Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Juarroz (Sobre Él)
Juarroz (Sobre Él)
By Mark Mosher
North Carolina Central University
disciplinas que han ocupado ámbitos diametralmente opuestos: la física, sostenida por las
En este estudio proponemos demostrar que los postulados científicos permean toda la
teoría de cuerdas. Antes de proseguir, empero, será preciso exponer un breve resumen de
Frente a los espectaculares hallazgos científicos liderados por Albert Einstien a partir
de las primeras décadas del siglo XX, se estableció una “nueva física”. El flujo
60
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
que enfoca la física de las partículas subatómicas, y por ende, de las dimensiones
Para visualizar las interacciones subatómicas, las que se realizan a escalas tan diminutas,
con otras, dichas partículas pueden liberar energía en forma de fotones (partículas de luz)
y generar otras partículas o antipartículas (partículas idénticas a sus “gemelos” pero con
una carga eléctrica opuesta). Siguiendo estas ideas, Brian Greene nos ofrece la siguiente
enough it can momentarily cause, for instance, an electron and its antimatter companion
the positron to erupt into existence, even if the region was initially empty” (120)!
Interpretación similar externa Juarroz: “Cada cosa lleva en sí su antítesis. Sin ella no
61
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
del poeta. “Partículas de todo caen sobre nosotros, / partículas extraviadas, partículas
previstas” (IX-48).
sus contrapartes científicas: “acceder a esa zona oculta / donde el aire es tan fino / que en
Fragmentos verticales el poeta nos revela el porqué de penetrarse en esta región: “Pensar
y amar nos llevan siempre hacia otra parte donde ya no sabemos si pensamos y amamos
o si accedemos a una zona donde no caben ya esas dimensiones, sino otra más alta y
penetrante, que otorga al hombre una visión y una experiencia más plenas de la realidad”
(“Casi razón”, 17). De hecho, la verdadera poesía está estrechamente conectada a “un
espacio fundante y nuclear” (Ibid., 8) y “un espacio casi inexistente y que apenas se
puede llamar espacio. Es en una dimensión como ésa donde se yergue la última
Otra corriente que incide en su obra es la teoría de la relatividad formulada en 1915 por
Einstein. En ella, se propone que la luz se propaga a una velocidad fija para cualquier
observador aunque éste se mueva con respecto a otro. Einstein explicó que este inusitado
fenómeno es universal debido a que el fluir del tiempo es “relativo” para cada
tejido flexible; puede moverse en diferentes direcciones como el espacio. En este nuevo
esquema, el tiempo no está separado del espacio, sino que ambos se conciben como un
62
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
tiempo se dilata (los relojes avanzan más despacio) sino también el espacio se comprime
(las reglas son más cortas). Estas distorsiones se han confirmado empíricamente a través
de experimentos con partículas inestables, las cuales tienden a decaer rápidamente bajo
condiciones normales. Por lo contrario, registran tazas de decaimiento mucho más lentas
en un acelerador de partículas.
Otro experimento que evidencia el tiempo curvo se ha hecho con relojes atómicos. Ya
que miden el transcurso del tiempo con una precisión de unos millonésimos de un
segundo por año, el reloj que viaja en un avión a una altitud de 10.000 metros se atrasa
con respecto a otro reloj que permanece en la tierra. Lo mismo ocurre en un experimento
mental (hipotético) con un astronauta que viaja por el espacio durante varios meses. A
más despacio que sus compañeros terrestres. Cuando el viajero vuelve a la Tierra
experimenta una asombrosa distorsión temporal al descubrir que han transcurrido unos
dos mil años durante su ausencia. Basta recordar a Charleton Heston en Planet of the
Apes.
Es por eso que Juarroz busca unos “maestros que le enseñen / . . . / a dialogar en
cuatro dimensiones” (IV-15). En un diálogo con Guillermo Boido vemos cómo el poeta
63
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
No podemos olvidar que la historia es una proyección de tiempo lineal, que la cronología
es sucesividad. En cambio, la poesía no lo es; juega con otras dimensiones del tiempo.
Trata, por ejemplo, de capturar, o acceder a una relación espaciotemporal que tal vez no
esté tan lejos de ciertas ideas análogas en el plano científico (1980: 116).
Es, más bien, un vehículo que trasciende la experiencia cotidiana dándole apenas un
atisbo de las dimensiones desconocidas. En una conversación con Luis Bravo, Juarroz
expresa: “El poema actúa como un tiempo de otra dimensión, un tiempo vertical”. En
otra conversación, Juarroz afirma que “el poema se niega a contar . . . es la puerta a los
números imposibles, a la cuarta dimensión –que no es sino otra forma de decir ‘todas las
La elasticidad del tiempo como condición legítima del universo, la evidencia Juarroz
en los siguientes poemas: “A veces nos parece / que adelante está el signo de la vida / y
atrás el de la muerte. / Pero hay días en que el orden se invierte. / Y hay todavía otros días
en que llevamos adelante y atrás / la misma señal” (VII-7), “La realidad es un tiempo
que la materia misma distorsiona su superficie. Es como un trampolín que se hunde por
el peso de una bola de boliche. El físico alemán pudo teorizar que la distribución de la
desde varias fuentes, creando así, una topografía cósmica muy irregular y dinámica.
Partiendo de este concepto, Juarroz logra una novedosa síntesis entre la fuerza
gravitatoria y la poesía: “La poesía tiene un peso propio, como todas las cosas sobre la
64
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
tierra. No siempre es fácil percibirlo. Pero la ley de gravedad que actúa sobre la poesía
no involucra sólo una fuerza hacia abajo, sino también una atracción hacia arriba. A esto
Ahora bien, los físicos se enfrentan al dilema de cómo derivar una teoría que concilie
las dos corrientes anteriormente descritas. Por un lado, la mecánica cuántica mide las
los científicos busquen compatibilizar esta enorme disparidad mediante una teoría
unificadora. Su búsqueda los conduce hacia dos fenómenos cuya naturaleza incorpora
expandiéndose de una manera pareja en todas las direcciones como un globo que se infla.
Este modelo inflacionario se da a conocer en el Big Bang, el cual manifiesta que toda la
materia y energía del universo embriónico están concentradas en una “singularidad” −un
así todas las galaxias y sus componentes. Hoy en día existe amplia evidencia que sugiere
que el cosmos sigue expandiéndose. Esto permite a los cosmólogos medir y calcular
Tierra.
65
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
de comenzar con una explosión hay una implosión en que una estrella “se colapsa”
frontera entre una región donde las leyes de la física aun son vigentes, y otra en que se
paraliza el tiempo y se evapora el espacio. Más allá del horizonte hay una singularidad
donde el espaciotiempo está tan distorsionado que nada puede escapar de su superficie, ni
siquiera la luz. Un agujero negro, por tanto, se caracteriza por ser una especie de
“aspiradora galáctica” que concentra una cantidad enorme de materia en un espacio muy
reducido. A pesar de que los agujeros negros son invisibles, su existencia se infiere
teóricamente. Los astrónomos han observado que a veces la trayectoria de la luz está
plausible por esta distorsión queda en la existencia de un cuerpo como un agujero negro
abarcan todas las fuerzas de la mecánica cuántica y la relatividad general, los agujeros
negros les proporcionan a los astrónomos una oportunidad única: investigar la conexión
macroscópica.
El poeta se vale del concepto del agujero negro en su afán de explorar los múltiples
Desarrollar algo es perderlo. Hay que encontrar la forma de que algo crezca o decrezca
hacia sí mismo. Por eso resulta subyugante la idea de implosión en la física. Sólo una
explosión invertida por ilimitado aumento de densidad, parece implicar la presencia del
núcleo esencial de una cosa. Aunque sea en el vacío. La noción de afuera y su
connotación de pérdida (“Casi razón”, 53).
66
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
Theodor Kaluza propone que en el universo existe una quinta dimensión, y luego en 1926
Oskar Klein teoriza que tal dimensión extra está “enrollada” e invisible debido a su
tamaño infinitesimal. Pese al interés inicial, se descarta la teoría Kaluza-Klein dado que
los experimentos realizados con el electrón dieron resultados incompatibles con las
predicciones teóricas.
teoría de cuerdas. Para que sea consistente con todas las fórmulas matemáticas, esta
teoría debe incorporar no sólo seis dimensiones adicionales sino también el gravitón, la
partícula elemental asociada con la gravedad.² Debido a esta insólita noción, los
observamos y seis que se esquivan de toda tentativa de detección por “un mecanismo de
Juan Malpartida se refiere a los poemas de Juarroz como “espacios que se desdoblan
hacia adentro” (46). Frente a estas dimensiones, Juarroz se sitúa: “Si la vida no nos
contuviera, / seguramente descubriríamos otras dimensiones / por las que toda cosa pasa,
/ tal vez sus descartados infinitos” (VII-44), “la geometría del ser no tiene espacio” (IV-
52), “Caer de lleno en lleno, / como un antipájaro que enrola en su anticaída / los
espacios compactos donde no se cae” (IV-64), “Un espacio / no puede borrar a otro, /
pero puede arrinconarlo. / También los espacios ocupan un lugar, / en otra dimensión que
es más que espacio” (XI-6), “Hay ángulos que no pueden cerrarse / . . . / Pero no hay
67
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
instrumento que pueda medirlos, / ni hay geometría que los abarque. / Ellos responden a
A diferencia de concebir las partículas como puntos sin dimensión, Patricio Díaz
Pasos las visualiza como “objetos unidimensionales extendidos” que parecen unos
Según Greene “a typical string loop is about Planck length, about a hundred billion
billion (10²º) times smaller than the atomic nucleus” (1999: 141).4 Para el poeta
argentino las cuerdas pueden concebirse como “filamentos infinitesimales” (XI-30) o “las
fibras que entretejen / el cuerpo del vacío” (XI-13). Pero sobre todo el equivalente
juarroziano de una cuerda cuántica es “un hilo con calibre de nada” (II-67) o “hilos poco
menos que invisibles” (“Casi ficción”, Introducción). Al igual que sus contrapartes
científicas, Juarroz intuye que los hilos llevan una fuerza intrínseca y unificadora. “Me
interesa el hilo invisible y profundo” —dice el poeta— “que une la poesía esencial de
todas partes. Quisiera poder hallar y revelar el espesor y la materia de ese hilo” (86).
Con frecuencia vemos los hilos poéticos de Juarroz en un estado de limbo, entre
vida” (VI-52), “Son tantos los hilos ausentes / en toda urdimbre o toda trama, / que con
ellos alcanza / en algún otro espacio / para un tejido completamente diferente” (XI-12).
Para Noelia Sueiro el tejido poético de Juarroz se caracteriza por “infinitos intersticios
abiertos, y un sutil entramado de ligeras hebras que enlazan todas las cosas”. El carácter
ambiguo y borroso de los hilos se destaca en Décimotercera poesía vertical: “La nada
68
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
Greene explica:
oscilatoria” o la intensidad vibratoria de cada cuerda. Se cree que una cuerda puede dar
cuerda de un piano. Por eso no es difícil concebir las cuerdas vibrantes en términos
particles are actually different ‘notes’ on a fundamental string. The universe —being
Roberto Juarroz exclama en torno a esta visión: “He aprendido que toda construcción
es una música” (VI-31), “Callar puede ser una música, / una melodía diferente, / que se
borda con hilos de ausencia / . . . / O callar puede ser tal vez / la música del vacío” (VI-
20), “Sólo vemos que aquí forman un solo filamento / el hilo que une toda la música del
En 1955 el físico John Wheeler acuñó el término “espuma cuántica” para describir la
69
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
actividad frenética del mundo subatómico. Para Juarroz “la música oculta en la espuma”
(IX-48) y “las hebras de espuma hacen la espuma” (IV-47). Cabe añadir que esta
hay ondas gravitatorias dispersas por el espacio. Ellas bien podrían dejar unas pistas
gravitacionales generadas por choques a gran escala entre agujeros negros, binarios, etc.
cosmológica del universo desde la génesis hasta la actualidad, que a su vez, confirme la
teoría del Big Bang. Y de hecho, varias teorías predicen la existencia de “cuerdas
cósmicas”, reliquias que hayan sobrevivido desde la etapa inicial de la creación de los
cielos. Según Michio Kaku, profesor de la física teórica en City University of New York:
“Cosmic strings may have a width thinner than an atomic nucleus, but their mass may be
stellar and they may extend for millions of light-years in space” (140). Asimismo,
Edward Witten, considerado el sucesor de Einstein, imagina: “There are all kinds of
possibilities, like literally seeing a string in a telescope if nature has chosen to be kind to
Parece que Juarroz se encamina hacia esta búsqueda: “El eco disponible que es la
(X-25), “Si has perdido tus ecos o tu origen, / los buscaremos, pero hacia adelante, / en el
templo final de los orígenes” (IV-8). Por ello, cabe preguntarse: ¿hemos llegado al
verdadero umbral donde se crean los constituyentes más irreducibles? Quizá las cuerdas
70
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
sean sólo otra manifestación dentro de una regresión infinita. ¿Es posible que el universo
universe may merely be one of the innumerable frothing bubbles on the surface of a vast
and turbulent cosmic ocean called the multiverse” (1999: 387). Sobre ello, Kaku cita:
“We believe that our world consists of all that we can see, unaware that there may be
entire universes right under our noses. Although another universe might be hovering just
inches above us, floating in the fourth dimension, it would appear to be invisible” (183).
igual que los físicos, indaga la posibilidad de revelar un mecanismo que vincule todos los
mundos:
Una y otra vez el panorama poético planteado por Juarroz consiste en “producir una
En los siguientes versos, “una brecha” alude a lo que los físicos llaman un wormhole
(agujero de gusano), una especie de túnel galáctico que posibilita un viaje casi
71
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
kilómetro de largo podría conectar la Tierra con la estrella Vega; un “two-way surface”
—especula el físico— “we can cross it in both directions, inward into the wormhole, and
back outward to the external Universe” (485). Thorne explica que para transportar los
objetos macroscópicos por un agujero de gusano hay que disponer de una “materia
exótica” que lo mantenga abierto mediante una fuerza gravitacional. En cambio, advierte
que la tecnología necesaria para obtener tal materia queda fuera de nuestro alcance. Por
ahora “demorar la brecha abierta” y viajar por un agujero de gusano como Dr. Eleanor
cuerdista argentino del Institute for Advanced Study en Princeton) es “un físico con alma
de poeta” (Escribano), Roberto Juarroz es sin duda un poeta con alma de físico. Su
época: la naturaleza escurridiza de cuerdas, ondas y partículas. Es una odisea vertical que
pretende explorar todos los planos de la realidad desde lo más entrañable del
micromundo hasta la vastedad de las galaxias. Al respecto, el poeta afirma que “La
72
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
poesía puede . . . abolir en un acto de amor la distancia entre el hombre y los objetos,
muerte” (1980: 155). Juarroz se despoja de lo superficial e impone “su desafío a las
normas y los estereotipos” (Ibid.). Vista así, su poesía no sólo borra las dicotomías entre
ciencia y poesía, sino también adquiere una dimensión espiritual, “una contemplación
casi religiosa” (Ibid., 154).5 Para los físicos como Einstein, lograr este nivel de lucidez
Notas
¹ Las citas de Poesía vertical se identifican con el nombre de la sección (i.e. “Casi
razón“) o el volumen en números romanos, seguido por el número de poema.
² El gravitón es una partícula cuya existencia es inferida por las ecuaciones matemáticas.
Posee una resonancia vibracional que desempeña un papel íntegro en la teoría de cuerdas.
Ya que no tiene masa, sus efectos se transmiten a la velocidad de la luz, tal como Einstein
postula en la teoría de la relatividad.
73
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
5
Sobre esta tendencia, véase los siguientes estudios: Francisco Rivera, “Roberto Juarroz o
el descenso a las profundidades”. Cuadernos Hispanoamericanos 140: 420 (1985): 91-
116; Guillermo Boido, “Roberto Juarroz”. (entrevista), Hispamérica 17 (1977): 47-59.
Obras citadas
Greene, Brian. The Elegant Universe. New York: W.W. Norton, 1999.
___. The Fabric of the Cosmos. New York: Alfred A. Knopf, 2004.
Hawking, Stephen W. “Chronology Protection: Making the World Safe for Historians.”
en The Future of Spacetime. Stephen Hawking et al. New York: W.W. Norton, 2002,
pp. 87-108.
Juarroz, Roberto. Poesía y creación: Diálogos con Guillermo Boido. Buenos Aires:
74
The South Carolina Modern Language Review Volume 7, Number 1
Margarit, Lucas. “Roberto Juarroz: La palabra en una casa de espejos”. Inti: Revista de
nº21.
Thorne, Kip S. Black Holes & Time Warps. New York: W.W. Norton, 1994.
75