ESMT-409-0099-1

ES0991
9 de julio de 2013

Estudio de caso de la ESMT

Tomando el mando: Jürgen

Klinsmann en el FC Bayern Munich
Ulf Schäfer
Christoph Burger

Introducción
El 11 de enero de 2008, los dirigentes del FC Bayern de Múnich, el club de fútbol más
laureado de la historia de Alemania, anunciaron que Jürgen Klinsmann sería el nuevo
entrenador. Su tarea era sencilla: ayudar al mejor equipo de Alemania, que ya había ganado el
"doble" (el campeonato nacional y la copa de la asociación de fútbol) al final de la temporada
2007-2008, a convertirse también en campeón internacional al ganar la Liga de Campeones
europea. Klinsmann se puso a trabajar el 1 de julio de 2008 e introdujo, como era de esperar,
numerosos cambios. Sin embargo, sólo 10 meses después, el 27 de abril de 2009, fue destituido
de su cargo.

FC Bayern Munich
Con sede en Múnich, la capital de Baviera, el FC Bayern de Múnich, o "Bayern" para abreviar, es
con diferencia el equipo de fútbol más exitoso de Alemania. Desde la fundación de la primera
liga nacional de Alemania, la Bundesliga, en 1964, el Bayern ha ganado el campeonato nacional
alemán en 20 ocasiones. Además, ha ganado 14 veces la "Copa DFB" de la asociación nacional de
fútbol. El equipo bávaro también ha tenido éxito

a La Copa DFB (en alemán: DFB-Pokal) es un torneo de fútbol de eliminación que se celebra anualmente. Es el
segundo título nacional más importante del fútbol alemán después del campeonato de la Bundesliga.

Este estudio de caso ha sido elaborado por Ulf Schäfer y Christoph Burger, de la Escuela Europea de Administración y
Tecnología ESMT. Los autores son los únicos responsables de su contenido. Su objetivo es servir de base para el
debate en clase y no ilustrar la gestión eficaz o ineficaz de una situación de gestión.
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Bayern Munich

internacionalmente, la más reciente en 2001, cuando el equipo ganó la Liga de Campeones y el

Mundial de Clubes. Con casi 147.000 socios, el Bayern es también uno de los mayores clubes de
fútbol del mundo. En su ejercicio fiscal 2007/08, el club declaró unos ingresos de 286 millones de
euros, lo que lo sitúa en el cuarto lugar entre los clubes con mayores ingresos del mundo. La
reputación del Bayern como uno de los mejores clubes de fútbol del mundo se remonta a sus
éxitos en la década de 1970. En aquella época, no había ningún equipo tan dominante en Europa
como el Bayern. En 1974, 1975 y de nuevo en 1976, los bávaros ganaron la Copa de Europa,
precursora de la actual Liga de Campeones. Desde 1980, el club sólo había terminado la
temporada cinco veces sin ganar un título nacional o internacional.

El prestigio de la entidad y, sobre todo, sus capacidades financieras han atraído a excelentes
jugadores. El propio Klinsman jugó de delantero en el Bayern de 1995 a 1997, y llegó a ser
campeón nacional alemán con el equipo. Pero son nombres como Franz Beckenbauer, Karl-Heinz
Rummenigge y Uli Hoeneß los que, aún hoy, están profundamente asociados al FC Bayern de
Múnich. Como jugadores, disfrutaron de grandes victorias con el club en las décadas de 1970 y
1980. Una vez terminada su carrera futbolística, pasaron a la dirección del Bayern, inicialmente
como presidente, vicepresidente y gerente, respectivamente. Más tarde, después de que el club
"sin ánimo de lucro" se reorganizara en una sociedad anónima en 2002, se convirtieron en
presidente del consejo de administración, presidente de la junta directiva y presidente en
funciones, respectivamente. El club prosperó bajo su dirección. El éxito del equipo generó
grandes ingresos para la organización. Y las crecientes arcas de la organización estimularon a su
vez el éxito del equipo.

Esta dinámica aumentó las expectativas de los jugadores y de los entrenadores. Los individuos
que no podían alcanzar los objetivos fijados eran despedidos, preferiblemente en el acto. Sólo
en la década de 1990, el equipo pasó por nueve entrenadores diferentes. En el pasado, incluso
un final de temporada exitoso no era garantía de trabajo en el Bayern. A pesar de ganar el
"doblete" de campeonato nacional y copa en 2005 y en 2006, Felix Magath se vio obligado a
abandonar el cargo a principios de 2007; fue despedido por la preocupación de que el equipo
sólo consiguiera el tercer puesto en la Bundesliga al final de la temporada, lo que habría puesto
en peligro la participación del equipo en la Liga de Campeones.

En el verano de 2008, sin embargo, el Bayern volvió a ganar el doblete de campeonato alemán y
Copa de la Asociación, ahora bajo la dirección de Ottmar Hitzfeld, entre otras cosas porque los
dirigentes del Bayern habían invertido unos 70 millones de euros en la compra de nuevos
jugadores. El equipo que iba a entrenar Klinsmann estaba formado por jugadores de renombre y
con experiencia internacional, como la superestrella francesa Franck Ribéry y el máximo
goleador italiano de la UEFA Luca Toni, y por numerosas promesas alemanas como Lukas
Podolski, Bastian Schweinsteiger o Marcell Jansen, a los que Klinsmann conocía bien de su época
de seleccionador nacional alemán.

Klinsmann toma el mando

Cuando Klinsmann asumió sus funciones el 1 de julio de 2008, el Bayern, a pesar de su gran éxito
y su potencial de rendimiento, era visto en gran medida como un equipo poco inspirado y con
una forma de jugar anticuada. Y aunque el Bayern seguía siendo una fuerza dominante en los
estadios alemanes, el último éxito internacional del equipo se remonta a siete años atrás.

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Bayern Munich

Se temía que el equipo perdiera su competitividad frente a otros grandes equipos europeos
como el FC Barcelona, el Real Madrid, el Chelsea de Londres, el Arsenal de Londres o el
Manchester United.

Se especuló mucho sobre quién ayudaría a devolver al Bayern a la cima del fútbol europeo.
Cuando surgió la noticia de que Jürgen Klinsmann era el heredero, la reacción fue de sorpresa.
Pocos habrían esperado que el ex técnico de la selección alemana se convirtiera en entrenador
del "Bayern". Esto fue especialmente sorprendente teniendo en cuenta que Uli Hoeneß había sido
uno de los mayores críticos de Klinsmann durante sus dos años como seleccionador nacional.
Klinsmann, que fue nombrado Entrenador del Año en 2006, nunca había dirigido un gran equipo
de club. Sin embargo, los medios de comunicación no tardaron en hacerse eco de la noticia y
empezaron a generar "rumores": El expatriado alemán afincado en California, que en su día llevó
a la derrotada selección alemana al tercer puesto en el Mundial de 2006, es ahora el gran
reformador y salvador del Bayern. Uli Hoeneß calificó la elección del entrenador como una
extensión lógica de la nueva estrategia del club. "Con la decisión de hacer una gran inversión en
el equipo, ya hemos demostrado que estamos preparados para tomar una nueva dirección". 1 Para
Hoeneß, se trataba de una "profunda y sentida necesidad de encontrar un entrenador no
convencional".2

En su primera rueda de prensa como entrenador del Bayern, Klinsmann anunció que su filosofía
era hacer que cada jugador, cada día, fuera un poco mejor. Para transformar esta filosofía en
realidad, Klinsmann se aseguró una amplia autoridad discrecional en las negociaciones de su
contrato. Nunca antes un entrenador del Bayern había recibido tanta libertad de acción. Tras la
destitución de Klinsmann, Hoeneß dijo: "Klinsmann era el entrenador, en la historia del FC
Bayern, con más poder. Sus deseos no se cumplieron, se sobrepasaron". 3 Klinsmann creó el
puesto de Team-Manager y contrató a su hombre de confianza, Christian Nerlinger, para que
ocupara el puesto, para "descargar al gerente Uli Hoeneß de los diversos asuntos que se refieren
a lo que sucede alrededor del equipo".4 Además, Klinsmann se rodeó de un equipo de expertos,
tal y como había hecho durante su etapa como seleccionador nacional. Sólo que esta vez eran
casi desconocidos en Alemania: el mexicano Martín Vásquez, que se convirtió en el segundo
entrenador de Klinsmann; los estadounidenses Nick Theslof, encargado de observar y analizar el
panorama internacional, y Darcy Norman, terapeuta; y el brasileño Marcel Martins, responsable
de la preparación física y la rehabilitación. "He aprendido a trabajar con especialistas para sacar
el máximo partido a los jugadores", dijo Klinsmann en5 . Además, Klinsmann incorporó al equipo
a cinco traductores simultáneos para poder hablar con los 23 jugadores del Bayern al mismo
tiempo. Pero fue en el entrenamiento diario donde Klinsmann introdujo los cambios más
cruciales. Además de la preparación física, puso un nuevo énfasis en el desarrollo de la
personalidad de los jugadores. "Todo el mundo habla de que los partidos se deciden en la
cabeza. Pero nadie presta atención a la cabeza", dijo 6 . El entrenamiento de los jugadores era
individualizado. Se les exigía una jornada de ocho horas y pasaban estas horas en un "Centro de
Rendimiento" recién equipado. Klinsmann influyó personalmente en su diseño, que se inspiró en
los llamados "Player Lounges" que había visto en los clubes estadounidenses de baloncesto y
fútbol americano. Además de las zonas habituales de entrenamiento de fuerza y masaje, el
nuevo centro de entrenamiento también incluye salas de yoga y meditación, zonas tranquilas y
salones, tenis de mesa, dalas de billar, un puesto de DJ, una sala familiar, donde los jugadores

3
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podían reunirse con sus familias, una sala de cine y una biblioteca. En las salas de aprendizaje
electrónico, los jugadores podían tomar clases de idiomas extranjeros u otros programas de
formación continua. Como símbolo de este concepto de entrenamiento holístico, Klinsmann
colocó estatuas de Buda en determinadas salas y sobre la entrada del centro. "Construiremos un
campo de energía que creará alegría para los jugadores"7, dijo Klinsmann. En dos años,
Klinsmann quería transformar al Bayern en uno de los equipos de fútbol más potentes de Europa.8

La temporada 2008-2009
Para el actual campeón alemán, el inicio de la nueva temporada fue mediocre. El primer partido
contra el Hamburgo acabó en empate. Después de 10 partidos, el Bayern sólo pudo alcanzar el
cuarto puesto. Al cabo de 100 días, los ánimos empezaron a inclinarse en contra de Klinsmann.
Tras el empate a 3 contra el Bochum a principios de octubre, en el Allianz Arena de Múnich se
escucharon por primera vez gritos de "Fuera Klinsmann". El reformista Klinsmann le había dado al
Bayern su peor inicio de temporada en 32 años. Los comentaristas de fútbol se quejaban de que
el equipo carecía de un progreso constante y de una estrategia coherente y reconocible. De
hecho, hasta ese momento Klinsmann ni siquiera había respondido a algunas preguntas muy
básicas: si sería mejor, por ejemplo, jugar con un sistema de 3-5-2 o 4-4-2. Sus decisiones de
contratación también se habían convertido en una fuente de debate público. Dejó marchar al
prometedor Marcell Jansen al Hamburgo. No tuvo éxito en el desarrollo de Lukas Podolski como
delantero, que empezó a quejarse abiertamente de su insatisfacción por estar constantemente
en el banquillo, soñando públicamente con volver a su equipo de origen, el Colonia. Del mismo
modo, Klinsmann había nombrado a Marc van Bommel capitán del equipo al principio de la
temporada. Sin embargo, poco después mandó al banquillo al influyente líder.

Los observadores ya no podían discernir un plan coherente por parte de Klinsmann, el apoyo
hacia él se desvanecía. A principios de octubre, las estatuas de Buda fueron retiradas del centro
de entrenamiento. Después del partido en Bochum, la dirección de la organización se sintió
obligada a dar al controvertido entrenador su apoyo y respaldo públicos: "Tenemos total
paciencia, total confianza en Jürgen Klinsmann. Sólo tenemos que volver a encontrar el camino
del éxito"9, dijo Karl-Heinz Rummenigge tras el partido.

Al llegar las vacaciones de invierno, el equipo de Klinsmann había logrado ascender al segundo
puesto de la tabla de clasificación y había empatado con el Hoffenheim, el equipo líder. En la
última jornada, los bávaros se impusieron al Hoffenheim por 2:1 en la primera vuelta de un
partido rápido y furioso, ganando el encuentro en el último minuto del partido. Los observadores
alabaron el partido como "el mejor y más rápido de la temporada" 10 y lo compararon con la
"calidad del fútbol inglés".11 A estas alturas, todos los objetivos de la temporada -el campeonato
alemán, la Copa de la Asociación y la final de la Liga de Campeones- eran alcanzables. Sin
embargo, a principios de marzo, el Bayern perdió contra el Leverkusen en los cuartos de final de
la Copa de la Asociación. El 3 de abril, perdió contra el Wolfsburgo por 1:5 en la Bundesliga.
Cuatro días después, el Bayern sufrió un completo desastre al perder por 0:4 en la primera ronda
de los cuartos de final de la Liga de Campeones contra el Barcelona.

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Klinsmann es despedido
El golpe final para Klinsmann llegó cuando el Bayern fue derrotado por el FC Schalke 04 por 0 a 1
el 29 de abril de 2009. Esto situó al Bayern en el tercer puesto de la tabla de clasificación,
empatado con los equipos que ocupaban el cuarto y el quinto lugar. Como resultado, la
clasificación del equipo para la Liga de Campeones del año siguiente estaba en peligro. Dos días
después de esa derrota, Klinsmann perdió su puesto como entrenador del FC Bayern de Múnich.
El entrenador asistente Martin Vasquez, el ojeador Nick Theslof y el preparador físico Oliver
Schmidtlein se vieron obligados a marcharse con él.

Ya durante la concentración invernal en Dubai, Hoeneß había compartido con los periodistas su
valoración del trabajo de Klinsmann: "Jürgen quería construir la Roma en dos meses. Eso no
funcionó".12 Ahora fue muy elocuente: "Se le contrató para entrenar al equipo para ganar
partidos. No es una tarea sobrehumana", dijo Hoeneß en 13 tras la destitución de Klinsmann.
Claramente cansado del modus operandi de Klinsmann, el poderoso directivo del Bayern declaró:
"El FC Bayern no puede esperar otros dos, tres o cuatro años",14 y concluyó: "Necesitamos un
'profesor de fútbol'".15 Jupp Heynckes asumió las funciones de entrenador hasta el final de la
temporada. El "profesor de fútbol", de 63 años, ya había ocupado este puesto desde 1987 hasta
1991. Era el ahora buscado "hombre experimentado que moverá al equipo con mano firme en la
dirección correcta",16 como dijo Rummenigge.

"Un jubilado del fútbol como última esperanza: tras sólo 10 meses con Klinsmann, el proyecto de
renovación del Bayern no podría haberse derrumbado con más fuerza"17, comentó el Frankfurter
Allgemeine Zeitung. El FC Bayern de Múnich terminó la temporada 2008-2009 como segundo
clasificado de la liga nacional.

Prueba 1: Clasificación del FCBayern en la temporada 2008-2009

(partidos 1-29 último partido de Klinsmann)

Fuente: Kicker Online, tabla de partidos,

http://www.kicker.de/news/fussball/bundesliga/spieltag/1- bundesliga/2008-
09/0/0/spieltag.html (consultado el 29 de abril de 2009).

5
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Bayern Munich

Notas finales
1 Mit Expertenteam und Masterplan, Focus, 1 de diciembre de 2008.
2 Ibid.
3 Dann bin ich Mutter Theresa. Focus, 24 de abril de 2009.
4 Nerlinger wird Bayern-Teammanager, Süddeutsche Zeitung, 13 de marzo de 2008.
5 Klinsmann setzt auf Expertenteam, Financial Times Deutschland, 1 de diciembre de 2008.
6 Die Erziehung des FC Bayern, Der Spiegel, 28 de julio de 2008.
7 Die Chemie stimmt intern, Frankfurter Allgemeine Zeitung, 28 de abril de 2009.
8 La historia del FC Bayern.
9 Die Stimmung kippt gegen Klinsi, Rheinische Post Online, 6 de octubre de 2008.
10 El camino ya no es el mismo. ¿Es Jürgen Klinsmann un buen entrenador? Frankfurter Allgemeine Zeitung, 27
deabril de 2009.
11 Ibid.
12 Die Chemie stimmt intern.
13 Für immer Oper, Der Spiegel, 5 de mayo de 2009.
14 Klinsmann Sturz, Der Spiegel, 27 de abril de 2009.
15 Ibid.
16 Bayern löst die Bremse Klinsmann, Frankfurter Allgemeine Zeitung, 28 de abril de 2009.
17 Trümmer der Wankelmütigkeit, Frankfurter Allgemeine Zeitung, 28 de abril de 2009.

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