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«Los figurantes» de José Sanchis Sinisterra

METALÚRGICO 8º- A mí no es fácil desanimarme…(Repara en que no hay nadie


en escena, pero no parece importarle mucho. Mira al público y le habla con total
despreocupación, mientras inspecciona y retoca detalles de los distintos elementos
escenográficos.) Yo, la verdad, esta obra no acabo de entenderla. Empezando
porque no sé si esto es una obra… y terminando porque no sé yo de qué obra soy. Si
es que soy de alguna. Pero esto es lo bueno de estos zipizapes: que todo queda
desbaratado y patas arriba, y nadie sabe dónde tiene la cara y dónde el culo… Con
perdón… Quiero decir que las cosas ya no son lo que eran, y lo blanco se vuelve
negro y lo negro blanco, y ahora tú te bajas y yo me subo, y donde dije digo, digo
Diego, y si te he visto no me acuerdo… Y si sale con barba San Antón, y si no, la
Purísima Concepción… Y así todo. Claro que, a veces, uno se marea y no recuerda ni
cómo se llama y, según a quién, eso le pone nervioso. A mí, por ejemplo, lo de
Nicanor Jaime no me suena, para qué les voy a engañar. Y si a uno no le suena ni su
nombre, ya me dirán qué papel va a hacer en una obra que nadie sabe ni cómo
suena. No sé si me explico… A mí, por ejemplo, me gustaría hacer un monólogo en
esta obra… si es que esto es una obra. Un monólogo, sí: eso de que sales tú solo a
escena y largas un parlamento sin que nadie te interrumpa. Como en mi casa
éramos muchos y yo era uno de los más pequeños, y además tenía frenillo en la
lengua y me daba vergüenza hablar, pues casi nunca abría la boca, y siempre
soñaba con decir un monólogo. Y ahora también: casi siempre sueño en monólogos.
A lo mejor, por eso duermo tanto y tan a fondo… Ahora que lo digo:¿y si resulta que
estoy soñando? Recuerdo una obra en que a un tipo lo dormían con una droga y le
pasaban muchas cosas y se armaba un lío, porque no sabía si estaba soñando o era
de verdad… Y también decía muchos monólogos… Claro, que yo estaba casi toda la
obra durmiendo, agarrado a la lanza, y no me enteraba de mucho… ¿Esto no lo dije
antes?... Bueno, a lo que iba: ¿qué voy a decir yo aquí, si ni mi nombre me suena y
hasta decir “yo” me parece que me viene grande?... Además, para qué les voy a
engañar: tengo todo el tiempo la sensación de que estoy hablando de relleno… O
sea, que en realidad, no tengo nada que decir, y que alguien me ha puesto a hablar
aquí para cubrir un hueco… No sé si me explico. Es mucha casualidad, me parece a
mí, que justo cuando todos los demás salen y esto se queda vacío, aparezca yo aquí,
como sin querer, y me ponga a largar un parlamento… si es que esto es un
parlamento. Claro, se aprovechan de que a uno le gustaría hacer un monólogo y le
sacan precisamente cuando no hay nadie en escena… ¿Y qué va a hacer uno? No va
a dejar escapar una ocasión así y se pone a parlotear como si de verdad estuviera
haciendo un monólogo…No: esto es un truco para que la escena no se quede vacía,
mientras por ahí afuera pase lo que tiene que pasar, a mí me dan la patada y me
dejan con la palabra en la boca, y adiós muy buenas… (Bruscamente se hace el
oscuro y suena la estridente trompetería del principio. Cuando cesa, se escucha la
voz del Metalúrgico 8ª en la oscuridad.)

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