-X (Alto) llega a Restaurante, se sienta y espera a que alguien vaya a atenderla-

X: ¡Hola! -dice levantando la mano para llamar la atención del mozo-

X: -interrumpe- Bueno! Muchas gracias. *revisando la carta* Mmm… disculpa no la veo aquí, pero
me podrías traer una

- pe-pero señorita disculpe, aquí no vendemos eso. Nosotros somos un restaurante italiano y…

X: -interrumpe nuevamente- ¡¿Cómo

O: Pucha, yo entiendo que lo que quiere, pero lo que pasa es que no tenemos esos ingredientes…
nosoros somos un restaurante italiano…

X: Me parece insólito que esta sea la atención que tienen con sus clientes. *se levanta* Gracias a
nosotros ustedes tienen trabajo y ni eso

O: *cambio de status* Fioon vergüenza*…

O: Sabe qué? -ligeramente alterada- le voy a ir a comprar yo misma los ingredientes y se lo voy a
preparar.

*pasa el tiempo*

O: P-perdón… la ve al chef, y ….

X: ¿El mal rato?, ¿un cliente es un mal rato? No se ve en lo absoluto apetecible, y tú esperas que

O: y si le ponemos frutilla

-silencio incómodo-

X: Disculpa así es coo atienden a la gente?

O: No, disculpe *baja la voz de vergüenza* … pero podría no alzar la voz por favor, que nos están
mirando de las otras sas… he

O (sube): Yo enque haya tenido un día difícil, pero no por eso necesariamente va a venir a
demandar smejante atntado a nuestra patria.

X: Sí, tienes razón, e pi disculp…

puedo ravillas.