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Dos ideologías o doctrinas contrapuestas conviven en América, por un lado la doctrina Monroe: América para los americanos como símbolo del dominio de Estados Unidos sobre el resto de los pueblos del continente. La otra nacida en el sur, el bolivarianismo, como sinónimo de unidad latinoamericana para enfrentar al imperio que nacía en el norte.
Dos ideologías o doctrinas contrapuestas conviven en América, por un lado la doctrina Monroe: América para los americanos como símbolo del dominio de Estados Unidos sobre el resto de los pueblos del continente. La otra nacida en el sur, el bolivarianismo, como sinónimo de unidad latinoamericana para enfrentar al imperio que nacía en el norte.
Dos ideologías o doctrinas contrapuestas conviven en América, por un lado la doctrina Monroe: América para los americanos como símbolo del dominio de Estados Unidos sobre el resto de los pueblos del continente. La otra nacida en el sur, el bolivarianismo, como sinónimo de unidad latinoamericana para enfrentar al imperio que nacía en el norte.
Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria.
BOLIVARIANISMO VS MONROISMO EN EL SIGLO XXI
Caracas, Venezuela. INTRODUCCIÓN.
En el presente ensayo realizamos un análisis entre dos corrientes históricas
antagónicas el Bolivarianismo y el Monroísmo, donde asumimos como parte de la centralidad histórica de este proceso que vivimos el Bolivarianismo que es la base para la construcción de la concepción del socialismo del siglo XXI, surgido en el contexto de lo nuestro. El Bolivarianismo lo concebimos como el pensamiento político, social y patriótico que damos otorgamos en honor a Simón Bolívar, nuestro gran libertador y prócer, su pensamiento está vigente desde el siglo XIX, desde diferentes concepciones y formas. El Bolivarianismo es una ideología que ha sido promovida a lo largo de los territorios liberados por Simón Bolívar y más allá en toda Sudamérica, en la Colombeia que soñó junto a Francisco de Miranda por múltiples organizaciones y movimientos, El Bolivarianos es una expresión de soberanía, de nacionalismo frente a las pretensiones imperialistas sobre nuestra Suramérica y su filosofía la podemos encontrar en los escritos de Simón Bolívar que son bases intelectuales de su pensamiento como lo son la carta de Jamaica, el Discurso de Angostura, el Manifiesto de Cartagena entre otros. Mientras que la Doctrina Monroe, la podemos sintetizar en la frase “América para los Americanos”, fue elaborada en 1823 en Estados Unidos por John Quincy Adams y atribuida al presidente James Monroe. Establecía que cualquier intervención de los europeos en América sería vista como un acto de agresión que requeriría la intervención de los Estados Unidos de América. La doctrina fue presentada por el presidente Monroe durante su sexto discurso al Congreso sobre el Estado de la Unión. Recibida inicialmente con dudas, y luego con entusiasmo, constituyó un momento decisivo en la política exterior de los Estados Unidos. La doctrina fue concebida por sus autores, en especial John Quincy Adams, como una proclamación por parte de los Estados Unidos de su oposición al colonialismo en respuesta a la amenaza que suponía la restauración monárquica en Europa y la Santa Alianza tras las guerras napoleónicas, pero que se esconde detrás de esta doctrina que interés manifiestan los EEUU? Eso lo describiremos. ANALISIS.
En este programa de estudios abiertos además del proceso formativo académico
necesario nos encontramos en un proceso de formación permanente para la defensa de la patria, frente a las agresiones constantes de los Estados Unidos quienes con su bloqueo, sanciones e injerencias tratan de someternos, pretenden que seamos sumisos y permisibles pero están equivocados somos un pueblo digno y rebelde. Debo mencionar que el profesor Ali Rojas Olaya nos dio una visión de esa rebeldía en su clase, y esa rebeldía la constituye para nosotros el legado de nuestro Libertador que constituye la base fundamental de esa dignidad nacional, es Simón Bolívar la mejor imagen del ser venezolano. El Bolivarianismo que representamos cada uno de nosotros como símbolo de emancipación continental, ha tenido que enfrentar el Monroismo como doctrina injerencista e imperial, preconizada por la elite gobernante de los Estados Unidos y por las oligarquías que gobiernan sus protectorados en Latinoamérica, que gracias a la conciencia de los pueblos paulatinamente hemos ido liberando, ejemplo con el reciente triunfo en Colombia. A lo largo de la historia republicana ha habido un contrapunteo entre el Bolivarianismo y el monroísmo. El Bolivarianismo defiende la independencia, la soberanía nacional, la autodeterminación de los pueblos, la integración suramericana, los proyectos de justicia social. El monroísmo, por el contrario, promueve la dependencia, el injerencismo, la desigualdad, la injusticia. Son dos proyectos opuestos, totalmente antagónicos en permanente pugna. Algunos venezolanos, aunque viven en nuestro país, se sienten ciudadanos de EEUU, los hijos de George Washington y esa es la nación a la que enaltecen, suplicando que nos bloqueen y que vengan a violar a nuestras abuelas, madres e hijas. Lo podemos ver con las aptitudes de Juan Guaido y el G-4 que cada 4 de julio, día de la independencia de Estados Unidos, experimentan nostalgia por su verdadera Patria. Cuando se denuncia la política imperialista de EE.UU. hacia Venezuela, sienten rabia y frustración. Lamentan haber nacido aquí, donde hay gente que critica a esta potencia y a sus presidentes. En especial les incomoda que se hable tanto de Bolívar y su legado, cuando deberíamos regirnos por el ideario y la obra de los Padres de su Patria. A continuación veremos qué proponían y qué hacían los padres de su patria, los New York cuando Bolívar, Padre de la nuestra, liderizaba la lucha por la independencia, la integración suramericana y por instaurar un gobierno que garantizara “la mayor suma de felicidad posible”. Durante la gesta independentista suramericana y caribeña hubo cinco presidentes en EE. UU.: Thomas Jefferson (1801-1809), James Madison (1809-1817), James Monroe (1817- 1825), John Quincy Adams (1825-1829) y Andrew Jackson (1829-1837). Conozcamos el ideario de los Padres de su Patria. Jefferson fue un ferviente defensor de la esclavitud, aseveraba que los negros eran inferiores a los blancos; por ello estaban condenados a la esclavitud; su inferioridad era innata, no dependía de la libertad ni la educación. En política exterior afirmaba: “Nuestra Confederación debe ser considerada como el nido desde el cual toda América, así la del Norte como la del Sur, habrá de ser poblada”. Agregaba: “Aunque nuestros actuales intereses nos restrinjan dentro de nuestros límites, es imposible dejar de prever lo que vendrá cuando nuestra rápida multiplicación se extienda más allá de dichos límites, hasta cubrir por entero el Continente del Norte, si no es que también el del Sur”. Asimismo, Madison se opuso a la lucha de Haití por su liberación, porque “…la existencia de un pueblo negro en armas es un espectáculo horrible para todas las naciones blancas”. Y cuando recrudeció la guerra de independencia suramericana dictó leyes que prohibían el apoyo a las fuerzas patriotas y obligaba a los ciudadanos de su país a entregar a “los delincuentes” que violasen esa disposición. Igualmente, Monroe proclamó el proyecto expansionista que se conocerá como Doctrina Monroe: “América para los (norte) americanos” que relega a Suramérica a ser el patio trasero de EEUU. En el mismo tenor Adams confesó que la población norteamericana: “…siente la misma avidez de saqueo que dominó a los romanos en sus mejores tiempos. Lo único que espe- ramos es ser dueños del mundo”. Asimismo Jackson, activo genocida de pueblos indígenas a quienes despojó de extensos territorios y envió lejos de sus tierras ancestrales, fue el militar que echó a la fuerza a los patriotas venezolanos que en 1817 tomaron la Florida española e instauraron una república independiente. Este ensayo espero que contribuya hacer parte de la artillería del pensamiento para abatir las fuerzas del enemigo monroísta. Trincheras de ideas para fortalecer la conciencia crítica y el sentido de Patria. Nuestro fin es uno: asegurar el triunfo del proyecto bolivariano y del pueblo venezolano frente a las pretensiones imperialistas. CONCLUSION.
Siempre estarán las amenazas de los Estados Unidos sobre la República
Bolivariana de Venezuela. Porque siempre Ignoraran que somos un pueblo digno que no se deja arredrar por los poderosos y Constituimos un pueblo unido, conscientes del legado de nuestro Gran Libertador Simón Bolívar. A modo de conclusión somos un pueblo Caribe que frente a las embestidas del imperio español le respondimos con el grito de guerra caribe: Ana Karina Rote, Aunicon Paparoto Mantoro, Itoro Manto, “Sólo nosotros somos gente, aquí no hay cobardes ni nadie se rinde y esta tierra es nuestra”. Nuestros pueblos originarios comandados por Guaicaipuro, Paramaconi y Terepaima resistieron tenazmente frente al enemigo invasor. Somos un pueblo de libertadores. En 1818, en plena guerra de independencia de Venezuela contra España, los Estados Unidos violaron el espacio marítimo nacional, burlaron el bloqueo impuesto por los patriotas e intentaron vender armas a los realistas haciendo uso de dos de sus naves, las goletas “Tigre” y “Libertad”. Las embarcaciones fueron confiscadas. Entonces el encargado de negocios de los EE. UU., Mr. Irvine, entono altanero y amenazante exige a los patriotas que sus naves le sean devueltas. Bolívar le responde con firmeza (7 de octubre de 1818): “no permitiré que se ultraje ni desprecie el Gobierno y los derechos de Venezuela. Defendiéndolos contra España ha desaparecido una gran parte de nuestra población y el resto que queda ansía por merecer igual suerte. Lo mismo es para Venezuela combatir contra España que contra el mundo entero, si todo el mundo la ofende”. En otra carta (12 de octubre) le recalca: “Se ha visto con frecuencia un puñado de hombres libres vencer a imperios poderosos”.