De acuerdo a la mitología andina, la Virgen del Socavón salvó a la tierra
de los Urus, hoy ciudad de Oruro, de las cuatro plagas que ingresaron y pretendían acabar con la población de esta región. Según la leyenda, Huari quien tenía el dominio de la cordillera, quería conquistar la tierra de los Urus, porque se enteró que los habitantes de este lugar adoraban a la Pachamama (Madre Tierra) a través del dios Inti (Sol), entonces se propuso apoderarse de la hija del Sol de nombre Aurora, pero esa no le hizo caso. Este hecho enfureció a Huari y envió plagas destructoras a la población de los Urus, en primera instancia surgió de la nada una serpiente gigante de la zona Sur, a la cual la ñusta, personificada en la Virgen del Socavón, le cortó la cabeza con una espada, convirtiendo al animal en cimas y rocas. La segunda plaga ingresó por el sector Norte, era un sapo gigante al que la joven desde lo alto del cerro, hizo girar su cabeza con una honda al aire, provocando que se convierta en una piedra. Huari se sintió más furioso por esto y mandó desde la zona Este por el sector de Cala Cala, otra plaga, un lagarto que azotaba con su enorme cola, todo lo que encontraba a su paso, al ver esto la ñusta dividió el cuerpo del animal en tres partes, se dice que de su cabeza brotaba sangre y por eso se formó una laguna en este lugar. Mientras que de su boca salieron millones de hormigas, las cuales fueron convertidas en montículos de arena, de esta forma la ñusta derrotó definitivamente a Huari, después ubicó una cruz sobre la cabeza pétrea del lagarto, lugar donde actualmente se encuentra el calvario de la población de Lagunas.