La película me pareció sumamente importante porque nos da a conocer las memorias
de Agustín desde que nace y mientras va creciendo se vuelve muy rebelde contra su padre patricio. En una ocasión fue a robar con su amigo, este hecho no lo hizo por el hecho de solo robar, sino por el hecho de sentir el pecado, experimentar esa sensación. Después quiso ser abogado y empezó a seguir a Macrobio en Cartago, era el lugar donde aprenderá en gran medida la afirmación de su vida. San Agustín estaba dotado de una excelente imaginación y de una extraordinaria inteligencia, mostraba mucho interés en la literatura griega y poseía gran elocuencia. Su madre se sentía cada vez más triste porque veía a su hijo alejándose cada vez màs de los principios cristianos que ella lo había enseñado. En su juventud recibía muchos halagos, fama; se destacó por su genio retórico sobresaliendo en concursos, certámenes, etc. En estos tiempos no tenía conciencia de sí mismo porque se dejaba llevar ciegamente por las pasiones humanas y mundanas. Ayudaba a los grandes criminales a ser libres. Esta es una etapa muy dura que atravesó en sus tiempos juveniles en la cual el mismo Agustín lo reprocha. Considero que la etapa de la juventud es muy crítica porque a veces nos obnubilamos de nuestras emociones nos dejamos llevar por nuestro ego. Luego ocurre una etapa donde se enamora de Khalida era una sirvienta con quién tendrá un hijo. Ese hijo muere y su pareja lo abandona. Sumido en la frustración, decide ir a Roma, en Roma lo nombran como magister rhetoricae o también se puede decir orador. Es ahí donde San Agustín empieza a tener los grandes cambios de su vida, un hecho transformador que nos ejemplifica sobre todo en esta juventud a cambiar si nos encontramos en algún camino confuso porque nunca es tarde para corregir nuestros errores. Esta película también nos da una lección para todos los que estamos en el camino de la Carrera de Derecho a que abramos bien los ojos, la conciencia cuando estemos parados en tribunales o llevando algún caso en dejarse llevar por el bien y no alimentarse del mal porque cuando crece da mucha intranquilidad interior como le diò a San Agustín.