Resumen

Pág 309 - 322 Guzmán Vizarreta Angélica Erika

Shevek y el hombre yacían ocultos en el sótano, resguardado en el exterior por militares que
les matarían apenas lo vieran, tenían que huir a la Ciudad Vieja ya que el hombre estaba
herido y con una hemorragia en el abdomen, al no poder ni asomarse a ver las calles ,al día
siguiente el hombre falleció.
Capítulo 10 Anarres
En el trayecto férreo que pasa por Anarres, el conductor llevó de copiloto al único pasajero
que viajaba en el tren, conversaron amenamente después de que el hombre despertara; al
conductor le gustaba la rutina de subir al tren, hacer su recorrido por diferentes estaciones y
regresar en casa con su esposa hace mucho que no se perdía entre cada estación con las
mujeres que veía en su estancia, mientras que el pasajero con tez pálida y demacrada
agradecia el hecho de seguir vivo y poder beber agua fresca de el refrigerante del conductor
que muy amablemente le compartió después del desastre en Codo, donde un tren con víveres
fue atacado y saqueado en plena hambruna de la ciudad por los mismo habitantes al ser
explotados trabajando.
El conductor poniéndose en lugar de que su tren fuera saqueado , seguiría su camino matando
a personas entre ellas tal vez a viejos y niños que se les cruzara enfrente de los rieles pero
salvando a muchas al llegar a su destino, por otro lado el pasajero no podía solo hacer la vista
gorda y matarlos aplastados debajo del tren, para él las vidas humanas no son solo números
que puedas contar.
El pasajero en Codo trabajaba dando las raciones de alimento necesarias a cada obrero en la
Refinería, tres cuartos a los que no sufren de algún padecimiento que era fácil de contraer por
el estado en el que vivían pero si estaban enfermos, media ración lo cual no los curaba pero
seguían vivos para seguir trabajando, irónicamente él debía contar a cada uno de los obreros
por ello renunció y fue a Valle Grande, vio en la montañas desde las ventanas del tren un
dirigible donde estaban tres pasajeros.
Este mismo anudó en la montaña Riñón, de allí Shevek uno de los pasajeros bajo de camino a
Chakar a unos pocos kilómetros montaña abajo, sintió un pequeño temblor en el terreno
inestable por donde él caminaba, al llegar encontró un pueblo olvidado por el tiempo y siguió
buscando en la hacienda indicada donde se encontraría con Takver , una mujer que había
perdido la juventud pero que Shevek apreciaba profundamente y que no veía hace mucho
tiempo, detrás de ella estaba Sadik su hija que temía de Shevek pero poco después sintió
curiosidad.
Era evidente el cariño entre Shevek y Takver que incluso al verse soltaron lágrimas,es allí
cuando Sadik en muestra de afecto a Shevek le alcanzó un pañuelo de uno de los cajones del
armario detrás de ella, ambos adultos hablaron por lo que había pasado en todos esos años
que no se habían visto ni tenido ningún tipo de comunicación , hasta que era de hora de
acostar a Sadik y mientras su madre la traía en brazos de camino al dormitorio del centro de
aprendizaje, recordaba cuando anduvo sola con su hija en la planta de Investigación Rolny
donde tenían que comer no necesariamente el alimento más apetitoso pero podían tener el
estómago lleno, pero las mujeres eran recelosas con ella; decidió ir a Nuevo Principio en
invierno hace dos años y de allí a Chakar donde conoció a Sherut su compañera de cuarto que
trabaja en el hospital por la noche y la acompañaba mientras que Sidik convive con niños de
su edad en el establecimiento.