Está en la página 1de 2

CARTA AL SÍNDROME DEL IMPOSTOR.

Virginia Moll

MI CARTA AL SÍNDROME DEL IMPOSTOR.

Recuerda que lo mejor es que escribas la tuya propia.

Hola Síndrome del impostor, o mejor dicho síndrome de la impostora.


Un placer saludarte, aunque más que un saludo, esto va a ser una despedida… así que no te
pongas demasiado cómodo, ¿vale?.
Estoy harta de que aparezcas sin avisar. De que siempre pongas en duda mi valor. Estoy cansada
de que no permitas que sea yo misma y de que me pongas trabas absurdas en el camino.
Ya no puedo más. Así que voy a llevarte a un lugar del que nunca vas a salir. Un rincón muy
profundo de mi ser del que no vas a volver.
Gracias por los momentos que hemos pasado juntos. Aunque te diría que sin ti tampoco sería lo
que soy ahora… porque al ponerte nombre, soy consciente de que te voy a hacer desaparecer.

Nunca más vuelvas por aquí.

Siempre tuya y tú “nunca mío”, por favor.

Atentamente:

Virginia Moll

También podría gustarte