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Julio-Diciembre 2016

Volumen 8, número 2, 2016


ISSN: 2007-0926 (impresa)
ISSN: 2007-3240 (digital)
Revista Mexicana de Investigación en Psicología

Sistema de comentarios abiertos por colegas


Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias
CONSEJO EDITORIAL
Fundador y editor general Editores Asociados Administración

Pedro Solís-Cámara R. Yolanda Medina Cuevas Marysela Díaz Romero


Centro Universitario de la Ciénega, ISSSSPEA, Aguascalientes, México Universidad del Valle de México,
Universidad de Guadalajara, México Guadalajara, México
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Centro Universitario de la Ciénega,
Universidad de Guadalajara, México

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Universidad Autónoma de Chihuahua, de México Universidad de Flores.
México José A. García del Castillo Escuela Sistémica Argentina
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Universidad Nacional de Colombia Universidad Autónoma de Ciudad Paula Samper García
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México
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Maite Garaigordobil Landazábal Universidad Nacional Autónoma CONICET, Argentina Universidad de Los Andes, Colombia
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Revista Mexicana de Investigación en Psicología. Vol. 8, No. 2, julio-diciembre 2016, es una publicación semestral editada por Pedro Solís-Cámara Resendiz, San Felipe 91, Hacienda de San Agus-
tín, Tlajomulco de Zúñiga, Jalisco, México, CP. 45645, Tel.: (52-33) 3686-2267. www.revistamexicanadeinvestigacionenpsicologia.com, editorrmip@revistamexicanadeinvestigacionenpsicologia.
com. Reservas de derechos al Uso Exclusivo No. 04-2009-073113182300-102, ISSN 2007-0926. Este número se terminó de imprimir en diciembre de 2016 en los talleres de Editorial Página
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L
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Vol. 8, número 2, 2016


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Revista Mexicana de Investigación en Psicología


2016
sumario
• Volumen 8 Sistema de comentarios abiertos por colegas
• Número 2 Open peer commentary system
® DERECHOS RESERVADOS
POR LA REVISTA MEXICANA
DE INVESTIGACIÓN
EN PSICOLOGÍA
119 Editorial
Editorial
Sluggish Cognitive Tempo: Perspectivas Diferenciales sobre una Dimensión
Pedro Solís-Cámara R.
Universidad de Guadalajara, México

ARTICULO-OBJETIVO/ TARGET ARTICLE


125 Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias
Sluggish Cognitive Tempo: Facts and controversies
María del Mar Bernad y Mateu Servera
Instituto Universitario de Investigaciones en Ciencias de la Salud,
Universidad de las Islas Baleares, España

ARTICULOS-COMENTARIO/ OPEN PEER COMMENTARIES


163 Tempo cognitivo lento: un constructo controvertido en evolución
Sluggish Cognitive Tempo: A controversial construct in evolution
José J. Bauermeister
Universidad de Puerto Rico

175 Sluggish Cognitive Tempo: desde una perspectiva transdiagnóstica


Sluggish Cognitive Tempo: from a transdiagnostic perspective
Ester Camprodon-Rosanas y Santiago Batlle
Universitat Autònoma de Barcelona, España

182 Tiempo lento en el TDAH, enfoque neuropsicológico


Editorial Página Seis. Sluggish tempo and ADHD: Neuropsychological approach
Servicios editoriales profesionales,
integrales y versátiles.
Julio C. Flores-Lázaro
Teotihuacan 345, Col. Ciudad del Sol, 45050 Secretaría de Salud, México
Zapopan, Jalisco, México.
Tel. (33) 36 57 37 86 y 36 57 50 45
www.pagina6.com.mx
p6@pagina6.com.mx
Vol. 8, número 2, 2016
Sluggish Cognitive Tempo. Realidad actual
186
Sluggish Cognitive Tempo. Current reality
Inmaculada Moreno-García
Universidad de Sevilla, España

Sluggish Cognitive Tempo: Una Nueva Dimensión


192
del TDAH o una Entidad Nosológica Independiente
Sluggish Cognitive Tempo: A new dimension
of ADHD or a separate nosological entity
Carlos Francisco Rincón Lozada
Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia

199 Trastorno por Déficit de Atención y Tempo Cognitivo Lento


Attention Deficit Disorder and Sluggish Cognitive Tempo
Dulce María Romero-Ayuso
Universidad de Castilla-La Mancha, España

ARTICULO-RESPUESTA/ AUTHOR’S RESPONSE


209 Respuesta a los comentarios sobre
“Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias”
Mateu Servera & María del Mar Bernad
Universidad de las Islas Baleares

OTROS/ OTHERS
219 Dictaminadoras y Dictaminadores del Volumen 8

Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Editorial

Sluggish Cognitive Tempo:


Perspectivas diferenciales sobre una dimensión
Pedro Solís-Cámara R.

El Sistema de Comentarios Abiertos por Co- artículo-objetivo (target paper) un análisis suma-
legas de la Revista Mexicana de Investigación mente detallado de los orígenes de la dimensión
en Psicología (RMIP) trata en esta ocasión SCT, su estrecha relación con el Trastorno por
con un tema de renovada actualidad y con- Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH),
troversia. Así continúa con su misión a favor y su definición y evaluación, así como las evi-
del fortalecimiento del quehacer académico en dencias que sustentan su pertinencia entre los
Iberoamérica. trastornos del desarrollo y las problemáticas que
El tema en cuestión es una dimensión nom- ha enfrentado y enfrenta la dimensión. Bernad y
brada Sluggish Cognitive Tempo (SCT), que es Servera (2016) señalan que “el estudio del SCT
poco conocida e investigada en Latinoamérica. no puede entenderse fuera del TDAH.” (p. 126).
Se han propuesto algunos otros nombres para El TDAH es reconocido mundialmente como
esta dimensión, pero SCT es el más común uno de los trastornos del neurodesarrollo más
hasta hoy, a pesar de ser criticado por su conno- prevalentes. Su estudio multi y transdisciplinario
tación despectiva. En el idioma español algunos abarca décadas de esfuerzos que han permitido
autores lo nombran: Tempo Cognitivo Lento identificar tres subtipos: el predominantemente
(TCL). Debido a que ambos, SCT y TCL, son inatento, el predominantemente hiperactivo-
utilizados indistintamente, en este Editorial he impulsivo y el combinado. Bernad y Servera
respetado el nombre que cada autor utiliza. A (2016) plantean el tortuoso camino que ha
grandes rasgos, SCT hace referencia a las carac- seguido el acotamiento de una definición, carac-
terísticas centrales de la dimensión que aparecen terización, evaluación y validación del TDAH y
en la niñez y abarcan la falta de atención y el sus subtipos. Esto es de particular importancia
aletargamiento en las esferas académicas y so- cuando se trata de identificar un nuevo subtipo
ciales. Los lectores de este número de la RMIP o fundamentar una dimensión relacionada con
podrán conocer y actualizar su conocimiento el trastorno original, como ha sido y es el SCT.
sobre el SCT o TCL, si así se prefiere, gracias a Por ello, la cuidadosa revisión de las evi-
la participación de distinguidos investigadores. dencias científicas que permitan la definición,
De uno de los grupos de investigación del evaluación y el establecimiento de relaciones, o
SCT reconocidos a nivel mundial, Bernad y su ausencia, con múltiples factores es una tarea
Servera (2016) —adscritos al Instituto Univer- de grandes proporciones que requiere particular
sitario en Ciencias de la Salud de la Universidad atención. Así, al leer el artículo-objetivo (Bernad
de las Islas Baleares, España— presentan en su & Servera, 2016), los lectores podrán apreciar

Vol. 8, número 2, 2016 119


Solís-Cámara R.

la complejidad de la dimensión en relación ña, tratan en su artículo-comentario el modelo


con factores biológicos y psicopatológicos tanto transdiagnóstico, ya que dicha perspectiva
como al contextualizarla en escenarios académi- “…supone una nueva forma de entender y tratar
cos y sociales, entre otros. los trastornos mentales. En lugar de centrarse en
Reconocidos académicos e investigadores han lo específico y diferencial de cada uno de ellos, su
participado con sus artículos-comentario (open atención se focaliza en lo que tienen en común,
peer commentaries) en este número de la RMIP. en los procesos psicológicos que subyacen a mu-
Ante la compleja tarea de comentar sobre el chos de ellos…” (p. 176; Camprodon-Rosanas &
artículo-objetivo, cada uno se ha concentrado en Batlle, 2016).
tópicos específicos que permitirán al lector saciar De particular interés para los lectores será
su conocimiento sobre el tema que nos ocupa. leer la revisión que esos autores realizan sobre
Bauermeister (2016), investigador de talla in- esta perspectiva y, sobre todo, su propuesta
ternacional, adscrito a la Universidad de Puerto hipotética acerca de cómo quedaría distribuida
Rico, inicia su contribución con un interesante la dimensión del TCL en las etapas de la toma
acotamiento al estudio del TCL, al señalar que de decisiones del modelo, y su contraste con la
la relación del TCL con el TDAH bien puede distribución del trastorno TDAH.
ser “como parte integral del subtipo con presen- Desde la neurociencia cognitiva y la neuropsi-
tación inatenta del TDAH, como un subtipo cología, Flores-Lázaro (2016), de la Secretaría
diferente del TDAH, o como una condición psi- de Salud y de la Universidad Nacional Autóno-
quiátrica distinta.” (p. 164; Bauermeister 2016). ma de México, refiere en su artículo-comentario
Citando trabajos muy recientes, él señala la au- que, tal como ha ocurrido con el trastorno
sencia de consenso tanto en la definición como TDAH, se requiere el estudio de la caracteri-
en la referencia al TCL como un trastorno psi- zación estructural y funcional del cerebro para
quiátrico y ahonda en varias temáticas tratadas validar la dimensión que él nombra Tiempo
por los autores del artículo-objetivo. En cada Lento. En su interesante análisis plantea una
una de ellas, la profundidad permitirá al lector serie de interrogantes que promueven la inclu-
una mayor comprensión del TCL, desde los orí- sión de estudios con la tecnología actual, como
genes incluyendo sus principales investigadores, los estudios de neuroimagen, para avanzar en la
pasando por la problemática que representa la comprensión de esta dimensión.
definición actual y sus implicaciones en otras Moreno-García, de la Universidad de Sevilla,
medidas y dominios del comportamiento; pero España, por su parte, revisa en su artículo-co-
va más allá al profundizar en las complejidades mentario (Moreno-García, 2016) las áreas más
de los instrumentos para evaluar la atención controvertidas en el estudio del SCT, desde el
como elemento central del TCL. Aporta datos propio nombre asignado a la dimensión hasta
específicos sobre las relaciones del TCL con sus implicaciones en todas las áreas, pero coin-
medidas psicopatológicas, la ausencia de sufi- cide en la comprensión del constructo como
cientes estudios neuropsicológicos y la necesidad uno de naturaleza transdiagnóstica que genera
de más investigación transcultural. Sobresalen, aún complejas interrogantes. Avizora escenarios
a mi parecer, sus comentarios e hipótesis sobre futuros que facilitarían la mejor comprensión de
el funcionamiento ejecutivo de niños y adultos la dimensión, tal como la conducción de estudios
con TCL y sus posibles explicaciones. longitudinales.
Camprodon-Rosanas y Batlle (2016), del Rincón Lozada (2016), de la Universidad
Instituto de Neuropsiquiatría y Adicciones y de Pedagógica y Tecnológica de Colombia, en-
la Universidad Autónoma de Barcelona, Espa- marca su artículo-comentario con observacio-

120 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Editorial

nes interesantes sobre el propio estudio del leer el artículo-objetivo, los artículos-comenta-
TDAH que, señala, ha generado resultados rio y el artículo-respuesta, los lectores de este nú-
contradictorios, particularmente en cuanto a mero de la RMIP podrán hacer suyo el excelso
los subtipos se refiere. Rincón Lozada (2016) contenido presentado, apreciar las perspectivas
aporta también observaciones que cuestionan diferenciales sobre Sluggish Cognitive Tempo y
a la dimensión de SCT, ya sea como entidad constatar las conclusiones.
nosológica independiente o como un subtipo
de TDAH. Además, en consonancia con otra Referencias
literatura especializada (Urrutia, 2010), sugiere Bauermeister, J. J. (en prensa). El Tempo Cognitivo Lento:
que el SCT se refiere a un término descriptivo un síndrome atencional en busca de identidad propia. En
de conductas que posiblemente forman parte de R. Scandar (Ed.), Perspectivas actuales en neuropsicología
otro subtipo del TDAH. infantil. Desarrollos en autismo, trastornos de aprendizaje,
Por otra parte, Romero-Ayuso, de la Univer- atención y memoria.
sidad de Castilla-La Mancha, España, indica en Bauermeister, J. J. (2016). Tempo Cognitivo Lento: un cons-
su artículo-comentario (2016) que el pendiente tructo controvertido en evolución. Revista Mexicana de
medular en cuanto a la dimensión TCL es la Investigación en Psicología, 8(2), 163-174.
irresolución referente a si los tres tipos clínicos Bernad, M. M. & Servera, M. (2016). Sluggish Cognitive
corresponden realmente a variantes del TDAH Tempo: realidades y controversias. Revista Mexicana de
o si son trastornos diferenciales en su origen Investigación en Psicología, 8(2), 125-160.
neurobiológico y neuropsicológico. Romero- Camprodon-Rosanas, E. y Batlle, S. (2016). Sluggish Cognitive
Ayuso (2016) enmarca su interesante análisis en Tempo: desde una perspectiva transdiagnóstica. Revista
las evidencias neuropsicológicas de diversos es- Mexicana de Investigación en Psicología, 8(2), 175-181.
tudios que podrían sustentar con mayor claridad Flores-Lázaro, J. C. (2016). Tiempo lento en el TDAH, enfo-
la presencia o no del trastorno TCL. Además que neuropsicológico. Revista Mexicana de Investigación en
enriquece la contribución con el señalamiento Psicología, 8(2), 182-185.
de otras posibles variables extrañas que podrían Moreno-García, I. (2016). Sluggish Cognitive Tempo: realidad
ser responsables de los hallazgos dispares hasta actual. Revista Mexicana de Investigación en Psicología, 8 (2),
la fecha. 186-191.
Finalmente, es digna de mérito la síntesis que, Rincón Lozada, C. F. (2016). Sluggish Cognitive Tempo: una
ante los artículos-comentario revisados, realizan nueva dimensión del TDAH o una entidad nosológica in-
Servera y Bernad (2016) en su artículo-respuesta dependiente. Revista Mexicana de Investigación en Psicología,
(author’s response). Esto, entre otras razones, 8(2), 192-198.
porque como señalan atinadamente Servera Romero-Ayuso, D. M. (2016). Trastorno por Déficit de Aten-
y Bernad (2016), el ejercicio académico por ción y Tempo Cognitivo Lento”. Revista Mexicana de
parte de todos los colaboradores ha favorecido Investigación en Psicología, 8(2), 199-206.
la reflexión y el aprendizaje sobre el complejo Servera, M. y Bernad, M. M. (2016). Respuesta a los comen-
tema del SCT. Además, me permite afirmar que tarios sobre “Sluggish Cognitive Tempo: realidades y con-
este ejercicio demuestra con claridad el avance troversias”. Revista Mexicana de Investigación en Psicología,
conceptual y empírico que se ha logrado con el 8(2), 209-217.
SCT, tanto como el acotamiento necesario del Urrutia, F. (2010). Tempo Cognitivo Lento (Sluggish Cognitive
concepto que, indudablemente, permitirá trazar Tempo): ¿un subtipo de TDAH o una entidad diferente?”.
futuras líneas de investigación. Únicamente al Revista Archivos de Investigación Materno Infantil, II (2), 71-73.

Vol. 8, número 2, 2016 121


artículo-objetivo
target article
Sluggish Cognitive Tempo:
realidades y controversias
María del Mar Bernad & Mateu Servera
Instituto Universitario de Investigaciones en Ciencias de la Salud
Universidad de las Islas Baleares

Resumen valorarán aquellos estudios que traten de averiguar las impli-


En los últimos años ha crecido notablemente el interés por caciones a nivel neuropsicológico del SCT, especialmente en
una dimensión conocida como Sluggish Cognitive Tempo cuanto a las alteraciones en funciones ejecutivas. Algunas de
(SCT), que se refiere a aquellos individuos que presentan una las conclusiones más interesantes son que el estudio del SCT
sintomatología inatenta, diferente a la descrita para la Inaten- se extiende a poblaciones de distintas condiciones clínicas
ción (IN) en el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperacti- (principalmente pacientes con sintomatología TDAH), que se
vidad (TDAH), y una conducta y un pensamiento enlenteci- encuentran escalas de medida válidas y fiables para evaluar
dos. Esta dimensión SCT no se encuentra exenta de la presencia de la sintomatología SCT (algo que permite au-
controversias, la mayoría relacionadas con su elevada asocia- mentar la comprensión de esta dimensión), y que se aportan
ción con el TDAH-IN. Es por ello, que el objetivo del presente datos suficientes para afirmar que SCT conforma un construc-
trabajo consiste en revisar la situación actual en que se en- to distinto a la Inatención del TDAH, con correlatos internos
cuentra el constructo SCT, así como realizar un recorrido a lo y externos diferenciados. Por todo ello sería recomendable
largo de la historia sobre esta dimensión. Se comentarán las incluir una medida SCT en protocolos de evaluación psico-
distintas definiciones existentes de SCT, los instrumentos de patológica infantil (especialmente ante sospecha de TDAH-
medida que se han venido utilizando a lo largo de los años IN), así como proponer tratamientos especializados para in-
por distintos investigadores, los primeros datos epidemioló- dividuos con esta sintomatología.
gicos del constructo, y, sobre todo, las implicaciones que Palabras clave: revisión, Sluggish Cognitive Tempo (SCT), Tras-
supone la presencia de esta sintomatología a distintos niveles. torno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH)
Se pondrá especial atención a las implicaciones en áreas
psicopatológicas (sintomatología internalizada y externaliza- Sluggish Cognitive Tempo: Facts and controversies
da), de rendimiento académico y relación social. También se Abstract
Lately it has grown a considerably interest in a dimension
Agradecimientos: Este trabajo se ha realizado con el apoyo de dos proyectos de investigación
del Ministerio de Economía y Competitividad (Gobierno de España): PSI2011-23254 y PSI2014- known as Sluggish Cognitive Tempo (SCT), which refers to
52605-R, y con un beca predoctoral cofinanciada por los Fondos Sociales Europeos y el Gobierno individuals who have a different inattentive pattern as the
de las Islas Baleares (FPI/1451/2012).
one described for inattention (IN) in Attention Deficit and
Diríjase toda correspondencia a la autora a: María del Mar Bernad. Instituto Universitario de Hyperactivity Disorder (ADHD), and slowed thinking. SCT has
Investigaciones en Ciencias de la Salud (IUNICS). Universidad de las Islas Baleares. Campus UIB.
Ctra. Valldemossa, Km. 7,5 07122 Palma (Islas Baleares), España. always been a controversial dimension, mostly because of its
Correo electrónico: mar.bernad@gmail.com high association with ADHD-IN. It is therefore the aim of this
RMIP 2016, Vol. 8, No. 2, pp. 125-160. paper to review the current situation of the SCT construct, as
ISSN-impresa: 2007-0926; ISSN-digital: 2007-3240
well as its historical evolution. The various existing definitions
www.revistamexicanadeinestigacionenpsicologia.com
Derechos reservados ®RMIP of SCT, the measuring instruments that have been used over

Vol. 8, número 2, 2016 125


Artículo-Objetivo

the years by different researchers, the first epidemiological 4 y 17 años de edad estaba diagnosticada con
data of the construct, and, above all, the implications po- TDAH (la prevalencia llegó al 15% en niños y
sed by the presence of these symptoms at different levels fue del 7% en niñas). Este trastorno figura ac-
will be discussed in this article. Particular attention to the tualmente en el Manual Diagnóstico y Estadís-
implications for psychopathological areas (internalized and tico de los Trastornos Mentales de la Asociación
externalized symptoms), academic achievement and social Americana de Psiquiatría, DSM-5 (APA, 2014),
relationship will be provided. Studies that try to figure out dentro de los trastornos del neurodesarrollo y
the neuropsychological implications of the SCT, especially está formado por tres subtipos: predominante
with regard to changes in executive functions, will also be inatento, predominante hiperactivo-impulsivo
assessed. Some of the most interesting findings are that the y combinado.
study extends SCT populations to different clinical conditions El TDAH es un trastorno del neurodesarrollo
(mainly patients with ADHD symptoms), that there are some que se caracteriza por una serie de conductas
valid and reliable measure instruments of SCT (which allows evolutivamente alteradas en el ámbito de la
us to increase understanding of this dimension), and that atención, la impulsividad o la sobreactividad
we are facing sufficient data to insure that SCT conforms a motora, y genera dificultades en distintos ám-
different construct than ADHD-IN, with internal and external bitos. A nivel cognitivo, las principales dificul-
different correlates. Therefore, it would be advisable to include tades se asocian con problemas de rendimiento
a SCT measure in child psychopathological assessment proto- sostenido, de memoria de trabajo y de velocidad
cols (especially when ADHD-IN is suspected) and to propose de procesamiento. En el ámbito conductual, los
specialized treatments for individuals with these symptoms. problemas radican en dificultades para seguir
Keywords: Review, Sluggish Cognitive Tempo (SCT), Attention las normas, para controlar la impulsividad y la
Deficit Hyperactivity Disorder (ADHD) inhibición motora. Finalmente, en el ámbito
emocional se suceden diferentes problemas que
1. El surgimiento de la dimensión giran en torno a las funciones de autorregulación
Cuando hablamos de Sluggish Cognitive Tempo y motivacionales (suelen presentar respuestas
(SCT) nos referimos a una serie de caracterís- anormales ante los estímulos ambientales). Es-
ticas de inatención, enlentecimiento y letargia, tos síntomas se manifiestan desde la primera
presentes en algunos individuos, que última- infancia pero se hacen más evidentes en la niñez.
mente se han intentado definir con la intención Algunos pueden mejorar en la adolescencia, pero
de diferenciarlas de los problemas de inatención también pueden aparecer otros problemas inde-
descritos dentro del Trastorno por Déficit de seables tanto o más importantes y, finalmente,
Atención e Hiperactividad (TDAH). De todos algunas dificultades perduran en la edad adulta.
modos, el estudio del SCT no puede entenderse En resumen, el hecho de padecer TDAH supone
fuera del TDAH. una forma especial y diferente de procesar la
El TDAH es uno de los trastornos infantiles información, con algunas ventajas y múltiples
más prevalentes a nivel mundial, con unas tasas inconvenientes (dependiendo de las demandas
actuales situadas entre el 6.7% y el 7.8% (Tho- del contexto), que resultan difícilmente modi-
mas, Sanders, Doust, Beller & Glasziou, 2015), ficables por lo que se debe ayudar al individuo a
y al parecer con tendencia a incrementarse: por vivir con ello de la forma más adaptativa posible.
ejemplo, un informe del organismo guberna- Dicho esto, hay que tener en cuenta que el
mental Center for Disease Control and Preven- TDAH es un trastorno que se manifiesta de
tion de los años 2011-2012 (véase el tratamiento forma muy heterogénea. Su carácter sindrómico
de la noticia por parte de Schwarz & Cohen, ha llevado a una constante redefinición que, de
2013) alertó de que un 11% de la población entre forma abreviada, ha basculado desde la conside-

126 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

ración como alteraciones independientes de un Varios autores de renombre en el campo de


subtipo inatento versus un subtipo hiperactivo/ la psicopatología infantil, en concreto conocidos
impulsivo, hasta la consideración de un trastor- por sus aportaciones en el campo del TDAH y
no único sin diferenciación de sintomatología, SCT, como Russell Barkley (2013, 2014), Ste-
llegando al estatus actual de un tronco común phen Becker (2014) o Catherine Saxbe (2014),
con los tres subtipos antes mencionados. Sin destacan en sus trabajos de revisión histórica
embargo, las críticas han sido constantes. Una que el primero en sugerir la existencia de una
de las más interesantes se basa en la excesiva dimensión que caracterizaba individuos con
dependencia de las conductas de impulsividad y bajo poder atencional o arousal, que parecían
sobreactividad motora sobre el subtipo inatento. quedarse mirando al vacío o soñar despiertos
La mayor o menor presencia de estas conductas con frecuencia, y que además se presentaban
determina que un diagnóstico se incline hasta el inatentos, lentos y erráticos a la hora de procesar
subtipo combinado o al inatento, pero en esta úl- la información, fue Alexander Crichton en 1798.
tima situación la cuestión es: ¿expresa el mismo En su manual de medicina, Crichton defiende
tipo de trastorno un caso en el cual se observan la existencia de dos trastornos de atención di-
muchos síntomas de inatención con bastantes ferenciados: uno basado en la sobreactivación
de impulsividad e hiperactividad (sin poderse de los sistemas atencionales (distraído, frecuen-
llegar al diagnóstico combinado), que otro si- tes cambios del foco atencional, inconsistencia,
milar pero sin ningún síntoma de impulsividad baja concentración y poca persistencia); y otro
ni sobreactividad? O todavía más, ¿serían ambos centrado en la infraactivación atencional (bajos
casos equiparables desde el punto de vista de sus niveles de energía, apatía, debilidad, falta de
implicaciones psicopatológicas? atención, retraimiento, dificultades sociales, po-
De hecho, ocurre que se observan personas cas amistades, etcétera.). El primero se identifica
que presentan síntomas de inatención sin ma- fácilmente con lo que hoy conocemos como
nifestación alguna de impulsividad/hiperacti- TDAH (especialmente el subtipo de predomi-
vidad, pero que a menudo se acompañan de nio combinado), y sin duda fue el que ganó la
conductas como excesiva somnolencia, enlente- partida del interés científico en años posteriores.
cimiento, falta de energía, baja actividad física, Mientras que el segundo, relegado a desarrollos
elevados niveles de conductas internalizadas, posteriores, podría relacionarse con el SCT, pero
un bajo estado de alerta y una pobre orienta- también con Trastornos del Espectro Autista, o
ción (Barkley, 2001b; Carlson & Mann, 2002; incluso algunas características de Trastornos de
Derefinko et al., 2008; Desman, Petermann, Personalidad Esquizoide o Esquizotípica. Es
& Hampel, 2008; Garner, Marceaux, Mrug, decir, quedó en un plano mucho más indefinido.
Patterson, & Hodgens, 2010; Harrington & Hasta la década de 1970 los problemas que
Waldman, 2010; McBurnett, Pfiffner, & Frick, hoy asociamos al TDAH se reducían fundamen-
2001). Este conjunto de síntomas es lo que talmente a un problema de sobreactividad y de
hoy en día se conoce como Sluggish Cognitive impulsividad. Sin embargo, los trabajos de Vir-
Tempo (Barkley, 2001b; Carlson & Mann, 2002; ginia Douglas sacaron a la luz la importancia de
Garner et al., 2010; Hartman, Willcutt, Rhee, la inatención como el elemento definitorio del
& Pennington, 2004; McBurnett, et al., 2001), trastorno hiperkinético, dejando la impulsividad
un concepto cuyo interés ha resurgido en los y la sobreactividad en un papel más secundario.
últimos años (Barkley, 2014, 2015; Becker, 2013; Dichos resultados fueron tan influyentes que el
Becker, Marshall, & McBurnett, 2014), si bien DSM-III (APA, 1980) consideró la inatención
tiene una historia relativamente lejana. como la dimensión nuclear del trastorno, y por

Vol. 8, número 2, 2016 127


Artículo-Objetivo

ello pasó a denominarse Trastorno por Déficit los componentes de inatención e hiperactividad/
de Atención (TDA), reconociendo dos formas: impulsividad del TDAH en una muestra escolar,
con ausencia de sintomatología hiperactiva (-H) encontrando de nuevo la existencia de un tercer
o con sintomatología hiperactiva (+H). A raíz factor. Se trataba de un factor atencional distinto
de esta diferenciación se inician líneas de in- a la inatención propia del TDAH, referido a
vestigación dirigidas a evaluar las disparidades comportamientos lentos, apatía, letargia, som-
entre niños con TDA+H y TDA-H. Como nolencia, “sumidos en su propio mundo”. Poco
resultado de estos estudios quedó plasmado después, Lahey et al. (1988) replicaron nueva-
que los problemas de atención del subtipo con mente dichos resultados con una muestra clínica
hiperactividad se relacionaban más con ítems de individuos con TDAH+H y TDAH-H en
de distracción, descuidos e irresponsabilidad; la que, una vez más, los análisis factoriales asu-
mientras que la inatención de los TDA-H se mieron la presencia de un tercer factor referido
relacionaba más con ítems de lentitud, pere- a individuos olvidadizos, lentos, somnolientos y
za, somnolencia, apatía y “estar en las nubes” con dificultades para seguir instrucciones. Que-
(Carlson, 1986; Lahey, Schaughency, Frame, & da propuesta así la idoneidad de un modelo de
Strauss, 1985). tres factores en el que se separen la inatención/
Además, durante esta misma década (siguien- desorganización, la hiperactividad/impulsivi-
do algunos estudios premonitorios de los años dad y, por último, este tercer factor referido al
sesenta), motivados por la necesidad de espe- tempo lento, que definía a los individuos con
cificar estos dos subtipos del TDA, se llevaron un particular patrón de síntomas inatentos con
a cabo varios estudios de análisis factorial que ausencia casi absoluta de síntomas hiperactivos/
intentaron probar la diferenciación entre los dos impulsivos.
grandes factores que componen el trastorno: Una vez observada la existencia del factor
inatención e hiperactividad/impulsividad. Sor- SCT se llegaron a contrastar datos comparativos
prendentemente (o no tanto) en algunos de ellos con los dos subtipos de TDAH y se concluyó
se manifestó la existencia de un tercer factor, que que, en general, las puntuaciones en este factor
no se ajustaba a ninguno de los dos anteriores, y eran únicamente elevadas en niños con TDA-H
que estaba formado por “problemas de atención/ (Lahey et al., 1987, 1988). La preocupación por
inmadurez”, “inatención/pasividad” o “sluggis- distinguir psicopatológicamente a los dos subti-
hness” (véase, Becker, Marshall, & McBurnett, pos de TDAH permitió en años posteriores afir-
2014). Este factor albergaba, precisamente, com- mar que sus correlatos externos eran distintos:
portamientos que respondían a la somnolencia, mientras el TDA+H se relacionó con mayores
confu­sión, fatiga, pereza y pasividad. Debido a la niveles de agresión, problemas de conducta, re-
gran relación que se establecía entre este tercer chazo social, elevados niveles de agresión, bajos
factor y la inatención, a pesar de presentar con- niveles de sentimiento de culpabilidad (Milich,
ductas diferentes, nunca se consideró de forma Ballentine, & Lynam, 2001), abuso de sustancias
independiente ni se mencionó en los manuales (Barkley, DuPaul, & McMurray, 1990) y más
diagnósticos. problemas de desinhibición (Barkley, DuPaul,
Fue a mediados de los ochenta cuando se & McMurray, 1991), el TDA-H, por su par-
acuñó propiamente el término Sluggish Cogntive te, se asoció con mayores niveles de ansiedad,
Tempo, gracias a un trabajo realizado por R. Nee- infelicidad, timidez, retraimiento social, bajo
per, un colaborador de Benjamin Lahey (Neeper rendimiento académico, pobres habilidades en
& Lahey, 1986). Lo que hicieron estos autores matemáticas (Milich et al., 2001), dificultades
fue replicar factorialmente la distinción entre en velocidad perceptual-motora, procesamiento

128 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

automático y un rendimiento inconsistente en ción y lentitud/pereza) mostraron un bajo poder


tareas de memoria de trabajo (Barkley et al., predictivo negativo (es decir, la probabilidad de
1990, 1991; Hynd et al., 1991). En cierto sentido no padecer TDAH con bajas puntuaciones en
parecía que también el SCT podía encontrar un SCT no era suficientemente alta). Esto llevó al
hueco en esta distinción, pero en realidad no grupo de trabajo a considerar en el DSM-IV
fue así. Todos estos trabajos realizados durante (APA, 1994) un solo factor de inatención en
los años ochenta y principios de los noventa en el que se agrupaban todos los síntomas, dando
los cuales el SCT se interrelacionaba con otras cabida únicamente a un síntoma SCT, “ser ol-
variables definitorias del TDAH no encontraron vidadizo”, puesto que se mostró útil para ambos
su acomodo. Probablemente porque no se llegó a subtipos (Frick et al., 1994).
definir una medida clara de la dimensión, lo cual El no incluir ítems de SCT sin duda supuso
provocó cierta confusión y datos contrapuestos. un freno a la investigación sobre esta dimensión,
Mientras tanto la propia definición del pero no fue excesivamente largo. A principios
TDAH también arrastraba fuertes controver- del presente siglo surge una eclosión de tra-
sias, de modo que el DSM-III-R (APA, 1987) bajos que no ha cesado hasta nuestros días. La
eliminó los subtipos del trastorno definidos ape- disconformidad con los criterios diagnósticos
nas siete años antes, y unificó todos los síntomas del TDAH en el DSM-IV, la clasificación de
en un único Trastorno por Déficit de Atención los subtipos (Willcutt et al., 2012) así como la
e Hiperactividad. Ello no fue la solución porque excesiva heterogeneidad de los niños diagnos-
sólo cuatro años después los grupos de expertos ticados bajo el subtipo inatento (McBurnett et
de los trabajos para la elaboración del DSM-IV al., 2001; Milich et al., 2001), fueron algunos
valoraron reincorporar los subtipos en el TDAH, de los motivos que impulsaron la investiga-
considerando incluso añadir los síntomas del ción sobre SCT. Preocupaba especialmente que
SCT en los nuevos criterios diagnósticos para hubiera niños que con el mismo diagnóstico
formar un nuevo subtipo atencional. El Libro de mostraban clínicas notablemente diferentes,
Opciones del DSM-IV (APA, 1991) propuso pues recibían diagnóstico de TDAH subtipo
el uso de dos grupos de síntomas de inatención inatento (TDAH-IN) tanto niños con 4-5 ítems
y un tercero solapado para identificar cada uno de hiperactividad como con 1 o ningún síntoma
de los subtipos atencionales del TDAH: seis (Milich et al., 2001). De igual forma, muchos
síntomas solapados (dificultad para seguir ins- casos de TDAH-IN mostraban bajos niveles
trucciones, dificultad para mantener la atención, de SCT, mientras otros presentaban niveles
problemas para escuchar, pierde cosas, no presta elevados (Carlson & Mann, 2002). Sin duda los
atención a los detalles y desorganización), dos rumores y la posterior puesta en funcionamiento
síntomas únicos para la inatención con hipe- de los grupos de trabajo para la elaboración del
ractividad (distraído y cambia de actividad con DSM-5 también fueron claves para reanimar la
frecuencia sin haber acabado) y cuatro síntomas investigación sobre el SCT.
SCT únicos para la inatención sin hiperactivi- A partir de ese momento, se podría decir
dad (olvidadizo, somnoliento, lento y apático). que el concepto SCT se puso de moda. Prime-
Tres de los ítems SCT (olvidadizo, somnoliento ro fueron bastantes los expertos que veían en
y lento) fueron evaluados en los estudios de él una mejora en la definición y comprensión
campo del DSM-IV, mostrando un fuerte poder del propio TDAH (Milich et al., 2001); pero
predictivo positivo (esto es, la probabilidad de después algunos fueron más allá y se empezó a
padecer TDAH con elevadas puntuaciones en proponer la existencia del SCT como un factor
los ítems SCT era alta), y dos de ellos (ensoña- separado tanto de la inatención como de la

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Artículo-Objetivo

hiperactividad/impulsividad del TDAH. Así lo menclatura. Desde la descripción de Lahey et al.


entendieron Keith McBurnett y sus colaborado- en 1987, el término, denominado Sluggish Cog-
res en 2001, al replicar los resultados factoriales nitive Tempo, se ha utilizado para refe­rirse a per-
de Lahey de los años ochenta, encontrando un sonas lentas, hipoactivas, apáticas, olvidadizas,
factor SCT similar al que se encontró en su somnolien­tas, con tendencia a soñar despiertas,
momento (olvidadizo, somnoliento, lento) en perdidas en sus pensamientos, desmotivadas, en
una muestra clínica de TDAH. las nubes, confundidas, con bajo rendimiento en
Desde la publicación en 2001 de estos traba- algunos tests neuropsicológicos y con un estado
jos de Milich y McBurnett y sus colaboradores, de alerta y orientación irregulares (p. e., Barkley
el incremento de investigación sobre SCT ha et al., 1990; Barkley, Grodizinsky & DuPaul,
sido muy notable, pues actualmente se encuen- 1992; Carlson & Mann, 2002; McBurnett et al.,
tran unas 50 publicaciones relacionadas con 2001; Milich et al., 2001). Recientemente, los
SCT, la mayoría desarrolladas en estos últimos individuos con síntomas de SCT se describen
cinco años (Becker et al., 2016). Resulta de par- como personas lentas a la hora de responder o
ticular interés la sección especial que la revista completar tareas, parecen “estar en las nubes”,
Journal of Abnormal Child Psychology dedicó en adormilados, tienen problemas para mantenerse
2014 (volumen 42, número 1) al tema, en la que atentos/despiertos, parecen embotados mental-
a través de sus 14 artículos ya queda totalmente mente, se confunden fácilmente, a menudo se
patente que la dimensión SCT había resurgido, quedan mirando fijamente al vacío, se pierden
esta vez para quedarse definitivamente. en sus propios pensamientos, sueñan despiertos,
En resumen, la investigación del SCT en presentan hipoactividad física/letargia, falta de
los últimos años se ha centrado básicamente iniciativa, apatía, retraimiento y no procesan
en desarrollar una medida SCT válida y fiable la información de forma precisa (p. e., Barkley,
que aumente la comprensión de esta dimensión, 2013; 2014; Jacobson et al., 2012; Lee, Burns,
utilizando análisis factoriales para diferenciar Snell & McBurnett, 2014; Penny, Washbush,
estos síntomas de los síntomas de inatención e Klein, Corkum & Eskes, 2009).
hiperactividad/impulsividad del TDAH, pro- Actualmente, para algunos “el SCT es un
bar su validez interna y discriminante, además término descriptivo no formalizado que se usa
de establecer las relaciones del SCT con otras para identificar de mejor manera lo que parece
variables psicopatológicas, comportamentales y ser un subgrupo de pacientes dentro del TDAH
de rendimiento. con predominio inatento, según la clasificación
del DSM” (Tirapu, Ruiz, Luna & Hernáez,
2. La definición del SCT 2015, p. 324). Sin embargo, para otros, como
Como hemos adelantado anteriormente, el con- veremos más adelante al referirnos a la posición
cepto SCT nace de la sospecha de una dimensión de Stephen Becker en el marco de los denomi-
atencional pura, cuyos síntomas resultarían po- nados Research Domain Criteria, probablemente
tencialmente útiles para identificar un subgrupo es precipitado asignar un valor categorial en el
de niños con TDAH con niveles clínicos de ámbito psicopatológico al SCT. Más bien, de
síntomas de falta de atención, pero pocos o momento, debería ser considerado como una
ningún síntoma de hiperactividad/impulsividad dimensión psicológica, en cuyo extremo del
(Barkley et al., 1990; Lahey et al., 1985). continuo, al igual que pasa con otras dimensio-
No obstante, no existe actualmente una defi- nes, como la regulación emocional, puede tener
nición consensuada sobre dicho constructo, así una influencia en el desarrollo o mantenimiento
como tampoco hay consenso en cuanto a su no- de determinados trastornos, no sólo en el caso

130 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

del TDAH sino en otros como los trastornos fluctuación atencional, etcétera) y otro factor
internalizados en general, dadas las relaciones más conductual que respondería al nombre de
que presenta y que destacaremos más adelante. enlentecimiento (movimientos lentos, pensa-
Otro problema que presenta el SCT es que no miento lento, parecer somnoliento, etcétera)
está del todo clara su estructura factorial: única (Barkley, 2013; Jacobson et al., 2012; Lee et al.,
o múltiple. Varios estudios se han interesado por 2014; Penny et al., 2009). Este último factor
este tema y parece que hay bastante consenso en parece confirmarse con mayor fuerza —incluso
aceptar que podrían diferenciarse al menos dos a nivel transcultural1 que el otro, que, como de-
factores del SCT (Lee et al., 2014; Fenollar- cíamos, se ve más contaminado por los síntomas
Cortés, Servera, Becker & Burns, 2014), aunque atencionales ( Jacobson et al., 2012).
otros autores ven más confusa la multidimensio- Finalmente, conviene apuntar la creciente
nalidad del constructo (Barkley, 2013; Willcutt polémica en relación con la terminología. El tér-
et al., 2014). Veamos a continuación los princi- mino sluggish presenta problemas. En realidad
pales resultados al respecto. no tiene una traducción literal al castellano, y
• Penny et al. (2009) con los 14 ítems SCT eso tal vez ha sido una suerte porque en su lugar
diferencian dos factores según datos de pro- se suele utilizar, al menos en España, el término
fesores (adormilado/sueña despierto y lento) tempo cognitivo lento, que refleja bastante bien
y tres factores según padres (lento, adormilado la dimensión sin los problemas asociados al
y sueña despierto). original inglés. Efectivamente en este idioma
• Jacobson et al. (2012) con la misma escala el término deriva de la palabra slug (babosa), lo
de 14 ítems de Penny (2009) encuentran cual ha acabado provocando problemas por su
tres factores para profesores (adormilado/ posible uso ofensivo. Por este motivo, Barkley
lento, lento/sueña despierto y baja iniciativa/ en su artículo de 2014 para el monográfico
persistencia). sobre SCT de la revista Journal of Abnormal
• Becker (2013) propone también tres factores: Child Psychology, realiza un llamamiento a la
Somnoliento/Lento, Sueña despierto y Falta comunidad científica para cambiarle el nombre
de iniciativa/motivación/persistencia. a la dimensión. Tanto en este trabajo de Barkley,
• McBurnett et al. (2014), al intentar desarro- (2014) como en algún otro (Saxbe & Barkley,
llar una escala más adecuada de medida de 2014) se manifiesta la idea de que el término
SCT, tienen en cuenta 44 ítems que finalmen- puede generar una experiencia desagradable y
te quedan reducidos a 15 y los análisis facto- resultar peyorativo tanto para el niño como para
riales confirman la existencia de tres factores: su familia, cuando el clínico les explica las condi-
soñador, somnoliento/cansado y problemas ciones de éste, pues el concepto de lentitud a ni-
de memoria de trabajo. vel cognitivo propio del SCT podría confundirse
fácilmente con un retraso mental. La propuesta
Los autores mencionados coinciden bastante de Barkley es cambiarlo por Trastorno por Dé-
en admitir que el factor relacionado con la falta ficit de Concentración (Concentration Déficit
de iniciativa y motivación está muy asociado Disorder: CDD), ya que mantiene el foco de la
con síntomas de inatención (IN), y por tanto, etiqueta en un problema de atención distinto
no resulta de gran ayuda para diferenciar el al propio del TDAH, no resulta ofensivo para
SCT del TDAH (Barkley, 2013). Se acepta quien lo padece ni para su familia, y por último,
así que la dimensión SCT contaría con un no implica mayor déficit que el que con sguridad
componente cognitivo que podría denominarse sabemos que tiene. Sin embargo, evidentemente
alerta inconsistente (confusión, embotamiento, implica la presencia de un trastorno, cuando,

Vol. 8, número 2, 2016 131


Artículo-Objetivo

como ya hemos comentado anteriormente, otros Desde 2 hasta 17 ítems de procedencia muy
autores consideran que todavía es pronto para variada han sido utilizados indistintamente para
aplicar tal consideración. determinar los niveles de SCT en los diferentes
En esta línea, Becker, Luebbe y Joyce (2015) trabajos (véase Lee et al., 2014 para un análisis
únicamente comparten con Barkley la preocu- exhaustivo). El reciente metaanálisis de Becker
pación por el mantenimiento del uso de SCT, et al. (2016) afirma que existen 13 síntomas SCT
sin embargo, no creen que en la actualidad exista que a lo largo de todos los trabajos de análisis
evidencia suficiente para apoyar el uso de la factorial llevados a cabo con SCT y TDAH
etiqueta trastorno para describir al conjunto de han presentado buenas saturaciones en el factor
síntomas SCT, entre otras cosas, porque no se SCT y bajas en el factor TDAH (Becker et al.,
incluye en ningún manual de trastornos men- 2016, p. 22).
tales y porque el déficit cognitivo subyacente a Pero antes de llegar a las conclusiones de
esta dimensión no ha sido hasta el momento Becker y colaboradores, a lo largo de los años se
identificado. De todos modos, los autores usan han llevado a cabo varios trabajos psicométricos
un término parecido para dar nombre a su au- con la intención de desarrollar escalas de medi-
toinforme de evaluación: Children Concentration da válidas y fiables para el SCT (Barkley 2013;
Inventory (Becker, Lubbe et al., 2015), evitando Becker et al., 2016; Lee et al., 2014; McBurnett
así el uso de los términos sluggish y trastorno, si et al., 2010, 2014; Penny et al., 2009). A conti-
bien se reconoce que es un tema no resuelto. nuación vamos a revisar los más destacados
Leopold et al. (2016) también advierten del (véase la tabla 1).
riesgo que podría conllevar el uso de estas pro- Podríamos afirmar que la mayoría de autores
puestas relacionadas con la idea de SCT como coinciden en arrancar la evaluación del SCT en
un trastorno, pudiendo patologizar comporta- cuatro ítems seleccionados del CBCL (Child
mientos normales y poniendo en peligro la per- Behavior Checklist, Achenbach y Rescorla, 2007;
cepción pública de la psicología y la psiquiatría. Achenbach et al., 2008). Tres ítems procedentes
Esta misma idea queda plasmada en el metaa- de las subescalas de problemas de atención: está
nálisis de Becker et al. (2016), en el que además confundido o parece como si estuviera en las
apuntan la poca idoneidad del término SCT, nubes (ítem 13); sueña despierto, se pierde en
aunque sugieren seguir utilizándolo de momen- sus pensamientos (ítem 17), se queda mirando
to por razones históricas hasta que aparezca un al vacío (ítem 80); y el cuarto procedente de la
término más adecuado en la literatura. De mo- escala de retraimiento/depresión: poco activo,
mento, en este trabajo, nosotros nos adherimos lento o le falta energía (ítem 102). A pesar de
a esta opción, siendo conscientes, sin embargo, que estos ítems forman parte de una nueva escala
de que algo deberá cambiar en el futuro. llamada SCT que se incluye actualmente en la
versión informatizada de corrección del CBCL,
3. La evaluación del SCT su limitación es que no fueron construidos ori-
Tal y como se indica en el apartado anterior, el ginalmente para medir esta dimensión.
hecho de no haber establecido una definición En respuesta a esta necesidad de desarrollo de
consensuada sobre los síntomas nucleares que escalas de medida propias del SCT, los pioneros
conforman el SCT dificulta la realización de ins- fueron Penny et al. (2009), quienes llevaron a
trumentos de medida para dicha dimensión. Es cabo el procedimiento psicométrico habitual
por ello que, según los autores, encontramos di- para crear una escala de medida con soporte
ferentes ítems para medir el SCT, incluso ítems empírico. Para ello, prepararon una lista de ítems
similares con diferentes formas de expresarse. que podrían definir el constructo, basados en

132 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

la literatura existente sobre el tema. Después (2011). Barkley escogió nueve ítems de los
seleccionaron aquellos ítems con una validez síntomas SCT que se utilizaron en estudios
de contenido más elevada generando un pool anteriores con muestras infantiles (Garner et
de 26. Posteriormente se revisaron por cinco al., 2010; Penny et al., 2009) y los adaptó a la
expertos en la materia, con la intención de se- población adulta. La consistencia interna de
leccionar aquellos únicos y más representativos estos ítems para una muestra de 1,249 adultos
del constructo, reduciéndose así a 14. Estos 14 (623 varones de 18 a 39 años; 626 mujeres de 18
ítems se sometieron a un proceso de validación a 96 años) fue de .898 y la fiabilidad test-retest
en forma de cuestionarios aplicados a padres y de la escala 2-3 semanas, después completada
maestros en una muestra de 335 niños de edad por 62 adultos, obtuvo una r = .88. Además, una
escolar. Cada ítem se puntuaba según una escala comparación de puntuaciones pre-post test no
de cuatro puntos que medía la intensidad con reveló cambios significativos entre la primera y
la que se presentaba cada síntoma (0 = nada, 1 = la segunda administración de la escala (Barkley,
sólo un poco, 2 = bastante, 3 = mucho). Los aná- 2012).
lisis factoriales y de validez determinaron que la Otro cuestionario SCT que cuenta con un
mejor manera de describir el SCT era mediante gran apoyo empírico, realizado por el mismo
la combinación de tres subescalas (o tres facto- autor, esta vez pensado para que los padres eva-
res): lento, somnoliento y soñador. Estas tres lúen el comportamiento de sus hijos, se validó
subescalas mostraron una consistencia interna con una amplia muestra de 1,922 participantes
aceptable (rangos de .96 a .92 según los padres (Barkley, 2013). Basado en los 14 ítems pro-
y de .93 a .96 según los maestros), así como puestos por Penny et al. (2009), el autor realiza
buena validez entre evaluadores y test-retest. un análisis factorial que suprime los dos últimos
Los resultados de este estudio sentaron las bases ítems, puesto que mostraban mayores saturacio-
para la construcción de futuras medidas de SCT. nes con el factor inatención (IN) del TDAH que
Ejemplo de ello es el cuestionario autoapli- con el factor SCT, quedando así una escala de
cado de nueve ítems para adultos de Barkley 12 ítems (los 12 primeros propuestos por Penny

Tabla 1. Instrumentos de medida del SCT


Autor Escala Núm. ítems Sistema de evaluación
Achenbach y Rescorla, 2007; Cuestionario para padres
CBCL 4 ítems
Achenbach et al., 2008 y profesores
14 ítems de 26
Penny et al. (2009) Escala SCT Cuestionario para padres y profesores
iniciales
Barkley (2011) Escala SCT adultos 9 ítems Cuestionario autoaplicado para adultos
Barkley (2013) Escala SCT infantil 12 ítems Cuestionario para padres
McBurnett (2010) K-SCT 10 ítems Entrevista diagnóstica para padres
Cuestionario SCT
Lee et al. (2014) 10 ítems Cuestionario para padres y profesores
(basado en K-SCT)
Burns, Lee, Servera, McBurnett Escala SCT
8 ítems Cuestionario para padres y profesores
y Becker (2015) dentro de CADBI
McBurnett, Villodas, 15 ítems de 44
Escala SCT experimental Cuestionario para padres y profesores
Burns et al. (2014) iniciales
Cuestionario autoaplicado para niños en edad
Becker, Luebbe y Joyce (2015) CCI 14 ítems
escolar

Vol. 8, número 2, 2016 133


Artículo-Objetivo

et al., 2009) con una consistencia interna (Alfa discriminante con IN (“baja iniciativa” y “se
de Cronbach) de .934, una fiabilidad test-retest aburre con facilidad, necesita estimulación”).
de r = .84 y sin cambios significativos entre la Los demás ítems confirman una elevada validez
primera y la segunda evaluación, t (85) = 0.06, ns. convergente (saturación elevada para el factor
Uno de los problemas que surge en estos SCT en los análisis factoriales) y discriminante
nuevos instrumentos de medida es que algunos (saturaciones bajas para el factor IN) para padres
síntomas de SCT podrían definir características y maestros y una fiabilidad test-retest aceptable,
de otras patologías, concretamente problemas de evaluada en padres; finalmente se obtiene un
sueño y depresión. Por ejemplo, síntomas SCT instrumento de medida SCT de ocho ítems,
como “parece cansado”, “letargia”, “movimiento válido para padres y profesores, que además evita
lento”, “falta de energía”, “apatía”, “muestra poco solapamiento con otros problemas infantiles.
interés por las cosas” y “baja motivación” son Estos diez dominios validados por Lee et
similares a los síntomas propios de la depresión. al. (2014), basados en los 14 ítems de Penny et
Por otro lado, los síntomas relacionados con la al. (2009), también han servido de base para la
somnolencia podrían confundirse con proble- escala SCT incluida en el Children and Adoles-
mas de sueño en lugar de características SCT cent Disruptive Behavior Inventory (CADBI) en
(por ejemplo, “parece somnoliento”, “bosteza sus sucesivas versiones (véase la última, Burns,
y se despereza con ojos adormilados”, “tiene Lee, Servera, McBurnett & Becker, 2015). Este
problemas para mantenerse despierto o alerta”, cuestionario contempla una versión para padres
“se muestra más cansado que otros”, “parece y otra para profesores con la finalidad de eva-
somnoliento o tiene un aspecto somnoliento”). luar distintas dimensiones psicopatológicas en
En respuesta a esta problemática y en función los niños y adolescentes, así como déficits en
de los 14 ítems SCT propuestos por Penny rendimiento académico. El CADBI ha sido
et al. (2009), Keith McBurnett desarrolla una utilizado a nivel transcultural en varios estu-
entrevista diagnóstica conocida como la Kiddie- dios, y por tanto, traducido a varios idiomas.
Sluggish Cognitive Tempo Diagnostic Interview Este hecho hace que las versiones de tal escala
Module for Children and Adolescent (K-SCT, se hayan modificado en función de los resulta-
McBurnett, 2010). Lo que hace es identificar dos obtenidos. En concreto, la escala SCT, que
los síntomas que mejor reflejan el constructo contaba con diez ítems iniciales, quedó redu-
SCT, lo cual resulta en diez ítems. Una vez cida a ocho en versiones posteriores, dado que,
identificados, los define de manera extensa con como citamos anteriormente, no se encontraron
múltiples ejemplos comportamentales, con la fi- buenas propiedades en dos de los ítems en los
nalidad no sólo de ejemplificarlos, sino de evitar estudios realizados con muestra estadounidense
posibles solapamientos con síntomas propios de (Lee et al., 2014). En los estudios realizados
depresión o problemas de sueño. con población española, sólo cinco de los ítems
Lee et al. (2014) validan estos diez dominios SCT mostraron buenas propiedades según la
de síntomas SCT de McBurnett con padres y evaluación de padres y tres según los profesores
maestros (adaptando la entrevista al entorno (Bernad, Servera, Grases, Collado & Burns,
escolar) de una muestra americana comunitaria, 2014; Burns, Servera, Bernad, Carrillo & Cardo,
en la cual 366 maestros y 1,356 padres evalúan 2013), lo que lleva a los autores de los trabajos a
el comportamiento de niños entre 5 y 13 años. contemplar menos síntomas SCT en sus análisis.
Los resultados de sus análisis muestran que En Chile, utilizando la misma escala traducida
dos de los dominios sintomatológicos de SCT al español, se encuentra que los ocho síntomas
no muestran estándares aceptados de validez SCT muestran validez convergente y discrimi-

134 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

nante en una muestra de amplio rango de edades SCT, al aumentar el número de evaluadores y
(Belmar, Servera, Becker & Burns, 2015). En permitir un avance tanto en la investigación
Nepal son siete los ítems SCT que muestran como en el terreno clínico, gracias al incremento
buenas propiedades internas según profesores de la validez predictiva de los análisis con esta
(Khadka, Burns & Becker, 2015). Por último, medida. Esta escala se desarrolla adaptando los
en Corea del Sur, todos los ítems SCT se han 14 ítems de la medida de Penny et al. (2009)
mostrado válidos y únicos en comparación con para padres y profesores. En concreto, los ítems
el factor IN, según madres, padres y profesores se redactan en primera persona y se modifi-
(Lee, Burns & Becker, en prensa). ca el documento para que resulte fácilmente
Por su lado, McBurnett et al. (2014) evalúan comprensible para los niños. Una vez diseñada,
la estructura latente y la validez de un extenso los autores tratan de validar la medida, ad-
pool de ítems de SCT. Para ello, desarrollan una ministrando el cuestionario a una muestra de
escala de evaluación experimental con 44 ítems 124 niños estadounidenses de edad escolar (de
candidatos de SCT (McBurnett et al., 2014, tercero a sexto grado de primaria) con el fin
p.42), que se administró a padres y maestros de de examinar su fiabilidad, estructura factorial,
165 niños de segundo a quinto grado de pri- validez de constructo y validez de criterio. Los
maria (edades entre 7 y 11 años), seleccionados resultados iniciales ofrecen apoyo a la existencia
de un estudio clínico aleatorizado para la inter- de un constructo general (o de primer orden)
vención psicológica del TDAH-IN. Los análisis de SCT, junto con una evidencia preliminar de
factoriales exploratorios se utilizaron para ex- dos factores específicos (o de segundo orden)
traer los ítems con mayor saturación en factores que serían “Somnoliento” y “Soñador” (coinci-
principales de SCT (se consideran altas las sa- dentes en parte con los encontrados por Penny
turaciones mayores a .59) y bajas la saturaciones et al, 2009). Además, las puntuaciones del CCI
en otros factores SCT y factores TDAH (.30 o muestran una consistencia interna aceptable y
menores) en ambos informantes. Este procedi- evidencias preliminares de validez de constructo
miento redujo la batería a 15 ítems. De forma y validez de criterio.
general, los ítems que representaban lentitud y Prácticamente todos los procedimientos de
baja iniciativa no cumplieron dichos criterios. análisis facto­riales realizados hasta la fecha con
Estos ítems se agruparon en tres factores con medidas directa o indirectamente relacionadas
buenas puntuaciones de validez convergente y con la propuesta de Penny y colaboradores
discriminante: Soñador, Problemas de Memoria (2009) coinciden en la presencia de validez
de Trabajo (que aparece por primera vez como interna del SCT con relación a los dos facto-
factor del SCT) y Somnoliento/Cansado. En res de TDAH, aceptando así un modelo de
el trabajo se evalúan los correlatos internos y tres factores en el que se demuestra la inde­
externos del SCT medidos por estos 15 ítems y pendencia relativa de los ítems de IN, los ítems
separados en estos tres distintos factores. de hipe­ractividad-impulsividad (HI) y los ítems
Por último, conviene comentar el reciente de SCT (Barkley 2013; Becker & Langberg,
trabajo de Becker et al. (2015), quienes, dada la 2013; Becker, Langberg, Luebbe, Dvorsky &
inexistencia de una medida autoinformada de Flannery, 2014; Becker, Luebbe et al., 2015;
SCT para niños (hasta entonces únicamente Belmar et al., 2015; Bernad et al., 2014, Bernad,
existía el auto informe SCT para adultos de Servera, Becker & Burns, 2015; Burns et al.,
Barkley, 2011), desarrollan el Child Concentra- 2013; Carlson & Mann, 2002; Fenorllar-Cortés
tion Inventory (CCI). Su objetivo se centra en et al., 2014; Khadka et al. 2015; Lee et al.,
obtener una mejor comprensión del constructo 2014; 2016; Leopold et al., 2016; McBurnett,

Vol. 8, número 2, 2016 135


Artículo-Objetivo

Pfiffner & Frick, 2011; McBurnett et al, 2014; relativamente elevada su relación a lo largo del
Moruzzi, Rijsdik & Battaglia, 2013; Penny et tiempo, pero también que son diferenciables.
al., 2009; Servera, Bernad, Carrillo & Collado, Es importante hacer notar, como ya hemos
2015; Skirbekk, Hansen, Oerbeck & Kristensen, explicado anteriormente, que la relación de la
2011; Willcut et al., 2014). De todos modos, hiperactividad/impulsividad y el SCT es más
como era de esperar, la relación entre IN y elevada con inatención que la que mantienen
SCT siempre ha resultado bastante más intensa entre sí estas dos últimas variables.
que la observada entre SCT y HI. Además, en
cuanto a la validez externa, los procedimientos 4. Estudios epidemiológicos del SCT
de factorializacion demuestran que SCT es un En vista de las pruebas a favor de la diferenciación
constructo distinto de la ansiedad, la depresión entre la dimensión SCT respecto del TDAH
y la somnolencia diurna (Becker 2014; Becker et (incluso del TDAH-IN, a pesar de su elevada re-
al., 2016; Lee et al., 2014; Willcutt et al., 2014). lación), son muchos los investigadores que sospe-
Aunque se requieren trabajos adicionales so- chan que ambos constructos deberían manifestar
bre la medida de SCT, actualmente los 13 ítems diferentes correlatos demográficos y epidemioló-
identificados por Becker et al. (2016) parecen gicos. De modo general, se estima que entre un
ser considerados transversales en todos los in- 30% y un 63% de individuos con diagnóstico de
tentos de medida de este constructo, teniendo TDAH-IN presentan elevados síntomas de SCT
en cuenta los cuestionarios para padres y pro- (Carlson & Mann, 2002; Garner et al., 2010;
fesores o las escalas autoaplicadas para niños y McBurnett et al., 2001), sin embargo, y como
adultos (Barkley, 2011; 2013; Becker, Luebbe prueba de dicha diferenciación entre TDAH y
et al., 2015; Lee et al., 2014; McBurnett et al., SCT, aproximadamente la mitad de los individuos
2014; Penny et al., 2009), así como una entrevista con TDAH podrían no presentar síntomas SCT
clínica semiestructurada (McBurnett, 2010). y viceversa (Barkley, 2013; Garner et al. 2010).
De hecho, los estudios que han utilizado estas Los trabajos más potentes con relación a las
medidas demuestran que SCT es un constructo características demográficas diferenciales entre
que puede evaluarse de manera fidedigna, con SCT y TDAH son los llevados a cabo por
una excelente consistencia interna, buena fia- Barkley, tanto con adultos (2012) como con
bilidad test-retest, y moderada fiabilidad entre niños (2013). En sus estudios, este autor estima
evaluadores (Becker et al., 2016). la prevalencia del SCT en población adulta ame-
Por último, es importante destacar que la ricana en un 5,1% (Barkley, 2012), de los cuales,
validez interna del SCT ha sido identificada en sólo la mitad, presentaba diagnóstico de TDAH.
diferentes tipos de muestras (clínicas, comuni- En su trabajo con 1,800 niños estadounidenses
tarias, epidemiológicas), diversos rangos de edad entre 6 y 17 años, Barkley (2013) encuentra que
(desde los tres años hasta los 96 años) y de forma alrededor del 6% presentan elevadas puntua-
transcultural en distintos continentes (América ciones SCT (por encima del percentil 94), y de
del Norte, América del Sur, Europa y Asia). éstos, más de la mitad (el 59%) podían calificarse
Con relación a la estabilidad de la dimensión, también como TDAH. De esta manera, calcula
Leopold et al. (2016) evaluaron una muestra de que aproximadamente un 60% de los jóvenes
489 niños gemelos y los resultados mostraron in- con SCT también presentan TDAH y un 40%
variancia en la saturación de los ítems SCT y las de los diagnosticados de TDAH manifiestan
intercepciones desde preescolar hasta 14 años. sintomatología SCT elevada (Barkley, 2013).
Además de la estabilidad del TDAH y el SCT, Dichos hallazgos replican y amplían estudios
se observó que ambas dimensiones mantienen rea­lizados con anterioridad (Garner et al., 2010;

136 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

Jacobson et al., 2012), en los que se confirma la Pocos son los trabajos que contemplan la
sospecha de que SCT presenta diferentes corre- relación entre el estatus socioeconómico y SCT
latos demográficos respecto al TDAH, al formar (Barkley, 2013; Becker, 2014; Becker, Langberg,
parte de dos dimensiones diferenciadas. Además, et al., 2014; Marshall, et al., 2014; McBurnett,
otros estudios actuales relacionados con cuestio- et al., 2014). Los resultados sugieren que SCT
nes epidemiológicas y demográficas del SCT podría relacionarse con un menor ingreso fami-
corroboran en gran parte los datos aportados liar y menor educación de los padres, tanto en
por Barkley (Becker & Langberg, 2013; Lee et niños como adultos. Además, Barkley (2012)
al., 2014). encuentra que cuando existe comorbilidad entre
El reciente trabajo de metaanálisis de Becker SCT y TDAH, las personas afectadas padecen
et al. (2016) ofrece una compilación de los resul- mayores dificultades para encontrar trabajo.
tados encontrados a lo largo de los años en rela- Por último, la mayoría de los estudios llevados
ción a las características demográficas del SCT. a cabo hasta ahora indican que los individuos
En cuanto a la diferenciación por sexos, existe con elevada sintomatología SCT no se diferen-
diversidad de resultados, pues varios estudios cian en raza/etnia de los que no tienen síntomas
consideran que no hay diferencias de sexo entre SCT (Barkley, 2012; 2013; Becker, 2014; Becker,
grupos (Barkley, 2012; 2013; Carlson & Mann, Luebbe, Fite, et al., 2014; Carlson & Mann,
2002; Marshall, Evans, Eiraldi, Becker & Power, 2002; Garner et al., 2010; Marshall et al., 2014).
2014; Jarret, Raport, Rondon & Becker, 2014); Sin embargo, un estudio encontró que los niños
dos estudios encuentran mayor prevalencia de que no eran blancos tenían mayores niveles de
chicas en el grupo con elevadas puntuaciones SCT que los niños blancos (Becker et al., 2013).
SCT en comparación a grupos con sólo TDAH Resulta de gran interés comentar el estudio
(Barkley, 2013), y un estudio encuentra un ma- más reciente conocido hasta la fecha que ofrece
yor porcentaje de chicos en el grupo con altas novedades en cuanto a datos demográficos del
puntuaciones de SCT en comparación con el SCT. Se trata de un trabajo realizado por Cam-
grupo con bajas puntuaciones SCT (Becker, prodón, et al. (2016) en Barcelona, en el que se
2014). Sin embargo, hay que precisar que en evalúa la sintomatología SCT, en una muestra
este último estudio no se divide al grupo con clínica no TDAH de 834 individuos referidos
altas puntuaciones SCT entre los que tienen a Servicios de Salud Mental Infantil y Adoles-
y no tienen TDAH, dejando la posibilidad de cente (sólo dos estudios anteriores consideraron
que la elevada proporción de niños en el grupo este tipo de muestra: Becker, Luebbe, Fite et al.,
con elevado SCT fuera debida a un subconjunto 2014 y Raiker, et al. 2015). Estos investigadores
que también muestra elevados síntomas TDAH. encuentran que la sintomatología SCT es más
En cuanto a la edad, Barkley (2012, 2013) elevada en muestras clínicas que en muestras
aprecia diferencias tanto en niños como en comunitarias. Además, al igual que Barkley
adultos: aquellos individuos que presentaban (2012, 2013), afirman que los síntomas SCT se
más síntomas SCT eran mayores que los que relacionan con la edad, de modo que este tipo
tenían bajas puntuaciones. Sin embargo, en de comportamientos suelen aparecer en edades
otros estudios que comparan la edad entre in- más tardías, conforme aumentan las demandas
dividuos con elevado número de síntomas SCT del entorno (a nivel académico y de funciones
y baja sintomatología SCT (Carlson & Mann, ejecutivas). En este estudio, a diferencia del
2002; Marshall et al., 2014; Jarret et al., 2014; de Barkley, sí se encontraron diferencias por
Becker, 2014) no se encuentran diferencias sexo en síntomas SCT, en favor de los varones.
significativas. También se observa que los pacientes TDAH

Vol. 8, número 2, 2016 137


Artículo-Objetivo

tienen más síntomas de SCT, especialmente de dicha función sobre el TDAH: si se evalúan
altos en los TDAH-IN; pero los que mayores niños TDAH con presencia de elevado SCT la
niveles de SCT presentan son los pacientes con alteración será visible, pero en caso contrario, no.
Trastornos del Aprendizaje, incluso más que los Para ello, los autores analizan la función tiroi-
niños con TDAH. dea en una muestra de 571 niños hospitalizados
En resumen, no queda clara la existencia de en psiquiatría sin diagnóstico de TDAH (según
diferencias entre sexos en la dimensión SCT, DSM-IV), de edades comprendidas entre 6 y
puesto que tenemos resultados en todas las 12 años y con niveles normativos de TSH, así
direcciones posibles: no diferencias o preponde- como su relación con puntuaciones de SCT. Los
rancia de uno u otro sexo. En cuanto a la edad, resultados, de naturaleza preliminar, afirman una
se intuye una asociación positiva modesta entre relación positiva y estadísticamente significativa
SCT y la edad (a más edad, más visibles los entre niveles hipoactivos de TSH y la presencia
síntomas SCT). La comorbilidad entre SCT y de síntomas SCT, valorados según puntuaciones
TDAH parece suponer un agra­vamiento de la de los padres en tres ítems SCT incluidos en el
mayoría de las disfunciones, sin embargo, en el CBCL. Esta relación, sin embargo, no se apre-
caso específico del mundo laboral, las disfun- ciaba en niños con síntomas TDAH. A pesar
ciones producidas por el SCT son mayores que de la poca magnitud del efecto, los resultados se
las relacionadas con el TDAH. Y por último, mantienen incluso al controlar las características
queda claro que se necesita más investigación demográficas de los niños y la presencia de otros
para evaluar la relación SCT con características síntomas comórbidos al SCT. Estos resultados,
demográficas, así como la evidencia de que SCT además de apoyar la idea sobre la independencia
está asociado con el nivel socioeconómico bajo. entre SCT y TDAH, resultan interesantes por
su valor biológico, pues apuntan a un posible
5. La relación del SCT con medidas biomarcador para aquellos individuos con SCT,
y factores biológicos incluso en población normal y en niños con ni-
Becker, Luebbe, Greening, Fite y Stoppelbein veles de TDAH dentro de la normalidad.
(2012) son de los primeros en interesarse por Más adelante, Graham et al. (2013) estu-
una medida biológica relacionada con el SCT. diaron niños que padecen síndrome alcohólico
Basados en los resultados incongruentes de los fetal (SAF), encontraron que muchos de ellos
estudios que examinan la disfunción tiroidea en presentan elevadas puntuaciones de SCT, con
el TDAH, es decir, a sabiendas de que hay tanto cierta indepen­dencia de la presencia de síntomas
estudios que confirman esta relación (Álvarez- TDAH, evidenciando así una asociación entre
Pedrerol et al., 2007; Hauser et al., 1993; Weiss, exposición prenatal al alcohol y síntomas SCT.
Stein, Trommer, & Refetoff, 1993) como otros Este hallazgo podría indicar dos hechos a tener
que no (Spencer, Biederman, Wilens, Guite & en cuenta: por un lado, el SAF podría conside-
Harding, 1995; Stein & Weiss, 2003; Valentine rarse un factor de riesgo en el desarrollo de sínto-
et al., 1997), estos autores hipotetizan que tal vez mas SCT, y por otro lado, la evaluación del SCT
la relación entre la función tiroidea (en concreto puede inducir, en casos extremos, a la sospecha
de la hormona estimulante de la glándula tiroidea: de SAF (o sín­dromes similares), pudiéndose
tirotropina o TSH) y los síntomas SCT pueda ex- beneficiar de intervenciones tempranas.
plicar la incongruencia de los resultados previos. Por su lado, Becker et al. (2013) sugieren que
Es decir, si los síntomas SCT se relacionan sig- existen ciertas dimensiones de personalidad que
nificativamente con la función tiroidea alterada, podrían contribuir a la presencia del SCT. En
esta dimensión sería la mediadora en la influencia concreto, los datos de una muestra comunitaria

138 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

con niños de 9 a 12 años, aunque muy prelimi- En resumen, los estudios biológicos del SCT
nares, apuntan a que la sensibilidad al refuerzo son todavía muy incipientes y en muchos casos
(y la impulsividad/búsqueda de sensaciones) se no están basados en las escalas más validadas de
asocian con el TDAH y los síntomas externa- la dimensión. Hemos visto que todavía abunda
lizados, mientras que la sensibilidad al castigo la evaluación del SCT con los ítems del CBCL.
(y el miedo/timidez) se asocian con el SCT y Esto constituye una limitación para extraer
los síntomas inter­nalizados. Estos resultados conclusiones, no obstante, la línea de trabajo
ofrecen un apoyo más a la hipótesis que sostiene centrada en diferenciar un modelo etiopatogé-
que SCT representa un constructo diferenciado nico diferente entre TDAH y SCT basado en
del TDAH. estudios genéticos y de funcionamiento hor-
En 2014 se publicó un trabajo de Moruzzi, monal y neural parece que ocupará un lugar
Rijsdijk y Battaglia que tal vez podemos con- preponderante en los próximos años.
siderar como la primera evidencia etiológica de
la diferenciación entre SCT y TDAH. Estos 6. Las implicaciones del SCT
autores analizan la relación entre la dimensión en otras medidas y dominios
inatenta del TDAH (TDAH-IN), la hiperac- comportamentales
tiva/impulsiva del TDAH (TDAH-HI) y la El estudio de la validez externa del SCT ha
SCT; medidas a través de los ítems del CBCL, sido uno de los objetivos de los últimos años y
en una muestra de 398 pares de gemelos de 8 a en realidad disponemos ya de muchos datos al
17 años pertenecientes a la base pobla­cional del respecto. Este estudio suele empezar siempre
Registro Italiano de Gemelos. Los resultados analizando la relación entre el SCT y el TDAH,
manifiestan una elevada correlación entre las tres y a continuación comparando su influencia con-
dimensiones tanto a nivel genético (intervalo junta y por separado sobre otros dominios del
0.65/.83) como ambiental (intervalo .29/.44). comportamiento.
No obstante, se encuentran algunas diferencias En general, se acepta que existe una rela-
notables que merecen ser comentadas, como ción moderadamente elevada entre el SCT y
son que el componente hereditario del SCT lo el TDAH, muy especialmente con la medida
es en menor medida que el del TDAH, que el TDAH-IN. Las correlaciones habitualmente
SCT comparte apro­ximadamente la mitad de elevadas entre SCT y TDAH-IN podrían ha-
su contribución genética con el TDAH, y que cer desistir en principio de considerarlas como
el factor SCT parece estar más influenciado por “dimensiones independientes” y, sin embargo,
la contribución de factores ambientales únicos tanto a través de los análisis de regresión más
(o no compartidos) que por factores genéticos. tradicionales como de otros basados en los
En el mismo año, Casher, Carbondale y rasgos latentes y los modelos de ecuaciones
McCray (2014) presentaron un trabajo en una estructurales, se ha podido comprobar que el
reunión científica, basado en una muestra de aparente solapamiento entre ambas dimensiones
gemelos y hermanos de 5 a 10 años, en el cual se plasma de forma bastante diferente sobre el
aseguran que los niños con altas puntuaciones comportamiento de las personas, más concre-
SCT (medido a través de los cuatro ítems del tamente de los niños, puesto que han sido las
CBCL) presentaban degeneraciones en una muestras más utilizadas. A continuación com-
región polimórfica repetida ligada al gen trans- probaremos que, controlándose su influencia
portador de la serotonina (SCLC6A4), algo que mutua, SCT y TDAH-IN tiene una capacidad
resulta habitual en los estudios etiopatogénicos predictiva única e incluso diferenciada en algu-
del TDAH. nas variables relevantes.

Vol. 8, número 2, 2016 139


Artículo-Objetivo

6.1. La relación del SCT la relación entre SCT y depresión ha sido


con medidas psicopatológicas sorprendentemente elevada, esto ha llevado a
Los estudios más interesantes en esta área se determinados autores a controlar la influencia
suelen centrar en obtener datos en medidas de de la depresión sobre SCT a la hora de valorar
SCT, de TDAH-IN (o TDAH en general) y de su asociación con otras variables (Bernad et
otras medidas psicopatológicas, tanto de varia- al., 2014; Burns et al., 2013).
bles internalizadas (ansiedad/depresión), como • En cualquier caso, diferentes estudios de
externalizadas (problemas de comportamien- análisis factorial indican que SCT es distinto
to, hiperactividad, etcétera). La metodología tanto de depresión como de ansiedad (Bernad
habitual de estos trabajos es, en primer lugar, et al., 2014; Becker, Luebbe & Langberg,
analizar la capacidad explicativa del SCT y del 2014; Burns et al., 2013; Lee et al., 2014;
TDAH-IN y, en segundo lugar, repetir los aná- Willcutt et al., 2014).
lisis ejerciendo un control mutuo entre ambas • Con respecto las medidas externalizadas,
variables. En este sentido, las conclusiones más los resultados indican que tanto SCT como
relevantes han sido las siguientes: TDAH-IN correlacionan con sintomatología
• En relación con las medidas internalizadas, externalizada, como la hiperactividad/impul-
se ha descubierto en la mayoría de trabajos sividad (HIM), problemas de conducta (PC)
la existencia de correlaciones elevadas en- o síntomas del Trastorno Negativista Desa-
tre SCT y TDAH-IN con sintomatología fiante (TND), aunque dicha correlación es
internalizada. En concreto, al controlar la más elevada en TDAH-IN que en SCT. Lo
influencia mutua de SCT sobre TDAH-IN y curioso de esta asociación es que, mientras el
viceversa, se observa que ambas dimensiones TDAH-IN predice elevadas puntuaciones de
predicen hasta cierto punto elevadas puntua- sintomatología externalizada, elevadas pun-
ciones en medidas internalizadas (ansiedad tuaciones de SCT ofrecen relaciones nulas o
y depresión) de forma diferencial (Araujo, incluso negativas con los comportamientos
Jané, Bonillo, Arrufat & Serra, 2015; Bauer- externalizados, incluso tras controlarse la in-
meister, Barkley, Buermeister, Martínez & fluencia mutua de TDAH-IN y SCT (Barkley,
McBurnett, 2012; Becker & Langberg, 2013; 2012; Becker & Langberg, 2013; Becker et al.,
Becker, Ciesielski, Rood, Froehlich, Garner, 2016; Becker, Luebbe, Fite et al., 2014; Belmar
Tamm, & Epstein, 2014, Becker et al., 2016; et al., 2015; Bernad et al., 2014; 2015; Burns et
Becker, Langberg, et al., 2014; Becker, Luebbe al., 2013; Fenollar-Cortés et al., 2015; Garner,
et al., 2015; Belmar et al., 2015; Bernad et al., Mrug, Hodgens & Patterson, 2013; Khadka et
2014; 2015; Burns et al., 2013 ; Camprodon al., 2015; Langberg, Becker & Dvrosky, 2014;
et al., en prensa; Fenollar-Cortés et al., 2014; Lee et al., 2014; Leopold, Bryan, Penning-
Flannery, Becker & Luebbe, 2014; Khadka et ton, & Willcutt, 2014; Marshall et al., 2014;
al., 2015; Lee et al., 2014; 2016; McBurnett McBurnett et al., 2014; Moruzzi et al., 2014;
et al, 2014, Penny et al., 2009; Servera et al., Penny et al., 2009; Saxbe & Barkley, 2014;
2015; Willcutt et al., 2014). Servera et al., 2015; Willcutt et al., 2014;).
• De forma específica, el SCT parece relacio- • Niños con TDAH con elevados síntomas
narse más con depresión que con ansiedad de SCT muestran menores puntuaciones de
(Barkley, 2013; Becker, Luebbe, Fite et al., comportamientos externalizados, como agre-
2014; Fenollar-Cortés et al., 2014; Jacobson siones, en comparación con niños TDAH
et al., 2012, Khadka et al., 2015; Servera et sin síntomas SCT (Carlson & Mann, 2002;
al., 2015). De hecho, en algunas ocasiones Marshall et al., 2014).

140 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

• El estudio de Fenollar-Cortés et al. (2014) ropsicológicos (Hervey, Epstein, & Curry, 2004;
presenta resultados que matizan la asociación Willcutt, Doyle, Nigg, Faraone, & Pennington,
anteriormente afirmada, pues en su trabajo 2005), considerándose, en última instancia, un
el factor de SCT “Alerta Inconsistente” sí trastorno de las funciones ejecutivas (FE). Sabe-
muestra relaciones significativas con com- mos que las áreas afectadas en niños con TDAH
portamientos externalizados, tras controlar se asocian con déficits en el control inhibitorio,
la influencia de TDAH-IN. la planificación y organización de tareas, la me-
• La mayoría de los datos se refieren a resul- moria de trabajo, la variabilidad de respuesta,
tados transversales, pero existen actualmente el control emocional, la monitorización y la
algunos estudios longitudinales (de uno a dos flexibilidad para cambiar de estrategia (Barkley,
años) que encuentran resultados similares, de 2001a; Brocki, Eninger, Thorell, & Bohlin, 2010;
forma que el SCT predice más comporta- Willcutt et al., 2005). En concreto, una de las
mientos internalizados y bajas puntuaciones áreas más afectadas en los niños con TDAH-IN
en hiperactividad/impulsividad y negativismo es la inhibición de la respuesta (Brocki et al.,
desafiante tanto al año como a los dos años 2010; Mullane, Corkum, Klein, McLaughlin,
(Bernad et al., 2014; 2015; Servera et al., & Lawrence, 2011). Dada la elevada relación
2015). entre SCT y TDAH-IN, sería lógico pensar que
Todos estos resultados ofrecen un aumento las mismas áreas podrían verse alteradas tanto
de la evidencia respecto a la diferenciación en- en niños con TDAH-IN como en aquellos con
tre SCT y TDAH, aunque la etiología de cada elevadas puntuaciones de SCT.
una de las asociaciones con SCT y TDAH es Sin embargo, hasta el momento pocos son
desconocida y, por tanto, representa un área los trabajos que han examinado la asociación
importante para futuras investigaciones (Becker entre el SCT y los déficits neuropsicológicos.
et al., 2016). De igual forma, sería interesante Además, la mayoría utilizan muestras de niños
seguir estudiando los dominios funcionales es- que además de puntuaciones elevadas en SCT
pecíficos que tienen impactos negativos en la presentaban en menor o mayor medida sospecha
vida del individuo, al igual que aquellos que no de TDAH (Bauermeister et al., 2012; Huang-
se ven afectados por la presencia de síntomas Pollock, Nigg, & Carr, 2005; Skierbekk et al.,
SCT, o que incluso pueden verse amortiguados 2011; Wahlstedt & Bohlin, 2010; Willcutt et
ante su presencia (Becker & Barkley, 2016). al., 2014), con lo cual metodológicamente se
En este sentido es destacable el carácter de complica la generalización de unos resultados
factor de riesgo que ejerce el SCT en algunas que, por otra parte, aún son preliminares.
medidas, como las de depresión y retraimiento Por un lado, algunos estudios sugieren que,
y, menos, ansiedad; así como el factor protector a diferencia del TDAH, los síntomas del SCT
que presenta sobre otras, especialmente en abu- no se asocian con alteraciones en las FE (Bauer-
so de sustancias, comportamientos antisociales, meister et al., 2012; Jarret, Rapport, Rondon &
impulsividad extrema, etcétera. Becker, 2014). Concretamente se ha sugerido
que los niños con un perfil SCT tal vez no
6.2. El SCT, el funcionamiento muestren déficits tan acentuados en inhibición y
neuropsicológico y las funciones memoria de trabajo (Barkley, 2001b; Derefinko
ejecutivas et al., 2008; Wahlstedt & Bohlin, 2010). En
Existen gran cantidad de estudios en la litera- cambio, por otro lado, disponemos de estudios
tura científica que demuestran que el TDAH que afirman que el hecho de presentar síntomas
se relaciona con una larga lista de déficits neu- en SCT sí está relacionado con ciertas altera-

Vol. 8, número 2, 2016 141


Artículo-Objetivo

ciones difusas en las FE, si bien medidas más y adolescentes con TDAH (diferenciando aque-
en la vida diaria que en pruebas de laboratorio, llos con altas y bajas puntuaciones en SCT) y
tanto con niños (Araujo et al., 2015; Barkley controles, y midieron las siguientes variables:
2001a; 2014; Becker & Langberg, 2013; Ser- inhibición de respuesta, memoria de trabajo,
geant, Geurts, & Oosterlaan, 2002; Sonuga- velocidad de procesamiento, velocidad de nom-
Barke, Dalen, Daley, & Remington, 2002), como bramiento, atención sostenida y variabilidad de
con adultos (Barkley, 2012; Jarret et al., 2014; respuesta. Las puntuaciones en SCT correlacio-
Wood, Lewandowski, Lovett & Antshel, 2014). naron con las seis medidas neuropsicológicas,
De todos modos, a continuación revisaremos al igual que las medidas de IN. Sin embargo,
los resultados más relevantes de los principales los análisis de regresión mostraron que IN se
estudios sobre el tema. asoció de modo independiente con inhibición
Capdevila-Brophy, Artigas-Pallarés y Obiols- de respuesta, memoria de trabajo y variabilidad
Llandrich (2006) encuentran en su estudio défi- de respuesta, mientras SCT se asoció de modo
cits en la metacognición de los niños con SCT. independiente exclusivamente con la atención
Hurtig et al. (2007) muestran que los niños con sostenida. En cierto modo, pues, se reforzó la
SCT y TDAH-IN tienen los mismos proble- idea ya expuesta por Wahlstedt y Bohlin (2010)
mas para organizar tareas, seguir instrucciones de la mayor implicación del SCT en el mecanis-
y evitar tareas. Penny et al. (2009) sugieren la mo de atención sostenida.
posibilidad de que el SCT pueda entenderse Como comentamos anteriormente, en es-
y explicarse como una alteración del arousal o tudios que examinan la función ejecutiva en
incluso de una hipersomnia. Por su parte, Adams la vida diaria de niños mediante escalas para
et al. (2010) creen que los síntomas SCT repre- padres, el SCT se ha mostrado una dimensión
sentan una forma patológica de “mente errante” influyente en dominios como la planificación,
(mind-wandering). Garner et al. (2010) analizan la organización y la automotivación, de modo
las dimensiones y correlatos del SCT en relación independiente al TDAH (Araujo et al., 2015;
con los síntomas del TDAH mediante puntua- Barkley, 2013; Becker & Langberg, 2013). Cu-
ciones en escalas comportamentales de padres riosamente en los trabajos anteriores el único
y maestros, confirmando que el área atencional dominio que no se relacionó con el SCT fue la
conforma el principal deterioro para los niños regulación emocional, en cambio, en estudios si-
con SCT. En cambio, casi en una línea opuesta milares, pero que en lugar de escalas para padres
hasta lo ahora visto, Skirbekk et al. (2011) no se usaron autoinformes para evaluar las FE en
encuentran déficits en memoria de trabajo en la vida diaria, no sólo se pudo comprobar que
niños con SCT (cuando es una de las funcio- las personas con mayor SCT reconocían tener
nes tradicionalmente considerada como más un peor funcionamiento ejecutivo en general,
alterada en TDAH). En la otra función tradi- sino también en regulación emocional (Araujo
cionalmente alterada del TDAH, la inatención, et al., 2015; Becker & Langberg, 2013; Lahey
Wahlstedt y Bohlin (2010) encuentran que et al., 2004).
también lo está en el SCT, sin embargo, parece En definitiva, como ya adelantamos al prin-
que está fundamentalmente circunscrita a la cipio, los resultados son algo contradictorios y
atención sostenida evaluada a través del número difíciles de resumir. Por ello, tal vez es interesante
de omisiones y latencia de respuesta en tareas basarse en uno de los pocos metaanálisis sobre el
basadas en el paradigma go/no go. tema, realizado por Becker et al. (2016). En este
En un trabajo más reciente, Willcutt et al. trabajo se concluye que, aun con limitaciones,
(2014) utilizaron una amplia muestra de niños se dispone de estudios con niños y adolescentes

142 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

en donde se observa que elevadas puntuacio- atencionales diferenciados, optando por el mo-
nes de SCT se asocian significativamente con delo de Posner y Petersen (1990). De este modo,
menores puntuaciones generales en pruebas de el déficit propio en SCT se relacionaría con la
inteligencia, inhibición de respuesta, memoria red de orientación, implicada en la selección de
de trabajo, velocidad de procesamiento y aten- información sensorial y atención visoespacial.
ción sostenida; aunque el tamaño del efecto es Las áreas cerebrales implicadas en esta red serían
pequeño (Becker & Langberg, 2013; Hartman la corteza parietal, el giro precentral, la corteza
et al., 2004; Mikami, Huang-Pollock, Pfiffner, oculomotora frontal, los colículos superiores
McBurnett & Hangai, 2007; Reeves et al., 2010; y el tálamo. Serían los cambios externos en la
Skirbekk et al., 2011; Wahlsted & Bohlin, 2010; orientación de atención los que promoverían la
Willard et al., 2013; Willcutt et al., 2014). A lo activación de esta red atencional. En cambio, las
anterior podemos añadir dos ideas: la primera dificultades del TDAH inatento se centrarían
es que al ejercerse control de las puntuaciones en la atención sostenida, es decir, en la red de
de inatención sobre las de SCT, los resultados vigilancia, mientras los déficits del TDAH com-
se vuelven más diversos y contradictorios; y, la binado radicarían en la red de atención ejecutiva:
segunda, que las diferencias en FE se hacen control inhibitorio, tareas de cambio, resolución
más evidentes a medida que se usan muestras de conflictos, detección de errores, localización
de mayor edad. de recursos atencionales, planificación, procesa-
Por otra parte, además de los resultados dis- miento de estímulos novedosos y ejecución de
ponibles hasta el momento, es interesante citar nuevas conductas.
la revisión sobre el SCT de Tirapu et al., (2015), En definitiva, la relación entre el SCT, el
puesto que dedican un apartado especial a sus TDAH y las FE es un tema que requerirá mu-
relaciones con las FE. Los autores destacan que chos más esfuerzos en el futuro, pero que ya se
los individuos con SCT parecen mostrar un adivina complejo. Tanto desde el punto de vista
tipo diferente de déficit de atención del que se metodológico (cómo realizar los análisis), como
observa en el TDAH. Así, individuos con SCT aplicado (cómo tomar las medidas). A todo ello
presentan problemas de entrada y filtración de conviene añadir una variable todavía no contem-
información sensorial, mientras que aquellos plada y es la perspectiva longitudinal. En cierto
con TDAH clásico tienen problemas con la in- modo ya hemos apuntado su importancia al
hibición (Capdevila-Borphy et al., 2006) o bien resaltar el hecho que parece que la edad influye
aparentan energía excesiva sin dificultades en el a la hora de observar relaciones significativas
procesamiento de la información (Barkley, 2009; entre el SCT y las FE. Por tanto, probable-
Martín-González et al. 2008; Pliszka, 2007). mente harán falta estudios longitudinales para
Además, señalan que los individuos con SCT situar puntos evolutivos en los cuales, en primer
tienden a mayores y más significativos problemas lugar, se puedan observar y concretar las dife-
en habilidades verbales y memoria a largo plazo, rencias y, en segundo lugar, y más importante,
déficit en memoria de trabajo, procesamiento desarrollar modelos explicativos que nos ayuden
del pensamiento más desorganizado, con un a comprender estas relaciones aparentemente
grado mayor de torpeza y propensión a perder complejas.
objetos más fácilmente, pero mejor capacidad en
las habilidades visoespaciales. A la vista de los 6.3. El SCT y el funcionamiento social
resultados que han podido revisar, estos autores Como ocurrió en su momento con el TDAH,
opinan que sería adecuado “anclar” los diferentes donde la influencia de los problemas de inaten-
subtipos de TDAH en modelos conceptuales ción y de impulsividad e hiperactividad se han

Vol. 8, número 2, 2016 143


Artículo-Objetivo

reflejado claramente en la disfunción social de Becker, Luebbe, Fite et al., 2014; Bernad et al.,
los niños, se ha hipotetizado que las conductas 2014; 2015; Burns et al., 2013; Flannery et al.,
definitorias del SCT también podrían tener un 2014; Lee et al., 2014; Mikami et al., 2007; Ser-
efecto similar. Con los datos disponibles, pode- vera et al., 2015; Willcutt et al., 2014). De ma-
mos afirmar que existe una relación contrastada nera más específica, y también de forma única,
entre el SCT y el deterioro o las dificultades de se ha asociado con baja autoestima, dificultades
funcionamiento social (Barkley, 2012; 2013; de regulación emocional (Barkley, 2012; Bec-
Becker & Langberg, 2013; Becker, Luebbe et al., ker, Luebbe et al., 2015; Flannery et al., 2014;
2015; Becker, Luebbe, Fite et al., 2014; Belmar Jarrett et al., 2014; Wood et al., 2014), mayores
et al., 2015; Bernad et al., 2014; 2015; Burns et tasas de retraimiento (Capdevila-Borphy et al.,
al., 2013; Flannery, Becker & Luebbe, 2014; 2014; Marshall et al., 2014; Willcutt et al., 2014)
Khada et al., 2015; Lee et al., 2014; en prensa; y aislamiento (Becker et al., 2013; Marshall et
Penny et al, 2009; Raiker et al., 2015). Sin em- al., 2014; Willcutt et al., 2013), así como bajo
bargo, todavía no se han establecido los posibles liderazgo (Marshall et al., 2014).
mecanismos de esta relación. Por otro lado, mientras que los niños con
El deterioro social que se observa en in- TDAH son a menudo rechazados por los com-
dividuos con SCT es único y específico de pañeros o generan aversión debido a sus com-
esta dimensión, a pesar de asemejarse en gran portamientos disruptivos (Gardner & Gerdes,
medida con el funcionamiento social alterado 2015), aquellos con SCT fundamentalmente
en individuos con TDAH, especialmente con tienden a ser ignorados (Becker, 2014) y, por
predominio inatento. Los niños con TDAH supuesto, presentan menores tasas de agresión
a menudo presentan dificultades sociales que o conductas disruptivas (Becker & Langberg,
incluyen pobres habilidades sociales, mayor re- 2013; Becker, Ciesieski et al., 2014; Becker,
chazo social y elevadas tasas de aislamiento, Luebbe, Fite et al., 2014; Carlson & Mann,
en comparación con niños comunitarios de su 2002; Marshall et al., 2014; McBurnett et al.,
misma edad (Bagwell, Molina, Pelham & Hoza, 2001; Raiker et al., 2015). Una posible explica-
2001; DuPaul, McGoey, Eckert, & VanBrakle, ción para dichos resultados sería que los niños
2001; Haas et al., 2011; Hodgens, Cole, & Bol- con SCT son más tímidos o que son individuos
dizar, 2000; Hoza, 2007; McConaughy, Volpe, con un bajo interés social (Becker & Barkley,
Antshel, Gordon, & Eiraldi, 2011; Mrug, Hoza, 2016). La hipótesis de la timidez toma fuerza
Pelham, Gnagy, & Greiner, 2007). En concreto, al considerar que el SCT también se asocia a
los niños con TDAH-IN presentan comporta- puntuaciones elevadas en la escala de miedo/ti-
mientos pasivos y retraimiento social. midez dentro del sistema motivacional de Gray,
Dada la elevada relación entre TDAH-IN y denominado de lucha, huida y paralización,
SCT, parece lógico pensar que los niños (y las (Becker et al., 2013) y puntuaciones elevadas en
personas en general) con esta sintomatología soledad según datos provenientes de autoinfor-
manifestarán alteraciones parecidas. En térmi- mes (Becker, Luebbe et al., 2015). Además, los
nos generales así ha sido: aun controlados los propios síntomas SCT, como letargia, somno-
efectos del propio TDAH y de otra sintoma- lencia, confusión y baja motivación, están con-
tología (puntuaciones elevadas en negativismo ceptualmente más relacionados con problemas
desafiante, trastorno de conducta o depresión), el de retraimiento y timidez.
SCT se ha relacionado con dificultades de inte- Por lo general, los datos sobre funcionamiento
racción social en general (Becker, 2014; Becker social y SCT provienen de trabajos transversales,
& Langberg, 2013; Becker, Luebbe et al., 2015; aunque existen al menos dos estudios longitu-

144 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

dinales. El primero es el de Becker (2014), en el algunos que ofrecen resultados contradictorios.


que se muestra cómo los síntomas SCT predicen Es el caso de Watabe et al. (2014), quienes ob-
un incremento de problemas de relación con servan que niños con elevadas puntuaciones de
iguales durante un periodo de seis meses, en una SCT (medidas con tres ítems: sueña despierto,
muestra comunitaria de 176 niños americanos olvidadizo y lento) presentan menor deterioro
en edad escolar, incluso tras controlar caracterís- en las relaciones con sus iguales que quienes
ticas demográficas, otros síntomas psicopatoló- presentan bajos niveles de SCT, según sus pro-
gicos y niveles iniciales de funcionamiento con fesores.
iguales; según puntuaciones SCT de profesores. En general podemos concluir que, con alguna
Además, se concluye que el SCT se asocia sig- excepción, los datos son favorables a relacionar
nificativamente con retraimiento social y con el SCT con disfunciones sociales, incluso en una
una reducida red de relaciones sociales en tres dirección diferente o única en relación al TDAH.
esferas: popularidad, preferencia social negativa Al igual que en los otros aspectos tratados hasta
por parte del grupo y relaciones restringidas. El ahora, los resultados deben ser considerados con
otro es un estudio longitudinal llevado a cabo prudencia, puesto que la distinta forma de medir
en España por nuestro grupo, en el que padres, tanto el SCT como el funcionamiento social
madres, tutores y un profesor valoran en tres pueden tener implicaciones relevantes. Además,
ocasiones a niños en edad escolar (de primero la necesidad de realizar estudios longitudinales
a tercero de primaria). Los resultados indican se vuelve de nuevo preponderante para poder
que elevadas puntuaciones SCT predicen difi- valorar si las disfunciones están presentes desde
cultades sociales al año y a los dos años; algo que edades más tempranas y acompañan el desarro-
curiosamente no ocurre en aquellos niños con llo del niño o aparecen en un momento dado y,
elevadas puntuaciones de TDAH-IN (Bernad en todo caso, hasta qué punto están en función
et al., 2015). de la presencia o no del TDAH (Becker et al.,
Resulta interesante mencionar un estudio 2016).
reciente, realizado por Raiker et al. (2015), en
el que se evalúa el modo en que determinados 6.4. El SCT y el funcionamiento académico
rasgos de personalidad y psicopáticos pueden Este apartado no es muy diferente de los demás,
mediar la relación entre TDAH y desajuste en el sentido de que también encontramos resul-
social, algo que no se observaría entre SCT tados preliminares y algo discrepantes. Mientras
y problemas sociales. Los resultados de este en algunos trabajos no se refleja que la presencia
estudio proponen que hay dos dominios de la de SCT tenga un impacto claramente negativo
personalidad: impulsividad y narcisismo, que en los logros académicos (Becker & Langberg,
podrían considerarse mediadores parciales del 2013; Belmar et al., 2015; Carlson & Mann,
riesgo de padecer problemas sociales en indivi- 2002; Hartman et al., 2004; Marshall et al.,
duos TDAH; mientras que los síntomas SCT 2014; Wahlstedt & Bohlin, 2010; Watabe et al.,
no muestran relación alguna con características 2014), en otros estudios es al revés, y además
psicopáticas de personalidad que podrían in- en diferentes condiciones: en muestras TDAH
tervenir en la relación de SCT con dificultades (Becker, Langberg et al., 2014; Jacobson et al.,
sociales, incluso tras controlar el efecto de los 2012; Langberg et al., 2014); en muestras sin
síntomas TDAH. diagnóstico tras controlar los efectos de las me-
A pesar de los trabajos mencionados hasta didas en TDAH (Barkley, 2013; Becker, Luebbe
ahora, que avalan la evidencia de la relación entre et al., 2015; Bernad et al., 2014; 2015; Burns et
SCT y déficits de funcionamiento social, existen al., 2013; Jacobson et al., 2012; Khadka et al.,

Vol. 8, número 2, 2016 145


Artículo-Objetivo

2015; Lee et al., 2014; en prensa; Marshall et cionamiento académico (inteligencia, ingresos
al., 2014; McBurnett et al., 2014; Servera et al., familiares, logros académicos, etcétera). En cam-
2015; Willcutt et al., 2014); e incluso en estu- bio, no predice calificaciones medias escolares.
dios longitudinales (Bernad et al., 2014; 2015; Por su parte, según los maestros, la subescala
Servera et al., 2015). Baja iniciativa/Persistencia del SCT predijo di-
Uno de los resultados que más destaca es la ficultades a la hora de hacer los deberes y además
asociación entre el SCT y los problemas en la fue la única variable del SCT que también pudo
organización y finalización de tareas escolares predecir calificaciones medias escolares más allá
diarias (Barkley, 2013; Langberg et al., 2014; de los síntomas TDAH y de otras covariables.
Marshall et al., 2014). En términos de logros Estos resultados no se han podido corroborar
académicos, el SCT se ha relacionado de forma del todo, puesto que McBurnett et al. (2014) no
única con malos resultados en algunas materias encuentran una relación entre el factor Baja ini-
o habilidades, como las matemáticas, la lectura o ciativa y el rendi­miento académico. En cambio
la expresión escrita (Barkley, 2012; Bauermeister la puntuación total en SCT y su factor Somno-
et al., 2012; Willcutt et al., 2014). No obstante, liento/Cansado se asocian inversamente con el
también es verdad que en general se señala rendimiento académico, incluso tras controlar la
que las puntuaciones en las escalas de TDAH influencia del TDAH.
contribuyen en mayor medida que el SCT en Por su parte, Becker, Langberg et al. (2014)
dichas dificultades académicas (Barkley, 2013; analizan la relación del SCT con dificultades
Belmar et al., 2015; Lee et al., 2014; McBurnett de funcionamiento académico en una muestra
et al., 2014). de 72 estudiantes universitarios con diagnóstico
Estas discrepancias en los resultados se deben de TDAH evaluados con la escala BAARS-IV
en gran parte a las dificultades de poder extraer de Barkley, que se compone de cuatro factores:
conclusiones cuando la medida del SCT se rea- SCT, IN, HI e Impulsividad. Una vez con-
liza en muestras con un diagnóstico en TDAH trolado el efecto de los otros factores, SCT
y, por otra parte, a las grandes diferencias en las se relacionó con problemas de rendimiento
pruebas utilizadas para medir el SCT. A conti- académico de forma muy relevante (además de
nuación se citan los resultados de algunos de los con medidas de ansiedad y depresión). Desde
estudios más recientes. un punto de vista más clínico, Marshall et al.
Langberg et al. (2014) estudian la asociación (2014) identificaron tres gru­pos de jóvenes con
entre el SCT, medido con la escala de 14 ítems diagnóstico en TDAH: TDAH-C, TDAH-
de Penny et al. (2009), y el fun­cionamiento IN con alto SCT y TDAH-IN con bajo SCT
académico en 52 adolescentes con TDAH, han y analizaron sus diferencias en ren­ dimiento
encontrado resultados diferentes en función del académico. Los niveles de SCT fueron medi-
evaluador (padres o maestros) y del factor SCT dos por los tres ítems utilizados en los ensayos
que se considera. De modo general, hallaron del DSM-IV que comentamos anterior­mente.
que tanto SCT como TDAH-IN correlacio- Los resultados indicaron que ambos grupos con
naban significativamente con el rendimiento TDAH-IN pre­sentaron mayores dificultades en
académico. En concreto, según los padres, la rendimiento en el aula comparados con el grupo
subescala Lentitud de SCT predice alteraciones TDAH-C. Más aún, el grupo TDAH-IN con
en el funcionamiento académico general, déficit alto SCT fue el único que presentó problemas
en las habilidades de organización y problemas a la hora de hacer deberes, incluso cuando los
para hacer los deberes, más allá de los síntomas trastornos de comportamiento disruptivo esta-
TDAH y otras características asociadas al fun- ban ausentes.

146 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

Un estudio discordante con los datos hasta nivel intelectual en adoles­centes con TDAH y
ahora apuntados es el de Watabe et al. (2013), altos niveles de SCT. Otros estudios han anali-
quienes observan en su estudio que elevados zado la relación pero con pacientes oncológicos:
niveles de SCT se asocian con menores difi- Reeves et al. (2010) identificaron puntuaciones
cultades académicas, según profesores. Estos superiores de SCT en pacientes pediátricos
resultados podrían explicarse por la dificultad de supervivien­tes de leucemia linfoblástica aguda
los profesores de apreciar sintomatología SCT que en controles, y la presencia de estos síntomas
en el aula, o de interpretarla como deficitaria se asoció a un peor funcionamiento intelectual.
para el funcionamiento del niño, puesto que no Por su parte, Willard et al. (2013) observaron
inter­fiere en sus objetivos como docentes a la que pacientes pediátricos supervivientes a tumo-
hora de dar la clase, en com­paración con otra res cerebrales, con mayores déficits en memoria
sintomatología, como puede ser la propia del de tra­bajo y CI total presentaron más síntomas
TDAH. Los autores consideran que sus resulta- SCT (medido con los cuatro ítems del CBCL),
dos, a pesar de sorprender en el momento actual, según informaron sus padres. Por último, Cam-
resultan concordantes con algunos otros encon- prodón et al. (2016) utilizaron una amplia mues-
trados en la literatura (Carlson & Mann, 2002; tra de niños derivados a un servicio clínico y
Mikami et al., 2007). Otra de las explicaciones diferenciaron entre aquellos a quienes se aplicó
es el uso de distintas medidas para determinar el WISC-IV (por sospecha de disfunción in-
el rendimiento académico. telectual) y aquellos que no. El primer grupo
Por último, Camprodon et al. (en prensa), mostró significativamente puntuaciones más
en un reciente estudio con pacientes clínicos elevadas en SCT. Por tanto, aunque sea estudio
con varias psicopatologías, concluyen que exis- retrospectivo, los datos apuntan a cierta relación
te una relación positiva entre síntomas SCT y entre menor nivel intelectual y más SCT.
dificultades de aprendizaje, incluso tras contro- Por lo anterior, es evidente que el estudio del
lar los síntomas TDAH, algo que claramente CI y el SCT requiere mayor investigación, sin
se relaciona con el déficit académico descrito embargo, la relación entre SCT y problemas
anteriormente. Los autores consideran que la de rendimiento académico, a pesar de algún
presencia de síntomas SCT aumenta la pro- estudio que constituye la excepción, parece más
babilidad de tener dificultades académicas y claramente establecida. Es discutible qué factor
consecuentemente contrariedades futuras en el o subescala se relaciona más, pero como di-
ámbito de rendimiento profesional. En la mues- mensión global, las altas puntua­ciones en SCT
tra que reclutaron de 105 niños con Trastornos parecen predecir, aun controladas las medidas en
del Aprendizaje (TA), 34 tenían TDAH, pero TDAH, más problemas en conductas relaciona-
los niños con TA tenían más síntomas de SCT das con el funcionamiento (organización, tareas,
que de TDAH, en congruencia con estudios deberes, etcétera.) y el rendimiento académico
anteriores (Burns et al., 2013; Langberg et al., en sí mismo (calificaciones escolares).
2014; Lee et al., 2014; Marshall et al., 2014).
Pocos son los trabajos que han considerado la 6.5. Los problemas de sueño y el SCT
relación entre el SCT y la capacidad intelectual La relación de los problemas de sueño con el
medida por CI. Milich et al. (2001) y Hartman TDAH viene de lejos y, por supuesto, o incluso
et al. (2004) encuentran correlaciones significa- con más razón, se ha extendido al SCT. De
tivas entre el SCT y nivel de inte­ligencia bajo, hecho se ha propuesto un importante solapa-
mientras que, en un trabajo posterior, Becker y miento entre los ítems más usados para medir
Langberg (2013) no hallaron diferencias en el el SCT y los propios problemas de sueño, con-

Vol. 8, número 2, 2016 147


Artículo-Objetivo

virtiéndose en uno de los aspectos a controlar versitarios. Los resultados muestran, por un
en estudios clínicos. lado, que los ítems SCT y los de somnolencia
En el caso de los niños con TDAH existen diurna presentan un solapamiento considerable,
evidencias de que los problemas de sueño son aunque son dimensiones diferentes, tanto en
muy frecuentes entre ellos (Scott et al., 2013). De muestras normales como clínicas. Por otro lado,
hecho, en versiones anteriores del DSM (II, III, el SCT predice somnolencia diurna más allá de
y III-R) se incluye el “sueño no reparador” como la influencia de otras sintomatologías (TDAH,
síntoma diagnóstico del TDAH. La presencia ansiedad y depresión). Además, los estudiantes
de dificultades del sueño no sólo se asocia con con altas puntuaciones en TDAH+SCT y som-
TDAH sino que el hecho de tener problemas nolencia diurna tenían un dete­rioro significati-
de sueño puede incrementar los síntomas del vamente mayor que los estudiantes universita-
TDAH (Stein et al., 2002). En esta línea se ha rios con altas puntuaciones en TDAH sin SCT
hipotetizado que algunos niños con diagnóstico o somnolencia diurna.
en TDAH podrían, de hecho, tener un trastorno El segundo trabajo es del mismo grupo:
del sueño comórbido, que causaría (o al menos Becker, Luebbe y Langberg (2014). Esta vez se
exacerbaría) la sintomatología inatenta y/o hi- analiza la calidad de sueño en jóvenes universita-
peractiva (Bass, 2015). Es más, algunos afirman rios, separando síntomas de inatención, hiperac-
que niños con TDAH con altos índices de pro- tividad/impulsividad y SCT en una muestra de
blemas de sueño también muestran mayor riesgo 288 estudiantes entre 17-24 años, de los cuales
de sufrir problemas de salud mental concomi- un 12% aseguran tener diagnóstico de TDAH.
tantes, tal y como muestran Becker, Langberg y La media de horas de sueño de los participantes
Evans (2015) en su estudio con un grupo de 81 fue de 6,8 y el tiempo de duración para conci-
adolescentes con diagnóstico de TDAH, en el liar el sueño fueron 25 minutos. El 63% de la
que parece que los problemas de sueño predicen muestra se clasifica como “malos dormidores”.
mayores niveles de síntomas TND, problemas Los resultados muestran que la hiperactividad,
de comportamiento externalizado y sintomato- pero no la impulsividad, se asocia con una peor
logía depresiva, tras un año, según puntuaciones calidad de sueño, aumento de la latencia del
de los padres. sueño, recortada duración del sueño y mayor
En todo caso, los problemas de sueño que se uso de medicamentos para dormir. Sin embargo,
asocian comúnmente con el TDAH se relacio- los síntomas SCT, pero no los de inatención, se
nan con un aumento de somnolencia durante el relacionaban con pobre calidad de sueño y ma-
día, lentitud a nivel cognitivo, así como mayores yores trastornos de sueño (pesadillas, sensación
dificultades de concentración en actividades de frío o calor, despertares recurrentes durante la
escolares (Fallone et al., 2005). Es decir, con- noche). Además, tanto SCT como TDAH-IN
ductas que de un modo u otro nos recuerdan al se relacionaron con disfunciones en el funciona-
SCT. Sin embargo, son pocos los trabajos que miento diurno. Un análisis de regresión señaló
hasta ahora han analizado la relación entre esta que la hiperactividad predice mejor las alteracio-
dimensión y las dificultades del sueño. En con- nes del sueño que el funcionamiento en vigilia
creto sólo destacaremos tres trabajos, pero con y que el SCT y la inatención predicen mejor el
resultados interesantes. funcionamiento diurno que los trastornos de
El primero es el de Langberg, Becker, Dvors- calidad de sueño.
ky y Luebbe (2014), quienes evaluaron el nivel El tercer trabajo es el de Koriakin, Mahone y
de solapamiento entre el SCT y las alteraciones Jacobson (2015), quienes estudian la asociación
del sueño en una muestra de estudiantes uni- entre calidad del sueño y los síntomas SCT en

148 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

varios ambientes (casa y colegio) y mediante años han permitido establecer con bastante
distintos evaluadores (padres y profesores), en nitidez las características de esta dimensión.
una muestra clínica de 746 niños de edades En estos momentos disponemos de medidas de
comprendidas entre 5 y 18 años, controlando evaluación psicológicas fiables y válidas, tanto
los síntomas de TDAH, ansiedad y depresión. en forma de entrevistas, escalas para padres y
Los padres o cuidadores evalúan los problemas profesores, como autoinformes (Barkley, 2011;
de sueño de sus hijos con respecto a cuatro 2013; Becker, Luebbe et al., 2015; Burns et al.,
preocupaciones fundamentales: dificultades para 2015; McBurnett et al., 2010; Penny et al., 2009).
quedarse dormido, inquietud durante el sueño, Uno de los avances más notables se ha dado
dificultades para despertarse y problemas respi- en el campo de la validez discriminante y pre-
ratorios relacionados con el sueño. Para medir el dictiva puesto que, como era ya conocido de hace
SCT se usó la escala de Penny et al. (2009) que, tiempo, las conductas y elementos definitorios
como sabemos, se divide en tres subescalas: Len- del SCT solapan con las conductas y síntomas
to/Adormilado, Baja iniciativa/Baja persisten- de inatención, tal y como se han definido en el
cia, y Sueña despierto/Soñador. Los resultados TDAH. Ha sido necesario aplicar complejos
mostraron que tras controlar la edad, el estado de análisis factoriales confirmatorios en muestras
medicación y los síntomas de TDAH, depresión clínicas y normales, a través tanto de diseños
y ansiedad, los problemas de sueño representan transversales como longitudinales, para poder
una pequeña pero significativa porción de la concluir lo que hasta ahora parece una de las
variancia adicional en la predicción de la escala resoluciones más sólidas: efectivamente el SCT
Lento/Adormilado del SCT, según la evaluación se relaciona de forma moderada con el TDAH
de los padres. El resto de resultados no parecie- e incluso de forma elevada con la medida de in-
ron significativos; la dificultad para despertarse atención de este trastorno; sin embargo, al con-
fue la característica que más se relacionó con trolar el efecto mutuo entre SCT e inatención,
el SCT. Los autores concluyen que algunos cada una de ellas mantiene de forma significativa
elementos propios de la dimensión SCT, como un patrón de relación con otras variables com-
la lentitud y la letargia, pueden asociarse con portamentales, de interacción y de rendimiento,
dificultades de sueño, incluso tras controlar los que incluso en algunos casos es opuesto (Araujo
síntomas de TDAH, ansiedad y depresión. Sin et al., 2015; Barkley, 2012; Bauermeister et al.,
embargo, estas asociaciones no son consistentes 2012; Becker, 2014; Becker et al., 2016; Becker,
a través de todas las subescalas de SCT y todos Ciesielski et al., 2014; Becker & Langberg,
los dominios de los problemas de sueño. Por 2013; Becker, Langberg et al., 2014; Becker,
tanto, la dimensión SCT sería diferente de los Luebbe et al., 2015; Becker, Luebbe, Fite et al.,
problemas del sueño, sin embargo, ambas man- 2014; Belmar et al., 2015; Bernad et al., 2014;
tendrían una cierta relación a través de algunos 2015; Burns et al., 2013; Camprodon et al., en
de sus síntomas. prensa; Fenollar-Cortés et al., 2015; Garner, et
al., 2013; Khadka et al., 2015; Langberg, et al.
7. Conclusiones 2014; Lee et al., 2014; 2016; Leopold, et al.,
El renacer del interés por el SCT a principios de 2015; Marshall et al.; 2014; McBurnett et al,
este siglo ha significado, esta vez parece que sí, 2014; Moruzzi et al., 2014; Penny et al., 2009;
la consolidación de una dimensión psicológica Servera et al., 2015; Willcutt et al., 2014,). Pero
que desde los años setenta se había insinuado no queremos dejar de hacer notar que a veces
sin encontrar su sitio ni en el plano de la in- el tamaño del efecto de tales diferencias no ha
vestigación ni en el clínico. Los últimos quince sido especialmente elevado.

Vol. 8, número 2, 2016 149


Artículo-Objetivo

En todo caso, en lo que genéricamente po- resultado muy interesantes. Ambas dimensio-
demos considerar como medidas externalizadas, nes, inatención y SCT, son capaces de predecir
la dimensión de inatención se comporta como dificultades en este ámbito, con una proporción
cabría esperar en un componente del TDAH: de variancia explicada similar (no muy grande,
se relaciona positivamente con mayor hiperac- pero significativa), que se mantiene estable aun
tividad, impulsividad y problemas de comporta- controlándose el efecto de interacción. Por tanto,
miento. Mientras, la dimensión SCT lo hace en de alguna forma independiente a la influencia
mucho menor grado, de forma no significativa e que pueda ejercer la inatención, el SCT en ma-
incluso, en algunas ocasiones, de modo inverso. yor o menor grado es capaz de predecir proble-
En este sentido cabe destacar que en algunos mas de interacción social y de funcionamiento
aspectos, como la medida de psicopatía, el SCT académico. En el primer caso, los problemas
puede ser un factor protector, puesto que la no se relacionan con las habituales conductas
correlación es negativa y significativa (Barkley, disruptivas derivadas del TDAH, sino con cierta
2012; Becker et al., 2016; Becker & Langberg, sensación de aislamiento, soledad y falta de ha-
2013; Becker, Luebbe, Fite et al., 2014; Belmar et bilidades sociales. En el caso del funcionamiento
al., 2015; Bernad et al., 2014; 2015; Burns et al., académico, aunque como vimos en su momento
2013; Carlson & Mann, 2002; Fenollar-Cortés los resultados no son coincidentes en todos los
et al., 2015; Garner et al., 2013; Khadka et al., estudios, mayoritariamente indican problemas
2015; Langberg et al., 2014; Lee et al., 2014; en el trabajo académico diario e incluso en las
en prensa; Leopold et al., 2015; Marshall et al., calificaciones escolares.
2014; McBurnett et al., 2014; Moruzzi et al., A pesar de estos resultados positivos que he-
2014; Penny et al., 2009; Servera et al., 2015; mos mencionado es evidente, y así lo hemos des-
Willcutt et al., 2014). tacado en cada uno de los apartados revisados,
En el caso de las medidas internalizadas, que hay incongruencias y dudas no resueltas. Sin
en términos generales, la inatención y el SCT duda gran parte de estos problemas derivan del
mantienen una correlación moderada positiva y uso de medidas muy dispares del SCT. Afortu-
significativa, que tal vez puede tener un origen nadamente, ello es cada vez menos habitual pues,
o una condición diferente, pues tiende a man- aunque existen diferentes opciones, el conjunto
tenerse en valores similares aun controlándose de ítems, conductas y síntomas definitorios del
mutuamente el efecto de cada dimensión. Es SCT parece estar bastante acotado. En cambio,
más, habitualmente, y de forma especial en el lo que no está tan claro es la forma en que se
caso de las conductas relacionadas con el estado organizan. Básicamente cabe considerar si el
de Ánimo/depresión, el SCT contribuye con un conjunto es unitario o es multifactorial. De los
mayor peso que la inatención. La tendencia no estudios y la escala original de Penny et al. (2009)
es tan acentuada en las medidas de ansiedad, parece deducirse la presencia de al menos dos
pero también es visible. Sin duda, desde nuestra factores: alerta inconsistente y enlentecimiento,
experiencia y trabajos, uno de los resultados que que a veces, en función del evaluador, podrían
más llaman la atención es que el SCT evaluado ser tres: Adormilado/Lento, Sueña despierto/
por padres y maestros a los 6/7 años es capaz Lento y Baja iniciativa/Persistencia. Incluso se
de predecir, de forma única e independiente, las han sugerido otros factores como la memoria
medidas internalizadas dos o tres años después de trabajo (McBurnett et al., 2014). Sin em-
(Bernad et al., 2015; Servera et al., 2015). bargo, otros autores y estudios no apoyan tan
Los resultados en medidas de interacción claramente la multidimensionalidad del SCT
social y funcionamiento académico también han (Barkley, 2013; Willcutt et al., 2014). En este

150 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

apartado, los resultados de nuestros trabajos, SCT, que dificulta la obtención de conclusio-
con muestras españolas, difieren relativamente nes más sólidas es el uso de muestras con altas
de las muestras estadounidenses. En nuestro puntuaciones en SCT de forma combinada o
caso, de los dos grandes factores basados en ocho independiente de muestras con TDAH. Anali-
dominios conductuales definitorios del SCT, zar la influencia del SCT en un TDAH ya diag-
derivados en la escala de Penny y colaboradores, nosticado tiene evidentemente un valor clínico
normalmente sólo uno se ha reflejado de forma interesante, pero los datos de ahí derivados no
clara y consistente a través de las evaluaciones parece que siempre puedan generalizarse al SCT
de los padres y de los maestros en el tiempo: puro. Por otra parte, es evidente que a los centros
el enlentecimiento (Servera et al., 2015). Este de reclutamiento de posible muestra clínica
factor viene definido por los dominios: “perder el llegan pocos SCT puros, o muchos menos que
hilo del pensamiento”, “confundirse fácilmente”, TDAH, ya sea en sus presentaciones combina-
“parecer somnoliento” (sin problemas de sueño da o inatenta. De momento, esta dificultad se
nocturnos), “mostrar un pensamiento lento” y está subsana intentado crear grupos clínicos (o
“mostrar un movimiento lento”. No obstante, hay subclínicos) a través de un uso inicial de grandes
que tener en cuenta que muchos de los estudios muestras representativas de la población. Es
con muestras estadounidenses se han realizado el caso del trabajo paradigmático de Barkley
exclusivamente con diseños transversales y con (2013), en el cual se reclutó una muestra de
muestras de niños mayores; en cambio, en nues- 1,800 niños entre 6 y 17 años para crear cuatro
tro caso son niños entre 6 y 9 años y combinamos grupos combinando altas/bajas puntuaciones
datos transversales con longitudinales. Esto quie- en SCT, TDAH y controles. Sólo el 2,3% de
re decir que, dado que se ha observado que las la muestra fue “SCT sin TDAH”, mientras un
implicaciones del SCT se hacen más evidentes 5,3% fue “TDAH sin SCT” y un 3,4% “SCT +
con niños mayores, adolescentes e incluso adul- TDAH”. Como mencionamos anteriormente,
tos, puede ser que haya un factor evolutivo que TDAH y SCT presentaron un patrón de im-
dificulte la obtención de la medida multifactorial plicaciones y comorbilidad diferente, si bien
de la dimensión, antes de ciertas edades. normalmente la presencia de TDAH siempre
De los resultados revisados también quere- suponía mayor gravedad, y el impacto del SCT
mos destacar algo que consideramos importante: quedó bastante reducido a la sintomatología
sea o no el SCT una dimensión multifactorial, depresiva. De todos modos, casi entre un 40% y
siempre es el factor general de “enlentecimiento” 60% de los casos coexistían TDAH y SCT. Sin
(a nivel cognitivo y comportamental), el que, de duda, harán falta más estudios en esta línea para
un modo u otro, subyace a todos los demás y el comprobar, revisar o ampliar los datos disponi-
que, de forma independiente, mejor se diferencia bles en este primer estudio de referencia.
del TDAH y presenta sus implicaciones más Desde el punto de vista de la investigación
genuinas. Es decir, normalmente el factor de básica, las líneas siguen abiertas especialmente
alerta o inconsistencia atencional solapa más en lo que respecta a la etiología del SCT y sus
con la medida de inatención del TDAH y se implicaciones neuropsicológicas, y posiblemente
“parece” más a él, mientras la lentitud permanece en los próximos años dispongamos de lo que
con un mayor grado de independencia (Bernad ahora sólo pueden ser considerados datos preli-
et al., 2014; Fenollar-Cortés, 2014; Servera et minares, a menudo contaminados por la presen-
al., 2015; Willcutt et al., 2014). cia del TDAH. Seguramente la nueva ubicación
Otro de los problemas metodológicos impor- del TDAH en los trastornos del neurodesarrollo
tantes, aparte del uso de distintas medidas del en el DSM-5 obligará a definir si el SCT debe

Vol. 8, número 2, 2016 151


Artículo-Objetivo

seguir un camino similar, o debe encontrar el considerada diferente al TDAH. Por todo ello,
propio. Esto nos lleva tal vez a la parte más cru- el término TDC sería una opción razonable
cial de esta revisión, y al tema que está candente porque, en primer lugar, mantiene el foco sobre
entre clínicos e investigadores, ¿es el SCT un los problemas atencionales (es decir, mantiene la
trastorno independiente del TDAH? A lo cual idea de “patología” en conductas de inatención
nosotros añadiríamos una cuestión previa, ¿es el aunque sea distinta a la del TDAH), sin resultar
SCT un trastorno o una dimensión? peyorativo. En segundo lugar, se puede definir
Russell A. Barkley ha abogado en los últimos con independencia de que tenga o no vínculos
años por un cambio de terminología del SCT con disfunciones neuropsicológicas. Finalmente,
(Barkley, 2014). En nuestro caso, en español, ya sugiere cierto solapamiento con el TDAH (esto
se utiliza con cierta profusión el término Tempo no hace sino reafirmar lo que hemos observado
Cognitivo Lento, pero, como hemos explicado en los estudios clínicos), aunque se apoya en un
anteriormente, el cambio de denominación de término no usado en los criterios diagnósticos
Barkley no sólo era para evitar el uso de un del TDAH de forma explícita: concentración.
término que en inglés puede considerarse peyo- Otro reconocido autor sobre el SCT, Stephen
rativo o despectivo (sluggish además de lentitud Becker, discrepa de la opción de considerar, con
indica ser perezoso, vago, indolente e incluso la los datos actuales disponibles, al SCT como un
raíz de la palabra proviene del término slug, que trastorno. Él está de acuerdo en abandonar este
designa al animal babosa), sino para realzar su término por sus connotaciones peyorativas, pero
componente psicopatológico. Por eso, ha suge- no estima que sea una buena opción su sustitu-
rido el término Concentration Deficit Disorder. ción por un término que refiera a un trastorno.
El Trastorno por Déficit de Concentración En este sentido, Becker, Marshall y McBurnett
(TDC) ha sido presentado por Barkley como (2014) recuerdan que en el DSM-IV hasta cierto
un segundo déficit de atención diferente del punto había la opción de incluir a los niños con
derivado del subtipo del TDAH, aunque pueda SCT en la categoría de “otros trastornos no es-
existir cierto solapamiento entre ellos. El autor pecificados”, puesto que podían ser considerados
considera que referirse al SCT como un TDAH niños con problemas atencionales (sin llegar a
induce claramente a una confusión, puesto que cumplir todos los criterios) sin apenas síntomas
podría ser considerado como un intento por re- de hiperactividad. El patrón que lo describía era
sucitar este viejo concepto del DSM-III, cuando “lentitud, ensoñación e hipoactividad”. En el
en realidad el TDC ha demostrado poder dife- DSM-5 no hay ya ninguna mención a este pa-
renciarse de él. Otro argumento interesante que trón, lo cual para algunos puede ser considerada
expone Barkley es que el uso de términos como una buena noticia, en el sentido de que el SCT
SCT u otros propuestos en el pasado, como ya no estará por más tiempo bajo el paraguas del
Trastorno Primario de la Vigilancia (Weinberg TDAH y funcionará de modo independiente,
& Harper, 1993), tampoco parecen adecuados pero este no es el camino que de momento los
puesto que, por una parte, presuponen clara- datos señalan.
mente una afectación neuropsicológica (lo cual, Becker y sus colaboradores aceptan que pueda
como hemos visto hasta el momento, no está ser considerada una idea especulativa, pero ellos
clara, al contrario del TDAH) y, por otra parte, si creen que es posible considerar al SCT como
alerta inconsistente o déficits de vigilancia son el un constructo transdiagnóstico, en oposición al
núcleo definitorio de la dimensión, va a resultar intento de hacerlo trastorno. El término trans-
difícil (como así ha ocurrido hasta ahora en los diagnóstico hace referencia a la conceptualización
manuales de clasificación y diagnóstico) que sea de dimensiones básicas subyacentes a uno o más

152 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Bernard y Servera: SCT: realidades y controversias

trastornos que podrían ser tratadas de forma (el propio Barkley ya lo reconocía, como vimos
similar, con independencia del trastorno en el anteriormente). Por tanto, contrariamente a lo
que se hicieran presentes (véase, por ejemplo, el que en principio podría deducirse, la dependen-
trabajo de McEvoy, Nathan, & Norton, 2009). cia en casos clínicos de la dimensión SCT del
El término encuentra un acomodo perfecto en TDAH, u otros trastornos del estado de ánimo,
el proyecto iniciado en el National Institute of de las interacciones sociales o incluso del apren-
Mental Health (NIMH) en el año 2008, bajo el dizaje no le restaría valor sino que la convertiría
nombre de “Research Domain Criteria” (RDoC) en una posible dimensión transdiagnóstica, cuya
(Cuthbert & Insel, 2013; Insel et al., 2010). El presencia o no podría influir claramente en el
RDoC supone una posición contraria, al menos curso, el desarrollo, las implicaciones y el trata-
desde el punto de vista de la investigación, a se- miento de estos otros trastornos.
guir utilizando sistemas categoriales descriptivos Sin duda, como también hemos podido des-
politéticos o monotéticos para reclutar muestras tacar en esta revisión, le queda todavía camino
y avanzar en el conocimiento de las alteraciones al SCT (o al Tempo Cognitivo Lento) para
mentales. Con este proyecto, el NIMH empezó convertirse en una posible dimensión transdiag-
a desarrollar la búsqueda de “dominios” basados nóstica, si bien desde el punto de vista evolutivo,
en la investigación para definir lo sustancial en de medida y de implicaciones clínicas hemos
dichas alteraciones. Los dominios están forma- avanzado considerablemente en estos últimos
dos por dimensiones bioconductuales, continuas años, quedan muchas áreas, especialmente aque-
y evolutivas (es decir, sólo los extremos pueden llas relacionadas con los aspectos biológicos y
representar anormalidad y se van formado con neuropsicológicos, en las que se necesita avan-
el desarrollo de la persona), medibles de forma zar. La parte positiva es, evidentemente, que al
fiable y válida y provenientes de modelos que contrario de lo que ocurría hace unos 10 o 15
impliquen fundamentos genéticos, neurobiológi- años, ahora los fundamentos están puestos y
cos, conductuales, ambientales y experimentales. parecen sólidos.
Ya se considera que hay bastantes dimensiones
que cumplen esta función, como la regulación Referencias
emocional, la memoria de trabajo, el arousal, la Achenbach, T. M., & Rescorla, L. A. (2007). Multicultural
sensibilidad al reforzamiento, etcétera. Becker y supplement to the manual for the ASEBA school-age forms and
colaboradores piensan que el SCT debe encontrar profiles. Burlington: University of Vermont, Research Center
un nuevo nombre pero dentro de esta paradigma. for Children, Youth y Families.
En nuestra opinión, la postura de Becker Achenbach, T. M., Becker, A., Döpfner, M., Heiervang, E.,
en relación al SCT es muy acertada, tanto por Roessner, V., Steinhausen, H. C., & Rothenberger, A.
el punto en que nos encontramos actualmente (2008). Multicultural assessment of child and adolescent
como por el impulso que implica para incremen- psychopathology with ASEBA and SDQ instruments:
tar la investigación en las áreas que definen las research findings, applications, and future directions. Jour-
dimensiones de los dominios tal y como antes nal of Child Psychology and Psychiatry, 49, 251-275. doi:
las hemos mencionado. En este momento parece 10.1111/j.1469- 7610.2007.01867
prematuro definir al SCT como un trastorno, Adams, Z. W., Milich, R., & Fillmore, M. T. (2010). A case
no sólo porque no está oficialmente reconoci- for the return of attention-deficit disorder in DSM-5. The
do, y ello implica una confusión evidente para ADHD Report, 18(3), 1-6. doi: 10.1521/adhd.2010.18.3.1
padres, maestros y los propios afectados, sino Álvarez-Pedrerol, M., Ribas-Fitó, N., Torrent, M., Julvez,
también porque resulta realmente complicado J., Ferrer, C., & Sunyer, J. (2007). TSH concentration
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Vol. 8, número 2, 2016 159


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160 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


artículos-comentario
open peer commentaries
Tempo cognitivo lento:
un constructo controvertido en evolución
José J. Bauermeister
Universidad de Puerto Rico

Resumen del Research Domain Criteria iniciado por el Instituto Nacional


El Tempo Cognitivo Lento (TCL) se refiere a una discapacidad de Salud Mental de EE.UU.
atencional caracterizada por síntomas de naturaleza cogniti- Palabras clave: Tempo cognitivo lento, Trastorno por Déficit de
va (p. ej., soñar despierto) y motora (p. ej., enlentecimiento). Atención e Hiperactividad, Trastorno por Déficit de Concentración
Como indica el título de su artículo, Bernad y Servera (2016)
pintan un cuadro claro, actualizado, y abarcador del TCL, así Sluggish Cognitive Tempo:
como de sus realidades y controversias. Una buena parte de A controversial construct in evolution
mi artículo está dirigido a apoyar sus planteamientos. Discu- Abstract
to en mi trabajo algunos puntos que no fueron tratados de Sluggish Cognitive Tempo (SCT) refers to an inattention im-
lleno por ellos, no porque necesariamente estemos en des- pairment characterized by cognitive (e.g., daydreaming) and
acuerdo. Entiendo que uno de los retos que tenemos los in- motor (e.g., sluggish) symptoms. In their manuscript, Bernard
vestigadores es evitar utilizar como indicadores del TCL ítems and Servera (2016) provide a clear, actualized, and compre-
que podrían describirse como similares, aunque están expre- hensive picture of SCT, including its realities and controversies.
sados en forma diferente. Esto podría contribuir a un traslape A large part of my article is devoted to support their views
alto y artificial entre los síntomas de inatención del TDAH y and statements, and to expand on points that were not fully
del TCL. Es necesario, además, estudiar las características so- addressed in their contribution. Methodologically, I describe
ciodemográficas del TCL con muestras amplias y representa- the challenge faced by researchers when they use similar
tivas; utilizar escalas de evaluación con validez ecológica y SCT items that are expressed differently in their scales and
pruebas de ejecución validadas, que proveen diferentes tipos highlight how this strategy might create a high and artificial
de información complementaria, para entender mejor la base overlap between ADHD and SCT symptoms. Further, I expand
neuropsicológica y cognitiva subyacente al TCL y continuar on the need to study SCT demographic characteristics in large
desarrollando modelos teóricos para conceptuar el TCL. En and representative samples; to use ecologically valid rating
relación con este último punto, Bernad y Servera hacen una scales and performance tests that provide different types of
valiosa explicación de la conceptuación del TCL como un complementary information in order to better understand the
constructo transdiagnóstico compatible con el paradigma neuropsychology and cognitive base that underlies SCT; and
to continue developing theoretical models to conceptualize
Dirigir toda correspondencia al autor a: José J. Bauermeister, 177 Las Caobas, Urbanización
Hyde Park, San Juan, Puerto Rico 00927-4230. SCT. Bernad and Servera make a valuable explanation of
Correo electrónico: jjbauer@prtc.net
the conceptualization of SCT as a transdiagnostic construct
RMIP 2016, Vol. 8, No.2, pp. 163-174. compatible with the Research Domain Criteria developed by
ISSN-impresa: 2007-0926; ISSN-digital: 2007-3240
www.revistamexicanadeinestigacionenpsicologia.com the National Institute of Mental Health in the United States.
Derechos reservados ®RMIP

Vol. 8, número 2, 2016 163


Bauermeister: TCL: un constructo controvertido en evolución

Keywords: Sluggish Cognitive Tempo, attention-deficit/hy- del Manual Diagnóstico y Estadístico (DSM,
peractivity disorder, concentration deficit disorder por sus siglas en inglés) de la Asociación Ame-
ricana de Psiquiatría (APA por sus siglas en
1. Introducción inglés). Esta edición (APA, 1980) denominó al
Bernad y Servera (2016) nos han obsequiado, TDAH como Trastorno por Déficit de Aten-
con un resumen muy completo de la historia, ción (TDA), dio mayor importancia al construc-
características y controversias del desarrollo del to de inatención, que se consideró medular, que
constructo Sluggish Cognitive Tempo (SCT), de- al de hiperactividad y creó dos subtipos. Uno fue
nominado en español Tempo Cognitivo Lento definido en términos de la presencia de síntomas
(TCL). Este constructo se refiere a una aparente de inatención, hiperactividad e impulsividad y
discapacidad atencional que está presente desde se denominó TDA con hiperactividad. El otro
la niñez. Los síntomas del TCL pueden agru- fue delimitado por la presencia de síntomas de
parse en síntomas de naturaleza cognitiva (p. inatención e impulsividad y se nombró TDA sin
ej., soñar despierto, poco alerta, confundirse con hiperactividad (APA, 1980). Con el propósito
facilidad, mirada en blanco, estar perdido en el de ampliar el recuento histórico de Bernad y
espacio [“espaciado”] y dificultad para procesar Servera, creo que es conveniente comentar que
información con rapidez) y de naturaleza moto- la investigación prontamente demostró que estas
ra (p.ej., enlentecimiento, somnolencia e inacti- definiciones de los subtipos del DSM-III esta-
vidad) (Barkley, 2015; Becker et al., 2016). Los ban erradas. Los estudios de análisis de factores
autores discuten en detalle la definición, la eva- señalaron que los síntomas de impulsividad se
luación, la epidemiología, la relación con factores agrupaban con hiperactividad y no con inaten-
biológicos, la asociación con otras medidas y ción (Bauermeister, 1992; Bauermeister, Alegría,
dominios comportamentales y psicopatológicos, Bird, Rubio-Stipec, & Canino, 1992; Lahey &
y las posibles conceptuaciones de este construc- Carlson, 1991; Lahey et al., 1988; Neeper & La-
to. Sus planteamientos están apoyados por una hey, 1986). Es de notar que la estabilidad trans-
discusión amplia de los estudios científicos que cultural de esta organización bidimensional de
los sustentan. En fin, Bernad y Servera pintan un síntomas del TDAH ha sido corroborada para
cuadro claro, actualizado y abarcador del TCL, niños de edad escolar (Bauermeister, Canino,
así como de sus realidades y controversias. En Polanczyk, & Rohde, 2010).
este artículo comparto las observaciones acerca Los investigadores que corrigieron el error de
de su valioso artículo. incluir síntomas de impulsividad en la definición
del TDA sin hiperactividad obtuvieron resulta-
2. Surgimiento de la dimensión dos interesantes al examinar las diferencias entre
Como se desprende del artículo de Bernad y el grupo TDA con hiperactividad-impulsividad
Servera (2016), el estudio del TCL está estre- (TDA con HI) y sin hiperactividad-impulsi-
chamente relacionado al análisis del TDAH y vidad (TDA sin HI). En su revisión de estos
su taxonomía, ya sea como parte integral del estudios empíricos, Carlson (1986) concluyó
subtipo con presentación inatenta del TDAH, que algunos de los síntomas de atención iden-
como un subtipo diferente del TDAH, o como tificados en los niños en el grupo de TDA sin
una condición psiquiátrica distinta (Bauermeis- HI eran lentitud, apatía, letargo, soñolencia y
ter, en prensa). La investigación formal del TCL soñar despierto. Esta conclusión fue, en tér-
empezó en la década de 1980 (Barkley, 2015). minos generales, corroborada en un estudio
Este interés estuvo motivado por la taxonomía epidemiológico con niños puertorriqueños, en
propuesta para el TDAH en la tercera edición el cual se usó la técnica estadística de análisis

164 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

de grupos (Análisis Cluster) para agrupar los ria natural, y respuesta a intervenciones). Esto no
participantes. Es significativo que, aunque en permite concluir, por el momento, que el TCL es
esta muestra culturalmente diferente, el grupo un diagnóstico psiquiátrico. Como señalan Bec-
inatento, hiperactivo-impulsivo y el inatento ker et al. (2016), la realidad es que es prematuro
no difirieron cuantitativamente en niveles de llegar a conclusiones, ya que la investigación del
inatención, se hallaron diferencias cualitativas TCL todavía está en sus etapas iniciales.
entre los dos grupos. Esto fue así ya que el gru- Concuerdo con Bernad y Servera (2016) en
po inatento presentó un perfil más elevado de que actualmente el TCL debe ser considerado
síntomas del TCL (Bauermeister et al.,1992). como una dimensión psicológica, de igual for-
Bernad y Servera (2016) señalan correcta- ma que muchos investigadores conceptúan el
mente que Russell A. Barkley y Stephen P. Bec- TDAH (Barkley, 2015; Hinshaw & Scheffer,
ker son investigadores de renombre conocidos 2014). Por el momento, el uso del término TCL
por sus aportaciones en el campo del TDAH debe continuar. Este término tiene el potencial
y del TCL. Falta nombrar otros investigadores de provocar en la persona afectada y sus familias,
como Benjamin B. Lahey, Caryn L. Carson, estigma, confusión y experiencias desagradables
Keith McBurnett, G. L. Burns e incluso el de los y peyorativas. No obstante, estas reacciones pue-
propios autores, que ameritan ser reconocidos den aminorarse o evitarse si se explica en detalle
por sus aportaciones. No tengo conocimien- el significado del término.
to de otros trabajos científicos publicados por
Catherine Saxbe en el área del TCL o de sus 4. La evaluación del TDAH
aportaciones y considero que no corresponde a La mayoría de los estudios iniciales del TCL
este grupo distinguido de personas con trayec- usaron escalas de dos a cinco ítems, que inclu-
torias extensas en el estudio del TCL. yeron, por ejemplo, los ítems confundido, sueña
despierto o se pierde en sus propios pensamien-
3. La definición del TCL tos, mirada en blanco, inactivo, lento en sus
En su artículo, Bernad y Servera, así como movimientos, y falto de energía. Estas escalas
Barkley (2015), Bauermeister (en prensa) y Bec- iniciales tienen niveles de confiabilidad y validez
ker et al. (2016) plantean que no se ha llegado a adecuados (Bauermeister et al., 2005; Bauer-
un consenso en cuanto a la definición del TCL meister, Barkley, Bauermeister, Martínez, &
y si es un trastorno psiquiátrico. Becker et al. McBurnett, 2012; Becker et al., 2016). No obs-
(2016) examinaron la validez diagnóstica del tante, el número limitado de ítems no represen-
TCL, analizando las áreas recomendadas por taba de manera abarcadora otras posibles facetas
Cantwell (1995), para determinar si un cons- del constructo. Como bien describen Bernad y
tructo tiene validez y diferenciación diagnóstica. Servera en su artículo, en los últimos siete años
Las áreas en cuestión son fenomenología clínica; se ha dado una eclosión de investigación dirigida
factores demográficos, psicosociales, biológicos, a desarrollar escalas de evaluación del TCL más
familiares-genéticos, familiares-ambientales; amplias y abarcadoras. Recientemente, termina-
historia natural (el resultado a largo plazo de mos la traducción al español y adaptación de uno
niños que no han sido tratados); y la respuesta de estos instrumentos, la Escala de Evaluación
a intervenciones de tratamiento. Los autores del TCL en niños (Barkley, 2013) y estamos en
concluyeron que, en general, la evidencia apoya el proceso de empezar a evaluar su psicometría
la validez diagnóstica, pero en alguna de las áreas en niños puertorriqueños. La escala está dispo-
la evidencia es escasa (p.ej. factores familiares- nible para que otros investigadores puedan hacer
genéticos, factores familiares ambientales, histo- lo propio en países de habla hispana. La meta es

Vol. 8, número 2, 2016 165


Bauermeister: TCL: un constructo controvertido en evolución

disponer, de, por lo menos, dos instrumentos en tres ítems cumplieron con el criterio de validez
español, empíricamente validados para evaluar (Bernad et al., 2014).
el TCL. Este nivel de validez interna es el más bajo
Quisiera comentar la Escala SCT-CADBI en la Escala TCL-CADBI para los niños es-
que compone uno de los módulos del Inven- pañoles, esto puede explicarse por el hecho de
tario de Conducta Perturbadora en Niños y que en los estudios se restringió el alcance de
Adolescentes (CADBI, por sus siglas en inglés) la edad al usar una muestra de niños de primer
(Burns, Lee, Becker, Servera, & McBurnett, o segundo grado. En los demás estudios, in-
2015). Esta escala tiene una versión para padres cluyendo el de Belmar et al. (2015), con niños
y maestros (ocho ítems) e índices robustos de chilenos usando la misma versión española,
confiabilidad y validez en niños estadouniden- las muestras consistieron de estudiantes desde
ses (Lee, Burns, Snell, & McBurnett 2014), kínder o primero hasta por lo menos el sexto
españoles (Burns, Servera, Bernad, Carrillo, & grado. Bernad y Servera resaltan la importancia
Cardo, 2013), chilenos (Belmar, Servera, Bec- de investigar si el bajo nivel de la validez interna
ker, & Burns, 2015), nepaleses (Khadka, Burns, de la Escala SCT-CADBI encontrada en los
& Becker, 2015) y surcoreanos (Lee, Burns, & estudios españoles se debe al grupo de edad
Becker, en prensa). analizado. La investigación es necesaria pues la
Contrario a las demás investigaciones con confirmación de esta hipótesis podría arrojar luz
la Escala SCT-CADBI, en los estudios con acerca de la edad de inicio del TCL, así como de
niños españoles no todos los ítems de la escala la influencia de la etapa de desarrollo, el nivel de
cumplieron con el criterio de validez conver- demanda cognitiva, académica y social a la cual
gente y discriminatoria establecido, es decir, el niño está expuesto, y el contexto (p. ej., hogar
correlaciones altas en el factor TCL y bajas en y escuela) en la presentación de los síntomas de
el factor de inatención del TDAH (Burns et al., esta condición. Además, desde el punto de vista
2013; Bernad, Servera, Becker, & Burns, 2016; psicométrico, esta investigación podría indicar
Bernad, Servera, Grases, Collado, & Burns, la necesidad de usar ítems diferentes en escalas
2014; Servera, Bernad, Carrillo, Collado, & de evaluación para niños de seis a ocho años y
Burns, 2015). En el primer estudio con niños de otro grupo de edades (p. ej., adolescentes).
españoles de primer grado evaluados por sus Finalmente, los hallazgos de los estudios donde
madres y padres, respectivamente, solo cinco se utilizó la SCT-CADBI en niños españoles
de los ocho ítems de la Escala TCL-CADBI podrían estar limitados por el número reducido
cumplieron con el criterio de validez estableci- de ítems incluidos en la escala de TCL (cinco
do (Burns et al., 2013). La escala de 5 ítems de para la versión de padres y tres para la de maes-
TCL obtuvo un patrón similar de confiabilidad tros), como solía ocurrir en los primeros años de
y validez obtenido en el estudio con niños esta- estudio del constructo.
dounidenses, en el cual se usó la escala de ocho Como explican Bernad y Servera, las escalas
ítems (Lee et al., 2014). En un estudio posterior de TCL tienen índices robustos de consistencia
con niños de segundo grado se encontraron interna, estabilidad temporal y confiabilidad
resultados idénticos solo para la evaluación de entre evaluadores. Apoya esta conclusión a la re-
las madres. En las evaluaciones de los padres los visión de la literatura científica y el metaanálisis
ocho ítems cumplieron con el criterio de validez de Becker et al. (2016). En esta y otras secciones
(Servera et al., 2015). Finalmente, en el estudio informaré los coeficientes de correlación pon-
en que maestros evaluaron niños que cursaban el derados y obtenidos por Becker et al. (2016) en
primer grado y posteriormente el segundo, sólo su metaanálisis de las investigaciones del TCL.

166 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

Como guía al lector, se presentan los criterios del (p. ej., mirada en blanco y parece perdido en el
tamaño de efecto descritos por Hemphill (2003) espacio (“espaciado” ). Por otro lado, la aparente
para describir la magnitud, la fortaleza o el tama- similitud de los ítems de inatención del TDAH
ño del efecto de estos coeficientes (Bauermeister, y los del TCL puede contribuir a que los infor-
en prensa). Calibrando los criterios estableci- mantes (padres, maestros) y autoinformantes
dos originalmente por Cohen (1988), establece (adultos) tengan dificultad para diferenciar el
Hemphill (2003) los siguientes puntos de cor- significado de los ítems (p. ej., “se distrae fácil-
te para interpretar estudios psicológicos. Los mente” para medir inatención y parece perdido
coeficientes de correlaciones (r) con tamaños en el espacio (espaciado ) para medir TCL). La
menores de 0.20 se consideran efectos pequeños. similitud podría contribuir a un traslape alto y
Las correlaciones con tamaños entre 0.20 y 0.30 artificial entre los síntomas de inatención del
se consideran efectos medianos. Finalmente, las TDAH y del TCL y afectar la psicometría de
correlaciones con tamaños mayores de 0.30 se las escalas para medir este constructo. En este
consideran efectos altos. sentido, me parece útil e innovadora la estrategia
Se encontró que el coeficiente alfa de Cronbach de McBurnett (2010), así como de Burns et al.
de las escalas de, por lo menos, cuatro ítems para (2015), de incluir en la entrevista y en la Escala
niños tenían una consistencia interna ponderada SCT-CADBI, respectivamente, ejemplos o des-
alta (α = 0.80). La confiabilidad más alta (α = criptores que ayudan a entender el significado
0.91) se obtuvo, como es de esperarse, para las del ítem.
escalas de siete o más ítems. El valor del coefi- Es muy importante continuar desarrollando
ciente para este número de ítems en adultos fue entrevistas diagnósticas semiestructuradas que
alto (α = 0.86). permitan explorar el significado de la respuesta
Se encontró también que el tamaño de efec- del entrevistado (padres, maestros, jóvenes o
to de los coeficientes ponderados de medidas adultos) y determinar si la contestación corres-
repetidas en niños y adultos para periodos de 6 ponde al síntoma de TCL o la inatención que
a 12 semanas a un año es alto (r = 0.74 a 0.88). se desea medir. En este tipo de instrumento no
Finalmente, pocos estudios han investigado la se acepta a primera vista la respuesta del infor-
confiabilidad entre dos evaluadores. Se encon- mante. La presencia del síntoma lo determina
traron correlaciones con un tamaño de efecto el clínico a base del análisis de toda la informa-
alto entre las evaluaciones de padres y madres ción obtenida. Este tipo de instrumento podría
(r = 0.71) y entre autoevaluaciones de los niños diferenciar entre síntomas similares expresados
y evaluaciones de sus maestras (r = 0.53). El ta- en forma diferente.
maño del efecto de las correlaciones ponderadas
entre las evaluaciones de padres y maestras (r = 5. Estudios epidemiólogos del TCL
0.54) y entre autoinformes de adultos jóvenes y La literatura científica no es clara en cuanto a la
evaluaciones de sus padres (r = 0.48) también es relación del TCL con variables sociodemográ-
alto (Bauermeister, en prensa; Becker et al. 2016) ficas, como plantean Bernad y Servera (2016).
A pesar de los logros y avances en la compren- Por ejemplo, en el resumen de Bauermeister (en
sión del constructo de TCL es necesario reco- prensa) del metaanálisis de Becker et al. (2016)
nocer posibles obstáculos en la evaluación del se encontró un tamaño del efecto bajo para la
mismo. Uno de ellos es el hecho de que algunos relación positiva del TCL con edad en niños (r
de los ítems del TCL, parecen ser similares pero = 0.11) y negativa con nivel socioeconómico en
se expresan en forma diferente, es decir, que exis- niños (r = -0.10) y adultos (r = -0.09). El apoyo
ta cierto grado de redundancia en su contenido estadístico para la relación entre el TCL y edad

Vol. 8, número 2, 2016 167


Bauermeister: TCL: un constructo controvertido en evolución

para adultos (r = 0.00), así como para género en ción, el tamaño del efecto fue alto. Se encontraron
niños (r = 0.03) y adultos (r = 0.01) fue nulo. Es resultados similares en adultos al correlacionar el
necesario aclarar que el número de estudios en TCL con la ansiedad (r = 0.30) y el TCL con la
esta área es limitado y no todos han sido llevados depresión (r = 0.49). La excepción fue para la va-
a cabo con muestras amplias y representativas riable de ansiedad, en la cual el tamaño del efecto
de la comunidad. Por lo tanto, los resultados no fue mediano (Bauermeister, en prensa; Becker et
necesariamente reflejan plenamente las caracte- al., 2016). Si examinamos psicopatología de ma-
rísticas sociodemográficas de la población. Las nifestación externa, se encuentra que la magnitud
muestras clínicas constituyen grupos altamente de la relación tiende a ser menor. El tamaño del
seleccionados y posiblemente sesgados. En ge- efecto fue alto para el trastorno negativista desa-
neral, los niños remitidos tienden a estar más fiante (r = .32), el trastorno disocial (r = .31) y la
discapacitados, a tener niveles más altos y más psicopatología de manifestación externa en ge-
severos de psicopatología, y a pertenecer a clases neral (r = .36) y mediano para conducta agresiva
socioeconómicas que dan valor a la utilización de (r = .27) y delincuente (r = .21). Estas relaciones
servicios de salud mental (Goodman et al., 1998). no han sido estudiadas en adultos (Bauermeister,
en prensa; Becker et al., 2016).
6. Las implicaciones del TCL Como bien señalan Bernad y Servera (2016),
en otras medidas y dominios se podría cuestionar el que los resultados descri-
comportamentales tos estén en parte influidos por la asociación alta
Bernad y Servera hacen un magnífico resumen de los síntomas del TCL con los de inatención.
de las investigaciones en torno a este tema. Mis Sin embargo, esta asociación positiva entre el
comentarios están dirigidos a añadir algunos re- TCL y la psicopatología de manifestación inter-
sultados cuantitativos disponibles, según se de- na se sostiene en los estudios en los que se con-
prenden del resumen (Bauermeister, en prensa) trola estadísticamente la influencia que pudiera
del meta análisis de Becker et al. (2016) descrito tener esta asociación. En contraste, la asociación
anteriormente. Estos autores proveen evidencia entre el TCL e hiperactividad-impulsividad o
empírica que sustenta el resumen de Bernad y conducta de manifestación externa deja de ser
Servera (2016). estadísticamente significativa o se torna negativa
cuando se controla el posible efecto de la ina-
6.1 La relación del TCL tención (Barkley, 2015; Bauermeister, en prensa;
con medidas psicopatológicas Becker et al., 2016).
Como se explicó anteriormente, la magnitud Se puede concluir que existe una relación
del tamaño del efecto para la relación del TCL más robusta entre los síntomas del TCL e in-
y la hiperactividad-impulsividad (r = 0.32 en atención y de psicopatología de manifestación
niños y 0.46 en adultos) es menor que el que interna, en comparación con los síntomas de
se obtiene para inatención (r = 0.63 en niños y hiperactividad-impulsividad, psicopatología de
0.72 en adultos) (Becker et al., 2016). En cuanto conducta de manifestación externa o trastornos
las correlaciones ponderadas entre el TCL y las psiquiátricos (Becker et al., 2016).
conductas de manifestación interna en muestras
de niños, las siguientes son significativas: r = 0.30 6.2 El TCL, el funcionamiento
para ansiedad; r = 0.49 para depresión; r = 0.41 neuropsicológico y las funciones
para retraimiento social; r = 0.53 para ansiedad- ejecutivas
depresión y r = 0.40 para la psicopatología de En la actualidad es muy difícil resumir la lite-
manifestación interna en general. Con una excep- ratura científica en cuanto al funcionamiento

168 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

neuropsicológico y las funciones ejecutivas en Varios investigadores han propuesto medir el


el TCL. Varios factores contribuyen a esta si- FE por medio de escalas de evaluación (Barkley
tuación. Primero, no hay investigación neurop- & Fisher, 2011; Burgess, Alderman, Evans,
sicológica extensa del TCL. Segundo, existen Emslie, & Wilson,1998; Spinella, 2005). Estas
varias limitaciones metodológicas, como el uso escalas tienen validez ecológica y capacidad
de medidas de TCL dispares, el tamaño de las predictiva para discapacidades en el diario vivir
muestras utilizadas y los procedimientos de se- (Barkley & Fischer 2011; Burgess et al., 1998).
lección y de evaluación empleados. Becker et al. Las medidas de autoinforme del FE predi-
(2016), por ejemplo, señalan con mucha razón cen discapacidad en la vida diaria (Barkley &
que la mayoría de los estudios se han hecho con Fischer, 2011) y funcionamiento ocupacional
muestras de sujetos seleccionados para investigar (Barkley & Murphy, 2010; Burgess et al., 1998)
el TDAH y con un número limitado de pruebas mejor que las medidas del FE con pruebas
neuropsicológicas diseñadas para este trastor- neuropsicológicas. También, las medidas neu-
no. Esto puede haber debilitado la asociación ropsicológicas del FE no necesariamente miden
del TCL y discapacidades neuropsicológicas ciertos aspectos del funcionamiento ejecutivo
exclusivas al TCL. Tercero, en algunos estudios o evalúan habilidades que no son inherentes
no se controló estadísticamente la influencia al FE (Burgess et al., 1998; Miyake & Fried-
que puede tener en los hallazgos la inatención. man, 2012). Sin embargo, el estudio del FE
Como se ha explicado, la correlación entre el y el TCL con escalas de evaluación realizadas
TCL e inatención es robusta, de manera que la por la misma persona tienen la limitación de
asociación entre el TCL y una variable en par- medir diferentes constructos de manera similar
ticular no se puede atribuir únicamente al TCL. (varianza compartida). Además, se argumenta
Los resultados de estudios en los cuales se con- que las medidas del FE basadas en pruebas neu-
troló estadísticamente el efecto de la presencia ropsicológicas y las medidas del FE basadas en
de síntomas de inatención y otros constructos, escalas de evaluación parecen medir diferentes
son más variados e inconsistentes (Becker et. al., niveles de cognición (Barkley & Fischer, 2011;
2016). De igual forma, no siempre se controla Toplak, West, & Stanovich, 2013).
la influencia de la inteligencia en el desempeño Es recomendable incluir pruebas neuropsi-
en las pruebas neuropsicológicas administradas. cológicas y escalas de evaluación para estudiar
Finalmente, estas pruebas no han sido diseña- el TCL y el FE. Ambas formas evaluativas son
das para medir el constructo del TCL ni de útiles y valiosas ya que proveen diferentes tipos
función ejecutiva, sino que han sido traídas del de información complementaria con relación al
banco de pruebas neuropsicológicas existentes funcionamiento cognitivo y conductual (Isquith,
(Barkley, 2015; Bauermeister, en prensa; Becker Roth, & Gioia, 2013; Toplak et al., 2013). Esta
et al., 2016). recomendación debe ser tomada en considera-
El TCL parece estar asociado al funcio- ción en el estudio del TCL.
namiento ejecutivo en actividades cotidianas
cuando se mide con escalas de evaluación (p. 7. Conclusiones
ej., Barkley 2012, 2013, en prensa; Becker & Es necesario felicitar a Bernad y Servera (2016)
Langberg, 2014). Este no es el caso cuando el por su valioso trabajo en torno al constructo del
funcionamiento ejecutivo (FE) es evaluado con TCL y, como ellos llaman, su renacimiento a
pruebas neuropsicológicas (Bauermeister et al., principios de siglo. Este renacimiento ha sido
2012; Wahlsted & Bohlin, 2010; Willcutt et internacional y transcultural, a juzgar por los
al., 2014). trabajos científicos publicados con muestras de

Vol. 8, número 2, 2016 169


Bauermeister: TCL: un constructo controvertido en evolución

niños o adultos estadounidenses, chilenos, puer- determinar si estas dimensiones están asociadas
torriqueños, españoles, coreanos y nepaleses. Es en forma diferente a otros trastornos y variables.
de notar que los investigadores hispanos han En el estudio de las dimensiones del TCL es
tenido un rol activo en el estudio del constructo conveniente recordar las lecciones aprendidas
del TCL. de los subtipos del TDAH. Estos demostraron
En la sección de conclusión de su artículo, ser muy inestables, dándose el caso de que los
Bernad y Servera incluyen un resumen com- niños podían reunir los criterios diagnósticos de
pleto de la validez del TCL. La evidencia de subtipos diferentes a lo largo del desarrollo (La-
los hallazgos de análisis factoriales en niños hey, Pelham, Loney, Lee, & Willcutt, 2005). Es
o adultos de diversas culturas y los índices de pues necesario revisar las dimensiones del TCL
confiabilidad encontrados apoyan claramente en diferentes etapas del desarrollo, ya que estas
la validez interna del constructo del TCL. Los podrían cambiar en función de la maduración
síntomas del TCL están más correlacionados neuropsicológica y de las demandas cognitivas y
entre sí que con otros diagnósticos y forman conductuales a las que el individuo esté expuesto.
una dimensión que evalúa un rasgo subyacente En su artículo, Bernad y Servera (2016) demues-
distinto al TDAH. El apoyo para la validez tran estar atentos a esta posibilidad al comentar
externa del TCL es menor. Lleva a esta con- que “puede ser que haya un factor evolutivo que
clusión la variabilidad e inconsistencia de los dificulte la obtención de la medida multifactorial
resultados y el número relativamente reducido de la dimensión antes de ciertas edades” (Sección
de investigaciones realizadas. No obstante, los 7. Conclusiones).
hallazgos también son positivos y prometedores. De su revisión y análisis de la literatura,
Por ejemplo, los datos son claros en señalar que Barkley (2015) concluye que el TCL es un tras-
el TCL es una condición diferente del TDAH y torno distinto del TDAH y que la investigación
de los trastornos de manifestación externa, como futura ayudará a confirmar si este es el caso. Estos
el trastorno negativista desafiante y el trastorno hallazgos no descartan que los síntomas del TCL
disocial (Barkley, 2015; Bauermeister, en prensa; estén correlacionados con los del TDAH. El
Becker et al., 2016) tamaño del efecto o fortaleza de la asociación es
Las investigaciones tienden a apoyar que mayor para la dimensión de inatención (Barkley,
el TCL es multidimensional. La mayoría de 2015; Becker et al., 2016). Como señala Barkley
los resultados de estudios, en los cuales se han (2015), la asociación entre las dimensiones del
utilizado escalas del TCL compuestas de ocho TCL y del TDAH es similar a la encontrada para
o más síntomas señalan que éstos se organizan otras dimensiones de psicopatología que, aunque
en, por lo menos, dos dimensiones: una cognitiva relacionadas, son distintas entre sí (p. ej., ansie-
y la otra conductual. A estas dimensiones se les dad y depresión). La asociación entre el TCL
ha llamado de diferentes formas. Para la dimen- y el TDAH implica que las dos condiciones
sión cognitiva se han usado los términos soñar pueden coexistir. En una encuesta nacional de
despierto o alerta inconsistente; para la dimensión padres de niños y adolescentes estadounidenses,
conductual se han utilizado soñoliento y lentitud Barkley (2013) encontró que el 59% de quienes
(Barkley, 2013; Fenollar-Cortés, Servera, Bec- calificaron para un diagnóstico de investigación
ker, & Burns, 2014; Lee et al., 2014; McBurnett de TCL también reunieron los criterios diagnós-
et al., 2014; Penny, Waschbusch, Klein, Corkum, ticos para el TDAH. Por otro lado, 39% de los
& Eskes, 2009). De confirmarse estas dos di- niños en el grupo con el TDAH calificaron para
mensiones del TCL en investigaciones futuras, el TCL. En otra encuesta nacional con adultos,
se podría comprender mejor el constructo y Barkley (2012) halló resultados similares. La

170 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

comorbilidad involucra principalmente a niños es que es prematuro llegar a esa resolución, ya


o adultos con el TDAH y síntomas elevados de que la investigación del TCL todavía está en sus
inatención (Barkley, 2016). Al analizar los datos etapas iniciales. Becker et al. (2016) plantean
de la correlación y de la comorbilidad aparente como alternativa conceptuarlo como un espe-
entre el TCL y el TDAH, Barkley (2015) reco- cificador (specifier) de los trastornos existentes,
mienda crear una categoría global de trastornos como se hace en el DSM-5 (APA, 2013), para
de atención. Esta categoría incluiría al TDAH entender las trayectorias en el desarrollo y el
y al TCL como condiciones separadas y parcial- funcionamiento, así como la toma de decisiones
mente distintas. Él plantea que esto se hace en para el tratamiento. Finalmente, otra posibilidad
el DSM-5 (APA, 2013) para la supracategoría que proponen Becker et al. (2016) es que el TCL
de trastornos específicos en el aprendizaje que tenga utilidad transdiagnóstica, es decir, que sea
incluye lectura, ortografía, matemáticas, escritura un “constructo significativo que pueda predecir
y trastornos relacionados que son diferentes pero el curso en el desarrollo, discapacidades asociadas
que también pueden coexistir. y respuesta al tratamiento a través de una gama
Es muy interesante la hipótesis de que el de otras psicopatologías” (p. 176, traducción al
proceso mental de divagar o apartar los pensa- español del autor). Becker et al. (2016) ofre-
mientos de los asuntos ante sí puede explicar cen como ejemplo el constructo de regulación
el TCL (Adams, Milich, & Fillmore, 2010; emocional, que, aunque no es un trastorno per
Barkley, 2012, 2013, 2015). Este proceso puede se, sin duda es muy importante para entender la
permitir al sistema ejecutivo enfocarse y tratar psicopatología a lo largo de la vida. Es muy inte-
de resolver otros asuntos personales mientras el resante la discusión de Bernad y Servera (2016)
individuo se involucra en acciones relativamente en torno a la conceptuación del TCL como un
automáticas hacia objetivos conocidos en el constructo transdiagnóstico compatible con el
ambiente (Smallwood & Schooler, 2006). Una paradigma del Research Domain Criteria iniciado
regulación pobre del proceso de divagar podría por el Instituto Nacional de Salud Mental de
tener efectos adversos en la ejecución del fun- EE.UU (Cuthbert & Insel, 2013).
cionamiento ejecutivo (Smallwood & Schooler, Como el título sugiere, el artículo de Bernad
2006). Los niños y adultos con el TCL podrían y Servera ha arrojado mucha luz sobre las reali-
usar en exceso el mecanismo de soñar despierto dades y controversias del TCL en la actualidad.
para escapar de tareas ansiogénicas o para en- Como ellos recomiendan, es necesario continuar
tretenerse en algo placentero. Podrían también con programas de investigación multidisciplina-
tener dificultad para regular la tendencia a in- rios que aumenten nuestro conocimiento de un
volucrarse en pensar una y otra vez sobre sus constructo tan complejo como el TCL.
preocupaciones o temores y, como consecuencia,
afectar el proceso atencional (Barkley, 2012, Referencias
2013, 2015). Este último punto es consistente Adams, Z. W., Milich, R., & Fillmore, M. T. (2010). A case
con el grado de relación existente entre el TCL for the return of Attention-Deficit Disorder in DSM-5. The
y los síntomas de manifestación interna. ADHD Report, 18, 1-6.
Por otro lado, Becker et al. (2016) entienden American Psychiatric Association (1980). Diagnostic and sta-
que, en general, la evidencia apoya la validez tistical manual of mental disorders (3a ed.). Washington,
diagnóstica del TCL, pero en algunas de las DC: Autor.
áreas la evidencia es escasa. Esto no permite American Psychiatric Association (2013). Diagnostic and sta-
apoyar la conclusión, por el momento, de que el tistical manual of mental disorders (5a ed.). Washington,
TCL es un diagnóstico psiquiátrico. La realidad DC: Autor.

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174 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Sluggish Cognitive Tempo:
desde una perspectiva transdiagnóstica
Ester Camprodon-Rosanas y Santiago Batlle
Institut de Neuropsiquiatria i Addicions. CSMIJ Sant Martí-La Mina, Parc de Salut Mar,
Barcelona. Departament de Psiquiatria i Medicina Legal. Facultat de Medicina.
Universitat Autònoma de Barcelona, España

Resumen attentional disorder or as a transdiagnostic construct. The SCT


En los últimos quince años ha habido un interés creciente from a transdiagnostic perspective seems to fit with existing
en el estudio del Sluggish Cognitive Tempo (SCT). Uno de los proposals. It would solve the existing problems of overlap
debates abiertos en relación al SCT se centra en considerarlo and comorbidity. It would facilitate clinical assessment of
un nuevo trastorno atencional o bien como constructo trans- SCT, and diagnostic processes as occur for Attention Deficit
diagnóstico. El SCT desde una perspectiva transdiagnóstica Hyperactivity Disorder when emotional dysregulation or per-
parece encajar con las propuestas existentes. De este modo, fectionism in anxiety disorders is evaluated. Also may facilitate
solventaría los problemas de solapamiento y comorbilidad the emergence of better-fit treatments for individuals.
existentes; facilitaría a los clínicos la evaluación del SCT, así Keywords: Sluggish Cognitive Tempo, attention déficit hy-
como los procesos diagnósticos del Trastorno por Déficit de peractivity disorder, transdiagnostic
Atención e Hiperactividad cuando se ha evaluado la desre-
gulación emocional o el perfeccionismo en los trastornos de En el estudio de Bernad y Servera (2016) se
ansiedad. Además, simplificaría la aparición de tratamientos realiza una revisión exhaustiva de la dimensión
más individualizados. Sluggish Cogntive Tempo (SCT). Una de las
Palabras claves: Sluggish Cognitive Tempo, tempo cognitivo cualidades de ese trabajo es la extensa revisión
lento, transdiagnóstico, Trastorno por Déficit de Atención- del SCT desde una perspectiva histórica, la
Hiperactividad descripción de distintas definiciones existentes,
los instrumentos de medida, datos epidemioló-
Sluggish Cognitive Tempo: gicos y, sobre todo, pone especial atención en las
from a transdiagnostic perspective implicaciones psicopatológicas (sintomatología
Abstract internalizante y externalizante), el rendimiento
In the last fifteen years there has been a growing interest in académico y la relación social. Bernad y Ser-
the study of SCT. One of the open debates in relation to Slu- vera (2016) también han tenido en cuenta las
ggish Cognitive Tempo (SCT) focuses on considering it a new implicaciones a nivel de perfil neuropsicológico
del SCT. Este trabajo facilita la comprensión
Dirigir toda correspondencia al autor a: Ester Camprodon-Rosanas. CSMIJ Sant Martí-La Mina. del SCT, pone de relieve las realidades y con-
C/Ramon Turró 337-339 3era Planta. 08019. Barcelona (Catalunya, España).
Teléfono: 0034.4465706 troversias de esta dimensión, y facilita la de-
Correo electrónico: estercamprodon@copc.cat; 60948@parcdesalutmar.cat limitación de las áreas en las que se requiere
RMIP 2016, Vol. 8, No. 2, pp. 175-181. más investigación (más en aspectos biológicos
ISSN-impresa: 2007-0926; ISSN-digital: 2007-3240
www.revistamexicanadeinestigacionenpsicologia.com
y neuropsicológicos).
Derechos reservados ®RMIP

Vol. 8, número 2, 2016 175


Camprodon-Rosanas y Batlle: SCT. Desde una perspectiva transdiagnóstica

Uno de los debates abiertos con relación al Watson, 1991); el segundo grupo incluye los au-
SCT se centra en si se puede considerar un nue- tores de los estudios que proponen una dimen-
vo trastorno atencional (Barkley, 2014) o bien sión específica, como la ira, el perfeccionismo,
enmarcarlo como un constructo transdiagnós- la rumiación, la intolerancia a la incertidumbre,
tico (Becker et al., 2016). En ambas propuestas entre otros; en el tercer grupo, se encuentran las
se requiere más investigación para poder afirmar investigaciones centradas en procesos cogniti-
de forma contundente una u otra visión. Sin em- vos básicos (p. ej., atención selectiva, sesgos de
bargo, y en la misma línea que estudios previos memoria.), o en estrategias de afrontamiento de
(Becker et al., 2016; Bernad & Servera, 2016; malestar psicológico (p. ej., evitación, búsque-
Camprodon et al., 2013), consideramos intere- da de reaseguración, supresión de pensamien-
sante la visión del SCT desde una perspectiva tos), que de forma hipotética se encuentran en
transdiagnóstica. la base de trastornos mentales diferentes. El
El transdiagnóstico supone una nueva forma denominador común de los tres grupos es la
de entender y tratar los trastornos mentales. En apuesta por una caracterización dimensional de
lugar de centrarse en lo específico y diferencial las diferentes variables que se proponen como
de cada uno de ellos, su atención se focaliza en transdiagnósticas. Consideramos que, sobre la
lo que tienen en común, en los procesos psico- base del conjunto de características expuestas en
lógicos que subyacen a muchos de ellos (Sandin, el estudio de Bernad y Servera (2016) con rela-
Chorot, & Valiente, 2012). Es decir, trata de ción al SCT, este podría ser incluido en el tercer
definir qué dimensiones básicas subyacentes a grupo, centrado en los procesos básicos. Si bien
uno o más trastornos podrían ser tratadas de existe evidencia de que el SCT y la inatención
forma similar, con independencia del trastorno (I) del TDAH se relacionan de forma moderada
en el que se manifiestan (p. ej., McEvoy, Nathen, y parece existir cierto solapamiento, ha quedado
& Norton, 2009). Un mecanismo o proceso demostrado que controlándose el efecto mutuo
psicopatológico es transdiagnóstico cuando está entre SCT e I, cada una de ellos mantiene de for-
relacionado etiológicamente (génesis o mante- ma significativa un patrón de relación con otras
nimiento) con un conjunto de trastornos menta- variables comportamentales, de interacción y de
les (Sandin, 2012). El transdiagnóstico se apoya rendimiento que incluso en algunos casos son
principalmente en una perspectiva básicamente opuestas (Becker et al., 2016; Camprodon-Ro-
dimensional. Sin embargo, tiene el mérito de po- sanas et al., 2016a; Camprodon-Rosanas et al.,
sibilitar una integración con el enfoque catego- 2016b; Garner, Mrug, Hodgens, & Patterson,
rial. Es decir, la visión transdiagnóstica implica 2013; Penny, Waschbusch, Klein, Corkum, &
la existencia de un diagnóstico categorial, ya que Eskes, 2009; Servera, Bernad, Carrillo, Collado,
debe describir o explicar los diferentes trastor- & Burns, 2015). Por tanto, propondríamos la
nos mentales desde dimensiones más o menos inclusión del SCT en el listado de dominios
genéricas. Esta perspectiva permite explicar la relacionados con los procesos cognitivos, sepa-
elevada comorbilidad que se da entre muchos rado de la Inatención. Diversos autores (Barkley,
trastornos mentales (Sandin, 2012). 2014; Becker et al., 2016) plantean modificar o
Según Belloch (2012), los defensores del pensar en nuevas denominaciones para el SCT.
enfoque transdiagnóstico se clasifican en tres Nuestra propuesta de nomenclatura para una
grupos teniendo en cuenta el foco principal de visión transdiagnóstica sería Lentitud Cogni-
sus aportaciones o intereses. El primer grupo se tiva (Cognitive Slowness). Consideramos que
centra en la existencia de dimensiones básicas define mejor de forma global las características
comunes a los trastornos emocionales (Clark & del SCT y que éstas son las responsables de

176 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

las manifestaciones conductuales. En la misma potencialmente diversos patrones de deterioro


línea y tal y como mencionan Bernard y Serve- de toma de decisiones a través de los trastornos
ra (2016), en el año 2008 el National Institute mentales implican sistemas neuropsicológicos y
of Mental Health (NIMH) inicia un proyecto neurobiológicos similares. El proceso de toma de
denominado Research Domain Criteria (RDoc; decisiones en sí se divide en tres etapas distintas:
Cuthbert & Insel, 2013), en el que se plantea el evaluación, decisión y gestión, y valoración y
futuro de los diagnósticos psiquiátricos desde adaptación.
una perspectiva transdiagnóstica, definiendo la La evaluación es el proceso por el cual se hace
existencia de unos dominios que están formados una estimación de la utilidad subjetiva de opcio-
por dimensiones bioconductuales, continuas y nes de elección disponibles, teniendo en cuenta
evolutivas. Las dimensiones continuas no im- la memoria y el aprendizaje de la experiencia
plican psicopatología alguna en sí, pero en los previa, así como la prospección sobre el valor
extremos se relacionan con trastornos mentales. futuro, mediada por el aprendizaje a través de
Algunos ejemplos de dominios ya definidos y mecanismos de refuerzo implícito (denominada
bien estudiados son la memoria de trabajo, la por los autores como matriz de utilidad, se refiere
atención y la regulación emocional. De esta p. ej.: si un individuo prefiere las manzanas a
forma, somos partidarios de que el SCT estaría las naranjas, quedaría registrada en la matriz de
bien representado en este proyecto. utilidad la prioridad de las manzanas; también se
Siguiendo la conceptualización de los tras- incluyen aquí los resultados de la temporización:
tornos psiquiátricos desde un prisma transdiag- “prefiero el riesgo o me disgusta el retraso”) y
nóstico, en un estudio reciente, Sonuga-Barke, procesos explícitos autorreferenciales (memoria
Cortese, Fairchild, y Stringaris (2016) proponen autobiográfica).
una neurociencia transdiagnóstica de los trastor- La decisión y gestión es el proceso durante el
nos mentales de los niños y adolescentes. Estos cual la utilidad subjetiva asignada a alternativas
autores consideran que el éxito o el fracaso en la de la competencia se compara en términos de
vida está determinado, en parte, por las decisio- costos y beneficios generales y se implementa un
nes que cada uno realiza. Argumentan que una plan de decisión. Son procesos que están fuerte-
toma de decisiones ineficaz contribuye al dete- mente influenciados por las funciones ejecutivas
rioro del funcionamiento y a una reducción de la de orden superior (p. ej., inhibición, memoria de
satisfacción en la vida de los niños y adolescentes trabajo, planificación).
con problemas de salud mental. La propensión Finalmente, la valoración y adaptación hace
de estos individuos para tomar decisiones inefi- referencia a la utilidad estimada de la decisión
caces ha sido evidente para los profesionales de realizada (de nuevo sobre la base de los sistemas
la salud mental, pero sorprendentemente poco de valores explícitos e implícitos) y se compara
estudiada en ámbitos de la investigación. Este con las expectativas previas a generar una señal
enfoque proporciona un marco alternativo a de error de predicción que impulsa el aprendi-
los tradicionales modelos psiquiátricos (Hasler, zaje y actualiza las estimaciones implícitas y
2012; Kishida, King-Casas, & Montague, 2010) explícitas de valor de las experiencias particula-
y, potencialmente, ofrece nuevos conocimientos res y opciones. Es decir, se producen unos bucles
sobre las formas en que los procesos complejos de retroalimentación entre los procesos de eva-
de comportamiento se ven comprometidos en luación y valoración/adaptación. El modelo pro-
aquellos sujetos con trastornos mentales. En pone que estas etapas de toma de decisiones son
consonancia con el estudio RDoc, estos auto- principalmente controladas por tres sistemas
res están particularmente interesados en ver si cerebrales distintos: la red en modo automático,

Vol. 8, número 2, 2016 177


Camprodon-Rosanas y Batlle: SCT. Desde una perspectiva transdiagnóstica

el sistema de control ejecutivo y la evaluación población general (PG) (Barkley, 2013) como en
del refuerzo. La red en modo automático que población clínica (PC) (Camprodon-Rosanas
incluye el córtex prefrontal medial, la corteza et al., 2016a; Raiker et al., 2015), independien-
prefrontal medial, la corteza cingulada posterior, temente del TDAH. Las tasas de prevalencia
la corteza parietal lateral y el giro temporal fueron superiores en la PC respecto a la PG
medio está implicada principalmente en la (Camprodon-Rosanas et al., 2016a y b). En un
cognición autorreferencial, pero también en al- estudio de síntomas SCT y sus características
gunos aspectos de la autorregulación. El sistema en una muestra de PC se ha observado que el
de control ejecutivo (córtex prefrontal dorsola- SCT está presente en otros trastornos psiquiá-
teral, la corteza prefrontal dorsolateral, la corte- tricos aparte del TDAH. Los pacientes TDAH
za cingulada anterior y la corteza parietal), que tienen más síntomas de SCT, especialmente
media el control arriba-abajo durante la auto- altos en los TDAH-IN; pero los que mayores
rregulación y la planificación. Finalmente, la puntuaciones de SCT presentan son los pacien-
evaluación de refuerzo y los circuitos de apren- tes con trastornos del aprendizaje, incluso más
dizaje (corteza orbitofrontal, la amígdala, la que los niños con TDAH (Camprodon-Rosanas
corteza cingulada anterior), relacionada con el et al., 2016a). Además, en un estudio realizado
refuerzo. Siguiendo este modelo, Sonuga-Barke por Skirbekk, Hansen, Oerbeck, & Kristensen
et al. (2016) hacen una propuesta hipotética de (2011) no existen diferencias significativas entre
cómo quedarían mapeados algunos trastornos, las puntuaciones obtenidas en la escala de SCT
concretamente el TDAH, trastorno de conduc- (SCT-5) en los sujetos con TDAH subtipo
ta, depresión y trastornos de ansiedad (TA). Con combinado e inatento. Observan que en los
base en esta propuesta, este modelo en la Tabla análisis post-hoc los niños del grupo control
1 se hipotetiza cómo podría quedar distribuido presentan de forma significativa puntuaciones
con la dimensión SCT, aun teniendo en cuenta más bajas de SCT que el grupo TDAH+TA,
las limitaciones metodológicas por falta de es- TDAH, y TA. Destacan que las puntuaciones
tudios más específicos en los ámbitos biológico de SCT en los TA están cercanas a los TDAH
y neuropsicológico. Para facilitar una mayor (M = 3.1; DE = 2.6 versus M = 3.6; DE = 3.3).
comprensión y poder tener un marco de refe- Estos datos parecen dibujar un continuum de
rencia, también se incluye la propuesta que los síntomas SCT presentes en PG y en la PC
realizan estos autores en relación al TDAH. en distintos trastornos psiquiátricos, así como
Para completar el cuadro del SCT, nos hemos en niños con problemas de aprendizaje, que
basado en los siguientes estudios: a = Sonu- podrían ayudarnos a clarificar el funcionamiento
ga-Barke et al. (2016); b = Capdevila-Brophy, de estos niños.
Artigas-Pallarés y Obiols-Llandrich (2006); c = En resumen, teniendo en cuenta los modelos
Fassbender, Krafft, y Schweitzer (2015); d = existentes de transdiagnóstico, la dimensión
Penny et al. (2009); e = Willcutt et al. (2014); f = SCT parece encajar con las propuestas exis-
Wåhlstedt y Bohlin, (2010); g = Araujo Jiménez, tentes. La propuesta de la denominación de
Jané Ballabriga, Bonillo Martin, Arrufat y Serra Lentitud Cognitiva refleja las características del
Giacobo (2015); h = Becker y Barkley, en prensa. SCT y podría ser incluida en los dominios
Aunque es necesaria más investigación para RDoc atendiendo a las numerosas publicaciones
la comprensión del SCT como un constructo científicas que han determinado una adecuada
transdiagnóstico, algunos datos empíricos po- validez interna y externa del SCT (p. ej.: Becker
drían ejemplificar esta nueva conceptualización. et al., 2016). La dimensión SCT está presente
Parece ser que el SCT está presente tanto en en numerosos trastornos psiquiátricos (apar-

178 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

te del TDAH) (Camprodon-Rosanas et al., una dimensión transdiagnóstica. En nuestra


2016a) y en la población general (Barkley, 2013; opinión, esta visión facilitaría a los clínicos la
Camprodon-Rosanas et al., 2016b), contemplar evaluación del SCT de la misma forma que en
una visión SCT desde la perspectiva trans- los procesos diagnósticos del TDAH se valora
diagnóstica ayudaría a solventar los problemas la desregulación emocional o el perfeccionismo
de solapamiento y de comorbilidad existentes. en los TA. La inclusión en los protocolos de
Sin embargo, se requieren más estudios (sobre evaluación de la exploración de la dimensión
todo en el ámbito biológico y neuropsicológico) SCT, con especial interés en los pacientes con
que puedan transformar la dimensión SCT en TDAH subtipo inatento, simplificaría la com-

Tabla 1. Etapas de la toma de decisiones hipotéticas para el TDAH y el SCT

Evaluación Decisión y Gestión Valoración y Adaptación

TDAH – Ineficiente, inconsistente, impulsivoa

Cog. Autorrefe- Reducida integridad de la red de modo Interferencia del modo automático que se
rencial automático que perjudica a la prospección vincula a lapsus de atención espontánea

Déficits en la zona fronto-estriatal/


Ejecutivo frontoparietal que reducen la velocidad de
decisión y la eficiencia

Aprendizaje comprome-
Déficits en la zona ventral fronto-estriatal tido por una degradación
que perjudican las estimaciones de utilidad de la predicción de los
Refuerzo
y producen una aversión al retraso, provo- errores de cálculo debido
cando una preferencia a la immediatez a una disconectividad de
la COF

SCT – Lento, hipoactivo, perdido en sus pensamientos

Problemas de entrada y filtración de la


información sensorial.b Hipoactividad en el Niveles de motivación y arousal más bajos
Cog. Autorrefe-
LPS podría estar asociado con una altera- que dificultan la activación del proceso de
rencial
ción de la reorientación o desplazamiento toma de decisiones d
de la atención c

Déficits en MT y ASe,f que provocan proble-


mas con la MCg. Esto causa dificultades de
planificación, seguir instrucciones y evitar
Ejecutivo
tareas. Actividad alterada del AMS y tálamo
con aumento de falta de atención asocia-
do a problemas de preparación de tareasc

Aprendizaje comprome-
tido por una tendencia a
Refuerzo Tendencia al retraimiento social y timidezh procesamiento lento de
la información, baja inicia-
tiva y persistenciad

Para completar el cuadro del SCT, nos hemos basado en los siguientes estudios: a = Sonuga-Barke et al. (2016); b = Capdevila-Brophy,
Artigas-Pallarés, y Obiols-Llandrich (2006); c = Fassbender, Krafft, y Schweitzer (2015); d = Penny et al. (2009); e = Willcutt et al. (2014); f =
Wåhlstedt y Bohlin, (2010); g = Araujo Jiménez, Jané Ballabriga, Bonillo Martin, Arrufat, y Serra Giacobo (2015); h = Becker y Barkley, en prensa;
Nota: AMS = área motora suplementaria; AS = atención sostenida; Cog = cognición; COF = corteza orbito frontal; LPS = lóbulo parietal supe-
rior; MC = metacognición; MT = memoria de trabajo; TDAH = trastorno por déficit atención hiperactividad; SCT = sluggish cognitive tempo.

Vol. 8, número 2, 2016 179


Camprodon-Rosanas y Batlle: SCT. Desde una perspectiva transdiagnóstica

prensión global del funcionamiento del niño y un constructo. Revista de Psicopatologia y Psicología Clínica,
adolescente, favoreciendo la aparición de trata- 18(2), 151-168.
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180 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

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Recibido el 4 de julio de 2016
Skirbekk, B., Hansen, B. H., Oerbeck, B., & Kristensen, H. Revisión final 7 de julio de 2016
(2011). The relationship between Sluggish Cognitive Tempo, Aceptado el 18 de julio de 2016

Vol. 8, número 2, 2016 181


Tiempo Lento en el TDAH, enfoque neuropsicológico
Julio C. Flores-Lázaro
Secretaría de Salud, México

Resumen mental health disorders. The target-paper cites an important


Se realizan observaciones y comentarios del artículo objetivo number of studies with behavioral scales and with parents’
desde el enfoque neuropsicológico, destacando la necesidad and teachers’ reports; however, it is proposed the need to
de estudiar y determinar los correlatos neurocognitivos de include formal (neuropsychological) tests in order to achieve a
los trastornos de salud mental. El artículo-objetivo cita un better comprehension of this ADHD-variant. The main fin-
importante número y diversidad de estudios con escalas dings in functional neuroimaging are also cited, allowing a
conductuales y reportes de terceros (familiares o maestros); significant advance in the comprehension of the brain net-
sin embargo, se propone la necesidad de incluir pruebas works altered in this disorder. It is concluded that is very im-
formales (neuropsicológicas) para lograr una mejor com- portant to rely on the best scientific methods available (tech-
prensión de esta variante del TDAH. También se citan los nology), and not only on behavioral scales.
principales hallazgos con neuroimagen funcional, que han Keywords: Behavioral scale, cognition, functional neuroima-
permitido un avance en la comprensión de los mecanismos ging, neuropsychology
(redes) cerebrales en el trastorno. Se concluye la importancia
de utilizar la mejor metodología científica disponible, y no sólo 1. Introducción
escalas conductuales. El artículo-objetivo presentado por Bernad y
Palabras clave: cognición, escalas conductuales, neuroima- Servera (2016) es muy amplio, y describe de
gen funcional, neuropsicología forma extensa un número y variedad importante
de estudios que apoyan la validez del constructo
Sluggish tempo and ADHD: Neuropsychological clínico Tiempo Lento. La identificación clínica
approach de un subtipo cognitivo de procesamiento lento
Abstract (TCL) en el Trastorno por Déficit de Atención
Some remarks and commentaries are made about the con- ha tenido un abordaje progresivo en los últimos
tents of the target-paper from a neuropsychological perspec- años. Se han mostrado diversos estudios que
tive, highlighting the need to study the brain correlates of the aportan evidencia a favor de este subtipo, sin
embargo, la gran mayoría de la evidencia que
Dirigir toda correspondencia a la autora a: Servicios de Atención Psiquiátrica. HPI/DJNN. Secreta- presentan Bernard y Servera (2016) ha sido
ría de Salud. Posgrado-UNAM. Av. San Buenaventura, 86. Tlalpan. Ciudad de México. C.P. 14080.
Tel. 5544498019. empírica-conductual, y los criterios: Lento para
Correo electrónico: juliofnp@gmail.com responder, Letárgico, Somnoliento, Apático, Se
RMIP 2016, Vol. 8, No. 2, pp. 182-185. confunde fácilmente, Sueña despierto, Se pierde
ISSN-impresa: 2007-0926; ISSN-digital: 2007-3240
www.revistamexicanadeinestigacionenpsicologia.com
en sus pensamientos, Mentalmente ausente, Se
Derechos reservados ®RMIP le olvidan fácilmente las cosas; no han cambiado

182 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

en más de diez años de investigaciones, las cuales Tanto en la neuropsicología como en la neu-
se han caracterizado por utilizar como principal rociencia cognitiva contemporánea se han rea-
instrumento de estudio escalas conductuales lizado y publicado varias decenas de estudios
(Capdevila-Brophy, Artigas-Pallares, & Obiols- que incluyen la caracterización estructural y
Llandrich, 2006; Leopold, Christopher, Burns, funcional del cerebro de los niños y adolescen-
Becker, Olson, & Willcutt, 2016). tes con TDAH (Silk et al., 2016); así como las
Sin embargo, el TDAH es un trastorno del características cognitivas de los mismos (Fair et
neurodesarrollo, para el cual se ha encontrado al., 2012). Llama la atención que para el TCL
amplia evidencia con estudios de neuroimagen la gran mayoría de los estudios que reportan
tanto estructural como funcional (Castellanos Bernard y Servera sean con escalas conductua-
& Proal, 2012), y de neuropsicología (Fair et les. Esto puede deberse a que en la búsqueda en
al., 2012). bases de datos sólo se encontró un estudio de
El enfoque fenomenológico que ha prevale- neuroimagen: Fassbender, Kraft y Schewitzer
cido en la psiquiatría ortodoxa (agrupar carac- (2015) utilizaron un paradigma de atención y
terísticas clínico-conductuales) para “validar” un preparación motora, para comparar un grupo de
síndrome o trastorno sin evidencias científicas adolescentes con TCL versus adolescentes con
complementarias ha mostrado ser muy limitado TDAH, y un grupo control. Encontraron dife-
(Craddock & Owen, 2010), y se reemplaza por rencias significativas para los casos con TDAH
sistemas con mayor soporte científico (Insel & y mayor presencia de síntomas de TCL: hipoac-
Gogtay, 2014). En la actualidad se reconoce que tividad en la región superior del lóbulo parietal
una misma conducta o patrón conductual puede superior. Los autores consideran que la hipoac-
tener de base diversos mecanismos cerebrales y tividad en esta región podría estar relacionada
cognitivos, por lo que a simple vista (del clínico) con la dificultad/incapacidad para reorientar de
conductas similares pueden deberse a causas forma eficiente la atención (focos atencionales:
muy distintas —diversos endofenotipos— (Cas- internos o externos). Es el único planteamiento
tellanos, Sonuga-Barke, Scheres, Di Martino, sobre procesos afectados que cuenta con soporte
Hyde, & Walters, 2005). científico en la mejor evidencia actual de neu-
Por ejemplo, es fácil cometer el error de inter- roimagen.
pretar que los puntajes clínicos que se obtienen El nuevo planteamiento de los Institutos
en las escalas de funciones ejecutivas utilizadas Nacionales de Salud Mental (NIMH) de los
en población infantil se deben a una disfunción Estados Unidos de América se enfoca en superar
ejecutiva primaria (por una disfunción de la cor- la descripción conductual de una patología, y en-
teza prefrontal), cuando la evidencia científica focarse en describirla científicamente, a través de
empírica ha mostrado que las dificultades en el evidencia multidisciplinaria: genómica, neuroi-
funcionamiento ejecutivo se pueden originar magen, y de estudios cognitivos (Insel & Gogtay,
también por disfunciones en otras regiones- 2014). Este nuevo enfoque está diseñado para
circuitos cerebrales ( Jacobs, Haarvey, & Ander- una nueva conceptualización y clasificación de
son, 2011). Una misma conducta clínica (Difi- los trastornos mentales, incluido el TDAH.
cultades para organizarse) puede tener causas
cerebrales distintas; por lo que asumir que, por 2. Diversas redes
modelado estadístico, los casos pertenecen a un comprometidas en el TDAH
mismo subgrupo etiológico, puede llevar al mis- Los estudios más actuales y avanzados en neu-
mo error de la psiquiatría ortodoxa (Craddock roimagen (por ejemplo, los de conectividad),
& Owen, 2010). han mostrado que en el TDAH se presentan

Vol. 8, número 2, 2016 183


Flores-Lázaro: Tiempo Lento en el TDAH

afectaciones en diversas redes cerebrales. Una de Llama la atención que en la década en que
las redes a las que más atención se ha prestado los estudios de neuroimagen funcional, elec-
es la red de activación por defecto (Default Mode troencefalografía cognitiva y neuropsicología
Network); a través de evidencias de neuroimagen han alcanzado un alto grado de precisión y
se ha planteado que la inadecuada desactivación sofisticación, no se utilicen como herramientas
de esta red interfiere con la puesta en marcha y principales para la comprensión del TCL; como
funcionamiento de otras redes cerebrales (Cas- sí se ha hecho para el TDAH en general.
tellanos & Proal, 2012). Con base en lo anterior,
los planteamientos realizados desde la psicolo- 3. Retos para la validación
gía, por ejemplo, el planteamiento del “Déficit en científica del TCL
control inhibitorio” en el TDAH de Barkley no Con base en las muy diversas referencias que
pudo sostenerse más como mecanismo central se exponen en el artículo-objetivo, y el enfoque
en el TDAH. neuropsicológico que se propone en este comen-
El TDAH es una condición clínica heterogé- tario, aún quedan algunos retos:
nea, en el que diversos y discretos mecanismos Datos epidemiológicos: ¿cuál es la prevalencia
cerebrales (tanto genómicos como neurofuncio- poblacional de esta condición?, los datos apor-
nales) convergen (Zhou et al., 2008). De forma tados no son claros, y tampoco su replicación.
reciente, Fair Bathula, Nikolas y Nigg (2012) Marcadores genómicos: la revisión presenta-
encontraron la significativa heterogeneidad en da por los autores es muy limitada, no sólo por la
funciones ejecutivas en el TDAH. Por lo que el escasez de estudios. La forma en que se presenta
planteamiento que se cita en el artículo-objetivo, sugiere que el correlato biológico es simple;
de un “probable déficit sensorial” es demasiado cuando en la actualidad el consenso para TDAH
simple para la diversidad y profundidad de la es la presencia de múltiples factores biológicos,
evidencia empírica actual. Esta misma historia que contribuyen de forma discreta (bajo peso
sucedió con el autismo, se plantearon desde la factorial) a la presencia del trastorno.
psicología muy diversos procesos y mecanismos Marcadores de neuroimagen funcional: son
cerebrales afectados (incluido el déficit senso- insuficientes, ¿en el TCL hay mayor dificul-
rial); las evidencias de neuroimagen mostraron tad en la eficiencia de conectividad que en el
que todas estaban equivocadas: en los trastornos TDAH? ¿Cuál es el papel de la Default Mode
del neurodesarrollo diversas regiones cerebrales Network en el TCL?
y diversos circuitos se encuentran comprome- Marcadores neuropsicológicos: ¿en qué prue-
tidos, su variabilidad explica la heterogeneidad bas neuropsicológicas presentan mayores di-
propia de estos trastornos (Moseley et al., 2015). ficultades cognitivas? ¿Por qué en más de una
Es muy importante, en ciencia, ponderar década no hay una cantidad mínima de estudios
(contrastar) adecuadamente los planteamien- comparativos? es notable la ausencia de estudios
tos conceptuales (derivados de la observación con paradigmas de atención continua (CPT).
y reflexión de la experiencia clínica) con las
mejores evidencias científicas-empíricas; con 4. Conclusiones
mucha frecuencia son contradictorios, pero en En el artículo-objetivo de Bernard y Servera
nuestro medio se tiende a sobredimensionar (2016) se evidencia de forma amplia y extensa
las propuestas conceptuales, a pesar de que las la presencia del TCL en el TDAH. Sin embar-
evidencias científico-empíricas son conseguidas go, estas evidencias son principalmente de tipo
con los mejores diseños metodológicos y las clínico-fenomenológico: provienen de informa-
tecnologías más avanzadas. ción obtenida de padres, maestros y del mismo

184 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

niño. Se obtienen utilizando escalas conductua- Craddock, N., & Owen, M. J. (2010). The Kraepelinian di-
les y se procesan por medio de psicometría con- chotomy: going, going...but still not gone. British Journal
temporánea. Este tipo de evidencia se considera of Psychology, 196(2), 92-95.
limitada en neurociencia y neuropsicología, para Fair, D. A., Bathula, D., Nikolas, M. A., & Nigg, J. T. (2012).
estudiar y comprender a profundidad trastornos Distinct neuropsychological subgroups in typically develo-
del neurodesarrollo. ping youth inform heterogeneity in children with ADHD.
A pesar de la diversidad de estudios conduc- Proceedings of the National Academy of Sciences, 109(17),
tuales que apoyan la presencia del TCL, el reto 6769-6774. doi: 10.1073/pnas.1115365109
mayor para una ciencia contemporánea es que, Fassbender, C., Krafft, C. E., Schweitzer, J. B. (2015). Differentia-
para caracterizar un trastorno del neurodesa- ting SCT and inattentive symptoms in ADHD using fMRI
rrollo, es necesario obtener los marcadores de measures of cognitive control. Neuroimage Clinical, 21, 8-39.
neuroimagen que, a su vez, correlacionen con Insel, T. R., & Gogtay, N. (2014). National Institute of Mental
marcadores cognitivos (neuropsicológicos) ob- Health clinical trials: new opportunities, new expectations.
tenidos a través de pruebas formales. JAMA Psychiatry, 71(7), 745-746. doi: 10.1001/jamap-
No incluir los estudios de neuroimagen en sychiatry.2014.426
el TCL equivaldría a estudiar el espacio sin los Jacobs, R., Harvey, A. S., & Anderson, V. (2011). Are executive
telescopios más avanzados con los que conta- skills primarily mediated by the prefrontal cortex in chil-
mos; esto continuaría el error de sobredimen- dhood?: examination of focal brain lesions in childhood.
sionar las observaciones clínico-conductuales Cortex, 47(7), 808-824.
para proponer probables “procesos psicológicos Leopold, D. E., Christopher, M. E. G., Burns, L., Becker, S.
y/o cerebrales” como las principales causas, P., Olson, R. K., & Willcutt, E. G. (2016). Attention-de-
por sobre las mejores evidencias científicas ficit/hyperactivity disorder and Sluggish Cognitive Tempo
disponibles de la neuroimagen funcional y la throughout childhood: temporal invariance and stability
neuropsicología. from preschool through ninth grade. Journal of Child Psycho-
logy and Psychiatry. doi:10.1111/jcpp.12505
Referencias Moseley, R. L., Ypma, R. J. F., Holt, R. J. , Floris, D., Chura, L.
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Recibido el 28 de julio de 2016
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Vol. 8, número 2, 2016 185


Sluggish Cognitive Tempo: Realidad actual
Inmaculada Moreno-García
Universidad de Sevilla, España

Resumen revised allow us to understand this dimension in the context


Se describen los ámbitos científicos y hallazgos acumulados of research on individuals with inattentive symptoms who
en los últimos años sobre la dimensión Sluggish Cognitive Tem- differ, however, from those who meet the diagnostic criteria
po (SCT). Se analiza la realidad actual atendiendo a aspectos defined for inattentive problems. It concludes by underlining
conceptuales; instrumentales; implicaciones clínicas, acadé- the current limitations in the knowledge of this dimension as
micas, sociales; y la relación que mantiene el SCT con factores well as possible areas for future development.
biológicos y conductuales. Los hallazgos revisados permiten Keywords: Limitations, reality, Sluggish Cognitive Tempo, SCT
comprender y situar esta dimensión en el contexto de la
investigación sobre los individuos que, con sintomatología 1. Sobre Sluggish Cognitive Tempo
inatenta, se diferencian de aquellos que cumplen con los cri- No cabe duda que la investigación sobre el
terios diagnósticos para la presentación inatenta. Se concluye Sluggish Cognitive Tempo ha adquirido un auge
subrayando las limitaciones actuales en el conocimiento de destacado en los últimos años, basta tomar de re-
esta dimensión y los ámbitos de desarrollo en el futuro. ferencia los datos que Bernad, Servera y Belmar
Palabras clave: limitaciones, realidad, Sluggish Cognitive Tem- (2015) aportaban, al indicar que los dos años
po, SCT anteriores se habían publicado 40 trabajos sobre
el tema. Aunque pudiera resultar un interés re-
Sluggish Cognitive Tempo. Current reality ciente, la identificación de un factor diferencia-
Abstract do de inatención e hiperactividad-impulsividad
Describes and analyzes the accumulated scientific knowled- comenzó a manifestarse a partir de los trabajos
ge and discoveries about the dimension Sluggish Cognitive publicados en la década de 1960 y 1970.
Tempo in recent years. It is analyzed taking into account the En el trabajo de Bernad y Servera (2016)
current reality on conceptual aspects, instrumental, clinical, se realiza un análisis exhaustivo y actualizado
academic, and social. It also takes into account the relations- de los ámbitos en los que se concentra la in-
hip of SCT and biological and behavioral factors. The findings vestigación sobre esta dimensión. Queda claro
que el marco de referencia para delimitar este
Dirigir toda correspondencia a la autora a: Departamento de Personalidad, Evaluación y Tra- constructo es el TDAH y específicamente el
tamiento Psicológicos. Universidad de Sevilla. España. C/ Camilo José Cela, s/n. 41018. Sevilla.
España. Teléfono: 34 954 556 929. Fax: 34 954 557 807 perfil sintomatológico de los individuos que
Correo electrónico: imgarcia@us.es cumplen con el criterio diagnóstico A1 (DSM-
RMIP 2016, Vol. 8, No. 2, pp. 186-191. 5; American Psychiatric Association, 2013). La
ISSN-impresa: 2007-0926; ISSN-digital: 2007-3240
www.revistamexicanadeinestigacionenpsicologia.com
controversia y críticas derivan de la conjunción
Derechos reservados ®RMIP en un único trastorno TDAH de sintomatología

186 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

hiperactiva-impulsiva e inatenta, soslayando las de la infancia y adolescencia, y teniendo en cuen-


diferencias que presentan los individuos que ta las razones e interés despertado en los últimos
comparten síntomas inatentos con hiperactivi- años, las investigaciones sobre SCT han seguido
dad-impulsividad respecto a aquellos que mues- distintas líneas e intereses. Entre ellas, y relacio-
tran sintomatología inatenta acompañados de nado con los esfuerzos por diferenciar/ definir
otros indicadores clínicos (Somnolencia, Apatía, esta dimensión, Bernad y Servera (2016) siste-
Enlentecimiento, Letargia, etcétera) ajenos a matizan los hallazgos recientes en relación a la
hiperactividad e impulsividad. Unos y otros se estructura factorial del Sluggish Cognitive Tempo
diferencian, además, en las implicaciones psico- (SCT), relacionando los trabajos que observan
patológicas derivadas. un concepto multidimensional y considerando
Los autores del trabajo (Bernad & Servera, que existen dos factores, uno cognitivo y otro
2016) en el que se basa este artículo realizan conductual. Se abunda también en los problemas
un amplio recorrido por la historia de esta derivados del término empleado para describir
dimensión en el ámbito científico, tomando de los síntomas mencionados, y queda pendiente la
referencia la evolución que ha seguido el Tras- elección de una terminología más idónea, que
torno por Déficit de Atención/Hiperactividad. excluya la consideración de trastorno.
Se considera la influencia que los trabajos de V. Bernad y Servera (2016) dedican especial
Douglas desempeñó en la formulación de este atención a la evaluación del SCT. Se revisan
trastorno, tal como quedó reflejado en el DSM- instrumentos y exponen ítems que permiten
III (American Psychiatric Association, 1980), identificar y medir los síntomas del SCT. La
así como los resultados de distintos trabajos, primera cuestión controvertida se refiere al ma-
realizados en la década de los ochenta, para de- nejo de distintos o idénticos ítems expresados
terminar la diferenciación entre las (dos) dimen- de forma diferente. Se constata cómo existen
siones que configuran el trastorno hiperactivo. diferencias cuantitativas dispares respecto al
Mediante análisis factorial quedó en evidencia número de ítems empleados en los distintos
un tercer factor, atencional, que no integra- trabajos para determinar los niveles de SCT.
ba síntomas de hiperactividad-impulsividad y Resulta de especial interés la revisión sobre los
que, sin embargo, incluía comportamientos de distintos instrumentos de medida desarrollados
letargia, somnolencia, apatía, etcétera. La dis- a partir del CBCL (Child Behavior Checklist;
conformidad con el tratamiento/consideración Achenbach & Rescorla, 2007) y del trabajo de
del SCT en la versión IV del DSM (American Penny, Waschbusch, Klein, Corkum y Eskes
Psychiatric Association, 1991) y la heterogenei- (2009), los primeros en crear una escala espe-
dad sintomatológica de los niños diagnosticados cífica, integrada por 14 ítems. Posteriormente,
con subtipo déficit de atención impulsó, entre autores reconocidos en el ámbito del TDAH,
otros factores, el desarrollo de una etapa prolífica como R. Barkley, desarrollaron escalas para adul-
que llega a nuestros días, en cuanto a interés e tos y para administrar a padres. La entrevista
investigación sobre esta dimensión atencional. diagnóstica K-SCT (McBurnett, 2010) y su
Se destaca como hito relevante, para subrayar la validación en trabajos posteriores constituyen
importancia que ha adquirido el tema, la sección el fundamento de la escala específica SCT,
especial, publicada en 2014, dedicada al SCT en incluida en el instrumento Children and Ado-
la revista Journal of Abnormal Child Psychology. lescent Disruptive Behavior Inventory (CADBI),
Al tratarse de un constructo vinculado al empleado en diferentes trabajos transculturales,
TDAH, como se sabe, uno de los trastornos más y de la cual es autor, entre otros, M. Servera,
investigados en el ámbito de la psicología clínica uno de los investigadores que firma el trabajo

Vol. 8, número 2, 2016 187


Moreno-García: SCT. Realidad actual

que fundamenta este artículo comentario. El dimensión aquí estudiada. La investigación con
interés en desarrollar instrumentos para medir gemelos (Moruzzi, Rijsdijk, & Battaglia, 2014)
esta dimensión se ha plasmado también en la ha revelado que la influencia genética del SCT
propuesta de una medida de autoinforme CCI es menor que la del TDAH, observándose que
(Child Concentration Inventory; Becker, Luebbe, Sluggish Cognitive Tempo se ve influenciado por
& Joyce, 2015). En todo caso, los trabajos reali- factores ambientales propios, no compartidos
zados revelan la validez interna del SCT respec- con el trastorno hiperactivo-atencional. No obs-
to a las dos dimensiones del TDAH (inatención tante, se reconoce el estatus aún provisional de
e hiperactividad-impulsividad), quedando de estos resultados, anticipándose el desarrollo de
manifiesto un modelo de tres factores con in- la investigación en este ámbito.
dependencia de los ítems correspondientes a las Por otro lado, los trabajos publicados hasta
dos dimensiones de TDAH y SCT. Se subraya, la fecha evidencian relación consistente, eleva-
asimismo, que la validez interna ha quedado en da entre esta dimensión y el TDAH inatento.
evidencia en distintos tipo de muestras, proce- En el trabajo de Bernad y Servera (2016) se
dentes de diferentes países y en rangos de edad analizan los hallazgos existentes sobre la rela-
extremos. ción entre el SCT y medidas psicopatológicas,
El interés científico por el Sluggish Cogni- funcionamiento social, funcionamiento neurop-
tive Tempo se ha extendido también hacia la sicológico, funciones ejecutivas, funcionamiento
identificación de características demográficas y académico y problemas del sueño.
epidemiológicas diferenciales de los individuos Respecto a las variables psicopatológicas, se
con síntomas de SCT respecto a aquellos que ha investigado la relación del SCT con ansiedad
muestran sintomatología de TDAH. Se ha es- y depresión, por un lado, y problemas de com-
tudiado la diferenciación de la dimensión SCT portamiento e hiperactividad, por otro. Los ha-
según sexo, edad, estatus socioeconómico, raza/ llazgos hasta la fecha indican que el SCT predice
etnia, concluyéndose que no existe evidencia elevadas puntuaciones en medidas de compor-
hasta la fecha de diferencias según sexo, si bien tamientos internalizadores y bajas puntuaciones
se aprecia cierta asociación con la variable edad, en las de comportamientos externalizadores. Así
la cual reflejan en los estudios realizados que a lo indican trabajos realizados por los autores
más edad, mayor es la visibilidad de los síntomas del artículo-objetivo que se comenta en este
de SCT. trabajo (Bernad, Servera, Grases, Collado, &
Otras líneas de investigación han prestado Burns, 2014; Servera, Bernad, Carrillo, Collado,
atención a la relación entre SCT y medidas & Burns, 2015). La consideración de factor de
biológicas, por un lado, y medidas conductuales, riesgo versus factor de protección respecto a
por otro. En el primer caso, se ha analizado la depresión, retraimiento, por una parte; y abuso
relación de la función tiroidea con esta dimen- de tóxicos impulsividad, etcétera, por otra, es una
sión, han sido evaluados niños hospitalizados más de las evidencias comentadas en este trabajo.
en psiquiatría sin diagnóstico de TDAH. Los Si se tiene en cuenta por un lado, los hallaz-
resultados, aunque aún en fase preliminar, per- gos que muestran cómo el TDAH se relaciona
miten, según Bernad y Servera (2016), indicar con déficits neuropsicológicos, encontrándose
la posible existencia de un biomarcador para los afectadas funciones ejecutivas superiores, y por
individuos con SCT. La exposición prenatal al otro lado, considerando la relación entre SCT
alcohol y la sensibilidad al castigo constituyen y la dimensión inatenta del TDAH, puede de-
otros de los factores investigados con el pro- cirse entonces que se han realizado diferentes
pósito de establecer su posible relación con la investigaciones con el propósito de determinar

188 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

si los síntomas del SCT mantienen relación traimiento social, identificados como problemas
con alteraciones del funcionamiento ejecutivo. característicos asociados a esta dimensión.
Hasta la fecha, los resultados no son concluyen- Otra de las áreas que despiertan interés, si-
tes, como indican distintos trabajos publicados guiendo la tradición investigadora que acompa-
desde 2006. En la investigación realizada por ña al TDAH, es la relación entre SCT y el ren-
Willcutt, Chhabildas, Kinnear, DeFries, Olson dimiento académico. En este ámbito también
y Leopold (2014) se encontró implicación del los hallazgos acumulados resultan preliminares
SCT en la atención sostenida; asimismo, en otros y contradictorios. No obstante, en el trabajo de
trabajos, en los que se emplearon autoinformes Bernad y Servera (2016) se exponen las inves-
para evaluar las funciones ejecutivas, se halló tigaciones realizadas y los hallazgos científicos
también afectación en regulación emocional. Sin logrados hasta la fecha. En todo caso, queda en
embargo, en el trabajo de Bauermeister, Barkley, evidencia la influencia del SCT en el rendimien-
Bauermeister, Martínez y McBurnett (2012) en to académico y su relación con dificultades de
el que participaron 140 niños con edades entre 6 aprendizaje, problemas de organización y fina-
y 11 años, no se encontró relación del SCT con lización de tareas académicas. Se han obtenido
funciones ejecutivas, aunque esta dimensión sí resultados que muestran la influencia de esta
se relacionaba negativamente con el rendimien- dimensión en el pobre desempeño registrado en
to en matemáticas. Así pues, se reconocen las matemáticas, lectura y expresión escrita, ámbitos
dificultades para establecer conclusiones en este en los que los niños con TDAH suelen fracasar.
ámbito debido a los resultados contradictorios El estudio de la relación entre problemas de
encontrados. Si bien y de manera provisional, sueño y el Sluggish Cognitive Tempo es coherente
pudiera afirmarse que las diferencias en fun- con las evidencias que relacionan las dificultades
ciones ejecutivas son más sólidas cuando en las del sueño con el TDAH, si bien su desarrollo es
investigaciones participan individuos de más hasta la fecha limitado. En todo caso, las escasas
edad. Por tal motivo, se subraya la idoneidad investigaciones que relacionan esta dimensión
de llevar a cabo estudios longitudinales con el con los problemas del sueño lo hacen a partir
propósito de abordar la complejidad del tema de los hallazgos que subrayan que los niños con
en el futuro. TDAH podrían tener un trastorno del sueño
Dada la relación consistente entre el TDAH, comórbido que incrementa la sintomatología hi-
con predominio de inatención, y el Sluggish peractiva/inatenta e incluso, acrecienta el riesgo
Cognitive Tempo se considera que las disfun- de sufrir problemas de salud mental.
ciones sociales características de los afectados Tras analizar y exponer los descubrimientos
por TDAH serán similares a las que presentan científicos acumulados respecto a cada uno de
aquellos individuos con SCT. Así lo confirman los dominios y áreas en los cuales la investiga-
los estudios realizados que muestran cómo esta ción sobre el SCT se ha centrado en las últimas
dimensión se relaciona con dificultades de inte- décadas, los autores del trabajo, en el que se fun-
racción social y, específicamente, con déficit de damenta este artículo, establecen conclusiones
autoestima, dificultades de regulación emocio- donde queda manifestado que una vez superados
nal, retraimiento, aislamiento y bajo liderazgo. los titubeos iniciales, en la actualidad existe
En las interacciones con iguales, los niños con consenso sobre las características de la dimen-
SCT suelen ser ignorados; cuentan con escasa sión aquí estudiada, Sluggish Cognitive Tempo.
popularidad, preferencia social negativa y rela- Ahora se dispone de instrumentos de evaluación
ciones sociales limitadas. Se hipotetiza que estas válidos y fiables, tanto de entrevistas como de
limitaciones se relacionan con la timidez y re- medidas de autoinforme y escalas de aplicación

Vol. 8, número 2, 2016 189


Moreno-García: SCT. Realidad actual

a padres y profesores. A través de análisis facto- de un tercer factor diferenciado del TDAH,
riales, estudio de muestras clínicas y normales, e pero altamente relacionado con la dimensión
investigaciones de carácter transversal y longitu- atencional. No obstante, en la mayoría de los
dinal queda sólidamente establecido que el SCT ámbitos y cuestiones tratadas los resultados son
mantiene una relación elevada con la dimensión preliminares, de ahí que nos encontremos ante
de inatención del TDAH y su influencia es clara un constructo respecto al cual existen escasas
en el caso de variables internalizadas, como la conclusiones, limitados ámbitos de consenso y
depresión. Además, los hallazgos incongruentes numerosas interrogantes.
que la investigación ha mostrado se deben, en Por otro lado, el estado actual de esta dimen-
parte, al empleo de medidas dispares del SCT, sión se caracteriza por la expansión del interés
factor que explicaría las divergencias halladas científico hacia áreas tradicionalmente investi-
respecto a la multidimensionalidad del Slug- gadas respecto al TDAH, de ahí la exploración
gish Cognitive Tempo. Asimismo, el factor de de intereses relacionados con la vinculación bio-
Enlentecimiento es el que más claramente se lógica y conductual de la sintomatología identi-
diferencia del TDAH y sus implicaciones tienen ficada, así como su repercusión en distintas áreas
un mayor refrendo. que afectan a los individuos identificados como
En todo caso, el final del trabajo, que ha dado apáticos, olvidadizos, somnolientos, desmotiva-
pie a este artículo, retorna al comienzo del mis- dos, confundidos, con inteligencia dentro de los
mo, pues los autores se cuestionan si el Sluggish parámetros de normalidad y alerta disminuida.
Cognitive Tempo es un trastorno independiente Esta circunstancia explica que en la actualidad
del TDAH e, incluso, si es una dimensión; al la controversia en torno al Sluggish Cognitive
tiempo que subrayan la idoneidad de la deno- Tempo sea limitada, se aprecia que los objetivos
minación propuesta por Barkley (2014) Concen- científicos pretenden ampliar y diferenciar el
tration Deficit Disorder, pues hace hincapié en foco de interés más que consolidar el terreno
los problemas atencionales y recurre al término iniciado. Los logros alcanzados en el ámbito
concentración, ajeno a la terminología empleada de los instrumentos de medida desarrollados
en los criterios diagnósticos del TDAH. No y los hallazgos en torno a la diferenciación de
obstante, sobre estas cuestiones, tal como sucede esta dimensión respecto al factor de inatención
con todos los ámbitos analizados, existen discre- característico del TDAH constituyen los hitos
pancias entre los investigadores. De este modo, a partir de los cuales la investigación se desarro-
Becker, Marshall y McBurnett (2014) apuestan llará en el futuro, posiblemente se hará eco de la
por entender el SCT como un constructo trans- necesidad de realizar estudios longitudinales, tal
diagnóstico, planteamiento suscrito por Bernad como señalan Bernad y Servera (2016).
y Servera (2016).
Referencias
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No cabe duda que el estudio del Sluggish Cogni- profiles. Burlington: University of Vermont, Research Center
tive Tempo requiere nuevos trabajos que conso- for Children, Youth and Families.
liden los hallazgos previos y permitan consen- American Psychiatric Association (1980). Diagnostic and sta-
suar aspectos clave, como la denominación del tistical manual of mental disorders (3a ed.). Washington,
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el tema ha abordado numerosos ámbitos, im- American Psychiatric Association (1991). DSM-IV options book:
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190 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


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self-report measure of Sluggish Cognitive Tempo. Psycho- and reliability. Psychological Assessment, 21(3), 380–389. doi:
logical Assessment, 27, 1037-105. doi: 10.1037/pas0000083
 10.1037/a0016600
Becker, S. P., Marshall, S. A., & McBurnett, K. (2014). Sluggish Servera, M., Bernad, M. M., Carrillo, J. M., Collado, S., & Burns,
Cognitive Tempo in abnormal child psychology: an histori- G. L. (2015). Longitudinal correlates of Sluggish Cognitive
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of Abnormal Child Psychology, 42(1), 1-6. doi: 10.1007/ Journal of Clinical Child & Adolescent Psychology. Advance
s10802-013-9825-x online publication. doi: 10.1080/15374416.2015.1004680
Bernad, M. M., & Servera, M. (2016). Sluggish Cognitive Willcutt, E. G., Chhabildas, N., Kinnear, M., DeFries, J. C.,
Tempo: realidades y controversias. Revista Mexicana de Olson, R. K., Leopold, D. R., & Pennington, B. F. (2014).
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sión Sluggish Cognitive Tempo: el estado de la cuestión. of Abnormal Child Psychology, 42(1), 21–35. doi: 10.1521/
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95-106.
Recibido el 2 de julio de 2016
Bernad, M. M., Servera, M., Grases, G., Collado, S. & Burns, G. Revisión final 7 de julio de 2016
L. (2014). A cross-sectional and longitudinal investigation Aceptado el 18 de julio de 2016

Vol. 8, número 2, 2016 191


Sluggish Cognitive Tempo:
Una Nueva Dimensión del TDAH
o una Entidad Nosológica Independiente
Carlos Francisco Rincón Lozada
Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia

Resumen posibilidad sobre una entidad nosológica independiente o un


El Sluggish Cognitive Tempo (SCT) se presenta como una po- subtipo de TDAH que necesita más sustento teórico que per-
sible entidad psicopatológica caracterizada por inatención, mita dar respuesta a los interrogantes planteados, los cuales
enlentecimiento, tendencia a soñar despierto, hipoactividad, no son pocos, cuando se evalúa este constructo.
olvidos frecuentes y letargia, que muestra alta comorbilidad Palabras clave: Sluggish Cognitive Tempo, Trastorno por Dé-
con el Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad ficit de Atención con Hiperactividad, comorbilidades, psico-
(TDAH) subtipo predominantemente inatento, y aunque patología.
comparten varios de los criterios diagnósticos, se muestran
estudios que revelan la posibilidad de ser una entidad inde- Sluggish Cognitive Tempo: A new dimension of ADHD
pendiente. Esto no está plenamente comprobado debido or a separate nosological entity
a que algunos resultados son contradictorios en las inves- Abstract
tigaciones realizadas, especialmente en cuanto a etiologías, Sluggish Cognitive Tempo (SCT) is presented as a possible
prevalencias, diferencias por género, características familiares, psychopathological condition characterized by inattention,
edad de aparición, estudios por neuroimagen y de neuro- slowing, tendency to dream awake, hypoactivity, memory
transmisores, los cuales se asemejan de manera importante problems and lethargy. SCT shows high comorbidity with At-
a las características del TDAH. El SCT, además de mostrar gran tention Deficit Hyperactivity Disorder (ADHD) predominantly
variabilidad en los resultados expuestos, presenta a la fecha inattentive subtype, and although they share many of the
características similares a varios trastornos de los llamados diagnostic criteria I review studies that reveal the possibility
internalizantes, coincidiendo en la sintomatología y dificul- of being an independent entity. This is not fully tested since
tando su diagnóstico. Aquí se muestra una mirada crítica some results are contradictory, especially in terms of preva-
sobre el artículo-objetivo Sluggish Cognitive Tempo: realidades lence, etiologies, and differences by gender, family charac-
y controversias (Bernard & Servera, 2016) y se deja abierta la teristics, age of onset, as well as by neuroimaging studies of
neurotransmitters, which resemble important characteristics
Agradecimientos: Se agradece la colaboración de Ángela Lizeth Barón Camargo y Diego Felipe of ADHD. The SCT also show great variability in the results
Gallo García.
presented, to date presents similar symptoms to various inter-
Diríjase toda correspondencia a la autora a: Carlos Francisco Rincón Lozada. Universidad Pe- nalized disorders making more difficult the diagnose of SCT.
dagógica y Tecnológica de Colombia. Facultad de Ciencias de la Salud. Escuela de Psicología. Calle
24 # 5-63. Teléfono: 0987448585. Here is a critical look on the target article “Sluggish Cognitive
Correo electrónico: carlosfrancisco.rincon@uptc.edu.co Tempo: Realities and controversies” (Bernard & Servera, 2016)
RMIP 2016, Vol. 8, No. 2, pp. 192-198. leaving open the possibility of a separate nosological entity or
ISSN-impresa: 2007-0926; ISSN-digital: 2007-3240 an ADHD subtype, and pointing out the need for additional
www.revistamexicanadeinestigacionenpsicologia.com
Derechos reservados ®RMIP theoretical support that allows to respond to the questions

192 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

raised, which are not few, when one evaluates this construct. cursar con este trastorno (American Psychiatric
Keywords: Sluggish Cognitive Tempo, Attention Deficit Hype- Association, 2014).
ractivity Disorder, comorbid psychopathology. Además existen tres subtipos de TDAH,
que son: presentación combinada, presentación
La tendencia actual en el ámbito de la psicopa- predominantemente con falta de atención y
tología a través de la investigación, el reporte de presentación predominantemente hiperactiva/
casos y la elaboración de perfiles de anormalidad impulsiva; lo cual tambien ha motivado gran dis-
ha generado una oleada en el establecimiento de cusión entre investigadores y personal de salud a
enfermedades psicológicas; algunas subdividen la hora del establecimiento de este diagnóstico,
los trastornos clásicos (depresión, bipolaridad, debido a la variabilidad en la presentación de los
ansiedad, etcétera), otras las agrupan dentro de signos y síntomas que muestran los pacientes.
categorías más generales (trastorno del espectro En este artículo-comentario presenta una mi-
autista) o realizan la presentación de nuevos sín- rada crítica sobre el artículo-objetivo: “Sluggish
dromes (trastornos neurocognitivos). Lo anterior Cognitive Tempo: realidades y controversias”
mantiene un fuerte debate en cuanto a estas (Bernard & Servera, 2016). Actualmente y para
categorías, los criterios clínicos y específicos de ampliar el debate, se muestran resultados de una
la mayoría de trastornos mentales, y la dificul- posible derivación del TDAH, subtipo inatento,
tad a la hora de ajustarse a las normas de cada llamada Sluggish Cognitive Tempo (SCT, por sus
país de acuerdo con el sistema de clasificación siglas en inglés), que aunque parece coincidir con
adoptado. algunos de los criterios diagnósticos estableci-
Uno de los trastornos que más ha generado dos para este subtipo de TDAH, manifiesta en
este tipo de controversia es el Déficit de Atención varios estudios una conformación clínica dife-
con Hiperactividad (TDAH), debido a que los rente, caracterizada por un comportamiento de
estudios presentados, incluyendo metaanálisis, lentitud, indolencia y falta de energía (Bernad,
muestran resultados contradictorios en cuanto a Servera, & Belmar, 2015).
los subtipos, prevalencias, criterios diagnósticos, Esta nueva entidad además agrupa caracte-
formas de evaluación, perfil neuropsicológico, rísticas que reflejan un estado de alerta y orien-
maneras de presentación en diferentes etapas tación irregulares, ellas están relacionadas con
del ciclo vital y, para complejizar más el estado personas lentas, olvidadizas, soñolientas, apáti-
de dicho trastorno, las formas de tratamiento, de cas, con tendencia a soñar despiertas, perdidas
amplio debate, especialmente con lo referente a en sus pensamientos, desmotivadas, en las nubes,
la utilización de psicofármacos. confundidas y con bajo rendimiento en algunos
El TDAH actualmente se presenta según el tests neuropsicológicos (Capdevila, Artigas, &
manual diagnóstico y estadístico de los trastor- Obiols, 2006).
nos mentales en su última revisión (DSM V), a El SCT comenzó a investigarse a mediados
través de cinco criterios de significancia clínica de los años 80 y, en la última década, Barkley
que incluyen: primero un patrón persistente ha publicado el 40% de las investigaciones que
de inatención y/o hiperactividad impulsividad; se encuentran sobre este tema. La mayoría de
segundo, estos síntomas deben estar presentes éstas se centraron en analizar si el SCT es un
antes de los 12 años; tercero, los síntomas están subtipo o no del Trastorno de Déficit de Aten-
presentes en dos o más contextos; cuarto, la ción (TDAH), especialmente el de tipo inatento
sintomatología interfiere con el funcionamien- (TDAH-I). Sin embargo, algunos autores han
to social, académico o laboral; y, por último, comenzado con la investigación del SCT como
se presentan las comorbilidades que no deben una nueva entidad psicopatológica, pero estas

Vol. 8, número 2, 2016 193


Rincón Lozada: SCT: Nueva Dimensión TDAH o Entidad Nosológica

investigaciones son menos de 100 (Becker et de atención, debido a que tienen en común
al., 2016). el procesamiento de información enlentecido.
Los síntomas que caracterizan al SCT (mu- Por esto muchos niños han sido diagnosticados
chos se solapan con TDAH-I y problemas con TDAH-I, al presentar las características
internalizantes) son: procesamiento cognitivo del SCT, ya que este término no forma parte
lento, somnolencia, soñar despierto, parece que de ningún manual diagnóstico estandarizado
tuviera la mente en otro lugar (como ausente), (Capdevila et al., 2006).
apatía, lentitud motora y baja agilidad motriz Por otra parte, con respecto a la relación entre
(Becker, Marshall, & McBurnett, 2014). Asi- el SCT y el TDAH predominante con falta de
mismo se han identificado problemas de sueño, atención, en un estudio realizado con adultos se
en memoria de trabajo, en el seguimiento de encontró que los sujetos con TDAH muestran
instrucciones, en atención sostenida, en olvido, un peor funcionamiento cognitivo respecto a
en orientación; estados de alerta bajos y difi- sujetos con SCT, los cuales presentan mayores
cultades para socializar (McBurnett, Pfiffner, dificultades en atención sostenida y selectiva,
& Frick, 2001; Becker et al., 2014; Becker et variabilidad en memoria espacial, dificultades
al., 2016). en arousal, en memoria de trabajo, en decodifi-
Previo a que comenzara a aumentar la in- cación de información de las señales sociales, así
vestigación de STC, se le atribuían los sínto- como dificultades en organización y resolución
mas de somnolencia, lentitud, pereza, apatía y de problemas (Barckley, 2010, citado por Cam-
soñar despierto a los niños diagnosticados con prodon et al., 2013).
Trastorno por Déficit de Atención (TDA) sin Según Tirapu, Ruiz, Luna y Hernáez (2015),
hiperactividad (DSM-III). Algunos autores to- algunos niños con TDAH también son lentos
man esto como una validación de la existencia de al ejecutar tareas, pero hay una diferencia fun-
STC como una nueva entidad patológica o un damental, y es que en el TDAH esta lentitud
subtipo del TDAH. Incluso algunos síntomas, ocurre por su limitada capacidad de inhibición
por ejemplo los relacionados con la lentitud de distractores, mientras que en el SCT esto se
y soñar despierto son normalmente tomados debe a la lentitud de la ejecución propiamente
como síntomas de depresión, trastorno del sueño dicha.
o cualquier otro trastorno internalizante, lo cual Además, otros estudios han evidenciado que
genera dificultades para establecer un posible muchos de los síntomas de los pacientes con
diagnóstico de SCT dadas las similitudes con TDAH se manifiestan antes de la etapa preesco-
otros síndromes (Becker et al., 2014). lar, mientras que los niños con SCT típicamente
Los síntomas del TDAH-I, como problemas se presentan a consulta en edades un poco ma-
con la memoria y orientación, al igual que pro- yores (Urrutia, 2010).
cesamiento de información y estados de alerta Araujo-Jiménez (2012, citado por Tirapu et
bajos, se solapan con los síntomas de SCT, por al., 2015) encontró que el SCT no sólo se rela-
eso el DSM-IV rechazó la posibilidad de in- ciona con el TDAH de presentación predomi-
troducir el SCT como un subtipo de TDAH, nante con falta de atención, sino también a otros
planteándose que puede ser de utilidad para problemas internalizantes como: fobia social
predecir el TDAH-I, mas no como un subtipo y depresión. Estudios demuestran que sujetos
en sí (McBurnett, Pfiffner, & Frick, 2001) con un SCT alto muestran mayores niveles de
El SCT siempre ha estado asociado al Tras- TDAH, depresión y ansiedad, además de una
torno por Déficit de Atención con Hiperacti- pobre regulación emocional y dificultades de
vidad de presentación predominante con falta adaptación social en comparación con los suje-

194 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

tos que no manifiestan SCT elevado (Flannery, inatento manifestaban un estilo de atención
Becker, & Luebbe, 2014, citados por Tirapu et caracterizado por: lentitud, hipoactividad, con-
al., 2015). De esta manera, vale la pena destacar fusión, ensoñación y mirada al vacío.
que los sujetos con SCT presentan un modelo Las investigaciones también se han enfocado
internalizante, mientras que los sujetos con en analizar las funciones ejecutivas (FE) cuan-
TDAH presentan un modelo externalizante do se presentan síntomas de SCT y TDAH-I.
(Becker & Langberg, 2012, citados por Tirapu Los hallazgos plantean que se alteran más las
et al., 2015). funciones metacognitivas cuando hay síntomas
Por otro lado, Becker & Langberg (2014) rea- de SCT y TDAH-I, a diferencia de cuando
lizaron un estudio acerca de la calidad de sueño sólo se identifican síntomas de TDAH-I. Estas
tanto en sujetos con SCT como en sujetos con alteraciones están relacionadas en las funciones
TDAH, donde se encontró que el TDAH de metacognitivas con la apatía, la falta de ini-
tipo hiperactivo predice más las alteraciones del ciativa, la automotivación y la dirección de la
sueño que el funcionamiento en vigilia, mientras energía hacia una meta (Becker & Langberg,
que el SCT y el TDAH de presentación predo- 2014). Asimismo, se encuentran dificultades en
minante con falta de atención predicen mejor la la velocidad de procesamiento y autocontrol.
disfunción en el funcionamiento durante el día. Sin embargo, se presentan dificultades a la
En otra investigación, los mismos autores rea- hora de obtener hallazgos homogéneos con
lizaron un estudio con niños de 9 a 12 años, en otros estudios (Bauermeister, Barkley, Bauer-
el que observaron que la sensibilidad al refuerzo meister, Martinez, & McBurnett, 2012). Pero
está asociada al TDAH y síntomas externali- se ha identificado que al aislar los síntomas de
zados, mientras que la sensibilidad al castigo TDAH y de los problemas internalizantes, las
se vincula con SCT y síntomas internalizados. funciones ejecutivas aún son afectadas, incluso se
Carlson y Mann (2002, citados por Campro- encuentra más variabilidad cuando se analiza el
don et al., 2013) realizaron un estudio con una SCT que cuando se analiza el TDAH-I (Wood,
amplia muestra de escolares, donde encontra- Lewandowski, Lovett, & Antshel, 2014).
ron que los niños con TDAH de presentación En uno de los estudios para evaluar el cons-
predominante con falta de atención mostraban tructo SCT se utilizaron 5 ítems en una muestra
elevadas puntuaciones en SCT. Además, el SCT de 296 niños, entre los 8 y 18 años, con TDAH
era de gran utilidad diagnóstica para identificar y dificultades de aprendizaje, donde se encontró
niños con TDAH de presentación predominan- que los ítems de SCT junto con los ítems de
te con falta de atención. inatención del DSM-IV están en el mismo factor,
En este mismo sentido, Bauermeister, Matos, mientras que los síntomas de hiperactividad/
Reina, Salas, Martínez, Cumba, y Barkley, (2005, impulsividad del DSM-IV están incluidos en
citados por Camprodon et al., 2013) elaboraron otro factor distinto. Así, los factores SCT e ina-
un estudio con niños, donde encontraron que los tención estuvieron fuertemente correlacionados
sujetos con TDAH de presentación predomi- (Hartman, Willcutt, Rhee, & Pennington, 2004,
nante con falta de atención, tenían puntuaciones citados por Camprodon et al., 2013). De esta
más elevadas en SCT que los niños con TDAH manera, Jacobson, Murphy-Browman, Pritchard,
de presentación combinada; además los niños Tart-Zelvin, Zabel y Mahone (2012, citados
con TDAH de tipo inatento, en comparación por Camprodon et al., 2013) concluyeron que
con los niños con TDAH combinado, mos- la consistencia interna del constructo SCT está
traban una falta de atención cualitativamente asociada al TDAH de presentación predominan-
diferente, ya que los niños con TDAH de tipo te con falta de atención descrito en el DSM-IV.

Vol. 8, número 2, 2016 195


Rincón Lozada: SCT: Nueva Dimensión TDAH o Entidad Nosológica

Así, se podría decir que mientras el TDAH de relacionados con un subtipo del TDAH, y se
presentación predominante con falta de atención han volcado las indagaciones hacia un aporte de
predice casi por igual problemas internalizantes, evidencia del SCT como una entidad psicopa-
de rendimiento y externalizantes; el SCT predi- tológica independiente, la cual se presenta co-
ce en mayor grado problemas internalizantes y mórbidamente con el TDAH-I (especialmente)
de rendimiento, puede ser una medida protec- y con problemas internalizantes (ansiedad y
tora frente a problemas externalizados típicos depresión) (Becker et al., 2016).
del TDAH, como la sobreactividad motora o Incluso Barkley (2014) planteó que se de-
los problemas de conducta (Bernad, Servera, bería analizar el Trastorno Negativista Desa-
Grases, Collado, & Burns, 2014; Burns, Servera, fiante con el SCT, pero esto no sería un aporte
Bernad, Carrillo, & Cardo, 2013; Servera, Ber- relevante, puesto que los síntomas del SCT
nad, Carrilo, Collado, & Burns, 2015, citados son más característicos de los problemas in-
por Bernad et al., 2015). ternalizantes que de los externalizantes. Una
Por otro lado, se cree que las causas del SCT de las muchas dificultades que se presentan
están relacionadas con una condición de natu- en los pocos estudios que hay es que no se ha
raleza genética, donde se encuentra involucrada logrado conocer a plenitud la etiología, y lo
la región cortical prefrontal del cerebro asociada que se conoce está relacionado también con
a dificultades en memoria de trabajo. Además, la aparición del TDAH, como el consumo de
los síntomas del SCT podrían ser debidos a alcohol y drogas en etapa prenatal, los síntomas
variaciones en la disponibilidad de dopamina tienden a aparecer en la edad escolar, la mis-
y norepinefrina, o a los procesos de recepción, ma en que se comienzan a manifestar los del
recaptación o transporte de estas sustancias TDAH (Graham et al., 2012, citado en Barkley,
(Urrutia, 2010). En este mismo sentido, Becker, 2014; Becker et al., 2016).
Luebbe, Greening, Fite y Stoppelbein (2012, Aunque se plantean hallazgos a favor del
citados por Bernad, Severa, & Belmar, 2015) SCT como una entidad aislada, y se han con-
muestran en un estudio la relación entre niveles trolado los síntomas de TDAH-I (Becker et
hipoactivos de tirotropina (hormona estimulan- al., 2016), estas mediciones muchas veces se
te de la glándula tiroidea) y SCT en una muestra dificultan debido a que se utilizan instrumentos
de 70 niños de 6 a 12 años. que se basan en reportes de padres y maestros
Algunos autores plantean que la indepen- o, en algunos casos, los instrumentos evalúan
dencia del SCT se manifiesta en la efectividad algunas características propias del SCT, pero no
del tratamiento, puesto que argumentan que los se acompañan de otras medidas (además, no hay
medicamentos que se aplican al TDAH no fun- muchos instrumentos específicos para el SCT).
cionan tan bien para el SCT. Pero se encuentra Esto no implica que dichos síntomas no tengan
que se comparan los tratamientos que se utilizan validez, pero sí que se debe tomar con cautela
usualmente para el TDAH de predominancia el estudio del SCT, pues aún no se ha logrado
hiperactiva más que para el TDAH-I, inclusive recabar información concluyente para deter-
los procedimientos aplicados en el TDAH-I minarlo como un subtipo de TDAH-I o para
tiene una efectividad similar en el SCT. A esto plantearlo como una entidad psicopatológica
se le suma que la atomoxetina tiene buenos re- independiente (Becker et al., 2014).
sultados tanto en el TDAH-I como en el SCT Se debe procurar más investigación basada
(Barkley, 2013; Franco López, 2014). en la neurociencia, especialmente en la arqui-
En las recientes investigaciones se ha dejado tectura neurológica mediante neuroimagen y
la posibilidad de que los síntomas de SCT estén no solamente con pruebas psicométricas, más

196 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

porque se pretende plantearlo como una nue- Becker, S., Leopold, D., Burns, L., Jarrett, M., Langberg, J.,
va entidad psicopatológica. Lo anterior puede Marshall, A., & Willcutt, E. (2016). The internal, external,
traer beneficios al diagnóstico diferencial y al and diagnostic validity of Sluggish Cognitive Tempo: a
tratamiento, pues es difícil identificar estos metaanalysis and critical review. Journal of the American
síntomas, debido a que son tomados como si el Academy of Child & Adolescent Psychiatry, 55(3), 163-178.
niño simplemente fuera perezoso. El estudio doi: http://dx.doi.org/10.1016/j.jaac.2015.12.006
del SCT puede ser de utilidad para ayudar a Becker, S., & Langberg, J. (2014). Attention-Deficit/Hyperac-
identificar niños con dificultades en el colegio, tivity Disorder and Sluggish Cognitive Tempo dimensions
pero en el estado actual de esta investigación no in relation to executive functioning in adolescents with
se puede ni se debe afirmar de forma definitiva ADHD. Child Psychiatry & Human Development, 45(1),
si es un subtipo del TDAH o si es una entidad 1-11. doi: 10.1007/s10578-013-0372-z
patológica aislada que se presenta de forma Becker, S. P., Marshall, S. A., & McBurnett, K. (2014). Slug-
comórbida. gish Cognitive Tempo in abnormal child psychology: an
Para finalizar, es claro que se presenta evi- historical overview and introduction to the special section.
dencia que genera controversia acerca de la Journal of Abnormal Child Psychology, 42, 1-6. doi: 10.1007/
relación que tiene el SCT con el TDAH y otras s10802-013-9825-x
patologías; en la mayoría de estudios revisados Bernad, M. M., & Servera, M. (2016). Sluggish Cognitive
anteriormente sobre este tema, los resultados Tempo: realidades y controversias. Revista Mexicana de
obtenidos suelen asociar altos niveles de SCT Investigación en Psicología, 8(2), 125-160.
con el TDAH de presentación predominante Bernad, M. D., Servera, M., & Belmar, M. (2015). La dimensión
con falta de atención. Por lo pronto, se puede Sluggish Cognitive Tempo: el estado de la cuestión. Revista
decir que el SCT es un término descriptivo no de Psicología Clínica con Niños y Adolescentes, II(2), 95-106.
formalizado que se usa para describir conduc- Camprodon, E., Duñó, L., Batlle, S., Estrada, X., Acena, M.,
tas que podrían formar parte de otro subgrupo Marrón, M., Pujals, E., Martin, L. M., Ribas-Fitó N., &
dentro del TDAH (Urrutia, 2010). Torrubia, R. (2013). El Tempo Cognitivo Lento: revisión de
un constructo. Revista de Psicopatología y Psicología Clínica,
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s10802-011-9602-7 rología, 61, 323-331.

Vol. 8, número 2, 2016 197


Rincón Lozada: SCT: Nueva Dimensión TDAH o Entidad Nosológica

Urrutia, F. (2010). Tempo Cognitivo Lento (Sluggish Cognitive associated with Sluggish Cognitive Tempo in emerging
Tempo) ¿Un subtipo de TDAH o una entidad diferente? Re- adulthood. Journal of Attention Disorders, 17, 1-10. doi:
vista Archivos de Investigación Materno Infantil, II(2), 71-73. 10.1177/1087054714560822
Wood, W., Lewandowski, L., Lovett, B., & Antshel, K.
Recibido el 18 de julio de 2016
(2014). Executive dysfunction and functional impairment Revisión final 27 de julio de 2016
Aceptado el 1 de agosto de 2016

198 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Trastorno por Déficit de Atención
y Tempo Cognitivo Lento
Dulce María Romero-Ayuso
Universidad de Castilla-La Mancha, España

Resumen Attention Deficit Disorder


El presente trabajo comenta el manuscrito sobre el Tempo and Sluggish Cognitive Tempo
Cognitivo Lento de Bernad y Servera (2016), en el que se Abstract
proponen dos posibles perspectivas: su diferenciación como This paper discusses the manuscript on the Sluggish Cogni-
una entidad nosológica propia o como una dimensión psico- tive Tempo of Bernad and Servera (2016) in which there are
lógica transdiagnóstica, de interés especial en el diagnóstico two possible perspectives: as a distinct disease entity or as a
diferencial del Trastorno por Déficit de Atención-subtipo ina- transdiagnostic psychological dimension. It could be interes-
tento. Los problemas de modulación sensorial, caracterizados ting especially in the differential diagnosis of attention deficit
por un patrón de hiporrespuesta, podrían estar relacionados hyperactive disorder, the inattentive subtype. Sensory modu-
con la presentación de una menor velocidad de procesamien- lation problems, characterized by a hypo responsive pattern
to y las características del Tempo Cognitivo Lento (SCT). Es could be related to the presentation of a lower processing
fundamental la realización de estudios de cohortes que speed and cognitive characteristics of Sluggish Conitive Tempo
permitan entender el SCT, así como nuevos estudios que (SCT). In addition to this, conducting cohort studies allow
controlen variables que pueden ser confusas, como los tipos to understand the SCT, as well as new studies that it could
de trastornos psicopatológicos, nivel socioeconómico, núme- control several variables that it can be confusing such as the
ro de ítems de inatención, entre otros. Finalmente, se señala types of psychopathological disorders, socioeconomic status,
la necesidad realizar estudios que permitan conocer con and number of items of inattention, among others. Finally, it
mayor profundidad la relación entre el SCT y el funcionamien- is needed more studies that reveal deeply the relationship
to cognitivo y la vida cotidiana. between SCT and cognitive functioning and daily life.
Palabras clave: Trastorno por Déficit de Atención con Hi- Keywords: Attention Deficit Disorder with Hyperactivity,
peractividad, Tempo Cognitivo Lento, atención, Funciones Sluggish Cognitive Tempo, attention, executive functions, daily
Ejecutivas, actividades de la vida diaria living chores

1. Introducción
Dirigir toda correspondencia a la autora a: Facultad de Terapia Ocupacional, Logopedia y En- En la introducción del artículo-objetivo (Ber-
fermería. Universidad de Castilla-La Mancha Avda. Real Fábrica de la Seda s/n. 45600-Talavera nad & Servera, 2016) se refleja una de las
de la Reina (Toledo). España-Spain.
Teléfono: +34 925 721 010. Ext.5624. principales cuestiones pendientes por resolver
Correo electrónico: Dulce.Romero@uclm.es con relación a los Trastornos por Déficit de
RMIP 2016, Vol. 8, No. 2, pp. 199-206. Atención con Hiperactividad (TDAH), espe-
ISSN-impresa: 2007-0926; ISSN-digital: 2007-3240
www.revistamexicanadeinestigacionenpsicologia.com
cialmente, si los tres subtipos clínicos descritos
Derechos reservados ®RMIP en el Manual Diagnóstico y Estadístico para

Vol. 8, número 2, 2016 199


Romero-Ayuso: TDA y Tempo Cognitivo Lento

las Enfermedades Mentales (DSM) obedecen ejecutivas en la infancia se ha relacionado con


realmente a un mismo trastorno con tres va- dificultades sociales, interpretación de la comu-
riantes o son trastornos diferentes a la luz de nicación no verbal, lenguaje metafórico, mala
la presentación clínica y su respuesta al trata- interpretación de bromas, debido a una inter-
miento, de modo que puedan tener un origen pretación literal del discurso verbal. El periodo
neurobiológico y neuropsicológico distinto. de la infancia donde ocurren mayores cambios
Gran parte de los estudios se han esforzado en el desarrollo del lóbulo frontal es entre los 6
en diferenciar el TDAH de otros desórdenes y los 8 años. Hasta que las regiones del lóbulo
y, aunque existe abundante literatura sobre este frontal están bien desarrolladas, un niño puede
trastorno, pocos trabajos se centran en compa- ser capaz de obedecer consistentemente las ins-
rar los dos subtipos clínicos más frecuentes del trucciones verbales. Habitualmente es hasta los
TDAH: el subtipo inatento (TDAH-I) y el tres años y medio a cuatro años cuando puede
subtipo combinado (TDAH-C). Ya Hynd et al. aprender a realizar un programa de acciones
(1989) insistieron en la necesidad de diferenciar complejo de forma voluntaria, de acuerdo con
neurocognitivamente el Trastorno por Déficit las instrucciones verbales (Passe et al., 1997).
de Atención con y sin hiperactividad. En este Por otro lado, existe otra perspectiva que in-
mismo sentido, Barkley (1997) indicó uno de dica que el problema primario en el TDAH (es-
los problemas que todavía no están resueltos en pecialmente inatento) subyace a una dificultad
el estudio del TDAH: “el subtipo con predo- o disfunción del lóbulo parietal derecho (Fisher,
minio inatento de TDAH puede ser disociado 1998). Así, desde este enfoque, se defiende que
con respecto a los subtipos con hiperactividad e el problema es debido a dificultades en las capa-
impulsividad en función de la evaluación de las cidades visoperceptivas y del mantenimiento de
funciones ejecutivas” (p. 309) y “no estar claro la atención. Es posible que estos puntos de vista
que el subtipo con predominio inatento sea un dispares obedezcan a la identificación de subti-
verdadero subtipo del TDAH” (p. 64). En este pos clínicos diferentes de lo que hoy se conoce
sentido, Barkley (2003) afirmó que el déficit de y diagnostica como Trastorno por Déficit de
atención que se puede ver en los niños con el Atención con Hiperactividad. Hay distintos mo-
predominio inatento no responde a la misma delos cognitivos explicativos de la atención que
causa u origen que el déficit de atención que podrían estar relacionados con Tempo Cognitivo
se pone de manifiesto en los otros subtipos, y Lento (SCT). A pesar de las diferentes propues-
sugirió que la misma presentación conductual tas, gran parte de ellos coinciden en señalar un
(en este caso, un comportamiento por falta de componente de alerta o arousal. El arousal ha
atención) puede deberse a causas diferentes. sido relacionado con el sistema reticular y se
Precisamente en este sentido, entender qué es entiende que un adecuado nivel del mismo es
el Sluggish Cognitive Tempo (SCT) puede dar necesario para un apropiado funcionamiento
respuesta parcialmente a esta cuestión. de los restantes componentes de la atención. El
Las investigaciones realizadas sobre los Tras- nivel de arousal se ha vinculado estrechamente
tornos por Déficit de Atención con Hiperacti- con la atención sostenida, que permite el man-
vidad subtipo combinado coinciden en señalar tenimiento de la vigilancia y el poder centrarse
que el déficit primario se debe a una disfunción para realizar un procesamiento de la información
ejecutiva, que puede empezar a ser evidente en- eficiente. De cualquier forma, se entiende que un
tre los cuatro y cinco años, aunque el diagnóstico nivel de arousal adecuado es necesario, pero no
habitualmente se realiza alrededor de los siete suficiente para tener un rendimiento óptimo en
años (Kalff, 2002). La alteración en las funciones las diferentes actividades cotidianas.

200 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

Otro elemento importante para la atención responder. De este modo, dichos resultados
es la respuesta de orientación, entendida como apoyan la distinción entre los perfiles de SCT
el cambio que se produce cuando se detecta y los síntomas de falta de atención en TDAH
un estímulo nuevo o un estímulo significativo. (Fassbender et al., 2015).
Esta reacción es frecuentemente involuntaria. Adicionalmente, en el artículo de Bernad y
La respuesta de orientación está relacionada Servera (2016) se señala la importancia de po-
con la atención selectiva, que puede incluir la der modificar el contexto y las tareas a las que
inhibición activa de la respuesta de orientación se enfrentan diariamente los niños con TDAH,
a estímulos irrelevantes. Así, se considera que la dadas las características de su procesamiento de
habilidad para inhibir la respuesta de orienta- la información, que como indican los autores
ción es un elemento importante en el desarrollo son difícilmente modificables. Esto nos hace
de la atención selectiva (Halperin et al., 1994). pensar en dos tipos de líneas de actuación: por
Gran parte de las propuestas realizadas para un lado, enseñar al niño estrategias útiles para
estudiar la atención, desde la perspectiva neu- poder tener una conducta lo más adaptativa
ropsicológica, de forma implícita o explícita, posible y lograr el máximo nivel de desempeño;
relacionan la memoria de trabajo con la atención y por otro, abordaje compensatorio que permita
(Baddeley, 2000). adaptar, modificar el contexto y las demandas de
Otro aspecto importante de la atención, re- la actividad a las características del niño/a.
lacionado con los Trastornos por Déficit de
Atención e Hiperactividad, es el proceso de 2. La definición de SCT
control atencional. Se considera que el cambio Los autores (Bernad & Servera, 2016) exponen
atencional opera de dos maneras básicamente: el concepto de SCT y la controversia sobre si
mediante una captura atencional, es decir, des- es una entidad en sí misma o una dimensión
encadenando un cambio de atención; y al guiar psicológica que, como tal, puede oscilar a lo
la atención a una localización específica en el largo de un continuo. Algunos autores pro-
campo visual. Asimismo, el control atencional ponen que los síntomas SCT pueden ser una
se ha relacionado con la memoria de trabajo. consecuencia de una ansiedad comórbida y la
En la memoria de trabajo, habitualmente, se condición TDAH-I (Skirbekk, Hansen, Over-
distinguen dos procesos: almacenamiento de la beck, & Khristensen, 2011), mientras que otros
información para que sea accesible en cortos pe- consideran que es un constructo independiente
riodos de tiempo; control ejecutivo que permite (Garner, Mrug, Hodgens, & Patterson, 2013),
la codificación, recuperación y dirige la atención. presente después de controlar otros síntomas
En este sentido, Fassbender, Krafft y Schweit- como depresión, ansiedad y TDAH en pobla-
zer (2015), a través de un estudio con resonan- ción universitaria (Flannery, Becker, & Luebbe,
cia magnética funcional (RMNf ), mostraron 2014; Wood, Lewandowski, Lovett, & Antshel,
que a mayor número de síntomas de SCT se 2014). En estos estudios la presencia de SCT
observaba menor actividad en la región del se asoció con disfunción ejecutiva y deterioro
lóbulo parietal superior, relacionándolo con funcional.
una menor reorientación o cambio atencional. De este modo, se identifican dos posibles
En cambio, cuando había mayor inatención se perspectivas para entender el SCT. Por un lado,
observó una actividad diferente en el tálamo y como una característica psicopatológica del sub-
en el área motora suplementaria, que a juicio tipo de TDAH inatento y, por otro, como una
de los autores podría ser reflejo de un proce- dimensión psicológica, a lo largo de un continuo,
samiento ineficaz para estar preparado para que puede tener una influencia en el desarro-

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Romero-Ayuso: TDA y Tempo Cognitivo Lento

llo o mantenimiento de ciertos trastornos. Lo mino sluggish y, por otro lado, sobre el debate
cierto es que algunos autores han señalado de entenderlo como un trastorno o dimensión
que los síntomas del SCT están incluidos en psicológica. De este modo se recoge la pro-
la categoría diagnóstica de TDAH-I, según puesta de Barkley como Trastorno por Déficit
la tercera edición del Manual Diagnóstico y de Concentración (Concentration Deficit Disor-
Estadístico para las Enfermedades Mentales der). Sin embargo, esta nomenclatura podría
(DSM-III), aunque parte de estos síntomas no no ser la más adecuada, ya que concentración
han sido incorporados en la nueva edición del puede entenderse como atención sostenida, y
2013 del DSM (Wood, 2015). Adicionalmente, es justamente unos de los déficit principales de
se plantea la cuestión de si se puede entender los niños con TDAH. Así, todos los niños con
el SCT como un constructo unidimensional o TDAH podrían tener este trastorno también.
multifactorial. La revisión presentada coincide Si el objetivo es discriminar una dimensión o
en señalar en su mayoría tres factores: menor característica de un subtipo, debería añadir
velocidad de procesamiento de la información algo nuevo y no solapar lo ya descrito y co-
(lo que se refleja en una memoria de trabajo me- nocido dentro de los TDAH. Precisamente, se
nos eficiente), tendencia a soñar despierto (que reconoce que los niños con TDAH tienen un
se observa con fluctuación atencional) y falta déficit en atención sostenida o concentración
de iniciativa. Si bien el denominador común, (Barkley, 1997b; Escofet, 1999; Etchepareborda,
según se advierte posteriormente, es la lentitud. 1999; Bauermister, 2003).
El SCT se ha vinculado con un déficit en el Por otro lado, es posible que los niños con
procesamiento de la información temprana o SCT puedan ser entendidos por mostrar un di-
atención selectiva (Huang-Pollock et al., 2005), ficultad para la modulación, que es la capacidad
la memoria espacial (Skirbekk et al., 2011), la or- de regular y organizar el grado, la intensidad y
ganización y resolución de problemas (Barkley, naturaleza de la respuesta a los estímulos sen-
2012, 2013) y problemas en la velocidad motora soriales de una manera graduada y adaptativa.
(Garner, Marceaux, Mrug, Patterson, & Hod- La modulación permite mantener la atención,
gens, 2010), todo ello puede estar relacionado filtrar las sensaciones y mantener el nivel de
con una menor rapidez de procesamiento de la alerta óptimo. En general, pueden distinguirse
información, como característica basal, que a su tres patrones inadecuados de modulación:
vez podría tener alguna relación con los tras- hiperrespuesta, también denominado sensibi-
tornos del aprendizaje no verbal y la sustancia lidad sensorial o evitación sensorial, caracteri-
blanca cerebral. zado por respuestas exageradas, negativas a una
Adicionalmente, algunos autores indican experiencia típica de la vida diaria, que reper-
que los niños con síntomas de SCT muestran cuten en el nivel de alerta, atención, interacción
irregularidades en la función ejecutiva de auto- social, nivel de actividad y autocuidado. Puede
regulación de la conducta (Willcutt, Doyle, observarse evitación, ansiedad, hipersensibili-
Nigg, Faraone, & Pennington, 2005), elemento dad, por ejemplo defensa táctil o inseguridad
relacionado con el procesamiento sensorial y la gravitacional (Miller, Nielsen, & Schoen, 2012;
hiporespuesta sensorial (Dunn, 2001; Dunn & Dunn, Myles, & Orr, 2002; Miller, Schoen,
Bennet, 2002). James, & Schaaf, 2007). Hiporrespuesta o “bajo
En este epígrafe, Bernad y Servera (2016) registro”, se distingue por respuestas demoradas
también señalan algunas controversias sobre la o disminuidas a los acontecimientos sensoriales
terminología utilizada para referirse al SCT, diarios, afectando al nivel de alerta, atención,
por su posible connotación peyorativa del tér- postura y movimiento, coordinación motora e

202 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

interacción social (Blanche, Parham, Chang, 3. La Evaluación del SCT


& Mallinson, 2014). Y deseo sensorial o bús- De acuerdo a lo expuesto, la evaluación del
queda sensorial, caracterizado por un impulso SCT se hace fundamentalmente mediante una
insaciable por aumentar las experiencias senso- metodología Proxy, a través de cuestionarios a
riales (Schoen, Miller, & Sullivan, 2014). Estos los padres y profesores. Según los autores, el
niños pueden desear estímulos sensoriales de primer instrumento que permitió capturar esta
gran intensidad en distintos ambientes, tener dimensión es el CBCL en la versión de 2007,
fuertes preferencias sensoriales, mostrar con- mediante cuatro ítems, a pesar de no haber sido
ductas socialmente inapropiadas y tener poca creado con esta finalidad.
conciencia del peligro, así como dificultades Posteriormente se han desarrollado hasta
para terminar las tareas, mostrar poco control siete instrumentos para evaluar específicamente
inhibitorio y desorganización en la conducta el SCT en niños y uno para la evaluación de los
(Miller et al., 2007). En este sentido, los niños adultos. Cabe destacar el Child Concentration
con SCT podrían ser interpretados como niños Inventory (CCI), que permite al propio niño
de bajo registro o con patrón de hiporrespuestas, informar sobre cada ítem. El artículo de Bernad
que está relacionado con una menor velocidad y Servera (2016) refleja las garantías psicomé-
de procesamiento de la información, es decir, tricas de los cuestionarios de SCT, con relación
con la cantidad de información que se puede a la fiabilidad test-retest, consistencia interna
procesar en un determinado tiempo y con la que de la escala, el análisis factorial exploratorio,
es posible realizar un conjunto de operaciones validez convergente y discriminante. Es inte-
cognitivas necesarias para dar una respuesta resante señalar que el SCT ha sido estudiado
(Ríos-Lago, Lubrini, Periañez, Viejo-Sobera, transculturalmente, en distintas muestras clíni-
& Tirapu Ustarroz, 2012), y que habitualmente cas y comunitarias, lo que da mayor apoyo a su
se mide en tareas computarizadas en el tiempo interés en la evaluación psicológica. Uno de los
transcurrido desde que aparece un estímulo problemas señalados es que los ítems de los cues-
hasta que se produce una respuesta. tionarios aisladamente también están presentes
Distintos estudios han examinado la etiología y son característicos de otros cuadros clínicos,
de los problemas de modulación, identificando especialmente trastornos internalizantes de la
un componente genético (Goldsmith, Van Hu- conducta. Por otro lado, una de las ventajas de
lle, Arneson, Schreiber, & Gernsbacher, 2006). estos instrumentos es su brevedad, ya que oscilan
Las personas con hiposensibilidad tienen un entre 8 y 14 ítems.
registro bajo; no notan acontecimientos senso- Sería interesante que junto con este tipo de
riales en la vida diaria, pueden, por ejemplo, no instrumentos se utilizasen pruebas de evaluación
darse cuenta cuando la gente entra en la habi- neuropsicológicas o de rendimiento cognitivo,
tación en la que ellos se encuentran o si tienen especialmente para valorar con objetividad la
manchada su cara o manos (Dunn & Brown, velocidad de procesamiento de la información,
1997). En una revisión realizada por Koenig y distintas dimensiones de atención y conocer la
Rudney concluyeron que las dificultades en el relación entre cada uno de los factores del SCT
procesamiento sensorial repercuten en el ren- y las diferentes funciones cognitivas.
dimiento en los distintos roles ocupacionales:
juego y ocio, participación social, desarrollo de la 4. Estudios epidemiológicos del SCT
autonomía, actividades de la vida diaria básicas Los estudios epidemiológicos muestran que
e instrumentales, actividades escolares (Koenig entre 30% y 63% de los sujetos que cumplen
& Rudney, 2010). los criterios diagnósticos de TDAH-I presen-

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Romero-Ayuso: TDA y Tempo Cognitivo Lento

tan también síntomas de SCT. No obstante, presentar en su vida diaria, sino también para
la mitad de las personas con TDAH pueden establecer programas de detección, prevención e
no tener síntomas de SCT, quizás esto pueda intervención sobre estas dificultades. Asimismo,
estar relacionado con la forma de realizar el es fundamental que este tipo de evaluaciones
diagnóstico de TDAH y especialmente con su contemplen también las fortalezas que estas
clasificación en un subtipo u otro, sin tener en personas presentan en su vida cotidiana. Lo más
cuenta el número de síntomas de inatención y sencillo es relacionar las funciones ejecutivas por
especialmente de hiperactividad-impulsividad, su implicación evidente con la actividad (planifi-
lo que puede hacer difícil discriminar entre un cación, inicio, ejecución, supervisión y resolución
subtipo u otro, por el cumplimiento de un ítem de problemas). Sin embargo, eso no es suficiente.
más, por ejemplo, lo que conduce en muchas Es preciso realizar un análisis exhaustivo de cada
ocasiones a comparar población muy hetereo- actividad para conocer cuáles son las demandas
génea. También es relevante que los estudios de cada una de ellas (de todas las funciones cog-
consideren si los niños toman medicación, el nitivas) y como puede influir en el desempeño de
tipo y formato de la misma, ya que todo ello cada persona. Además, un factor frecuentemente
afecta a la presentación clínica de los distintos olvidado es el análisis del contexto, que puede
subtipos clínicos de TDAH y su rendimiento facilitar que una persona mejore su respuesta al
cognitivo. Además, según Camprodon-Rosanas mismo, al solicitarle una menor modulación, o
et al. (2016) hay factores socioeconómicos que más demandas sobre sus fortalezas que sobre
están asociados con una mayor incidencia del sus debilidades. Todo ello influirá, no sólo en un
SCT, entre los cuales se incluyen desempleo mayor rendimiento, sino también en una mayor
paterno, menor nivel educativo de la madre, motivación, que a su vez repercutirá en el resto
tabaquismo durante el embarazo, que el niño de los componentes ejecutivos (Lezak, 1995) y
sea fumador pasivo en el hogar y niños con emocionales. De este modo, una misma activi-
TDAH. En este sentido, sería interesante contar dad en un entorno diferente puede ser adecuada
con un mayor número de trabajos que estudien o no para lograr un óptimo desempeño en la
el efecto del estatus socioeconómico como una vida cotidiana, entendida en un amplio sentido
posible variable confusora, ya que los síntomas (Romero-Ayuso, 2007). En estudios futuros
de SCT parecen estar asociados con el bajo sería también interesante conocer el perfil sen-
nivel socioeconómico (Barkley, 2013; Garner sorial de estas personas para corroborar si tienen
et al., 2010). De acuerdo con Wood (2015) es dificultades en la modulación sensorial (Miller
importante que se hagan estudios con distintas et al., 2012) y cómo se relacionan con cada uno
muestras, con población general también, no de los factores del SCT.
sólo con TDAH. Finalmente, sería importante observar el
equilibrio ocupacional de estos niños, ya que el
5. Repercusión del SCT en la nivel y tipo de actividad que tenga durante el día
ocupación humana: actividades se puede ver afectado por el grado de descanso
de la vida diaria, actividades nocturno y viceversa, tal y como indican Becker
escolares, de ocio y participación y Langberg (2014) y Wood (2015).
social
Conocer la repercusión que tiene el SCT en el 6. Conclusiones
desempeño de los distintos roles ocupacionales Es importante considerar que muchos niños
es fundamental, no sólo para conocer las posibles con SCT crecerán dentro de sus déficits, por
dificultades que estos niños o individuos pueden lo que sería muy interesante realizar estudios

204 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Comentario/Bernad y Servera: Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias

de cohortes. Queda pendiente saber si podría Bernad, M. M., & Servera, M. (2016). Sluggish Cognitive
entenderse el SCT como continuo o dimensión Tempo: realidades y controversias. Revista Mexicana de
transdiagnóstica. También queda aplazado di- Investigación en Psicología, 8(2), 125-160.
ferenciar los perfiles de TDAH-I y TDAH-C. Blanche, E. I., Parham, D., Chang, M., & Mallinson, T. (2014).
Sería interesante combinar distintas metodo- Development of an adult sensory processing scale (ASPS).
logías para la evaluación del SCT (Proxy, de American Journal of Occupational Therapy, 68(5), 531-538.
rendimiento neuropsicológico y funcionales en doi: 10.5014/ajot.2014.012484
la vida cotidiana). Todo ello ayudaría a tener un Camprodon-Rosanas, E., Ribas-Fitó, N., Batller-Vila, S., Per-
mayor comprensión teórica del SCT y, desde un savento, C., Álvarez-Pedrero, M., Sunyer, J., & Forns,
punto de vista práctico, a desarrollar métodos e J. (2016). Sluggish Cognitive Tempo: sociodemograph-
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American Journal of Occupational Therapy, 64(3), 430-442. college students with Sluggish Cognitive Tempo symptoms.
Lezak, M. D. (1995). Neuropsychological Assessment. Oxford: Dissertations-ALL. Paper 324.
Oxford University Press (3a ed.).
Recibido el 17 de julio de 2016
Miller, L. J., Nielsen, D. M., & Schoen, S. A. (2012). Attention Revisión final 20 de julio de 2016
deficit hyperactivity disorder and sensory modulation disor- Aceptado el 27 de julio de 2016

206 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


ARTíCULO-RESPUESTA/
AUTHOR’S RESPONSE
Respuesta a los comentarios sobre
“Sluggish Cognitive Tempo: realidades y controversias”
Mateu Servera & María del Mar Bernad
Instituto Universitario de Investigaciones en Ciencias de la Salud
Universidad de las Islas Baleares

Resumen some aspects of the original work are expanded. Finally the
El presente artículo es una respuesta a los artículos-comen- main conclusions drawn from the contributions of all authors
tario realizados al trabajo de Bernad & Servera (2016). Se resu- are summarized.
men las principales aportaciones de los artículos-comentario Key words: Attention Deficit Hyperactivity Disorder (ADHD),
y se destacan aquellos aspectos que matizan, complementan review, Sluggish Cognitive Tempo (SCT)
y corrigen el artículo original. Al mismo tiempo, se intenta
responder a las cuestiones planteadas y se amplían algunos Respuesta a los comentarios
aspectos del trabajo original. Finalmente, se resumen las de “Sluggish Cognitive Tempo:
principales conclusiones extraídas a partir de las aportaciones realidades y controversias”
de todos los autores. Tras la presentación de nuestra revisión sobre
Palabras clave: revisión, Sluggish Cognitive Tempo (SCT), Tras- Sluggish Cognitive Tempo (SCT) (Bernad &
torno por Déficit de Atención con Hiperactividad (TDAH) Servera, 2016) nos hicieron llegar hasta seis
artículos-comentario diferentes al respecto. La
Authors’ response to open peer commentaries on primera impresión fue la de considerarnos muy
“Sluggish Cognitive Tempo: Facts and controversies” afortunados por el hecho de que expertos de
Abstract gran diversidad de ámbitos y de diferentes países
This paper is the authors’ response to open peer commen- hubieran tenido la deferencia de leer y comentar
taries on “Sluggish Cognitive Tempo: Facts and controversies” nuestro trabajo. A partir de ahí, leímos con gran
(Bernad & Servera, 2016). The main contributions of these interés cada artículo-comentario y nos dimos
comment papers are summarized, highlighting those aspects cuenta de lo útil que es este procedimiento para
that clarify, complement and correct the initial proposal. At volver a reflexionar, para matizar, para comple-
the same time we try to answer the questions raised, and mentar, para corregir y para aprender más sobre
Agradecimientos: Este trabajo se ha realizado con el apoyo de dos proyectos de investigación
el tema en que se trabaja. En este sentido no po-
del Ministerio de Economía y Competitividad (Gobierno de España): PSI2011-23254 y PSI2014- demos más que sentirnos agradecidos por todas
52605-R, y con una beca predoctoral cofinanciada por los Fondos Sociales Europeos y el Gobier-
no de las Islas Baleares (FPI/1451/2012). las aportaciones y por tener ahora la oportunidad
de volver sobre nuestros pasos y responder a
Dirigir toda correspondencia a la autora a: Mateu Servera. Universidad de las Islas Baleares.
Campus UIB. Ctra. Valldemossa, Km. 7,5 07122 Palma (Islas Baleares), España. todos aquellos aspectos que, a nuestro juicio,
Correo electrónico: mservera@gmail.com han resultado los más destacados. En términos
RMIP 2016, Vol. 8, No. 2, pp. 209-217. generales es necesario avanzar que hay muchos
ISSN-impresa: 2007-0926; ISSN-digital: 2007-3240
www.revistamexicanadeinestigacionenpsicologia.com
más puntos de acuerdo que diferencias entre
Derechos reservados ®RMIP todos los artículos-comentario y nuestro propio

Vol. 8, número 2, 2016 209


Artículo-Respuesta

trabajo y, sin embargo, existen detalles, matices ofrecer ejemplos más concretos de cada ítem
y sugerencias que realmente han enriquecido para intentar que padres y maestros pudieran
sustancialmente la aportación inicial. ser más precisos en sus evaluaciones, ahora nos
Bauermeister (2016) nos ofrece en su artículo- parece más dudosa. Es más, en el CABI (la
comentario una visión complementaria y enri- última versión del CADBI, ahora denominada
quecedora de la revisión sobre el SCT, tanto en Child and Adolescent Behavior Inventory, Burns,
aspectos de detalle como en algunas cuestiones Lee, Servera, McBurnett, & Becker, 2015), tras
no tratadas, que amplía y expone muy acer- una amplia reflexión entre los autores, decidi-
tadamente. Para empezar debemos enmendar mos volver a los ítems de una sola frase, pero
los primeros errores de comisión y de omisión. ampliando el número a 15 para poder analizar
Efectivamente, atribuimos excesivos méritos en con mucho mayor detenimiento la idea ante-
el campo del SCT a la doctora Catherine Saxbe, riormente expuesta, es decir, la posibilidad de
por su colaboración con R. A. Barkley, en el exce- que el solapamiento entre SCT y TDAH-IN se
lente artículo de puesta al día del SCT de 2014. deba a un cierto tipo de ítems que, en realidad, al
No sabemos si en un futuro próximo C. Saxbe menos hasta cierto punto, miden lo mismo; por
estará en la lista de autores más renombrados en lo cual no nos debe preocupar si otros ítems, de
SCT, pero nos precipitamos en esta primera va- forma relativamente independiente, son los que
loración. Por otra parte, descuidamos el trabajo realmente miden el Tempo Cognitivo Lento. El
de Bauermeister et al. (1992), realmente pionero debate, pues, sobre la evaluación del SCT sigue
y de gran interés y que, por tanto, merecía estar todavía abierto. Una última consideración al
en nuestra primera versión del trabajo. respecto es que tenemos gran convencimiento
Por lo que respecta a las secciones más es- de que los cinco ítems para padres previamente
pecíficas del artículo de Bauermeister (2016), detectados (que incluyen los tres para maestros)
nos suscita especial interés la dedicada a la eva- formarán siempre parte del núcleo de la evalua-
luación del SCT porque expone alguno de los ción del SCT, con independencia de la prueba
problemas que todavía nos crean dudas. Cierta- usada y los ítems que tenga. Los avala una meto-
mente, la escala de ítems del SCT-CADBI no dología robusta que ha encontrado consistencia
consolidó los ocho ítems en muestras españolas, transversal, longitudinal y transcultural.
y seguramente influyeron razones como las ya Del resto de secciones del artículo de Bauer-
expuestas (edades muy tempranas de las mues- meister (2016) hay que valorar la ampliación
tras, cierta confusión en algunos ítems o diferen- de estudios y de resultados que expone; fun-
cias entre evaluadores), pero también nos inte- damentalmente destacamos la idea, por lo que
resa remarcar un hecho que consideramos clave. respecta al funcionamiento neuropsicológico y
Los cinco ítems robustos para padres y los tres de las funciones ejecutivas, de que muchas de las
para maestros forman parte del factor teórico de tareas utilizadas no se ajustan específicamente a
Enlentecimiento conductual, más claramente lo que pretende ser el Tempo Cognitivo Lento,
diferenciado de los síntomas de inatención que sino que más bien son genéricas de neuropsi-
los otros tres ítems que configurarían, al menos cología (Bauermeister, en prensa). Además, las
en teoría, el factor de Alerta inconsistente (Lee limitaciones metodológicas en este campo, es-
et al., 2014; Jacobson et al., 2012). Esto llama pecialmente en la selección de muestras, hacen
nuestra atención en el sentido de que tal vez el que los resultados sean, necesariamente, todavía
solapamiento habitual entre SCT y TDAH- preliminares. En este sentido, el proyecto de
IN se debe mucho más a unas conductas que a investigación que actualmente lidera Stephen
otras. Por este motivo, nuestra primera idea de Becker en el Cincinatti Children’s Hospital

210 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Servera y Bernad: SCT: respuesta a SCT: realidades y controversias

Medical Center, A multi-method investigation to Por otra parte, no podemos estar más de
distinguish Sluggish Cognitve Tempo from ADHD acuerdo en la propuesta que hacen Camprodon-
(2015) se basa en una potente batería de pruebas Rosanas y Batlle (2016) para denominar en el
y medidas neuropsicofisiológicas que prometen futuro al SCT como “Lentitud Cognitiva” (Cog-
arrojar datos muy relevantes al respecto en poco nitive Slowness), como mínimo, por las siguien-
tiempo. tes razones: se elimina la posible alusión despec-
Finalmente, nos agrada mucho la forma en tiva ligada al término sluggish, no hace mención
la que Bauermeister (2016) refuerza la idea de explícita a ningún trastorno, por tanto, es más
que es precipitado considerar al SCT como un fácilmente asimilable a la idea de una dimensión
trastorno psiquiátrico, recordando el análisis de continua (transdiagnóstica) y, finalmente, refleja
Becker et al. (2016) a partir de las recomendacio- lo que a nuestro modo de ver, hasta el momento,
nes de Cantwell (1995) sobre las áreas que debe ha demostrado ser lo más característico de la
cumplir un constructo para alcanzar la validez dimensión: lentitud en el comportamiento y en
diagnóstica. Sin duda, estas recomendaciones el pensamiento. Probablemente la dimensión
deben estar presentes en la investigación futura se relacione también con procesos de alerta, de
en este ámbito. arousal, de atención y motivación, pero hasta
El artículo-comentario de Camprodon-Ro- ahora estos procesos se han resistido con mayor
sanas y Batlle (2016) se focaliza especialmente fuerza a ser disociados de la presencia, casi om-
en la consideración del SCT desde una pers- nipresente, de los síntomas del TDAH inatento.
pectiva transdiagnóstica. De forma clara, breve En el artículo-comentario de Flores-Lázaro
y relevante presentan postulados teóricos de (2016) se analizan las limitaciones del SCT en
gran valor heurístico para profundizar en esta comparación con los estudios neuropsicológicos,
posibilidad. Resulta especialmente original la y especialmente de neuroimagen, desarrollados
equiparación que hacen entre TDAH y SCT en los últimos años en el TDAH. Estamos de
en función de la propuesta de Sonuga-Barke, acuerdo en que en estos momentos no dis-
Cortese, Fairchild y Stringaris (2016) sobre la ponemos de datos sólidos por lo que respec-
neurociencia transdiagnóstica de los trastornos ta a marcadores genómicos, de neuroimagen
mentales infantojuveniles. De todos modos, a funcional (y estructural podríamos añadir), así
nuestro parecer, en la propuesta hay elementos como neuropsicológicos del SCT. Sin embargo,
que parten de más evidencias que otros para el somos optimistas: en pocos años este tipo de
futuro de la investigación. Por ejemplo, la ten- investigación va a incrementarse notablemente,
dencia al retraimiento social y timidez (etapa y como muestra de ello ya citamos anteriormen-
de evaluación en la toma de decisiones) y el te el proyecto de investigación de S. Becker (en
procesamiento lento de la información, con baja desarrollo).
iniciativa y persistencia (etapa de valoración y Por otra parte, aunque no sea el núcleo central
adaptación), las dos dependientes del sistema del trabajo, nos gustaría añadir algunos comen-
de refuerzo, parecen bastantes contrastadas con tarios a la búsqueda de estos marcadores en el
los datos que ya disponemos sobre el SCT. En caso del TDAH. Flores-Lázaro (2016) descri-
cambio, los déficits neuropsicofisiológicos liga- be trabajos muy relevantes en el ámbito de la
dos a la etapa de decisión y gestión en la toma neuroimagen que han aportado conocimientos
de resoluciones son todavía más dudosos, tanto sobre las redes neuronales comprometidas en el
para ser asignados de forma directa al SCT TDAH y los contrapone a las limitaciones del
como en su comparación con los déficits propios enfoque fenomenológico y clínico en general.
del TDAH. Pero el reto es, sin duda, motivador. Estamos de acuerdo en que la búsqueda de datos

Vol. 8, número 2, 2016 211


Artículo-Respuesta

objetivos en el ámbito de la neurociencias mar- neuroimagen y TDAH (abarcando todas las


cará en gran parte el futuro de los sistemas diag- edades y las diferentes técnicas). La tabla 1.1 (pp.
nósticos psiquiátricos. Ahora bien, no somos 32-39) destaca los hallazgos en neuroimagen
tan optimistas con respecto a los datos hallados estructural y la 2.1 (pp. 59-69) los encontrados
hasta el momento, o al menos somos partidarios en neuroimagen funcional. Sin duda, la acu-
de una interpretación y aplicación prudente, mulación de datos en los últimos años ha sido
no en vano el diagnóstico del TDAH es aún exponencial pero, como reconoce el autor, hay
mayoritariamente reconocido como “clínico”. limitaciones importantes a tener en cuenta: en
Por ejemplo, en el caso de los marcadores el 69% de los estudios estructurales las muestran
genéticos basta leer la excelente editorial de eran inferiores a 30 sujetos y en el 89% de los
Samuele Cortese (2016). El autor recuerda que estudios funcionales inferiores a 20; sólo en 20
en 1993 el Journal of American Academy of Child de 55 estudios estructurales se usaron técnicas
and Adolescent Psychiatry publicaba una respues- volumétricas automatizadas (los demás usaron
ta a un artículo publicado en el New England of segmentación manual, lo cual es conocido que
Medicine al que titularon “The Gene for ADHD? favorece el descubrimiento de diferencias esta-
Not yet”. Pues bien, más de 20 años después, a dísticamente significativas de modo erróneo);
pesar de los múltiples avances producidos en a menudo en las muestras no se discriminó
los estudios genéticos y aplicados en concreto al suficientemente entre los diferentes subtipos de
TDAH, incluyendo el macroestudio IMAGE, TDAH y no siempre se controló comorbilidad,
todavía podemos afirmar que la cuestión no el CI y otras variables de interés. Además, en
está resuelta. Por lo que respecta a los marca- pocas ocasiones se especifica si los sujetos fueron
dores funcionales y estructurales basados en los “lavados” o no antes de los escáneres y durante
estudios de neuroimagen aplicados al TDAH qué periodo (en algunos estudios no se controló
es indudable que hemos acumulado datos y esta variable, que puede influir claramente en los
conocimientos de gran interés, pero la cuestión resultados). Pero, sin duda, la variable de mayor
tampoco está cerrada. Lo resumen muy bien importancia es el modo en que se seleccionan
Cortese y Castellanos (2012), quienes, a pesar las muestras que participan en los estudios. En
de ser muy optimistas cara al futuro, conclu- la mayoría de los estudios el interés está en
yen su excelente revisión sobre neuroimagen y comparar las neuroimágenes de participantes
TDAH del siguiente modo: “Despite the incre- con TDAH frente a sus controles. No existe un
asing pace of progress in neuroimaging methods consenso claro sobre qué síntomas y subtipos
and approaches, claims of clinical utility of de TDAH existen, aunque se haya tendido a
neuroimaging-based tools are premature [56] converger (sistema DSM vs CIE), pero incluso
and currently indefensible for the diagnosis of si se asume esta posibilidad, no existe un sistema
ADHD or for formulation of treatment plans” protocolorizado universalmente aceptado para
(p. 8). La cita a la que hacen referencia es otro hacer el diagnóstico y, por tanto, seleccionar
trabajo en el que participa Castellanos, en el las muestras. Múltiples procedimientos, escalas,
cual se analizan las “promesas y escollos” en este cuestionarios y tareas bastante diferentes entre sí
ámbito (Kelly, Biswall, Craddock, Castellanos, son utilizados, de modo que no está garantizado
& Milham, 2012). que las muestras sean equiparables. Sin duda
En la tesis doctoral de Salavert (2015), aun- este problema puede afectar a que los datos a
que centrada en adultos y en el tratamiento a menudo aparezcan como contradictorios. No
largo plazo con estimulantes, se hace una extensa sólo en los marcadores genéticos o neurofisio-
revisión de lo publicado hasta el momento en lógicos del TDAH, sino a veces simplemente en

212 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Servera y Bernad: SCT: respuesta a SCT: realidades y controversias

el intento de establecer su prevalencia (relativa- Klein, Corkum, & Eskes, 2009). En un princi-
mente variable entre estudios, países, culturas e pio parecía que la iniciativa tendría éxito en el
incluso razas). DSM-5, puesto que en los trabajos preliminares
Nuestra confianza es que el SCT pueda su- se aceptaba un subtipo atencional restrictivo que
perar alguna de estas limitaciones que han afec- limitaba en dos ítems la presencia de la sintoma-
tado históricamente al TDAH, y de un modo tología hiperactivo/impulsiva. Sin embargo, no
u otro se establezca un núcleo de detección de fue así, la Asociación de Psiquiatría Americana
los sujetos fiable, válido y estable en el tiempo. mantuvo la misma estructura diagnóstica. Esta
Es decir, que antes de lanzar la investigación a decisión, en un primer momento, desencadenó
la búsqueda de los sustratos explicativos de la controversia y decepción, pero poco a poco se ha
dimensión quede claro qué se evalúa, con quién convertido en una oportunidad: ¿pretendíamos
evaluamos y cómo lo evaluamos. Los últimos realmente que el SCT se desdibujara en un sub-
ocho años han sido fructíferos en este sentido, tipo atencional puro que compartiría los mismos
con lo cual cabe ser optimista que en el próximo criterios diagnósticos que el TDAH inatento
lustro los marcadores definitorios de la dimen- tradicional únicamente diferenciándose por la
sión también podrán quedar muy definidos. Y, menor presencia de síntomas de hiperactividad/
además, cabe confiar en que tal vez se produzca impulsividad? Ahora ya podemos decir clara-
un avance al unísono con el TDAH. mente que no.
El artículo-comentario de Moreno-García La situación del SCT con relación al TDAH,
(2016) sintetiza, estructura, pule y contextualiza y específicamente con el subtipo inatento, cada
nuestra revisión, exponiendo de forma clara para vez se acerca más a la idea de que pueden com-
el lector el estado genérico de la investigación partir una parte significativa de los síntomas
en SCT. Es interesante observar cómo en cada comportamentales (eso parece una evidencia)
apartado se construye el paralelismo con el y probablemente (aunque ello está por verse)
TDAH y cómo, al final, en el párrafo de con- neuropsicológicos; sin embargo, los desenca-
clusiones, implícitamente se vincula el futuro denan mecanismos subyacentes diferentes. La
de la expansión de esta investigación a las áreas peculiar relación del SCT con los síntomas
tradicionales en el TDAH. La lectura de este ca- internalizados, muy particularmente con las
pítulo nos devuelve a una de las preguntas claves conductas y las reacciones que asociamos con
en el ámbito del SCT: ¿surgirá una investigación estados o temperamentos depresivos, y con los
propia sobre la dimensión o persistirá siempre externalizados, casi ejerce de protector frente
vinculada al TDAH? En el pasado, e incluso a conductas negativistas, oposicionistas o pro-
hasta hace poco, la segunda opción parecía blemáticas, en general le confiere un carácter
indiscutible, pero el futuro puede ser diferente. propio y diferenciado del TDAH. Por eso he-
La evolución de la propia concepción del SCT mos llegado a un punto que, en teoría, cabría la
dentro de nuestro grupo de investigación puede posibilidad, por una parte, de encontrar niños
ser un buen ejemplo de ello. y jóvenes con un diagnóstico con TDAH, con
Nosotros nos acercamos a la dimensión SCT y sin altas puntuaciones en SCT, pero, por otra
para defender su implicación directa en un sub- parte, también existiría la posibilidad de hallar
tipo de TDAH con predominio atencional puro, a otros con trastornos emocionales, ansiosos y
siguiendo algunos trabajos claves de la primera del aprendizaje en la misma situación. En defi-
década de este siglo (Barkley, 2001; Carlson nitiva, pues, aventuramos que las implicaciones
& Mann, 2002; Diamond, 2005; Milich, Ba- del SCT pueden ir en un futuro más allá de su
lentine, & Lynam, 2001; Penny, Waschbusch, tradicional relación con el TDAH.

Vol. 8, número 2, 2016 213


Artículo-Respuesta

En el artículo-comentario de Rincón-Lozada disfunción ejecutiva (lóbulo frontal), mientras


(2016) se realiza una revisión crítica funda- los inatentos presentarían un problema más
mentalmente centrada en las dificultades para restringido a este ámbito (lóbulo pariental de-
la diferenciación del SCT del TDAH subtipo recho). Los datos, sin embargo, no han podido
inatento. A nuestro entender selecciona acerta- asegurar completamente estas hipótesis.
damente algunos de los trabajos relevantes que De todos modos, la autora cita un interesan-
contribuyen, en un sentido u otro, a analizar la te trabajo de Fassbender, Krafft y Schweitzer
problemática en distintos campos, por ejemplo, (2015), en el cual con técnicas de resonancia
el funcionamiento neuropsicológico, la sinto- magnética funcional se establecen diferencias
matología internalizante y externalizante, los en el funcionamiento neural, primero entre con-
problemas de sueño, las funciones ejecutivas, troles y TDAH, y luego dentro de los TDAH
etcétera. De forma prudente, Rincón-Lozada entre los que presentaban más y menos sínto-
asume que el SCT puede ser considerado un mas de SCT. Se trata de un estudio pionero
“término descriptivo no formalizado” que podría de gran interés, pero todavía con una muestra
ser considerado un subgrupo dentro del TDAH. muy pequeña (13 controles y 16 clínicos) y
Evidentemente estamos de acuerdo en que des- algo sesgada puesto que hasta 10 participantes
de el punto de vista del “diagnóstico psicopatoló- más (2 controles y 8 clínicos) tuvieron que ser
gico”, el SCT no está formalizado pero, además, eliminados del estudio por “movimientos ex-
añadiríamos que es dudoso que acabe como tal. cesivos”. Además, las diferencias en el sustrato
Sin embargo, desde nuestra perspectiva, y a la neurobiológico no tuvieron claras repercusiones
cual pensamos que se han adherido la mayoría de en los resultados conductuales de la prueba
los autores que han hecho la revisión de nuestro donde apenas hubo diferencias entre clínicos
primer artículo, el SCT cada vez se acerca más a y controles. Por eso, también nos parece muy
una dimensión continua, transdiagnóstica, y de acertada la recomendación que hace Romero-
rasgos temperamentales que define un conjunto Ayuso de la necesidad de encontrar diferencias
de conductas y de formas de procesamiento de en la vida cotidiana en el comportamiento de
la información que en grado extremo pueden unos y otros niños, y también en el caso espe-
llegar a vincularse con diversos trastornos, y que cífico del SCT. Hay que recordar que Barkley y
en grado más moderado puede acabar definien- Murphy (2011) ya resaltaron que las habituales
do un patrón comportamental relativamente diferencias en inhibición de respuesta y memo-
estable. No estamos todavía en disposición de ria de trabajo que se observaban a nivel grupal
aceptar esta propuesta con datos concluyentes, en muestras de TDAH frente a controles eran
pero sí podemos hablar ya de una línea de inves- mucho menores a nivel individual, donde sólo
tigación avanzada en esta dirección. entre un 35-50% de los individuos con TDAH
El artículo-comentario de Romero-Ayuso realmente presentaban déficits ejecutivos. En tal
(2016) se focaliza fundamentalmente en las caso, o bien podríamos considerar que el TDAH
diferencias entre el TDAH y la dimensión SCT no es un “déficit ejecutivo” o, en el mejor de los
con relación a resultados y respuestas en el casos, que sólo una parte de los individuos con
ámbito neuropsicofisiológico. De modo espe- el diagnóstico lo presentan. Sin embargo, los au-
cialmente acertado, a nuestro entender, empieza tores proponen otra hipótesis: la mayoría de las
ya por exponer las diferencias dentro del propio medidas utilizadas son tareas, tests o pruebas de
TDAH entre el subtipo combinado y el inaten- laboratorio con muy poca validez ecológica, que
to. Las hipótesis han intentado implicar más apenas correlacionan con actividades de la vida
a los combinados en un problema general de diaria. Probablemente por ello en los últimos

214 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Servera y Bernad: SCT: respuesta a SCT: realidades y controversias

años han proliferado los cuestionarios y auto- mente estimulantes para volver sobre nuestros
informes que miden las funciones ejecutivas en pasos y reflexionar sobre el estado actual del
situaciones cotidianas, como la propia Barkley’s SCT. Ahora, con todo el bagaje acumulado, y
Executive Functional Scale, en principio con analizados todos los puntos de vista, estamos
resultados más consistentes, aunque no exentos en disposición de resumir en seis puntos muy
de limitaciones. breves todo lo que hemos aprendido sobre
En el apartado de la definición del SCT que el SCT y hacia donde debe ir en el futuro la
aborda Romero-Ayuso (2016), y sin abandonar investigación.
las implicaciones neuropsicológicas del SCT, Existe un núcleo central de conductas bien
encontramos otro hecho que de nuevo pone delimitadas que constituyen la evaluación de la
frente a frente las medidas de laboratorio frente presencia del Tempo Cognitivo Lento por parte
al comportamiento cotidiano. Ya hemos resal- de padres y maestros. Este núcleo de conductas
tado a lo largo del presente trabajo que estamos está más claramente relacionado con el factor
de acuerdo en que, con independencia de si el de Lentitud motora y cognitiva que con el de
SCT presenta o no una naturaleza multifacto- Alerta atencional. La dimensión SCT se ha de-
rial, el elemento clave es la lentitud. Y, con toda mostrado consistente y estable, así como válida
seguridad, traducido a términos neuropsicoló- y diferenciada de la medida de inatención del
gicos ello debe significar enlentecimiento en la TDAH en múltiples estudios. Si bien, la natura-
velocidad de procesamiento de la información. leza de la elevada relación que mantienen ambas
En el trabajo ya citado de Fassbender et al. dimensiones todavía no está suficientemente
(2015) se deduce que parte de la diferenciación desarrollada en ningún modelo explicativo.
neurofisiológica que implica la presencia de Las implicaciones conductuales del SCT se
más síntomas SCT debe guardar relación con han centrado fundamentalmente en su modera-
esta medida y, en términos neuropsicológicos, da pero significativa relación con las conductas
ello debería suponer simplemente tiempos de relacionadas con el estado emocional y, en menor
reacción más largos en respuesta a los estímulos. medida, la ansiedad así como por presentar cier-
Sin embargo, lo que se concluye del metaa- to factor protector (al menos comparativamente
nálisis de Becker et al. (2016) es que hay muy con el efecto de la inatención del TDAH) con
pocos estudios que de momento puedan apoyar los problemas del comportamiento. La inves-
esta hipótesis y, en general, cualquier diferencia tigación de la relación entre SCT, depresión,
basada en tareas neuropsicológicas puesto que ansiedad, retraimiento social y problemas de
los tamaños del efecto de las diferencias tienden sueño (así como con las conductas externaliza-
a ser realmente pequeños. Si además añadimos das) seguirá ocupando un lugar destacado en los
que en el mejor de los casos estas diferencias próximos años.
neuropsicológicas, de momento, muestran pocas Se desconoce claramente el origen del SCT,
o limitadas repercusiones en las conductas de la puesto que no hay suficientes estudios ni datos
vida diaria de los niños, sin duda, la necesidad sobre la influencia de factores genéticos, del
expuesta por Romero-Ayuso (2016) de incre- neurodesarrollo, ambientales, educativos o de
mentar la investigación en este campo se hace otra índole. Pero, dada la estabilidad que está
todavía más evidente. demostrando tener la dimensión, sin duda es
En definitiva, como decíamos al principio, un tema que en el futuro debe ocupar un lugar
la lectura de los seis artículos-comentario que central en la investigación.
se han hecho a nuestro primer trabajo (Bernad Lamentablemente, hasta el momento no se
& Servera, 2016) nos han resultado tremenda- han podido constatar referentes neuropsicológi-

Vol. 8, número 2, 2016 215


Artículo-Respuesta

cos para caracterizar el funcionamiento del SCT. Bauermeister, J. J. (1992). Factor analyses of teacher rating of
Hay indicios de que una de sus características attention assessment deficit-hyperactivity and oppositional
fundamentales puede ser la lentitud en el pro- defiant symptoms in children aged four through thirteen
cesamiento de la información, pero los trabajos years. Journal of Clinical Child Psychology, 21, 27-34.
son escasos y las diferencias halladas limitadas. Bauermeister, J. J. (2016). Tempo Cognitivo Lento: un cons-
Es, por tanto, un campo por desarrollar. tructo controvertido en evolución. Revista Mexicana de
En cualquier caso, la investigación en biomar- Investigación en Psicología, 8(2), 163-174.
cadores (ya sean genéticos o neuropsicológicos) Becker, S. P. (2015). A multi-method investigation to distinguish Slu-
no debe centrarse exclusivamente en las tareas ggish Cognitve Tempo from ADHD (2015). Recuperado el 10
de laboratorio, que incluso en el TDAH han de octubre de 2016, de <https://projectreporter.nih.gov/pro-
demostrado ya sus limitaciones, sino que debe ject_info_description.cfm?aid=9006970&icde=27823636>.
hacerse de modo conjunto con sistemas de eva- Becker, S. P., Leopold, D. R., Burns, G. L., Jarrett, M. A., Lang-
luación más ecológicos, centrado en el contexto berg, J. M., Marshall, S. A., & Willcutt, E. G. (2016). The
y en la vida del niño. Eso es un reto extensible internal, external, and diagnostic validity of Sluggish Cog-
a la investigación en TDAH. nitive Tempo: a meta-analysis and critical review. Journal
Finalmente, queda mucha investigación por of the American Academy of Child and Adolescent Psychiatry,
hacer con el SCT en el campo de la psicopato- 55(3), 163-178. doi: 10.1016/j.jaac.2015.12
logía, pero se reconoce ya la posibilidad de que Bernad, M. M., & Servera, M. (2016). Sluggish Cognitive
no sea en sí mismo un trastorno, ni que nece- Tempo: realidades y controversias. Revista Mexicana de
sariamente en todos los casos deba vincularse a Investigación en Psicología, 8(2), 125-160.
ninguno en particular. Esta idea cambia relativa- Burns, G. L., Lee, S., Servera, M., McBurnett, K., & Becker,
mente la perspectiva seguida hasta el momento S. P. (2015). Child and adolescent behavior inventory. Teacher
y abre muchas otras opciones. La concepción version 1.0. Pullman: Autor.
del SCT como una entidad transdiagnóstica, e Camprodon-Rosanas, E., & Batlle, S. (2016). Sluggish Cogni-
incluso simplemente como rasgo temperamen- tive Tempo: desde una perspectiva transdiagnóstica. Revista
tal, sitúa a la dimensión en otros parámetros Mexicana de Investigación en Psicología, 8(2), 175-181.
a la hora de estudiar sus implicaciones en el Cantwell, D. P. (1995). Child psychiatry: introduction and over-
comportamiento, en el aprendizaje y en la esfera view. En H. I. Kaplan & B. J. Sadock (eds.), Comprehensive
cognitiva y emocional. textbook of psychiatry (vol. VI, pp. 2151-2154). Baltimore:
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216 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


Servera y Bernad: SCT: respuesta a SCT: realidades y controversias

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186-191. Aceptado el 31 de octubre de 2016

Vol. 8, número 2, 2016 217


otros
others
Dictaminadoras y dictaminadores
del volumen 8
La RMIP reconoce por este conducto a las y los siguientes colegas por participar
en el proceso dictaminador doble ciego

Christian Oswaldo Acosta Quiroz José A. García del Castillo


Instituto Tecnológico de Sonora Instituto de Investigación de Drogodependencias (INID)
(Unidad Navojoa) Universidad Miguel Hernández
México Campus de Sant Joan d’Alacant
Alicante, España
Imelda G. Alcalá Sánchez
Universidad Autónoma de Chihuahua Ana Luisa González-Celis Rangel
México FES Iztacala
Universidad Nacional Autónoma de México
Patricia Andrade Palos Cd. de México
Facultad de Psicología
Universidad Nacional Autónoma de México Cándido J. Inglés
Cd. de México Universidad Miguel Hernández de Elche
Alicante, España
Daniel Barona Narváez
Universidad Científica del Sur Magdalena López
Perú Centro Interdisciplinario de
Investigaciones en Psicología Matemática
Paula Biglieri y Experimental (CIIPME-CONICET)
Consejo Nacional de Ciencia y Técnica Universidad Católica
Universidad de Buenos Aires Argentina
Universidad Nacional de La Matanza
Argentina Pau López-Clavel
PIF Institut Universitari d’Estudis de la Dona
Xavier Carbonell Departament d’Història Contemporània
FPCEE Blanquerna Universitat de València
Barcelona, España España

Luz de Lourdes Eguiluz Ma. Del Refugio López Palomar


FES-Iztacala Centro Universitario de los Valles
Universidad Nacional Autónoma de México Universidad de Guadalajara
Cd. de México México

Vol. 8, número 2, 2016 221


Ignacio Lozano Verduzco Raquel Palomera Martín
Universidad Pedagógica Nacional Departamento de Educación
Cd. de México Facultad de Educación
Universidad de Cantabria
Miguel Marín Tejeda Santander, España
Dirección de Investigaciones Epidemiológicas
y Psicosociales Blanca E. Pelcastre Villafuerte
Instituto Nacional de Psiquiatría Ramón de la Fuente Muñiz Instituto Nacional de Salud Pública
Cd. de México Cuernavaca, México

Rosa Martha Meda Lara Rozzana Sánchez Aragón


Centro Universitario de Ciencias de la Salud Facultad de Psicología
Universidad de Guadalajara Universidad Nacional Autónoma de México
México Cd. de México

Juan David Múnera Echeverri Diego Alfredo Tamayo Lopera


Institución Universitaria de Envigado Facultad de Ciencias Sociales
Medellín, Colombia Institución Universitaria de Envigado
Medellín, Colombia
María Erika Ortega
Instituto de Investigaciones Psicológicas José Antonio Valderrama Ramos
Universidad Veracruzana Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Occidente
México Guadalajara, México

Patricia Ortega-Andeane Constanza Veloso-Besio


Facultad de Psicología Departamento de Psicología
Universidad Nacional Autónoma de México Universidad de Tarapacá
Cd. de México Chile

Ivana Beatriz Otero José Domingo Villarroel Villamor


Universidad Nacional de San Martín Escuela Universitaria de Magisterio de Vitoria
Argentina Universidad del País Vasco
España

222 Revista Mexicana de Investigación en Psicología


NORMAS EDITORIALES tigación en Psicología, ni de la Universidad de

PARA AUTORES Guadalajara. Las autoras y los autores aceptan


estas políticas al someter sus manuscritos.

Derechos: en el caso de que un manuscrito


A continuación se presenta una serie de sea aceptado para su publicación, las/los
criterios con el fin de facilitar la presentación autoras(es) autorizan a la RMIP la reproducción
final de sus contribuciones a la revista. La RMIP del manuscrito en cualquier medio y forma-
recibe artículos inéditos, producto del trabajo to, físico o electrónico; sin embargo, las/los
de investigación y reflexión en todas las áreas autoras(es) podrán reproducir sus artículos con
y enfoques de la psicología. fines académicos, de divulgación o enseñanza.
De surgir alguna duda al respecto, la autora
Manuscritos: someta sus manuscritos vía o el autor debe dirigirse con la Dra. Yolanda
electrónica en el portal de la RMIP: http:// Medina Cuevas (Editora Asociada) a: editaso-
www.revistamexicanadeinvestigacio- ciada@revistamexicanadeinvestigacionenpsi-
nenpsicologia.com/ojs/index.php/RMIP/ cologia.com
login?source=%2Fojs%2Findex.php%2FRMIP
o en: http://www.revistamexicanadeinvestiga-
cionenpsicologia.com/instrucciones/registro
Instrucciones para autores
siguiendo las Instrucciones para Autores que del sistema abierto de
se pueden encontrar en este ejemplar de la
revista o en su portal. Si experimenta alguna
contribuciones originales
dificultad al someter su manuscrito, por favor
contacte al Editor General.
Las y los autores que deseen publicar su ma-
Políticas de publicación: el manuscrito no debe nuscrito en el número enero-junio del Sistema
someterse a consideración de otra revista Abierto de Contribuciones Originales deberán
simultáneamente. Además, se debe garantizar considerar su manuscrito para alguna de las
que sus contenidos no han sido publicados, siguientes secciones, de acuerdo a los requeri-
que son originales y que todas las personas mientos particulares por tipo de manuscrito.
incluidas como autoras han dado su aproba-
ción para su publicación en la RMIP. Los datos Contribuciones en investigación: se revisarán
que apoyen los resultados de la investigación manuscritos de investigación que cumplan
deberán conservarse por cinco años después con rigor conceptual y metodológico; esta
de la publicación, para garantizar que otros decisión depende de los miembros del Con-
profesionales puedan corroborar los argumen- sejo Editorial, de dictaminadores y, en última
tos que se sostienen en el trabajo escrito, siem- instancia, del Editor General. Se sugiere some-
pre y cuando al hacerlo no se violen derechos ter manuscritos con una extensión máxima de
legales o éticos. 30 páginas tamaño carta. La consideración de
manuscritos con mayor longitud puede argu-
Los manuscritos publicados en la RMIP re- mentarse en la carta de presentación.
presentan la opinión de sus autoras/res y no
reflejan la posición del Editor General, del Con- Contribuciones teóricas y revisiones con-
sejo editorial, del Sistema Mexicano de Inves- ceptuales: se considerarán manuscritos que
presenten de manera creativa posturas teó- otro crédito o reconocimiento también deben
ricas o que revisen conceptos y su estatus insertarse al final de la primera página.
teórico y/o aplicado. Extensión máxima de 35
páginas, sin incluir la lista de referencias. Segundo archivo: consta de todo el manus-
crito y deberá subirse a la plataforma de Open
Informes y estudios de caso: se invita a Journal System.
proponer manuscritos que puedan ser prema-
turos para publicar como investigación final, Primera página debe contener un resumen
debido a que su metodología requiere refi- en español, con extensión máxima de 150
namientos o el tamaño de la muestra es aún palabras, incluyendo seis palabras claves.
reducido. Se considerarán proyectos e infor-
mes en su fase inicial, en curso y sus avances, Segunda página: debe incluir el resumen
siempre y cuando contengan una sólida base correspondiente en inglés (abstract), con una
conceptual. Se publicarán también estudios de extensión máxima de 150 palabras, incluyendo
caso. La extensión máxima es de 25 páginas. seis palabras claves (keywords).

Preparación de manuscritos: el contenido Tercera página: debe contener el título del


de los manuscritos ha de seguir el estilo de manuscrito sin nombres de autores(as). Cual-
la American Psychological Association (APA, quier manuscrito podrá ser editado, por ejem-
6ta ed., 2010), publicado en español como plo, si presenta indicios de quiénes son los
Manual de Publicaciones de la APA (3era. autores, o prejuicio de género en el lenguaje.
ed., 2010, Editorial El Manual Moderno). Los
trabajos han de ser escritos en procesador Cuarta página y siguientes: iniciar con el títu-
de palabras, a doble espacio (Word 2007 o lo: Introducción. A continuación todo el texto
más reciente), fuente arial de 12 puntos con del manuscrito con tablas y figuras insertadas
márgenes de 2.5 cms Deben presentarse en en el lugar que les corresponde en páginas
idioma español y han de caracterizarse por ser continuas, sin espacios adicionales.
concisos.
Otros criterios editoriales
Primer archivo: consta de una sola página (es importantes
conocido como archivo de metadatos y de-
berá subirse a la plataforma de Open Journal Resultados reportados: se ha de proveer
System. información de la magnitud de los efectos
Debe contener el título del manuscrito en es- (e.g., beta, efectos del tamaño y grados de
pañol e inglés, nombre de las/los autoras(es), libertad), así como de la probabilidad de todos
y adscripción institucional. En la parte inferior los resultados significativos (e.g., p < .05); los
se debe incluir el nombre del autor a quien se resultados no significativos se deben indicar
dirigirá cualquier correspondencia, número con siglas (NS).
telefónico, correo electrónico y domicilio com-
pleto. Debe incorporar también la fecha de Tablas y figuras: las tablas deben ser
envío del manuscrito, ya que se publicará jun- hechas con el procesador Word en el mismo
to con la fecha de dictamen/correcciones y la manuscrito y no deben ser tablas insertadas
de aceptación definitiva. Los agradecimientos, que no permitan la edición. Tanto las tablas
información de financiamientos o cualquier como las figuras deben ir acompañadas de
su respectiva leyenda y ser completamente indicado en la sección “Suscripciones” de este
comprensibles de manera independiente del ejemplar de la revista o en la página web.
texto. Cada tabla y figura debe ser numerada
con números arábigos secuencialmente. Carta de presentación: además de los
Las tablas deben seguir el formato APA y no archivos subidos en la plataforma de Open
editarse como aparecen en la revista impresa. Journal System, se debe subir una carta
de presentación (véase modelo en este
Referencias: las lista de referencias se deben ejemplar) o dirigirla al Editor General, al correo:
incluir en hoja aparte y al finalizar el texto. editorrmip@revistamexicanadeinvestigacion
enpsicologia.com. Por otra parte, las autoras
Revisión del manuscrito: toda la información o autores pueden sugerir revisoras(es) de
que permita identificar a los autores debe su trabajo, al igual que señalar a quiénes no
eliminarse del texto porque todos los se debería enviar por conflicto de intereses.
manuscritos son enviados a revisión ciega Esta información se utilizará a discreción de
por pares (doble ciego) a, por lo menos, dos los editores. La carta debe incluir nombre
dictaminadoras(es). completo, grado de estudios, adscripción,
domicilio y correo electrónico de las personas
Pies de página: no se aceptan pies de página. sugeridas para la revisión.

Estilo: todos los manuscritos aceptados son Calendario de envíos


enviados a corrección de estilo. y fechas de publicación

Permisos: debe anexarse una carta que Los manuscritos sometidos para el Sistema
otorgue el permiso para reproducir figuras, de Contribuciones Originales se publican
imágenes o párrafos extensos tomados exclusivamente en el mes de junio de cada
de otras fuentes, en caso de incluirlos su año. Las Monografías recibidas por propuesta
manuscrito. libre o por invitación se publican también
en ese mes. Por lo tanto, es recomendable el
Correcciones: se espera que las correcciones envío de manuscritos durante el transcurso
solicitadas se regresen al Editor General en de los meses posteriores a junio de cada año
el tiempo señalado en la carta de dictamen. y hasta el mes de febrero del año en el que se
Las/los autoras(es) son responsables de espera publicar.
cubrir los gastos ocasionados por cambios o
correcciones adicionales a los solicitados en Aclaración importante
el manuscrito original y que no sean debidos
a errores de la RMIP. El Editor General puede Los manuscritos recibidos serán revisados por
cancelar tales cargos, en algunos casos. cumplimiento de los requerimientos de forma-
to y de la carta de presentación. De no cumplir
Separatas: los/las autores(as) de manuscritos con estos requisitos, el manuscrito será regre-
no reciben separatas o sobretiros, ya que la sado a las/los autoras(es), quienes recibirán un
revista es de acceso libre. Sin embargo, si correo, el cual indica que sigan estrictamente
desean un ejemplar impreso de la revista, por el Manual de Publicaciones de la APA (2010,
ejemplo, del número donde se publicó su Editorial El Manual Moderno) y vuelvan a
manuscrito, deben realizar el procedimiento someter su manuscrito. Se recomienda a las
autoras y a los autores que copien la Guía para Se considera un artículo-objetivo todo manus-
Comprobar el Cumplimiento de Requisitos crito:
para Envío de Manuscritos y la completen
antes de enviar su manuscrito. La Guía está a) De investigación empírica, cuyo(a) autor(a)
disponible en este ejemplar. juzgue que requiere de una amplia discu-
sión, por sus alcances conceptuales y/o
CONTACTO: en caso de así requerirlo, los auto- metodológicos y que no tiene cabida en
res pueden contactar a: Dr. Pedro Solís-Cámara otras revistas por su extensión.
R., Editor General de la Revista Mexicana de b) Que represente una propuesta teórica signi-
Investigación en Psicología. En el correo elec- ficativa, o que sistematice el conocimiento o
trónico mencionado antes o en la siguiente modelos preexistentes.
dirección: Centro Universitario de la Ciénega. c) Que realice una síntesis crítica o una inter-
Universidad de Guadalajara, Av. Universidad pretación de otras aportaciones teóricas o
#1115 Col. Linda Vista. 47820 Ocotlán, Jalisco, experimentales, incluyendo aquellas dirigi-
México. das exclusivamente a métodos, técnicas y
estrategias.
INSTRUCCIONES PARA d) Que contradice aspectos que se consideran
ya bien fundamentados en la teoría o inves-
AUTORES DEL SISTEMA DE tigación actuales.
COMENTARIOS ABIERTOS e) Que tiene importantes consecuencias
transdisciplinarias.
POR COLEGAS
Edición: toda la terminología debe ser defini-
da o aclarada para asegurar la comunicación
entre autores(as), comentaristas y lectores(as).
Las y los autores que deseen publicar su Nos reservamos el derecho de editar los
manuscrito en el número junio-diciembre del manuscritos, pero las/los autoras(es) de un
Sistema de Comentarios Abiertos por Colegas artículo-objetivo aprobado recibirán el ma-
deberán considerar los requerimientos parti- nuscrito editado previo a su publicación para
culares por tipo de manuscrito. ser revisado. Tal revisión debe realizarse en un
periodo no mayor a tres días.
Artículo-objetivo (target-paper): La Revis-
ta Mexicana de Investigación en Psicología Estilo y formato del artículo-objetivo:
(RMIP) invitará a colegas a publicar manuscri-
tos para ser comentados (artículo-objetivo), 1.- El contenido de los manuscritos ha de
pero también considerará autopropuestas, seguir el formato de la American Psycho-
siempre que cumplan con rigor conceptual logical Association (APA, 6ta ed., 2010), pu-
y metodológico, redacción clara y sigan el blicado en español como Manual de Publi-
formato APA. No se aceptan propuestas que caciones de la APA (3era. ed., 2010, Editorial
hayan sido publicadas, aun parcialmente, en El Manual Moderno).
otras revistas o libros; al enviar un manuscri- 2.- Las figuras pueden enviarse en formato EPS,
to, el/la autor(a) acepta implícitamente esta GIF, JPG o TIFF.
restricción. Todos los manuscritos son dictami- 3.- Las tablas y figuras deben ubicarse en el
nados y enviados a corrección de estilo. lugar específico que el/la autor(a) lo consi-
dere conveniente, con su respectiva nota o numeradas. Los anexos, en caso de ser nece-
leyenda. sarios, deben agruparse y colocarse en una
4.- El manuscrito no ha de exceder 30 páginas página después de las referencias.
tamaño carta.
5.- El manuscrito debe incluir también el Proceso editorial: los artículos-objetivo
siguiente formato y en el orden que se serán enviados sólo a dictaminadores(as)
señala: del manuscrito. Una vez que el proceso
para dictaminar, corregir y aceptar haya ter-
Primera página: título del artículo-objetivo minado, el artículo-objetivo será accesible
en español y en inglés, y un título para in- a potenciales comentaristas. Los artículos
dexar. No incluir nombres de autores(as). de comentario también se enviarán a dic-
taminar.
Segunda página: para cada autor(a):
nombre completo, adscripción institucional, De manera atenta, queremos resaltar que el
dirección postal, correo electrónico, página calendario para coordinar la revisión de los ar-
web propia (si la tiene). Los agradecimien- tículos-objetivo, los comentarios y la respuesta
tos, información de financiamientos o cual- de las/los autoras(es) es un proceso sumamen-
quier otro crédito o reconocimiento deben te complejo y requiere que los artículos que se
insertarse al final de la página. sometan sean cuidadosamente revisados por
las o los autores antes de su envío.
Tercera y cuarta páginas: resumen y
abstract, con cinco palabras claves o ke-
ywords, respectivamente. Se requiere que la
Instrucciones específicas
extensión sea de 300 palabras por resumen, para autores(as) de
porque éste será enviado a revisión, previo
a la aceptación del manuscrito, y a comen-
artículos-comentario
taristas potenciales, una vez aceptado para (comment-paper)
publicación.

Quinta página en adelante: título del


artículo-objetivo y contenido o desarrollo La Revista Mexicana de Investigación en Psico-
del artículo. El texto debe incluir encabeza- logía invitará a colegas a comentar artículos-
dos. Posteriormente se deberán numerar los objetivo.
encabezados, esto para facilitar la referencia
a secciones del texto que sean discutidas Estilo y formato de artículos-comentario
por las/los comentaristas, permitiendo ubi-
car a qué sección se refieren los argumentos 1.- El contenido de los manuscritos ha de
o comentarios. seguir el formato de la American Psycho-
logical Association (APA, 6ta ed., 2010), pu-
Referencias: se recomienda no incluir pies blicado en español como Manual de Publi-
de página, pero si son indispensables, se caciones de la APA (3era. ed., 2010, Editorial
sugiere reducirlos al mínimo, numerarlos de El Manual Moderno).
manera consecutiva en el texto e insertarlos 2.- Las figuras pueden enviarse en formato EPS,
al final, antes de las referencias, como notas GIF, JPG, o TIFF.
3.- Las tablas y figuras deben ubicarse en el lu- 2.- El autor o autora del artículo-objetivo no po-
gar específico que el autor lo considere con- drá alterar el documento enviado una vez ini-
veniente, con su respectiva nota o leyenda. ciado el proceso de comentarios, sólo podrá
4.- El manuscrito debe tener una extensión contestar los comentarios en su respuesta.
máxima de 15 páginas tamaño carta, sin 3.- Se espera que las/los comentaristas ofrez-
incluir las referencias. Para considerar artícu- can una perspectiva crítica, fundamentada,
los de mayor extensión se deberá justificar alejada de énfasis personal y de minusvalía
el motivo del exceso de páginas. a las autoras o autores.
5.- El artículo-comentario debe incluir también 4.- Se espera también que las/los comentaris-
el siguiente formato y en el orden que se tas presenten todo el material pertinente
señala: para sustentar sus argumentos; esto incluye
datos, tablas y figuras, de ser necesarios.
Primera página: en el extremo superior Nos reservamos el derecho de editar el
izquierdo incluir el nombre de cada autor contenido de un manuscrito o rechazarlo,
del artículo-objetivo (no se requiere mayor en caso tal de que se repita contenido del
información que los nombres). A continua- artículo objetivo o haya redundancia.
ción, centrar el título del artículo-comenta- 5.- Se acepta que el estilo de todos los artícu-
rio, en español y en inglés. Este título debe los sometidos a la RMIP pueda ser editado.
reflejar la característica distintiva del argu- Sin embargo, cuando un artículo-comenta-
mento esgrimido en el texto. En la parte rio sufre correcciones importantes, se envía
inferior izquierda, agregar un título breve una copia editada a las/los comentaristas de
adecuado para los sistemas de indexación. dicho manuscrito. Los artículos-comentario
debido a que son objeto de arbitraje, no se
Segunda página: para cada autor(a): puede garantizar su publicación.
nombre completo, adscripción institucional, 6.- Si la revisión editorial acepta un artículo-
dirección postal, correo electrónico, página comentario, éste se publicará con el
web propia (si la tiene). artículo-objetivo junto con la respuesta de
las autoras o autores; si se solicitan correc-
Tercera página: debe contener un resumen ciones, éstas deberán recibirse en tiempo y
y un abstract, con cinco palabras claves o forma para garantizar su publicación.
keywords, respectivamente. La extensión
máxima aceptada es de 100 palabras por
resumen.
Instrucciones específicas
para autores(as) del
Cuarta página en adelante: título del
artículo-comentario y contenido.
Artículo-Respuesta
(Response-paper)
Referencias: igual que para los artículos-
objetivo.

Proceso editorial: Estilo y formato para el artículo-respuesta

1.- Esperamos recibir los comentarios dos me- 1.- El contenido de los manuscritos debe
ses después de recibido el artículo-objetivo. seguir el formato de la American Psycho-
logical Association (APA, 6ta ed., 2010), pu- mes después de ser enviados los artículos-
blicado en español como Manual de Publi- comentario a las(los) autoras(es).
caciones de la APA (3era. ed., 2010, Editorial 2.- Todos los comentarios a un artículo-objeti-
El Manual Moderno). vo podrán ser revisados por autores(as), por
2.- Las figuras pueden enviarse en formato EPS, el Consejo Editorial y por el Editor General.
GIF, JPG, o TIFF. Ningún comentario será publicado sin esta
3.- Las tablas y figuras deben aparecer ubica- revisión.
das en el lugar específico que el autor lo 3.- Se recomienda a autores(as) de artículos-
considere conveniente, con su respectiva objetivo esperar el cumplimiento del mes
nota o leyenda. límite para recepción de artículos-comen-
4.- La respuesta no debe exceder la extensión tario, antes de editar de manera definiti-
del artículo-objetivo. va su artículo-respuesta. Esto porque el
6.- La respuesta debe incluir también el si- último día podría recibirse un comentario
guiente formato y en el orden que se señala: que podría alterar la perspectiva de su
respuesta.
Primera página: título del artículo-respues- 4.- Se invita a que las(los) autoras(es) de un
ta en español y en inglés, y un título para artículo-respuesta señalen al Editor General
indexar. Nombre de autor(a). las razones por las cuales cierto artículo-
comentario no debiera aceptarse. Sin
Segunda página: debe contener un resu- embargo, la decisión final la tomará el Editor
men y un abstract, con cinco palabras claves General.
o keywords,respectivamente. La extensión 5.- Una última sugerencia para autores(as)
máxima aceptada es de 100 palabras por de un artículo-respuesta es la de promo-
resumen. ver el intercambio académico. Se trata de
responder a las diferentes perspectivas y
Tercera página en adelante: título del críticas a la propuesta hecha en el artículo-
artículo-respuesta y contenido o desarrollo objetivo, pero idealmente de una manera
del tema. integrada en cuanto a lo común que pue-
dan tener algunos comentarios. Sin em-
Referencias: igual que para los otros tipos bargo, es importante también mencionar
de manuscritos. en su artículo-respuesta a cada uno de los
artículos-comentario, por lo menos una sola
Proceso editorial: ocasión y aunque, a su juicio parezca trivial,
el contenido de alguno de ellos.
1.- El tiempo establecido para la recepción
de la respuesta a los comentarios es de un
Guía para comprobar el cumplimiento
de requisitos de manuscritos
Checklist for manuscript submission

Nota para autores: Sugerimos envíen los nombres de los autores reducidos, ya
que no se acostumbra utilizar dobles nombres propios, ni
Se sugiere someter manuscritos con una extensión máxima dobles apellidos. De otra manera es probable que nosotros
de 30 páginas tamaño carta. La consideración de manuscri- eliminemos el segundo apellido de todos los autores. Esto
tos con mayor longitud puede argumentarse en una carta porque los sistemas de indexación confunden el primer ape-
que deberá enviarse al Editor General: editorrmip@revista- llido como un segundo o tercer nombre de la persona.
mexicanadeinvestigacionenpsicologia.com Sí   No

Los autores tienen tres opciones para incluir los datos que Se incluye carta de presentación.
se piden más abajo: subir o cargar en la plataforma OJS una Sí   No
carta, pero en la sección de Metadatos para que los reviso-
res NO tengan acceso a ella; redactar todos los datos reque- El manuscrito debe incluir el título sin nombres de auto­
ridos en la sección de perfil de los autores; o enviar la carta res(as). Cualquier manuscrito podrá ser editado, por ejemplo,
por correo al Editor. si presenta indicios de quiénes son los autores, o prejuicio de
género en el lenguaje.
Los datos deben contener el título del manuscrito en espa- Sí   No
ñol e inglés, nombre de las/los autoras(es), GRADOS obte-
nidos, correos de todos y su adscripción institucional. En la Toda la información que permita identificar a los autores debe
parte inferior se debe incluir el nombre del autor a quien eliminarse del texto porque todos los manuscritos son envia-
se dirigirá cualquier correspondencia, número telefónico, dos a revisión ciega por pares (doble ciego) a, por lo menos,
correo electrónico y domicilio completo. Debe agregarse dos dictaminadoras/es. 
también la fecha de envío del manuscrito, ya que se publi- Sí   No
cará junto con la fecha de dictamen/correcciones y la de
aceptación definitiva. Los agradecimientos, información de Debe contener el resumen en español y en inglés (abstract)
financiamientos o cualquier otro crédito o reconocimiento con el título en inglés, con una extensión máxima de 150 pa-
también deben insertarse al final de la primera página. Es- labras cada uno, incluyendo seis palabras claves (keywords).
tos datos NO deben ir en el manuscrito. Sí   No

Requisitos de los manuscritos: Todo el texto está justificado y con márgenes de 2.5 cm.
Sí   No
Los encabezados centrados, sin negritas y con la primera le- Las Tablas se deben escribir en el texto (en el lugar preferido
tra mayúscula. por los autores, pero no al final) con Word, es decir, las rayas y
Sí   No los datos se teclean no se pegan de otro programa. Además,
deben seguir el formato de la APA, esto es, sin sombreados
El primer encabezado del texto es el de Introducción. en las columnas y las filas. Las tablas tampoco deben ser cua-
Sí   No dros insertados de otros programas.
Sí   No   No aplica
Los subencabezados o subtítulos en el margen izquierdo con
primera letra mayúscula y en cursivas. Tanto las Tablas como las Figuras deben ir acompañadas de
Sí   No   No aplica su respectiva leyenda y ser completamente comprensibles
de manera independiente del texto. Cada Tabla y Figura debe
Todo el texto está a doble espacio, incluyendo Tablas y Lista ser numerada con números arábigos secuencialmente. Las
de Referencias. Tablas deben seguir el formato APA y no editarse como apa-
Sí   No recen en la revista impresa.
Sí   No   No aplica
El primer párrafo después de un título o subtítulo debe ir
sin sangría. Todos los otros párrafos deben llevar sangría de Todos los símbolos estadísticos están en cursivas (por ejem-
1 cm. plo: F).
Sí   No   No aplica Sí   No   No aplica

No se dejan más de dos espacios a lo largo de todo el texto, Se utilizan paréntesis para fórmulas estadísticas.
ya sea entre párrafos, encabezados, o subencabezados. Sí   No   No aplica
Sí   No
Se ha de proveer información de la magnitud de los efec-
No se deja más de un espacio entre palabras. tos (e.g., beta, efectos del tamaño, intervalos de confianza
Sí   No y grados de libertad), así como de la probabilidad de todos
los resultados significativos (e.g., p < .05); los resultados no
Después de la Sección de Procedimiento incluye conside- significativos se deben indicar con siglas (NS).
raciones éticas (subtítulo de Aspectos o Consideraciones Sí   No   No aplica
éticas). Asegurar la no violación de los mismos de acuerdo,
por lo menos al Código Ético de Psicología de su institución, Se tienen los archivos directos de Excel con las gráficas del
o publicado por la Sociedad Mexicana de Psicología, u otra manuscrito que, si es aceptado, se les solicitarán.
Sociedad reconocida (APA). Sí   No   No aplica
Sí   No   No aplica
Se tienen las figuras o fotografías originales que, al ser acep-
Después del párrafo anterior debe incluirse el subtítulo de tado el manuscrito, se enviarán.
Análisis estadísticos, o Análisis de datos. Sí   No   No aplica
Sí   No   No aplica
Todas las citas con dos autores van completas siempre, aun-
Tablas y figuras insertadas en el lugar que les corresponde que se repitan a lo largo del texto. Cuando son más autores,
en páginas continuas, sin espacios adicionales. las citas subsecuentes a la primera deben citarse en el texto
Sí   No   No aplica como, por ejemplo: Beristain y colegas (2010), o Beristain et
al. (2010). Sí la cita va en paréntesis, debe citarse como el En la Lista de Referencias, las referencias con dos o más au-
siguiente ejemplo: (Beristain et al., 2010). tores y/o editores sí llevan una coma antes del símbolo “&”.
Sí   No   No aplica Sí   No

Todas las citas y referencias incluyen el símbolo “&” en lugar Todas las referencias citadas en el texto y los años se inclu-
de “y”. Pero cuando las citas forman parte del texto utilizan yen en la lista de referencias y viceversa, comprobando que
“y”. los años coincidan.
Sí   No    Sí   No

Las citas en el texto con más de dos autores llevan una coma La lista de referencias se debe incluir en hoja aparte y al fi-
antes del símbolo “&”, cuando van en paréntesis, únicamente. nalizar el texto.
Sí   No   No aplica Sí   No

Si se incluyen paréntesis dentro de otros, entonces se usan La lista de referencias incluye los doi de todos los artículos. Si
corchetes, no paréntesis; por ejemplo, (este autor los de- no se encuentran algunos, dejarlos así.
nominó diferente en sus primeros trabajos [Ramírez, 1970 Sí   No
y 1978] y más adelante los modificó [Ramírez, 1990]).
Sí   No   No aplica NOTA IMPORTANTE: SI ESTOS REQUERIMIENTOS NO SE CUM-
PLEN, EL MANUSCRITO SERÁ RECHAZADO SIN PASAR A REVI-
SIÓN ACADÉMICA.
Carta de presentación

(LUGAR Y FECHA)

Dr. Pedro Solís-Cámara R., Editor General

Revista Mexicana de Investigación en Psicología (RMIP)

Presente.

Sometemos a consideración de la RMIP el manuscrito: ______________________________, el


cual proponemos para la sección de:____________________________________________, de la
RMIP.

Se trata de un estudio realizado con apego a las normas éticas y formato estipulados por la Ame-
rican Psychological Association (APA). Declaramos, las/los autoras(es), que el manuscrito no ha sido
publicado, que es original y que la autoría del mismo corresponde a la o las persona(s) incluida(s),
quien(es) ha(n) dado su aprobación para su publicación en la RMIP; y que los datos que apoyan los
resultados de la investigación se conservarán por cinco años después de la publicación para ga-
rantizar que otros profesionales puedan corroborar los argumentos que se sostienen en el trabajo
escrito, siempre y cuando al hacerlo no se violen derechos legales o éticos.

Además, ratificamos que este manuscrito no se ha sometido de manera simultánea a otra re-
vista o libro. Y, en el caso de que el manuscrito sea aceptado para su publicación, autorizamos a la
RMIP la reproducción del manuscrito en cualquier medio y formato, físico o electrónico, incluyendo
internet; sin embargo, las/los autoras(es) podrán reproducir sus artículos con fines académicos, de
divulgación o enseñanza.

Atentamente

(NOMBRES COMPLETOS, DOMICILIOS Y FIRMAS DE TODOS LOS AUTORES)


Suscripciones

La RMIP es de acceso libre, por lo que los artí- COSTOS INTERNACIONALES


culos pueden ser descargados gratuitamente
de la página web de la revista: http://www. Para países que NO sean México, la suscripción
revistamexicanadeinvestigacionenpsicologia. anual por un año (dos ejemplares) requiere
com/ depositar en cualquier moneda el equivalente
a $90.00 dólares americanos. Para la suscrip-
Sin embargo, las personas interesadas en reci- ción anual por dos años (cuatro ejemplares),
bir la versión impresa en papel deberán pagar depositar $160.00 dólares.
los costos de envío vía mensajería.
Depositar la cantidad solicitada a nombre de la
Para recibir la revista es necesario escanear Universidad de Guadalajara, en la cuenta del
su comprobante del depósito y enviar a: Dra. banco BBVA-Bancomer número: 0445780845;
Yolanda Medina Cuevas, Editora Asociada, Sucursal 0687. Domicilio: Av. Manuel Acuña
al correo electrónico: editasociada@revista- No. 2937-1, Col. Providencia. Código Postal
mexicanadeinvestigacionenpsicologia.com. 44657. Guadalajara, Jalisco, México.
Cualquier duda al respecto deberá enviarse a
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