En los últimos años el comercio electrónico ha ido cogiendo fuerza debido al gran

avance tecnológico, esto con el fin de llegar a todos los rincones del mundo y generar
más ventas de productos y servicios, pero se ha convertido en una incertidumbre para
los clientes ya que por estos medios se ha estado presentando ciberdelitos en
modalidad “estafa”, en donde hay paginas web o tiendas digitales las cuales son falsas
y engañan a los clientes, esto genera una falta de credibilidad y confianza para ejercer
la compra por estos medios, aunque este fenómeno delictivo se ha tratado de controlar
por medio de propagandas y publicidad en la que enseñan y concientizan al
consumidor de interactuar en sitios digitales originales, además hay regulaciones por
parte de los entes gubernamentales para que estas plataformas cumplan con los
requisitos para funcionar en el mercado, pero no ha sido eficaz en su totalidad ya que
cada día se genera dichos ciberdelitos. Los empresarios o las personas que quieran
apostarle al comercio electrónico deben de tener en cuenta las políticas legales de
cada país o donde quiere incursionar ya que cada país o cada nación tiene sus
diferentes tributos, tarifas, impuestos y requisitos. En Colombia el comercio electrónico
no ha sido el fuerte, debido a la poca demanda laboral y preparación profesional para el
manejo de las tecnologías y plataformas digitales, además el cobro de los impuestos
para estas plataformas ha sido una debilidad para los empresarios y además este tipo
de comercio ha tenido muchas falencias en el país.