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(Ciesas-Sureste), en la generación
2012-2014, bajo la dirección del
Dr. Witold Jacorzynski. Dicha
investigación versa sobre el culto a
san Simón por parte de un grupo de
a
dos principales tareas: proveer y
ur
FRONTERA MÉXICO- proteger, mismas que se reflejan en
las prácticas cúlticas desplegadas en
ct
el Kumbala Bar.
GUATEMALA
Blanca Marín Valadez 1
le Palabras clave: san Simón,
prostitución, vulnerabilidad, frontera,
a
bar.
r
Resumen
pa
E
Abstract
ste trabajo es resultado
de la investigación titulada The work that I present was
n
Espacios Políticos, Año XI, número 18, junio de 2019, pp. 79-97 79
San Simón y su culto en un contexto de prostitución en la frontera México-Guatemala
in the cultic practices that unfold in Tielemans (a unas cuadras del centro
the Kumbala Bar. de la ciudad) me topé nuevamente
con la imagen de san Simón; en
Keywords: Saint Simon, aquel momento sentí como si me
prostitution, vulnerability, border, bar. hubiera llamado, su imagen se había
apoderado de mí, así que decidí
cambiar el tema de investigación e
Introducción indagar sobre su culto, aunque en ese
momento no sabía dónde, ni cómo.
Era un caluroso día de septiembre
y cursaba los últimos semestres Cuando notifiqué el cambio de
a
de la licenciatura en Antropología tema a mis catedráticos del Ciesas, las
ur
Social. Me dirigí al Ciesas-Golfo, en la advertencias no se hicieron esperar.
ciudad de Xalapa. Mi asesor de tesis La narrativa local me prevenía de los
ct
y yo comenzaríamos a programar las peligros que correría si me acercaba a
actividades de trabajo de campo en san Simón. Se comentaba el caso de un
la sierra Mazateca, en el estado de
Oaxaca. Cuando llegué al cubículo del
le
estudiante de generaciones anteriores
que había intentado investigar su
Dr. Jacorzynski, mi asesor, observé culto en los bares de San Cristóbal,
a
un pequeño altar: era un hombrecito pero que tuvo que detenerse, puesto
r
vestido de negro sentado en una silla, que un día el santo se le apareció en
pa
indagué más, mi trabajo era otro. mujeres y las viola. Todo lo que me
decían, sin embargo, acrecentaba mi
Años más tarde tuve la curiosidad, cada día estaba mucho
oportunidad de formar parte del más interesada en conocer su culto. En
posgrado en Antropología Social del otra ocasión, una de mis compañeras
Ciesas-Sureste, con un tema sobre la de maestría me contó que en la zona
migración de mujeres chamulas (San de prostitución de Macondo3, había
Juan Chamula, Chiapas) a la ciudad bares donde veneraban la imagen del
de León, Guanajuato. Sin embargo,
cuando llegué a San Cristóbal de Macondo es un seudónimo del nombre de la
3
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santo. No esperé más y junto con mi me fui. Ahora tenía que problematizar
amiga comenzamos la aventura hacia el trabajo. En un principio la falta
la frontera. de experiencia me hizo elaborar un
documento centrado en la ritualidad
El primer acercamiento me de san Simón en la frontera, sin tomar
impresionó mucho. Llegamos por la en cuenta a las devotas. El trabajo
noche a «la zona»4, que está formada de campo me hizo comprender que
por cuatro bares: el «Gitanos», esta devoción estaba totalmente
el «Molino Rojo», el «Yamila» y el articulada con las mujeres, con la
«Kumbala», además de un comedor prostitución, con la frontera; y que
que lleva por nombre «Viki Car». no podía desdeñar el contexto social
a
En las afueras de los bares estaban donde esta personalidad religiosa se
ur
diversos grupos de mujeres, algunas inscribe y adquiere su significado.
acompañadas por varones con quienes
ct
platicaban y negociaban servicios
sexuales. Me acerqué al Molino Rojo 1. Reflexiones metodológicas
preguntando por san Simón y una
de las chicas me dijo que fuera al
le El trabajo etnográfico fue uno
Kumbala, que ahí lo podría encontrar. de los elementos más importantes
a
de la investigación. Conforme hacía
r
Me dirigí al Kumbala. Cuando el trabajo de campo, mis relaciones
pa
pregunté por el santo, las respuestas con las devotas fueron cambiando y,
fueron cortas y frías, algunas de las entre más avanzaba, mis simpatías
mujeres me veían de abajo para y antipatías crecían. Me daba cuenta
n
arriba: «¿Para qué lo quiere?», «Vaya que la interacción con estas mujeres
a Itzapa, allá lo veneran». Les dije reflejaba mi propia identidad.
ió
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San Simón y su culto en un contexto de prostitución en la frontera México-Guatemala
los que ciertos clientes intentaron con la gente, abriendo así el canal para
tocarme. Sabía que estas actividades entender el sentido de sus enunciados
eran prácticas que se desarrollaban (…) Si el etnógrafo es un participante
en el bar y, a pesar de la incomodidad del evento del habla, su presencia
que sentía, comprendía que había es parte intrínseca del sentido de lo
sido quien irrumpió un espacio y que dicho. Este aspecto de la información
tenía que buscar la forma de rechazar etnográfica debe entonces ser parte
las propuestas y los toqueteos, de la descripción misma, de manera
aunque varias veces acepté tomar tal que se reconozcan las condiciones
una cerveza. concretas de la producción del
a
discurso, y que no se escuche solo
Todas estas experiencias
ur
la voz del investigador, sino también
me hicieron pensar en el diseño las voces de los otros actores (Alejos,
metodológico de la investigación.
ct
1994, pp. 27-28).
Definitivamente, la observación
participante, propuesta por el Esta propuesta se reconoce como
antropólogo polaco Malinowski en Los
argonautas del pacífico occidental,
le
parte de la antropología dialógica, y
reconcilia las posturas «etic» y «emic»
a
estaba lejos de ser el modelo que usaría que surgen durante el estudio, pues la
idea principal es construir un diálogo
r
para este trabajo. La investigación
pa
su libro Mosojäntel, etnografía del los diálogos más movían mis propios
esquemas de lo que significaba el
discurso agrario entre los ch´oles de
rs
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a
san Simón, mientras le pedía permiso
en Chiapas, la Coordinadora Nacional
ur
para trabajar con él. Un grupo de
de Trabajadores de la Educación (CNTE)
mujeres e Iván, el encargado del bar,
había convocado a miles de maestros a
se arremolinaron para observarme;
ct
huelga y a reunirse en las principales después le expliqué a Sheila las
ciudades para protestar contra la intenciones de mi presencia. Le dije
reforma educativa que el gobierno de
Enrique Peña Nieto había impuesto y
leque quería escribir mi tesis sobre
cómo ellas le rinden culto. Sheila,
a
que mermaba los derechos laborales con un gran entusiasmo, me dijo que
de los maestros. Una de las principales ella me podía platicar cosas sobre
r
problema social que nos afectaba y que en Macondo todo era caluroso. Tenía
abría los caminos a la privatización de que ir por dinero al cajero automático,
la educación en México. y a pesar de que las distancias no son
tan largas en el pueblo, me detuve
Pero, ¿qué había pasado con en una esquina y le hice la parada
el altar del santo? Me puse de pie a una combi (transporte colectivo);
sacando la estampa de san Simón me subí en el asiento del copiloto. El
que portaba en mi cartera y se la chofer subió las ventanillas y pronto
mostré a la mesera que nos había me percaté que era la única pasajera,
atendido. Le pregunté si lo conocía.
Ella abrió los ojos y me llevó detrás Mote de cariño con el que se hace referencia a
5
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luego viró hacia la derecha. Desde Cristóbal de las Casas a pensar cómo le
ese momento noté que las cosas no haría para hacer mi trabajo sin correr
estaban bien, pues conocía el camino peligro. Cuando retorné a Macondo,
de mi cuarto de hospedaje hacia el hablé con el director de la policía. Le
centro. El tipo comenzó a acelerar; conté lo que había pasado, y él ya lo
le dije que iba al centro, y él me sabía, pues el coordinador del Ciesas le
respondió que no íbamos al centro, llamó para denunciar la situación que
pero que me iba a llevar a un mejor viví y así pedirle que me brindara, dentro
lugar. Nunca he podido narrar de de sus posibilidades, condiciones para
manera coherente esta experiencia. hacer mi trabajo de manera segura. El
a
El hombre, mientras manejaba, me director me contó que había ido a las
decía cosas que me alarmaban y terminales de los colectivos y a los bares
ur
comencé a experimentar una terrible del lugar a decir a los encargados que
sensación que invadía todo mi cuerpo. yo estaba haciendo una investigación y
ct
Jamás podré expresarla con palabras. que me protegieran.
Le decía que parara, que me bajara,
pero el tipo solo aceleraba más.
De pronto viró hacia un camino de
le
Esta situación me hizo ver el
riesgo que corrían las mujeres
a
terracería y abruptamente apareció centroamericanas; la mayoría no porta
documentos y son el blanco perfecto
r
una camioneta que lo hizo detenerse.
para un sinfín de agresiones. Una de
pa
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a
sido denunciado por haber violado y y otros, tras la firma de los acuerdos
ur
asesinado a una mujer no identificada de paz en 1996, decidieron regresar
en las faldas de la Sierra. En aquel a Guatemala. Una de las voces que
momento sentí nuevamente ese
ct
vivió este proceso me narró el miedo
escalofrío paralizante. Lo peor fue que que implicaba la amenaza de ver
el rostro de ese chofer no era el mismo
que me había atacado a mí, eso me hizo
pensar en que este tipo de situaciones
lellegar al ejército a su comunidad:
«dejamos todo, sólo salimos con la
ropa. Fue difícil. Aunque la gente
a
son bastante recurrentes por acá.
de acá se portó primero muy bien,
r
nos ayudaban… Me salí de mi aldea
pa
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San Simón y su culto en un contexto de prostitución en la frontera México-Guatemala
a
aquella ocasión. Macondo es un lugar país de origen tienen que integrarse de
ur
estratégico para la distribución de la nuevo a las duras condiciones de las
droga (ibid, p. 77). que habían escapado.
ct
Las Santas es una organización La zona de prostitución está
criminal que adquirió un gran poder por
el terror que sembraba en la población.
La llegada del otro cartel generó
le
inmersa en un contexto que vulnera
los derechos y la integridad física de
las mujeres que trabajan en el lugar.
a
cierta «tranquilidad» en Macondo, Los operativos migratorios también
r
sin embargo, las disputas por el inciden en la dinámica de los bares,
pa
territorio de nuevas células del crimen pues tanto clientes como empleados
organizado continúan siendo parte de deben estar pendientes.
las dinámicas de un poblado que no
n
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resguardarse de los otros buitres. de ahí a Tapachula, donde tienen que
Entonces llegó Mayito, el intendente
ur
esperar que los buses completen su
del bar… cupo para poder salir y comenzar con
ct
el proceso de deportación.
Mayito: ¡Ay, Mónica! Me duele
mucho el cuello, creo que me
lo torcí. le La violencia que se despliega
sobre la población centroamericana
la coloca en circunstancias de
a
Mónica: Y eso Mayito, ¿a qué
vulnerabilidad permanente, incluso
se deberá?
r
en el ámbito religioso. La prostitución
pa
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San Simón y su culto en un contexto de prostitución en la frontera México-Guatemala
a
parte de estas ofertas, pues aunque la expresión, pero ese santo es
ur
en su mayoría son católicos los que de las putas.
profesan esta creencia, es necesario
marcar una distinción: la devoción a
ct
Mónica: ¿Cómo de las putas?
este santo está prohibida y castigada
por la institución romana. El principal
centro de culto en Macondo se
encuentra en la zona de prostitución,
le
Absalón: Sí, mire, allá con las
muchachas está el santo; solo
allá le hacen fiesta.
a
ubicada en la periferia del poblado.
r
Sin embargo, algunos brujos tienen Mónica: ¿Con cuáles muchachas?
pa
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a
devotas. Esto puede deberse a que,
elegía a una de ellas como su esposa
tanto el santo como las devotas,
ur
y esta tenía que tomar con él toda la
se sitúan en los márgenes de las
madrugada del 28 de octubre, que es
instituciones religiosas que tienen
ct
cuando se festeja al santo en diversas
una normatividad clara sobre el
latitudes de Guatemala, México y
comportamiento sexual, donde la
concupiscencia aleja al ser humano
de la gracia divina.
leEstados Unidos7. Incluso hubo quienes
tuvieron sueños eróticos con el santo.
Sofía, una chica de 25 años, originaria
a
de Ciudad de Guatemala, me narró
r
Los que se guían por la carne, piensan
uno de los sueños más intensos que
pa
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San Simón y su culto en un contexto de prostitución en la frontera México-Guatemala
suyo pue! Sé que te gusta —me dijo es quien limpia el altar y el bar,
Moncho—, luego me bajó el short, utilizando diversos elementos que
no me quitó la tanga. Ahí mismo compra en las tiendas esotéricas
comenzó a besarme, tiene una lengua que llevan el nombre del santo, tales
bien sabrosa y ahí estaba con su como esencias, inciensos, etc.
sombrero, sobre mí. ¡Ay, si viera que
rico coge ese Moncho! Por eso es mi 4.1 Nota etnográfica III
esposo. Después de haberme besado
toda la cuca, comenzó a morder mis Desde las siete de la mañana,
pezones y ¡zuaz! Me penetró, es tan Iván sale al mercado para hacer las
grande, tan fuerte y tan aguantador… compras. Entre perfumes y demás
a
me cogió maravilloso, de perrito, de parafernalia que llevan el nombre de
ur
muchas formas, viera que no me san Simón, compra candelas, puros,
cansé. Y usté ya sabe, bueno no sé flores y éter. Cuando llega al bar,
ct
si le ha tocado uno como Moncho Mayito ya tiene que tener barrido y
(se ríe) pero viera, es un dulce, y ya limpio todo el lugar. A esas horas, las
estaba a punto de correrme, él sabía
y más duro me cogía hasta que por
le
mujeres siguen dormidas y no se les
obliga a participar en la ritualidad.
fin pegué un grito que desperté a Iván desviste al santo que porta ropa
a
Perla. Estaba toda mojada y él seguía y a las estatuillas de yeso las sumerge
r
cogiendo, tenía que acabar, claro. en una cubeta donde vertió perfume,
pa
quitaron las ganas. Al día siguiente, del momento; luego, en una cacerola,
comienza a quemar copal con un poco
ió
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a
Simón ya escogió a su esposa. En
buena fortuna para las personas que esta ocasión, le tocó a Jimena, una
ur
dependen del bar. hermosa mujer guatemalteca que
portaba un vestido de encaje negro
ct
Estas prácticas tienen que hacerse
que traslucía su desnudez. Ya más
cada martes y viernes. Si por algún
motivo no se hacen, Iván es duramente
reprendido por doña Yolanda, quien
leentrada la noche, todos nos dirigimos
a dormir, pues a las cuatro de la
mañana comenzaba la fiesta privada,
a
dice literalmente tener ojos en el bar,
celebrada por las prostitutas.
aunque Iván piensa que es Mayito
r
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San Simón y su culto en un contexto de prostitución en la frontera México-Guatemala
a
la borrachera, lo que también provoca contexto donde san Simón expresa
ur
que los ánimos se incendien y haya el deseo de seguridad y de bienestar
problemas. Según Iván, en esta fiesta que piden las mujeres de estos bares.
ct
nunca faltan algunos «agarrones», Todas poseen sus propias historias.
lo que hace terminar la ceremonia y Después de conocer personalmente
todos se van a dormir unas horas y
estar listos para la fiesta pública, a la
que los clientes pueden asistir.
le
a varias de ellas cambió mi concepto
sobre la prostitución, sobre san Simón
y la importancia de esta deidad en el
a
contexto de sus vidas.
r
A las ocho de la noche comienzan
pa
las ocho, las mujeres ya tenían que estaban a cargo de algún familiar en
estar bien presentadas. Por la tarde, sus países de origen. Los lunes, en
Ve
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con quien tuve una relación mucho comprendían. Vivían en una zona
más cercana fue con Sheila, quien se de conflicto donde convergían los
asumía como prostituta, ya que, en militares y la guerrilla. La abuela
sus palabras «la prostitución era el tenía una pequeña tienda donde
arte de la seducción.» vendía pan y fruta, pero a cada
lugar que llegaban los soldados o los
Sheila nació el 17 de noviembre guerrilleros, atacaban los poblados.
de 1976, de origen guatemalteco. En una ocasión el ejército se llevó a
Cuando tenía seis años murió su dos de sus tíos. Sheila narraba que
padre y a los catorce, su madre, también la guerrilla se los llevaba; sin
quien la dejó con tres hermanos y
a
embargo, no le consta, porque lo que
dos hermanas. Ella vivió algunos días sí vio fue a niños kaibiles. Le tocó vivir
ur
sola cuidando a su familia; su mayor levantones, toques de queda, historias
preocupación era cómo iba a salir de hombres que fueron confundidos
ct
adelante, hasta que un día llegó uno
como guerrilleros y torturados,
de sus tíos y se la llevó a la casa de la
encerrados en los calabozos y algunos
abuela, con el acuerdo de que él le iba
a dar escuela y comida mientras ella
leasesinados. Además, narra que tenían
que ser indiferentes ante la actitud
ayudara a sus hermanos y colaborara
a
déspota de las reservas militares que
en las actividades domésticas.
r
se sentían dueños de las personas.
pa
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San Simón y su culto en un contexto de prostitución en la frontera México-Guatemala
a
hermana se había embarazado y tuvo
se llevó con ella a su hijo y se fue a
ur
a su «güirito»10 a los siete meses.
vivir con aquel hombre. Fueron ocho
Dicha hermana desapareció después
años los que estuvo casada con él, en
de unos meses de haber parido. La
ct
una relación envuelta en violencia y
buscaron en hospitales, presidios, en
las calles; parecía, según Sheila, que hambre, pues a pesar del dinero que
la tierra se la había tragado. Después
de seis meses habló para avisar que se
le
tenía el marido, apenas le daba para
la comida. Durante su matrimonio
a
había ido a vivir a Los Ángeles. Sheila se embarazó, aunque perdió al niño
se había retirado del baile para cuidar después de que él le propinara una
r
hizo cargo de la pequeña criatura. Su dinero para comer. Ella me decía que lo
abuela siempre dudó del trabajo en
peor que puede hacer una persona es
Ve
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a
le dijo que no debía pedir dinero para
a san Simón comenzó gracias a su
ur
comer. Fue a la casa del vecino y le
abuela. Sheila es una mujer fuerte,
advirtió que no regalara nada a sus siempre se ha considerado una
ct
hijos, al menos no sin autorización guerrera y cuando cuenta su historia,
previa. El vecino, de nombre Luis, lo hace con mucho orgullo, pues
se apenó y le dijo que nunca quiso
hacerle daño con ese detalle. Poco
leconsidera que es una mujer exitosa,
que ha sacado adelante a su familia:
a poco los malos entendidos se
a
sus hijos serán profesionales muy
subsanaron y comenzó a consolidarse pronto, gracias a su trabajo. Tiene
r
las que había tenido. Él era mucho vida muy distinta cuando está con la
más grande que ella; tenía algunas familia. Cuando está en Macondo, es
gasolineras, solvencia económica y devota de san Simón, pero cuando
n
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San Simón y su culto en un contexto de prostitución en la frontera México-Guatemala
a
Una tarde, llegó el hombre y se llevó
ur
Abandonó la prostitución por un a todas las personas en una pequeña
novio, quien era parte del cartel del camioneta. Antes de viajar les dijo
ct
golfo. Al principio, Gustavo la ayudaba que todo lo de valor lo dejaran en la
casa, que no podían llevar celulares,
y le llenaba de lujos. El problema
fue que nuevamente las «Santas»
comenzaron a ganar terreno en
le
solo una muda de ropa en una bolsa
de plástico.
a
Macondo. Ella huyó a Melilla, donde el
Sheila me contaba que sentía
novio trabajaba para el narco. A veces
r
miedo, emoción y tristeza. El coyote
vigilaba qué batallón del Ejército
pa
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a
chiquipulga o mula12, no la hago.» Marín, B. M. (2014). Prostitución y Religión: El
ur
Kumbala Bar y el culto a San Simón en
un lugar llamado Macondo de la frontera
Reflexiones finales
ct
México-Guatemala, (Tesis de posgrado)
San Cristóbal de las Casas, Chiapas:
Considero importante mostrar
cómo el flujo de vida de las personas
se articula a la devoción de san
le Antropología Social, Ciesas-Sureste.
a
Simón en una frontera permeada
r
por condiciones que vulneran la
pa
características: la ambivalencia y la
concupiscencia, que le han permitido
Ve
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