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Glaciación
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Una glaciación es un periodo de larga duración en el que baja la temperatura global
y da como resultado una expansión del hielo continental de los casquetes polares y
los glaciares. Las glaciaciones se subdividen en periodos glaciales, siendo el Würm
el último hasta nuestros días.
Los casquetes polares se expanden durante las glaciaciones. Esta imagen es del
casquete antártico
Más coloquialmente, cuando se habla de los últimos millones de años, se utiliza
«glaciación» para referirse a periodos más fríos con extensos casquetes glaciares
en Norteamérica y Eurasia: según esta definición, la glaciación más reciente acabó
hace 12 000 años. Este artículo usará el término glaciación en el primer sentido,
el glaciológico; el término glaciales por los periodos más fríos de las
glaciaciones; e interglaciales para los periodos más cálidos.
Índice
1 Historia
2 Efectos de las glaciaciones
3 Cronología
3.1 Sucesiones glaciales
4 Glaciales e interglaciares
5 Regulación
5.1 Procesos que acrecientan la glaciación
5.2 Procesos que la mitigan
6 Causas de las glaciaciones
6.1 Cambios en la atmósfera terrestre
6.2 Posición de los continentes
6.3 Ciclos astronómicos de Milankovitch
6.4 Variaciones en la actividad solar
6.5 Vulcanismo
6.6 Radiación cósmica galáctica
7 Los factores terrestres
7.1 El ciclo del carbono
8 Glaciaciones notables
8.1 Tierra Bola de Nieve
8.2 La glaciación de Würm
8.3 La Pequeña Edad del Hielo
9 Efectos en la actualidad
9.1 Glaciares
9.2 Orografía
10 Véase también
11 Referencias
12 Enlaces externos
Historia
Geología. Las pruebas geológicas se encuentran en varias formas, como las rocas
erosionadas (ya por arranque, en fases iniciales, ya por abrasión y generación de
estrías glaciares, ya por pulverización y formación de harina de roca), valles
glaciares, aristas glaciares y horst, rocas aborregadas, morrenas glaciares,
drumlins, depósito de tills o bloques erráticos, factura de llanuras aluviales,
trenes de valle,78 lagos en las llanuras y fiordos en las costas. Es decir, las
condiciones del clima propio como de una época glacial provocan la aparición de las
fisonomías antes descritas en la orografía. Las glaciaciones sucesivas tienden a
distorsionar y eliminar las pruebas geológicas, haciendo que sean difíciles de
interpretar.
Química. Las pruebas químicas consisten principalmente en variaciones en la
proporción de isótopos en rocas sedimentarias, núcleos sedimentarios oceánicos y,
para los periodos glaciales más recientes, núcleos de hielo (comúnmente situados en
las llamadas nieves perpetuas). Puesto que el agua con isótopos más pesados tiene
una temperatura de evaporación más alta, su cantidad se reduce cuando las
condiciones son más frías; esto permitió la elaboración de un registro térmico. Aun
así, estas pruebas pueden estar adulteradas por otros factores que cambian la
proporción de isótopos. Por ejemplo, una extinción en masa incrementa la proporción
de isótopos ligeros en los sedimentos y en el hielo porque los procesos biológicos
tienden a preferir estos últimos;9 por lo tanto, una reducción en los procesos
biológicos libera más isótopos ligeros, que pueden depositarse a los sedimentos.
Paleontología. Las pruebas paleontológicas se basan en los cambios en la
distribución geográfica de los fósiles; durante un periodo de glaciación, los
organismos adaptados al frío migran hacia latitudes más bajas, y los organismos que
prefieren un clima más cálido se extinguen o viven en zonas más ecuatoriales. Esto
da lugar a la aparición de refugios glaciales y movimientos biogeográficos de
retorno.10 También es difícil interpretar estos indicios porque precisan de:
secuencias de sedimentos que representen un largo período, diferentes latitudes y
que se puedan correlacionar fácilmente; organismos primitivos presentes durante
amplios periodos con caracteres lo suficientemente homogéneos como para poder
atribuirlos a un mismo taxón, y de los cuales se conozca el clima ideal (es decir,
que puedan emplearse como marcadores); y descubrimientos de fósiles adecuados, cosa
que depende mucho del azar.
Pese a las dificultades, los análisis de núcleos de hielo y de sedimentos oceánicos
muestran claramente la alternancia de períodos glaciales e interglaciares durante
los últimos millones de años. También confirman la relación entre las glaciaciones
y fenómenos de la corteza continental, como, por ejemplo, las morrenas glaciales,
los drumlins y los bloques erráticos. Por esto se suelen aceptar los fenómenos de
la corteza continental como prueba válida de edades glaciales anteriores cuando se
encuentran en capas creadas mucho antes que el abanico de tiempo que permiten
estudiar los núcleos de hielo y los sedimentos marinos.
Cronología
Artículo principal: Cronología de las glaciaciones
Mapa de la edad de hielo del norte de Europa central. En rojo: límite máximo de la
glaciación Weichseliana; en amarillo: máximo de la glaciación de Saala; en azul:
glaciación máxima de la edad de hielo de Elster.
Ha habido al menos cuatro grandes edades glaciales en el pasado. Aparte de estos
periodos, parece que la Tierra siempre ha estado libre de hielo incluso en sus
latitudes más altas.
La glaciación actual empezó hace 40 millones de años con la expansión de una capa
de hielo en la Antártida. Se intensificó a finales del Plioceno, hace tres millones
de años, con la extensión de capas de hielo en el hemisferio norte, y continuó
durante el Pleistoceno. Desde entonces, el mundo ha pasado ciclos de glaciación con
el adelanto y retroceso de las capas de hielo durante miles de años. El periodo
glacial más reciente en sentido amplio acabó hace unos diez mil años, por lo que,
dependiendo del autor documentado, podríamos aseverar que nos situamos en un
periodo interglacial.1213 Existen sin embargo otras posturas que afirman estamos en
una era postglacial.14
Sucesiones glaciales
Criogénico Neoproterozoico
Glaciación huroniana 2400–2100 Riásico
Sidérico Paleoproterozoico
Glaciación Pongola 2900–2780 Mesoarcaico
Clima Denominación Antigüedad Época
Interglacial Actual 10 000 Holoceno
Glacial Glaciación de Würm o Wisconsin 80 000 Pleistoceno
Interglacial Riss-Würm 140 000
Glacial Glaciación de Riss o Illinois 200 000
Interglacial Mindel-Riss 390 000
Glacial Glaciación de Mindel o Kansas 580 000
Interglacial Günz-Mindel 750 000
Glacial Glaciación de Günz o Nebraska 1,1 m.a.
Interglacial Donau-Günz 1,4 m.a.
Glacial Donau 1,8 m.a.
Interglacial Biber-Donau 2 m.a.
Glacial Biber 2,5 m.a.
Glaciales e interglaciares
Los glaciales se caracterizan por climas más fríos y secos en gran parte de la
Tierra, así como por grandes masas de hielo que se extienden desde los polos por
tierra y mar. Los glaciares de las montañas llegan a altitudes más bajas a causa de
una cota de nieve menor. El nivel del mar baja debido al agua atrapada en el hielo.
Hay pruebas de que las glaciaciones distorsionan los patrones de circulación
oceánica. Como la Tierra tiene grandes zonas heladas en el Ártico y la Antártida,
nos encontramos en un mínimo glacial. Estos periodos se denominan "interglaciares".
El interglaciar actual recibe el nombre de Holoceno.1213
Se atribuía a los periodos glaciales una duración de unos doce mil años, pero las
conclusiones derivadas del estudio de núcleos de hielo parecen contradecirlo. Por
ejemplo, un artículo en Nature sugiere que el interglaciar actual puede ser
parecido a un interglaciar anterior que poseyó una duración de 28 000 años.15
Regulación
Cada periodo glacial está sujeto a una retroalimentación positiva que lo hace más
severo y una retroalimentación negativa que mitiga los efectos y que acaba por
restablecer el equilibrio.
Otra teoría sugiere que un océano Ártico sin hielo provocaría más precipitaciones
en forma de nieve en latitudes altas. Cuando el océano Ártico está cubierto de
hielo a baja temperatura, hay poca evaporación o sublimación, y esto hace que las
regiones polares sean bastante secas en cuanto a las precipitaciones, más o menos
como los desiertos. Estas escasas precipitaciones permiten que la nieve se evapore
durante el verano. Cuando no hay hielo, el océano absorbe energía solar durante los
largos días estivales, y se evapora más agua. Con más precipitaciones, una parte de
la nieve no se evapora durante el verano, si bien el hielo glacial se forma a
latitudes inferiores, reduciendo las temperaturas por la vía del aumento del albedo
(las predicciones actuales indican que el calentamiento global eliminará el hielo
del océano Ártico de aquí a cincuenta años). El agua dulce adicional que llega al
norte del océano Atlántico durante un ciclo más cálido también puede reducir la
circulación termohalina.19 Tal reducción (mitigando los efectos del corriente del
Golfo) también enfriaría el norte de Europa, cosa que causaría más nieve. También
se ha sugerido que, durante una larga glaciación, los glaciares pueden atravesar el
golfo de San Lorenzo, llegando hasta el norte del Atlántico y bloqueando la
corriente del golfo.
Otro factor es que la aridez provocada por el máximo glacial reduce las
precipitaciones, haciendo más difícil que se mantenga la glaciación. El retroceso
glacial provocado por este o cualquier otro proceso puede ser amplificado por
procesos similares.
Algunos de estos factores tienen una relación de causa-efecto. Por ejemplo, los
cambios en la composición de la atmósfera de la Tierra (especialmente la
concentración de gases de efecto invernadero) pueden alterar el clima, mientras que
el cambio climático puede cambiar la composición de la atmósfera.
William Ruddiman, Maureen Raymo y otras han sugerido que las mesetas del Tíbet y
Colorado son inmensos sumideros de CO2, con una capacidad de eliminar suficiente
dióxido de carbono de la atmósfera como por ser un factor significativo de la
tendencia de enfriamiento de los últimos cuarenta millones de años. También
argumentan que aproximadamente la mitad de su elevación (y el crecimiento de su
capacidad de eliminar CO2) tuvo lugar a lo largo de los últimos diez millones de
años.2021
Los investigadores dudan de que los ciclos de Milankotivch puedan iniciar o poner
fin a una glaciación: pues incluso cuando sus efectos se combinan, no son
suficientes; y porque las ocasiones en que los efectos se compensan o se cancelan
son mucho más regulares y frecuentes que las edades glaciales. No obstante, existen
modelos climáticos que los incluyen y que predicen la respuesta climática.25
La teoría "tradicional" no llega a explicar el dominio del ciclo de cien mil años
durante los últimos ocho ciclos. Richard A. Muller, Gordon J. MacDonald y otras han
indicado que estos cálculos son aptos para un modelo bidimensional de la órbita
terrestre, pero que la órbita tridimensional también tiene un ciclo de variación de
la oblicuidad que dura cien mil años. Han propuesto que estas variaciones de la
oblicuidad pueden conducir a variaciones en la insolación.26 Aun cuando pone en
juego un mecanismo diferente al del concepto tradicional, los periodos predichos a
lo largo de los últimos 400 000 años son prácticamente los mismos. La validez de la
teoría de Muller y MacDonald ha sido cuestionada a su vez por Rial.27
William Ruddiman sugiere un modelo que explica el ciclo de cien mil años modulando
la excentricidad sobre la precesión, combinado con el efecto de los gases de efecto
invernadero.2021 Peter Huybers28 Propone todavía otra teoría, argumentando que el
ciclo dominante siempre ha sido el de 41 000 años, pero que la Tierra tiene
actualmente un comportamiento climático en que solo tiene lugar una edad glacial
cada dos o tres ciclos. Esto implicaría que el periodo de cien mil años no es más
que una ilusión creada haciendo la media de ciclos que duran 80 000 y 120 000 años.
Esta teoría se corresponde con la incertidumbre de las dataciones, pero no ha
recibido demasiado apoyo.
A muy largo término, los astrofísicos calculan que el Sol libera un 10 % más de
energía cada 109 años. De aquí a dentro de mil millones de años, el 10 % añadido
será suficiente como por causar un efecto invernadero irreversible en la Tierra —el
aumento de la temperatura produce más nubes de vapor de agua, el cual funciona como
un gas de efecto invernadero mucho más potente que el CO2,29 la temperatura
aumenta, se produce más vapor, etc.—. En cambio otras teorías acerca de las nubes
afirman todo lo contrario; al crearse más nubes la temperatura desciende.
Variaciones a corto término. Puesto que el Sol posee un gran tamaño, los efectos de
sus desequilibrios internos y los procesos de retroalimentación negativa tardan
mucho tiempo en propagarse, de forma que estos procesos se potencian y producen
todavía más desequilibrios. En este contexto, "mucho tiempo" quiere decir miles o
millones de años.
El aumento a largo plazo de la emisión de energía del Sol no puede ser la causa de
las edades glaciales.
Las variaciones a corto plazo mejor conocidas son los ciclos de las manchas
solares, especialmente el mínimo de Maunder, que está relacionado con la parte más
fría de la pequeña edad de hielo. Como los ciclos de Milankovitch, los efectos de
los ciclos de las manchas solares son demasiado débiles y frecuentes para explicar
el comienzo y el fin de las edades glaciales pero es muy probable que sean la razón
de las variaciones de temperatura dentro de las edades glaciales.
Vulcanismo
Los episodios volcánicos más grandes conocidos, las erupciones que crearon las
traps siberianas y del Decán y que cumplieron un papel importante durante las
extinciones en masa, no tienen nada que ver con las edades glaciales. A simple
vista, parece que esto pueda implicar que el vulcanismo no puede producir
glaciaciones.
En teoría, es posible que los volcanes submarinos pudieran poner fin a una edad
glacial, creando un calentamiento global. Una explicación propuesta del máximo
térmico del Paleoceno-Eoceno es que los volcanes submarinos liberaran metano
atrapado en clatratos, causando un grande y rápido incremento del efecto
invernadero. No parece haber indicios geológicos de estas erupciones en este
periodo, pero esto no implica que no ocurrieran.
Es más difícil ver qué papel podría tener el vulcanismo en empezar una edad
glacial, puesto que los efectos que lo frenen deberán ser más débiles y a más corto
plazo que los efectos que lo produzcan. Esto exigiría que polvos y nubes de
aerosoles permanecieran en la atmósfera superior y bloquearan la luz solar durante
miles de años, cosa que parece muy improbable. Los volcanes submarinos no podrían
producir este efecto, puesto que el polvo y los aerosoles serían absorbidos por la
mar antes de que llegaran a la atmósfera. No obstante, esta hipótesis se considera
como plausible en el caso de la Pequeña Edad del Hielo.30
Las inversiones magnéticas se consideran como un posible factor que desencadena una
glaciación porque en el proceso de inversión se debilita el campo magnético (y se
orienta en dirección este-oeste). La mayor presencia de rayos cósmicos provoca en
la troposfera la formación de nubes, lo que comporta un enfriamiento de la Tierra.
Un campo magnético fuerte canaliza las radiaciones hacia los polos, fenómeno
observable en las auroras boreales, calentando las capas altas de la atmósfera.
Claro que lo normal es suponer que una mayor incidencia de la radiación favorece el
calentamiento de la atmósfera.
Glaciaciones notables
Dos glaciaciones han sido especialmente dramáticas en la historia de la Tierra: la
Tierra Bola de Nieve, que se inició a finales del Proterozoico, hace
aproximadamente unos 700 millones de años, y la glaciación wisconsiense o de Würm,
acaecida a finales del Pleistoceno. Otra edad glacial de especial impacto en la
historia reciente fue la Pequeña Edad de Hielo, que abarcó desde comienzos del
siglo XIV hasta mediados del XIX.
Cuando se las expone en el aire, los silicatos sufren reacciones erosivas que
extraen dióxido de carbono de la atmósfera terrestre. Estas reacciones suelen
seguir este proceso: mineral rocoso + CO2 + H2O → cationes + bicarbonato + SiO2. Un
ejemplo de una reacción de este tipo es la erosión de la wollastonita: CaSiO3 +
2CO2 + H2O → Ca2+ + SiO2 + 2HCO3-
La escasez de sedimentos apropiados por analizarlos hace que sea difícil establecer
con precisión la distribución continental durante el Neoproterozoico.34 Algunos
modelos sugieren una configuración polar de los continentes —una característica de
todas las otras glaciaciones importantes—, puesto que representan un punto en que
se puede acumular el hielo. Cambios en la circulación oceánica podrían haber
desencadenado la Tierra Bola de Nieve.35
La glaciación de Würm
Artículo principal: Glaciación de Würm
Impresión artística del alcance de la última edad glacial
La glaciación de Würm es el periodo glacial más reciente dentro de la edad glacial
actual, y tuvo lugar durante el periodo Pleistoceno. Empezó hace aproximadamente
cien mil años y se acabó entre hace 10 000 y 15 000 años. Durante este periodo hubo
diferentes variaciones entre adelanto y retroceso de los glaciares. El punto máximo
de esta glaciación fue hace aproximadamente dieciocho mil años. Mientras que el
proceso general de enfriamiento global y avance de los glaciares fue similar, las
diferencias locales en el desarrollo y retroceso de los glaciares hace difícil
comparar los detalles de un continente al otro. La última glaciación se concentró
en las enormes capas de hielo de Norteamérica y Eurasia. Vastas regiones de los
Alpes, el Himalaya y los Andes estaban cubiertas de hielo, y la Antártida
permaneció helada. Canadá estaba casi cubierto de hielo, así como el norte de los
Estados Unidos, ambos cubiertos por el inmenso casquete de hielo de Laurentia.
Alaska permaneció en parte libre de hielo debido a condiciones climáticas áridas.
Hubo glaciaciones locales en las Montañas Rocosas.36 En Gran Bretaña, Europa
continental y el noroeste de Asia, la capa de hielo Escandinava volvió a llegar
hasta el norte de las islas británicas, Alemania, Polonia y Rusia, llegando tan al
este como la península de Taimyr al oeste de Siberia.37 El punto máximo de la
glaciación al oeste de Siberia fue hace aproximadamente entre 18 000 y 17 000 años;
más tarde que en Europa (entre hace 22 000 y 18 000 años).38 El nordeste de Siberia
no estaba cubierto de hielo.39 El océano Ártico, situado entre las dos vastas capas
de hielo de América y Eurasia, no estaba completamente helado, sino que, como en la
actualidad, estaba cubierto con hielo relativamente poco grueso, susceptible a los
cambios estacionales y lleno de icebergs generados en los casquetes de hielo
aledaños.40
Otra posible causa de la Pequeña Edad del Hielo pudo ser la detención de la
circulación termohalina (también conocida como «cinta transportadora oceánica»). La
Corriente del Golfo pudo dejar de ser operativa debido a la introducción de una
gran cantidad de agua fría en el Atlántico Norte debido a la existencia de
temperaturas relativamente altas del Óptimo climático medieval.47
Efectos en la actualidad
Glaciares
Artículo principal: Glaciar
Los glaciares cubren en la actualidad unos 14,9 millones de km², casi un 10 % de la
superficie terrestre. Esta proporción aumentó hasta 44,4 millones de km², un 30 %
de la superficie terrestre, durante los periodos glaciales. El manto de hielo
laurentiano, por ejemplo, se estima que cubrió más de 13,3 millones de km²,
mientras que en el presente la cobertura glaciar ocupa 147 248 km² en el norte de
Canadá; algo parecido ocurre con el de Escandinavia, con 6,7 millones de km² y 3810
km², respectivamente. Además, las regiones de la Tierra ocupadas por glaciares en
el pasado muestran unas determinadas formas de relieve y sedimentos asociados. Los
glaciares también tienen efectos indirectos sobre el paisaje; uno de los más
comunes es la desviación de las corrientes fluviales en sistemas de drenaje
preexistentes, como se constata en el tramo alto del río Severn, en Gran Bretaña,
que alguna vez fue cabecera del río Trent.
Orografía
Véase también
Episodios geoclimáticos del Cuaternario
Glaciología
Glaciación de Würm o Wisconsin
Glaciación de Riss o Illinois
Glaciación de Mindel o Kansas
Glaciación de Günz o Nebraska
Würm II
Migración humana
Pequeña Edad de Hielo
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