nazis, esos matones
abusivos, cargaban sus
trenes con personas como
si fueran animales,
Wallenberg se presentaba
con listas enormes y con
tono muy alto en la voz
exigía le entregaran los
judíos que solicitaban sus
listas.
En 1945 un gigantesco grupo de judíos fue encerrado
1
Recuperado de Reader’s Digest. (1990). Los Porqués de la Mente Humana.
México. P.19
72
entre cuatro paredes. Los comandantes pensaban matarlos

con explosivos pero de esto se enteró Wallenberg quien,
rápidamente, acudió y repitió su tono buscando rescatarlos,
pero el comandante principal no accedió por lo que
Wallenberg se dirigió a él personalmente y le dijo:
- ¡Será usted ahorcado como criminal de guerra!
Estas palabras le dieron miedo al comandante y
mandó quitar los explosivos.
Milagrosamente se habían salvado unas 70 mil vidas.
Cuando terminó la guerra Wallenberg quiso
quedarse en Hungría, al parecer fue capturado por los
soviéticos y ya no se supo más de él.
ENCUENTRA LA FRASE
QUIZ PARA PENSAR
EL VIEJO QUE SEMBRABA PALMERAS
Un anciano se encontraba a la orilla de un oasis plantando

palmeras datileras. Cerca de ahí pasó un mercader que vio al
anciano que con dificultad evidente hacía su trabajo.
- Dios te bendiga,
anciano.
- Igualmente, señor
- respondió el viejo.
- ¿Qué haces?
- Estoy sembrando
palmeras.
- Detén tu labor y
permíteme
ofrecerte un vino
fresco que calme tu
cansancio.
- Permíteme unos
instantes. Quiero
73
terminar mi trabajo.
- Con gusto te esperaré. Mientras pediré a mis
trabajadores instalen una tienda. Ahí te esperaré.
El anciano siguió trabajando. Horas después se dirigió a la
tienda del rico comerciante.
- ¿Qué hacía usted allá con esa pala y bañado en sudor?
- Ya te lo dije. Sembraba palmeras.
- ¿Te has vuelto loco? ¿cuántos años tienes?
- No me he vuelto loco. No sé cuántos tenga. Pero eso
no importa.
- Por supuesto que importa. Mira, esas palmeras que
siembras tardarán más de 50 años en dar sus
primeros frutos y no creo que vivas para verlos y
comerlos.
- No te preocupes si vivo o no. Debes saber que hubo
personas que sembraron y comimos. Ahora me toca
sembrar para que otros coman.
- ¡Oh! Me has dado una gran lección. Permíteme que te
dé esta bolsa de monedas de oro.
- Amable señor, mira, todavía no crecen las palmeras
y ya me dieron fruto.
- Eres muy sabio. Me has dado dos lecciones
invaluables que deben ser pagadas. Aquí tienes otra
bolsa de monedas. Y ya no sigas hablando porque
tengo miedo de que, por tanta sabiduría que me das,
me quede pobre.
Cuento árabe
SOPA DE LETRAS
74
ESO A MÍ YA NO ME TOCA
Había un médico que decía que era especialista en

medicina externa. A él llegó un guerrero que había sido
herido en la batalla.
El cirujano tomó
unas tijeras y con mucho
cuidado cortó la vara de la
flecha a ras de la piel.
Terminando de hacer eso
dijo:
- He terminado. Mis
honorarios son dos
monedas de oro.
- Aún tengo la punta
de la flecha metida
en mi carne. tiene
que sacarla- le dijo el guerrero.
- Fíjese que eso ya no es mi especialidad. Yo soy
experto en medicina externa y lo que usted ahora
necesita es medicina interna-contestó el doctor-.
¡Por ningún motivo debo hacer algo en lo que no esté
especializado!
Sue Tao
75
LA DESCONFIANZA TERRIBLE
A un hombre al que llamaremos Pedro se le incendió

la casa y él trató de salvarse subiéndose a la azotea.
Los vecinos corrieron a auxiliarlo. Se reunieron en la
calle y uno de ellos trajo una cobija la cual tomaron entre
todos de la orilla y le gritaron: - ¡Salta Pedro, salta!
- ¡Eso sí que no! Los conozco muy bien y si yo salto
seguro que al momento quitarán la cobija.
- ¡No haremos eso! - le contestaron.
- ¡Lo harán! Son malos vecinos. Y no sólo eso, se
reirán de mí.
- No haremos eso. - Gritaron otra vez los
desesperados vecinos.
- ¡No, nunca! Si quieren que salte dejen la cobija en el
suelo y aléjense.
Anthony de Mello
PARA MEDITAR
ENCUENTRA LA FRASE
LA GALLINA DE LOS HUEVOS DE ORO
- Mira mujer lo que me he encontrado. Tengo suerte

de la buena, me he fijado- Dijo el granjero muy
contento a su
esposa-. Esta ave no
es poca cosa.
- Dime querido ¿qué ha
pasado? Te noto feliz
76
y exaltado-. Dijo su mujer mientras barría la casa. -

Rápido que tengo que ir a la plaza.
- Pone huevos de oro esta gallina, mira tú, los que
puso están en la cocina. Son hermosos y valen una
fortuna. ¡Somos ricos no hay ninguna duda!
- ¿Y si la matamos? Segura dentro tiene todos. Es
nuestra de todos modos-. Dijo la mujer frunciendo
las cejas-, compraré ropas y un carro estaré
conduciendo.
- Estoy de acuerdo contigo, amada esposa, voy por
alguna cosa filosa-. Regresó y rápido degolló a la
gallina que ni decir “pío” pudo de despedida.
Qué desilusión, qué tristeza, la gallina sólo tripas

muestra. No tiene oro ni cosa parecida que pueda calmar, de
la gente, la mala codicia.
Esopo
SOPA DE LETRAS
LA LECHUZA SE MUDA DE CASA
Una lechuza se encontró con una paloma.

- ¿A dónde vas? -
preguntó la
paloma.
- Me estoy
mudando- dijo la
lechuza.
- ¿Pero por qué?-
volvió a hablar la
paloma.
77
- Porque a la gente de aquí no le gusta mi canto.

- ¿Y a dónde irás?
- Voy al norte.
- Oh muy bien ¿y ya mejoraste tu canto?
- No.
- Huy, entonces no le veo mucho sentido que te
cambies, será lo mismo, el problema no es la gente,
sino que no has afinado tu canto.
Liu Siang
LA PRINCESA Y EL ESCLAVO
La princesa de un reino muy lejano deseaba casarse

con un esclavo. El rey no lo quería y se lo había prohibido de
todas las maneras pero
sus esfuerzos resultaban
inútiles pues la princesa
seguía viéndose con el
esclavo. Lo peor de todo
es que sus consejeros
habían fallado y el rey no
quería hacerla sufrir.
A la corte del rey
llegó un anciano que se
enteró del problema del rey. Pidió verlo y después de unos
instantes pasó ante su majestad.
- Majestad, ¿puedo hablarle con franqueza?- dijo el
anciano.
- Por supuesto- dijo el rey.
78
- Usted está mal aconsejado. Si usted prohíbe que la

princesa se case con el esclavo ella se enojará con
usted y lo odiará toda la vida, y lo peor, se sentirá
más atraída por el esclavo.
- Sabias palabras, ¿entonces dime qué hacer?
El anciano le dio un plan de acción.

El rey no creyó en el plan del sabio pero prometió
hacerlo cumplir. Mandó que llevaran a la princesa a su
presencia y le dijo:
- Vamos a ver si de verdad amas a ese hombre: estarás
encerrada con él durante treinta días y treinta
noches. No podrás salir por ningún motivo. Si al final
sigues queriendo casarte con él tendrás mi permiso.
La princesa estaba loca de alegría. Le dio un abrazo a

su padre y aceptó encantada someterse a la prueba.
Durante los primeros días todo marchó de maravilla.
Pero después vino el aburrimiento. Antes de que terminara
la semana ambos querían otra compañía.
De repente todo lo que hacía el otro les molestaba. Se
gritoneaban.
Después de dos semanas estaban hartos y no querían
ni verse. Golpeaban la puerta pidiendo auxilio para que los
sacaran pero nadie tenía permiso de abrirles pues no habían
pasado los treinta días.
Después del mes se abrió la puerta. La princesa
corrió a los brazos de su padre y le agradeció el liberarla de
tal tormento.
Por supuesto que no se casaron.
Anthony de Mello
79
EL SEÑOR QUE AMABA A LOS DRAGONES
Cuentan que
existía un señor llamado
Ye a quien le gustaban
mucho los dragones que
los tenía por todos lados
pintados o tallados. De
eso se enteró un
verdadero dragón quien
voló a su casa y metió la
cabeza por la puerta del
señor y la cola por la
ventana. Cuando el señor
Ye lo vio, huyó lleno de
miedo y casi se vuelve loco.
Shen Dsi
SOPA DE LETRAS
EL TRAJE NUEVO DEL REY

Al rey de un gran país le gustaba vestir muy bien.
Tenía un enorme guardarropas y no permitía que por
ningún motivo alguien se
vistiera mejor que él.
Al reino llegaron
unos vendedores de ropa
que habían escuchado lo
vanidoso que era el rey y
querían aprovecharse de
80
eso así que hicieron correr la voz de que tenían una tela que
sólo los más listos podían ver. Al rey le llegó la noticia y
quiso con todas su fuerzas conocer a los vendedores y su
tela especial. Cuando llegaron los vendedores sacaron la
tela, se la mostraron al rey. El rey no vio nada, pero no
quería que los demás lo creyeran un tonto por lo que dijo:
- ¡Es realmente hermosa! - y ordenó que le hicieran el

traje más fabuloso que hubieran hecho jamás.
Llegó el día de la entrega. Los vendedores vistieron

al rey con su nuevo traje y habiendo terminado dio aviso
para que todo el pueblo se juntara para verlo marchar frente
a ellos.
La gente estaba sorprendida. Todos murmuraban y
felicitaban al rey por su nuevo traje.
- ¡El rey está desnudo! - dijo un niño.
En ese momento y ante la evidencia de que el rey
había sido timado, todo el mundo empezó a hablar
abiertamente del nuevo, invisible e inexistente traje del rey.
El rey se llenó de vergüenza y rápidamente pidió
trajeran un verdadero traje.
Los vendedores ya se habían marchado con varios
sacos de monedas de oro como pago y de ellos no se supo
nunca más.
Hans Christian Andersen
SOPA DE LETRAS
PARA PENSAR LA FÁBULA
81
EL ZORRO MUTILADO
Un alumno caminaba con su

maestro por la selva cuando
vio una pelea de zorros. Uno
de ellos quedó muy lastimado.
Observaron que el zorro se
acurrucaba encima de una
roca a lamer sus heridas.
Por ahí pasó un tigre
que vio al zorro en su
lamentable estado y se fue
regresando al poco tiempo con
un buen trozo de carne que el
zorro engulló con rapidez.
El alumno estaba
sorprendido.
Pocos días después el maestro caminaba por la calle
de la ciudad y vio a su alumno sentado.
- ¿Qué haces? - le preguntó el maestro.
- Hago como el zorro- respondió.
- ¿Estás enfermo?
- No.
- ¿Estás lisiado?
- No.
- Has aprendido terriblemente mal la lección que
vimos en la selva.
- ¿Por qué, maestro? ¿Acaso no debemos esperar que
los demás nos ayuden?
- ¿Te parece eso inteligente? Tú eres quien debe
progresar y hacer progresar a los demás. Haz como
el tigre, no como el zorro.
Anthony de Mello
¡RESPONDE EL QUIZ!
82
EL ZORRO Y LA ESTATUA
Un zorro se acercó a la ciudad, entró con hambre
pues hacía días que no comía.
Vio a lo lejos una estatua y presurosa se le acercó.
Le echó nariz y hasta un mordisco, pero nada
sucedió.
Eres hermosa de pies a cabeza pero no tienes
cerebro. ¿De qué te sirve la belleza si no tienes nada bueno
dentro?
El zorro echó a correr a seguir buscando algo que le

llenara el estómago y lo dejara contento.
ESPERANDO AL CONEJO
Un campesino que trabajaba para un rey muy

estricto se encontraba sembrando arroz, de repente observó
que un conejo salía de entre la
hierba medio atolondrado e iba
a chocar directamente contra
un árbol. Al momento el conejo
se desnucó y cayó muerto. El
campesino dejó su trabajo y
fue a recoger el conejo
diciendo:
- Ya tengo para comer el
día de hoy, dejaré mi
83
trabajo y esperaré a que salgan otros conejos.

Pasaron las horas, se metió el sol y no salió ningún
otro conejo. Llegó el capataz y le preguntó lo que hacía. El
campesino le explicó.
- ¿De manera que no terminaste tu trabajo por esperar
que saliera otro conejo?
- Así es.
El capataz le informó al rey lo sucedido y éste mandó
ponerle una paliza al campesino.
Jan Fei Dsi

¡RELACIONA LAS COLUMNAS!
HISTORIA DEL PESIMISMO

Cuentan que
había un hombre tan
viejo que ya no se
acordaba de haber sido
joven. Los que lo
conocían decían que
siempre lo habían visto
igual.
El hombre todo
el tiempo estaba
amargado. Para él todo
iba a terminar mal.
Siempre tenía un
rostro de enojo. Pero tampoco sabía llorar. Nunca sonreía ni
nadie lo había escuchado reír.
Nada lo entusiasmaba ni alegraba. No se sorprendía
por nada.
Todos sus días eran lo mismo. Apenas amanecía y se
sentaba a la puerta de su choza y esperaba a que el sol
84
atravesara el firmamento y se metiera y en cuanto esto

sucedía, el anciano tomaba su silla y se encerraba. Así era
todos los días, incluido el domingo.
Cuando la gente lo veía creía que era un anciano que
había acumulado sabiduría con el pasar del tiempo y
algunos iban a preguntarle:
- ¿Qué debemos hacer para ser felices?
- La felicidad no existe. Es un invento de los tontos-.
respondía.
- ¿Debemos ser amables con nuestros vecinos y
conocidos?
- Quien es amable es un débil que todos lo tratarán
como tonto.
- ¿Cómo debemos educar a nuestros hijos?
- Deja a los hijos que crezcan como quieran.
- Pero ¿no se volverán flojos?
- Los hijos siempre serán unas serpientes venenosas
que sólo sabrán morder.
El anciano se llamaba Pesimismo. Todos los que lo
visitaban regresaban con un nudo en el corazón.
Pesimismo nunca fue querido por nadie.
Cierto día un niño pasaba por la choza del anciano.
Sintió curiosidad de ver quién habitaba la choza y fue a
tocar. Pesimismo abrió la puerta. El niño sin pensarlo
abrazó al anciano y le dio un beso en la frente que estaba
llena de enormes arrugas y se fue corriendo.
El anciano quedó sorprendido. Nunca nadie lo había
querido. Abrió enormes los ojos. Entró de nuevo a su choza.
Dicen que Pesimismo murió sonriendo. Aquel niño le abrió
el camino a una nueva vida.
Leyenda árabe
ENCUENTRA LA FRASE
REFLEXIONEMOS LA LECTURA
85
JALAR LOS TALLOS DE LOS GIRASOLES

Cierto día el rey de
un país paseaba por un
campo de girasoles. Al
observarlas preguntó:
- ¿Cuándo estarán
las flores listas?
- Aproximadamente
en tres meses- le
dijo uno de sus
sirvientes.
- Eso es mucho
tiempo.
- Eso es lo que
tardan.
- Soy el rey y sigo
diciendo que es mucho tiempo. Quiero que juntes a
20 personas más y vayan al campo y jalen los tallos
de los girasoles. Tienen que crecer más rápido.
- Pero majestad…
- No te atrevas a contradecirme. Soy el rey.
El sirviente sabía que el rey no jugaba. Contradecirlo

le costaría la cabeza así que reunió a 20 personas más y
fueron a jalar los tallos de cada uno de los girasoles.
Al día siguiente todas las plantas estaban muertas.
Mencio
86
LA ALMEJA Y LA GARZA
Una almeja estaba

tomando el sol y abrió su
concha para calentarse. Por
ahí pasó una garza que
quiso de repente comerse a
la almeja por lo que le dio
un picotazo. De inmediato
la almeja se cerró atrapando
el pico de la garza.
- Si no me sueltas
morirás porque te
quedarás sin agua
cuando el sol
caliente- le dijo la
garza a la almeja.
- No te soltaré porque si lo hago me seguirás picando y
me comerás. Además si no te puedes soltar el sol te
quemará y morirás- le respondió la almeja.
Ninguno de los dos quería ceder. Al poco rato pasó

un pescador y vio a los dos animales atrapados y se los llevó
a los dos.
Fábula China
SOPA DE LETRAS
87
LA ANCIANA EN LA PLAYA
Una familia llegó a unas

playas hermosas. Los niños
de inmediato corrieron y
comenzaron a jugar en la
arena.
Vieron que una
anciana con el cabello suelto
y cepillado se acercaba a
ellos y los miraba
sonrientes, luego veía el
suelo y se agachaba. Los
papás de los chicos llegaron,
miraron a la anciana y llamaron a los chicos. Ella se acercó a
la familia, les sonrió, pero nadie le devolvió la sonrisa. Los
papás no los dejaron seguir jugando hasta que la anciana se
alejó lo suficiente.
Más tarde, estando en el restaurante, el papá
preguntó quién era la anciana. Le dijeron que era una mujer
que durante incontables años se había dedicado a limpiar la
playa de vidrios y basura para que la gente no se lastimara.
Anthony de Mello
88
LA CABRA QUE SE VISTIÓ DE TIGRE
Una cabra que se

creía muy lista se encontró
una piel de tigre en medio
de la selva. Se la puso
encima y comenzó a
caminar. Todos los
animales que le veían huían
despavoridos.
Por ahí pasaba un
lobo que no se creyó el
cuento y se le acercó.
La cabra comenzó a temblar de miedo. Cuando el
lobo estaba cerca la cabra salió corriendo pero el lobo la
alcanzó y se la comió.
Fa Yen
LA CHICA QUE PODÓ EL PASTO
Un hombre le pidió a
su hija de 12 años que podara
el pasto del jardín y él le
daría una buena paga. La
chica puso manos a la obra y
en unas horas ya estaba todo
listo. Todo menos una
esquina.
El papá fue a revisar
y vio que en la esquina no
estaba podado por lo que le
89
dijo a su hija que no le daría la propina.

- No me importa que no me la des. No podaré esa
esquina ni por todo el dinero del mundo.
El papá quiso saber la razón así que fue a ver lo que
había en el rincón no podado. Había un enorme sapo.
La chica tuvo compasión de él y no quiso pasarle la
podadora por encima.
Anthony de Mello
LA ELEFANTA Y LA PERRITA
Autor anónimo
Una elefanta y una
perrita se embarazaron al
mismo tiempo. Tres
meses después la perrita
parió seis cachorritos. Seis
meses más tarde estaba
embarazada de nuevo y
nueve meses después dio a
luz a otra camada de
cachorros. En el mes
dieciocho la perrita se
acerca a la elefanta para
preguntarle:
- ¿Estas segura que estás embarazada? Quedamos
embarazadas en la misma fecha y yo he dado a luz
tres veces a una docena de cachorros y ellos ya han
90
crecido y tú aún sigues embarazada. ¿Qué es lo que

pasa?
La elefanta respondió:
- Hay algo que quiero que entiendas. Lo que yo cargo
no son perritos, es un elefante. Yo sólo doy a luz a
uno en dos años. Cuando mi bebé toque tierra, ésta lo
va sentir. Cuando mi bebé cruce una calle los
humanos se detendrán a verlo con admiración. Así
que lo que llevo en mi vientre es grande y poderoso.
No pierdas la fe. Cuando mires a otros recibiendo
pronto sus gratificaciones no sientas envidia. Si no has
recibido tus propias bendiciones no te desesperes, di sí a ti
mismo y trabaja por tus sueños, no importa el tiempo que te
lleve cumplirlos.
ENCUENTRA LA FRASE
SOPA DE LETRAS
LA IMPORTANCIA DE LA PACIENCIA
Un hombre de China llamado Chu

había sido elegido gobernador de una
ciudad. Un amigo suyo llamado Li fue a
visitarlo.
- ¿Me permites darte un consejo?-le
dijo después de una larga plática.
- Por supuesto, el que gustes. Será
muy bienvenido tu consejo.
- Ante todo sé paciente- le
recomendó Li- de esta manera vencerás todas las
dificultades.
- Gracias, nunca lo olvidaré.
- Ante todo debes ser paciente-volvió a repetir Li.
- Sí, ya me lo dijiste.
- Debes ante todo ser paciente-insistió Li.
- Sí, es la tercera vez que me lo dices- dijo Chu.
91
-De verdad, ante todo debes ser paciente.

-¿Crees que soy un imbécil? ¡Ya van cuatro veces que
me repites lo mismo!- dijo Chu visiblemente
enojado.
- ¿Ya ves que no es fácil ser paciente? Lo único que he
hecho ha sido repetir el consejo dos veces más de lo
conveniente y ya te has enojado.
Chu se dio cuenta que había fallado en lo que había
prometido poner atención.
- Si no eres paciente con un amigo con algo tan
simple, menos lo serás con los que no son tus
amigos.
Sue Tao
SOPA DE LETRAS
LAS DOS AMIGAS Y SUS HIJOS
Dos amigas se
encontraron después de
muchos años:
- Cuéntame- dice
una de ellas-
¿qué fue de tu
hijo?
- ¡Ay mi hijo!- dice
la otra
suspirando- ¡Qué mala suerte ha tenido! Fíjate que
se casó con una chica muy flojita. No quiere cocinar,
ni lavar, ni limpiar. Se la pasa todo el día haciendo
nada o durmiendo. ¿Me creerás que hasta mi pobre
muchacho le lleva el desayuno a su cama? ¡Es
terrible! ¿Y qué ha sido de tu hija?
92
- Fíjate que ella sí que tuvo suerte. Se casó con un

verdadero ángel pues no permite que ella haga nada.
Tiene criados que le lavan , cocinan y limpian. ¿Me
creerás que su esposo le lleva todos los días el
desayuno a su cama? Todo lo que hace es descansar y
no hacer nada.
Anthony de Mello
LAS RANAS QUE PIDIERON UN REY
Estaban unas
ranas jugando en un
charco, ya brincaban, ya
reían, tenían de moscas
abundante comida.
Todo era dicha,
todo el día estaba
contento. Pero llegó el
aburrimiento. Ya no
croaban, ya no cantaban,
ahora sólo se quejan y se
amargan.
Piden a Zeus, el señor de los dioses, les mande un
rey. Zeus las escucha y arroja en medio de la charca un palo.
Las ranas ante el estruendo de su nuevo rey lucen calladas.
Pero pronto pasa el miedo, ven que su rey no hace
nada. Furiosas dirigen a Zeus sus plegarias. El dios de los
rayos está enfadado, ahora va en serio, ahora no va en vano.
El palo se ha transformado en tremendo culebrón
que a las ranas muerde, oprime y traga. Están las ranas
espantadas.
93
Zeus se ríe desde los cielos porque su travesura será

eterna para las ranas.

LA SERPIENTE Y LA LIMA
Una serpiente entró

a casa de un cerrajero y lo
primero que vio una vez
pasado el agujero fue una
lima, piedra que reposaba
en la caja de herramientas.
Y sin decir “agua va” la
criatura sin patas le da
tremenda mordida pero
¡oh! tremenda falla, los
dientes le quedan chuecos y su veneno sólo desperdicia.
La lima le dice:
- No seas tonta, querida ¿cómo te atreves a
morderme? ¿Qué no sabes que soy tan dura que hasta
el metal hago polvo?
94
LA TORTUGA Y LA HORMIGA
- ¡Ay, pobre de mí!

¡Qué mala suerte he
tenido! ¡El mundo ni
nadie me quiere!-
Todo esto lo decía
una aburrida
tortuga.
- ¿Qué te pasa,
amiga?- dijo una
hormiga- . No tengo
nada que comer
porque soy pobre- le respondió la tortuga-. En
cambio te miro a ti y qué bien te alimentas.
- Fíjate que sí, tengo mucho que comer. Me trato bien,

me cuido bien-
le dice orgullosa la hormiga- Me la paso buena parte
del año trabajando para cuando llegue el invierno no
tenga que estar penando. Y tú ¿qué haces durante
todo el año?
- La mera verdad-respondió la tortuga- yo me la paso

flojeando. Disfruto haciendo nada y de vez en cuando
atrapo alguna vieja rata. Estoy tirada de panza sin
mover ninguna de mis arrugadas patas.
- Oh, entonces ni quejarte debes, porque sólo aquellos

que se esmeran y luchan todos los días por lo que
quieren, merecen que la vida les dé mucho más de lo
que pueden y a los flojos como tú, la pobreza tendrán
como su inseparable compañera- dijo al fin la
hormiga con infalible franqueza.
95
José Joaquín Fernández de Lizardi
ENCUENTRA LA FRASE
LA UNIÓN HACE LA FUERZA

Un papá que era viudo y estaba
enfermo sintió de repente que sus
días estaban por terminar. Decidió
llamar a sus cuatro hijos quienes
llegaron con él al poco rato.
- Hijos, quiero transmitirles
una enseñanza que será la
más importante de su vida.
- Dinos, papá - dijeron ellos.
- Vayan por una rama que esté larga y delgada. - De
inmediato los chicos salieron y regresaron con la
rama.
- Rompan su rama a la mitad- . Ellos de inmediato lo
hicieron.
- ¿Fue fácil? - Ellos respondieron que sí. Más de
alguno se rió y no entendía lo que pasaba.
- Ahora junten las dos mitades. Vuelva a romperla-.
De nuevo lo hicieron sin mayor dificultad.
- Ahora junten las partes-. El chico más pequeño ya no
pudo romperla. - Vuelvan a juntarla y a romperla-.
Tres de sus hijos no pudieron. Sólo el mayor-
Háganlo de nuevo-. Esta vez el mayor tampoco
pudo.
En la habitación reinaba el silencio.
96
- Cada uno de ustedes es como la ramita, mientras

estén solos y no se apoyen los problemas los
acabarán, pero si se mantienen unidos ni el más
grande de ellos podrá contra ustedes. No lo olviden.
León Tolstoi
ENCUENTRA LA FRASE
LA ZORRA Y EL CUERVO
Una hermosa mañana llena
de sol pasaba una zorra por el
bosque. Tenía mucha hambre y
buscaba qué comer. De repente
llegó a su nariz un delicioso olor y
decidió investigar de dónde venía,
corrió varios cientos de metros
hasta que por fin llegó. En la copa
de uno de los árboles estaba un
cuervo que aleteaba trayendo en
su pico un enorme trozo de queso.
- Señor cuervo ¡muy buenos
días tenga usted! ¡Ay, su
plumaje es realmente
hermoso y brilla como la
noche! ¡Seguramente su canto ha de ser maravilloso!
¿Quisiera usted cantar para mí?
El cuervo estaba fascinado. Nunca nadie le había

hablado tan bonito así que decidió mostrar su canto.
- ¡Crac! - cantó.
En ese momento la zorra se tapó las orejas y sólo
abrió su boca para atrapar el queso que caía. Se relamió los
bigotes y siguió su camino.
La Fontaine
97
ENCUENTRA LA FRASE
PENSEMOS LA FÁBULA
LA ZORRA Y LA CIGÜEÑA
Cuentan que una
zorra invitó a cenar a una
cigüeña y le sirvió una
sopa en plato plano. La
cigüeña, con su largo pico,
no pudo tomar nada. Días
después, la cigüeña
convidó a la zorra a comer
y le sirvió la comida en una
alta y fina botella. La zorra
no podía meter su hocico y
se quedó en ayunas,
mientras la cigüeña, con
su largo pico, alcanzó la comida sin problemas.
- Amiga - le dijo a la enfadada zorra - tú me hiciste
ayunar y así te pago con la misma moneda, para que no lo
vuelvas a hacer.
La zorra entendió que no había hecho bien con su
amiga y le prometió que la invitaría a comer sin faltas de
respeto . Pero también le pidió perdón. La cigüeña aceptó las
disculpas y llegado el día los dos comieron como buenos
amigos.
Esopo
FRASE SOBRE LA RECIPROCIDAD
¡REFLEXIONEMOS; DALE CLIC!
98
LO QUE LE GUSTA A MI NOVIA DE TI
La madre le pregunta a su hijo:

- ¿Qué es lo que le gusta a tu
novia de ti?
El hijo responde:
- Que soy guapo,
inteligente, simpático y
que bailo muy bien.
- ¿Y qué es lo que te gusta a
ti de ella?
- Que ella piensa que soy
guapo, inteligente,
simpático y que bailo muy
bien.
Anthony de Mello
PARA PROFUNDIZAR LA FÁBULA
99
LOS AMIGOS Y EL OSO
Dos amigos se
internaron en el bosque.
De repente salió un oso y
empezó a perseguirlos.
Uno de los dos
corrió más rápido y el
otro se tropezó y en
cuanto cayó al suelo
decidió hacerse el
muerto. El otro amigo se
subió a un árbol a ver lo
que sucedía.
El oso llegó con el chico caído, lo movió con una
pata, le olió la cabeza y se fue.
El amigo en el árbol se bajó una vez que el oso ya no
se veía.
- ¡Amigo, nos salvamos! Oye, me fijé que el oso te
decía algo al oído ¿qué te dijo?- le preguntó.
- Que no creyera en la amistad de aquellos que en la
dificultad te abandonan.
SOPA DE LETRAS
REFLEXIONEMOS LA FÁBULA. CLIC!
100
LOS CAZADORES DE GANSOS
Dos hermanos que eran cazadores salieron de

cacería. De repente
vieron una banda
gigantesca de
gansos salvajes y
prepararon sus
arcos.
- Si cazamos
uno de esos gansos-
dijo uno- nos lo
comeremos bien
adobado.
- No, de
ninguna manera. Los gansos que se preparan adobados
deben ser cazados cuando están en tierra- dijo el otro- Los
que se cazan en el aire deben ser asados.
- No estoy de acuerdo contigo.
- Preguntemos al jefe de la aldea, verás que tengo
razón.
Llegaron con el jefe y les dijo:
- Corten el ganso a la mitad y cada quien lo hace
como quiera.
Regresaron los dos cazadores pero los gansos ya se
habían ido.
Shien Yi Pien
101
LOS CAZADORES Y LOS GANSOS
Cuando todavía había grandes bandadas de gansos

salvajes los cazadores idearon un plan para atraparlos.
Primero descubrieron que la bandada le encarga al
más joven que avise del peligro.
Segundo, descubrieron el lugar donde llegaban a
descansar.
Tercero, cuando estaban todos dormidos encendían
una antorcha que apagan al poco rato con lo que de
inmediato el centinela comienza a graznar avisando a los
demás del peligro, los gansos vuelan, pero al no ver ninguna
amenaza regresan a dormir.
Los cazadores vuelven a repetirlo: encienden la
antorcha y la apagan, el centinela grazna y todos salen
volando.
Lo hacían tres veces.
Los gansos creyeron que el centinela no sabía hacer
bien su trabajo por lo que en la siguiente ocasión lo
picotearon.
Finalmente los cazadores repiten su labor:
encienden la antorcha y la apagan pero el ganso joven ya no
grazna por lo que todos siguen dormidos. Los cazadores
atrapan a más de la mitad de la bandada.
Shung Shi
102
LOS CUATRO HERMANOS

Y EL LEÓN
Cuatro hermanos se habían
quedado huérfanos. Su padre
murió esa tarde después de una
larga enfermedad. Luego de los
funerales el hijo mayor, llamado
Armando, reunió a todos y les
dijo:
- No pienso quedarme en la
aldea, es demasiado
pequeña para mí.
- Yo tampoco -dijo Alfredo-
es muy triste para mí.
- Yo tampoco, dijo Agustín-
es demasiado silenciosa para mí.
El pequeño, llamado Antonio, no dijo nada. Sólo movió los
ojos mirando a sus hermanos mayores.
- Tenemos que salir al mundo a demostrar lo que
sabemos- dijo Armando.
- Tenemos que construir un imperio- dijo Alfredo.
- Tenemos que ser muy ricos- dijo Agustín.
Antonio no dijo nada, sólo movió los ojos.
- Saldremos mañana al amanecer - dijo Armando-
pero no debe ir nuestro hermano menor, no sabe
nada.
- Espera, hermano Armando. Él ha estado en las
buenas y en las malas. Creo que es justo que esté en
la riqueza que vamos a construir- dijo Alfredo.
- Está bien- rezongó Armando.
Al día siguiente estaban listos. Salieron de la aldea y
comenzaron a atravesar una espesa selva. Caminaron más
de una hora cuando de repente les llegó un horrible olor.
- ¡Diablos! Huele horrible. ¿Qué es? -preguntó
Antonio.
103
- Es un león muerto - dijo Armando-. Ya lo vi. Está

como a 5o pasos de aquí.
Llegaron a donde estaba el león muerto. Sí que apestaba.
- Momento- dijo Armando- antes de llegar a la
ciudad, demostremos lo que podemos hacer.
- Yo sé reconstruir todos los órganos - dijo Alfredo. Y
se puso manos a la obra.
- Yo sé acomodar todos los huesos- dijo Agustín. Y se
puso manos a la obra.
El león parecía como si estuviera dormido.
- Yo sé devolverle la vida - dijo Armando.
- ¡Espera, no lo hagas! - gritó Antonio.
- No me interrumpas, pequeño ignorante - lo calló
Armando-. No permitiré que alguien que no sabe
nada impida demostrar mis conocimientos.
- Si revives al león nos comerá pues seguro lleva
varios días muerto-insistió Antonio.
- ¡Cállate! - le gritaron todos.
- Permítanme subirme a un árbol, entonces - les dijo.
- Haz lo que quieras- le dijo Armando.
Antonio de inmediato se subió a un árbol. Armando
lo miró con desprecio pero regresó a su tarea. Revivió al león
con unas palabras extrañas.
El león abrió los ojos, sus tripas rugieron, vio a los
tres hermanos que tenían los ojos muy abiertos y de tres
zarpazos los mató. Se los comió y muy gordo se fue a dormir
más adentro en la selva.
Antonio bajó del árbol, tomó su mochila y continuó
caminando hasta la ciudad. Dicen que se puso a estudiar
muy duro. Se hizo rico y ayudó a otros a volverse ricos. Toda
la ciudad prosperó y Antonio murió siendo un viejo sabio.
Cuento africano
SOPA DE LETRAS
CLIC PARA REFLEXIONAR LA FÁBULA
104
LOS DOS AMIGOS
- ¡Mi amigo no ha regresado del campo de batalla,

señor! Solicito permiso para ir a buscarlo.
- Permiso negado, señor, no quiero que en lugar de un
muerto haya dos. No puede usted ir.
El soldado no hizo caso a las órdenes. Fue a buscar a

su amigo y regresó con su cadáver una hora más tarde.
También él traía una herida terrible en la pierna.
El oficial estaba furioso:

- ¡Le dije que no fuera! ¡Su amigo está muerto! Dígame
¿valió la pena ir por un cadáver?
- Claro que sí, cuando lo encontré estaba vivo aunque
herido pero con posibilidades de sobrevivir.
Anthony de Mello
REFLEXIONEMOS SOBRE LA AMISTAD
LOS DOS CABALLEROS
Cierto día dos

caballeros se dirigían al
castillo del rey y vieron a
un hombre sentado a la
sombra de un árbol que
tranquilamente rezaba:
- Señor, tú siempre
ayudas a los
105
pobres… ¿Por qué no me ayudas? ¿Qué te cuesta

hacerme un milagrito? Endereza la carreta y yo te
rezaré toda mi vida.
- Apura el paso que llegaremos tarde. - Los dos
caballeros no se detuvieron. No voltearon a ver a ese
hombre y siguieron su camino.
Después de caminar cerca de 10 minutos estaba otra

carreta volcada. Llevaba una gran carga de verdura. El
carretero hacía todo su esfuerzo por enderezar la carreta
mientras gritaba como loco. Estaba cubierto de sudor, los
brazos ya los tenía hinchados del esfuerzo, las botas llenas
de lodo y las rodillas raspadas. De inmediato uno de los dos
caballeros le dijo al otro:
- Hay que darle una mano a este amigo.
El otro caballero lleno de asombro dijo: -¿Qué te
pasa, señor? Hace unos minutos nos topamos con otro
hombre y no pediste que le ayudáramos siendo que era muy
bueno en sus rezos. Ahora vemos a este otro que grita como
loco y me pides que le ayudemos.
- Lo has dicho bien. - Le respondió el primer
caballero: - El primero es flojo y espera que las cosas
se resuelvan sin él hacer nada, en cambio éste da
todo de sí, incluidos los gritotes. Merece toda la
ayuda del mundo.
ENCUENTRA LA FRASE
REFLEXIONANDO LA FÁBULA
106
LOS DOS CAZADORES
Dos cazadores fueron a África por lo que rentaron un avión

que los llevó a la selva. Dos
semanas después. el piloto
volvió por ellos pero vio que
los cazadores tenían dos
enormes búfalos para subir
al avión por lo que les dijo:
- Este avión no podrá
cargar con los dos
búfalos. Sólo podrán
llevar uno.
- ¡Pero si el año
pasado venimos y el piloto nos permitió llevar dos
búfalos y el avión era del mismo tamaño! - dijo uno
de los cazadores.
El piloto no supo qué decir. Los cazadores le
insistieron y al final aceptó llevar los dos búfalos.
- Está bien. Si el año pasado pudieron, supongo que
este año también podremos hacerlo.
Subieron los búfalos y subieron los cazadores, pero el avión

no pudo lograr la altura necesaria por lo que se estrelló
contra un cerro. Uno de los cazadores le preguntó al otro:
- ¿Dónde crees que estemos?
- ¡Ay, no lo sé! - Respondió el otro cazador. Iré a
explorar- El cazador caminó unos cientos de metros
y luego regresó y respondió:
- Creo que estamos a unos dos kilómetros de donde
caímos el año pasado.
.Anthony de Mello
RULETA SOBRE LA FÁBULA
107
LOS DOS EMPRESARIOS DEL AGUA2

Robert Kiyosaki, el
gran promotor de la
inteligencia financiera, nos
cuenta esta historia:
Había un pueblecito
pintoresco muy bonito. Todo
tenía menos una cosa: no
había agua a menos que
lloviera. La gente del lugar se
reunió para resolver la
situación y decidieron hacer
lo necesario para tener agua
todos los días. Dos de los
vecinos se ofrecieron para la tarea. La gente del pueblo contrató
a los dos pues creían que la competencia sería muy buena para
mejorar el servicio.
El primero, que se llamaba Ed, corrió de inmediato a
comprar dos baldes de acero galvanizado y comenzó a traer
agua para todos desde un lago que estaba a un kilómetro de
distancia. De inmediato la gente le pagó y él vio dinero en su
bolsillo por lo que se entusiasmó y decidió hacerlo desde el
amanecer hasta el atardecer. Con el dinero compró un tanque
con el que la gente se abastecía. Ed se levantaba todos los días
mucho antes de que la gente lo hiciera para tenerles agua
cuando la necesitaran. Era un trabajo duro pero valía la pena el
esfuerzo. Además ganaba muy bien.
El segundo contratista, Bill, desapareció un tiempo.
Nadie lo vio durante meses lo que hizo muy feliz a Ed pues no
tenía competencia y además se llevaba todo el dinero.
Bill tardó seis meses en aparecer. Cuando lo hizo no
venía con dos cubetas como Ed, Bill tenía un plan, tenía ahorros
2
Recuperado de Kiyosaki, Robert T. El cuadrante del flujo del
dinero. Time & Money Network Editions. Pág. 4
108
con los que mandó instalar unas tuberías de acero inoxidable. Al

momento de inaugurar Bill le dijo a la gente que su agua era
limpia y siempre habría durante las 24 horas del día. Ed no
entregaba todos los días porque descansaba sábado y domingo.
Bill también les dijo que su agua sería más barata y de mejor
calidad que la de Ed.
Ed se dio cuenta que la competencia sería feroz por lo
que bajó los precios del agua, compró dos cubetas más y puso a
sus hijos a trabajar. Ya no descansaba ni sábados ni domingos.
Les dijo a sus hijos que saliendo de la escuela se fueran con él a
trabajar y que “algún día ese negocio sería suyo”. Curiosamente
sus hijos no iban a ayudarle casi nunca.
Por otro lado Bill pensó: “Si este pueblo necesita agua
seguro que otros pueblos también la necesitarán”. Se puso de
inmediato manos a la obra. Ajustó su negocio a las necesidades
de la gente. Estaba muy dispuesto a mejorar su negocio por lo
que escuchaba lo que la gente quería y sorprendía a todos con lo
que hacía por ellos quienes gustosos pagaban el precio. Bill
cobraba centavos por cada balde pero vendía millones de ellos.
Bill vivió feliz. La gente también. Ed siguió trabajando
pero se agotó. Triste o alegremente sus hijos no quisieron el
negocio.
CRUCIGRAMA DEL CUENTO
VAMOS A REFLEXIONAR. DALE CLIC AQUÍ.
109
LOS DOS HERMANOS

Dos hermanos, uno
casado y el otro soltero vivían en
una granja que se habían
repartido en partes iguales. La
tierra de la granja era muy fértil
por lo que daba abundantes
cosechas.
Todo iba muy bien hasta que de repente el hermano

casado comenzó a despertarse durante la noche asaltado
por los siguientes pensamientos:
- No es justo. Mi hermano se lleva la mitad de las
cosechas pero no tiene esposa ni hijos por lo que
cuando sea viejo no tendrá quién lo cuide ni cómo
alimentarse. Necesita ahorrar pues seguramente
necesitará mucho más que yo.
De inmediato se levantaba e iba al granero de su

hermano y echaba en él un saco de grano.
Por otro lado, el hermano soltero comenzó a

despertarse también durante las noches:
- Esto es una injusticia. Mi hermano tiene esposa y
cinco hijos y sólo se lleva la mitad de la cosecha. Yo
no tengo a quién mantener.
De inmediato se levantaba y llevaba un saco de grado
al granero de su hermano.
Un día coincidieron y al platicar lo que hacían
quedaron sorprendidos y decidieron festejar ese día cada
año con una gran fiesta como recordatorio del gran cariño y
generosidad de los dos.
Anthony de Mello
110
SOPA DE LETRAS
LOS DOS LADRONES Y EL BURRO
Dos ladrones se robaron un

burro y uno de ellos se
encargó de llevarlo al
mercado para venderlo. En
el camino se encontró con
un hombre cargando un
pesado costal que le
preguntó:
- Oiga, ¿me vendería
su burro?
- Claro que sí-
respondió el ladrón.
- ¿Me dejaría probarlo?
- ¡Con gusto! -dijo el ladrón educadamente.
- Deténgame este costal, por favor, nomás trate el
costal con mucho cuidado que trae cosas muy caras y
muy fáciles de romperse.
- Así será-. El ladrón se bajó del burro y el hombre del
costal se subió a él que pronto empezó a caminar a
toda velocidad
- Muy bueno el burro - se le oyó gritar al hombre-.
¡Cuide el costal!
El ladrón vio que el hombre se alejaba cada vez más hasta
perderlo de vista. Pero no podía perseguirlo sin romper lo
que cargaba.
- ¡Parece que me acaban de ver la cara de tonto! - Se
dijo a sí mismo el ladrón.
Efectivamente, el hombre del costal se alejó hasta
perderse de vista.
El ladrón llegó con su compañero quien le preguntó:
111
- ¿En cuánto lo vendiste?

- En exactamente lo mismo que nos costó- respondió
el ladrón.
Fábula árabe
LOS TRES CERDITOS

Estos eran tres cerditos que vivían muy contentos en
casa de sus papás. Iban a la escuela, hacían la tarea y juntos
se divertían. A los
tres les gustaba
jugar mucho por lo
que después de
hacer sus labores
corrían al bosque a
divertirse.
Pasó el
tiempo y sus papás
los llamaron. Les
pidieron que había
llegado el
momento de que
se independizaran
y cada uno
construyera su
propia casa. No tardaron en obedecer a sus papás.
El más pequeño empezó. Tenía muchas ganas de irse
a jugar por lo que rápidamente juntó paja y la hizo con ese
material. Al terminar corrió inmediatamente a divertirse.
112
El mediano también tenía muchas ganas de irse a

jugar pero también tenía ganas de hacer algo mejor que su
hermano pequeño por lo que hizo una cabaña de madera y al
terminar se juntó con su hermano menor.
El mayor también quería irse a jugar pero le gustaba
hacer las cosas bien por lo que comenzó a hacer su casa de
piedra y cemento.
Sus hermanos se burlaban de él.
No lejos de ahí estaba el lobo. Tenía fama de ser feroz
y comelón. Le llegó el olor de los cerditos y se saboreó los
bigotes al imaginar un rico chicharrón. Corrió al encuentro
de los cochinos quienes al verlo huyeron espantados a la
casa del más pequeño. El lobo les dijo:
- Ábranme, quiero hacer algo delicioso con ustedes.
- No. No te abriremos. Nos quieres comer.
- Por supuesto que sí. Me los quiero comer y me los
comeré.
- No te abriremos jamás.
- Ustedes se lo han ganado. ¡Soplaré y soplaré y su
casa derribaré!
El lobo sopló y su poderoso soplido derribó en un
instante la casa de paja. Los tres cochinitos corrieron de
inmediato a la cabaña y se encerraron.
- ¿Creen que esta casa me detendrá? ¡Jamás! ¡Soplaré y
soplaré y su casa derribaré!
El lobo sopló de nuevo de manera potente y la cabaña
aguantó un poco más pero al final se cayó. Los cochinitos
huyeron a la casa de su hermano mayor quien ya había
terminado su casa que, por cierto, le había quedado
preciosa. Los dos cochinitos llegaron y tocaron.
- ¡Hermanito, ábrenos, viene el lobo y quiere
comernos!
- ¡Pásenle, aquí estarán seguros!
Llegó el lobo. Tenía más hambre que nunca.
- ¿Creen que una casa de piedra y cemento me
detendrá? ¡Jamás! - El lobo sopló de nuevo. La casa
de piedra y cemento no se movió ni siquiera un
113
poquito. El lobo estaba cansado de soplar y se dio

cuenta que no podría derribar la casa así que ideó
otra forma. Se subió a la chimenea pero fue visto por
el hermano mayor quien ya tenía una olla de agua
caliente para hacer sopa, le quitó la tapadera y el
lobo cayó en ella
- ¡Auuuu! - Aulló el lobo de dolor y salió corriendo
para planear nuevas formas de atacarlos.
Los tres cochinitos celebraron la derrota del lobo

pero de inmediato el hermano mayor reprendió a sus
hermanos y les exigió que comenzaran a construir una casa
como la suya.
Joseph Jacobs
QUIZ PARA PENSAR
ENCUENTRA LA FRASE
LOS TRES DESEOS

Un leñador salió
decidido a cortar leña.
Avanzó por el bosque y llegó
a un árbol que le pareció el
indicado. Preparó el hacha y
estaba a punto de dar el
primer golpe cuando
escuchó un grito:
- ¡No, por favor! Es mi
casa, te lo suplico.
114
Quien así hablaba era un duende que pronto salió por

un hueco del árbol y se arrojó a los pies del leñador.
- Te lo suplico.
- Está bien, está bien. No lo haré - replicó el leñador
tranquilizando al duende.
- ¡Oh, gracias! - dijo el duende- Para que veas que soy
muy agradecido te concederé tres deseos.
El leñador estaba muy contento y fue corriendo a

contarle a su esposa lo sucedido quien muy contenta lo
escuchó y le sirvió un plato de lentejas.
- ¡Cómo se me antoja una gran salchicha para
devorarla en lugar de este plato de lentejas!
En ese momento apareció en su plato un enorme
salchichón.
- ¡No seas tonto! ¡Acabas de desperdiciar un deseo! -
le gritó enojada su mujer- ¡Desearía que esa
salchicha se te pegara a la nariz!
De repente la salchicha estaba pegada a la nariz del
leñador.
- Ay no, ¡qué mala eres! Ahora lo que más quiero es
que desaparezca esta salchicha.
Acto seguido la salchicha desapareció quedando las
lentejas en el plato.
- ¡Mala suerte la nuestra! Hemos desperdiciado
nuestros tres deseos. Estamos como al principio.
Selina Young
115
LOS TRES TOROS Y EL LEÓN
Un león tenía
hambre y no había
comido nada en tres días.
Ni siquiera un huesito.
Caminó por el
valle varias veces y no
encontró nada.
De repente sus
ojos brillaron. Vio a lo
lejos un corral donde
pastaban tres toros. Se
acercó. Era la hora del
desayuno.
Saltó la cerca y le
hincó los dientes al
primer toro que lucía una
piel blanca. El toro bramó
pidiendo ayuda. De
inmediato los otros se abalanzaron sobre el león dándole
cornadas. El león muy adolorido huyó y a la sombra de un
árbol se acostó mirando de lejos a los toros que se reían de
él.
- Tengo que pensar cómo comerme a esos toros-
pensaba el león.
- ¿Vieron como volaba? - Se burlaba el toro café.
- ¡Claro! Parecía de trapo -gritó el toro negro.
- ¡Gracias amigos! Sin ustedes nunca lo hubiera
logrado - dijo el toro blanco.
- Para eso son los amigos -dijeron los demás.
¡El león pensó un plan! Se acercó con el toro blanco y

le dijo:
116
- Oye, amigo, es horrible lo que escuché que decían tus

amigos de ti.
- Aléjate de aquí- le dijo.
- Está bien. No te lo diré - el león hizo como que se iba.
- Espera, ¿qué dijeron?
- Es horrible. Muy horrible.
- ¡Qué dijeron! - Mugió el toro desesperado.
- Está bien, te lo diré nomás porque te aprecio. Dijeron
que tenías las patas muy flacas.
- ¿De veras eso te dijeron mis amigos?
- Lo dijeron entre ellos, yo nomás pasaba cuando los
escuché.
El toro blanco se enojó y prometió nunca volver a hablarle a
sus amigos.
- Señor toro café. Buenos días tenga usted. ¿Ya supo el

chisme que anda corriendo?
- ¿Cuál chisme? - preguntó el toro café.
- El que andan diciendo sus amigos. Y es acerca de
usted.
- ¿Qué dicen mis amigos? - preguntó el toro café.
- Es muy feo lo que dicen.
- ¿Qué dicen? Dime ya.
- Que usted tiene los cuernos más feos del mundo.
- ¡Pero si mis cuernos son una lindura! ¡Gané un
concurso internacional!
- Yo estoy de acuerdo con usted, pero eso fue lo que
dijeron,
- Ingratos, y habíamos jurado ser amigos. No les
hablaré jamás.
El león fue con el toro negro.

- Buen día tenga usted señor toro negro.
- ¿Todavía le duele la paliza que le dimos, señor león?
- Pues sí, un poco, pero eso no es lo importante ahora.
- Entonces ¿qué lo es? - preguntó el toro negro
desconfiado.
117
- Pues lo que escuché mientras iba a beber agua.

- ¿Qué escuchaste?
- Es demasiado desagradable para usted sobre todo
viniendo de quienes lo dijeron.
- ¿Quiénes? ¿Qué dijeron?
- Sus supuestos amigos.
- ¿Qué dijeron? ¡Anda, dime ya!
- Pues con toda la pena del mundo escuché que dijeron
que usted estaba muy gordo.
- ¿Gordo yo? -bufó el toro negro.
- Escuché eso de los dos.
- Con razón se veía que se carcajeaban y me volteaban
a ver. Ya no les hablaré nunca.
El león logró lo que quería. En un instante saltó sobre

el toro negro, lo mordió fuertemente y sus amigos no
hicieron nada por salvarlo.
- Se lo merece -dijo el toro blanco.
- Eso le pasa por traidor - dijo el toro café.
Cuando el león volvió a tener hambre se lanzó sobre
el toro café.
- Eso le pasa a los traicioneros -dijo el toro blanco.
Finalmente, el león se lanzó sobre el toro blanco quien, no
pudo hacer nada, ya no tenía amigos y estaba solo frente al
poderoso felino.
Cuento popular árabe
SOPA DE LETRAS
QUIZ PARA REPASAR LA FÁBULA
118
MÁS AMOR AL DINERO QUE A LA VIDA
En la antigua China
había un pueblo famoso
porque sus habitantes eran
grandes nadadores.
Por el pueblo
pasaba un río y cayó una
gran tormenta que hizo
que cinco personas que
iban en una lancha
naufragaran.
Pronto todos
comenzaron a nadar. Uno de ellos, Mao, no avanzaba a
pesar de que lo hacía con todas sus fuerzas. Sus compañeros
le gritaron:
- ¡Hey, Mao! ¿Por qué no avanzas si tú eres el mejor de
todos para nadar?
- Porque tengo cincuenta monedas de oro amarradas
en mi cintura y pesan.
- Quítalelas-le gritaron.
Sacudió la cabeza negándolo.
- No seas tonto, Mao ¿si te ahogas de qué te servirá el
dinero?
Lo volvió a negar. Al poco rato el agua del río se lo
tragó.
Liu Dsung- Yuan
119
MENTIRA Y FRANQUEZA
Cierto día el
virrey de la ciudad de
Nápoles se le ocurrió
visitar a los presos
que estaban en la
cárcel.
Mientras
caminaba por los
pasillos preguntaba a
cada preso los
motivos de su
condena.
Todos y cada uno le dijeron al virrey que su condena
había sido injusta, acusaron de ignorantes a los jueces y le
exigían con gritos al virrey que los liberara.
Había un preso que permanecía callado al fondo de
su celda. El rey sintió curiosidad y se le acercó.
- ¿Y tú, eres culpable?
- Así es, su majestad, soy culpable. Estoy aquí porque
cometí un crimen y ahora debo pagarlo.
- ¿Estás arrepentido de tu crimen?
- Sí, su excelencia.
- ¿Qué harás después de pagar tu condena?
- Creo que nunca terminaré de pagar mi condena, por
más que permanezca aquí nunca le devolveré la vida
al hombre que se la quité.
- Tienes razón. Pero… ¿qué harás al salir? - insistió el
virrey.
- Trabajaré para ganar el perdón de su familia.
El virrey ordenó: - Corran de inmediato a este

hombre. Es un peligroso delincuente y podría contaminar a
120
todos estos pobres inocentes-. Y dirigiéndose al hombre le

dijo: - Ve, y cumple tu palabra.
MUCHOS CAMINOS
Yang Tsé era muy rico, tenía mucho ganado, muchos

sirvientes y muchas tierras. Un día le informaron que un
sirviente se había extraviado así que mandó a todos sus
hombres a buscarlo.
Uno de los trabajadores le dijo que había muchos
caminos que tomar para encontrarlo. Fueron pero no dieron
con él.
- ¿Lo encontraron?
- No, señor. No lo encontramos.
- ¿Por qué no lo encontraron?
- Señor, hay muchos caminos. Cada camino se divide
en varios más. No sabíamos cuál tomar, así que
regresamos.
Yang Tsé se quedó pensando, no habló y no sonrió
durante varias horas.
- Señor ¿por qué se preocupa por ese sirviente? ¡Usted
tiene muchos! Además, no es culpa suya, es de él por
no poner cuidado- le dijeron.
- Cada persona es para mí muy importante. Piensen en
lo siguiente: él tiene una familia que seguro ya está
preocupada, piensen en la angustia que pasará él por
no encontrar el camino.
- Pero su preocupación no hará que regrese- le dijo un
sirviente muy despreocupado.
121
- Tienes razón- Yang Tsé se levantó- nadie

descansará hasta encontrarlo. Nos dividiremos en
equipos y cada uno llevará su silbato.
- Usted debe estar muy cansado por todo lo que tiene
que hacer, mi señor, quédese.
- Nadie descansará hasta que aparezca, he dicho-
insistió Yang Tsé.
- ¡Pero ya es noche!- dijo otro sirviente.
- Apúrate, para que pronto estemos todos en nuestras
casas con nuestras familias -les dijo Yag Tsé.
Efectivamente, el esfuerzo y organización de todos
dio sus frutos. Un equipo encontró al sirviente temblando de
frío, pronto todos acudieron y lo llevaron de vuelta a casa.
Ese día todos admiraron más a su señor. Sabían que
cualquiera podría pasarle lo mismo y Yang Tsé no
descansaría hasta encontrarlo.
Fábula china
QUIZ SOBRE LA LECTURA
ENCUENTRA LA FRASE
PEDRO Y EL LOBO
Pedro era un chico muy listo. Todos los días sacaba
sus ovejas a pastar, pasaba largo tiempo buscando piedras
de colores y haciendo construcciones con ellas pero al final
se aburría.
Un día de tantos decidió hacer algo diferente. Se
subió a una piedra y desde ahí gritó con todas sus fuerzas:
- ¡Auxilio, auxilio! ¡Ahí viene el lobo!
¡Ayúdenme o se comerá las ovejas.
La gente del pueblo acudió de inmediato a auxiliar a
122
Pedro quien al verlos soltó la carcajada.

- Los engañé. No viene ningún lobo. Y se
soltaba a reír de nuevo.
La gente estaba enojada. Pero sin decir nada se
regresaron a sus casas.
Al día siguiente Pedro volvió a sacar a sus ovejas,
después de juntar piedras y hacer siluetas con ellas en el
suelo se aburrió. Entonces se acordó de la broma y decidió
volver a repetirla.
- ¡Auxilio, socorro! ¡Ayúdenme! ¡Viene el lobo y
se comerá las ovejas!
La gente se reunió en el centro del pueblo y decidió ir
a ayudar a Pedro. Llegaron con el chico y lo encontraron en
el piso retorciéndose de risa.
- ¡Jajajaja! ¡Los he engañado de nuevo! ¡Son
unos tontos!
La gente estaba muy molesta pero lo disculparon
porque creyeron que era una simple travesura de un niño
aburrido.
Al día siguiente sucedió lo mismo. Pedro juntó
piedras y se fue a acostar a la sombra de un árbol. Al poco
rato escuchó el crujir de una rama. Se levantó espantado. Vio
que un enorme lobo atacaba a una de sus ovejas dejándola
herida de muerte, luego corrió con otra a la que le enterró
sus colmillos. Después otra. Las demás huyeron
despavoridas. Pedro gritó con fuerza.
- ¡Auxilio, auxilio! ¡El lobo está aquí y está
matando a mis ovejas!
Por supuesto que la gente lo escuchó, pero ya no le
creyó. Pensaron que era una broma más del chiquillo
aburrido.
Esopo
123
POBRECITA YO
En un bosque lejano
habitaba una familia de
ardillas. Papá, mamá, hijo
mayor y la hermanita.
Un día la hermanita
no se levantó para ir a la
escuela. Siguió con la cobija
encima. Mamá Ardilla fue con
ella.
- ¿Qué te pasa, hija?
¿Estás bien?
- ¡Pobrecita Yo! ¡Pobrecita yo!- dijo la ardillita.
- ¿Te sientes mal?- volvió a preguntar la mamá.
- ¡Pobrecita Yo! ¡Pobrecita Yo! - Volvió a chillar la
ardillita.
Mamá ardilla fue con su esposo y le platicó lo que
pasaba con Pobrecita Yo. Después de hablar Mamá Ardilla
tomó el teléfono y llamó al Doctor Castor. A los pocos
minutos estaba en la habitación de Pobrecita Yo. Le puso el
termómetro, lo miró, luego mandó llamar a Mamá Ardilla y
le dijo algo al oído.
- ¡Pobrecita Yo! ¡Pobrecita Yo! - gimió Pobrecita Yo.
Todos se fueron a sus quehaceres. Mamá Ardilla le
dejó el desayuno hecho a Pobrecita Yo en el comedor. Una
vez que salieron Pobrecita Yo se levantó y fue a comérselo y
de inmediato se regresó a su cama.
Al mediodía estaba toda la familia reunida. Mamá
Ardilla y Papá Ardilla fueron a la habitación de Pobrecita Yo
quien dormía profundamente. Decidieron no despertarla.
Pasadas unas horas fueron de nuevo. Pobrecita Yo tenía los
ojos abiertos y miraba el techo de su cuarto.
- ¿Te sientes mejor? - preguntó Papá Ardilla.
- ¡Pobrecita Yo! ¡Pobrecita Yo!- dijo de nuevo.
124
- Mañana nos mudaremos de casa. Prepara tus cosas.

- ¡Pobrecita Yo! ¡Pobrecita Yo! - dijo la ardillita
moviendo negativamente la cabeza.
- Nos iremos después del trabajo- dijo Mamá Ardilla.
Al día siguiente todos se levantaron apenas sonó el
despertador menos Pobrecita Yo.
- Es hora de ir a la escuela - le dijo Mamá Ardilla.
- ¡Pobrecita Yo! - dijo en voz baja Pobrecita Yo.
Mamá Ardilla no dijo más. Siguió preparando sus
cosas. Se fueron todos a sus labores. Pobrecita Yo se levantó
a comer el desayuno, pero tenía todavía hambre. Se asomó
por la ventana y vio que unas ardillas enterraban bellotas en
la nieve. Esperó a que se fueran y bajó. Una vez que estaba en
el suelo corrió al lugar donde las habían escondido, cavó, las
sacó y se las comió. Todavía tenía hambre.
Un cazador que pasaba por ahí la vio y le puso una
trampa. Pobrecita Yo corrió hacia ella con la esperanza de
tener una suculenta bellota de manera fácil. En cuanto la
tuvo, la trampa le cayó encima y el cazador la metió en la
caja.
Dicen que Pobrecita Yo siguió quejándose, pero
aunque lo haga, ya nadie le hace caso.
Constancio C. Vigil
SOPA DE LETRAS
125
¿PORQUE SE LE GRITA A UNA PERSONA?

Cuenta una historia
tibetana, que un día un
viejo sabio preguntó a sus
seguidores lo siguiente: –
¿Por qué la gente se grita
cuando están enojados?
Los hombres
pensaron unos momentos:
- Porque perdemos la
calma – dijo uno –
por eso gritamos.-
- Pero ¿por qué gritar cuando la otra persona está a tu
lado? – preguntó el sabio – ¿No es posible hablarle
en voz baja? ¿Por qué gritas a una persona cuando
estás enojado?
Los hombres dieron algunas otras respuestas pero
ninguna de ellas satisfacía al sabio.
Finalmente él explicó:
- Cuando dos personas están enojadas, sus corazones
se alejan mucho. Para cubrir esa distancia deben
gritar, para poder escucharse. Mientras más
enojados estén, más fuerte tendrán que gritar para
escucharse uno a otro a través de esa gran distancia.
Luego el sabio continuó:
- ¿Qué sucede cuando dos personas se enamoran?
Ellos no se gritan sino que hablan suavemente ¿por
qué? Sus corazones están muy cerca. La distancia
entre ellos es muy pequeña.
El sabio sonrió y dijo:
126
- Cuando se enamoran más aún, ¿qué sucede? No

hablan, sólo susurran y se vuelven aún más cerca en
su amor. Finalmente no necesitan siquiera susurrar,
sólo se miran y eso es todo.
Así es cuan cerca están dos personas cuando se
aman…
Luego dijo:
- Cuando discutan no dejen que sus corazones se
alejen, no digan palabras que los distancien más,
puede llegar un día en que la distancia sea tanta que
no encuentren más el camino de regreso...
QUIZ PARA MEDITAR LA LECTURA
¿QUIÉN LE PONE
EL CASCABEL AL GATO?
En la casa de un vecino los ratones estaban

preocupados, Tomás, el gato, había llegado y rápidamente
comenzó a cazar ratones que, llenos de miedo, se reunieron
para buscar una solución.
- Se llevó a mi tío Romualdo- dijo uno.
- Atrapó a mi prima
Emeteria-dijo otra.
- Yo ya no puedo salir
en paz a comer-
dijo un ratón con
lentes.
- ¡Ni yo!- Dijeron
varias voces a la
vez.
127
- Tenemos un gran problema y tenemos que hacer

algo- dijo de nuevo el ratón con lentes
Pronto la reunión era un enorme barullo. Todos

hablaban y daban su opinión y lo que consideraban que
debían de hacer con el gato.
- ¡Silencio! -Se escuchó una voz. Era un ratoncito
joven con cara de inteligente-. Yo tengo la solución
pero necesito que me escuchen.
- Habla ratón cara de inteligente- dijo uno.
- Debemos ponerle un cascabel en el cuello así cuando
camine sonará y nosotros podremos huir
rápidamente.
- ¡Ooooh! - Dijeron los ratones.
- Es lo más inteligente que he escuchado en toda mi
ratonil vida dijo el ratón con lentes.
- Es usted un genio. Lo queremos para presidente-
dijo otro.
De inmediato un grupo de ratones cargó en sus

brazos al ratón con cara de inteligente. Todo era una fiesta.
- ¡Muy bien, señores! Me gusta la idea. Pero tengo una
pregunta que es muy importante -dijo un viejo
ratón.
- ¿Cuál?- dijeron todos los ratones juntos.
- ¿Quién será el valiente que le pondrá el cascabel al
gato?
De pronto hubo un gran silencio.

- Yo no puedo, no veo bien- dijo el ratón cara de
inteligente y se fue del lugar.
- Yo tampoco, soy muy lento para correr-dijo otro. Y
también se fue.
- Yo tengo hijos que cuidar- dijo una ratona tomando
a sus ratoncitos de la mano y yéndose de inmediato.
128
- Yo ni vivo aquí, además tengo mucho trabajo -dijo

otro.
- Yo estoy rentando, creo que el gato sólo se come a
los dueños de las casas- dijo un ratón obeso.
Poco a poco el lugar quedó limpio de ratones. Todos

encontraron razones para no ponerle el cascabel a Tomás y
éste siguió comiéndoselos.
Jorge Olalla Mayor
SOPA DE LETRAS
REFLEXIONEMOS LA FÁBULA, DALE CLIC
RATÓN DEL CAMPO

Y RATÓN DE LA CIUDAD
Rodrigo, era un ratón que vivía en el granero de un
campo, paseaba
todos los días
después de trabajar,
tenía lo suficiente
para comer. Ahí, en
el granero había
mazorcas que le
quitaban el apetito a
él y su familia.
Todos los días les
decía a sus hijos y a
su esposa que
tuvieran cuidado
pues no muy lejos de
ahí estaba un
tecolote que con sus
poderosas garras se
129
había llevado a su tío Ricardo. Fuera de eso todo era muy

tranquilo.
Cierto día le llegó un mensaje. Su primo Cristóbal
vendría de la ciudad a visitarlo. Al leerles el recado todos
estaban muy contentos. Pronto comenzaron los
preparativos para recibir al primo.
Pasados unos días llegó el primo Cristóbal. Venía
cargado de maletas. Todos le ayudaron a llevar su equipaje
al granero.
- ¡Pero qué rústico se ve todo esto, primo! -dijo
Cristóbal dándole un fuerte abrazo.
- Es tu casa - contestó Rodrigo.
- Gracias, muchas gracias, pero ya tengo la mía y está
requete chula.
- Te estábamos esperando. Vente, es hora de comer.
Seguro que traes mucha hambre.
- Ni tanta, pero ya que invitan, pues, vámonos a
comer.
Se sentaron a la mesa, los platos estaban servidos.
- Hemos dejado la mejor de las mazorcas para ti,
querido primo.
- ¿Una mazorca? ¡Pero qué campesinos! Esto no es
comible. Está dura y fea. ¡Puaj! - el ratón de la ciudad
decía cosas que lastimaban a la familia de ratones
del campo-. Vénganse a la ciudad. Allá está
maravilloso. Hay comida en abundancia y toda muy
deliciosa.
Esa tarde, Cristóbal se la pasó criticando a su primo

del campo y hablando de las maravillas de la ciudad donde
vivía.
- Ya me voy - les dijo al día siguiente apenas salió el
sol.
- ¡Quédate a desayunar! - le dijo Rodrigo.
- ¿Mazorcas? ¡De ninguna manera!- Me voy para
alcanzar a desayunar en la ciudad. Adiós. Los espero
la próxima semana. Disfruten de las maletas que les
dejé.
Pasada una semana, el ratón del campo se fue con

toda su familia a la ciudad. Estaban sorprendidos. El ir y
130
venir de autos y de gente los había dejado con la boca

abierta. Llegaron a la casa del primo Cristóbal quien los
recibió metiéndoles a cada uno una tremenda salchicha en
su boca.
- Ya se habían tardado. Aquí la hora de comer es
cuando no hay gente. Y pueden comer lo que les dé la
gana.
- Primo - dijo Rodrigo- aquí hace mucho ruido.
- No te fijes en eso. Ya te acostumbrarás. Nomás no
espanten a las señoras porque si lo hacen todo se
pondrá feo.
Ese día los ratones del campo se atragantaron con
todo: salchichones, pan, jamón, dulces, refrescos, botanas,
pasteles... Todo fue a parar a su estómago. Estaban en un
supermercado.
- Gracias, primo por invitarnos. Esto es el paraíso.
- ¿Por qué no invitas a los demás primos?
- ¿A José, a Roberto, a María? -dijo Rodrigo.
- Sí, a todos ellos. Hay comida para todos.
- Les enviaré un mensaje para que se vengan.
Dicho y hecho. A los pocos días llegaron los primos
cada uno con sus familias. Y sin decir “aguas” se lanzaron a
comer como ratones endemoniados sin escuchar a Cristóbal
que les decía que lo hicieran de noche y sin espantar a las
señoras.
La fiesta se puso en grande. Roberto organizó a los
sobrinos y juntos royeron todas las bolsas de dulces. María
organizó a los primos y juntos se dedicaron a espantar a las
señoras.
El jefe del supermercado estaba terriblemente
espantado. Tomó el teléfono e hizo una llamada. Esto no
podía continuar así.
Cristóbal escuchó lo que dijo el jefe del
supermercado y pasó rápidamente el aviso.
- Bueno, señores, es hora de irnos. Pasó lo que no
debía pasar y ahora pasará lo que no debía pasar.
Fumigarán y pondrán trampas.
Todos los ratones estaban consternados. Pero ellos
se lo habían buscado. Tenían que marcharse si querían
conservar sus vidas.
Ese día por la noche los ratones llegaron al campo.
No tenían salchichones, ni dulces, ni refrescos ni pasteles
131
pero sí suculentas y duras mazorcas. No había forma de

espantar señoras sino sólo de cuidarse del tecolote que
rondaba.
Esopo
SOPA DE LETRAS
REQUISITOS PARA SER CIRUJANO

Un médico muy famoso estaba enseñando a sus
alumnos en el hospital.
- Hay dos cualidades muy importantes que ustedes
deben de tener: no sentir náuseas3 y ser muy
observador.
Para demostrar lo que había dicho metió uno de sus

dedos en un bote que tenía un olor asqueroso, después se
llevó el dedo a la boca y chupó. Luego pidió a sus alumnos
que hicieran lo mismo. Los alumnos se armaron de valor e
hicieron lo mismo.
El médico les dijo:

- Damas y caballeros, de verdad debo de felicitarlos.
Pasaron la primera prueba pero no la segunda.
Ninguno de ustedes se dio cuenta que el dedo que
chupé no era el mismo que metí en el líquido
asqueroso.
Anthony de Mello
SOPA DE LETRAS
3
Asco.
132
REUNIÓN DE VIEJITOS SABIOS
Hubo una
reunión de
ancianos que el
pueblo
consideraba
sabios.
Mientras
cenaban el que
tenía fama de ser
el más sabio se
levantó y empezó a servirles a los demás. Pero nadie,
excepto uno llamado Juan, aceptó de él todo lo que quiso
ofrecerle. Los demás ni un vaso de agua aceptaron.
A los demás les molestó la actitud de Juan y uno le
dijo:
- ¿Cómo es que te has considerado digno de ser
servido por el hombre más sabio de todos?
Juan respondió:
- Fíjate que cuando yo ofrezco un vaso de agua me
gusta que la gente lo acepte, la pregunta es: ¿crees
que yo debo quitarle ese gusto a este anciano sabio?
Anthony de Mello
133
RICITOS DE ORO Y LOS TRES OSOS
Ricitos de Oro era

una niña tierna pero muy
tenaz quien jugando a las
escondidas se había
perdido en el bosque.
Caminó mucho y se
encontró con una cabaña
habitada por unos osos
que habían ido al bosque a
buscar comida.
Ricitos era muy
curiosa y quiso saber
quién habitaba la cabaña así que tocó la puerta y como no
respondía nadie entró. Efectivamente: no había nadie.
Sin embargo la mesa estaba servida y ella traía
hambre así que se acercó y probó los platos de sopa. El
primero lo sintió muy frío, el siguiente estaba muy caliente
y el último estaba tibio. Ese se comió. ¡Le supo delicioso!
Luego fue a la sala. Había tres sillones. El primero lo
sintió muy duro, el segundo muy suave y el tercero ni duro
ni suave. En ése se quedó descansando un rato hasta que le
entró sueño.
Se fue a las camas y las probó. La primera estaba
muy grande, la siguiente muy pequeña y la tercera le quedó
justo a su medida. Ahí se durmió.
Al poco rato llegaron los osos.
- Alguien ha probado mi sopa -dijo Papá Oso.
- También alguien ha probado la mía- dijo Mamá Osa.
- La mía se la acabaron -dijo el Hijo Oso.
- Alguien se ha sentado en mi sillón -dijo Papá Oso.
- Alguien se ha sentado en el mío- dijo Mamá Osa.
- Y en el mío también -dijo el osito.
134
- Alguien se ha acostado en mi cama- dijo Papá Oso.

- También en la mía- dijo Mamá Osa.
- En la mía hay una niña- dijo el osito.
- En ese momento Ricitos de Oro se despertó, se
espantó al ver a los osos y salió corriendo.
Papá Oso gritó: -espera, niña, no queremos hacerte daño.
Mamá Osa gritó: -espera, queremos conocerte.
Hijo Oso gritó: - Yo quiero ser tu amigo.
Ricitos de Oro regresó, se hicieron amigos y cada tarde
regresaba a convivir con ellos.
Robert Southey
SOPA DE LETRAS
¿SERÁ BUENO O MALO?

Un anciano chino tenía
un hijo y un caballo. Un día el
caballo desapareció. Todos los
vecinos fueron a visitar al
anciano a unirse con su
tristeza: -¡Qué mala suerte has
tenido! - le decían.
El anciano agradeció y
les dijo: - Habrá que ver si lo
sucedido es de verdad mala
suerte…
Pasaron algunos meses y el caballo regresó con una
yegua y un potrillo. Los vecinos fueron a felicitar al anciano
pero éste les dijo: -Habrá que ver si es bueno o malo lo que
pasó.
135
Un día el hijo del anciano cabalgaba a toda velocidad

pero perdió el equilibrio y cayó rompiéndose una pierna de
tal modo que ya no pudo caminar.
Nuevamente los vecinos visitaron al anciano para
compartir su pena. El anciano nuevamente les dijo: - Habrá
que ver si esto es para bien o para mal.
Al poco tiempo el país vecino invadió la patria del
anciano por lo que todos los jóvenes debían alistarse en el
ejército. En la guerra muchos de ellos murieron.
Los vecinos fueron a felicitar al anciano quien
contaba con su hijo.
El anciano les dijo: -No sabemos si es para bien o para mal…
ENCUENTRA LA FRASE
PARA REFLEXIONAR
SOPA DE PIEDRA
Un país estuvo
en guerra y cuando
terminó había mucha
destrucción y pobreza.
La gente apenas tenía
para comer y muchos
desconfiaban entre sí.
Cierto día llegó
a un pueblo un viajero.
Cargaba una mochila.
Tocó a la puerta de una
casa de la que salió una
señora con cara de pocos amigos.
- Señora, respetuosamente le pido algo de comer.
¿Tendrá?
136
- ¿Crees que estoy para repartir comida? ¡No tengo! -

Y cerró la puerta de un golpazo.
Fue a tocar a otra casa. Lo mismo le dijeron.
No se rindió, hizo uso de su imaginación y decidió
probar de otra manera.
Se puso en el centro del pueblo, buscó unas piedras y
sacó de su mochila una olla que siempre cargaba. Juntó algo
de leña y encendió una fogata. Lavó una de las piedras en un
pequeño arroyo que por ahí pasaba.
La gente, llena de curiosidad se asomó por las
ventanas.
Los niños fueron los primeros que se le acercaron.
- ¿Qué hace? - Le preguntó una niña.
- ¡Hola! Quiero hacer una deliciosa sopa de piedra.
- ¿Sopa de piedra?
- Sí, es la sopa más deliciosa del mundo.
- ¡Nunca la he probado!
- Me hacen falta unas zanahorias.
- En mi casa yo tengo- dijo un chico. Y se fue
corriendo por las zanahorias.
- ¡Muy bien! Ahora le hace falta unas papas -dijo,
mientras movía el agua con una vara.
- ¡Yo tengo papas! - dijo otro chico y salió corriendo
por las papas.
- Me hacen falta más vegetales.
- ¿Qué vegetales? - dijo una niña con los ojos muy
abiertos.
- Chayote, garbanzo, elote… lo que sea es bueno.
- ¡Yo tengo! - Gritaron varios chicos a la vez y salieron
corriendo.
Al poco rato la olla estaba rebosante.
- Yo tengo una olla más grande que esa - dijo la
primera señora que lo había corrido. Y se fue por ella.
Era exquisito el olor que despedía aquella sopa.
Todos los presentes estaban listos con su plato y su cuchara
para probar aquella sopa de piedra.
137
Hubo quienes trajeron más cosas para acompañar la

sopa: pan, tortillas, agua de sabor, etc.
Todos compartieron la sopa de piedra y nadie se
quedó con hambre.
Marcia Brow
ENCUENTRA LA FRASE
SOY FUERTE, SOY EL QUE MANDA
Me pidieron que escribiera esto y yo no sé para qué.

Me llamo Jesús y estudio la primaria. Dicen que soy un
aprovechado porque abuso de los más chicos, pero yo no
tengo la culpa de que sean unos debiluchos. A mí mi papá
me enseñó a defenderme, me decía que yo debía ser el que
manda siempre. Bueno, también me daba unas palizas de
vez en cuando, pero lo hacía para que yo fuera más fuerte.
La verdad es que lo único que le tengo es mucho coraje.
Pensándolo bien... creo que yo me desquito con los más
flacuchos porque no pude hacerlo con mi padre. Él sí que era
fuerte, decía palabrotas y le pegaba a mi mamá. Nunca se
dejaba de nadie. Hace tiempo un tipo se le atravesó con su
camioneta y mi papá lo alcanzó y se le cerró. Casi chocaban.
Estaba orgulloso de mi papá. No se dejaba de nadie. Lástima
que ya no está conmigo. Murió. Sí, así como lo digo. Tuvo
pleito con un vecino que tenía la música muy alta. Mi papá
salió a gritarle que le bajara. Se hicieron de palabras. El
vecino sacó una pistola y le disparó a mi papá y luego huyó.
Estoy aquí en la dirección de la escuela pues acabo de
golpear a un chico que no quería darme su torta. Se lo
138
merecía. La torta es mía porque yo así lo he decidido. Soy

fuerte, soy el que manda y no me dejo de nadie.
QUIZ SOBRE LA LECTURA
ENCUENTRA LA FRASE
TIERRA DE RATONES
Esta es la historia de
una ciudad habitada por
ratones que era gobernada por
un gato gordo y negro y su
grupo formado por otros gatos
negros. Los ratones decían que
vivían muy bien. Pero eso no lo
habían descubierto ellos sino
que eran los gatos los que
decían que los ratones vivían
muy bien.
Cada cierto tiempo los ratones salían de sus casas e
iban a votar y siempre elegían a un gato gordo diferente
pero del mismo color.
Los gatos habían organizado la ciudad y eran los que
ponían las leyes. Las puertas de las casas de los ratones
tenían que tener la medida adecuada para permitir entrar
las garras de los gatos. Los ratones
no podían ir en sus coches más
rápido que los gatos pues estaba
prohibido que un gato se fatigara.
Las leyes estaban puestas para
beneficio de los gatos aunque los
ratones creyeran lo contrario.
Los ratones estaban cansados
así que cuando llegó el tiempo de las
votaciones fueron y eligieron a … un
gato blanco.
El gato blanco les habló
maravillas. Aparecía muy sonriente
139
en su propaganda y les prometió mucho queso. Sin embargo

cuando ganó hizo que las puertas de las casas de los ratones
ya no fueran redondas sino cuadradas y tuviera el doble del
tamaño para que el gato pudiera meter sus dos patas.
Los ratones volvieron a votar. Ahora eligieron de
nuevo al gato negro quien les había prometido que el queso
les iba a llegar a su domicilio y que ellos ya no tendrían que
ir a trabajar. Y así fue. Pronto la ciudad empobreció pues no
había quien produjera riqueza.
Los ratones estaban desesperados.
Volvieron a votar. Ahora los gatos habían formado
varios grupos y había de todos los colores: gatos negros,
gatos blancos, gatos manchados, gatos rallados…
No importaba quién ganara, lo importante era que
fuera gato.
Los ratones estaban desesperados.
De pronto apareció un ratoncito que les propuso una
idea: ¿Por qué no formar un gobierno hecho de ratones?
Los ratones no podían creer lo que escucharon del
ratoncito. Esa era una idea loca. Además los gatos estaban
furiosos nomás de escucharla. Hablaron terriblemente del
ratoncito y los ratones rápidamente lo metieron a la cárcel.
Dicen que el ratoncito sufrió mucho en la cárcel pero
que siempre tenía una mirada tranquila. Él creía en su idea y
sabía que como toda buena semilla puede crecer y prosperar
si se le cuida.
Clare Gillis
SOPA DE LETRAS
QUIZ PARA PENSAR
TRISTE ENGAÑO
Un hombre rico de Arabia llamado Omar tenía un

hermoso caballo al que otro hombre también muy rico
llamado Alí le tenía mucha envidia y quería tenerlo por lo
140
que le ofreció cincuenta camellos a cambio. Omar no los

aceptó y eso enojó mucho a Alí por lo que hizo planes para
apoderarse de él.
Alí sabía que Omar se paseaba en su caballo todos los
días por lo que fingió ser un pordiosero que estaba muy
enfermo.
Omar era un hombre de buenos sentimientos y
cuando vio al mendigo sintió compasión por él, se bajó de su
hermoso caballo y fue con el mendigo a quien le ofreció
llevarlo al hospital.
- Llevo muchos días sin comer-dijo el falso mendigo-
apenas puedo moverme.
- No te preocupes, te llevaré al hospital y estarás ahí
hasta que recuperes por completo la salud.
- No tengo cómo pagarle.
- Eso no importa.
Omar cargó en sus brazos al mendigo y lo subió con
cuidado al caballo. En cuanto Alí estuvo encima del caballo
se acomodó sobre la silla y escapó a todo galope.
Omar se dio cuenta que era Alí y salió corriendo tras
el caballo pero fue imposible alcanzarlo.
- Tengo tu caballo y jamás te lo regresaré - le dijo Alí
gritando.
- Está bien, me has robado el caballo. Pero espera,
tengo algo que decirte que es muy importante.
- ¿Qué quieres decirme?- le dijo gritando.
- Que no le digas a nadie cómo conseguiste el caballo.
- ¿Y por qué no he de hacerlo? Fui muy inteligente.
- Porque si la gente se entera de tu engaño quizás
algún día se encuentre con un hombre realmente
enfermo y decida no ayudarle recordando lo que tú
hiciste.
Anthony de Mello
RESUELVE EL CRUCIGRAMA. DALE CLIC
141
UTILIZAR EL MAL PARA EL BIEN
Algo me salió de
repente en la piel. Llamé al
médico dermatólogo y fui
en cuanto pude.
Al entrar al
consultorio me di cuenta
que el doctor traía una
mano artificial, dominado
por mi curiosidad le
pregunté:
- ¿Y su mano, doc, qué le pasó?
- ¿Me creerás que no siempre quise ser médico? A los
16 años trabajaba en una carpintería y con una sierra
me corté la mano. Mi mamá me dijo:
- No te rindas, hijo, si ya no puedes trabajar con esa
mano, hazlo con la cabeza-. Así que terminé la
preparatoria y con gran entusiasmo entré a la
facultad de medicina. Y no soy cualquier médico, he
descubierto varios tratamientos para la piel.
V. Buttafava, 1982
CONSTRUYE LA ORACIÓN
MEDITA LA ANÉCDOTA
142
VIVIR MUY JUNTOS

Dos esposos tuvieron una
gran discusión. Después de
tomar aire el hombre le
preguntó a su mujer:
- ¿Por qué no podemos
vivir en paz como
nuestros perros?
Míralos, no se pelean.
La mujer le responde:
- Claro que no se
pelean porque están
sueltos, pero amárralos y verás lo que pasa.
Anthony de Mello
Y TÚ ¿QUÉ ME VAS A DAR?
Cuentan los ancianos

que había un rey que solía salir
muy seguido a visitar a su gente
para saber cómo vivía. Mandaba
arreglar su carruaje, se ponía
sus mejores ropas y de
inmediato bajaba a la ciudad.
Cuando veía a una
persona por el camino el rey se
bajaba del carruaje, doblaba una
rodilla y le decía:
- Y tú ¿qué me vas a dar?
143
La persona que lo veía de inmediato sacaba de lo que

traía y se lo daba. El rey agradecía y se subía y regresaba a su
castillo. Hubo muchos que no le daban nada. Ante ellos, el
rey sonreía y se subía a su carruaje y se retiraba a toda
velocidad.
Un día como los demás, el rey salió. Vio a un
vagabundo sucio y desaliñado que caminaba. Mandó al
cochero a detener el carruaje y se bajó, puso una rodilla en el
piso y le dijo:
- Y tú ¿qué me vas a dar? -le dijo al vagabundo.
El vagabundo estaba desconcertado. Sintió mucho
enojo que el rey con toda su riqueza fuera quien le pidiera
algo. Pero como era el rey no le dijo nada, simplemente
buscó en la bolsa de su pantalón y encontró un trozo de pan
duro.
El rey agradeció y se fue.
Cuando el vagabundo llegó a su casucha todavía iba
maldiciendo al rey.
- Él debía de haberme dado. Sabía cómo estaba. Me vio
y se dio cuenta de lo miserable que me trata la vida-
decía enojado.
El vagabundo arrojó sus cosas al camastro donde
dormía, ahí se dio cuenta que algo brillaba, grande fue su
sorpresa que lo que brillaba era el pedazo de pan que le
había dado al rey pero ahora estaba convertido en oro.
CRUCIGRAMA
144
Fuentes consultadas.
De Mello. Anthony. La Oración de la Rana. Tomo 1 . Sal Terrae.

ISBN: 9-788429-308037
Kiyosaki, Robert T. El cuadrante del flujo del dinero. Time & Money
Network Editions.
Reader’s Digest. (1990). Los Porqués de la Mente Humana.

México.
Wei Chin-Chi. Fábulas Chinas. Antología.Tomo. ISBN

970-666-697-4
Zanuso S, Hermenegildo. Cuéntame otro ejemplo… Buena

Prensa. ISBN: 968-6056-68-8.
¿ME TERMINASTE?
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Haz que más personas descubran mis secretos.
145

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Alfreduki Puki Tuki

¡Cuéntame un cuento! Fábulas y cuentos de todos los

Antes de leer tus cuentos favoritos ……………. 7

1. Acres de diamantes …………………………………….. 8

36. El lobo y el perro …………………………………………. 46

78. La unión hace la fuerza ………………………………. 96

Fuentes consultadas …………………………………………. 145

ANTES DE LEER TUS CUENTOS

Me he dedicado a reunir los cuentos que me han

Alfreduki Puki Tuki

Alí Hafed era un

La verdad es que todos tenemos en nuestra persona

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QUIZ SOBRE LA FÁBULA

Juan era un niño de mucha energía. Le gustaba hacer

COMER PARA TRABAJAR

Había un rey que

COME TÚ MISMO LA FRUTA

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su pobreza. Podría darles una limosna pero el hambre y la

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El burro al escuchar tremendo notición dice:

Félix María Samaniego

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