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UNIVERSIDAD DE LA REPUBLICA, FACULTAD DE CIENCIAS EL PRISMA DE Ld EVOLYCION S DE “EL ORIGEN DE LAS ESPEC F CARLOS A. ALTUNA MARTIN UBILLA EDITORES LUIS ACERENZA FERNANDO ALVAREZ FRANCISCO BOZINOVIC ALCION CHERONI MARIA NOEL CORTINAS GRACIELA GARCIA MARCO ANTONIO LARDIES MARILA LAZARO SERGIO MARTINEZ HECTOR MUSTO ESTELA SANTILLI MAR{A SIMON BETTINA TASSINO GERARDO VEROSLAVSKY Prélogo: RICARDO EHRLICH, Cronologia. LUIS ELBERT. DIR.A.C. Montevideo - Uruguay 2000 HISTORIA DE LAS IDEAS EVOLUCIONISTAS Carlos A. Altuna! No sé de un solo tratado, antiguo 0 moderno, que pueda propor- cionarme una explicacién convincente del medio que me rodea. La mitologia es lo mas cereano a lo que ando buscando. Henry D. Thoreau (1817-1862)? ES PROBABLE, Y HASTA DESEABLE QUE H. D. THOREAU HAYA LLEGADO A CO- nocer la obra de Darwin luego de elaborar la frase del acapite, aunque no ha dejado testimonio en sus escritos. Lo que es indudable es que pocas obras cientificas han modificado tan profundamente la historia del pensamiento humano como la publi- cacién, el 24 de noviembre de 1859, de El origen de las especies por medio de la se- leccién natural. Algunos autores afirman que la llamada “revolucién darwiniana’ fue de consecuencias tan drasticas como la teoria heliocéntrica de Copérnico,? 0 aun superiores.* Estas dos teorias modificaron dos conceptos profundamente arrai iga- dos: el geocentrismo y el antropocentrismo, sustituyéndolos por concepciones pro- cesualistas y materialistas que caracterizan el pensamiento cientifico moderno. 1, Seccién Etologia. Departamento de Biologia Animal. Facultad de Ciencias. Igua 4225. Montevideo 11400. Uruguay. E-mail: caltuna@ fcien.edu.uy 2. Thoreau, escritor estadounidense, fue un decidido promotor de los derechos de la conciencia indivi- dual. Entre los 28 y los 30 afios vivié solitario en una cabafia construida por él mismo a orillas de una laguna, observando 1a naturaleza y su ecologfa dinimica, y comiendo lo que podia obtener de ella. (N, de E.) 3. Copémico (Miko=aj Kopernik, latinizado Nicolaus Copernicus), astronomo y religioso polaco (1473-1543), encontr6 insuficiente el sistema geocéntrico establecido 1400 aos antes por el matemdtico, astrénomo y gedgrafo heleno-egipcia Ptolomeo (Klavdios Ptolemaios), aceptado y sostenido por la Iglesia romana, con la Tierra en el centro del Universo; en su lugar, Copérnico propuso un sistema heliocéntrico, con la Tierra y demds objetos celestes girando alrededor del Sol. Sélo se animé a publicar su teorfa a los 70 afios, muy poco antes de su muerte. La Iglesia la mantuvo condenada durante mucho tiempo después, aunque Kepler y Galileo comprobaron experimentalmente las verdades de Copémico (Ya el heleno Aristarhés de Samos, 310-230 aC, quizé el primero en elaborar una teoria heliocéntrica, habfa sido muy criticado por el oficialismo religioso de su tiempo). (N. de E.) 4. Mayr B (1972): The nature of the Darwinian revolution, Science 176: 1501-1506. Emst Mayr (n. 1904), alemén nacionalizado estadounidense, es el mayor pensador evolucionista vivo. Profesor Emérito de la Universidad de Harvard. Autor de numerosos libros sobre evolucién entre los que se destacan Animal species and evolution (1963) y Toward a new philosophy of Biology (1988). Junto a los ingleses Ronald Fisher (1890-1962) y John Haldane (1892-1964), el ucraniano y luego esta- dounidense Theodosius Dobzhansky (1900-1975), los estadounidenses Sewall Wr ‘ight (1889-1988) y George Gaylord Simpson (1902-1994) reformularon Ia teorfa evolutiva en las décadas de 1930 y ‘40, creando una nueva teorfa que incorporé la Genética de Poblaciones y los avances en diferentes reas de la Biologia formulando 1a llamada Teoria Sintética de la Evolucién. 5. Timiriizev KA (1922): El método histérico en la Biologia, Ed. Pueblos Unidos, Montevideo 1946 13 Cantos A. Altuna Aunque inmediatamente asociamos el nombre de Charles Darwin con la teoria de la evolucion, es necesario establecer que Darwin no fue el primer evolucionis- ta. ni tampoco el primero en formular una teoria completa de la evolucién biol6- gica. La Teoria de la Evolucion es el mayor marco interpretativo de los resultados, y un cuerpo de ideas unificador de toda la Biologia, Sin embargo, su importancia ex- cede ampliamente a esta ciencia, ya que ha influenciado enormemente el pensa- miento humano en casi todos sus aspectos." En Ciencias Sociales y Politicas ha si- cio utilizada por doctrinas absolutamente opuestas para explicar “naturalmente” di- versas arbitrariedades.’ Probablemente ninguna teoria haya sido objeto de tanta in- terpretacion desafortunada y contradictoria. En ese sentido ha sido tristemente de- formada por el aparato propagandistico nazi," y por el stalinismo.’ Dos frases me parecen ilustrativas de las contradicciones que genera atin dentro de un mismo sis- tema filosofico. En su Dialéctica de la Naturaleza, Engels propone: *Resulta comple- tamente pueril tratar de reunir toda la rica variedad del desarrollo y las transforma- ciones en la desmedrada frase: Lucha por la Existencia. Eso no es nada’." Véeselov nos propone sin embargo: “El darvinismo es uno de los fundamentos cientifico natu- rales del materialismo dialéctico’."' Para consultar un compendio de todos los pro- blemas que han acarreado estas malas interpretaciones, puede consultarse las ex- celentes obras de Alexander y Dennett.” Otro aspecto polémico de la teoria se refiere a los embates que ha sufrido desde posiciones creacionistas debido a que la teoria darwiniana es una explicacion pu- ramente materialista de la vida." Ha sido sistematicamente combatida desde filas cristianas fundamentalistas.'* Estando en redaccion este ensayo, las autoridades de (ver nota 35); Reig OA (1984): La Teoria de la Evolucién a los ciento veinticinco afios de “El Origen de las especies” (Ensayo histérico-epistemolégico), Actas Academia Nacional de Medici- na de Buenos Aires, 62: 545-586. Osvaldo A. Reig (1929-1992), notable paleontdlogo y bidlogo. evolucionista argentino, es autor de numerosos articulos cientificos y diversos libros entre los cua les se destaca Teoria del origen y desarrollo de la fauna de mamiferos de América del Sur (1981); ver Apéndice 1 en piig. 292. 6. Ruse M (1986): Taking Darwin seriously: A naturalistic approack to philosophy, Blackwell, Ox- ford (En castellano: Tomdndose a Darwin en serio, Salvat, Barcelona 1987); Glick TF (1989): Darwin y el darwinismo en et Uruguay y en América Latina, Universidad de la Reptblica, Facul- tad de Humanidades y Ciencias, Montevideo. 7. Altuna CA (199! ‘wolucionando, Darwin y el Arca de Noé, Posdata 241: 63-64. 8. Massin B (1991): El nazismo y la ciencia: del eugenismo a la “operacién eutanasia”, Mundo Cientffico I 1: 206-219. 9. Gould SJ (1983): Hen’s teeth and horse's toes, WW Norton, New York (En castellano: Dientes de gallina y dedos de caballo, Blume, Madrid 1984); y referencias. 10. Engels F (1876-86): Dialektik der Natur (En castellano: Dialéctica de la Naturaleza, Ed. Pueblos Unidos, Montevideo 1961). 11. Véselov EA (1955): Darvinizm, Moseti (En castellano: El. darvinismo, Ed, Pueblos Unidos, Mon- tevideo 1964). (W. de E: Algunos libros en castellano emplean la expresién “darvinismo”, en lugar de la mas corriente “darwinismo”) 12, Alexander R (1979): Darwinism and human affairs, Univ. Washington Press, Seattle (En castella- no: Darwinismo y asuntos humanos, Salvat, Barcelona 1987); Dennett DC (1995): Darwin's dan- gerous idea, Evolution and the meaning of life, Penguin, Londres. 13, Therrell J (1982): Thinking scientifically: the modern battle between evolution and creation sct- ence reveals thal many people do not understand how science works, Field Museum of Natural History Bulletin 53: 8-12; Gould SJ (1991): Bully for Brontosaurus, Reflections in natural history, WW Norton, New York (En castellano: "Brontosaurus” y la nalga del ministro, Critica, Barcelona ~, 1993), 14 Gould SJ (1980): The Panda's thumb, WW Norton, New York (En castellano: 1 pulgar del pane re Kansas han excluido la ensenanza de la evolucién en las escuelas del do. cons: tituyéndose en el octavo estado de los Estados Unidos que la prohibe en los ultimos cuatro arios."* Las ideas sobre el mundo organico en la Antigiiedad Los antecedentes del pensamiento evolucionista son multiples y se remontan a Antigtiedad. Quizas las primeras ideas explicitas puedan hallarse en las cosmo. gonias de la escuela jonica o milésica (siglo VI a. C.). Tanto Tales de Mileto, como Anaximenes y Anaximandro, se preocuparon por establecer el elemento comin del cual se originaron todas las cosas," y todos coincidieron en concebir un uni- Ferso en incesante fluir. En sus concepciones del mundo organico predomina la idea de continuidad y dinamica de la naturaleza. Esta concepcién alcanzaria su punto culminante con Heréclito, para el cual lo unico real es el cambio." En los escasos fragmentos que nos han legado, Anaximandro se refiere explicitamente al origen de la vida: “Los primeros seres vivientes se originaron en lo htimedo (el agua) envueltos en cortezas (escamas), que, al crecer se fueron trasladando a las partes mds secas.” Respecto al origen del hombre Anaximandro razona: “En un principio, nacié de criaturas de especie distinta, porque los demas seres vivos se ganan la vi- da enseguida por si mismos, y solo el hombre necesita de una larga crianza; por es. ta razon, de haber tenido su forma original desde un principio, no habria subsisti. a Ciertamente cabe destacar que todas estas ideas han sido descartadas por mu- chos evolucionistas como antecedentes, por no contemplar intrinsecamente la no- cion de “progreso” inherente a la evolucién. Lejos de cuestionar a la escuela jénico- dla, Blume, Madrid 1983. y Orbis, Madrid 1986); Schwoerbel W (1983): Evolution. Strategie des febens dynamische Biologie, Maier Verlag, Ravensburg, Baden-Wiirttenberg, Alemania (En caste, Nano: Evolucién, Salvat, Barcelona 1986) 1S. Agencia EFE, 12/9/99. El 11 de agosto de 1999, Ia Comisién de educacién publica del estado ce Kansas vot6 por una mayorfa de 6 a 4, una nueva pauta curricular en la que se reduefan signficati- vamente las referencias a la teoria de Darwin, al origen del universo y al desarrollo de la Tiecra que chocaran con el texto de la Biblia. Quedaron unas pocas referencias al cambio evolutivo, pero S6lo como variacién al interior de especies y no como transformacién de una especie en oles La Pauta fue duramente criticada; sus defensores arguyeron que no prohibfan Ia ensefanza de la eve. Iucién, y que al quitarle su carécter esencial, podta favorecerse una discusién mis amplia y li sobre el tema, confrontindolo, por ejemplo, con la doctrina cteacionista: y que el contenido prec So en este aspecto, queda librado a la administracién de los distintos distritos e in es dentro del estado de Kansas. La pauta establece también que en la prueba general de conocimienses 12 querida a todos los estudiantes que terminan Ja ensefianza secundaria en Kansas. a partir de 2001 quedan eliminadas las preguntas sobre evolucién. (N. de E.) 16, Tales (Thales, 624-546 a.C), contrariamente a las explicaciones mitsloz: fue quizas el primero en proponer un elemento material como base de todas las cosas vivientes, rol que Tales atribuy6 al agua: en Mileto (puerto de Jonia, en la costa oriental de Asia Menor) formé tuna importante escuela filossfica. Uno de sus disefpulos. Anaximandro (Anaksimandros, 610-546 2.C), descané el agua a favor de una sustancia sin limites ni forma a la que llamé “apeiron”; ovo, Anaximenes (algo mis joven) dijo que esa sustancia primordial era l aire. (N. de E) 17. Herdclito (Herakleitos, de Bieso, al este de Asia Menor, 540-480 a.C.) decia que lo permanente es sélo una ilusién de los sentidos. El elemento primordial era el fuego: forma parte de todas las sus. {ancias del universo. En su énfasis en el cambio, se le opuso Parménides (nacido en $15 aC. en Elea, ciudad helena en la costa suroeste de la actual Lucania italiana), afirmando la tnica realidad del Ser inmutable, extenso y arménico, y denunciando como falsedades las apariencias vatiadas 7 aun contradictorias de la “realidad” transmitida por los sentidos. (N. de E,) : stituci 's anteriores a su tiempo, ignora que justamente la nocion de “progreso” como elemento cambio evolutivo es altamente controversial.!* de Agrigento (490-436 a.C.) sostuvo una curiosa teoria que ilustra lus pillagoricos endian a pensar mas en términos de unidades que de conjun- ‘Seponia que, en un principio, existieron partes de animales y hombres: brazos, cabezas y organos aislados. Sobre la base de una fuerza de atraccion ‘(Pmor} se fueron produciendo combinaciones que resultaron en diferentes seres ‘Weros. Tanto el hombre como los animales surgieron por medio de este mecanism ‘ambfen surgieron combinaciones monstruosas, que no pudieron sobrevivir. En es. ta concepeién se ha pretendido ver una anticipacién al principio de supervivencia Gel mas apto. Desde mi punto de vista, es sumamente interesante destacar que en 's sxplicacion del origen de las especies de Empédocles, se involucran aspectos alcatorios y deterministicos propios de las dos etapas del proceso de seleccién natu, ral darwiniana. Con posterioridad a esta escuela, la monumental influencia de Socrates, Platon x. fandamentalmente, Aristoteles neutralizaron, al menos en el pensamiento occi- Gental, las concepciones dinamicas del mundo organico. El esencialismo platénico es quizas una de las manifestaciones mas claras de la imposibilidad de continuar buscando explicaciones materialistas del origen y diversidad de la vida. Los objetos. como animales y plantas, y aun el hombre, son documentos por medio de los cuales Su esencia trata de expresarse ante nosotros.” El mundo organico para Platén y Azistoteles es, por definicién, fijo y estatico. Aristoteles inicia el estudio y ordenacién de las diversas formas de vida animal: asimismo su discipulo Teofrasto realiza una tarea similar con respecto a las plan- tas.” Aristételes reconocié algunos problemas centrales en la Biologia: los de In se. swalidad, el crecimiento, la nutricion, entre otros. Dedujo que la Naturaleza progre- Sa desde lo mas simple a lo mas complejo. De lo inanimado se pasa a lo animado, ¥ Gentro de lo animado, por pequenos pasos ascendentes de las plantas, a los ani. males-plantas (2o6fitos, como los corales) y luego a los animales. A su vez, las di. 18, Huxley J (1943): Evolution: the modern synthesis, Allen & Unwin, Londres (En castellano: La Evolucién. Sintesis moderna, Losada, Buenos Aires 1965); Prenant M (1940): Darwin et le darvi. ‘risme, Nouvelle Presse, Paris (En castellano: Darwin y el darvinismo, Ed. Pueblos Unidos, Mon- tevideo 1947, y Grijalbo, México 1969); Thoday JM (1962): The natural selection and the biolo. gical progress, en Barnett SA (ed.) A century of Darwin, Heinemann, Londres (En castellano: La seleecién natural y el progreso bioldgico, pp. 183-208 de Un siglo después de Darwin vol 1 Alianza, Madrid 1985). 1S: Socrates (Sokrates, de Atenas, 469-399 a.C.) entendié al universo como un ordenamiento inteli- gente; su contribucién mayor fue, sin embargo, su método de ensefianza, en que cada cuestion era examinada hasta determinar, por sus implicaciones y consecuencias, si era verdadera o falsa. Su ciscfpulo Platén (Plato, 427-347 aC.) convencido también de la estructura armoniosa del univer So, avanz6 hasta considerar que entre el alma, el estado y el cosmos habia una relacién racional; ‘odo ello expresado en libros cuya inteligencia y soberbia escritura, maravillan a los estudiosos ‘einticuatro siglos después. Arist6teles (dristoteles, de Stagira, en Calcfdica, Macedonia, 384.322 3C) fue a su vez discipulo de Platén en la Academia de éste en Atenas, y fund luego su propia escuela en el barrio ateniense de Lukaios (Liceo); consideré la filosotia como una totalidad onde ade del saber humano, y ademds de sus muy notables aportes en I6gica, estudis los animales (de {os que hizo una clasficacisn pionera), el cielo, el alma, la moral la metafisca, la sociedad, la po- ‘itica, 1a literatura, el arte; influy6 decisivamente en el pensamiento de épocas muy posteriores y se Jo sigue considerando un fundamento de la cultura universal. (N. de E) 20, Teofrasto (TheojPastos, de Lesbos, 372-287 aC.) habia sido también discfpulo de PlatSn, Avistte- ics Ie cambi6 el nombre de Tyrtanos por Teofrasto, que significa “divino hablador”. Ditigis el Li- ce0 2 la muerte de su fundador y maestro. (N. de E:) Historia de las ideas ev versas formas de vida presentan diferentes cualidades del alma. La cualidad mas simple es la nutricion, manifestada por las plantas que toman alimentos con sus raices, la cualidad mas compleja y elaborada del alma o psique se presenta en el hombre quien puede formar conceptos, generalizar, simbolizar y abstraerse de 1a realidad. Reconoce la existencia de una scala naturae 0 “Gran cadena de seres” co mo s¢ llamaria luego, donde clasifica a los animales en ocho grandes grupos. Dedi- C6 diversas obras a la Biologia: De la generacién, Las partes de los animales y varios tomos y ediciones de su Historia animalium. La influencia de Aristateles en la cien- cia medieval fue sustancial a través de la escuela escolastica, sustentando posicio- nes creacionistas y fijistas que se mantuvieron como dogma conveniente en un ex- tenso periodo de 1a historia dominado por la omnipresente religion cristiana. Entre los fildsofos de la antigiedad atin encontramos algunos originales plan- teos como los de Lucrecio (98 a.C - 55 d.C), poeta pompeyano que desarroll6 las ideas de Demécrito y Epicuro,”' y en su obra De rerum natura intenta explicar el origen del universo y la Tierra solamente sobre la base de causas fisicas.” Una vez formada la Tierra nacieron los seres vivos, de los cuales algunos se extinguieron. Aunque vaga y poco clara, la concepcién de Lucrecio era fuertemente evolucionista, explicando inclusive la evolucién de la humanidad a partir de hombres rudos y des. conocedores del fuego y el arado, hasta formas de vida mas organizadas que se fa- miliarizaron con el uso de herramientas, descubrieron y utilizaron los metales, al- canzando finalmente la cumbre de la civilizacion caracterizada por las Artes y las Ciencias. La Edad Media y el Renacimiento El pensamiento aristotélico, sostenido por la escuela escolastica y la Iglesia, dominé ampliamente, en estos periodos, por sobre cualquier tendencia aislada;” aunque al- gunos autores (Templado, Montalenti) pretenden ver una forma de evolucionismo en el pensamiento de San Agustin (s. IV) y San Alberto Magno (s. XIII).2* 21. Demécrito (Demokritos, de Abdera, en Tracia, 460-370 a.C.) desarroll6 la teorfa de su maestro Leucipo (Leukippos): el Universo se compone de infinidad de étomos, todos homogéneos e igua- les, separados por vacfo (teorfa muy opuesta a la de Parménides), y enfatizé que las formas y colo- res son subjetivos. Epicuro (Epikouros, de Samos, 341-270 a.C.) aprendié mucho de Demécrito: tuvo también una cosmologfa atomista, matetialista y fisico-mecénica: y ademés, tuvo su famosa teorfa del conocimiento hedonista y sensual, muy extendida por el Mediterrdneo y bastante popular durante trescientos afios. (N. de E,) 22. Lucrecio (Titus Lucretius Carus), de Roma, 98/55 a.C. En la linea propuesta por Epicuro dos sigios antes, quiso eliminar el temor a los dioses dando una explicacién material al universo fisico: los obje- tos y los seres vivos estén formados por una combinacién de étomos de materia. Imaginacién podero- samente realista, entusiasmo persuasivo, intensidad poética y coherencia filoséfiea, adoman los seis libros de su epopeya De rerum natura (Sobre la naturaleza de las cosas). (V. de E. 23. La Escolistica define una corriente de la filosofa cristiana, que pricticamente monopoliz6 el pen- samiento occidental a partir de Anselmo (1033-1109), un noble lomibardo que se hizo monje bene- dictino en Francia, lleg6 a arzobispo de Canterbury desde 1093, y a santo de la Iglesia algunas dé- cadas mds tarde; Anselmo adopté como guia la frase “fides querens intelligentia’” (la fe en busca del entendimiento). La Escoléstica tuvo su mayor desarrollo desde principios del siglo XIII, cuan- do se conocieron en Occidente muchos escritos de Aristoteles. (V. de E,) 24. Agustin (Augustinus, del norte del Africa romana, 354-430) dej6 una intensa y extensa obra teolé- gica, de fuerte contenido neo-platénico, de gran influencia en pensadores posteriores. Alberto el Grande (4thertus Magnus, de Suabia, 1200-1280), dominico que recorrié el Sacro Imperio Roma- no-Germénico hasta concentrar finalmente sus ensefianzas en la Universidad de Paris, fue el pri A Carlos A. Altuna Es necesario llegar al siglo XVI para asombrarse con los multiples gérmenes de pensamiento evoluctonista que surgen simultaneamente y desde diversas areas del conocimiento. Se encuentran propuestas antifijistas y anticreacionistas en las obras de Giulio Cesare Vanini (nacido en Taurisano, Lecce, en 1585, y muerto en la hoguera en Toulouse en 1619) y Giordano Bruno (nacido en Nola, Napoles, en 1548, y muerto en la hoguera en Roma en 1600), cuyos escritos criticaban abiertamente las pro- Duestas de los escolasticos, pero su obra ha llegado a nosotros en forma fragmenta- ria. Es bastante grafico advertir el final de ambos para entender los peligros de pre- tender cuestionar el dogma creacionista.** Leonardo da Vinci (1452-1519) en su Codice Leicester manifiesta con suma cla- ridad sus dudas respecto del relato de la creacion, del diluvio universal y de la na- turaleza y significado de los fésiles. Merecen destacarse en el siglo XVI, las ideas expresadas en textos de varios eclesiasticos como el jesuita espatiol José de Acosta, quien recorrié América del Sur ¥ México donde desarroll6 su labor evangelizadora. Su obra mas importante, Histo- ria natural y moral de las Indias, describe el mundo fisico y biolégico, la vida y cos- tumbres de los indigenas americanos, manifestando en toda su obra una gran in- dependencia de las ideas preestablecidas en torno al origen de la fauna y flora de América.”* Realiza un excepcional aporte biogeografico, y duda explicitamente del relato biblico del Arca de Noé.”" Casi simultaneamente, en 1559, el monje aleman Johannes Buteo escribia un ensayo llamado Sobre el Arca de Noé: de su forma y sit arqueo:** en él manifiesta que, antes del diluvio universal, debieron existir solo unas Pocas especies principales de animales, pues de otra forma no hubiera sido posible mer gran aristotélico de la Escolistica; tenfa un fuerte interés en el estudio cientifico de la natura- leza, desde las combinaciones de metales hasta notables observaciones hoténicas (De vegetabili- us); tavo gran influencia sobre su disefpulo favorito Tomas de Aquino. /\. de E.) 25. Vanini cuestioné ta inmortalidad del alma en su libro Amphitheatrum eterne Providentice, ysu Secretos de la naturaleza fue censurado por la Sorbonne; siendo maestro en Toulouse, el procura- dor general lo acusé de magia y astrologfa, y ya est. Giordano Bruno era dominico, pero a los 28 afios fue acusado de herejia y huy6 de la orden y de Italia; viajé bastante y escribié de muchos te- mas, criticando a Aristételes y siguiendo entusiastamente a Copémico; vuelto a Venecia, lo apresé Ja Inquisicién, tuvo un proceso de algunos afios, y ya esta. (N. de E.) 26. José de Acosta (1540-1600). Nacido en Valladolid. Sacerdote de la Compafifa de Jestis. En 1570 viaj6 a Pert donde realizé su labor apostélica. Posteriormente se trasladé a México, en 1587 r “ere- 86 a Espaita. La obra mencionada se publicé en 1590, con el titulo completo Historia natural y moral de las Indias, en que se tratan las cosas notables del Cielo, elementos, metales, plantas y animales deltas, y los ritos y ceremonias, leyes y gobierno y guerra de los Indios. Sélo se reedité tres siglos después; saque el lector sus conclusiones al respecte, 27. Cuando Dios decidié: liquidar los pecados del mundo hundiéndolo bajo el Diluvio, los tnicos a salvar fueron Noé (Noah) y su familia, mediante una embareacién (cl Arca) a la que accederian también parejas de ejemplares de los animales vivientes. El relato, recogido en el libro biblico del Génesis (capitulos 6 al 9) tiene antecedentes en leyendas sumerio-babilénicas donde Ut-Napi®tim » su esposa fueron Ios tinicos salvados de un diluvio; también en la mitologfa griega, donde Deu- ‘lion (hijo de Prometeo) y su esposa Pirra fueron Ios tinicos emergentes de la gran anegacién en ada por Zeus a la Tierra. Algunas opiniones arqueolégicas ubican un diluvio alrededor del 3000 \. de E) es el nombre latino del monje francés Jean Botéon (1492-1570), de ascendencia ermana. Vivid en la zona del Rédano medio, aunque estudié algunos afios en Paris, Fuc un importante estudioso de la matemética y. al parecer, bastante erftico hacia sus colegas so- bre todo en cuestiones terminolé: habfa estudiado Tinguistica). Su libro mas importante. gebra. (V. de E) Historia de las ideas evolucionistas Construir una nave de tamano adecuado para incluir una pareja de cada especie. Gabe recordar aqui que el Beagle, velero en el cual Darwin realiz6 su extenso viale, cargaba unas 240 toneladas, y que una pareja de ballenas azules (Balaenoptera musculus) pesa aproximadamente 280 toneladas. René Descartes (1596-1650), rechaz6 los principios escolasticos, y consagré los de un nuevo metodo de andlisis (cartesianismo), sostuvo algunas ideas discordantes Con la concepcion estatica escolastica, pero desistio de ellas por “miedo a la lalesia ¥ aversion al infiemo”. Su concepcion de la vida es abiertamente mecanicisiz, los fhimales y el hombre son maquinas, la diferencia cualitativa entre ambos c= que los animales no tienen intelecto ni conciencia: “comen sin ganas, crecen sin saberio no ansian nada, Dios ha organizado su cuerpo para Ia finalidad de su propia con. vacion". Esta propuesta mecanicista es ablertamente opuesta a la sostenida por escuela escolastica.”” Los antecedentes cercanos Uno de los cambios sustanciales en el pensamiento cientifico fue la introduccién de a idea de transformacién de wna especie en otra en el transcurso del tiempo. quic es un concepto esencial en evolucion. Dos originales pensadores franceses desarrolla. ron independientemente el concepto de transformacién de los seres: Benoit de Mai- Het (1656-1738) y Louis Moreau de Maupertuis (1698-1759). De Maillet fue un a. todidacta que dejé una curiosa obra postuma con el insdlito nombre Conversacto. nes de un filésofo indio con un misionero francés sobre la disminucién del mer (17 donde desarrolia ideas -algunas acertadas y otras muy fantasticas, sobre sedimen. ologia y el significado de los f6siles. En su libro explicitamente propone la trans. formacion stibita de una especie en otra y sostiene el origen marino de la vide Maupertuis fue un célebre matematico, fil6sofo y bidlogo, que presidié la Acade- mia de Ciencias de Berlin. En 1745 publico, anénimo, una curiosa obra llamada Vénus physique, que contiene tres capitulos centrales: el primero sobre amor. re- produccion y embriologia, otro sobre el origen de los hombres y los animales y un tercero sobre el origen de los negros. Respecto de la reproduccién, sus obsena no tiene relacion alguna con el sistema reproductor, y actuaria en la estimulacion sexual. Maupertuis interpreta: "¢Cudl es la funcién de este drgano? Tal ve este animal, tan Jrfo y lento en todos sus actos necesita sentirse excitado por estos pin: chazos. Los hombres a los que la edad ha vuelto frios, 0 cuyos sentidos ve han debit tado, recurren a veces a medios igualmente violentos para despertar en st las pasio. nes del amor.” En esta obra, también expone observaciones sobre la herencia y aly gunas ideas sobre la aparicion fortuita de variaciones y cierta forma de seleccion Sobre esias variantes. En El sistema de la Naturaleza (1754) no excluye la posibi dad de que el clima y la alimentacién provoquen variaciones en la herencia, aunque las variaciones que aparecen en las poblaciones naturales las atribuye fundamen, 29. El principal interés de Descartes (latinizado Renarus Cartesius) fue la matemtica, y se le atibuye Ia ereacién de la geometra analiticn; pero su trabajo abared también Ia fiosoffa la légica, la 6p ca, Ia fisiologia y Ia psicologfa. Siguiendo al filésofo inglés Francis Bacon (1561-1626), tendid « rechazar toda teoria que no estuviera apoyada en datos de la experiencia, aunque a ello sumé las conclusiones que podia obtener mediante su riguroso racionalismo. Convencido catdlico, tato de conciliar sus ereencias con su ciencia, lo cual lo enfrent6 a jerarcas de la Iglesia, Su filosofifa abrié caminos que siguieron muchos de los mayores pensadores modernos.(N. de E) a 19 Carlos A, Altuna talmente a accidentes fortuitos sufridos por los gérmenes (gametos). Con respecto al origen de las diferentes especies propone: “Todas ellas deberian su origen a algunas producciones fortuitas, cuyas partes elementales no habrian retenido el orden que te- nian en las animales padre y madre. Cada grado de error habria producido una nue- va especie; y a fuerza de variaciones repetidas, se habria originado la diversidad in- finita de los animales que vemos hoy’. Algunos notables personajes de la historia del pensamiento aportaron ideas des- de la matematica y la filosofia. Uno a destacar es el germano Gottfried Wilhelm Leibniz (1646-1716),*° uno de los principales exponentes de la Naturphilosophie. Pa- ra Leibniz los seres organicos nunca surgen del caos sino de “semillas” que se ex- tienden y desarrollan (evolucién), viven, crecen y mueren (involucién). Esta teoria de Ja “evolucion individual” (ontogenética, diriamos hoy). se completa con algunos aportes filogenéticos reflexionando sobre las relaciones y posible origen de las espe- cies: “Es posible que en algun tiempo o algiin tugar del Universo las especies se ha- llacen mas sometidas al cambio de lo que ocurre entre nosotros, y que varios anima- les como el leén, el tigre, y el lince, hayan pertenecidio a la misma raza y puedan con- siderarse ahora como subdivisiones de la antigua especie cel gato". En su Protogaea (1698) explica sus pensamientos acerca de como se formé nuestra Tierra, de la na- turaleza ignea de su interior, y particularmente de la significacién de los fosiles. Pa- ta Leibniz éstos demuestran ia dinamica de la corteza terresire (“hubo océanos don- de hay montarias"), postula el origen acuatico de la vida, y la posterior conquista del medio terrestre. Establece que “Los hombres se hallan enlazacios con los animales, éstos con las plantas y éstas con los fésiles". Sus principios tedricos sobre los esta- dios del desarrollo y la continuidad de la vida preludian claramente los estudios comparativos de los organismos. Varios de sus seguidores tomaron y desarrollaron en profundidad la idea de con- Unuidad del mundo organico. Probablemente el mas importante entre éstos haya sido el suizo Charles Bonnet (1720-1793), destacado zodlogo, botanico y filésofo.*! Dedico muchos arios al estudio de la morfologia y embriologia de los insectos. A los veinte anos de edad demuestra experimentalmente la reproduccién partenogenética en Afidos (‘pulgones"), siendo el mayor ejemplo de precocidad en la historia de las ciencias experimentales, y valiéndole la membresia de la Academia de Ciencias de Paris. Continuando el pensamiento de Leibnitz, propone una gran escala de los se- res que van pasando de escalén a escalén por formas intermedias: asi las babosas son la transicion entre los moluscos y los reptiles, las anguilas lo son entre los pe- ces y los reptiles, y los murciélagos representan la transicién entre las aves y los cuadruipedos. Esta Cadena Universal progresa desde los minerales a los minerales mas perfectos (los fosiles), asciende desde los corales, liquenes y hongos hacia las plantas, y de éstas a los gusanos, los moluscos, peces, aves, murciélagos, cuadri- pedos, monos y el hombre. Por cierto, la escala no termina con el hombre ya que a éste le prosiguen angeles y arcangeles, formula elegante para congraciarse con la Iglesia. Bonnet se cuestiona respecto de la antigitedad del mundo, proponiendo que Se originé mucho antes de lo que nos dice Moisés.” Postula que desde su creacion, 30. Célebre fil6sofo y matemtico alemsn, nacido en Leipzig. Descubrié, al mismo tiempo que New- ton el célculo infinitesimal, Entre sus obras merecen destacarse: Monadologia y Nuevo tratado so- bre el entendimiento humano. 31. Nacido en Ginebra, Bonnet fue autor de una extensa obra biolégica y filos6fica a pesar de sus difi- Cultades fisicas: sordera erdnica y limitadisima vista desde los veinticinco afios de edad. Advirtié Con agudeza respecto de las similitudes del hombre y los monos: “Seres tan parecidos al hombre gue los caracteres que les distinguen no parecen tanto caracteres fisicos sino meras variedades.” 32. Figura central del Antiguo Testamento biblico, Moisés (Mose) habria conducido a los hebreos des- de el norte de Egipto hasta la frontera de Canaan, durante la primera mitad del siglo XIII a.C., 20 4 Historia de las ideas evolucion _ i...sssesesss del uni resohamente relacionados, todo organismo ha asumido tna nueva inn [euolucién terrestre. En 1764 escribe: “Todas las combinaciones ae Particulas de ma ‘era que han podido formarse se han formado, y han producide ong, tantas especie: diversas, otras particulas, unidas a estas especies hin formado nuevas combina ‘Nuestras clasificaciones constituiran en lo posible, genealogias; y etonces reflejarin verdaderamente lo que podemos lla & plan de la creacién’, Charles Darwin (El origen..., 1859), Uno de los aportes mas notables a la Biologia del siglo XVIII lo constituy6 la obra del botanico sueco Carl von Linné (1707-1778), el fundador de la Sistematica.” Su obra Systema Naturae aparecié en 1735 como un modesta folleto de catorce pagi- celta’ uve inmediatamente enorme repercusién. Se sucedieron ediciones; la mas exitosa, de 1758, ya incluia una enorme enumeracion de animales y plantas orde- pacas. de acuerdo con su sistema, en 10.000 especies de plantas y 4028 de anima- les. Un primer aporte sustancial fue la creacién del Sistema Binario de clasificacion, €l método linneano es preciso, arménico y comodo para clasificar sin ambigtiedades los organismos. A cada especie animal o vegetal le corresponde un tinico nombre la- ficatorio se mantiene en nuestros dias. PL ordenamiento es jerarquico: las especies se agrupan en géneros, éstos en fa- milias y asi sucesivamente. Un primer elemento de importancia insoslayable es que ef Sistema lnneano permite agrupar los seres vivos ‘por auc afinidades. Asi por —Lr—OGOseSNSsSsa<‘Ciri'rYsristéséS+'vmWW""_"i_'im'" leo, el tigre con Amenudo infructuosa, La tradici6n lo ubiea como autor de la Torah, einec libros cl primero de ellos es el Libro del Principio, conocido (de su ver. ap, Por Dios: la antigtiedad de este hecho fue ubicada diversamente entre 5309 y 3761 aftos an- tes de Cristo, por varios eruditos que entre los siglos Ill y XVII d.c rodujeron calendarios (basa- dos principalmente en la cronologfa biblica) cuya datacion de aflos amie con Ia Creacién. Re~ cién a mediados del siglo XVITT empezé a abritse camino en Europa, muy lentamente, la idea de gue el universo podia ser més antiguo. (N, de E,) 33. Linné escribi6 sus obras en latin (como Especies de plantas (1753) ya describia criterio a los animales. (NV de E,) 34. Véselov, op .cit, 21 Carlos A, Altuna Felis tigris. Agrupo el género de los gatos con otros géneros en el Orden de los Car- nivoros (Carnivora) y todos los érdenes de mamiferos en la clase Mammalia. A pesar de que este ordenamiento a todas luces evidencia afinidades entre especies, Linneo refutaba la existencia de relaciones de afinidad entre ellas. Gracias a la utilizacion de estas categorias sisteméticas, de la exacta y clara terminologia y de la nomenclatura binaria latina se puso fin a la confusion que im- peraba y se contribuyo al mejor ordenamiento de los seres vivos. Linneo divide el reino animal en seis clases: Mamiferos, Aves, Anfibios (los actuales anfibios y repti- les), Peces, Insectos y Gusanos, que son hasicamente las divisiones que habia pro- Duesto Aristoteles. La clasificacion de las plantas es ms dificultosa por el mimero de especies que Linneo reconocia, crea entonces veinticuatro clases, que son para Timirazev “una clasificacis erable por su elegante sencillez".*> La concepcién del mundo organico de Linneo es sustanclalmente la misma que la de Platén y los escolasticos, toda la obra linneana esta salpicada de frases bibli cas de alabanza a la Creacion, las especies que él nomina son las que Dios ha crea~ do. Recién al final de su vida en su Fundamenta fructificationis, de 1762, admite que podria existir un tronco comin para todas las especies de un género, y que, en cl caso de las cuatro especies de juncos que él reconoce, podrian haberse originado a partir de la mas primitiva. A pesar de su creacionismo y fijismo, con el establecimiento del Systema Natu- rae, la diversidad organica se orden6 y fue posible comenzar a trabajar un pensa~ miento evolucionista en base al parentesco sistematico de las especies. Uno de los precursores del evolucionismo fue el propio abuelo de Charles Dar- win: Erasmus Darwin (1731-1802), médico, naturalista, filosofo y excéntrico inven- tor. Erasmus sostuvo ideas que se inscribian en el Hamado “Transformismo’, escri- bio su Zoonomia o Leyes de la Vida Organica donde expone puntos de vista que son muy parecidos a los que propondra luego Lamarck, obra que alcanz6 bastante éxi- to. También public numerosos poemas transformistas y algunos sobre el amor en- re las plantas. A Erasmus Darwin le lamaron la atencién los organos rudimenta- tos en los animales y los casos de mimetismo. Consideraba que la variacion exis- tente entre las especies estaba provocada por las condiciones climaticas y en algu- nos casos por la domesticacién, se interes también por el surgimiento de varieda- des por hibridacién. Concibio un transformismo generalizado, en su Zoonomia pro- Pone: “¢Seria una temeridad imaginar que en la larga serie de siglos pasados desde {a creacién del mundo, quizés varios millones de anos antes de la historia del género fumano, seria, digo yo, una temeridad imaginar que todos los animales de sangre ca~ liente han provenido de un filamento viviente que la Gran Causa Primera ha dotado de animalidad, con ta facuitad de adquirir nuevas partes acompariadas de nuevas inclinaciones dirigidas por irritaciones, sensaciones, voliciones y asociaciones, y ast boseer la facultad de continuar perfecciondndose por su propia actividad, y transmitir estos perfeccionamientos a la descendencia de generacin en generacién y por los si- glos de los sigios?”. Extiende esta concepcién a todos los animales y plantas ya que “una sola y misma especie de filamentos vivientes es, y ha sido, la causa de toda la vida orgénica”. Para Erasmus Darwin, claramente los primeros filamentos vivientes habrian surgido por generacin espontanea. Numerosos transformistas habian desarrollado sus ideas en distintos paises de Europa, particularmente importantes fueron Mihail Lomonosov en Rusia, Georges- 35. Timirdzey, op cit. nota 5. Kliment Arkad'evié Timirizev (1843-1920) fue uno de los mayores natu- Talistas rusos, investigador experimental de sélidas bases, y un hombre de amplisima cultura Atendi6 tempranamente las tesis evolucionistas de Darwin, y polemiz6 sobre ellas con sus colegas. En 1907-09 edité en Mosci 8 tomos con obras de Darwin, £! método histérico en la Biologia, uno de sus tiltimos trabajos, fue publicado después de su muerte. (N. de E,) 22 Historia de las ideas evolucionistas Louis Leclerc de Buffon y Geoffroy Saint-Hilaire en Francia. También Goethe parti- cip6 activamente en los debates transformistas en Alemania Mihail Lomonosov (1711-1765) trabajé en muy variados campos, desde la astro- nomia a la geologia, de la poesia a la biologia. Para Lomonosov, el desarrollo ininte- rrumpido de la naturaleza se debe a causas naturales y materiales: “le materia es Io que compone un cuerpo y de lo que depende ta esencia de éste”. En Sobre las capas terrestres expone sus ideas acerca de las modificaciones que ha sufrido nuestro planeta con la formacién de montanas, valles, rios y mares. Se enfrenta ala cosmo. gonia biblica considerando que el untverso es muy antiguo y que en la superficie de la Tierra se han producido enormes cambios. Una de las principales casas del cambio en la corteza son las diferencias de calor que llevan a movimientos de las tocas. En base a estas transformaciones también variaba él clima y, consecuente- mente, la flora y Ia fauna. Georges Buffon nacio en 1707 (el mismo afio que Linneo), y fallecié en 1788. Fue uno de los cientificos mas brillantes de la Ilustracion francesa. Dedicé toda su vi- da a los estudios naturales y los condens6 en la monumental Histoire Naturelle, obra compuesta de cuarenta y cuatro voltimenes. Sus principales consideraciones sobre el origen y evolucién de las formas las incluye en su Théorie de la Terre (1778). Button fue al principio creacionista y fijista, y a fines de su vida desarrollo un transformismo confuso. Sus ideas, en ese sentido, son poco claras y contradic- torias, es muy probable que la inconsistencia de sus planteos se haya debido a sus creencias religiosas y a la temible censura que ejercian los tedlogos de la Sorbonne. Muchos estudiosos de la obra de Buffon convienen en que aporté una enorme can. tidad de elementos para que su discipulo Lamarck construyera su teoria, pero que no puede considerarse a Buffon como transformista. La Academia de Ciencias de Paris lego a considerar herética su obra y fueron quemados ejemplares de sus li- bros, en virtud de lo cual tuvo que renunciar en publico a sus convicciones. Al igual que Erasmus Darwin, sigue sosteniendo la generacién espontanea. Sin embargo aporta monumentales estudios sobre la zoologia de los vertebrados. Propone siete €pocas histéricas de la tierra, su origen igneo, el progresivo enfriamiento, la con. densacion del agua, la creacién y separacién de los continentes. Esta separacion explica las diferencias entre las faunas. Buffon llama la atencién sobre la unidad de estructura de todos los vertebrados, incluido el hombre, y en las similitudes de la Columna vertebral y los diferentes érganos, estableciendo que existen partes pri- mordiales que caracterizan las diferentes familias. El hombre presenta las mismas partes que un simio, el caballo que los asnos, por lo cual es posible identificar fami. lias de animales. Sin embargo, su transformismo limitado, lo leva a formular una Propuesta literalmente inversa a los conocimientos de la evolucién de las especies que hoy tenemos. Si Dios creo al hombre a su imagen y semejanza, y éste comparte un plan de organizacién que lo lleva a integrar una familia comtin, gcomo explicar el origen de los simios? La explicacién es que los simios se originaron del hombre por degeneracion, son por asi decirlo hombres imperfectos, tanto como el caballo degeneré en burro. 36. En la historia cultural de Occidente, el término Hustracién se refiere a una amplia corriente de pensamiento del siglo XVIII, caracterizada por la intencién de un acercamiento cientifico a los te- mas sociales y politicos, un sentido del progreso humano basado en Ja “ley natural” y el orden universal, y la ereencia en el Estado como su mejor instrumento. Sus antecedentes estén en el siglo anterior, con sus enormes avances intelectuales y cientificos encarnados en pensadores como los ingleses Francis Bacon y John Locke, el francés René Descartes, y el judeo-holandés Baruch Spi- noza. Ya en el mismo siglo XVIII, hacen aportes fundamentales los pensadores franceses Voltaire y Montesquieu, el suizo-francés Jean-Jacques Rousseau, el inglés David Hume y el prusiano Immanuel Kant. (N. de E,) 23 i. tations 4. Altea Bafion se adelanta formidablemente a algunos conceptos actuales como el del wisiemicnto reproductivo entre especies. Pertenecen a igual especie los individuos ora parte, la categoria linneana de género, donde simplemente se retinen artificial- mente Jas especies. En contra de las posiciones sostenidas por los Enciclopedistas come Voltaire, sostiene un origen comun para todas las razas humanas, manejando como argumento central la interfecundidad entre las razas.”’ Para Buffon, las razas humanas se han formado en respuesta a las condiciones climaticas, Es pertinente Sehalar que “cl clima” no solo refiere a condiciones de humedad, temperatura, resi. uenes de Iluvia y otras variables fisicas sino que, a través de éstas, se producen di ferencias en las formas de alimentacion y de vivienda. Asi, Buffon hace intervenir factores culturales en las modificaciones fisicas del hombre. En el volumen Ill de ou Histoire Naturelle sostiene: “Todo tiende a probar que el género humano no estd com. puesto de especies esencialmente diferentes, sino que ha habido una sola especie de hombres que, habiéndose multiplicado y extendido por la superficie de Ia tierra, ha su- Srido diferentes cambios por la influercia del clima, por las diferencias de alimarnn Cion, de las enfermedades epidémicas y también de ia mezcla de los individuos”. Las observaciones sobre la domesticacion de animales, la cruza y la hibridacion on ance Iados en profundidad en varias de sus obras, la introduccién de sementales no emparentados es, justamente, una prueba en favor de su teoria de Ia degeneracion. Considerando a los predecesores, Buffon aporta una concepeién diferente de la naturaleza, los estudiosos deben explicar no el ordenamiento del sistema natural Gomo 'o hizo Linneo, sino los procesos implicadlos en la produccién (reproduccion) fie individuos y especies. A su vez, en su concepeién contraria a la creacion divine, los procesos naturales se desarrollan en el tiempo y en el espacio, y estan ligados a la historia de la Tierra, Una de las formas de estudiar esta historia son los fosiles due indican la existencia de variedades extinguidas, y de faunas tropicales en re, giones actualmente templadas o muy frias. Vale la pena mencionar que los acadé- micos de Paris, atin mantenian como fecha probable de la creacién las estimaciones cronolégicas del arzobispo James Ussher, que habia concluido que la Tierra habia sido creada en el afio 4004 a.C., mas precisamente el 23 de octubre de ese aiio;* el inglés John Lightfoot, Profesor y Vicerrector de la Universidad de Cambridge, ya habia dicho que la Creacion ocurrié a las nueve en punto de la mariana.” Un aspecto menos conocido de su obra refiere a que los animales deben ser ob- Servados en sus costumbres y no sélo disecados, practics en cierto modo una forma de Etologia ingenua. La preocupacion por los procesos de reproduccién de individuos y de produccion de nuevas variedades y especies no encuentran claras explicaciones en'la obra de este Cientifico, pero indudablemente sefalan un camino hacia el cual dirigiran sus Preocupaciones Lamarck y, fundamentalmente, Charles Darwin es eee 37. Este debate va a continuar en la Academia de Ciencias al menos hasta fines del siglo XIX, aunque de alguna forma se ha continuado debatiendo en el XX. Ver Gould (1980) op.cit., y referencias. 38. Ver nota 32. Ussher (1581-1656), arzobispo de Armagh y primado de Irlanda, publicé en 1650 la cronologia mds detallada de la historia de fuente biblica. Basado en célculos matemdticos y astro- n6micos de ciclos lunares y solares, y en todos los documentos semitas y biblicos que pudo hallar, establecié 1a Creacién del universo el domingo 23 de octubre del afio 4004 aC. y feché con preci- 39. Lightfoot (1602-1675) era considerado uno de los hebrafstas mas eruditos de su tiempo, experto en cl Antiguo Testamento; desde esa especialidad, también escribic libros analizando Ine Evangelios. Su célculo horario fue realizado en 1644. (N. de E,) 24 ee Historia de las ideas evolucionistas Lamarck: hacia la primera teoria “Lamarck presté el eminente servicio de llamar la atencin sobre la posibilidad de que cualquier cambio, tanto del mundo organico como inorgdnice, sea el resultado de una ley, no de una interven- cin milagrosa.” Charles Darwin, 1872. “En efecto, sélo dos teorias de la evolucién han avanzado, una que se origina con Lamarck, y otra que se origina con Darwin.” John Maynard Smith, 1966. Jean Baptiste de Monet, Caballero de Lamarck, nacié en 1744 y falleci6 en 1829. Comparando la vida de Lamarci con la de Darwin, se tiene la im- presion de que a éste le salié casi todo bien, en tanto que a Lamarck, casi todo mal. Lamarck comenz6 sus estudios eclesisticos tempranamente educandose en una fe que nunca abandon. A los dieciséis afos ingreso en el ejérci- to, llegando a ser oficial destacado por su valentia en la guerra. Una herida de batalla le ocasioné le- siones permanentes que le obligaron a dejar la ca- rrera de las armas. Desempefié diversas activida- des estudiando medicina, musica, meteorologia (llegando incluso a proponer un sistema original de clasificacién de las nubes), pero destaca parti- cularmente en botanica. Realiza una importante tarea de anatomia y sistematica de plantas. Intro- duce el empleo en la clasificacion y sistematica de un instrumento que atin utilizamos: las claves di- cotomicas. En 1778 publica su Flore francaise, que merece el reconocimiento de su maestro Buffon, quien lo propone como miem- bro de la Academia de Ciencias. En 1781, también a propuesta de su maestro, ocu- pa un puesto en el Jardin Botanico Real; con el cierre de éste en plena Revolucion Francesa pasa a ser Bibliotecario del Museo de Historia Natural. Recién en 1793, casi a los 50 afios, debe abandonar la botanica para acceder a su primer cargo do- cente: paradéjicamente, le corresponde ensefar insectos, gusanos y animales mi- croscépicos. La muerte de su gran maestro y protector en 1788, lo coloca en una si- tuacion delicada laboral y académica, ya que es objeto de innumerables criticas cientificas y politicas. Por cierto, su mas notable y despiadado adversario fue Cu- vier, que ocupaba la vecina catedra de zoologia de los vertebrados. Lamarck publico diversas obras de biologia vegetal; entre 1799 y 1810, sus cé- lebres Annuaires Météorologiques... (el titulo completo tiene mas de setenta pala- bras) con pronésticos que se basan en observaciones estadisticamente analizadas, que a nivel popular fueron relativamente exitosos. Aunque el autor escrupulosa- mente indicaba que informaba solamente sobre probabilidades, el piiblico los in- terpreté como predicciones seguras para guiarse en sus actividades agropecuarias. Los eventos meteorologicos raramente se ajustaban a las predicciones de Lamarck, y esto Ilevé a que el propio emperador Napoléon Bonaparte interviniera para sus- pender la publicacion en 1810. También este hecho condujo a que el autor cayera en el mayor descrédito dentro de la Academia de Ciencias y el Museo de Historia Natural de Paris. Carlos 4, Altun A pesar de su notable formacion botanica, se considera que sus dos obras maes- tras son Histoire des animaux sans vertébres (1812) y su Philosophie zoologique (809, ano del nacimiento de Charles Darwin). En su Histoire... introduce una clasi- ficacion de los invertebrados que. al menos en lineas generales, se mantiene ac- ‘almente. En su Philosophie zoologique Lamarck desarrolla por primera vez una ‘coria completa de la evolucién. Como mencionaba Darwin en el acapite, por prime- ta vez todos los fendmenos y cambios, a partir de Lamarck, se interpretan como Procesos que obedecen a leyes. Los organismos se modifican, responden al medio, no sufren pasivamente los cambios cel medio fisico, se adaptan. Las circunstancias del medio ambiente fisico modifican las necesidades del animal, y de ésto se deriva la adquisicion de nuevos habitos (comportamientos), que actuaran a su vez modifi- cando sus estructuras anatomicas y fisiolégicas, Se adelanta con este concepto a autores actuales, como Ernst Mayr, que nos propone en 1963: “El cambio a un nuevo nicho 0 zona adaptativa es inicialmente un cambio de comportamiento, el resto de las adaptaciones morfoldgicas y fisiolégicas se ad- quieren secundariamente.” Lamarck es claramente vitalista y transformista; paraddjicamente su vision de los vegetales, en los comienzos de su carrera cientifica, rondaba el fijismo mas ex- tremo. Ciertamente el vitalismo estuvo profundamente arraigado en la escuela fran- cesa desde antes de Lamarck y esta tendencia subsiste hasta nuestros dias. El vita- lismo en Lamarck se manifiesta en que los animales son, en su vision, seres posee- dores de una innata tendencia al progreso y la perfeccion, pretenden (casi volunta- Hamente) mejorar, progresar y adaptarse. Su concepeién queda clara cuando escri- be: “Para Wegar a conocer las verdaderas causas de tantas formas y costumbres di- versas que nos ofrecen los animales, es preciso considerar las circunstancias infini- tamente diversas, lentamente cambiantes, en que se han encontrado los animales de cualquier raza, determinando para cada uno de ellos, nuevas necesidades y costum: bres” (Philosophie zoologique, 1809) Las verdaderas causas de la diversificacion y cambios en las costumbres, y mo- dificaciones estructurales y fumcionales obedecen a leyes que Lamarck se encarga cuidadosamente de enunciar y ejemplificar con prolijidad. Aunque algunos auto- Tes consideran mas leyes para explicar la teoria,"” indudablemente, existen dos principales: las llamadas “Ley del uso y desuso de los organos” y la “Ley de herencia de los caracteres adquiridos". La primera fue enunciada en estos términos: “En todo animal el empleo frecuente y continuo de un érgano cualquiera fortifica poco a poco dicho érgano, lo desarrolia y io agranda, confiriéndole una potencia proporcional a la duracién de su uso, de igual modo, ia ausencia constante de uso lo debilita, lo dete Tiora y lo disminuye progresivamente en sus facultades, hasta hacerlo desaparecer. Asi, la utilizacién continua de un organo, conjuntamente con el “esfuerzo" realizado para lograr el mejor provecho posible, fortifican y agrandan los organos implicados en una funci6n. La continua necesidad de mantenerse a flote de los patos y muchas aves acuaticas, unida a los “esfuerzos” levaron a desarrollar las membranas inter- digitales, que acttian como paletas en la locomocién acuatica: similar explicacién merecen las membranas de otras especies acuaticas como las ranas, tortugas y cas- tores. Otro ejemplo preferido de Lamarck son las serpientes. A nivel de su organiza- cion general deberian tener cuatro patas, sin embargo, puesto que adquirieron la costumbre de arrastrarse sin emplearlas, llevo a la desaparicion de las mismas del plan de organizacién de estos animales. Volveremos a esta ley a finales del ensayo en un esquema comparativo con la teoria darwiniana 40. e.g. Sarukhén J (1988): Las musas de Darwin, Fondo de Cultura Econémica, México. 26 Historia de las ideas evolucionistas La “Ley de herencia de los caracteres adquiridos” completa el proceso evolutivo de lo que Darwin llamar “descendencia con modificacién”. Lamarck nos propone: “Todo cuanto la Naturaleza ha hecho perder 0 ganar a los individuos por influencia de las circunstancias a las que, desde hace tanto tiempo, se halla expuesta una raza se conserva a través de las generaciones transmitiéndose a los nuevos individuos deri- vados de él, con tal de que los cambios adquirides sean comunes a los dos sexos". Hoy sabemos que, claramente, los caracteres adquiridos no son tocios transmitidos a la progenie; un ejemplo grafico y quizas por eso demasiado utilizado, es que bas camente el ejercicio fisico que incrementa la musculatura de los padres. no es transmisible a la descendencia. ‘La idea central del pensamiento lamarckiano es que la naturaleza ha producido sucesivamente las diversas especies, desde los organismos mas simples a los ma complejos. En los capitulos donde analiza las caracteristicas de las especies, resenia una serie de aspectos importantes en su teoria, Algunos de ellos son: 1) Todos los seres vives son producciones de la naturaleza que los ha formado a través de largos periodos de tiempo. 2) La naturaleza ha comenzado y vuelve a comenzar “todos los dias” formando or- ganismos por gerieracién espontanea. 3) Una vez formados los organismos mas simples, la vida misma tiene la cualidad inherente de progresar en su organizacion, generando nuevos habitos y estruc- turas que se adaptan a nuevas condiciones ambientales, asi se han generado todas las especies (principio de “Gradacion” 4) Las especies se han formado gradual y sucesivamente a través de los tiempos. Tas condiciones cambiantes del medio conducen una “Diferenciacion Adaptable”. Con respecto a la diversidad organica, Lamarck no cree en la existencia de una gran cadena de seres, la separacién entre los reinos animal y vegetal es clara, con- sistente en estructura y funcin; una prueba de ello es la inexistencia de formas in- termedias. Dentro de ellos es posible establecer Clases y Series, que nos indican un esquema filogenético lineal. Una de esas series ¢s la que va originando sucesiva- mente desde los gusanos a los insectos. aracnidos y crustaceos. Otra va desde los moluscos hacia los peces. reptiles, aves, mamiferos monotremadbos y placentarios. Estos tiltimos se habrian diversificado a partir de los mamiferos anfibios (Pinnipe- dia), Dentro de éstos el hombre es un mamifero muy perfeccionado, no es ni el cen- tro ni el propésito de la creacion. El hombre es una Unica especie, dentro del orcen de los “bimanos”, emparentado con los “cuadrtimanos” (monos antropoides). Para Lamarck, el hombre deriva de un cuadrimano social, a medida que las comunida- des humanas se hicieron mas numerosas y complejas comenz6 a comunicarse por lenguaje gestual y por sonidos guturales, pero mediante el ejercicio sostenido de la laringe, lengua y labios se desarrollé la facultad del lenguaje. La Philosophie zoologique no tuvo éxito alguno. Lamarck fue relativamente reco- nocido como botanico y zodlogo, aunque sus planteos tedricos eran muchas veces endebles y fantasiosos, probablemente Ia publicacién de sus predicciones meteoro- logicas contribuyo a la falta de crédito en sus especulaciones evolutivas. El principal mérito de Lamarck fue elaborar una teorfa completa de la evolucion, la diversidad organica es producto de un desarrollo hist6rico ininterrumpido, los cambios se producen por factores responsables y moduladores del cambio evoluti- vo: la tendencia al progreso, el tiempo y la influencia del medio. A pesar de que la *herencia de los caracteres adquiridos” es uno de los elemen- tos mas cuestionables de la teoria lamarckiana, existen casos en los cuales este jnecanismo funcionaria, particularmente en algunos casos de tolerancia inmunolo- gica en roedores y de resistencia a antibioticos en bacterias."! 41. Gould (1980), op.cit: Leith B (1982): The descent of Darwin, Collins & Sons, Londres (En caste- on] Carlos A. Altuna Otro ejemplo interesante del mecanismo de transmisién directa de generacion a generacion lo constituye la evolucién cultural humana. En oposicion a nuestra evo- jucion bioldgica, lo que aprendemos en una generacién se transmite a la proxima por la ensenanza y la cultura. Lamarck murié pobre y olvidado: diez alos antes de su muerte habia quedado completamente ciego. Se cuenta que su implacable enemigo Cuvier le manifesto: “Podria considerar que su ceguera es consistente con su primera ley, y que se debe al poco habito de lectura que Ud. posee”. La Academia de Ciencias, no obstante, deci- dio homenajearlo a su muerte (1829), encargandole a Cuvier la redaccién de un discurso necrolégico, que no se leyé hasta 1832, y que debié ser modificado para suavizar los pasajes en los cuales Cuvier rebate y ridiculiza las ideas lamarckianas. Un ultimo embate: El creacionismo de Cuvier “En general, el cerebro es mas grande en el hombre que en la mu- Jer, mas en los hombres eminentes que en los de talento mediocre, en las razas superiores que en las razas inferiores”. P. Broca (1861). “El cerebro de Georges Cuvier pesaba 1.830 gramos, estaba 400 gramos por encima de la media y pesaba 200 gramos mas que cualquier cerebro no enfermo que haya sido pesado.” S.J. Gould (1986). Georges Louis Cuvier (1769-1832) fue el especialista en anatomia comparada mas notable de la historia de la Zoologia. Se formé como anatomista en la famosa escue- Ja de Stuttgart, cn el Imperio Germanico; a su regreso a Francia, por recomenda- cion del transformista Etienne Geoffroy Saint-Hilaire, obtuvo a los 25 afios la cate- dra de Anatomia de la Sorbonne, y un cargo como Jefe de Zoologia del Museo de Historia Natural de Paris. Fue una personalidad brillante e influyente, que descoll6 en los ambientes académicos, sociales y politicos. Fue ministro de Napoléon, miem- bro del Consejo de Estado, Comisionado del Reino después de la restauracién de los Borbones,*’ y ejercié diversos cargos religiosos ya que, previamente a sus estudios en Stuttgart habia estudiado Teologia. lano: El legado de Darwin, Biblioteca Cientifica Salvat, Barcelona 1986); y referencias en ambos, 42, Gould (1980), op.cit. 43. El cirujano y antropélogo francés Paul Broca (1824-1880) estudi6 las lesiones cerebrales y avanzé en el conocimiento de! origen de la afasia, pérdida o impedimento de la capacidad de formar o articular palabras. Hizo estudios comparativos de los créneos humanos, y en 1861 anuneié el descubrimiento 4e los centros del Lenguaje articulado en la regiGn frontal izquierda del cerebro. Fue la primera prueba anatémica de localizacién de las funciones cerebrales. (N. de E,) 44, El paleontélogo y bidlogo evolucionista estadounidense Stephen Jay Gould (n.1941) revisé la teoria de Darwin y propuso, junto a Niles Eldredge, la teoria de los equilibrios interrumpidos (punctuated equilibria) que propone que la creacién de nuevas especies por evolucién no se Produce en proporciones constantes y lentas durante millones de afios, sino en répidas irrupciones de periodos de s6lo unos miles de afios, seguidos por perfodos largos de estabilidad sin cambios mportantes, En 1974 empezé a escribir articulos de divulgacién, y luego libros, sobre controversias en Ia evoluci6n biolégica, los tests de inteligencia, la geologia, a paleontologya, que tenen amplia difusi6n. (N. de E,) 45. La linea principal de la familia Bourbon reiné en Francia desde 1589 hasta 1792, affo en que la Revolucion elimina la monarqufa; pasado el imperio de Napoléon y a la abdicacién de éste en 1814. esa linea volvié 2 reinar hasta 1830. (N. de E,) 28 Historia de las ideas evolucionistas Asi como Linneo que, a pesar de ser fijista, con su sistematizacion contribuyé a ordenar las formas biolégicas, a concebir transformaciones de unas especies en otras. y a hipotetizar respecto al parentesco, Cuvier, fijista convencido, contribuyé a su manera con la teoria evolutiva. Una teoria de la evolucion sélida y consistente no podia ignorar el enorme aporte que los fésiles brindan respecto de las transforma. ciones desde una perspectiva historica. Paradgjicamente, el creacionista Cuvier, fundador de la Paleontologia, constaté al menos tres hechos indiscutibles: 1) Existi¢ el cambio de las formas organicas en el tiempo. 2) Al pasar de los sedimentos mas antiguos a los mas modernos, aumenta la seme- Janza con las especies actuales. 3) A medida que transcurre el tiempo geolégico, se observa un incremento en la complejidad estructural de los vertebrados. Con respecto a los vertebrados, Cuvier plantea: “se puede pasar razonando des- de el esqueleto de un pez hasta el de un mamifero™. Ese ejercicio se realiza mediante su “Leyes de la correlacion organica’, aplicando el método comparativo es posible establecer cémo concuerdan las estructuras entre si. Todo organismo es un sistema indivisible, en el que todas sus partes y 6rganos se relacionan reciprocamente. Cu. Vier cita ejemplos: si un animal posce un intestino apropiado para digerir carne, sus mandibulas deberan estar consistentemente construidas pata sujetar y devorar la presa; las unas de modo de desgarrar, los dientes para cortar y masticar. Todas las estructuras vinculadas con la locomocion deben estar adaptadas a la persecucién y caplura de las presas, mientras que los organos de los sentidos Io han de estar para descubrir y reconocer las mismas. De acuerdo con su “Principio de Coexistencia 0 de las Causas Finales”, las dis- tintas partes de cada ser deben unirse de modo que hagan posible la existencia del animal no solo por si mismo, sino por sus relaciones con el medio ambiente. En su sistema, estas correlaciones obedecen a causas teleologicas 0 finalistas, El Todopoderoso ha creado lo que vive, la correlacién entre los organismos y el medio ambiente, obedece a un “plan creador’ Cuvier con sus monumentales descripciones de vertebrados fosiles y actuales, sienta las bases de la anatomia comparada y funcional. avanzando extraordinaria, mente hacia conceptos hoy vigentes, como los de homoiogia, analogia y convergen- cia estructural. En base a las correlaciones que Cuvier establece es posible recons- truir un esqueleto completo a partir de pocos huesos, y estimar la modalidad de vi. da, su alimentacion, forma de locomocién y sus diversos comportamientos, Divide el mundo animal en cuatro tipos: VERTEBRADOS (Vertebrata): Reuine a los peces, reptiles, aves y mamiferos. En ellos el sistema nervioso esta formado por el encéfalo, la medula espinal y los nervios que de éstos derivan. MOLUSCOS (Mollusca): El sistema nervioso esta formado por nuicleos, situados en diferentes partes del cuerpo, de los que parten los troncos nerviosos. ARTICULADOS (Articulata): Incluye a los anélidos, crustaceos, aracnidos ¢ insectos, Por la parte abdominal del cuerpo transcurre una cadena nerviosa doble. RADIADOS (Radiata): Incluye Equinodermos, pélipos e infusorios. Los troncos ner- viosos estan distribuidos en forma de radios por el cuerpo del animal. Realiza una monumental obra de reconstruccién de fosiles hallados en capas sedi- mentarias de diferente edad geologica, Cuvier descubre que. en la distribucién estrati- grafica de las formas extinguidas, existe una sucesidn logica respecto del tiempo. Esta- blece la existencia de varios periodos en la historia de la vida en la Tierra. El periodo donde se formaron los granitos, los marmoles y el gneis se distingue por la total ausen. Gia de vida. Durante el periodo siguiente se originaron los moluscos, crustaceos y peces, Luego surge la vegetacion terrestre. Mas adelante se diversifican los peces y aparecen los reptiles, que alcanzarian un extraordinario desarrollo. En periodos mas recientes la 29 he tes A. Altuna Gemma firme estuvo habitada por grandes mamiferos como grandes rinocerontes, masto- @omies vy mamuts, Por tiltimo se inicié el mundo actual con la aparicién del hombre. Ante ¢sia perspectiva se cuestiona sobre la relacion entre las especies extintas y las actuales, va que gno derivaran éstas de aquéllas? De inmediato, en clara alusién a Lamarck, senala que esta posibilidad “no desa- gracarta a los que creen en la posibilidad de la alteractén de las formas de los cuer- pos organizados, y que piensan que con diferentes costumbres todas las especies po- ‘an transformarse unas en otras, y todas proceder (le una sola entre elas”. En su intento de conciliar los hechos con la Teologia elaboré su “Teoria de las catastrofes” en su libro Discours sur les révolutions de la surface du globe (1815) Seguin esta teoria, la superficie de la Tierra ha sufrido periddicamente, cambios ca- lastréficos 0 revoluciones que sitbitamente producian la desaparicion de innumera- bles especies. Los habitantes terrestres se extinguian por las subidas del nivel del mar, los organismos marinos perecian por la elevacion stibita del fondo de los ma- res. Todos los periodos culminaban en cataclismos, el tiltimo de los cuales habia si- do el “diluvio universal” del relato biblico. Es interesante sefalar que Cuvier no afirmaba que toda la Tierra se viese completamente afectada en cada catastrofe, al- gunas especies podian persistir. Conviene establecer que, a diferencia de sus disci- pulos, Cuvier consideraba que habian existido tres episodios catastréficos, y que en las sucesivas catastrofes, la vida organica se habria empobrecido, “la naturaleza ac- tual seria el residuo de una naturaleza mucho més lujuriosa y diversa”. Sus discipulos Louis Agassiz (1807-1873) y Alcide d'Orbigny (1802-1857), ela- boraron una version mas dura de la “Teoria de las catastrofes", segiin Ia cual ha- bian existido numerosas catastrofes (en concreto 27, para d'Orbigny), que siempre habian extinguide todas las formas vivientes, y se habian producido otras tantas ¢reaciones por voluntad divina. Engels, al analizar la version dura de la teoria, indi- ca: “Sustituyen un tinico acto de creacién divina por una serie de actos de creacién, haciendo del milagro el motor de ta naturaleza”."” La autoridad cientifica de Cuvier contribuyé a retrasar algunos afios el adveni- miento del evolucionismo; sin embargo, los enormes aportes en el estudio de los f6- siles permitieron establecer una perspectiva histérica del cambio evolutivo, inexis- tente hasta ese momento. Como se menciona en el acapite de esta seccién, pocos meses después de su muerte, Cuvier fue literalmente disecado en el Museo de His- toria Natural de Paris, en btisca de “algo especial” que pudiera explicar su geniali- dad. Junto con los datos de las dimensiones de su craneo y encéfalo, el médico jefe escribié: “Ast pues, estdbamos a punto de contemplar el instrumento de aquella po- derosa inteligencia’. Es probable que Cuvier, de quien se sabe que tuvo una delica- da salud cuando nifio, haya sufrido de hidrocefalia, y ésta haya sido la causa del tamatio formidable de su encéfalo.* 46. A. D’Orhigny visité el Uruguay de fines de 1826 a principios de 1827 recolectando material para el Museo de Historia Natural de Paris. A su regreso, entre 1839 y 1847, describié diversos géneros. ¥ especies de nuestra fauna de pajaros como el suirint (Suuréri swiriri) y mamtferos como el mur- ciglago pardusco (Eptesicus furinalis), y la franciscana o deifin del Plata (Pontoporia blainvillei) Varios antibios y reptiles por él colectados fueron estudiados por Duméril y Bibron y dedicados al naturalista, entre éstos: el sapito de jardin (Bufo dorbignyi), la falsa crucera de hocico respingado (Lystrophis dorbignyi) y la tortuga conocida como morrocoyo (Trachemys dorbignyi). En 1847 Publicd su célebre Voyage dans I'Amérique Méridionale (le Brésil, la République Orientale de FUruguay, la République Argentine, a Patagonie, la République du Chili, la République de Boli- vie, la République du Pérow), executé pendant les années 1826-1833 (P. Bertrand, Paris 1842), con descripciones y comentarios del viajero y naturalista. Sobre Agassiz, ver nota 16 en p. 83. 47. Engels, op.cit 48, Gould (1980), op.cit = Historia de las ideas evolucion Darwin pone las cosas en orden “La Historia de la Ciencia nos revela que hubo sabios cuya vida permanecié independiente de su obra cientifica. Hubo otros, por el contrario, de los cuales se puede asegurar que su obra absorbié toda su vida. Uno ejemplo de este segundo tipo de hombres de ciencia lo tenemos en Darwin.” J. Templado, 1974. “Parece que mi mente se ha convertido en una maquina de extraer leyes generales de una gran cantidad de datos; pero no compren- do por qué razén se ha atrofiado la parte del cerebro que regula los gustos més elevados. Si viviera otra vez, leerta poesia y escu- charia misica al menos una vez por semana. Charles Darwin, Autobiografia, 1842. El libro de cabecera de Charles Darwin, durante los cinco amos de su viaje en el Beagle, fue El paraiso perdido de Milton; entre los poemas que lo integran, incluye algunos fragmentos como este: “Dijo Dios/ produzca la tierra las aves para que vivan segtin su naturaleza./ El ganado y los repti- les y todos los animales de la tierra/ cada uno segin su naturaleza. La tierra obede- cid’. Resulla irénico pensar que esta fuera la lectura predilecta cuando realiz6 su ex- pedicion a Punta Alta (Argentina), durante la cual descubrié los restos de fésiles de nueve grandes cuadrupedos extinguidos, y dando pasos decisivos para la elaboracién de la teoria de la seleccion natural. No es la intencién de este ensayo reali- zar una biografia exhaustiva de los auto- res, parlicularmente con respecto a Darwin numerosos autores se han ocupado del tema; merecen destacarse los trabajos de Thomas Huxley, Hemleben y José Sa- rukhan,” asf como la propia autobiografia compilada por su hijo Francis Darwin.”! 49. Paradise lost, “poema biblico en doce cantos” (1667) es la obra principal del poeta y ensayista londinense John Milton (1608-1674), hombre cultivado en artes y opositor apasionado de toda forma de censura o sujecion, con numerosos escritos al respecto. (N. de E,) 50. Thomas Huxley (1825-95) fue bidlogo, pero su destaque principal Ilegé a ser Ia difusién de ideas cientificas avanzadas, especialmente las de Darwin; de sus famosos nietos, Julian Huxley (1887- 1975) siguié parecidos caminos, como destacado bidlogo y zo6logo, divulgador de la ciencia (ver nota 18), primer director de la UNESCO, y en cuanto a Darwin, autor de The living thoughts of Darwin (1939), y junto a HBD Kettlewell, Charles Darwin and his world (1965). El alemin Jo- hanes Hemleben es también un divulgador, con varias biografias en los afios 1960, incluida Charles Darwin in Selbstzeugnissen und Dokumenten (Rowohit Taschenbuch, Reinbek bei Ham- burg 1968; en castellano Darwin, Alianza, Madrid 1971). José Sarukhdn es bi6logo especializado en ecologia de poblaciones, ¢ investigador en la Academia de Ciencias del Tercer Mundo en Mé- xico (ver nota 40, p. 14). (N. de E.) 51. Constitese el capitulo 2, p. 44ss. Carlos 4. Altuna Con respecto a un anilisis de la obra de Darwin merecen destacarse dos textos fundamentales de Ghiselin (1969) y Ernst Mayr (1988). Charles Robert Darwin nacié el 12 de febrero de 1809 {aio de la publicacion de la Philosophie zoologique de Lamarck) en Shrewsbury, una villa del este de Inglate- rra, donde su padre Robert ejercia la medicina. También habia sido médico su abuelo Erasmus, de quien nos ocupamos anteriormente. En su infancia y adolescencia fue un alumno poco aplicado, lo que le valié el continuo reproche de su padre. En 1825, éste decide enviar a Charles a Edimburgo, donde ya estudiaba medicina su hermano mayor Erasmus. Charles permancce alli hasta 1827. En ese periodo lee la Zoonomia de su abuelo, y discute sobre las ideas Jamarckianas con su profesor D. Grant. En octubre de 1828 se traslada a Cam- bridge para iniciar estudios de Teologia, que finaliza en 1831. En estos afios es in- fluido profundamente por el tedlogo y botanico John S. Henslow, quien Ie reco- mienda varias lecturas, entre ellas las Memorias de Humboldt, donde el gran viajero aleman cuenta sus impresiones del viaje a Sudamérica (1799-1804). Henslow fi- nalmente lo recomendara para una expedicion que cambiara su vida. El 27 de diciembre de 1831 parte del puerto de Plymouth, el H.M.S. Beagle, bajo el mando de Robert FitzRoy.” El principal objetivo del viaje era efectuar un releva- miento geografico y cartografico del Sur de Sudamérica. Conviene aclarar un error comuin en la literatura: Darwin no fue designado como naturalista a bordo del Bea- gle, ese puesto lo ocupaba el Dr. Robert McCormick, uno de los médicos del barco.* La proposicion de un puesto adjunto al de McCormick se le hizo a J. Henslow, y és- te la derivé a Darwin. Ante la negativa de Henslow, FitzRoy designa a un tal Mr. Chester, quien tampoco aceptara. La suerte, que siempre acompané a Darwin, co- menzaba a decidir el destino del gran naturalista. Un afio antes Charles Lyell publicaba sus Principios de Geologia (1830), que acompanara a Darwin en su viaje ¢ influira profundamente en su pensamiento y en su teoria. Durante cinco afos (1831-1836), con un Darwin de apenas 22 afios, el Beagle realiza su viaje alrededor del mundo. El Beagle partié de una Inglaterra sumida en una profunda crisis, la Revolucion Industrial condenaba a la miseria absoluta a miles de personas, y se sucedian epi- demias de célera.* Darwin no se movia de su cama durante dias, se mantuvo com- pletamente mareado gran parte del viaje.”* El viaje del Beagle Durante cinco anos, el Beagle realizé un extraordinario viaje alrededor del mun- do (Fig. 1, pag. siguiente). Solamente en América del Sur, la expedicion permanecio por mas de tres anos, cartografiando las costas; durante las escalas Darwin realiza- ba larguisimas excursiones en busca de rocas, fésiles, animales y plantas. En su estadia en Rio de Janeiro estudia el comportamiento de anfibios (Hyla), y realiza experiencias de regeneracién en doce especies de Planaria. 52. Ghiselin MT (1969): The triumph of the Darwinian method, University of California Press, Ber- keley. Mayr E (1988): Toward a New Philosophy of Biology. Belknap Press, Harvard. 53. Constitese el capitulo 3, p. Tiss. 54. Sarukhdn, op.cit. en p. 14 55. Omodeo P: Darwin, Compagnia Edizioni Intemazionali, Roma-Miln (En castellano: Darwin, co- leccién Los Hombres N° 13, Centro Editor de América Latina, Buenos Aires 1968). Consiiltese el capitulo 2 del presente libro, p. 44ss. 56. Altuna op.cit. 32 Historia de las ideas evolucionistas sneciccom sn son Figura 1. El 26 de julio de 1832 por la manana, el Beagle ancla en la bahia de Montevideo; durante las reparaciones y el mantenimiento del barco, viaja a Maldonado (“un pe. blecito por demas tranquilo, como olvidado’), donde permanece dos meses y medio, Alli realiza una coleccion completa de reptiles, aves y mamiferos. Solamente en roe, dores, colecta seis especies nuevas para la ciencia, que serdn estudiadas y descritas por Waterhouse en 1887, asignadas hoy a las siguientes especies: “raton aterciope- lado” (Necromys obscurus). “ratén hocicudo" (Oxymycterus nasutus), “colilargo” (Ol goryzomys flavescens), “rata conejo” (Reithrodon physodes), “rata de pajonal” (Scap- teromys tumidus) y “rata de hocico ferrugineo” (Wilfredomys oenax) Para ilustrar acerca de la agudeza como observador, y de algunas conclusiones a las que arriba en 0 acerca de nuestro pais, hago algunas transcripciones de parra- fos de su Diario de viaje, dignas de ser incluidas.” En Maldonado se asombra de los costos: “Podria mencionar, para dar idea de lo barato que es este pats, que sdlo pagué dos délares por dia, por los servicios de dos hombres con una tropilla de diez a doce cabalgaduras’, Realiza diversas excursiones a los departamentos de Lavalleja, Maldonado, Montevideo, Colonia, Soriano y Rio Negro. ‘También se asombra de la vida, costumbres y conocimientos de la poblacién: “Me consultaban si era la Tierra la que se movia 0 el sol (...) Dénde se encontraba Es. para. La mayoria de la gente tenia una confusa idea de que Inglaterra, Londres y Norte América eran diferentes nombres que se daba a un mismo lugar.” 37. Darwin C (1860): 4 naturalist’s voyage, Londres. (En castellano: El viaje del Beagle, Labor, Bar- celona 1984. José Pedro Barrén y Benjamin Nahum realizaron una selecciGn de los textos relativos a Uruguay y provincia de Buenos Aires: Un naturalista en el Plata, Arca, Montevideo 1968) 33 Carlos A. Altuna Al visitar una “pulperia” en Minas escribe acerca de los gauchos: “Su cortesia es exagerada; no comienzan a beber su copa sin antes esperar a que uno pruebe la sti. Ya, pero al hacemos su muy cortés inclinacién parecen estar igualmente dispuestos a degollanos, si se presentara la oportunidad’. En Sierra de Animas deseubre acumulaciones de piedras (“cerritos") que los guias se encargan de identificar, Darwin anota: “El interés en dejar, en el punto mas elevado de las cereanias, und muestra rememorativa de un determinado evento, parece ser una pasién universal de la raza humana”. Se asombra con el “carpincho”, el roedor de mayores dimensiones del mundo, (224 uno en Montevideo, de 98 libras de peso (casi 45 kg.), y con “un animalito pect liar, que podria ser descripto brevemente como un roedor con los hdbitos cel topo", el itucu-tucu” (Ctenomys). “Los Tweutucos parecen ser, en cierto modo, animales sosia- bles (...) sus habitos son nocturnos, y se alimentan especialmente de raices”. "El oa. 2ador que me los trajo me aseguré que se encuentran invariablemente ciegos”. Mas adelante ironiza: “Lamarck habria disfrutado mucho con esto, si lo hubiera sabido, cuando especulaba (probablemente con mds certeza que la usual en él) acerca de le ceguera gradualmente contraida por Aspalax, un roedor de vida subterranea’. Sola. mente a los efectos de no inducir al error, diré que los “tucu-tucus” que Darwin ob. servo en Maldonado, no son “sociables", ni nocturnos, ni ciegos, como Ie sugirié el cazador al naturalista. Para ser un viajero inglés, menor de 25 arios, su agudeza en la observacion de nuestra sociedad es magnifica: “La cantidad de Generales es mayor en las Provin. cias Unidas del Rio de la Plata que en el Reino Unido de Gran Bretaria’ 5 También en nuestro pats, observa y describe el caso de los “perros pastores” en una estancia de Rio Negro. El 22 de noviembre de 1833 escribe admirablemente: “El método de entrenamiento de los perros pastores comienza al separar el cachornito de su madre cuando atin es muy pequerio (...). Hacen que una oveja lo amamante tres o Cuatro veces por dia, y se les prepara un nido de lana para él en el corral de las ove. Jas; no se les permite que juegue con los dems cachorros (...). Debido a esta crianza, nunea tendird deseos de abandonar el rebario. En el caso mencionado, el perro pastor considera a las ovejas como miembros de su especie". Para el lector no familiarizado con la Etologia, el estudio del comportamiento animal, comentaré que Darwin nos esta indicando un ejemplo conereto de un pro- ceso conocido como “impronta” o “troquelado” en mamiferos. La descripcién del en. frenamiento y la Icida conclusion final son espectaculares y se adelantan 102 afios a Konrad Lorenz, quien describe este fenémeno en 1935.” Numerosos hechos Je llaman la atencién en Uruguay y Argentina, particular- mente la sustitucién de una especie por otra en habitats similares, ejemplificado por el Nandi (Rhea americana), que en la Patagonia y en la Puna es sustituido por cl nandu petiso (Pterocnemia pennata). También los mamiferos fosiles de la pampa y Patagonia comparables, aunque no iguales a los actuales “carpinchos” (Hydrochoe- Tus hydrochaeris) y “tates” (Dasypus, Euphractus, y otros). Se ee 58. Provincias Unidas del Rfo de la Plata, es la entidad politica que ms tarde se llamarfa Confedera- cién Argentina y luego Repiblica Argentina. La pertenencia de la Provincia Oriental a esa entidad, {ie interrumpida primero por la ocupacién portuguesa desde 1816, y finalmente por la gestién di, Plomatica inglesa que impuls6 desde 1827, ante Brasil y las Provincias Unidas, el estatuto de la Provincia Oriental como nuevo pats independiente. (N’ de E,) 39. El psicélogo austrfaco Konrad Lorenz (1903-1989) obtuvo en 1973 el premio Nobel de Medicina y Fisiologia, compartido con el psicdlogo y et6logo holandés Nikolaas Tinbergen (1907-1988) y el 2oGlogo vienés Karl von Frisch (1886-1982). Una buena referencia para estos temas es: Carranva J (ed.): Etologia. Introduceién a la Ciencia del Comportamiento, Universidad de Extremadura, Ci ceres 1994. 34 Historia de las ideas evolucionistas Se deslumbra con los fésiles de Toxodon, Macrauchenia y Megatherium. En su diario de viaje anota: “Es imposible pensar sobre el cambio asombroso gue se ha rea- ligado en el continente americano sin sentir el mas profundo asombro. En épocas re- motas, América debe haber sido un hervidero de grandes monstruos. ¢Cudl ha sido la causa de la extincién de tantas especies y géneros?”.” Como en muchos otros casos, el naturalista, que rechaza la teoria de las cata: trofes de Cuvier, se inclina por una extincién gradual de estas especies. La relacio: entre las especies fosiles y vivientes de América del Sur lo llevan decididamente a una conclusién fundamental, las nuevas especies no solo sustituyen a las vie) sino que descienden de cllas. Esto es lo que lamara mas adelanie “descendencia con modificacion” (como sinonimo de evolucién). El problema ahora es establecer de qué forma surgen las modificaciones, hecho que intentar explicar en El origen. En tanto que Cuvier se afilié a las catastrofes, Darwin interpreté el fendmeno de la extincién de faunas como un hecho natural debido a causas que atin operan como los cambios climaticos. La lectura de los Principios de Geologia de Lyell, contribuye a formar una perspectiva actualista y gradualista en la interpretacién de todos los fenomenos biologicos. En Tierra del Fuego le impresion6 profundamente el paisaje y la vida de los indi- genas. Después de su primer encuentro con los fueguinos, practicamente desnudos a pesar del clima, Darwin anota: "No he visto nada que me haya asombrado mas que la primera impresion de un salvaje. Era un fueguino desnudo, su largo pelo ondeaba en torno suyo, su rostro estaba embadurnado de pintura. En pie sobre una roca gesticula- ba y proferia gritos mucho menos comprensibles que los sonidos de los animales do- mésticos". El encuentro con los negros en Brasil, los fueguinos y mas adelante con los aborigenes de Tahiti, Australia y Nueva Zelanda proporcioné a Darwin los elementos basicos para escribir tres décadas después La descendencia del hombre (1871). Las faunas insulares aportan una enorme informacién, particularmente impor- tantes son las observaciones y conjeturas de Darwin acerca de este problema en los archipiélagos de Cabo Verde y Galapagos. Dos aspectos le resultan claros: a) la fau- na y flora de estas islas es similar a las de los continentes mas cercanos (Africa y Sudamérica, respectivamente); b) existen especies diferentes, pero afines, en las di- versas islas de cada archipiélago. “Es probable que el grupo de islas de Cabo Verde se parezca en todas sus condiciones fisicas a las islas Galapagos mucho mas que es- tas tltimas a las costas de América; no obstante, los organismos aborigenes de los dos grupos son totalmente dispares; los de Cabo Verde llevan la impronta de Africa, y los dei archipiélago de Galapagos, la de América”.! En Galapagos se interes fundamentalmente por las aves y las tortugas terres- tres, cada isla tenia sus propias especies: “El rasgo mds notable de Ia historia natu- ral de este archipiélago, es que las diferentes islas estén habitadas por diferentes conjuntos de seres. El Vicegobernador Mr. Lawson, me llamé la atencién sobre este hecho, manifestandome que habia diferencias entre las tortugas de las diversas is- las, y que podia discernir con certeza de donde procedia cada una.” Mas adelante: “Pero lo que mas me maravilla es que varias de las islas poseen sus propias especies de tortugas, de aves, de plantas, y que estas especies tienen los mismos hdbitos ge- nerales, ocupan sitios andlogos, y lenan sin duda los mismos fines en la economia natural de este archipiélago.” Aqui se adelanta formidablemente a los conceptos de nicho ecolégico y divergencia, temas sobre los que abundara en ejemplos en su obra posterior. E12 de octubre de 1836 Darwin regresa a Inglaterra y se establece en Londres. 60, Darwin (1860) op. cit 61. Templado J (1974): Historia de las teorias evolucionistas, Alhambra, Madrid. Consiiltese adem el capitulo 5 del presente libro, p. 99ss. 35 Carlos 4. Altuna Hacia la teoria. Las influencias Indudablemente Darwin fue un excepcional naturalista, pero también un formida- ble lector, capaz de extraer conceptos de muy diversos autores que permitieron ar mar el rompecabezas de la teoria. Muchos elementos los obtuvo de la lectura de las obras del gedlogo Charles Lyell y del economista Thomas Malthus. Lyell publicé tres tomos de sus Principios de Geologia entre 1830 y 1833, el edi- tor fue John Murray, quien editara luego El origen.... En su obra desarrollo varios conceptos centrales, uno de ellos es el “actualismo", ya esbozado por el aleman K. Von Hoff. EI actualismo supone que los procesos que actiian hoy dia sobre la tierra, crosion, sedimentacién, vulcanismo, son los mismos que han actuado sobre la Tie. [2a a Jo largo de su larguisima historia, Estos procesos han modelado el paisaje de la corteza terrestre, y han sido la causa de las transformaciones que ha sufrido. Para Darwin, este concepto puede extenderse también a todos los, organismos, estos han surgido, se han adaptado o extinguido, en respuesta a las condiciones ambien. cas iguales a las que hoy podemos observar. De hecho Darwin, a su re- greso se contacta, desde 1839, con Lyell para aclarar algunos conceptos y mostrarle algunos de sus hallazgos geol6gicos en Sudamérica. En carta a su amigo Henslow escribe: “Entre los grandes hombres de ciencia ninguno se acerca a Lyell en amabili- dad y benevolencia. Le he visto varias veces y me siento inclinado a quererle mucho No te puedes imaginar de qué manera bondadosa acepté todos mis planes”. Otro principio que Darwin va a tomar de Lyell es el de “gradualismo”, La tierra ha sulrido transformaciones que se deben a la accién de la liuvia, viento, erosion, sedimentaci6n, vuleanismo, y otros fenémenos, y estas modificaciones se han acu, mulado lenta y gradualmente a través de extensos periodos de tiempo. Thomas Malthus, economista y clérigo, incidio decididamente en Darwin a través de Su obra Un ensayo sobre el principio de la poblacién: su primera edicion fue anonima, y recién en la segunda Malthus admiti6 su autoria. En realidad el titulo completo del en- sayo fue Primer ensayo sobre la poblacién y de la forma en que afecta el progreso futuro de la sociedad con comentarios sobre las especulaciones de mister Godwin, monsieur Condorcet y otros escritores. El ensayo provocd airadas criticas en la prensa: en el Weekly Political Register W. Cobett editorializ6: “Clérigo, durante mi vida he detestado a Tumerosas personas, pero a ninguna como a usted’. La reaccién de Cobett fue la de casi foda Ta sociedad inglesa que levo el ensayo. Malthus puntualizaba que la poblacion humana crece en forma exponencial o logaritmica (geométricamente, dice él). en tante que los alimentos y otros elementos necesarios para la sobrevivencia lo hacen lineal, mente (aritmeticamente). De la diferencia de los valores alcanzados por las dos prosre- Stones resulta evidente que la exponencial se aleja cacia vez mas de la aritmética (Fig. 2. Pag, siguiente). Malthus llego a la conclusion de que la capacidad natural de crecimien. {0 de la poblacién humana es exponencial, lo que no ocurre, por ejemplo, con la pro. Guccion agropecuaria. Debemos recordar que la obra de Malthus fire escrita en medio de contradicciones sociales muy profundas en la época, en una Inglaterra donde el de. sempleo y la miseria provocadas por la Revolucion Industrial eran terribles. En ese es- cenario, Malthus plantea que la “lucha por la existencia’, en virtud de la cual “sobrevi. ven los mas aptos” (frase creada por Herbert Spencer), es un fenémeno natural. En octubre de 1838, en Londres, Darwin lee el ensayo de Malthus y concibe un Proceso de “lucha por la existencia", que denominara “seleccién natural’. Conviene aqui realizar algunas aclaraciones. Darwin no utiliza la frase “lucha por la existen. Cla” en él sentido malthusiano, se encarga de explicitarlo en El origen...: “Debo acd. vertir que utiizo el término lucha por la existencia en el sentido general y metaférico, Se 62. Constiltese el capitulo 4, p. 81ss. 63. Hay una excelente resefia de la vida e ideas de Thomas Malthus en Sarukhén: op.cit., pp. 69-102. 36 Historia de las ideas evolucionistas (a) (b) Numero de individuos (a) y Logaritmo del niimero de individuos (b). Tiempo Figura 2.- lo cual implica las relaciones matuas de dependencia de los seres orgénicos y, lo que es todavia mas importante, no solo la vida del individuo sino su aptitud y éxito en de- jar descendencia |... asi, una planta, al borde del desierto, lucha por la existencia ‘contra la sequia”. Darwin no utiliz6 el término “evolucién” en El origen..., en su lugar habla de “descendencia con modificacién". La palabra “evolucién”, en el sentido actual, fue utilizada por primera vez también por el filosofo Herbert Spencer, para el cual el vocablo incluia la evolucién individual y la de las especies, hoy reservamos los tér- minos ontogenia y filogenia para cada uno de estos casos, respectivamente. En esa época, toma contacto con criadores de ganado y de aves y horticultores. La variacion de formas, tamantos y disenos hallada en los animales domésticos y plantas cultivadas es uno de los argumentos centrales de su teoria de la seleccion natural, incluso elabora algunas encuestas que distribuye entre criadores.* En 1839 publica su Diario de viaje, que alcanza considerable éxito editorial. Las conclusiones sobre las encuestas sobre seleccién artificial, y un esbozo de su teoria de la seleccién natural aparecen en dos ensayos publicados en 1842 y 1844, que constituyen la base para la preparacion de Elorigen.... En 1842, con treinta y tres afos y una salud delicada, fija su residencia definiti- va en Downe, donde se dedicara por completo a escribir sucesivas y variadas mono- grafias. Entre los temas que aborda estan: la geologia de América del Sur, la cons- truccién de los arrecifes de coral, y el origen de las islas voleanicas. E15 de julio de 1844 escribe a su mujer: “Acabo de finalizar el esquema de mi teoria de las especies. Si, como creo, mi teoria en el futuro fuera leida, aunque soto fuese por un critico competente, supondré un avance considerable para la ciencia’. 64, Filésofo inglés (1820-1903) que desde su adolescencia se interes6 por temas cientificos. Ejerci6 como ingeniero y dirigié The Economist. Su articulo sobre evolucién The developmental hypothe- sis (1852) defiende la evolucién por medio de 1a herencia de caracteres adquiridos propuesta por Lamarck. Acept6 la teoria darwiniana pero se mantuvo lamarckista. A partir de 1862 publicé en diversas obras su sistema filoséfico (Synthetic philosophy). 65, Sarukhén, op.cit 37 Carlos 4. Altuna La vida en Downe es tranquila, aunque la salud de Darwin sufre continuos que- brantos, que lo afectan psicolégicamente: la vitalidad y jovialidad que lo habian ca- racterizado en su juventud ya no lo acompafian.® Inicia una amistad que durard toda su vida con el botanico Joseph Hooker y con ¢l bidlogo Thomas Huxley, su mejor amigo y confidente. Con ellos discute su teorfa, Huxley al escuchar por primera vez, el mecanismo de la seleccion natural le comen- ta: “Es genial, y tan sencillo que ignoro cémo no se me ocurrié a mi antes”. Charles Lyell le incitaba a escribir su teoria, pero Darwin continuaba escribiendo ensayos sobre temas particulares y acumulando apuntes. El 18 de junio de 1858, Dar- win recibe la mayor sorpresa de su vida; una carta y un manuscrito enviados desde Malasia, por Alfred Russel Wallace. El manuscrito contenia una version de una teoria de la seleccién natural en la que Wallace propone la “lucha por Ia existencia” como me- canismo evolutivo. EJ joven naturalista ya habia avanzado en su teoria con la publica- cién en 1855 de un articulo en los Annals of Natural History donde se esbozaba una “teoria de la transformacién gradual". Darwin le responde: “Estoy de acuerdo con casi todas sus palabras, y creo que usted coincidird conmigo en que rara vez se encuentra una persona que esté de acuerdo casi totalmente con un articulo teérico de otro. Este verano hard. veinte atios (!) que comencé mi primer libro de anotaciones sobre el problema’. ‘También escribe a Lyell: “Nunca he visto una coincidencia mas sorprendente. (...) toda mi originalidad ha fracasado. Yo preferiria quemar mi libro entero antes que él 0 cualquier otra persona pudiera creer que me he comportado con espiritu mezquino”. Como siempre, Lyell y Hooker median en la situacién y finalmente, el 1° de julio de 1858, presentan en la Linnean Society el trabajo de Wallace y un breve resumen de las ideas de Darwin; éste no asiste. La publicacion aparece un mes después en el bo- letin de esta Sociedad con el nombre de On the tendency of species to form varieties, and the perpetuation of varieties and species by means of selection.” Darwin y Walla- ce, a miles de kilometros de distancia habian llegado a formular la misma teorfa, sin quererlo eran coautores de la misma. Curiosamente la publicacién no generé ninguna polémica. En la reunion de balance anual de la Sociedad, su presidente Thomas Bell sentencié: “Este afio no se ha distinguido por ser uno de esos en los que se presenta algan avance cientifico que revoluciona al Grea de la ciencia a que pertenece”.* El origen de las especies por medio de la seleccién natural “Difficile est proprie communia diccere”. (Es dificil decir las cosas comunes de manera adecuada) Proverbio latino. “La principal distincién entre el hombre y el mono es su inteligen- cia, pero esto no es mas que una diferencia de grado". Ch. Darwin (La descendencia..., 1871). Su amigo Hooker intenta convencerlo de la necesidad de plasmar en un libro las no- tas de mas de veinte anos de trabajo: “La palabra escrita tiene mas efecto que la ha- blada, por ese, Darwin, ahora es absolutamente esencial que publique ese bendito li- bro 0 un resumen del mismo”. A fines de marzo de 1859, concluia la primera version 66. Gruber HE (1974): Darwin on man. (En castellano Darwin sobre el hombre. Un estudio psicolégi- co de la creatividad cientifica, Alianza Universidad, Madrid 1984) 67. Paiterson BD (1982): Charles Darwin: a tribute from the standpoint of modern evolutionary the- ory, Field Museum of Natural History Bulletin, 53: 3-7, 68. Sarukhén, op cit. 38 Historia de las ideas evolucionistas con trece largos capitulos, que es corregida por Hooker y la esposa de Darwin, Emma Wedgwood. Lyell entrego el manuscrito a John Murray, que habia editado sus Principios de geologia. A su vez, Murray lo entreg6 a uno de sus asesores, Mr. Elwin, que recomienda tirar todo el material, excepto la parte referida a las palomas, que podria tener cierto interés para los colombofilos. Sin embargo, Murray sigue adelante con el proyecto y finalmente, el 24 de noviembre de 1859, aparece la primera edi- cién. Const6 de 1250 ejemplares, con el titulo de On the origin of species by means of natural selection, or the preservation of favoured races in the struggle for life.” Aun costo de quince chelines, algo menos de cuatro dolares de la época, se agota el pri- mer dia de venta. Este es un hecho jamas igualado en la historia de la ciencia. La segunda edicin, de 3000 ejemplares, corrié la misma suerte. En nuestro pais se co- nocio en versién francesa en 1862 y en version castellana recién en 1877. A diferencia de la presentacion de los ensayos en la Linnean Society, El origen... desato una tormenta en ambientes cientificos, filosoficos y teologicos, en toda Bu- Topa y en los Estados Unidos. Antiguos amigos y colaboradores como Richard Owen y el almirante FitzRoy, realizaron criticas furibundas. Como siempre, suis amigos Hooker, Huxley y Lyell contestan todas las criticas, en tanto que Darwin, profun- damente angustiado respondia que no deseaba ofender a la Iglesia. A propésito ha- bia excluido al hombre como ejemplo en su libro. Sin embargo, fue traducido a di- versos idiomas, y aceptado por la mayoria de la comunidad cientifica. En la introduccién a su libro escribe: “Estoy convencido de que la seleccién natu- ral ha sido el modo principal, pero no el tinico, de modificacién”. Elorigen... es un libro excepcional desde muchos puntos de vista. Los conceptos estan notablemente ordenados y abundantemente ejemplificados. El capitulo III, La lucha por la existencia, ha sido considerado como el acta de fundacién de la moder- na ecologia.” El capitulo VIII, El instinto, es a mi juicio, una maravillosa discusién de la estructura de algunos comportamientos innatos, con ejemplos de hicidas ob- servaciones sobre las sociedades de insectos, incluyendo las dificultades de la se- leccién natural para explicar la existencia de castas esteriles dentro de éstas, El mecanismo central del cambio evolutivo: la Seleccién Natural, es esencial- mente simple de explicar. En un sentido clasico, y sin entrar en consideraciones estadisticamente complejas, podemos decir que consta de dos etapas: la primera es la producci6n de una enorme variabilidad entre los individuos de cualquier especie, en cada generacion. Esta variabilidad se manifiesta en diferencias de tamano, for. ma, disenos, coloraciones y comportamiento, entre los individuos de la misma po- blacién y especie.” Darwin describid esta variacion, pero no pudo explicarla, no existia la genética. Es interesante ver como esta variabilidad le llama la atencion al naturalista: “El trabajo sistematico serfa facil si no fuera por esta maldita variacién que, no obstante me gusta en tanto elaborador de hipdtesis, pero que me es odiosa en tanto que clasificador" (carta a Hooker, 1849).” Hoy sabemos que esta variacion se 69. Curiosamente el tema del origen de nuevas especies (proceso de especiacién) no esta desarrollado en esta obra de Darwin; quiz el nombre del libro no sea del todo representativo de su contenido. Para una descripcién adecuada del proceso de especiacidn, sus mecanismos y modalidades constil- tese el capitulo 8, p. 156ss. 70. Para una revisién exhaustiva de la influencia y penetracién del pensamiento de Charles Darwin en el Uruguay puede consultarse el excelente libro del Dr. Femando Mafié-Garzén (1990): Un siglo de Darwinismo. Un ensayo sobre la historia del pensamiento bioldgico en ef Uruguay, Facultad de Medicina, Seccién Historia de la Medicina, Montevideo. 71. Leén JA (1983): Danwinismo y ecologia evolucionista, Interciencia 8: 154-157, 72. Consiiltese el capitulo 12, p. 243ss. 73. Fuster J & Oliver MA (eds,) (1975); Teoria de la Evolucién. Seleccién de textos de Charles Dar- ‘win, Peninsula, Barcelona. 39 Cartes A. Altuna debe a diversos mecanismos genéticos (uno de ellos, claramente no el tinico, es la mutacién descubierta recién en 1901). Para Ernst Mayr, catedratico de la Univer- sidad de Harvard, es posible admitir que la mayor parte de esta variacién es alea- torla, es decir que no esta relacionada con las caracteristicas del organismo, ni con la naturaleza del ambiente. La segunda etapa es la seleccién natural propiamente dicha, “He dado a este principio, en virtud del cual una variacién, se conserva y per- petua si es util, el nombre de Seleccién Natural” (Darwin, Fl origen...). Los indivi- duos de esta poblacién que posean las variantes mas ventajosas para hacer frente a las diversas presiones ecol6gicas (competencia con sus coespecificos, defensa contra depredadores y patogenos, etc.), seran los que poseeran estadisticamente una mayor probabilidad de supervivencia y mayor capacidad de procrear descen- dientes, Con este simple mecanismo, se incrementaran, de generacién en generacién, los genes que codifican las mejores adaptaciones. En esencia es un mecanismo simple, con una fase fundamentalmente aleatoria y otra deterministica. Sewall Wright, uno de los grandes evolucionistas del siglo XX, definié este proceso como un didlogo entre un camino azaroso y otro deterministico, con consecuencias ente. Ta y cualitativamente distintas a las de ambos por separado. Quizas la grandeza de Darwin se explique en el hecho de haber visualizado y descripto un proceso esen- clalmente simple. Un aspecto formidable es que en esta obra Darwin se ocupa de muchisimos aspectos, proponiendo el alcance y problemas de la teoria, pero de lo gue justamente no habla es del problema del origen de las especies, lo cual no deja de ser una curiosidad. Darwin introduce con El origen.... algunos aspectos y concepciones que cam- biaran el pensamiento cientifico en toca la Biologia. Enrique Lessa destaca algu- nos: la unidad de la vida (toda la diversidad biolégica deriva de una unica forma ancestral y se origin6 por divergencia), ta evolucién es un proceso de descenden. Gia con modificacién, el pensamiento poblacional (la seleccién natural requiere como materia prima de poblaciones con variacién entre los individuos que la componen). Por tiltimo destaca Lessa la evolucién como proceso lento y gradual.” Darwin concibe todo a la luz del gradualismo, la naturaleza no da saltos. El dia antes de la salida a la calle de El origen.... Thomas Huxley le enviaba una carta en donde se incluye: “Se ha echado sobre los hombros una dificultad innecesaria al adoptar el Natura non facit saltum tan sin reservas”. La historia daria la razon a su amigo. Los tiltimos libros, los ailtimos afios “Mi vida es como un mecanismo de relojeria, y estoy amarrado al lugar donde acabaré mis dias”. Darwin (Carta a Robert FitzRoy, octubre de 1846) La obra posterior de Darwin es numerosa y diversa.’’ Comentaré brevemente sobre dos de sus libros: La descendencia del Hombre (1871), que contiene la primera ex. plicaci6n cientilico-materialista del origen del hombre, y el complemento a su teoria del mecanismo de seleccion sexual.” Ya en 1837, en sus cuademos de notas habia escrito: “Si todos los hombres hubieran muerto, los monos serian hombres. Los hom. 74. Lessa EP (1996): Darwin versus Lamarck, Cuademos de Marcha, junio: 58-64. 75. Jastrow R (1984): Charles Darwin. Textos fundamentales, Altaya, Barcelona 1993; y referencias. 76. Constiltese el capitulo 7, p. 135ss. 40 Historia de las ideas evolucionistas bres serian angeles.” El libro desaté airadas pro- testas en la prensa de la época, que ironizé res- pecto de Darwin. La otra obra es La expresién de las emociones en los animales y en el hombre, un ensayo de psicologia comparada que, a pesar de algunos antropomorfismos en la interpretacion de com- portamientos de animales, podria ser considera- do como el acta de fundacién de la Etologia. De hecho, algunos elementos que introduce Darwin en La expresién..., como el llamado Principio de Antitesis, permanecen vigentes hasta nuestros dias tal y como fuera formulado. Su definicién de “instinto” es brillante por su sencillez y actuali- dad: “Una accién, cuando se efecttia por un ani- mal, més especialmente por un animal joven, sin experiencia alguna, y cuando se efectia por mu- chos individuos del mismo modo, sin conocimiento del propésito para el que se reali- za, suele denominarse instinto.” Charles Darwin fallecié el 19 de abril de 1882, probablemente afectado de la enfer- medad de Chagas,” ya que durante sus largas estadias en Uruguay, Argentina y Chile acostumbraba mantener vinchucas como mascotas, y aun hacerse picar por ellas.”* Fue enterrado con honores en la Abadia de Westminster, cerca de la tumba de Newton. En 1885, cuando se erige un monumento a Charles Darwin en el Museo Britanico, el Arzobispo de Canterbury lo elogia como cientifico y declara que la teo- ria de la evolucién se halla en perfecto acuerdo con la Biblia. Para finalizar, haremos un ejercicio comparativo con un ejemplo bastante usado pe- ro que me resulta predilecto por su practicidad. Para establecer un contrapunto entre las explicaciones lamarckianas y darwinianas usaremos el cuello de las jirafas. Para 77. La enfermedad de Chagas es una zoonosis patasitaria causada por el protozoatio Trypanosoma cruzi. El médico brasilefio Carlos Chagas (1879-1934) la descubrié en 1909. La sintomatologia de Darwin permite asumir que padecié de esta enfermedad. Sin embargo, Thomas Barloon y Russell Noyes, cientfficos de la Universidad de lowa (USA). estudiaron notas, cartas y el diario de viaje, y afirmaron en 1996 que Darwin padecfa una neurosis f6bica, caracterizada por frecuentes ataques de pinico, mareos y depresién. Para estos autores, Darwin presentaba al menos nueve de los trece sintomas que caracterizan este desorden 78, Sarukhiin, op.cit

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