El SARS-CoV-2: Es una enfermedad de amplio espectro, sus síntomas pueden ser

leves o una grave infección que puede llegar a producir neumonía.

Esta enfermedad se asocia con altos niveles de infecciones respiratorias, que se puede
llegar a confundir con una neumonía.
Durante una hospitalización el uso inadecuado de un antibiótico puede aumentar el
riesgo individual del cov19, hasta producir un aumento potencial en las tasas de
resistencia antimicrobianos.

OBJETIVO: Es objetivo es evaluar la eficacia y seguridad del tratamiento con la

azitromicina en pacientes con cov19.

METODOS: Se han desarrollado protocolos respaldados por el Health Impact Project

para una síntesis positiva cuando se dispone de evidencia científica. De cada una de las
siete revisiones sistemáticas identificadas, el efecto de la intervención sobre los
resultados preferidos fue significativo y se derivó la certeza de este efecto. Se aplicó
una perspectiva del paciente para priorizar los resultados, teniendo en cuenta las
posibles preferencias del paciente. Una tasa de mortalidad y Hospitalización ventilada
se seleccionaron como resultados importantes, Duración de la ventilación mecánica,
Duración de la estancia y una mejoría clínica en el día 7 hasta el día 28, sobre
Acontecimientos adversos grave, como consecuencia importante. Adicionalmente, se
extractaron datos relacionados con efectos de subgrupo potencialmente relevantes
para la toma de decisión.

RESULTADOS: Se identificaron tres revisiones sistemáticas que cumplen con los

criterios de inclusión del presente informe.
Se incluyeron 10.795 participantes en los que el tratamiento con azitromicina.

CONCLUCIONES: Hasta el momento se muestra que el tratamiento con azitromicina

no mejora desenlaces críticos como la muerte. El tratamiento empírico antibióticos
para todos, o la gran mayoría de los pacientes hospitalizados con COVID-19, podría
resultar en un aumento en las infecciones por gérmenes resistentes a antimicrobianos.
Se recomiendan no usar tratamiento empírico antibiótico, como la azitromicina, en
forma sistemática o rutinaria en pacientes con COVID-19 ya que crea una
sobreinfección bacteriana