La Escuela Secundaria Belín Sarmiento de Rawson, ciudad de San Juan, donde se
desea poner en marcha el proyecto de “Inclusión de alumnos con impedimentos visuales y asimilación de conocimientos lingüísticos y literarios”, pertenece a una clase social media-baja, con un caudal de alumnos que presentan serios problemas socio-económico y que, a su vez, son procedentes de familias que presentan situaciones de drogadicción, delincuencia o violencia intrafamiliar. Por las razones antes expuestas, el personal institucional, no cuenta con la ayuda ni con el apoyo de la comunidad para iniciar las mejoras pertinentes en el plano edilicio y educativo, pues los alumnos que concurren a mencionada institución, son enviados para cumplir una exigencia gubernamental o para cobrar un plan social, siendo abandonados a su suerte y descuidados en cuanto a su progreso educativo. Ante esta situación, queda claro que la educación no ocupa un lugar relevante en la vida de las familias y por esta razón no es priorizada ni valorada. Por otra parte, el establecimiento no cuenta con los recursos necesarios para ocuparse de los requerimientos mínimos de los alumnos, cuestión que se ve reflejada en el curso diario de las clases. Sin embargo, frente a esto, los docentes, capacitados e interesados en la educación eficaz y de calidad, intentan motivar a los alumnos, promoviendo el desarrollo intelectual, la inclusión de pares sin importar los condicionamientos y la interacción continua de estos con sus docentes. El equipo directivo expresa el desgano ante el intento vano de solicitar, en forma continua, la ayuda de autoridades o de la comunidad en general. Asimismo, aseguran haber citado a los padres, en reiteradas oportunidades, para que tomen cartas en el asunto y se integren a lucha por conseguir mejoras para el beneficio de sus hijos, pero ante la negativa o la falta de respuesta, se opta por el conformismo. Con el permiso de los directivos, el cuerpo docente organizará festivales y ferias institucionales, donde los alumnos mostrarán sus proyectos, trabajos y su desempeño artístico, con el fin de invitar a la comunidad para recaudar fondos y para demostrar a los padres lo que los chicos aprenden en la escuela. Lo recaudado será destinado a comprar un equipo de audio que permitirá la escucha de audiolibros, de proyectos e investigaciones que serán de gran ayuda para los alumnos no videntes y servirán de apoyo para el resto de sus compañeros. Además, se condicionarán las aulas reemplazando los vidrios de las ventanas rotas y se equipará a cada una con sistemas de calefacción, pues los chicos, no pueden aprender expuestos al frío y a los intensos cambios climáticos. Asimismo, se iniciará un expediente con el objeto de abrir una nueva plaza de cuarto año para brindar mayor atención a los chicos con impedimentos, considerando que un aula numerosa, con problemas de disciplina, no es un ambiente propicio para el desarrollo del aprendizaje. Con la inclusión de la comunidad en el hacer escolar, se espera motivar a la misma para que mejorar la institución y el futuro de todo el alumnado en general.