N.

O 421 • 8,90 €

ESPECIAL

EL CHORRO
Paraíso invernal de la
escalada
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 Nº 421

E D I TOR I A L CONTENIDO

La escalada en el Atlas 4 INICIOS, evolución y consolidación

de la escalada en El Chorro:
desde la primera vía que se abrió en los
del Patrimonio Inmaterial años 70, analizamos cuáles fueron los
momentos clave y los protagonistas que
«La escalada y sus vías deberían figurar en el Atlas del Patri- contribuyeron a que la zona se fuera
monio Inmaterial, por su historia y por todos los beneficios desarrollando hasta convertirse en una
que ha reportado y reportará al ser humano. Si el mollete de de las más importantes para la
escalada en roca del sur de Europa.
Antequera, el aceite de oliva, el flamenco o los espetos de
sardinas son dignos de esa calificación, ¿por qué no la esca-
lada?». Este interrogante, planteado por uno de los princi- 16 Incluimos entrevistas con
los pioneros que prendieron
la llama, como son Carlos Pérez,
pales colaboradores de este número, el malagueño Manuel
Gómez Trujillo, me llevó a acudir a san Google en busca de Miguel Moya, Manuel Gómez Trujillo y
Rafael Gamarro, todos ellos aperturistas
los requisitos que ha de tener un bien para ser incluido en de algunas de las primeras vías largas de
este pintoresco atlas humano (que, efectivamente, existe). El Chorro que todavía siguen en activo.
Según las Naciones Unidas, el Patrimonio Cultural Inmate-
rial lo constituyen los «usos, representaciones, expresiones,
conocimientos y técnicas que las comunidades, los grupos y
30 En los 80 y 90 El Chorro
eclosionó como un destino
imprescindible para la escalada deportiva
en algunos casos los individuos reconozcan como parte in- en España. Tras un texto introductorio
tegrante de su patrimonio cultural. Ha de ser transmitido de para situar la zona en su contexto históri-
generación en generación, recreado por las comunidades y co, revivimos esa época con los recuerdos
de sus protagonistas, que nos transmiten
grupos en función de su entorno, su interacción con la na-
en artículos o entrevistas, con: Antonio
turaleza y su historia, infundiéndoles un sentimiento de Gámez, Juanma García, Javier Morales,
identidad y continuidad y contribuyendo así a promover el Ana León y Bernabé Fernández.
respeto de la diversidad cultural y la creatividad humana»
(art 2.1. UNESCO: Convención para la Salvaguardia del Pa-
trimonio Inmaterial, París 2003).
52 Siglo XXI: ofrecemos una visión
coral de las tendencias actuales,
desde la proliferación de las vías largas
Parece irrebatible que la escalada cumple puntualmente equipadas (impulsadas por el Rally 12h) a
con la descripción de bien inmaterial, que promueve la los requipamientos y equipamientos de
interacción con la naturaleza y la creatividad humana. Qui- nuevos sectores. Entrevistamos a los loca-
les activos, analizamos las consecuencias
zá nosotros, los escaladores y escaladoras, somos conscien- de la remodelación del Caminito del Rey
tes de la importancia de nuestra historia y de los beneficios y la Asociación de Escaladores Andaluces
espirituales que acarrea este deporte (o filosofía de vida), (AAEE) nos transmite su visión de la con-
pero estamos fallando a la hora de comunicarlo al resto de flictiva regulación existente en El Chorro.
agentes sociales, que son finalmente los que dictan las nor-
mas. Todo esto viene porque nos introducimos en este nú-
mero en la historia de la escalada en el Paraje Natural del
62 De la mano de Pedro Soto y Pau-
lo Roxo conocemos también la
huella de la escalada clásica (con apertu-
Desfiladero de los Gaitanes, que actualmente se encuentra ras en autoprotección desde abajo) en es-
cercenada por unas prohibiciones que han barrido del tas paredes, minoritaria pero todavía viva.
mapa de la escalada muchas de sus vías históricas. Los argu-
mentos de sostenibilidad que respaldan estas prohibiciones
no parecen muy convincentes vista la permisividad con que
70 GUÍA PRÁCTICA: ofrecemos in-
formación actual de datos prácti-
cos y regulaciones, con una selección de
se mide a los miles de turistas que cada día transitan por el vías largas en las paredes Frontales, com-
pletada con croquis de cuatro sectores
remodelado Caminito del Rey, en este mismo desfiladero. deportivos (dos de ellos inéditos).
Desde esta modesta tribuna nos seguiremos esforzando en
defender el valor de nuestras “piedras preciosas” y su renta-
bilidad en el índice de felicidad humana. // Eva MARTOS. 80 MATERIAL PROBADO.

EDITA
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Colaboran en este número:
David Munilla, Manuel Gómez Trujillo,
Antonio Gámez, Carlos Pérez,
Ramón Enrique, Clemente González,
Rafael Gamarro, Miguel Moya, Ana León,
Juanma García, Bernabé Fernández,
Javier Morales, Rafael Fanega, Pedro Soto,
Paulo Roxo, Juan Hofer, Nicolás Rando,
Eva Kiselova, Sergio Bernabeu,
Tato Santiago y José Millán.
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EN PORTADA: Característica entrada del Primer Cañón
de El Chorro. Foto: David Munilla.

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DESNIVEL.COM I 3
 Las gargantas de roca que la línea de ferrocarril

sacó a la luz a su paso por el Desfiladero de los

Gaitanes no dejó indiferentes a los amantes de la

vertical. A través de las palabras y recuerdos de

algunos de sus protagonistas, vamos descubriendo

cómo fueron las primeras escaladas en los años

70 y qué vías fueron consolidando El Chorro como

la escuela de escalada de referencia del sur

hasta el presente siglo.

DAVID MUNILLA

4 I DESNIVEL.COM
 La entrada del
emblemático Primer
Cañón de El Chorro
(donde se ubica
el Caminito del Rey)
se refleja sobre el
embalse del Tajo de
la Encantada.

NACIMIENTO
Y CONSOLIDACIÓN DE

COMO ZONA DE ESCALADA

DESNIVEL.COM I 5
 E
Tres imágenes de N el siguiente texto nos vamos a cen-
1908: a la derecha, trar sobre todo en los inicios, con Cle-
boca norte del túnel mente González (aperturista, pionero
de Miguel (en el y estudioso de El Chorro, con varios li-
centro se puede ver bros publicados sobre el tema) cen-
la desaparecida trándose principalmente la década de los setenta. Di-
casa de la Cuesta rigimos luego el relato hacia las vías de corte clásico
del Hoyo) y un grupo más representativas de la década de los ochenta y los
de "montañeros" noventa, dejando para el siguiente apartado la explo-
con su guía, sión de la escalada deportiva. Como explica Manuel
realizando una Gómez, quien ha escrito parte de este relato: «Inten-
excursión en el tar recopilar y resumir la historia de la escalada clási-
entorno de El ca en El Chorro es complicado, no existe mucha in-
Chorro: abajo formación salvo testimonios orales, alguna que otra
preparados para la reseña ajada por el tiempo y lo que desde hace poco
salida (con el se reseña en las redes sociales y los blogs. La siguien-
primitivo puente de te compilación posiblemente tenga errores y olvidos
la Fuente o de la imperdonables, pero espero en todo caso que ayude
Josefona al fondo), a otros a encajar el puzle de la escalada en nuestro
y a la derecha Chorro querido, historias pequeñas y grandes que
descansando merecen y deben ser tener su sitio en la historia».
durante la misma,
junto a lo que
actualmente se El ferrocarril descubre el
conoce como Placas desfiladero
de Atrás. En agosto de 1865 se inaugura la línea del ferrocarril
Córdoba a Málaga, ello contribuye a mostrar al mun-
do estos sitios de El Chorro, hasta ahora casi inéditos.
Desde el tren se admiran las bellezas que se muestran esta última estación se subían al tren que les regresaba
a los ojos de los viajantes y aventureros que hacen este de vuelta a Málaga. Pero la afición por la montaña y el
recorrido, que quedan prendados del horizonte que se alpinismo allende los Pirineos llega hasta el sur,
descubre en medio de este maravilloso reino de roca. acompañados por viajeros románticos, exploradores
Al principio, los excursionistas se limitaban a hacer o simplemente montañeros. La zona la ven como un
el recorrido por las vías del tren, pues entonces no ha- verdadero paraíso casi inexplorado, aún por descu-
bía otro sitio, desde la antigua estación de Gobantes brir. Los montañeros, los “señoritos o señores” los lla-
hasta la de El Chorro, a través de los numerosos túne- man por estos lares, pertrechados con los equipos de
les que atraviesan el desfiladero de los Gaitanes. En la época y acompañados por guías locales contratados
al efecto, guías que normalmente son pastores o caza-
dores que se conocen la zona al dedillo.
Cuando a partir de 1904 se pone en servicio el canal
de la Hidroeléctrica de El Chorro, que arranca desde la
propia entrada del desfiladero de los Gaitanes, que en
este lugar se llama Gaitanejo, a la entrada del azud de
los canales de la nueva conducción de aguas a la cen-
tral hidroeléctrica de El Chorro, las excursiones por la
zona toman un nuevo cariz: ahora es posible contem-
plar las vías del tren y sus túneles desde la pared
opuesta del desfiladero, cosa antes imposible (el puen-
te de la Falla Grande o los Nichos de San Cristóbal,
que los montañeros los llamamos Tres Techos) no se
fotografían hasta la entrada en funcionamiento de los
canales. Estos canales eran entonces navegables, única
forma para controlar y mantener el buen estado de
ellos, téngase en cuenta que las pasarelas de los Bal-
FOTOS: L. ÁNGEL

concillos, más tarde conocidas como Camino del Rey

no se construyen hasta 1919 y no se terminan hasta fi-
nales de 1924; frente al puente de la Falla Grande

6 I DESNIVEL.COM
 (Tres Techos), la pared occidental hace un fuerte reco-
do, donde se abre una ventana por donde pasa el canal,
precisamente los escaladores denominaron a este sitio
de escalada como “El Recodo”, pues desde esta zona
era posible ver en su amplitud la pared oriental del
desfiladero, así como fotografiar el puente, entonces
metálico, y los Tres Techos en toda su extensión.
El cónsul de Francia en Málaga, Louis Ágel, en ex-
cursiones realizadas en 1907 y 1908, contratando los
servicios de pastores o cazadores locales, a modo de
guías, realiza varias excursiones por estos territorios
y las deja plasmada en unas bellas fotos. Se puede de-
cir que es el primer montañero propiamente dicho,
explorando parte de estas montañas y llegando in-
cluso hasta los contrafuertes del Huma, lo que ahora
es conocido como "Placas de Atrás".

Creación de la Sociedad
Excursionista de Málaga
En 1906 y atraídos por el auge que va tomando en
todo el país la creación de sociedades de excursionis-
mo, en Málaga un grupo de personalidades de la cul-
tura, la política y la industria crean la Sociedad Ex-
cursionista de Málaga; los socios se dedican a hacer
excursiones por la provincia y más tarde por el terri-
torio nacional incluso al extranjero. El Chorro es un
sitio privilegiado para sus excursiones y una de ellas
es la travesía por los canales de la hidroeléctrica. Con
el tiempo se crea una sección de “alpinismo” que ha-
ANDRÉS SERVER

cen sus primeros pinitos en las montañas cercanas a

Málaga, suben al Calamorro, al Maroma en sierra Te-
jeda y en El Chorro hacen las primeras ascensiones a

sus montañas. En el periódico deportivo AS de 30 de Arriba, Clemente

marzo de 1936 aparece un reportaje sobre las activi- González durante la
dades de montaña que lleva a cabo la entidad, su pre- apertura de las vías
sidente, Eduardo Jiménez, relata al periodista la re- de la Placas,
ciente “escalada” al monte Huma, en El Chorro. denominadas más
Hay un gran periodo de tiempo tras la Guerra Ci- tarde Placas del
vil en el que no hay actividad deportiva ni científica Olimpo. Derecha,
en las montañas de El Chorro y es a partir de princi- Loreto Wallace
pio de los años 1960 cuando se realizan expedicio- superando el paso
nes a estas montañas, destacando las de la Mesas de más difícil de la Vía
Villaverde o Bobastro. del chivito, que
abrió en marzo de
1973 junto a Andrés
Vías de las cabras y del chivito, Server, Francisco
las primeras Gutiérrez, Antonio y
La escalada en roca propiamente dicha no aparece Manuel Morales.
FOTO: ARCHIVO LORETO WALLACE

hasta primeros de junio de 1972 en que un grupo de

espeleólogos malagueños inician e inauguran sin sa-
berlo lo que hoy es mundialmente conocido como
una de las mejores escuelas de escalada de España.
El 18 de junio de 1972 Antonio Morales, Loreto
Wallace y Juan Luis Bellido abren en las paredes
de los Castillones (hoy conocidas como paredes

DESNIVEL.COM I 7

ANDRÉS SERVER
Arriba, Clemente Frontales), la que sería primera vía de escalada: la Vía
González a finales de las cabras, que atraviesa el enorme diedro que se
de los años 70 aprecia en medio de estas grandes paredes desde la
durante las primeras estación del ferrocarril. Al año siguiente se abre la se-
escaladas a las gunda vía, se trata de la Vía del chivito, que transcurre
Placas del Olimpo. por una enorme hendidura en la parte baja de las pa-
También en esos redes de los Castillones, que hacia su mitad existe
años se iniciaron las una cueva, justo en ese lugar los primeros escalado-
aperturas en las res se encontraron con un chivo (de ahí el bautizo de
Placas de los la vía) que rescataron y pusieron a salvo una vez con-
Venenos, siendo la cluida la escalada. Esto fue el 5 de marzo de 1973 y
Paco/Adán la que los escaladores fueron: Andrés Server, Antonio y Ma-
estrena el sector. nuel Morales, Loreto Wallace y Francisco Gutiérrez.
A la derecha, Estas primeras rutas son realizadas con pocos me-
contraluz de un dios: clavijas y bota gorda y el grado realizado no su-
escalador con la peraba el IV en la delicada roca de las Frontales.
pared de Los Tres Al principio del verano de ese mismo año se abre
Techos al fondo, que la que sería tercera vía de escalada en El Chorro: la
se empezó a Adeli, abierta por Francisco Javier Fernández y An-
desarrollar ya en la drés Server, un estrato vertical paralelo a las grandes
década siguiente placas, que superan por su arista.
(actualmente la Hasta el puente festivo del 12 de octubre de ese
escalada en este año 1973 no se vuelve a escalar en El Chorro. Pero
sector está ahora las nuevas escaladas se realizan por un grupo
prohibida). de montaña y las empresas a afrontar son mucho
mayores, como el intento de apertura de una vía en
las grandes placas Frontales—donde ya existía la vía
Adeli—, las que más tarde se llamarían por los mon-
tañeros: Placas del Olimpo. En estas placas, en la fe-
cha referida, los escaladores Andrés Server, Clemen-
te González, Francisco Javier Fernández, Manuel
8 I DESNIVEL.COM
Ibáñez y José Antonio Molina trataron de abrir una
vía, pero la falta de material específico necesario
para esta actividad hizo desistir la escalada. Esta vía
se terminó de abrir en 1985 con el pomposo nombre
de Kalimba de Luna.
Es a partir de 1974 cuando se empiezan a abrir ru-
tas más difíciles, buscando paños de pared más verti-
cales, surge la Trio por J. López, A. Servet y F. Ramí-
rez, y el Espolón Oderse de recorrido vertical y com-
pacto, a cargo de José Miguel Adán y Francisco Sán-
chez Damián, combinando el libre con el artificial en
algunos pasos. Esta última, una de las vías más em-
blemáticas y bellas abierta hasta ese momento, se si-
túa en las ya conocidas paredes Frontales, al lado de
la Vía del chivito y por encima de los grandes alberco-
nes que entonces existían al pie de las paredes, junto
a la vía del ferrocarril.
Vía JP, primer vivac
Se suceden las escaladas de pequeñas vías y es en el
verano de 1975 cuando los escaladores Andrés Ser-
ver, Clemente González, J. Miguel Adán y Federico
Ruiz abren la que sería la vía de referencia en El Cho-
rro después de más de 30 horas en ese enorme pare-
dón, siendo la primera vez que se realiza un vivac en
pared en El Chorro: la impresionante JP, en el centro
del farallón principal de las Frontales.
A finales de ese año se vuelve a abrir una vía de se-
mejantes características a la anterior, pero esta vez es
la cara sur del Castillón de la Ermita (bautizado por
M. Conejo, P. Fernández y C. González en 1972
como Cerro Cristo, nombre que ha llegado a nues-
tros días). Se trata de la vía GAMP, en honor al nom-
bre de nuestro grupo de montaña: Grupo Alpino Ma-
lagueño Pinsapo; las cordadas de Eugenio Robles/Ig-
nacio Espinosa y Pedro Fernández/Clemente Gonzá-
lez surcan por primera vez estas paredes, con tramos
de artificial de A2 de la época y escalada libre.
En la pared virgen de los Venenos, Francisco Sán-
chez Damián y José Miguel Adán dejan la Paco/Adan.
De nuevo Francisco S. Damian, junto a Eugenio Ro-
bles, surcan en la pared del Polvorín la fabulosa
Paco/Eugenio, una de las vías más duras hasta esos
 DAVID MUNILLA

DESNIVEL.COM I 9
 Arriba, escaladas en momentos, buscando la dificultad en una pared rela- respectivamente, en las aperturas de Numolite Rouge y
las Placas de la tivamente corta, pero de gran belleza y excelente roca Espolón Masai en años posteriores.
Cantera, de izquierda (los largos de arriba siguen actualmente de V+).
a derecha las vías: También en la parte izquierda del Cerro Cristo J. Pa-
Dahiyarninja (A3), cios y J. Calero dejan la JJ en 1976. La fabulosa década de los 80
Poder del Plomo En 1977 se abre la Astral, por Rafael Merchán y En la década de los 80 se produce el gran cambio del
(A4+) y Maninba de Andrés Servet, que surcan los más de 250 metros de alpinismo y la escalada en montaña a la escalada de-
Luna (V+/A2). A la las Frontales. Ese mismo año se abre el diedro Iqui-
derecha, Miguel que en los Cotos Bajos, y el siguiente surge la Vía del
Moya, Manolo Gómez martillazo, por F. Crespo, C. Pérez y J. Calero.
y Antonio Gámez
tras las labores de
equipamiento Finales de los 70,
para uno de los expansión de la escuela
encuentros En 1978 ya se habla de una “escuela de escalada” de
de escaladores dimensiones nacionales, en la prensa local aparecen
celebrados las primeras noticias a propuesta del Grupo Alpino
en El Chorro Malagueño Pinsapo, cuyos miembros son pioneros en
(abajo, folleto del las aperturas de El Chorro. Escaladores como Salva-
primero, en dor Burrezo, José López, Javier Sánchez, Fernando
1985). González y José Mª Pacios abren numerosas rutas.
Surgen vías como la Inma cerca del Polvorín, el Techo
de Manolo, el extraplomo de Las Cabras, Las guiris, El
espolón de los cordobeses, así como otras ya olvidadas.
La visita de dos escaladores murcianos José Matas y
Mariano Lozano dejan a la derecha de lo que hoy es
FOTOS: MANUEL GÓMEZ TRUJILLO

Poema Roca en las Frontales la vía Centauro (V+/A1)

en 1978, una ruta de envergadura por dos grandes es-
caladores, sin repetición integral conocida. Igualmen-
te aparecen por la zona el jerezano Javier Gordillo y el
arriateño Rafael Gamarro y reseñan la vía de Las pal-
meras en el Polvorín; estos dos escaladores ligarán su
nombre al jerezano Andrés Ortega acompañándolo,

10 I DESNIVEL.COM
portiva. Todos conocemos las nuevas tendencias que
llegaron de Europa y El Chorro no iba a ser menos. En
esta década se abre el 80 por ciento de las rutas más
clásicas y repetidas, buscando las zonas más vertica-
les, desplomadas, estéticas y recónditas de todo El
Chorro. Se concentran muchas rutas en los Desfilade-
ros y sus paredes cercanas, como la de los Venenos.
Paralelamente, se da a conocer El Chorro con encuen-
tros de escaladores y publicaciones en revistas espe-
cializadas, se consolida la escalada deportiva y el equi-
pamiento de vías desde arriba, primero con espits y
luego con parabolts. Se equipan la casi totalidad de las
vías deportivas en numerosos sectores que se van des-
arrollando uno tras otro: los Cotos, Polvorín, Tajos
del Invento, Verdonia, Albercones, Bañeras, Petit
Desfiladero, Makinódromo... La actividad aperturista
y equipadora es frenética todos los fines de semana.
La escalada clásica se sigue desarrollando en las vías
largas, pero aún así hay muchas vías semiequipadas
de los Cotos o el Polvorín donde prevalecía el “si entra
un friend o un fisurero se deja limpia”, si bien en los
noventa muchas se equiparon completamente.

El emblemático primer cañón

Este desfiladero es la zona de El Chorro más espec-
tacular y fotografiada, con el puente de Ribero, el
viento constante, la verticalidad absoluta y un Ca-
minito transitable.
En la pared de África, en 1984, con pocos días de
diferencia, se abre la Material Bélico, entrando con

bote desde el pantano por Carlos Pérez y Felipe Arriba, en 1986

Crespo, y la Greenpeace de los hermanos Moya, que durante la primera
comenzaba en el famoso túnel. Pero será unos me- repetición de
ses después cuando los jienenses Ramon Fernández Chiripitiflauticos
y Clemente Aceituno abren la Chiripitiflaúticos (6b+), en la pared
(6b+), escalada en el lluvioso primer encuentro de de África, vía cuya
escaladores de 1985; para los asistentes fue un au- apertura el año
téntico espectáculo verlos escalar bajo la lluvia anterior impactó
abriendo una de las vías más importantes de esa pa- en la comunidad
red y un referente de dificultad. Unos meses des- escaladora
pués, la primera repetición la realizan la cordada de del momento. A la
Javi Morales, Carlos Pérez y Miguel Moya, la élite izquierda, Carlos
del momento. Pérez (activo
A su alrededor se habla del Diedro de los Vencejos escalador desde los
(V+/A1, hoy 7a+) que se alza desde la vía del tren inicios de la escalada
flirteando con la cercanía de los Tres Techos, abierta en El Chorro hasta
en 1985 por Paco Toro y Felipe F. Crespo. En pala- hoy) en Nacida para
bras de Ramón Enrique, escalador y aperturista de la crítica (6c+), en
los ochenta que sigue activo hoy en día: “El Diedro de la pared del Invento
los Vencejos fue para mí el pistoletazo de salida de la en 1988.
dificultad, surcando uno de los rincones más salva-
jes del primer cañón”.
Poco después, de nuevo Felipe Crespo y Carlos
Pérez surcan en el primer techo la Ventolera Cósmi-
ca, abierta bajo la lluvia en 5 días de diciembre de

DESNIVEL.COM I 11
 Derecha, Manuel
Gómez comenzando
la apertura de Los
Ojos del deseo
(A3+) en la Placa de
la Cantera en los
noventa, y a su lado
Andrés Ortega (†)
escalando en los
Cotos en los
ochenta. Abajo,
Rafael Gamarro en
una de las
repeticiones a Los
MANUEL GÓMEZ

DAVID MUNILLA
Tres Techos.

1985, donde la horizontalidad es total. Esta línea,
dos años después, fue continuada por Miguel Moya
y Felipe Crespo hasta la cumbre, siendo Los Tres
Techos una de las vías con más ambiente y repetidas
de El Chorro, especialmente tras su reequipamien-
to en 2010. Se trata, en palabras de Ramón Enrique,
de “un monumento al pedal. Si en Montserrat exis-
te Arco Iris o Antonio Machín, en El Chorro están
Los Tres Techos”.
Andrés Ortega y su trilogía
Aparece en el 81 el jerezano Andrés Ortega y con J. R.
Gordillo escalan la Numolite Rouge (6a+) en el Tajo
del Almorchón, una vía espectacular y muy bien re-
suelta en su tramo final. En 1982, en el primer cañón,
Paco Toro y Carlos Pérez escalan la ruta Pilito, hoy ol-
vidada por el tiempo, que se sitúa entre el Diedro de los
Vencejos y lo que poco después será el Espolón Masai.
Un año después, en 1983, surge este Espolón Masai,
por Andrés Ortega y Rafael Gamarro. Al año siguien-
te, 1984, la apertura de Rayito de Luna (6c), en el Ce-
rro Cristo por Andrés Ortega y Javier Rodríguez Gor-
dillo culmina la trilogía del jerezano en El Chorro.
Tres rutas imprescindibles en el currículo de cual-
quier escalador clásico. Este gran escalador falleció
pocos años después en Sierra Nevada.

Llega el artificial de dificultad

En El Chorro, escalar en artificial habitualmente se
consideró un recurso para resolver zonas descom-
puestas, desplomadas o pasos esporádicos en esca-
ladas en libre, que posteriormente se encadenaron
en libre con ensayos y equipamiento, pero escalar
largos exclusivamente con esta técnica se inicia en
1985 con la vía Maninba de luna (V/A1+ 4 largos),
en las Placas de la Cantera, a la derecha de las Fron-
tales. En 1986 pasa desapercibida la visita de unos
murcianos (uno se apodaba Tano) que dejan un
COL. RAFAEL GAMARRO

croquis en el bar con dos rutas en la misma pared:

Dahiyarninja, el vuelo de los sentidos (V+/A2+) y
Murcis crack, esta última la dejan inacabada tras una
caída al saltar un plomo, y fue terminada por Ma-
nuel Gómez ocho años después, dejándola en A3+.

12 I DESNIVEL.COM
 Son rutas muy técnicas, con interminables largos de
50 metros al mejor estilo yosemítico.
En 1989, Munilla y S. Camacho realizan Karma en
la pared del Cerro Cristo, pasando entre Aparcamiento
indebido y Rayito de luna, y quedando a un largo del fi-
nal bloqueados por una placa lisa que no taladran. Ya
en los 90 con la apertura de Los ojos del deseo (A3+) y
Manolo Wonder (A2+) casi se terminan de abrir las fi-
suras ciegas de la Placa de la Cantera. Ascensiones
como Estas cosas ya no se llevan, en 1986 en el Segun-
do Cañón, o la ya mencionada Tres Techos en el Pimer
Cañón, son otra historia, primando el recorrido y es-
calar la pared. Los croquis de la época mostraban el
desconocimiento de los grados de artificial, colgarse
de un plomo o un gancho se graduaba como A3 o A4.

Vías largas en libre y de dificultad

Paralelamente al desarrollo de la escalada libre y de-
portiva que está ya en plena expansión a finales de los
ochenta, no cesa la apertura de las vías largas. En
1987 se abre la Escorpión en la bóveda de las Fronta-
les, proponiendo una escalada recia de 10 largos y
convirtiéndose en una ruta mítica por su equipamien-
MANUEL GÓMEZ

DAVID MUNILLA

to y roca dudosa en algunos tramos que ha dado algún Arriba, durante la

susto a alguna cordada (en 2019 fue reequipada por apertura de Rayito
los mismos autores). También de ese año es la famosa de luna, por Andrés
África en el Primer Cañón, con algunos pasos protegi- Ortega y Javier
dos por expansiones. El marbellí Keko Ventura repite Rodríguez en 1984.
las grandes rutas de El Chorro en libre, visualiza y A la izquierda,
equipa Mustapha (8a) abriendo la veda a otras rutas ambiente en la Casa
de libre difícil equipadas como Bella y Bestia o la Maldita, de izquierda
Dama del Viento (ambas por Miguel Moya y Antonio a derecha: M. Moya,
Gámez en 1989), y nos deja una visionaria ruta llama- A. Gámez, Ricardo,
da El eructo del bisonte, donde el reto era escalar en li- Maite, Pilar, Manolo
bre y taladrar lo mínimo posible colgándose de gan- Gómez, Jorge,
chos. Posteriormente fue fagocitada por la Zeppelin. Manolo Portillo y
La mencionada Led Zeppelin fue iniciada por Ma- Mariela. Y debajo,
nuel Gómez y Fede Quintero desde abajo, escalan- Ramón Enrique en
do el primer largo de El eructo del bisonte y desvián- 2009 reequipando el
MANUEL GÓMEZ

dose hacia el techo, el cual fue escalado en artificial segundo de Los Tres
sin expansiones salvo la reunión. El siguiente largo Techos.
prometía algo de artificial y libre, pero la cordada se

DESNIVEL.COM I 13
 Al lado, Ana León y
Rafa Díaz “Los
osos” escalando la
vía Aixa Matinae
(7c) en los noventa
en el sector
Venenos; a su
derecha, Stephan
Girard en el segundo
largo de la Poema
Roca, en la pared de
las Frontales,
abierta en 1991.
Abajo, Fede Quintero
en Yerma (7a) en el
sector El Olimpo, y a
su derecha, vista del
Primer Cañón (desde
el final de la vía
Zeppelin), con el ANTONIO GÁMEZ

Caminito del Rey

DAVID MUNILLA

(antes de la
remodelación).

separó por la disposición de uno de ellos a equipar
la ruta desde arriba para hacerla más asequible y re-
petida. El problema fue que se taladraron algunos
largos pertenecientes al Espolón Masai, la “variante
de Moya/Gámez” al Masai y el Eructo del bisonte. De
los 10 largos de la ruta solo 4 largos y medio son in-
dependientes. Posiblemente, si Rainier Munch hu-
biera conocido la historia de su apertura y las rutas
colindantes, u otras vías clásicas de El Chorro, la
Zeppelin no estaría en el libro Verticualidad.
FOTOS: MANUEL GÓMEZ
En 1988 Miguel Moya y Carlos Pérez trazan Apar-
camiento indebido en la pared de África (6a/A1, hoy
7a), que propone una escalada sobre fisuras en cuatro
largos para las cuales Miguel tuvo que fabricarse un
friend “a medida” para proteger sus anchas fisuras
(entonces el friend más grande era el nº4 de Calma). Y
ya en 1991 Stephan Girard, Antonio Gámez y Miguel
Moya equipan la emblemática Poema Roca surcando
la bóveda de las Frontales, que marca el inicio de la
alta dificultad en pared con concepción deportiva.

14 I DESNIVEL.COM
Últimos reductos
para la escalada tradicional
En los 90 la apertura de vías largas y clásicas se
queda muy estancada. La mayoría se tira a por el
grado, la deportiva, las chapas y el desplome de
canto. La moda de la deportiva equipada hace que
rutas de corte clásico se “retroequipen” para hacer-
las populares, como ocurre con la Directa Amptrax
abierta desde abajo por Miguel Moya y Antonio Gá-
mez en 1986, que fue semiconvertida a deportiva
en 1990, o las de El Polvorín, además de que las Arriba, Miguel
vías largas equipadas desde arriba pisen las clásicas Moya en 1987
sin ningún miramiento. “entrenando” en el
Pero los incombustibles Felipe Crespo y Carlos Pé- puente en esos años
rez, y algún otro compañero, encuentran en el Tajo experimentales y
del Cabrero (en la zona norte de El Chorro, fuera del anárquicos. A la
Paraje Natural) un terreno virgen donde la aventura y izquierda, el local
las vías duras están servidas. Entre los años 1994 y Marcos González en
2000 dejan una serie de estupendas rutas de libre y ar- la tirolina que
tificial como son Fatiga de un Keré, Sala 21, Alien, da acceso al Cerro
Nanga Par Bá o Aries, algunas entre el 6c y el A3+. Cristo cuando
Como veremos más adelante, con el cambio de siglo el nivel del agua del
escaladores como Pedro Soto, Ángel Chiappi, Carlos pantano está alto
Hernández o Paulo Roxo son los encargados de man- (la foto es de 2010).
tener viva la llama de la escalada tradicional en El
Chorro, débil ante el predominio de la escalada de-
portiva y el equipamiento generoso.
Como señala Manuel Gómez: «Llegados a estas lí-
neas, han transcurrido 50 años desde la Vía de las ca-
bras en 1972; hay que poner en valor la historia pasa-
da, reconocer el legado de unos escaladores que han
dejado unas líneas en la roca vertical de El Chorro.
Vías clásicas que no se desvirtualizan con las repeti-
ciones, sino que se asientan, como algo nuevo, en to-
dos los que la repiten. Miles de horas empleadas, de
sentimientos y aventuras vividas. Muchas de estas
vías están prohibidas en este momento, pero no de-
ben ser olvidadas. Esperemos tiempos más favorables
y larga vida a los escaladores clásicos».
Redacción Desnivel
(con textos de Clemente GONZÁLEZ y Manuel GÓMEZ)
DESNIVEL.COM I 15
 CARLOS PÉREZ
«Las vías necesitan su espacio vital»
Aperturista de algunas de las líneas más clásicas de El Chorro, ha sido testigo y partícipe
de su evolución, sumando aproximadamente un centenar de líneas, de corte tanto clásico como
deportivo, aunque no oculta su preferencia por las vías de aventura, en peligro de extinción.
A
sus 59 años, Carlos continúa
escalando y equipando en las
zonas malagueñas, como el
Monte San Antón, escuela en
la que se inició en la escalada, como
otros muchos escaladores pioneros de la
provincia. Su trabajo de bombero (desde
el año 89) le aporta la estabilidad econó-
mica y un buen horario para seguir dedi-
car su tiempo a la escalada en roca. Aun-
que se considera ecléctico en sus gustos
verticales, confiesa que su principal mo-
tivación es la escalada en pared, y se
muestra crítico con la saturación de vías
que, cada vez más, se da en los sectores
deportivos, no solo en El Chorro.
¿Cómo descubriste la escalada?
En la Sociedad Excursionista de Málaga
había un grupo de espeleología bastante
potente (GESM), que tuvo una escisión
de gente que quería ser “montañero alpi-
nista”; yo pertenezco digamos a la segun-
FOTOS: COL. CARLOS PÉREZ
16 I DESNIVEL.COM
da generación de este grupo. Por enton-
ces Málaga está fuera de lo que es el mon-
tañismo, no tenemos ni siquiera material,
que hay que pedirlo fuera. Yo me uno en
el 75-76 cuando tenía unos 11 años, era
muy crío y soy de un barrio humilde, no
tenía recursos. Prácticamente no había
vías de escalada en El Chorro, solo algu-
nas como El Chivito y el Espolón Ordese.
Nuestro libro de cabecera era Hielo, nieve
y roca, de Gaston Rébuffat, y la gente iba
“disfrazada” de alpinista, con los bávaros
y la camisa de cuadros. El objetivo era su-
bir a la cumbre y las vías solían ir por las
canales o sitios evidentes, con los clavos,
tacos de madera, cletas y un gorro de
lana. La escalada solo se consideraba una
preparación para el alpinismo.
Dentro de la evolución que vivió luego la
escalada, ¿qué camino tomaste?
Yo siempre he estado “en tierra de na-
die”, porque aquí en Málaga en general
la evolución llegó tarde, hasta que nos
dimos cuenta de que teníamos el tesoro
de El Chorro. Al principio lo que hici-
mos fue liberar las vías que se habían
abierto en artificial, después llegaron ya
dos tendencias, por un lado la que venía
de Francia con el desarrollo de la escala-
da deportiva, y por otro la que venía de
Yosemite, con el libro de George Me-
yers. Entonces ya se empieza a taladrar
la roca para poder escalar en libre, la
cumbre deja de tener importancia, lo
que cuenta es la dificultad, y sobre todo
se celebran varios encuentros en los que
vienen escaladores de fuera, que traen
su s influen cias. A med iad os de lo s
ochenta ya vimos que no dejaban de vi-
sitarnos los extranjeros y que lo que te-
níamos en El Chorro era algo importan-
te, que tenía mucho potencial para la es-
calada deportiva.
¿Cuál es tu vía más importante de los
inicios?
Como vía emblemática diría que es El
Escorpión, que surca por el centro lo que
es la bóveda de la Pared de las Frontales,
por donde hoy se llama sector Poema.
Esta la abrí hacia el año 84, con Felipe
Fernández, que era mi compañero de
cordada habitual en esos años. Se consi-
deró una especie de éxito local; recuerdo
que, como por ahí pasa el tren, el jefe de
estación nos veía y tocaba la campana,
invertimos mucho tiempo en esa apertu-
ra, que hicimos desde abajo. Luego ya en
deportiva equipé desde arriba como se
hace normalmente. Al principio se bus-
caban las placas, pero luego ya empeza-
mos a escalar también los desplomes. La
primera vía que nos abrió los ojos fue la
Lourdes de Juanma, el primer octavo. Y
aparecieron escaladores, como el mismo
Juanma o Bernabé Fernández, que dispa-
 A la derecha, en la Poema Roca
en los noventa. Abajo, dos fotos que
demuestran la incombustible
motivación de Carlos: en la vía Árbolo
a finales de los 70 (con aseguramiento
al cuerpo, sin arnés) y en uno de
los primeros Rally 12h de El Chorro.

raron la dificultad e hicieron que todas

las miradas se dirigieran a El Chorro.

¿Tú abrazaste también la corriente de-

portiva en esos años?
Bueno, yo equipé vías de octavo en esos
años y conseguí repetir algunas, como esa
misma Lourdes, pero no me ha llegado a
ilusionar nunca la escalada deportiva
como un fin en sí misma. A mí lo que me
gusta es subir piedras, y en ese sentido me
gusta todo, también la escalada artificial.
Hice varios viajes a Yosemite y allí adquie-
ro conocimientos y motivación para abrir
vías. Uno de los escaladores que me influ-
ye es el madrileño Jesús Gálvez, con su fi-
losofía de buscar terrenos de aventura en
grandes paredes en una época en la que la
mayoría de la gente se quedaba en los bor-
dillos; Gálvez vino a uno de los encuen-
tros que celebramos y nos puso una de sus
proyecciones de diapositivas, que me mar-
có mucho. Esta filosofía la aplico en El
Chorro, donde un grupo de gente nos ale-
jamos un poco de la moda deportiva y va-
mos a nuestro aire de nuevo abriendo vías
desde abajo. Para mí la escalada no ha res-
pondido tanto a una necesidad de supe- Rally 12h, esos de ir corriendo por las vías; Y esto no ha hecho más que empezar, con
rarme, sino más bien a la de ser auténtico. muchas de las vías que se escalan en esos el tema olímpico, va a seguir aumentando
Yo suelo decir que lo importante no es rallies son las que abrimos nosotros, que el número de aficionados a la escalada...
uno mismo, sino las vías que dejas, lo que quedaron obsoletas y las han reequipado Bueno, yo creo que en este caso por
queda. Prefiero que se conozcan mis vías a en estilo deportivo. Es un terreno de juego fortuna existe la “escalada urbana”, que
que se conozca mi nombre. más domesticado, en el que se busca sobre la gente ya no quiere ni que le dé el sol ni
todo el espectáculo. Es algo con lo que no que haga frío, y se quedan en los rocó-
¿Cómo ves El Chorro actualmente? me siento identificado, pero entiendo que dromos con sus ambientes acondiciona-
El Chorro queda como una escuela de en la montaña cada vez somos más perso- dos, lo que a mí me parece fantástico. No
referencia para el invierno, y sobre todo nas, las vías se van amontonando, con cada hace falta que vayan a la montaña. No
para los extranjeros. Aquí te vienes cual- vez menos espacio entre ellas. El problema hay más que ver los pies de vía, que están
quier día de invierno y hay cientos de ex- es que mucha de la gente que se ha incor- ya todos degradados.
tranjeros escalando. Yo la considero la porado ahora a la escalada no tiene cultura
escuela de escalada más importante del de montaña, y al final todos queremos im- Y en tu caso, ¿sigues escalando?
sur de Europa. poner nuestro ego. Veo que hay sectores Sí, yo sigo escalando y también equi-
que se están colapsando, porque las vías se pando, y espero seguir haciéndolo mu-
¿Crees que sigue quedando espacio para juntan unas con otras. Pero esto no es solo chos años. De hecho últimamente, como
la escalada de aventura? en El Chorro, lo veo en muchas escuelas a no se podía salir con el tema de la pande-
Los escaladores de autoprotección siem- nivel nacional. Creo que tendríamos que mia, hemos estado reequipando un sec-
pre tendremos nuestros rincones para vi- hacer más como los franceses, que hay zo- tor que tenemos aquí en el Monte San
vir esta escalada “romántica”. En El Cho- nas en las que directamente prohíben abrir Antón que estaba abandonado; el confi-
rro el auge de las vías largas ha venido so- más vías, porque ya no hay espacio; las vías namiento nos ha traído el resurgir de las
bre todo a partir de la celebración de los necesitan su espacio vital. zonas cercanas. // E.M.

DESNIVEL.COM I 17
 E
RAN unos tiempos distintos
sobre todo en nuestra con-
cepción de la montaña, que
nos hacía entregarnos a ella
en cuerpo y alma, lo que creo que hoy en
día está desapareciendo. Ese sentimiento
de felicidad nos daba una filosofía y un sis-
tema de valores de la vida muy bellos.Para
nosotros El Chorro era un verdadero para-
íso, no solo por sus paredes, sino también
por todo su ecosistema, su río, su vegeta-
ción... Los escaladores éramos amantes del
medio salvaje y natural» relata Rafael ‘Falo’
Gamarro, escalador oriundo de Arriate, ac-
tualmente con 64 años y guarda forestal en
la Sierra de las Nieves.
Retrocedemos casi 40 años, hasta 1984,
para situarnos en el momento en el que
unos jóvenes escaladores, que se habían
conocido en el grupo de montaña Sierra
del Pinar, coinciden en su deseo de abrir
la primera línea que surcaría la llamativa
pared de los Tres Techos. La voluntad de
recuperar para la historia su vía (desdibu-
jada con el tiempo por las variantes o las
vías posteriores que la cruzan) la explica
también Rafael a modo de homenaje a su
compañero Andrés, que falleció en un
alud en Sierra Nevada solo dos años des-
pués de la apertura.
FOTOS: COL. RAFAEL GAMARRO

Sobre sus inicios recuerda Rafael que

«ya con 8 años, en una pequeña excur-
sión con mis padres, descubrí el vacío por
primera vez, y sentí una felicidad inmen-
sa. A partir de ahí, cualquier cosa que se
pareciera a una montaña, me atraía de
una forma especial». Con 16 años hizo su
primera actividad de montaña en Sierra
RAFAEL GAMARRO: de las Nieves y empezó sus pinitos con
una cuerda de pita «que tomé de la fábri-

La verdadera ca de mis padres, con la que amarraban

jamones» y los libros que pudo conseguir
de Rébuffat. El empujón definitivo lo dio
gracias al murciano Carlos del Campo

historia del (uno de los aperturistas de la Directísima

del Naranjo), que estaba destinado en
Ronda, y de quien aprendió las técnicas y
lo que significaba abrir una vía («aunque

Espolón Masai ya había subido por donde me parecía en

Escalador pionero, Rafael Gamarro reivindica aquí recuperar el
trazado original de la emblemática escalada que abrió junto a
Andrés Ortega en 1984, la primera que surcó la pared de los Tres
Techos y que considera su legado más importante.
la pared del Peñón Grande de Grazalema,
pero sin saber que estaba abriendo una
vía»). También con Carlos descubrió para
la escalada de la zona del Puerto del Vien-
to, junto a Ronda, que él ha seguido des-
arrollando hasta la actualidad con multi-
tud de vías, pero esa es otra historia...
De estudiante, pasó tres años formán-
dose en Jaca para ser agente forestal, y
desde allí volvía a Málaga en las vacacio-

18 I DESNIVEL.COM
 *ADVERTENCIA: Con las
regulaciones a la escalada
tras la remodelación del
Caminito del Rey, el acceso R10
a esta vía, y a todo el
sector, ha quedado
prohibido.
III
R8
WWW.CARTOWALL.COM
nes y seguía realizando aperturas y esca-
ladas. Fue en una de estas vacaciones, en
Semana Santa de 1984, cuando acometió
lo que sería su gran escalada en El Cho-
rro. «Nos dejamos llevar por la aventura
de abrir una vía, de meternos en una pa-
red sin saber lo que vas a encontrar y
descubrir un camino nuevo», recuerda
Rafael. «Nos metimos un sábado por la
tarde, llevando una mochila cada uno
con el material de vivac (frontales, sacos
de dormir... ), dormimos en la mitad su-
perior de la pared en un rellano y al día
siguiente la terminamos. En aquel tiem-
po, enfrentarse a una pared de esta ma-
nera nos obligaba a tener un espíritu de
sacrificio y un total compromiso». Iban
equipados con cuerdas (ya modernas),
algunos clavos, empotradores y espit,
que metían a mano con un burilador;
tras finalizar la escalada donde termina
la arista del espolón, descendieron des-
IV-
trepando por una serie de repisas por la
parte trasera de la pared.
Cuenta que lo de “Masai” viene porque
«nos gustó por la tribu de los Masai, por
su forma de vivir en contacto con la natu-
raleza, que se acercaba a la visión que
nosotros teníamos de la montaña. Para
nosotros escalar no era solo un deporte,
sino una forma de vivir, una aventura en
un medio natural y salvaje».
Aunque no impactó de forma inmedia-
ta en la comunidad escaladora, fue una
escalada relevante para el momento, que
fue ocupando el lugar destacado que me-
recía. Sin embargo, poco después se
abrieron unas variantes «en unas paredes
muy a la izquierda, que no forman parte
de la continuidad del espolón», explica
Rafael, pero que algunos confundieron
con el trazado original. También por la
parte derecha, a partir del tercer largo, se
surcó más tarde otra variante directa más
A la izquierda, el trazado original
del Espolón Masai realizado en la primera
ascensión (desde la R7 hasta el diedro
de 6a del siguiente largo hay una travesía de
V+ delicada. En el L8 y el L9 hicieron algunos
pasos de A1 que luego liberaron). En la otra
página, Rafael en la vía de Los tres techos, y
abajo, en su Espolón Masai, una de las tantas
veces que la ha escalado, como entrenamiento
para otras paredes más grandes.
sencilla que evitaba cuatro largos del es-
polón, desvirtuando plenamente la pri-
mera ascensión pero que en muchos si-
tios quedó erróneamente reseñado como
Espolón Masai; una confusión que Gama-
rro busca reparar con este artículo.
Se muestra también crítico con la poste-
rior apertura de la Zeppelin «que pisó nues-
tra vía, metieron parabolt donde no había-
mos dejado nada, hicieron un verdadero
sacrilegio, me pareció una falta de respeto a
la historia de esa vía». En general, Falo no
comulga con el estilo de escalada deportiva
que, considera, está perdiendo los valores
de la montaña: «Para mí la escalada depor-
tiva fue una forma de llevar al máximo el
estilo libre en una gran pared, esto está bien
y es positivo, pero creo que nos estamos de-
jando llevar demasiado por esta doctrina.
Creo que la escalada en el medio natural re-
quiere una preparación física, técnica y psi-
cológica, y hay que buscar un equilibrio en-
tre estos tres términos. Lo que no podemos
es eliminar totalmente los peligros objeti-
vos que encontramos en las paredes, pues
esto lleva a alterar la roca de forma irrever-
sible. Este es el peligro que veo en la escala-
da deportiva, creo que se están perdiendo
los valores en este sentido».
Redacción DESNIVEL
DESNIVEL.COM I 19
 MIGUEL MOYA
Vivir para equipar
Es sin duda la persona que más vías ha abierto en las zonas malagueñas, y entre ellas
El Chorro es, como él mismo dice, su “meca”. Llegó cuando era un lienzo prácticamente en blanco,
que supo aprovechar dejando algunas de sus vías largas más emblemáticas. No las tiene
contadas, pero probablemente sean más de 500 las vías que llevan su huella. Una alta cifra en la
que, lógicamente, entran todos los estilos y todas las calidades.

L
A vía Madriles –primer 7a de El
Chorro, que él mismo equipó y
encadenó en 1985– delata su
origen, pero su acento indica
que lo malagueño forma parte de su iden-
tidad desde muy temprano. Miguel (55
años, bombero de profesión), no ha deja-
do de abrir vías desde que aprendió lo que
era un espit, que primero metía a mano,
luego fueron químicos que él mismo fa-
bricaba y pasaron a ser parabolts, ya in-
contables. Currante máximo, es imposi-
ble contabilizar el tiempo y el dinero que
ha invertido Miguel en desarrollar zonas
para él mismo y para los demás. Las vías
largas más emblemáticas de El Chorro –
esas paredes con techos y desplomes en
los que nadie se metía– llevan su nombre;
muchas de ellas abiertas junto a su her-
mano Gabriel (un poco mayor) y también
muchas junto a Antonio Gámez, quien
fue su compañero de cordada durante
unos años. Líneas clásicas como el Diedro
de Hércules en el Primer Cañón o Green-
peace en Cerro Cristo (ambas abiertas en
1985 por “los hermanos Madriles” o los
“Moya brothers”, tal como consta en los
croquis), o vías que impactaron como la
que surca los Tres Techos del Primer Ca-
ñón (junto a Carlos Pérez y Felipe Crespo
a principios de los ochenta) o Sendero Lu-
minoso (1985, con Carlos Pérez), o ya clá-

A la izquierda, en la ya histórica vía Madriles,

primer 7a de El Chorro que equipó junto a su
hermano Gabriel en 1985, realizando luego la
MANUEL GÓMEZ

primera ascensión. Allá donde va, siempre lleva

su kit de equipamiento: a la derecha, equipando
en un viaje al Atlas marroquí hace unos años.

20 I DESNIVEL.COM

sicas como Proyecto Amptrax (en Fronta-
les, con Antonio Gámez), Aparcamiento
indebido (en Cerro Cristo en 1988, con
Carlos Pérez), o la futurista en su mo-
mento Poema Roca (con Stephan Girad en
1991), El fin de una vida (con Carlos Pé-
rez, ya en el año 2000). Muchas de ellas
eran vías comprometidas, que no encon-
traban candidatos en aquellos años... En
los últimos tiempos ha estado desarro-
llando principalmente sectores deporti-
vos, no solo en El Chorro, también en
otras zonas malagueñas como El tajo de la
madera en Villanueva del Rosario, Busca
Busca en Mijas o El boquete de Zararraya,
entre muchos otros.
Y no tiene bastante con las paredes, tam-
bién ha explorado en espeleología, su se-
gunda afición, abriendo galerías en por
ejemplo la Sima GESM (la cavidad más
grande y profunda de Andalucía y una de
las mayores de Europa), “combinando la
escalada y la espeleología, con bota de
agua, ganchos que me fabrico yo mismo y
un taladro a la espalda”, según cuenta.
No parece que la saturación de vías, o no
dejar espacio virgen para las nuevas gene-
raciones, sean motivos de preocupación
para Miguel. Como nos confiesa en esta
entrevista (telefónica y desenfadada, en la
que no deja de brotar esa risa de quien se lo
sigue pasando bien con lo que hace) que
siempre lleva un taladro en el maletero, no
vaya a ser que se le escape alguna piedra
sin equipar en su camino...
Según me han comentado, tú no eres de
Málaga, ¿no?
Yo soy de Madrid, vine de niño con mi
familia (que somos cinco hermanos) por-
que a mi padre le destinaron aquí por su
trabajo. Recuerdo que íbamos en un tren
litera que paró justo debajo de los Tres Te-
chos. Cuando subí la persiana y miré fuera
me quedé alucinando. Yo ya había empe-
zado a escalar un poco en Madrid, desde
que tenía unos 15 años, por La Pedriza, La
Cabrera... pero todavía sabía poco y no ha-
bía equipado ninguna vía. Íbamos con bota
rígida, con la panda de Gálvez (que era mi
ROSARIO CANTERO
vecino), Pascual, el Hombre de Goma...
Cuando llegué a Málaga es cuando empecé
a equipar, tendría unos 18 años.
¿Recuerdas qué vías de referencia había
en El Chorro cuando llegaste?
Había pocas. Recuerdo una dura que se
llamaba El Árbolo (6b+, la más difícil de la
época en la provincia de Málaga). Por en-
tonces se escalaba sobre todo en placa.
Abrí por ejemplo el primer 7a de aquí, la
Madriles, que también encadené. Esa la
equipé a mano, igual que otras cuantas de
hasta tres y cuatro largos, con espit de 8
mm; me salían ampollas en las manos.
Luego ya me compré un taladro de batería
con Antonio Gámez, que fue el primero de
este tipo que hubo por aquí.
Y desde entonces no has parado... ¿Qué
es lo que te atrae de equipar?
Por un lado subir por donde no ha su-
bido nadie antes, y también crear líneas;
para mí el equipamiento es un arte, un
proceso creativo desde el interior.
DESNIVEL.COM I 21
 Abajo, en la puerta de la “Casa de losinventos”:
Los osos (Ana y Rafa), Manolo, Miguel,
Antonio y José Ramón. A la derecha, a punto de
saltar en puenting; y abajo, con Bernabé
Fernández equipando El gigante verde. Página
derecha, con Stephan en Poema Roca. Cuando abres vías, ¿lo haces para ti mis-
mo o para los demás?
Yo equipo vías porque me gusta, pero
también lo hago para todo el mundo,
para que la gente las repita y lo disfrute.

Una de tus vías más emblemáticas de El

Chorro es Poema Roca, que da nombre a
todo un sector de Las Frontales, ¿cómo
fue la historia?
FOTOS: MANUEL GÓMEZ
Estaba por aquí un amigo francés, Ste-
phan Girad, que vivía en el Vercors pero
se tiraba aquí muchos meses escalando
en El Chorro. La zona del desplome de
las Frontales por entonces solo tenía una
vía, la Escoripión, que era en artificial, así
que le propuse a Steph si equipábamos
una pero ya con concepción deportiva,
más moderna. Le gustó la idea, nos jun-
tamos y estuvimos por allí como un mes
escalando y equipando, y abrimos la Poe-
ma Roca, entre otras. En realidad Steph
fue quien me enseñó a equipar con esta
nueva mentalidad; él ya había equipado
mucho en Vercors, y tenía más nivel que
nosotros. En Málaga estábamos más
atrasados.

¿Cómo era el ambiente entre los escala-

dores, o cómo lo viviste tú?
Por ponerte un ejemplo, en mi “ho-
nor” bautizaron Los mandriles no comen
galletas, que era una vía que yo iba a
equipar, la dejé limpia y preparada para
ponerle las chapas, pero me fui al Na-
ranjo a escalar y cuando volví me la ha-
bían pisado y ya la habían abierto con
ese “bonito” nombre (risas). Pero el
ambiente era bueno, lo único que querí-
amos era escalar. En esos años también
fui de los primeros en hacer puenting,
que lo hacíamos aquí en el Caminito del
Rey. Me juntaba con los del grupo de
montaña Metecaña y nos tirábamos pri-
mero del tubo que cruza el Caminito,
pero luego monté unas tirolinas y nos
tirábamos hasta unos 70 metros, y te te-
nías que tirar centrado para no darte
con las paredes... Vamos que estoy vivo
de milagro (risas). Lo montábamos con
las cuerdas que ya no usábamos para es-
calar, siempre dos eso sí, hacíamos un
montaje con disipadoras, con ochos...
También fui el primer en equipar ferra-
tas en el Segundo Cañón, y tirolinas en
el Cerro Cristo para poder acceder a los
DAVID MUNILLA

sectores del Caminito del Rey. Yo siem-

pre he andado liado con los hierros, in-
ventando...

22 I DESNIVEL.COM
¿Cuántas vías llevas abiertas en total?
Dicen que puedo tener unas 500, pero
la verdad es que yo ni las he contado ni
me importa. Tampoco tengo libreta ni
nada de eso. Pero seguramente soy el que
más he equipado de Málaga, y las vías más
chungas y comprometidas, son mías. Más
tarde hubo un relevo generacional y ya
hay mucha otra gente que ha equipado. A
Bernabé lo enseñé yo cuando era un cha-
val y fue el que cogió el testigo. Con él
equipé la vía El gigante verde en el segun-
do cañón, que fue una vía muy represen-
tativa en su momento, con los 100 prime-
ros metros que surcan unos techos que
tiene enormes, en concreto uno tendrá
como unos 20 metros.

¿Y cómo era vuestra logística? Porque

entiendo no la abristeis en el día...
En El gigante verde tardamos creo que
fueron tres días, es una vía de unos 200
metros. Dejábamos cuerdas fijas y subía-
mos y bajábamos a dormir en el pueblo.
Me acuerdo que yo me fabriqué una ba-
tería que llevaba colgando en unos peta-
tes para el taladro. Claro que no aguanta-
ba mucho... Ahora con las que llevo me
aguantan para hacer unos 200 agujeros,
y duran diez años.

Otras vías emblemáticas de esos años

son la Dama del viento y la Bella y la
Bestia, en el Primer Cañón, que abriste
DAVID MUNILLA

con Antonio Gámez en 1989, ¿cómo las

recuerdas?
En esos años es que prácticamente no
había vías en los Cañones, así que allí
abrí mucho. Equipé casi todo el sector de ¿Has seguido abriendo vías clásicas o ya tres intentos, en los que ya sí participé; el
la Pared del África del Primer Cañón, el te pasaste del todo a la deportiva? primero recuerdo que fui con mi herma-
Recodo, el Petit Desfiladero, el Segundo La verdad que clásica últimamente ya no y tuvimos un accidente, luego ya con
Cañón, el Polvorín, el Invento... A veces hago poca, aunque me gusta, pero te la otros amigos con los que por fin la pudi-
iba con compañeros y también muchas juegas más. Aquí en El Chorro ya tengo mos terminar, durmiendo en mitad de la
veces equipaba solo, iba a la pared y me unas cuantas historias de caídas en las vía, ahí con la azada... Fue una aventura
colgaba lo que hiciera falta. En El Chorro que por poco no lo cuento, con roca po- muy guapa, sobre todo en esos tiempos.
tengo muchas buenas vías, como la Bella- drida que además no podías tirar, por-
dona, la Amptrax, la Poema, El fin de una que estaba la vía del tren abajo... Por ¿En El Chorro es donde más has equi-
vida, Aparcamiento indebido... Muchas ejemplo los Tres techos fue todo un reto; pado?
vías de esos años las abría desde abajo ya se había hecho un primer intento en Sí, es donde más vías tengo, es como
por sitios que nadie se metía, protegien- el que unos escaladores de Málaga abrie- mi meca, pero también he equipado en
do con material flotante. ron parte del primer techo, y luego otros otras zonas. Por ejemplo en el Torcal de
Antequera tengo siete vías de largos, que
suman 40 largos, lo que pasa es que los
«Dicen que puedo tener unas 500, pero la verdad es que yo de Medio Ambiente las han quitado.
También equipé el sector Hollywood del
ni las he contado ni me importa. Tampoco tengo libreta ni nada Torcal, con unas 20 vías y unos desplo-
mes gigantes (además de una ferrata de
de eso. Yo equipo vías porque me gusta, pero también lo hago 100 metros junto a este sector), y otros
para todo el mundo, para que la gente las repita y lo disfrute». por abajo más de bordillo, pero tampoco

DESNIVEL.COM I 23
 ROSARIO CANTERO
se puede escalar ahora. Por aquí nos es-
tán prohibiendo escalar en todos lados.
Últimamente estoy equipando en la zona
de Alfarnate, que también fui de los pri-
meros en empezar a desarrollarla. Pero
en general no me gustan los bordillos,
las vías que abro son largas, de por lo
menos 30 o 40 metros, y si son desplo-
madas y con canto, o con chorreras que
me encantan, mejor. Por ejemplo el Ma-
kinódromo es uno de los sectores más
me gustan, donde también empecé a
equipar vías cuando todavía no había ni
una chapa. Recuerdo que lo descubrí
porque subía por allí a coger fósiles.
Nosotros abrimos en la parte de arriba,
por entonces no teníamos el nivel de me-
ternos en el desplome de abajo; fue Juan-
DAVID MUNILLA
ma –con quien había coincidido antes en
El Verdón y tenía mucho más nivel que
nosotros– el primero que atacó el des-
plome grande y él mismo equipó la me-
jor línea, la Lourdes.
En todos estos equipamientos, ¿has teni-
do alguna financiación?
Yo me he gastado una pasta en chapas,
y me sigo gastando, aunque hubo un
tiempo que la Federación nos dio mate-
rial, hasta que entró otra persona en la
dirección y ya dejaron de darme chapas.
También aquí fui de los primeros en ha-
cer químicos propios, me compraba las
varillas de metal y los hacía con un ami-
go que era marmolista, Juan, que me pa-
saba la resina. Como yo no tenía dinero
para comprar sikadur, hacía otra pasta
con esa resina que la gente empezó a lla-
mar “moyadur”, se creían que lo había
inventado yo (risas).
24 I DESNIVEL.COM
MANUEL GÓMEZ
Y hoy en día, ¿sigues yendo a escalar a
El Chorro?
A mí me sigue gustando, además vivo y
trabajo en Coín, y es lo que más cerca me
pilla, así que todos los años voy equipan-
do alguna vía. Hace poco por ejemplo en
el sector de La Poema he equipado unas
cuantas vías duras por la cueva, con algún
octavo. Es un sector de chorreras, bolos y
desplomes que empecé yo a equipar y
sigo siendo un enamorado de él, la mayo-
ría de las vías que tiene son mías. De he-
cho todavía estoy en ello, y para esto me
están dando algunas chapas los de Rock-
fax. El sitio por el que estoy abriendo aho-
ra es un poco comprometido porque la
roca no es la mejor, tengo que ir de noche
para tirar los bolos y que no haya peligro.
Tres décadas, misma motivación:
foto actual en el rocódromo; arriba en la
Quasimodo (7b) de El Chorro en 1985; y
a la izquierda en Aparcamiento indebido,
en la pared del Cerro Cristo.
¿Qué piensas de la reconversión del Ca-
minito del Rey?
Creo que es una aberración. Es cierto
que todo el mundo tiene derecho a ir al
monte, y que es un sitio que es lógico que
se quiera arreglar y disfrutar de ello, pero
creo que podíamos haber seguido convi-
viendo perfectamente los turistas con los
escaladores. Ahora ya no podemos ni to-
car las instalaciones. Cuando paso por ahí
se me caen las lágrimas... un montón de
vías súper buenas que he equipado ahí,
que ya no se pueden escalar.
Tuviste suerte de nacer en otra época...
Sí, por un lado tuve suerte, aunque te-
níamos pocas vías para escalar, nos lo tení-
amos que montar todo nosotros, pero tam-
bién era todo más romántico, más auténti-
co... Ahora ya es muy difícil encontrar si-
tios nuevos, pero si le buscas el lado positi-
vo, la escalada tiene muchas cosas buenas.
Yo me lo sigo pasando bien todavía, sigo
disfrutando de la escalada y sigo motivado
con equipar. Con decirte que en mi auto-
caravana llevo siempre un “kit de urgen-
cia” para equipar, por si me encuentro al-
gún sitio bueno sin vías, jajaja... // E.M.
 LA PRIMERA AUTOBIOGRAFÍA DE

KRZYSZTOF
WIELICKI
MI ELECCIÓN
LUCHANDO CONTRA EL VIENTO DURANTE LA EXPEDICIÓN INVERNAL AL MAKALU DE 2000-2001. FOTO: COL. KRZYSZTOF WIELICKI

«Siempre procuro explicar a los jóvenes que

no hay fracasos, sino experiencias nuevas. Si las
recogen con paciencia y aprenden a sacar
lecciones de sus fracasos, llegarán a la cima de
sus sueños. Conquistarán su “Everest”.
Si no hay objetivo no hay vida».

KRZYSZTOF WIELICKI es una de las más

grandes figuras de la historia del ochomilismo.
En esta autobiografía en forma de entrevista, de
manera franca y honesta, aborda su trayectoria
deportiva y personal, y nos revela lo que
significa ser alpinista, los valores que representa
y la responsabilidad que entraña.

Krzysztof Wielicki
MI ELECCIÓN
Por Piotr Drożdż
272 págs. • 15 x 23 cm • 24 €.
 MANUEL
GÓMEZ TRUJILLO
Escalar y aportar
Lleva más de media vida vinculado a la escalada, siempre aportando: desde con equipamientos en
los ochenta para los primeros encuentros de escaladores de El Chorro, con su altruista y
comprometida labor como presidente de la Asociación Andaluza de Escaladores y, aún hoy,
trabajando en reequipamientos y en todo lo que esté en su mano en beneficio de la escalada.

A
mediados de los ochenta Ma-
nuel Gómez (Málaga, 1965) era
un fanático como cualquier
otro en esa época de eclosión de
la deportiva. Inauguró sectores equipando
vías y en los noventa fue uno de los prime-
ros en repetir líneas como la ahora mítica
Lourdes (primer 8a de El Chorro), si bien
su trayectoria estuvo desde los inicios vin-
culada al alpinismo y sus favoritas siguen
siendo las vías de escalada tradicional. Fun-
dador del Grupo de Montaña El Boquerón,
cuenta con ascensiones por Los Alpes, Hi-
malaya o Los Andes, regresando siempre a
El Chorro y otras escuelas malagueñas, que
ha visto crecer y transformarse. Es a ellas a
las que sigue dedicando el –mucho– tiempo
que le permite su profesión de bombero,
con las vistas puestas en un desarrollo en
especial de El Chorro en el que tengan cabi-
da los escaladores y su historia.
¿Qué recuerdos tienes de tus inicios?
Comencé a escalar en 1985 tras apuntar-
me a un curso de escalada del Grupo Alpi-
no Pinsapo, que básicamente te enseñaba
los conocimientos básicos de la época,
pero todavía muy centrado en el mundo
alpino, pues los profesores eran los escala-
dores de la generación anterior: encordar-
se al cuerpo, cuerda doble, rápel con el
ocho o a espalda, nudos, y el uso básico de
empotradores y clavos. La escalada depor-
tiva estaba eclosionando en la zona y con-
ceptos como el pie de gato técnico, cuerda
simple, cintas exprés, encadenar… esta-
ban abriéndose camino. Pero, gracias a
esta generación de montañeros alpinos,
me inicié en la escalada de grandes paredes
y el alpinismo. Un año después ya estaba
por Alpes haciendo algunas vías de roca y
clásicas de nieve como el Mont Blanc. Tras
el curso comencé a escalar con mucha ilu-
sión con otros compañeros, todos con 20
años de media. Estaban las cordadas Gá-
mez-Moya y Carlos-Felipe, cada una con
sus proyectos, y nosotros empezamos se-
guir sus pasos y sus vías.

¿Como viviste la eclosión de la deportiva?

Los 80´ fueron la bisagra entre el alpinis-
mo clásico y el free climbing en toda Euro-
pa, aquí por lejanía se empezó algo más
lento, pues todavía los conceptos del gra-
do, la ética de los equipamientos y de la
propia progresión no estaban plenamente
diferenciadas. Tras el uso del buril como
anclaje fijo, muchas rutas se empezaron a
equipar con espits, que eran lo más, sobre
todo el de métrica 10, reservado para los
pudientes. Se taladraban los anclajes a
mano, por lo que se optimizaba el número
de piezas, colocando siempre menos de las
necesarias, y en muchas rutas las fisuras
más evidentes se dejaban limpias, necesi-
COL. MANUEL GÓMEZ

tando el uso de friends o empotradores

para realizarlas. Actualmente quedan vías
así, especialmente en Los Cotos. Las vías
deportivas se escalaban con cintas exprés,

26 I DESNIVEL.COM
 DAVID MUNILLA

Manuel Gómez en el segundo largo

de Murcis Crack (A3+) en las Placas de
la Cantera, años 90; y a la izquierda,
en la tirolina de acceso al Cerro Cristo.

DESNIVEL.COM I 27
 «La escalada y sus vías deberían figurar en el ‘Atlas del
Patrimonio Inmaterial’, por su historia y por todos los beneficios
que ha reportado y reportará al ser humano»
pero también con cordinos de rápel, doble
cuerda y un buen surtido de fisureros.
Con la llegada del taladro, el parabolt
subió a los altares de la seguridad máxima.
La ética de preservar la roca, dejar limpias
las fisuras o no sobreequipar las vías se fue
quedando atrás. Había llegado la escalada
deportiva o gimnástica, como algunos la
denominaban, que en ese momento era la
evolución: chapas, seguridad, grado, des-
cuelgue, tallados de cantos…
El equipamiento de nuevas vías fue en
aumento, así como el carácter de las pro-
pias rutas fruto de la mentalidad que se fue
adquiriendo gracias a las aportaciones de
otros escaladores y los libros y revistas.
Como escalador, mis cervicales comenza-
ban a notar la evolución: de la pared de Los
Cotos se pasó al Polvorín, los Tajos del In-
vento, las Pasarelas, los Cañones, el Maki-
nódromo, la Poema Roca...
¿Qué ambiente había en esa época?
Había tranquilidad, ilusión y poca
gente, sin apenas escaladores extranje-
ros, y algunas visitas esporádicas de es-
caladores de otras provincias limítrofes.
Un buen fin de semana podía haber 10
personas escalando. A partir de 1990 la
afluencia aumentó.
28 I DESNIVEL.COM
Se realizaron cuatro encuentros de es-
caladores con carácter bianual, siendo el
de 1985 uno de los primeros en España y
con muchos asistentes. Siempre llovía.
Se editaron las primeras guías para dar a
conocer la zona, y los artículos en revis-
tas especializadas. Comenzaron los pro-
blemas con los hippies, la guardia civil,
los asesinatos de “el Dinamita” y las pro-
hibiciones por parte de Medio Ambiente
de acampar en la zona y escalar en el Ca-
mino del Rey, alegando la existencia de
flora amenazada.
¿Qué ofrecía la escalada en El Chorro?
Un entorno grandioso y salvaje, con mu-
chas paredes de diferente morfología y
orientación, poca afluencia de gente y un
clima muy benigno. Y la maravilla de tran-
sitar y escalar en los cañones.
Podríamos decir que El Chorro fue la
cuna de la escalada andaluza, ¿lo ves así?
No, la escalada surgió paralelamente en
otras provincias andaluzas. En la década
de los 60 y 70 ya se habían realizado im-
portantes rutas como los Extraplomos al
Veleta, el Naranjo de Bulnes o el Torreón
de Galayos. Se practicaba el alpinismo y lo
importante era escalar grandes paredes y
montañas, Las paredes “pequeñas” se con-
sideraban un entrenamiento para empre-
sas más serias. Pero ya en los 80, con el
cambio de mentalidad y la separación en-
tre alpinismo y escalada, El Chorro toma
protagonismo debido a la altura de sus pa-
redes, la variedad de sectores y su belleza
paisajística, convirtiéndose en la gran zona
de escalada del sur de España y un destino
de relevancia internacional.
¿Quiénes crees que han sido las figuras
más relevantes que han ayudado a la evo-
lución de la escalada en El Chorro?
La evolución de la escalada es continua.
¿De qué evolución hablamos? Están los
que más vías han equipado, el descubridor
de sectores, el de aperturas más éticas o los
grados más difíciles, el más mediático...
Habría que desglosar los méritos por pe-
riodos y especialidades. Pero, mojándome,
las cordadas de Miguel Moya/Antonio Gá-
mez y Carlos Pérez/Felipe Crespo, con sus
particularidades, sentaron las bases de la
escalada moderna en El Chorro.
Tú mismo has participado activamente
en los equipamientos, ¿hay alguna vía o
sector del que te sientas más orgulloso?
He equipado muchas vías y sectores
nuevos, nada destacable, pero siempre he
intentado que prime la calidad y seguri-
dad. Lo que más he realizado hasta la fecha
son los reequipamientos, trabajé mucho
en todos los encuentros de los años 80
abriendo nuevas vías o acondicionando
Derecha, Manuel terminando la Manolo Wonder
(A2+) en la Placa de la Cantera. Izquierda en el
L3 de Rayito de Luna, y reunión de gran parte
de la AAEE ante el juicio de Loja (Granada):
José Berbel, Ñaco, Manuel Almeda, Cecilio
Jiménez, Pablo, Juanma García, Manuel,
Marora, Javi Morales, David Munilla y Charli.

accesos, rápeles o reequipando para que

los asistentes a los encuentros encontraran
rutas de calidad y con los mejores estánda-
res de seguridad. Actualmente sigo hacien-
do lo mismo, pero más concentrado en las
vías clásicas, que están muy abandonadas
y es un tipo de escalada que me llena más.

¿Qué supuso en tu opinión la remodela-

ción del Caminito del Rey?
Tengo el corazón partío. No me gusta.
Obviamente, la degradación de la antigua
pasarela era evidente, el auge de los practi-
cantes y las empresas de vías ferratas incre-
mentaban el riesgo de accidentes. El suelo
y los “cables de vida” existentes eran un
riesgo real. Todo esto ha coincidido en un
momento, a nivel nacional, de desarrollo
turístico del medio natural con estructuras
artificiales para hacerlo más accesible y se-
guro al turista medio. En el caso de El
Chorro no se ha hecho una rehabilitación,
sino que se ha construido una pasarela
nueva, obviando la anterior para que sea
económicamente viable y con unos están-
dares de seguridad óptimos. Como escala-
dores nos han fastidiado. Han eliminado
FOTOS: COL. MANUEL GÓMEZ

de un plumazo el patrimonio vertical de

años de historia de la escalada en Andalu-
cía. Que la pasarela ha generado riqueza en
cuanto a empresas, alojamientos, restaura-
ción es innegable, y me parece estupendo.

Parece que, tras unos años algo olvidada,

la escalada ha vuelto a resurgir aquí, ¿no?
Solo sé que cada vez hay más gente esca-
lando, haciendo ferratas, alpinismo o bici-
cleta. En El Chorro se han prohibido nu-
merosos sectores y los existentes están
cada vez más saturados. El buen clima, los
vuelos low cost, las redes sociales y las nu-
merosas vías deportivas de grado medio-
alto fomentan ese resurgir. Evidentemen-
te, las vías largas equipadas atraen a mucha
gente deseosa de “aventura”.
¿Cuáles crees que son los principales
problemas que afronta hoy El Chorro?
El producto turístico del Caminito ha
traído la masificación y saturación de las
zonas de acceso y parking, pero es gente
que llegan y se va tras terminar las pasare-
las. Para los escaladores y senderistas fal-
tan instalaciones públicas o privadas como
camping, área de autocaravana, parking,
etc. La regulación de la escalada existente
no nos gusta, pues no ha sido debidamente
consensuada ni estudiada. Hay que pensar,
en términos económicos, que un escalador
habitual visita de media el Chorro dos fi-
nes de semana al mes durante 8 meses. Eso
no lo hace ningún turista ni senderista.
¿Qué solución hay ante estos problemas?
Es necesario una inversión pública en
infraestructura turística como son cam-
ping, áreas de autocaravanas con zonas de
reciclaj. Señalizar y dotar de más plazas y
zonas de aparcamiento para los escalado-
res. Y, por supuesto, reiniciar un proceso
de negociación para dotar a El Chorro de
una regulación sobre la escalada real, que
concilie las posturas de la administración y
el colectivo escalador. La escalada y sus
vías deberían ser Patrimonio de la Huma-
nidad o figurar en el ‘Atlas del Patrimonio
Inmaterial’, por su historia y por todos los
beneficios que ha reportado y reportará al
ser humano. Si el mollete de Antequera, el
aceite de oliva, el flamenco o los espetos de
sardinas son dignos de esa calificación,
¿por qué no la ESCALADA? // E.M.

DESNIVEL.COM I 29
 AÑOS 80 A 2000 EN
EL CHORRO
UNA HISTORIA DE
PERSONAJES
una única voz. Fueron muchos los que se integraron en sus rocas, todos ellos

personajes carismáticos totalmente entregados a la causa de la escalada,

que contribuyeron a darle forma.

DAVID MUNILLA

30 I DESNIVEL.COM
 Javi Morales
escalando en el
primer cañón
(zona actualmente
prohibida para
la escalada) la vía
Lobo de mar (7a+).

DESNIVEL.COM I 31
 C
Arriba, Dani Gaona OMO ya hemos visto las páginas pre-
en el mítico techo de vias, los ochenta fueron años convul-
Popeye (7b+), en la sos en El Chorro, tal y como lo fueron
zona de las Bañeras también en el resto del panorama de la
con el antiguo escalada nacional, con unos aires de
Caminito del Rey al cambio que llegaron al sur con más retraso, pero
fondo; y a la igualmente soplaron con fuerza. En los inicios de la
derecha Patricia en década todavía prevalecían las aperturas desde abajo,
este mismo setor con el burilador a mano y subiendo hasta donde se
(hoy de acceso podía en libre y el resto en artificial, un estilo que en
restringido). realidad unos cuantos no llegaron a abandonar, con-
Abajo, portada viviendo en relativa armonía con el estallido de la de-
de la primera guía de portiva. A la expansión de la nueva corriente contri-
escalada publicada buyeron los sucesivos encuentros de escaladores que
de El Chorro (1987). se organizaron, como nos detalla Antonio Gámez en
su cronología unas páginas más adelante. El punto de
encuentro era el bar de Isabel, de obligada visita des-
pués de la escalada, y más tarde también el refugio
que el propio Antonio construyó y gestionó desde fi-
nales de los ochenta a mediados de los noventa.
La visita de los foráneos en esos años, atraídos
por aquel paraíso de roca y buen tiempo, propulsó
las nuevas técnicas de equipamiento desde arriba, y
con ello el aumento de la dificultad. Uno de los más
ANTONIO GÁMEZ

influyentes fue el francés Stephan Girard, que pasó

largas temporadas en El Chorro dejando líneas por
entonces futuristas, como la ya mencionada en el
artículo previo Poema Roca, junto a Antonio Gámez

32 I DESNIVEL.COM
FOTOS:DAVID MUNILLA
ANTONIO GÁMEZ
en 1991, que dio el espaldarazo definitivo a las líne-
as de concepción deportiva. Así relató aquella aper-
tura el mismo Stephan en un artículo titulado Ca-
minar en el aire que se publicó en la revista Desnivel
nº 60: «De todas las que habíamos equipado, sin
duda esta era la más extravagante. La dificultad que
buscábamos la hallamos en el “bombe”, uno de los
tramos claves de la vía. Jugando con el vacío, nos
lanzamos a realizar péndulos gigantescos. Lejos, en
el aire, somos como niños en el extremo de un co-
lumpio inmenso. El placer es mayor mientras la
imaginación lo permite, descubriendo las formas
insensatas que aquí forma el relieve». En este texto
ya se describía El Chorro como “La zona de escala-
da más importante del sur de España, con más de
300 itinerarios tanto de escalada deportiva como de
escalada clásica, que no defraudará a los amantes
de la superación vertical”. Antes de fallecer triste-
mente muy joven en un accidente cuando hacía tra-
bajos verticales, Stephan dejó otras buenas líneas
como Café cous bourbon (o “La café”, como la lla-
man los locales) que abrió en 1992 solitario en el
sector Momia de las Frontales, con 150 metros y un
grado de 7a (6b+ obligado).
Libertad y fanatismo era la dieta básica en El Cho-
rro en los ochenta y los noventa, con una amplia fami-
lia de personajes pintorescos que se movían por las
rocas como si no existiese un mañana haciendo lo
único que querían hacer: escalar. Claro que, como en Arriba a la
todas las familias, no faltaron los momentos de armo- izquierda, el activo
nía ni tampoco las desavenencias, que aquí tomaron escalador local
forma de chapas de más o de menos. El espacio eso sí Carlos Jiménez en
lo compartían con comunidades hippies que durante el L3 (6b+) de la
un tiempo se asentaron en las cuevas y las casas del clásica Cuando se
pueblo, atraídos por la belleza de su paisaje y por ese lo diga a mis amigos
espíritu que se respiraba contrario a las normas. Así lo de Pared de África,
recuerda el granadino Javi Morales: «Parte de El Cho- al inicio del primer
rro pertenece a Renfe y parte a la Hidrográfica, por allí cañón. Debajo
había casas abandonadas y como en aquel momento el francés Stephan
el camping era libre, cada uno se apalancaba donde Girard haciendo
quería. Venían hippies que no eran escaladores, bus- deportiva la zona de
caban el monte y la libertad y ahí estaban tomando es- las Encantadas
tramonio todo el día colocadísimos. Nos mezclába- y a su derecha el
mos con ellos, pero cada uno iba a lo suyo...». Encon- granadino Paco
tramos también historias dignas de una película de te- Fernández en
rror, con asesinos huidos y hasta muertos, pero sin Pedorros y macacos
duda superan en abundancia las anécdotas lumino- (7b) en la pasarela
sas vividas en estas paredes, que a principios de los del Caminito del Rey.
90 vieron nacer al primer “niño mutante” de nuestra
escalada: Bernabé Fernández. A muchos de estos es-
caladores y escaladoras les cedemos la palabra en las
siguientes páginas, teniendo en cuenta eso sí que las
versiones de una misma historia puede ser tan varia-
das como los colores de su ropa en esos años.
Redacción DESNIVEL
DESNIVEL.COM I 33
 A
PROVECHO este artículo
para reivindicar la voz de
muchos escaladores que con-
sideramos que prohibir la es-
calada con argumentos falaces en todo el
desfiladero, permitiendo la explotación
del Camino del Rey para el turismo de
masas y despreciando 50 años de historia
de la escalada a nivel mundial, es una in-
volución y un acto de injusticia por parte
de las administraciones implicadas, que
se debe revertir cuanto antes.

1984, el ambiente predeportivo

Con dieciocho años yo era un empleado de
notaría con una carrera prometida que no
prometedora, hasta que una mañana de
oficina escuché escalar unido a El Chorro,
unas palabras que escondían un aprendiza-
je salvaje que marcaría buena parte de mi
juventud. El domingo siguiente me encon-
traba en Los cotos escalando en zapatillas y
pegando resbalones en las míticas placas
de la Alucinosis. Para la siguiente vez me
compré unas botas de cuero Vendramini y
un arnés integral que solo usé una vez, el
tiempo que tardé en ver unos pies de gatos
y surgió el amor a primera vista.
De nuevo a la semana siguiente vendí
aquel material que marcaba el fin de una
DAVID MUNILLA

época y pude comprarme mis primero

pies de gatos Calma, ya por fin con goma
cocida, un arnés de cintura (el famoso
Don Williams) y una cuerda Roca simple
de 45 metros y 11 mm, y me lancé a reali-
INICIO, EVOLUCIÓN E INVOLUCIÓN zar en tren el que sería mi primer viaje de
escalada en al Peñón de Ifach. Ya no había
DE LA ESCALADA DEPORTIVA: marcha atrás. No me había ocurrido nada
que no le estuviese pasando a buena parte

Cronología de de los escaladores de mi generación.

El Chorro seguía siendo el campo, el
último rincón de todos términos de limí-
trofes, olvidado de la administración. Un

Antonio Gámez vasto territorio repleto de paredes que no

eran de nadie (o al menos eso pensába-
mos) y donde nosotros hicimos “lo nues-
tro”. Cada fin de semana, ocultos entre
Antonio es una figura clave de la escalada deportiva en El Chorro, los pinos, celebrábamos su posesión en
un ritual de hogueras y el peor 'pintao' lo-
creando hasta 15 sectores y unas 200 vías en su extensa e cal, guitarras y venta de pianos incluida.
Por entonces mis referencias en la esca-
influyente trayectoria, que abarca desde la compra del primer lada eran los locales Felipe Crespo y Car-
los Pérez. Ellos eran el último relevo gene-
taladro de batería que hubo en la zona a la gestión del refugio racional de los pioneros, los máximos ex-
durante casi una década, sin dejar de abrir desde abajo vías largas ponentes de la escalada en Málaga del mo-
mento, cuya filosofía se encontraba a caba-
emblemáticas. Nos cuenta aquí cómo fueron sus vivencias y sus llo entre la apertura de los itinerarios de
gran pared incluyendo artificial y el naci-
aportaciones principales en esta historia. miento de la escalada libre-deportiva.

34 I DESNIVEL.COM
Derecha, en Era virgen..., una de las vías
deportivas abiertas en los noventa; y a la
izquierda, retrato de Antonio en esos años.
Además de prolífico equipador y empresario
(gestionó una tienda, un refugio, ahora
un rocódromo...), Antonio siempre ha sido un
gran aficionado a la fotografía.

Por mi parte, me encontraba inmerso en

esa encrucijada de filosofías, combinándo-
la con las una corriente más deportiva que
proclamaba que el equipamiento de vías
no tenía por qué hacerse de forma manual
ni desde abajo, lo que generó tensiones.

1985, I Encuentro de escaladores

Mi primer año como escalador fue de
aprendizaje totalmente autodidacta. Había
aprendido lo suficiente para no matarme
(o eso creía yo) y ya me encontraba prepa-
rado poder explorar nuevas fronteras.
Del 1 al 3 de noviembre de 1985 cele-
bramos el I Encuentro de Escaladores en
el sur de España, un evento con el que
pretendíamos dar a conocer el potencial
de El Chorro para la escalada y conocer-
nos los escaladores de Andalucía.
Es año acabababan de llegar a Málaga
los hermanos Miguel y Gabriel Moya, con
quienes coincidí en la Sociedad Excursio-
nista de Málaga (que por aquel entonces
se encontraba en el centro de la capital),
con quienes trabé grandes lazos de amis-
tad y (especialmente con Miguel) compar-
tí muchas horas de escalada. Ellos, que ve-
nían de la capital, traían otra mentalidad
más deportiva y equiparon a mano desde
arriba la vía Madriles (7a) que en ese mo-
MANUEL GÓMEZ TRUJILLO

mento fue la vía deportiva más dura de El

Chorro. Pero el protagonismo de la Ma-
driles tuvo poco recorrido, porque ese
mismo año nos visitaron los ingleses Du-
can McCallum y Graham Pedney y equi-
paron The policeman stole my walkman
(6b+), Café bonk (7a+) y Stram donkey
(7c), rompiendo así la barrera del grado.
Con motivo del I Encuentro y para ade-
centar la imagen de nuestra escuela más
acorde con las nuevas corrientes, reequi-
pamos muchas vías un tanto precarias de
Los Cotos. Fue cuando comprobé el enor-
me esfuerzo que suponía meter un espit.
Por entonces también leí en una revista Ex-
trem la nueva filosofía de Josep Batlle y nos
visitó Txema Gómez, que estaba haciendo
la mili en Málaga y quien nos dijo que aún
teníamos mentalidad de alpinista. No sé
qué quería decir exactamente, pero con lo
bien que él escalaba debía tratarse de algo
malo, o cuanto menos atrasado...
Todo esto me hizo decidirme por com-
prar un taladro, que por aquel entonces
suponía una cuantiosa inversión, que
abordé a medias con Miguel Moya. Así
nos hicimos con el primer taladro a baterí-
as de Andalucía, que Hilti tuvo que pedir
directamente a Alemania, porque en Espa-
ña aún no se encontraban, y que tardamos
unos cuatro meses en recibir.
Este nuevo avance nos permitió equi-
par a gran velocidad y fue un impulso
para el despegue de El Chorro en su ca-
mino de convertirse en un importante
destino escalada. Los primeros sectores
que desarrollamos fueron El Invento
(nombre que pusimos en honor al tala-
dro) y El Polvorín, y también equipamos
las dos primeras vías de lo que más tarde
se llamaría el Makinódromo. Sin embar-
go, este desarrollo no fue bien visto por
los escaladores locales del momento,
muy influidos por el libro Yosemite de
Meyers, pues esa forma de equipar vías
(desde arriba) no era abrir (desde abajo)
y por tanto no tenía el mismo valor. Esto
generó cierta confrontación y tensiones

DESNIVEL.COM I 35
 con los locales, que finalmente termina-
ron asumiendo la nueva corriente. Con
motivo del encuentro, la Sociedad Exur-
sionista de Málaga publicó un folleto con
los primeros croquis dibujados por Mi-
guel Moya, y se incorporan nuevos esca-
ladores locales que durante un tiempo
harían cordada, como son Federico
Quintero y Manuel Trujillo. También en
1985 el jienense Ramón Fernandez ‘Ra-
monaco’ abrió la vía Chiripitiflauticos, en
la que después sería la pared de África.
COL. ANTONIO GÁMEZ
1986, aperturas desde abajo
La idea de que la pureza en la escalada im-
plicaba abrir desde abajo se había quedado
en mi mente, y me llevó a explorar en esa
dirección. Así, al segundo año de iniciarme
en la escalada compaginamos el equipa-
miento deportivo con abrir vías desde aba-
jo, compartiendo ambas actividades con
Miguel Moya, con quien haría cordada du-
rante varios años. Abrimos algunas vías
emblemáticas de El Chorro como Bellado-
na, Estrella del sur, Excedente de cupo, Ca-
mino sin andar, Amptrax, Kalimba de luna
(fisura que hoy se utiliza para la práctica
artificial durante la formación de los técni-
cos deportivos), que por aquel entonces
abrimos con escasos medios.
Arriba, retrato de Antonio hace unos años, en la
puerta del refugio de Galayos, en uno de sus
muchos viajes de escalada. Abajo, ambiente
durante el primer encuentro de escaladores de
El Chorro (1985), y a la derecha, Antonio en esa
época, escalando Numolite Rouge (6b+).
36 I DESNIVEL.COM
1987, II Encuentro de Escaladores
El segundo encuentro se celebró del 9 al
12 de octubre, si bien aquel año fue muy
convulso pues la atmósfera estaba enrare-
cida por la presencia del “Dinamita”, un
asesino en serie que se encontraba fugiti-
vo en El Chorro, acompañado de su esco-
peta recortada (en mayo de ese año mató
a dos jóvenes extranjeros mientras equi-
pábamos El Polvorín).
También por lo sucedido a los hippies-
naturistas que compartían la casa “maldi-
ta” (se llamaba así porque en esa casa apa-
reció ahogado en una tinaja un hijo de la
familia que la construyó). Los hippies vi-
van en el primer piso, los escaladores en
la planta baja. Estos hippies se reunían la
mayoría de las noches en la playa de río
justo donde empieza el Espolón Masai,
hasta bien entrada la madrugada; era una
verdadera tribu en torno a una gran ho-
guera, casi todos desnudos y descalzos,
muy bronceados y con largas melenas en-
crespadas. Algunas noches de luna llena
terminaban su festejo con estramonio, es-
calando en free solo en la pared Los Cotos.
Un día apareció muerto un hippie des-
pués de una revuelta interna... Finalmen-
te, la Guardia Civil dinamitó la casa y tu-
vimos que dormir al raso.
Aquel mismo año, cansado del ambiente
burocrático de la notaría, a los 20 años de-
cidí abrir El campista, que fue primera
tienda especializada al material montaña
de Málaga; por aquel entonces existía La
Trucha, que ya traía algo de material, pero
la mayoría de los escaladores teníamos que
hacer nuestras compras en Madrid o Cha-
monix (cuando viajaba algún amigo volvía
con el coche repleto con los encargos).
También ese año publicamos la prime-
ra guía de escalada, un trabajo que realicé
conjuntamente con el Grupo Alpino Pin-
sapo, en la que recopilamos las 154 vías
existentes hasta entonces (actualmente
existen más de 1500 vías). Aquella efer-
vescencia de equipamiento y las nuevas
vías atrajeron a los vecinos escaladores
de Granada, que por aquel entonces era
la elite de la escalada en Andalucía, con
figuras como Juan Manuel García, Javier
Morales y Paco Fernandez (que falleció
psoteriormente en el Himalaya), así
como el jienense Ramon Fernandez de
Jaén y la entrada en escena de Bernabé
Fernández. Aún recuerdo aquella con-
versación con Juan Manuel García a la
entrada del túnel de Los Cotos cuando
Miguel Moya y yo volvíamos de equipar
nuevas vías en las paredes del Polvorín y
nos tropezamos con Juanma, que volvía
de probar la vía Lourdes y se puso a exli-
carnos por dónde discurría:
– Esa vía es para los máquinas, le dije.
– Es la más evidente de la pared, comen-
tó Juanma
– Sí, la pared entera es para las máqui-
nas, es un verdadero maquinódromo, le
contesté. Y así nació el nombre del sector.
1988, I Competición provincial
El año anterior, en un encuentro celebrado
en Leiva 1987, el ambiente fue tan bueno y
me gustó tanto que quise repetir esa expe-
riencia, así que decidimos organizar la pri-
mera competición de escalada en roca de
Andalucía. Su preparación dio lugar al na-
cimiento del sector La Encantada (con Ana
León y Rafael Díaz equipando las vías),
que ganó un joven Bernabé Fernández,

FOTOS: MANUEL GÓMEZ
quien había empezado a escalar el año an-
terior, y ya había realizado 8a+ con E por
doquier, vía que repetiría poco después Ig-
nacio Carrillo. Este año publiqué el primer
artículo de El Chorro en el nº 35 de Desni-
vel, titulado ‘Cal y caliza’, que describe la
zona como “un paraíso donde invernar”.
1989, III Encuentro de escaladores
Después de un largo verano escalando en
El Verdón, nostálgicos de su temperatura,
ante el sofocante carlor de El Chorro qui-
simos replicar nuestro particular paraíso
equipando el sector de Las Bañeras. Nos
gustó tanto que durante el mes de no-
viembre, totalmente fuera de temporada
para escalar en este sector, organizamos
en torno al mismo el III Encuentro de es-
caladores en el camping de Ardales. La
foto del cartel se realizó sobre la vía Era
virgen, primera que se abrió en las Bañe-
ras, a cargo de Ramón Fernandez y vía
que fue víctima de la corriente deportiva
del momento. Desde entonces, durante
años, Las Bañeras fue el sector por exce-
lencia de los veranos en El Chorro.
También este fue el año que traspasé la
tienda de montaña y compré una finca en
las Angosturas, en la que construí el alber-
gue Las Encantadas, un edificio de 350 m
que fue el primer refugio de escalada de El
Chorro. Con este mismo nombre bauticé a
las paredes que se encontraban próximas
al refugio. Fue un punto de encuentro de
escaladores clave durante los casi diez
años que permaneció abierto.
En esos años participamos en algunos
rescates realmente rocambolescos, como
aquel que nos avisó la Guardia Givil y
que sacamos a las 4 de la mañana al bo-
rracho que había caído por el boquete de
primer túnel atado a una puerta mientras
llovía la calderilla que le caía de los bol-
sillos, con él gritando que era suya... Y
otros tantos en los que tuvimos que ayu-
dar los escaladores, que pusieron en evi-
dencia la necesidad de que El Chorro
contara con un puesto de rescate.
1991, I Competición nacional
celebrada en Andalucía
Este año celebramos del 28 al 31 de di-
ciembre el IV Encuentro de Escaladores,
en el refugio de la Encantada, e incluido en
el mismo, organizamos la primera compe-
tición puntuable para el ranking regional.
Gracias a un acuerdo con la Federación
Valenciana, se abrió a la participación y vi-
nieron escaladores de otras comunidades.
En ella participaron destacados escalado-
res del momento, como Paco Fernández,
Rafael Díaz o Javier Morales, llevándose el
premio este último, con Ana León en chi-
cas. Las vías las equipamos el francés Ste-
phan Girard y yo. Esta vez se habían anun-
ciado importantes premios en metálico,
que iban a correr a cargo de la Federación
Andaluza, si bien esta nunca llegó a hacer
los pagos, a pesar de las muchas reclama-
ciones, lo que para mí supuso una desagra-
dable experiencia y me quitó las ganas de
volver a organizar más competiciones.
El Chorro ya contaba con unas 400 vías
de escalada (250 más que la primera guía
de cuatro años antes), y se había alcanzado
el grado máximo de 8c. También volví a
publicar un artículo en Desnivel nº 64 titu-
lado Caminar en el aire, en el que se dio a
conocer vías como la Poema Roca, que más
tarde daría nombre al sector, y contribuyó
a que la zona fuera cada vez más conocida.
De los 90 a la actualidad
En 1993 di un cambio radical a mi vida,
abandonando la actividad de aperturista-
equipador, y pasando a dedicarme duran-
te unos años al mundo de las antigüeda-
des, que me llevó a aprender mucho tam-
bién de arquitectura.
En la actualidad me encuentro apartado
de bullicio en que hoy se ha convertido El
Chorro como consecuencia de la explota-
ción del Camino del Rey como destino de
turismo masivo. Trabajo en un rocódromo
en Malaga (www.beclimb.com), sigo esca-
lando y equipando, además de impartir
formación sobre escalada y de estar inmer-
so en el proyecto beclimboutdoor.com, en
torno a las actividades de montaña. Sobre
todo en los últimos años escalo y equipo
vías en Alfarnatejo, que probablemente en
pocos años se convertirá en una de las más
importantes zonas de escalada de Málaga.
Antonio GÁMEZ
DESNIVEL.COM I 37
 JUANMA GARCÍA
«Los escaladores
le dimos vida a este lugar»
Su nombre suena de forma unánime cuando se trata de señalar a los escaladores que más impulsaron
la escalada deportiva de dificultad en Andalucía. Juanma sigue escalando, pero ha dejado
de frecuentar El Chorro, que considera sometido a una “sobreexplotación comercial”, como
nos cuenta en esta entrevista.

A
UNQUE reniegue de su mote,
muchos le recuerdan todavía
como El iguana, y es que el
granadino Juanma fue sin
duda uno de los escaladores más emble-
máticos de los inicios de la escalada de-
portiva en Andalucía, con un talento que
lo situó muy por delante del resto de es-
caladores del momento. Solo un jovencí-
simo Bernabé Fernández llegó un poco
más tarde para compartir con él pegues a
las vías más duras. Suyo fue el primer 8a
encadenado en El Chorro, la ya mítica –y
a estas alturas muy resbaladiza– Lourdes,
en el sector Makinódromo, que equipó el
4 de mayo de 1988 y encadenó el 8 de
agosto del mismo año. Dos años antes,
había firmado ya en el que posteriormen-
DAVID MUNILLA
te se asentaría como primer 8a encadena-
do en España: Otavía, en la zona granadi-
na de Dílar, una estética línea de unos 14
metros que aún hoy cuenta con muy po-
cas repeticiones. «Al principio hacíamos
bouldering, que es como lo llamábamos,
más o menos en el año 84. Luego empe-
zamos con al cuerda, hacíamos barbari-
dades... Lo llamábamos “escalada de es-
cuela”, lo de deportiva no fue hasta años
después», cuenta sobre los inicios. «Me
acuerdo que, con 15 años, me iba andan-
do desde Granada a Cahorros; a los tres
meses de escalar ya me había conseguido
hacer casi todas las vías que había ahí
abiertas por entonces». Seguir tachando
el resto de vías de las zonas andaluzas era
el siguiente paso lógico.
¿Qué encontraste cuando llegaste al
Chorro por primera vez? Creo que para
entonces ya tenías hechas casi todas las
vías duras de Los Cahorros, ¿es así?
Llegué a El Chorro en el verano de 1985,
gracias a que un chico que estaba estudian-
do en Granada, que era de Málaga, me ha-
bló del lugar, diciéndome que estaban
equipando vías nuevas. Ya en ese año ha-
bía un libro de piadas y una guía en el bar
de la Isabel; claro que había pocas vías en
comparación a los años dorados del cañón.
Recuerdo 5 o 6 vías en las Placas de los Ve-
nenos y una treintena en Los Cotos. La
mayoría de las vías la había equipado los
hermanos Gabriel y Miguel Moya.
Escalábamos por la mañana temprano y
al atardecer, debido al calor reinante en

38 I DESNIVEL.COM
 A la izquierda, foto actual de Juanma en un
desplomado 7c de Los Vados (Granada).
En la otra página, de izquierda a derecha, en
la final de la competición celebrada en
Despeñadero (Granada) en 1990, escalando
un 6c+ en solo y en Los cocodrilos no lloran
(7c), estas dos últimas en el sector El
Polvorín de El Chorro.

esa época en El Chorro; durante las horas

meridianas del día, las de más calor, nos
dedicábamos a ver pasar el tren en los tú-
neles y a hacer tiempo para la tarde, ya que
en ellos la temperatura era más llevadera.
En cuanto a las vías realizadas en Caho-
rros, sí había conseguido hacer las más du-
ras de la época que estaban consideradas
como escalada libre. Por otro lado, y antes
de mi viaje al Chorro, liberé algunas líneas
clásicas y emblemáticas de esta escuela que
estaban en artificial, la mayoría a vista.
Fueron años muy fructíferos en relación
con la escalada granadina.

Entiendo que desde el principio tuviste

que combinar la escalada con el equipa-
miento porque había pocas vías de tu ni-
vel, ¿cómo era este proceso?
Bueno, siempre había vías que probar y
escalar a vista. En mi primer viaje pude
afortunadamente hacer todas las vías que
nos propusimos a vista. Recuerdo que en
una de ellas, Madriles, cotada entonces de
7a, me sorprendí ya que la conseguí a vista
tras un buen rato luchando. Era una esca-
lada muy técnica de placa y tuve suerte de
hacerla ya que me costó bastante.

Cuéntame sobre la ya mítica Lourdes

(primer 8a de El Chorro, en 1988). Esa
frase tuya de “Es como la Mocos de hie-
rro (6b) pero de casi 40 metros”, ¿es
cierta o leyenda? ¿No la veías más pare-
cida a Otavía (primer 8a de España), que
habías encadenado en el 86?
La ruta la descubrí dando un paseo por
El Chorro, explorando nuevos y recóndi-
tos lugares. Subí una tarde hacia lo que
hoy es el Makinódromo, ya que llamaba
mi atención cuando iba andando por el
FOTOS: COL. JUANMA GARCÍA

Caminito del Rey y miraba las placas del

Invento, en su parte superior.
Tras ese primer reconocimiento, tuve la
seguridad de que ese era el lugar adecua-
do, había desplome, canto, era suficiente-
mente largo y se veía factible el subir en li-

DESNIVEL.COM I 39

FOTOS: COL. JUANMA GARCÍA
Arriba, encadenando la Lourdes, y abajo recién
completado su equipamiento, con su amigo
Pepe Hinojo (†). A la derecha, escalando a vista
Estás podrío (8a) en El Chorro, y en la página
derecha, con Bernabé Fernández, el dúo que
impulsó la dificultad en la escuela.
40 I DESNIVEL.COM
mez, estamos en el bar tras el equipa-
miento de la vía y me preguntó que como
era, el grado… y era tal su insistencia que
irónicamente le dije que tenía canto y que
aproximadamente sería como la Mocos de
Hierro pero cuatro veces más larga.
Recuerdo que me comentaban que ha-
bían subido algunos escaladores pero que
no conseguían pasar de la primera chapa
y que la segunda estaba “alta”, yo les con-
minaba a que siguiesen, ya que tras ese
primer paso había más canto. No tuvo re-
petición hasta 1990 por un francés.
¿Crees que aquel primer octavo de El
Chorro fue un desencadenante para que
subiera el nivel de la zonas?
Creo que algo contribuyó, quizás a
abandonar la idea de los bordillos y pensar
en largo, duro y en libre. Fueron años
muy intensos y, junto con Bernabé Fer-
nández íbamos descubriendo nuevas vías.
Él equipaba bastante y Miguel Moya tam-
bién, cosa que yo aprovechaba en mis visi-
tas a El Chorro para poder medirme a vis-
ta sobre todo y otras veces poder firmar al-
guna primera de sus magníficas líneas.
En aquellos años los viajes a la meca de El
Verdón era lo más entre los escaladores,
y puede que esa garganta tenga cierto pa-
ralelismo con El Chorro, por su tipo de
escalada, ¿estás de acuerdo? ¿Cómo era la
experiencia en aquellos viajes y cuáles
eran vuestras vías de referencia?
Sí había un parecido significativo, aun-
que la calidad de la caliza de El Verdón es
bre por el tipo de agarres existente. Al día
siguiente, nada más desayunar, subimos
mi amigo Pepe Hinojo (†) y yo cargados,
con el objetivo de trazar una nueva línea
en ese lugar. Por la tarde terminamos de
equipar la vía, hicimos alguna foto y nos
retiramos. Recuerdo que tras estar todo el
día equipando y para desmontar las cintas
y la cuerda, la probé en top-rope llegando
a la cadena sin caídas eso sí, me costó bas-
tante aunque se dejaba hacer ya que había
buenos agarres. En esos tiempos no utili-
zábamos rodillas ni empotres para repo-
sar, por lo que la vía realicé en ese estilo,
tanto ese día como en su encadenamiento
en el mes de agosto, ya de primero. Como
anécdota, lo del encadene fue incluso co-
locando las cintas y alguna foto hay por
ahí con las cintas en bandolera.
En referencia a la anécdota de la Mocos
de Hierro (ja,ja) que fue con Antonio Gá-
 DAVID MUNILLA
«La época dorada fue la llegada de los hermanos Moya, Bernabé para descubrir y trazar nuevas
líneas. Los encuentros de escaladores ce-
el aporte de los taladros y la genialidad incansable de Bernabé lebrados por supuesto trajeron mucha
actividad vertical a estas paredes.
para descubrir y trazar nuevas líneas. Los encuentros de
escaladores celebrados por supuesto trajeron mucha actividad ¿Cómo crees que se ha gestionado El Ca-
minito del Rey?
vertical a estas paredes». El resultado es que en la actualidad es
una atracción, se ha prohibido la escalada
en todo el cañón relegándonos a los esca-
inigualable. La primera vez que fuimos a aparte de mis realizaciones en Verdón, ladores a prácticamente solo Las Fronta-
Verdón fue en 1986 y, por un error con la Buoux o Frankenjura. les. Tras esto no puedo más que pregun-
guía, en vez de un 6b+ que era nuestro ob- tarme con qué cinismo e hipocresía se ha-
jetivo, nos metimos en un 7a que hice a ¿Hay alguna otra vía de El Chorro que bla de protección del medio ambiente
vista. Mi primer pensamiento fue que te haya dejado un recuerdo especial y cuando luego se introducen visitantes de
¡vaya con los “sextos” franceses! Mis ami- por qué? forma exacerbada en el cañón.
gos que venían detrás lo pasaron regular y Lourdes por lo referenciado más arriba,
es que ¡solo iban a hacer quintos! Al día si- la Tregua del Pedal 7c+ por lo bien que me ¿Qué es lo que más te gusta y lo que me-
guiente comprendimos…. De ese viaje re- sentí tras hacerla a vista (con el emblemáti- nos cuando vuelves a escalar hoy en día
cuerdo traerme vías como Polpot, Papy on co Carlos Pérez Rico de asegurador), Estás a El Chorro?
Sight y Pichenibule completa, entre otras. podrío (8a) porque la conseguí a vista el Lo que más el entorno y los recuerdos
mismo día tras encadenar Lourdes, É por que me trae de épocas pasadas, la sencillez
¿Hacías algún tipo de entrenamiento en doquier 8a+ (primera ascensión) porque la de sus habitantes. Lo que no me gusta está
esos años? hice cuando estaba calentando en ella, Los claro, en lo que se ha convertido, ¡lo han
Escalar, escalar, escalar, bloque, blo- cocodrillos no lloran por sus movimientos y convertido! apartando a los escaladores
que y bloque. Estábamos todos los días Polvo de ángel por su estética. del entorno del cañón, la sobreexplotación
“liados”, era una época de mucha roca y comercial que hay y el ver líneas de escala-
poca fiesta. ¿Cuáles crees que han sido los momen- da que ya no se pueden realizar por primar
tos clave de la evolución de la escalada intereses particulares. Los escaladores le
¿Cuál fue el grado máximo que llegaste a en El Chorro? dimos vida a ese lugar y recuerdo como me
encadenar? Pienso que la época dorada fue la lle- decía una vez un cabrero: “Aquí no hay
Pues puede ser Kill the King original gada de los hermanos Moya, el aporte de nada ni venía nadie antes de que llegasen
en Cahorros, la coté entonces de 8b+ los taladros y la genialidad incansable de ustedes los esquiadores”. // E.M.

DESNIVEL.COM I 41
 JAVI MORALES:
«El Chorro era
EL lugar donde
juntarse»
Patriarca, maestro, brujo, pionero... son algunos de los calificativos
que brotan cuando se habla del granadino Javi Morales, uno de
los equipadores y escaladores de referencia de Andalucía y más
allá, todavía encadenando octavos a sus 55 años (y los que le
quedan...). Le preguntamos por su etapa de escalada en El Chorro,
que llegó a considerar su segundo hogar durante unos años.
42 I DESNIVEL.COM
C
UANDO Javi llegó a El Cho-
rro tendía unos 15 o 16 años,
a principios de los ochenta, y
se había iniciado en la escala-
da solo unos años antes, con sus herma-
nos y amigos en Cahorros, su zona local.
Todavía no había llegado el momento de
esplendor de la escuela, no se conocía el
parabolt y apenas existían unas cuantas
vías principalmente de autoprotección.
«El auge vino a partir de los 90, cuando se
empezaron a equipar vías duras y se em-
pezaron a desarrollar sectores como el
Makinódromo. Fue ahí cuando se convir-
tió en un punto de encuentro de escalado-
res de Andalucía y de toda España; lo po-
dríamos comparar a lo que es Rodellar en
verano ahora. Hay que tener en cuenta
que antes no había el volumen de zonas de
escalada que hay ahora», explica Javi. En
esos años él pasó a ser de los habituales, de
los que «escalábamos mucho y currába-
mos poco», recuerda riendo, «la gente de
fuera venía los fines de semana, pero nos-
otros nos tirábamos allí semanas enteras,
escalando todo lo que podíamos».
A la izquierda, Morales en un 8a de El Chorro
a mediados de los ochenta (con los pies
de gato de la época, los Fire de Boreal), con
el Caminito del Rey detrás. Derecha, en
la Cous cous del Makinódromo (8c), que
encadenó a finales de los noventa.

Aunque la labor equipadora de Javi es

extensa en muchas escuelas principal-
mente de Granda, en El Chorro apenas
tienen su firma un puñado de vías, pro-
bablemente cediendo el trabajo a los ac-
tivos escaladores locales, como los mis-
mos Miguel Moya o Antonio Gámez.
Como vía emblemática vuelve a salir a
la conversación la vía Lourdes de Juan-
ma: «Me acuerdo que el año que Juanma
la equipó, yo estaba en la mili, y cuando
volví estaba un poco desconectado de la
escalada. Subí por allí y ya vi que aquello
era otro concepto. Creo que fue una vía
que marcó el cambio, por el sitio en el
que estaba y el estilo de escalada, en un
momento en el que solo escalábamos
placas». Tardó poco en escalarla, pero
tampoco lo recuerda como un momento
especial: «En realidad cuando yo la hice
todavía no era el mito en el que se con-
virtió después».
Aprovechamos para preguntarle por
FOTOS: DAVID MUNILLA

qué cree que la escalada en placa ha pa-

sado de moda, pero toma la afirmación y
le da la vuelta: «Yo no creo que haya pa-
sado de moda, a mí me sigue gustando
escalar de todo. Lo que ocurre es que, so-
bre todo ahora, la gente empieza a esca-
lar en rocódromo, y suele encontrar más
fácil de escalar un desplome con canto
que una placa técnica».
Sobre el entrenamiento “de entonces”
confiesa que sí que entrenaban «pero
íbamos a lo nuestro, éramos muy cana-
llas, no teníamos ningún tipo de asesora-
miento o manual, nada que ver con la
mentalidad actual. Nuestro plan era más
de disfrutar y escalar todo lo que pudié-
ramos, vamos, lo mismo que ahora, solo
que la vida ya te va dando otras respon-
sabilidades...».
Al contrario que otros de su genera-
ción, Javi no tiene un discurso pesimista
o nostálgico ante lo que es hoy en día El
Chorro: «Hace mucho que no voy, pero
no es porque no me queden vías duras
ahí por hacer. Es simplemente que he-
mos equipado en muchos otros sitios,
hemos estado descubriendo zonas nue-
vas, encadenando... y lo que me gusta
ahora es escalar con mis amigos y estar
tranquilo. Pero no es que me esconda ni
sea poco social. Es que para mí, lo que
me hacía ir ahí, juntarme con la gente y
el ambiente, ya no está. Antes da igual
que fueras solo, sabías que seguro te ibas
a encontrar con alguien, era el lugar
donde juntarse».
No niega en todo caso que El Chorro
siga teniendo su atractivo para la gente:
«Es un sitio guapo, con fácil acceso, buen
tiempo y variedad de vías, muchas muy
buenas, claro que algunas están ya muy
sobadas, pero también la gente local está
equipando más... El Chorro tiene sus per-
sonajes de toda la vida que ahí siguen».
Laboralmente Javi está vinculado a la
escalada (ha creado su marca de tablas
multipresa –Mutant Fingers– y es comer-
cial de varias firmas de escalada), por lo
que no puede negar que, aunque no le
guste la masificación ni el desgaste de las
vías, el auge de la escalada en cierto
modo le beneficia: «Evidentemente a los
que vivimos directa o indirectamente de
la escalada nos beneficia, ya sea por ven-
der más tablas, revistas o pies de gato. A
mí personalmente tampoco me importa
ir a un sector y que haya 20 cordadas
(bueno, si solo hay 20 vías sí, jaja), más
oportunidad de intercambiar con unos y
otros, pero el problema es que muchas de
estas personas no tienen cultura de mon-
te, no conocen las normas no escritas,
que en realidad muchas veces son nor-
mas básicas de convivencia. En general
cuando a la gente le explica, suele escu-
char. Hay gente que piensa que las cha-
pas caen del cielo, o no se dan cuenta que
es necesario cepillar las vías cuando has
estado ahí dándole muchos pegues segui-
dos, creo es importante comunicarlo...
Mejor transmitir que estar peleando, al
menos esa es mi filosofía». // EM

DESNIVEL.COM I 43
 ANA LEÓN
Primera octavogradista española
La cordobesa tiene un lugar reservado en la historia de la escalada deportiva española al ser la
primera en encadenar una vía de 8a, que consiguió en El Chorro en el verano de 1991
con la vía Musas inquietantes. Fue una etapa en la que, como ella misma asegura, vivió sus mejores
años como escaladora. Aún hoy la escalada sigue ocupando una parte importante de su vida.
M
USAS INQUIETANTES
era una placa desplomada
de pequeños agarres, que
respondía a la escalada
técnica propia de los noventa, con un re-
corrido de unos 25 metros. La equipó Ig-
nacio Carrillo en el sector El Recodo del
Primer Cañón de El Chorro, que es uno
de los sectores que actualmente se han
RAFA DÍAZ
44 I DESNIVEL.COM
perdido para la escalada, por las prohibi-
ciones vinculadas a la remodelación del
Caminito del Rey. En aquellos años no
era muy frecuente ver a chicas apretando
en grados altos, pero Ana siempre se sin-
tió una más en el grupo. Junto al también
cordobés Rafa Díaz, que sigue siendo su
compañero de cordada y de vida, y bajo
el apodo de “Los osos”, pudieron durante
años cumplir su sueño de vivir para esca-
lar, o más bien escalar para vivir.
¿Cómo y cuándo descubriste El Chorro?
La primera vez que estuve en El Chorro
fue en el año 1986, por aquel entonces es-
tábamos recién empezados, teníamos
muy poca experiencia y prácticamente no
hicimos nada. Imagínate sin experiencia
pasar por el Caminito y ver las paredes
tan grandes de El Chorro. Un año des-
pués, en 1987, cuando Rafa hizo la mili,
fue cuando realmente empezamos a esca-
lar. Hubo un encuentro de escaladores en
El Chorro y fue entonces cuando encar-
gamos nuestra primera cuerda, que nos la
trajo un amigo de Madrid que bajó al en-
cuentro (en Córdoba por aquel entonces
era imposible comprar material de escala-
da). A aquel encuentro vinieron escalado-
res de todos los rincones de España, pero
lo que más había eran madrileños muy
motivados, fue un buen empujón para en-
gancharnos a la escalada.
¿Cómo era el entrenamiento que lleva-
bas por entonces?
De lunes a jueves íbamos por las tardes
a un parque para hacer dominadas en ba-
rra, y hacíamos travesías en un muro de
piedra que hay en la calle, en la puerta
del cementerio La Salud. Estábamos a
dos cuartas del suelo y la gente flipaba al
vernos enganchados en la pared con una
bolsa en la espalda. Algunas veces nos
A la izquierda, foto reciente de Ana
escalando en Espiel, su escuela “local”. En
la página derecha, en Musas inquietantes
de El Chorro, con la que se llevó el primer 8a
femenino nacional.

preguntaban que era lo que cogíamos de la
pared y metíamos en la bolsa. Los viernes
al medio día cogíamos el tren para El Cho-
rro y volvíamos el domingo por la tarde.
Aprovechábamos cualquier puente o fies-
tas para irnos a El Chorro.
¿Participabas también en competiciones?
Mi primera competición fue Leiva del
1989, tres días de competición, donde me
dio tiempo hasta de ponerme mala, creo
que fue de los nervios, aquello era todo
nuevo para mí.
Eran tres vías, las dos primeras las hice
muy bien pero la final fue una fisura que
seguramente no era difícil, pero con mi
poca o ninguna experiencia en fisuras
temblaba como vamos... pero bueno la
cosa fue bien y quedé tercera. Eso me dio
mucha motivación para seguir compi-
tiendo, y a partir de ahí llegaron los patro-
cinadores, que me ayudaron durante mu-
chos años. Ahí fue cuando dejé el trabajo
y con el dinero que sacaba en las competi-
ciones y algunos cursos de escalada que
impartíamos, nos dedicábamos a viajar de
un lugar a otro escalando.
¿Cómo fue el proceso de encadenamien-
to de Musas inquietantes y qué supuso
para ti?
Cuando encadené Musas Inquietantes,
El Chorro era nuestra principal escuela,
estábamos allí siempre que podíamos y
esta escuela me hizo subir de grado poco
a poco. Se me daba bien la placa ligera-
mente desplomada de canto pequeño y
técnica. Cuando Rafa encadenó, la probé
y vi que podía encadenarla, aunque el
paso de arriba me tiró varias veces, la vía
era muy bonita y merecía la pena hacerla.
Cuando la encadené fue al tercer pegue
de ese día, y en mi última oportunidad,
pues al día siguiente saldríamos para
Francia a escalar. El día estaba muy calu-
roso ya que fue en julio, y entre pegue y
pegue nos refugiábamos en un túnel cer-
cano al fresco. Encadenarla me dio mu-
cha motivación y alegría, era mi primer
octavo y la vía era preciosa.
¿Qué otros octavos hiciste desde en-
tonces?
Hasta 1991 como he dicho El Chorro
era mi principal escuela, pero a partir de
DAVID MUNILLA
ahí nos compramos una furgoneta y em-
pezamos a viajar mucho por España y
Francia principalmente, haciendo octa-
vos por muchas escuelas, como Por delan-
te y por detrás y Madricuernos (dos 8a+
muy bonitos en Zuheros), Cazaprimeras
y El rey Momo en Cuenca, Vida indecente y
Aliento del Dragón en Loja, Carpe diem en
la Muela, Gracias Fina y Argo en Rodellar
o Cour Transi en Verdón (Francia). Estas
son algunas de las que he encadenado que
más recuerdo, pero tengo muchas más re-
partidas por otras zonas de España y
Francia.
¿Recuerdas alguna otra vía en especial
que te hiciera ilusión encadenar en El
Chorro?
La Tregua del Pedal, mi primer 7c+, la
hice en marzo de 1990 y sin tener ningún
7c encadenado, lo que me dio más motiva-
ción para buscar un 8a. La vía era una pla-
ca muy bonita por encima del Caminito
del Rey, en el Primer Cañón. Tengo bue-
nos recuerdos de esa vía y la encadené
cuando cambiamos de cuerda, la que tení-
amos era de 11 mm y pesaba muchísimo
DESNIVEL.COM I 45
 para los últimos chapajes, y al cambiar de
cuerda y pesar menos la pude encadenar.
La vía tenia 40 metros de larga, con el am-
biente del Caminito y los seguros donde
estaban antes, no muy cerca...

He intentado buscar otras escaladoras

para incluir en este Especial El Chorro,
pero no he encontrado... ¿Eras realmen-
te la única mujer que escalaba fuerte en
el sur? ¿Cómo viviste esta singularidad?
La verdad es que por aquellos tiempos
no había muchas chicas escalando, y me-
nos que hicieran nivel. Pero tampoco las
echaba de menos, yo siempre iba con Rafa
y éramos un buen grupo de amigos que
quedábamos cada fin de semana en El
Chorro para escalar, como entre otros
Bernabé, Ignacio, Manolo o Robin (tam-
bién salíamos juntos a escalar por muchas
otras zonas). Todos con un nivel muy
bueno y un pique muy sano, así que cuan-
do había una vía nueva, íbamos todos a
probarla, a ver quién la hacía antes (el
99% de las veces era Bernabé), así que
siempre tenía quien montara las cintas y
me la recomendara. La verdad es que han
sido de mis mejores años de escalada.

Creo que has seguido –y sigues– yendo a

DAVID MUNILLA

escalar asiduamente al Chorro. ¿Cuáles

han sido los principales cambios que has
visto en la zona?

Bueno, hay muchos más sectores y vías
que entonces; al arreglar el Caminito del
Rey y haber prohibiciones se ha equipado
mucho por otras paredes. Han pasado
tantos años que El Chorro ha crecido mu-
cho en cuanto a sectores. También ha
cambiado bastante el tipo de escaladores,
siempre ha habido gente de fuera, pero
ahora hay más turismo no solo por la es-
calada sino también por el Caminito del
Rey. Yo creo que una gran parte de los es-
caladores de ahora son extranjeros. Pero
el ambiente sigue siendo agradable.
¿Cómo ha cambiado en estos años tu
relación con la escalada y cómo es ac-
tualmente?
Ha cambiado por ejemplo en la canti-
dad de días que salimos a escalar, ahora
salimos menos que antes (antes viajába-
mos durante muchos meses al año). Du-
rante muchos años era todo viajar y esca-
lar. Cuando nuestro hijo empezó el cole-
RAFA DÍAZ
Arriba, nueva toma en Musas inquietantes
(vía que actualmente ha “desaparecido”
como consecuencia de las prohibiciones), y
a la izquierda en Tregua de pedal, su primer
7c+, que encadenó en marzo de 1990.
cinco años que retomamos de nuevo la
escalada, y desde entonces procuramos
salir a escalar todo lo que podemos.
Cuando estoy en casa, intento mantener-
me en forma haciendo ejercicio como
yoga, estiramientos, andar... Ahora los
viajes se centran más por Andalucía, por-
que se han equipado zonas nuevas con
muchas vías por encadenar.
¿Cuál es la característica que crees que
define mejor la escalada en el Chorro en
la actualidad?
El Chorro es una de las mejores zonas
de escalada de España, está en un sitio
privilegiado, con buen tiempo la mayor

gio, empezamos a viajar menos, incluso parte del año y muchísimas vías de buena
estuvimos un tiempo sin escalar. Hace calidad. // E.M.

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 BERNABÉ
FERNÁNDEZ
Nacido para escalar
(en El Chorro)
Primer niño prodigio de la escalada, Bernabé tuvo en El Chorro su parque de atracciones,
codeándose con adultos que no podían seguirle el ritmo. Ha vivido todas las etapas de la escalada en
esta garganta y es de los equipadores que más ha contribuido a su desarrollo, incluso en los últimos
años con el equipamiento de vías largas. La masificación y las prohibiciones son los motivos
principales por los que reniega de la que durante muchos años fue “su” escuela.

C
UENTA Bernabé (Málaga, entonces ver escalar a alguien séptimo jugabas en muchas ocasiones ya sea por el
1974) que se podría tirar va- grado era algo de otro planeta y el máxi- equipamiento, materiales, ética, etc.
rias vías equipando en El mo grado escalado en España era en torno
Chorro, claro que si no exis- al 8a. Las masificaciones no existían, ha- Y en ese ambiente, hiciste tu primer 7a
tieran las prohibiciones que han limitado bía un respeto entre escaladores y mucho cuando eras un niño... ¿qué recuerdos
tanto el terreno de juego para los escala- compañerismo; hay que tener en cuenta te trae?
dores, difíciles de asumir para quienes, que la escalada en aquel entonces no tenia Hice desde mi primer IV hasta mi pri-
como él, lo conocieron en todo su esplen- la seguridad de hoy en día y la vida te la mer 8c siendo un niño... Recuerdo que en
dor. Aunque en sus primeros años Berna-
bé filtreó con la competición (llegó a ser
Campeón de España en 1991 y participó
en Copa del Mundo, entrando entre los
10 primeros en alguna prueba), pronto lo
dejó para dedicarse a lo que de verdad le
llamaba: encadenar vías de alta dificultad.
En su mayoría tuvo que equipárselas él
mismo, pues no existían de su nivel, lo
que le llevó a romper récords que no
siempre fueron aceptados por todo el
mundo. Hoy, dueño de un rocódromo y
reconciliado con la escalada, sigue disfru-
tando de lo que le hace feliz.

¿Qué encontraste en El Chorro en tus

primeras visitas?
COL. BERNABÉ FERNÁNDEZ

Encontré en el año 1987 un entorno

FOTOS: DAVID MUNILLA

donde estaba naciendo la escalada depor-

tiva, habría unas 80 vías, la mayoría eran
de estilo clásica o mixtas, el máximo gra-
do que existía era un 7c abierto por unos
ingleses, 2 vías de 7b y 4 de 7a. En aquel

48 I DESNIVEL.COM

el primer año de escalada encadené todas
las vías de El Chorro y tuve que empezar a
equipar mis propias vías o proyectos para
poder seguir progresando en la dificultad.
Las vías las abría a mano con spits y era
vías mixtas o clásicas, ya que donde en-
trara un seguro flotante no era ético po-
ner una chapa.
¿Es cierto que hubo una especie de “pi-
que” entre Juan Manuel García y tú en
busca del primer 8a de El Chorro?
No recuerdo ningún pique, pienso que
eso no es cierto, de hecho Juan Manuel fue
el primer español en hacer 8a en España en
los Cahorros, lo que pasa es que allí estaba
graduado de 7b o 7b+. Personalmente mi
primer 8a fue la Butter Fingers en el sector
de los Cotos en el año 1988 y, como no
existía ningún octavo en el Chorro ya que
la Lourdes estaba de 7b (grado Cahorros),
los escaladores de la zona no me creían
mucho y me decían que debía ir a otras es-
cuelas del norte de España para poder
comparar. Así que eso hice, fui a Montse-
rrat, cuna de la deportiva en España en
aquel entonces, e hice la Arribaba uno de
los 8a con más repeticiones de la época.
Todavía con 15 años (1989), diste la
campanada al hacer Monster forever, el
8b+ más precoz del mundo en aquel mo-
mento, ¿qué supuso para ti?
Ya el año anterior hice mi primer 8a+, E
por doquier, cuando tenía 14 años y fui el
primer niño del mundo en hacer esa difi-
cultada, igual que al año siguiente con la
Monster, que posteriormente se quedó de
8b. Para mí supuso un hito más, yo solo
quería equipar nuevos retos cada vez más
difíciles y ver cuáles eran mis límites.
¿Cómo era tu vida por entonces?
Mi vida era la de un niño normal que
iba al colegio y que era el raro que se iba
todos las fines de semana a hacer monta-
ñismo o alpinismo, eso era lo que enten-
día en aquel entonces cualquier persona,
es decir, que parecía que me iba a ir al
Everest. Por otro lado, era como si llevara
otra vida diferente, con personas adultas
en El Chorro donde yo era “el niño” que
cumplía mis sueños y objetivos, descu-
briendo un mundo que en parte estába-
mos todos desarrollando, poniendo cada
uno nuestro granito de arena y que ade-
más se me daba bien.
¿Qué te decían en casa sobre tu afición a
la escalada?
Que si no me podía haber dedicado al
fútbol.
Con Monster forever Bernabé se
convirtió en el escalador más
joven del mundo en hacer un
8b+, cuando tenía 15 años
(1989). En la otra página, en Café
Bong (7a+), uno de sus primeros
séptimos; y retrato de 2013 tras
limpiar una vía de largos.
Con 17 años (1991) vuelves a la prime-
ra plana nacional con tu Harakiri (se-
gunda propuesta de 8c nacional).
¿Cómo lo viviste?
Fue una vía que equipe en un largo de
45 metros, algo un poco novedoso en
aquella época ya que las cuerdas del mo-
mento no daban para poder bajarte de la
vía, así que decidí poner una reunión in-
termedia para poder descolgarte en dos
veces. Así que se convirtió en una vía de
dos largos (8c y 8a+) o en una de 8c+
empalmando los dos. También tenía pre-
sas artificiales, (una en el primer largo y
tres en el segundo), estábamos continua-
mente probando cosas nuevas como pi-
car cantos y poner presas artificiales que
iban en contra de la ética (como también
lo estaba probar las vías con las exprés
puestas). Cuando la encadené fue el se-
gundo 8c español, ya que estaba la vía El
Sicario, que después fue decotado a 8b+,
con lo que la Harakiri pasó a ser la pri-
mera vía de 8c de España.
Con el paso de los años tuvo varias re-
peticiones tanto el primer largo como em-
palmando los dos, confirmando el grado
de la misma y posteriormente con la
construcción de El Caminito del Rey se
ha quedado en una de las zonas prohibi-
das para la escalada.
DESNIVEL.COM I 49
 Lo que más te motivaba en esos años era
equipar vías duras y probarlas, un juego
quizá solitario porque no había mucha
gente en ese nivel, ¿lo ves así?
Sí, un juego muy solitario y a veces des-
motivador, la lucha con la mente siempre
estuvo ahí.
No poder compartir con otros escala-
dores de nivel mis ascensiones habitual-
mente, la búsqueda continua de asegu-
radores para los proyectos, etc... pero
bueno, por otro lado no había casi nada
hecho, todas las paredes estaban por
abrir. El hecho de poder elegir la pared
que querías escalar, diseñar el trazado
de una vía, abrirla ya sea desde abajo o
desde arriba y hacer la primera ascen-
sión era motivador. Ser la primera per-
sona que sube por un camino diseñado
por uno mismo para mí tiene un valor
especial, aunque parece que hoy ya no
lo tiene; hace poco me dijo un escalador
de nivel que él pensaba que eso forma
parte del pasado.

Ya en los 90 fuiste a buscar la dificultad

en otros lugares, con vías como Mojave
del Torcal (primer 8c+ encadenado por
un español), Orujo de Archidona (pri-
mera propuesta de 9a española), Chi-
lam Balam en Villanueva del Rosario
(primera propuesta de 9b+ del mun-
do)... ¿en qué lugar quedó para ti El
Chorro?
FOTOS: DAVID MUNILLA

El Chorro empezaba a quedarse peque-

ño para mí, aunque tuviera mucha roca
yo buscaba vías más desplomadas y lar-
gas, con una escalada diferente y con
otras motivaciones, vías que me impre-

Arriba, en Harakiri (8c), cuando tenía
17 años; una vía que ha quedado hoy en los
sectores prohibidos. A la izquierda,
equipando en el Primer Cañón en los años
noventa; y a la derecha en el 8c Onda vital.
sionaran más, otros parajes y Málaga tie-
ne mucha roca para estar muchas vidas
descubriendo nuevos rincones, en ese
sentido tengo suerte.
Estuviste luego apartado de la escalada
unos años, ¿no?
De 2003 a 2006 no estuve escalando
nada, me retiré literalmente y posterior-
mente volví, pero escalando más para mi
rollo y apartado un poco de todo, nada
de proyectos a largo plazo. Seguí bus-
cando rincones nuevos, creando nuevas
escuelas...
¿Cómo fue tu “vuelta al ruedo”, con la
creación de una escuela de escalada/ro-
códromo?
En febrero de 2015 inauguramos el ro-
códromo Beclimb, en aquel momento era
el más grande de Andalucía y uno de los
más grandes de España; nos decían que no
iba a funcionar porque en Málaga hay mu-
cha roca y buen clima y al año se nos que-
dó pequeño. Desde entonces queremos
hacer un rocódromo de 3000 o 4000 me-
tros cuadrados, es decir, cinco veces más
grande. El establecimiento cuenta con
zona de búlder, de cuerda, con autoasegu-
radores, tienda de montaña, gimnasio, bar
y se desarrollan todo tipo de actividades.

50 I DESNIVEL.COM
 «Si se quiere crear escuela tiene
que haber de todo, si se quiere
fomentar la escalada clásica
debe de haber desde vías de
deportiva de uno o varios largos
a vías de clásica de uno o varios
largos, y deben de aprender a
convivir respetando su espacio»

Hace unos años que, junto a otros equi-

padores, le disteis un buen lavado de
cara a El Chorro, con el reequipamien-
to/equipamiento de vías largas. ¿De dón-
de surgió esta motivación?
Por mi parte estaba harto de ver el po-
tencial de El Chorro en vías de largos y que
no se abriera ninguna de dificultades me-
dias o bajas con un mínimo de seguridad.
La mayoría eran vías con mucha exposi-
ción, llenas de piedras sueltas... Si se quie-
re crear escuela tiene que haber de todo, si
se quiere fomentar la escalada clásica debe
de haber desde vías de deportiva de un lar-
go o varios largos a vías de clásica de uno o
varios largos, y deben de aprender a convi-
vir respetando su espacio. Las vías se de-
ben de limpiar y no dejar piedras enormes
porque eso le da exposición, esperando
que llegue el accidente; si quieres exposi-
ción juégatela con los emplazamientos de
los seguros flotantes, pero eso será tu elec-
ción. Hay que tener en cuenta que hay ya
muchos escaladores tanto en las paredes
escalando como a pie de vía y en cualquier
momento puede haber un desastre. El que
deja una piedra en la pared sabiendo que ¿Crees que eso contribuyó a que El Cho- ¿Cómo ves el futuro de la escalada aquí
se puede caer es en parte responsable de lo rro se volviera a poner “de moda”? y cómo te gustaría que fuera?
que luego pueda suceder. El Chorro siempre ha tenido sus etapas El futuro no lo sé, yo ya apenas voy
En esa iniciativa ayudé a Miguel Moya a de más o menos movimiento, y es cierto por allí, me da lástima ver cómo está
reequipar la famosa Amptrax y seguida- que ha tenido etapas en las que estaba un ahora, habiendo visto cómo era. Para mí
mente me puse a abrir vías nuevas, algu- poco muerto. Las continuas promociones terminó mi etapa allí. Lo que me gustaría
nas con Miguel y otras con Nico Rando o y persecuciones a los escaladores como si es que se pudiera volver a escalar en todo
con quien quiso echarme una mano. Lo fuéramos delincuentes, o la misma cons- el Caminito del Rey, es un lugar que tie-
interesante con Nico era que, al ser guar- trucción del Caminito han influido en ne más de 50 años de historia de la esca-
dia civil, pudimos acordonar la zona para todo esto, pero supongo que sí, que en lada y no se ha hecho nada por su recu-
limpiar las vías y esto le dio mucha calidad algo ayudarían todas estas vías nuevas en peración, que los escaladores estuvieran
a las mismas. Abrí unas 7 vías nuevas de la escalada de grandes paredes, y que se un poco mejor considerados, ya que fo-
200 - 350 metros por las que posterior- pusieran de moda en El Chorro. mentamos y desarrollamos el turismo en
mente me agradecieron muchas personas las zonas donde vamos y, puestos a pe-
el trabajo y también fui criticado por algu- ¿Nos dirías tus 10 vías favoritas de El dir, que la vía del tren se transformara en
nos escaladores porque decían que eran Chorro? una vía verde, convirtiéndose así todo El
vías comerciales. Hoy todas ellas son ya Mal de ojo, Apocalipsis, Cuatro estacio- Chorro en un gran parque para las acti-
clásicas de El Chorro de las más repetidas nes, Muerte blanca, Lourdes, Café bonk, vidades en contacto con la naturaleza.
y forman parte de las vías del Rally 12h. Aparcamiento indebido y Las Musas. Soñar es gratis... // E.M.

DESNIVEL.COM I 51
 Juan Hofer escalando
Placuneo sin fronteras
(7b), en Escaleras
Árabes, que ofrece la
característica
escalada en placa
del sector.
DAVID MUNILLA

52 I DESNIVEL.COM
 SIGLO XXI
LA RECONQUISTA DE
EL CHORRO
implantación de unas prohibiciones que barrieron muchas de las vías

históricas. Con todo, El Chorro renació, tras un buen lavado

de cara de las Frontales, y demuestra que sigue vivo, con el imparable

desarrollo de nuevos sectores y las incontables visitas

de los escaladores extranjeros.

DESNIVEL.COM I 53
 E
Arriba, en la salida NTRAMOS en el presente siglo con un convertido en destino invernal obligado para extran-
de la edición 2018 Chorro que en cierto modo “pasó de jeros; nacionales también, pero menos, siendo el fin
del Rally 12h de moda” durante unos años, al menos a de año fecha cumbre. Avisados estáis. Dos hechos
escalada El Chorro, nivel nacional, con los gustos de los es- han propiciado un resurgir de la zona: la rehabilita-
y en la pág. derecha caladores deportivos desplazándose a ción del Caminito del Rey en 2015 y la consolidación
una cordada en esta los desplomes con canto. Para condensar la evolu- del Rally de Escalada 12h. El primero ha subido el ni-
misma competición, ción y el momento presente, tomamos las palabras de
que ha contribuido a Ramón Enrique que es, como él mismo se define “un
popularizar la escalador más”. Originario de Cataluña (donde ya
escalada en vías contribuyó al desarrollo de la deportiva en zonas
largas equipadas como Siurana), Ramón llegó a Málaga hace unos 30
en la zona. años por amor y desde entonces es uno más de la fau-
A la derecha, foto na malagueña escaladora, implicándose en equipa-
reciente de Ramón mientos (suyas son vías como El fin de una vida o Ne-
Enrique equipando gra Peste, en las Frontales) e incluso trabajando en la
Negra Peste (200 m, reconstrucción del Caminito del Rey; este es su resu-
MANUEL GÓMEZ TRUJILLO

6c+/7a) en las men: «El Chorro, la gran escuela del sur. Esta etique-
Frontales. ta se oye desde hace años, pero es cierta, se la ha ga-
nado a pulso. El Chorro, con su grandiosidad, con
sus luces y sombras, con sus épocas tranquilas y mo-
vidas. Desde hace un tiempo, unos 10 o15 años, se ha

54 I DESNIVEL.COM
vel de la comarca proporcionando trabajo y riqueza a
una zona que lo necesitaba. A los escaladores no nos
ha ido tan bien dicha actuación, pues las prohibicio-
nes han hecho mella en sectores emblemáticos. Por
parte del Rally 12h, el equipamiento, arreglo y aper-
tura de mas vías largas ha incentivado la escalada en
pared, que hasta hace unos años la practicaban pocas
personas. Ahora hay un resurgir. El futuro de la zona
parece que sigue este curso, cada vez mas turístico,
imparable, pero conservando su idiosincrasia. Las
nuevas generaciones se mezclan con los de siempre.
Como anécdota: hace unos 30 años andaba equipan-
do a mano con espits dos vías y descubrí en una pa-
red cerca de mí un personaje colgado manejándose
con dos petates a la vez, taladro, resina, tensores... me
quedé fascinado, era Miguel Moya. Hoy en día, y con
mil parabolts puestos, sigo viéndolo currar igual. En
los últimos tiempos, gracias a los que aportan, como
Carlos, Felipe, Moya, Bernabé, la FAM, Nico, Eva y
Cris al frente de El Chorro Bolting, Mancera, Rubillo,
Manolo, Sergio, Fanega o el que subscribe, se conti-
núan equipando nuevos sectores y manteniendo los
existentes. Mención especial a los que mantienen la
llama de la aventura y continúan con sus aperturas,
como Soto y su grupo, Manuel de Alcalá, Paulo Roxo,
etc. Disculpas por los nombres que me he dejado en
el tintero y ¡buenas escaladas!» –Ramón Enrique.

Nuevas energías con el Rally 12h

Sean más o menos aficionados a estas carreras ver-
ticales que buscan devorar todos los metros posi-
bles en 12 horas de escalada (cuanto más difíciles
las vías, más puntos), lo cierto es que nadie niega
que, en el caso de El Chorro, su celebración ha
aportado beneficios a la comunidad escaladora.
Uno de sus principales impulsores fue Nicolás Ran-
do, quien sobre sus inicios nos cuenta que «ya con
16 años, de la mano de mi amigo Tato Santiago,
empezamos hacer nuestros pinitos en la roca com-
prando una cuerda a medias, qué tiempos...». Fue
junto al mencionado Ramón Enrique con quien se
propuso organizar uno de los eventos de la Liga de
Rallies 12 h, que ya se celebraban en distintas pare-
des de España. Con el apoyo de otros escaladores
locales, como Bernabé Fernández y Pedro Soto, rea-
lizaron los reequipamientos y acondicionamientos
necesarios y, tras contactar con la FEDME, la pri-
mera edición del Rally se hizo realidad en 2013,
«gracias también a la ayuda de la Diputación de
Málaga, el Ayuntamiento de Álora y el hotel La
Garganta, que siguen siendo imprescindibles»,
apunta Nico. Como él mismo explica, esta cita con-
FOTOS: VICTOR ROMERA

tribuyó a «poner de nuevo en el mapa de la escala-

da, esta vez de vías de varios largos, a nivel nacio-
nal, con lo que ello conlleva». Desde entonces, han
seguido celebrando anualmente esta competición,
con una puesta a punto regular de las vías largas de

DESNIVEL.COM I 55
 Arriba, Gonzalo la que no solo se benefician sus participantes, sino por donde peligrosa y alegremente transitaban los
Muñoz en el L1 de toda la comunidad escaladora. escaladores dirigiéndose a sus queridas vías, ha pa-
Mákina cualquiera sado a ser un camino que cuenta con todas las medi-
(7b), en la bóveda El Caminito: turismo 1, escalada 0 das de seguridad, que recorren a diario unos mil tu-
del sector Poema Todo cambió en 2015 con la reconversión de El Ca- ristas en temporada alta, “viviendo la aventura” al
Roca, que hoy en día minito del Rey (originariamente llamado Camino módico precio de 10 euros si vas por tu cuenta, o 18
está lleno de vías de los Balconcillos por las visitas del rey Alfonso en visita guiada. Se trata de una obra pública con
deportivas, en su XIII) y su adaptación al turismo. Lo que eran unos gestión privada (por concesión) y, aunque hay un
mayoría de grado cuantos hierros con restos de estructura de cemento cupo obligado de entradas de libre disposición a
exigente. A la diario, prácticamente todas las tramitan a través de
derecha, un grupo la empresa, que ofrece además recorridos por otros
avanzanzando por el lugares de interés en el entorno, como la cueva de
Caminito del Rey Ardales o la necrópolis de las Aguilillas. Actualmen-
(antes de su te la zona ha presentado su candidatura como Patri-
remodelación en monio Mundial de la UNESCO.
2015), equipados Esta reconversión trajo como consecuencia la pro-
con material de hibición de escalar en todos los sectores a los que se
ferrata. accedía por este Caminito, una gran pérdida para los
MANUEL GÓMEZ TRUJILLO

escaladores. Ya hemos leído a lo largo del número

muchas voces manifestando su contrariedad ante es-
tas prohibiciones que consideran injustas, aún reco-
nociendo los indudables beneficios que ha traído para
la economía local. Las esperanzas de un nuevo acuer-

56 I DESNIVEL.COM
 do no están perdidas, tal y como manifiesta Nico Ran-
do: «Doy fe de que, desde que comenzaron las obras,
las diferentes administraciones han mantenido con-
tacto y conversaciones con los escaladores, intentan-
do dar soluciones a los problemas venideros, a veces
con acierto y otras no. Se han “perdido” (y lo pongo
entre comillas porque las vías siguen allí, no se ha des-
equipado nada) cientos de vías, historia pura de la es-
calada. Creemos que la escalada es posible dentro de
los desfiladeros y que aportaría un aliciente más para
el turismo, tanto si es escalador como si no. Desde las
diferentes administraciones y la comunidad escalado-
ra debemos sentarnos y trabajar en ello, porque la his-
toria hay que cuidarla, contarla y disfrutarla».

Los de siempre
«El Chorro es único, lo amas o lo odias» escribe John
Hofer, ya rebautizado a ‘Juan’ tras sus más de tres dé-
cadas afincado en la zona, que recuerda así cómo des-
cubrió El Chorro: «Escalar en invierno en Málaga. El
título de la revista del Club de Alpes me saltó a la vis-
ta hace 30 años. Originario de Suiza, me parecía una
curiosidad poder escalar en la época mas fría del año
y, sin pensarlo más, compré junto con un amigo un
par de billetes de avión rumbo a Málaga. Este viaje
cambió mi vida y, un par de años más tarde, me insta-
lé en El Chorro y abrí la Finca la Campana. Eran los
años 90 y El Chorro era para mí como las películas de
FOTOS: DAVID MUNILLA

western: estación de tren, cactus, calor y mucha li-

bertad. Un entorno con un sinfín de posibilidades to-
davía sin explorar. Me sentí como un niño en un par-
que lleno de golosinas». Aquí sigue afincado desde
entonces Juan, siendo uno de los escaladores que

más se ha implicado con el desarrollo de la escalada; Cuando no está

de hecho dos de los sectores (Escalera Suiza y Circo atendiendo a los
Suizo, están así bautizados en su honor). «El nivel de clientes en su Finca
los escaladores malagueños era alto y había pocas La Campana, Juan
vías de escalada de grado fácil. Así que me puse ma- está escalando
nos a la obra abriendo sectores con vías asequibles (arriba, en la vía
para atraer un público menos friki, como es la mayo- Sueño en vida, 7b+
ría de los visitantes de fuera», explica Juan, que ha vi- de Las Encantadas)
vido de cerca todas las etapas de la escalada en la gar- o equipando. A la
ganta. Aunque no niega la evidencia de los enormes izquierda, José
cambios vividos en El Chorro, sigue mirando con op- Mancera ‘El Man’,
timismo el futuro: «El Chorro es un imán para locos, principal equipador
un triángulo de las Bermudas que sigue teniendo mu- de los sectores
cho tirón. Este calor, las chumberas, su caliza rojiza Rinconcito Yeye,
perfecta, el zumbido eléctrico y los buitres dando Solarium y Momia.
vueltas sin parar... Más de dos docenas de sectores y
cerca de 2000 vías equipadas y todavía queda mucha
roca virgen. Tras el cierre de los cañones, mis temo-
res de que los escaladores no volvieran no se cum-
COL. JUAN HOFER

plieron; siguen viniendo de todo el mundo para dis-

frutar de sus vías. Ahora, con la apertura de muchísi-
mas rutas nuevas, todo los días se escuchan los gritos
de las cordadas en pared».

DESNIVEL.COM I 57
 A la derecha, tres Eso sí, cabría añadir que principalmente son gritos
de los principales en cualquier idioma menos castellano, pues los loca-
impulsores les han desplazado su interés a otras zonas más re-
y equipadores de cientes, de las muchas con las que cuenta esta pro-
El Chorro Bolting vincia tan rica en roca (como El Turón, Teba, Villa-
(Chris, Dan y Fin) nueva del Rosario, Aradales, Alfarnatejo...). Del
con las camisetas aproximadamente centenar de escaladores que cual-
con las que quier día de invierno puedes encontrarte en El Cho-
financian parte de rro, probablemente menos de un 10% son locales.
este proyecto Juan no es el único que quedó atrapado bajo los
(abajo, otro de sus encantos de El Chorro. Otros como los alemanes
colaboradores, Andreas Kresse y Anna, propietarios de la tienda de
James Pymm, escalada Aventurelchorro, forman también parte de
reequipando el la idiosincrasia del lugar desde hace más de dos dé-
sector Poema Roca). cadas, colaborando igualmente con los equipamien-
Derecha, retrato tos y reequipamientos que finalmente son los que
actual del escalador atraen a los escaladores que les dan de comer.
y equipador local Otro de los habitantes de largo recorrido que forma
Sergio Bernabeu. parte del paisaje de las gargantas es Sergio Bernabeu,
malagueño afincado en El Chorro desde hace 28
años. Inició su andadura en las rocas a finales de los
ochenta y no tardó en darse cuenta de que “la escala-
da era mi vida”. Más de treinta años después lo sigue
siendo, combinando la afición con su trabajo como
guía de montaña y sin dejar de colaborar en equipa-
mientos y reequipamientos. En su larga trayectoria
COL. SERGIO BERNABEU

ha equipado sectores enteros, tanto dentro como fue-

ra de El Chorro, en general vías de concepción de-
portiva en las que prima la seguridad: «Yo no solo
equipo para mí, también para los demás; me gusta
que mis vías se repitan, dejar un buen trabajo, siendo

consciente qué seguro hay que meter en cada tipo de

roca, dónde ponerlo y demás. Lo que veo ahora es
que cualquiera sin mucho conocimiento coge un ta-
ladro y hace cualquier cosa...». Habla con cierta nos-
talgia de la libertad que se respiraba cuando los esca-
ladores habituales se conocían todos: «Nuestra forma
de irnos de fiesta era venirnos a escalar a El Chorro,
era nuestra droga, y lo sigue siendo, claro que de ser
nuestro paraíso, con tranquilidad absoluta, ahora te
encuentras con mil personas que vienen cada día a
pasar por el Caminito». En cierto modo, Sergio tam-
bién se beneficia de la afluencia del turismo con los
cursos de escalada que imparte, en un altísimo por-
centaje con alumnos extranjeros, pero asegura que el
tipo de turismo que viene a hacer el Caminito no sue-
le ser el mismo que el que viene a escalar. Al pregun-
tarle qué es lo que tiene El Chorro que no acaba de
cansarle, después de tantos años, queda claro que
FOTOS: COL. EL CHORRO BOLTING

para él es mucho más que una zona de escalada:

«Aquí es donde están mis raíces, donde he hecho mis
vías más duras, donde me he dejado la espalda equi-
pando, donde he escogido vivir... Me gusta por el cli-
ma, por la cantidad y variedad de vías, por la gente...
También creo que hay muy buen ambiente, cuando
viene gente de fuera se siente como en casa, se les fa-

58 I DESNIVEL.COM

cilita la información de las vías, nos ayudamos entre
nosotros... Se respira buen rollo».
El Chorro Bolting
Eva Kiselova es de Letonia y Chris Miller de Inglate-
rra, pero ambos forman ya parte de la comunidad de
locales de El Chorro, vecinos de la localidad desde
hace unos cuatro o cinco años. Antes de eso ya esca-
laban con asiduidad en estas paredes, pero fue al ins-
talarse cuando percibieron la necesidad de los ree-
quipamientos y decidieron lanzar El Chorro Bolting.
Bajo este nombre engloban un conjunto de iniciati-
vas que van desde recogida de fondos a través de do-
naciones o campaña de crowdfunding a venta de ca-
misetas o comidas solidarias proequipamiento que
organizan con la colaboración de los negocios loca-
les. Así lo recuerda Eva: «Cuando llegamos vimos
que había unos cuantos escaladores, como Miguel
Moya, que se gastaban cientos de euros de su propio
bolsillo en los equipamientos, y quisimos aportar
nuestra parte lanzando esta campaña». Pusieron en
marcha la iniciativa en 2019 y desde entonces ya han
recaudado unos seis mil euros, con los que han ree-
quipado unas 100 vías y equipado nuevas otras 80.
«Nosotros no nos lucramos con esto», explica Eva,
DAVID MUNILLA
«no tenemos ningún negocio ni vivimos del turis- Arriba, Nico Rando
mo; todo lo que recaudamos ha ido para comprar un en la vía Mar de
taladro y material». Sectores como Perdío o Sin Fu- fuego (210 m, 7a) en
turo se han beneficiado de estas aportaciones, que en la pared de las
su mayoría vienen de los escaladores extranjeros, Frontales. “La buena
que son en definitiva los que más frecuentan hoy en calidad de su roca,
día El Chorro, como ya hemos comentado. «Sí, es el clima excelente
cierto que la mayoría de los que escalan aquí son de que tenemos en
fuera, muchos ingleses, aunque ahora con el tema invierno y la
del Breixit ya no se pueden quedar temporadas tan variedad de tipos
largas como antes, hay más tránsito de gente diferen- de escalada” son,
te», apunta Eva. Actualmente están centrados en el en opinión de Nico,
reequipamiento de El Makinódromo, donde ya han los principales
restaurado 25 vías, y el trabajo continúa. La campa- atractivos de
ña de crowdfunding (que podéis encontrar en las re- El Chorro.
des sociales como El Chorro Bolting) estará abierta
hasta mayo, para quien quiera colaborar.
Y con el eco del taladro resonando en esos reequi-
pamientos con acento inglés cerramos el resumen de
esta etapa en una zona de escalada que sigue viva y
sigue creciendo, gracias a que, como hemos visto a
lo largo del número, tiene unas singulares y profun-
das raíces que la sostienen.
Eva MARTOS
DESNIVEL.COM I 59
 RAFA FANEGA
Devorador de vías
El madrileño, asentado en las inmediaciones de El Chorro hace unos cinco años
(donde en 2020 estrenó el primer y de momento único 9a de la zona con Suspiro), inevitablemente
ha seguido haciendo lo que mejor se le da: equipar y escalar. Y vuelta a empezar.
SYLVI MOYA
A
UNQUE en la última época su
trabajo diario no le deja tanto
tiempo libre como el que solía
tener hace unos años, cuando
era más fiel a la vida pirata, la media de
días de escalada y equipamiento de Rafa
sin duda superan a la de cualquier mortal
currante, sin que sus 47 años hayan hecho
mella alguna en su motivación. Hemos de-
jado de contar las vías que lleva equipadas
en distintas zonas de la geografía española
(en especial de la zona centro, como
Cuenca, Barranco del Fin del Mundo o La
Pedriza), pero sin duda superan el millar.
Lleva los últimos años instalado en la pro-
vincia de Málaga y, a modo de ejemplo,
solo en El Chorro suma 79 vías nuevas.
Este ansia equipadora no responde para
60 I DESNIVEL.COM
nada a un deseo de notoriedad o de dejar
legado alguno. La mayoría de las veces ni
siquiera publica sus equipamientos y tam-
poco se prodiga mucho en redes sociales.
Si equipa tanto es simplemente para saciar
sus ganas de escalar, con vías que estén a
su nivel y de las que pueda disfrutar.
En marzo de 2020, poco antes del confi-
namiento, le puso el punto rojo a la vía
Suspiro del Makinódromo, un proyecto
equipado por Bernabé Fernández hacia
2008 que Rafa resolvió y para el que, por
comparación con el resto de vías del sec-
tor, propuso 9a, el primero de El Chorro.
Se trata de una larga línea de continuidad,
de unos 50 metros, de la que Rafa dijo que
«es como como 'pasar pantallas', un trozo
que te cuesta, un reposo, otro trozo chun-
go, un reposo activo, y así…». Desde en-
tonces no ha visto ninguna repetición.
¿Te acuerdas de la primera vez que esca-
laste en El Chorro?
Pues la primera vez que vine creo que
fue con Cristo y Dani, hacia el año 94...
Luego he seguido viniendo de vez en cuan-
do, pero ya así con más continuidad, desde
2014 que estoy viviendo por Málaga.
No hace mucho... ¿y todavía encontraste
terreno libre para equipar en El Chorro?
Sí, en distintos muros... En concreto en
el sector Makinódro habré metido unas
26 vías, en general la mitad séptimos y la
mitad octavos. Y son largas, pues las que
había antes normalmente son más cortas,
en sintonía con las cuerdas que llevaban
antes. No se trata tampoco de acribillar
los muros, de plantar chapas unas cerca
de otras, al final todo llega a un fin. Luego
he seguido yendo a El Chorro, pues lo
tengo muy cerca de casa, pero también he
equipado en otras zonas, como Villanue-
va del Roario y últimamente en Teba,
donde el ayuntamiento ha aportado para
los equipamientos.
Esto de financiarte me imagino que no
es muy habitual...
No es lo habitual, pero se agradece. Nos
dieron unas 200 chapas, que para una
persona normal igual puede parecer mu-
cho, pero a mí eso luego no me dura nada.
Alguna vez también otras personas (como
Nico Rando en Andalucía) me han dado
material, pero en general los equipamien-
tos me los financio yo mismo.
Tampoco sueles publicar mucho de lo
que equipas, ¿no?
Yo no me callo nada, si alguien me
pregunta, lo cuento. Lo que tampoco
A la derecha, Rafa en La sal de la vida (8c),
equipada por él mismo en 2020; y a la
izquierda en un buen reposo de HIperactivo
activo (8a+), otro de sus frutos, este de 2014
en la zona de Peñarrubia, cerca de Teba (uno
de los muros malagueños que ha frecuentado
los últimos años, pero no el único).

hago es ir publicando en el momento

que estoy equipando y escalando las
vías; luego ya cuando las he hecho para
mí pierden el interés, con lo que no me
importa que se divulgue.

¿Cómo ves los reequipamientos que es-

tán haciendo ahora en El Chorro?
Lo veo bien, es una labor necesaria, y
más con lo rápido que se pudren las cha-
pas aquí, que no sé si será por que llega
algo de la brisa marina, o por lo que sea,
pero yo me remito a lo que veo. Del sec-
tor Makinódromo yo mismo cambié mu-
chos seguros antiguos. Mi filosofía ade-
más es que, cuando se reequipa una vía,
tiene que quedar mejor de lo que estaba;
no se trata simplemente de quitar un se-
guro viejo y poner el nuevo en el mismo
sitio, sino de analizar cuál es la mejor
posición para que quede cómodo para
chapar, que quede seguro... Es impor-
tante escalar las vías para saber esto. Por
ejemplo en mi opinión, y sé que me van a
criticar por esto, creo que la Lourdes es-
taba mejor antes de que la reequiparan,
con su equipamiento original, pensada
para escalarla a vista poniendo las cintas.
CRISTINA VILELLA

Hay que reequipar y equipar con conoci-

miento. Pero esto no lo digo por lo que
están haciendo ahora en El Chorro, que
ni lo he visto, hablo en general, de lo que
se hace en muchas zonas de escalada en
las que ahora cualquier persona sin ex-
periencia coge un taladro y hace lo que
le parece...
En todo caso, aquí creo que el principal
problema es lo lavada que está la roca...
Bueno, no creas, claro que en algunas
vías clásicas sí, pero hay tramos de roca
donde está muy pinchuda. Por ejemplo
en el sector Los Tigres, que está en la mis-
ma franja del Makinódromo pero más
abajo, la roca está muy adherente.
Desde que hiciste Suspiro, ¿has vuelto a
hacer alguna vía tan difícil?
Pues no te sabría decir, en cuanto a
grado, no es que haya hecho otro 9a,
pero sí he hecho otras vías primeras as-
censiones que me han costado lo mismo
que esa, o incluso más. Algunas las he
propuesto de 8c+, pero nadie las ha repe-
tido, ya se verá con el tiempo cuando las
haga la gente. La propuesta de 9a de Sus-
piro fue sobre todo buscando la coheren-
cia con el resto de vías del sector.
¿Te sueles dedicar mucho a los proyec-
tos, o vas cambiando?
Yo nunca he sido de achicharrar a pe-
gues y tampoco entreno, me gusta más ir
probando, voy a las vías, cuando me can-
so cambio y cuando tengo ganas no dejo
de probar una vía. Además, ahora tengo
un curro de ocho horas al día. Pero bue-
no, que si he invertido en una vía, pues al
final acabo “poniendo la tienda de campa-
ña” hasta que sale, como todo el mundo.
¿Y en qué otras zonas sueles escalar?
Últimamente no viajo mucho, es decir
cuando tengo más de una semana sí, pero
si no no me compensa. Además es que An-
dalucía es muy grande y aquí en la provin-
cia de Málaga hay mucha roca. Ahora en-
tiendo más a Bernabé Fernández cuando
decía que él no salía mucho de Andalucía
para escalar, es que aquí hay mucho terre-
no de juego... Y también es que esto está
muy al sur, para ir al norte al final son mu-
chas horas de coche. Además, comparado
con Madrid, hay mucha menos gente, así
que es fácil escalar tranquilo, a tu bola, que
es lo que yo busco más ahora. // E.M.

DESNIVEL.COM I 61
Pedro Soto durante la
apertura (desde abajo)
de El salto de los
Vanuatus (200 m,
7a+), que realizó
con Ángel Chiappi y
Carlos Hernández
en octubre 2012 en
el Primer Cañón;
una escalada
comprometida de
difícil protección.

EL CHORRO
UN PARAÍSO EN DECADENCIA
(pero con destellos de luz)
C
El malagueño Pedro Soto es uno de los principales responsables de

que la escalada clásica o tradicional siga teniendo su espacio en El Chorro,

en especial con sus más de veinte vías de autoprotección y nivel exigente,

abiertas todas desde abajo. Rememora en este texto los años dorados que

vivió esta modalidad –antes de la llegada de las prohibiciones– con nostalgia

pero sin cerrar las puertas a la ilusión por los retos que aún ofrece.

DESNIVEL.COM I 63
 A
L leer el título de esta peque-
ña reflexión personal puede
parecer que soy un poco ne-
gativo o mejor dicho pesi-
mista, pero es mi humilde opinión desde
una perspectiva amplia que abarca un
poco más de 30 años. La primera vez que
fui a El Chorro fue en el año 90, si no re-
cuerdo mal, era toda una odisea y una
gran aventura llegar desde Marbella. Te-
níamos que coger un autobús o dos hasta
Málaga, lo que se hacía interminable, y
después el tren, donde siempre encontra-
bas algún amigo escalador de otra parte
de Andalucía o donde hacías nuevas
amistades para llegar a ese paraíso sagra-
do, meca de la escalada en Andalucía. Es-
cuela de grandes paredes calcáreas que te
intimidaban nada más llegar a la estación,
cañones frescos en verano, con más de
200 m de caída vertical, donde podías es-
calar y bañarte al mismo tiempo, y cómo
no, ese camino mágico que era el Camini-
to del Rey (terminado en 1905), que reco-
rría de punta a punta el primer y segundo
cañón, libre de especulaciones, en su me-
dio mas salvaje, medio roto (aunque en
esa época, estaba bastante bien aún, o eso
me parecía), un camino vertiginoso don-
de los haya y donde podías encontrar las
mejores vías de escalada. Era un punto de
encuentro para los escaladores, sobre
todo en verano, cuando pasábamos las
noches vivaqueando en el Jauja, con unas
preciosas vistas a las estrellas y sobre todo
¡sin mosquitos! No se quedaba atrás tam-
poco los Naranjos, espectacular emplaza-
miento entre los dos cañones, donde tam-
64 I DESNIVEL.COM
bién pasábamos noches o tardes tranqui-
las después de un buen baño al terminar
de escalar. O los Albercones, zona de reu-
nión más próxima a la estación donde so-
líamos vivaquear en grandes grupos des-
pués de encontrarnos en el bar de la Isa-
bel y compartir risas y buenas veladas.
¡Qué época tan sublime!
Entre clásicas y buriladas
Cabe decir que no sólo la escalada depor-
tiva era el gran tesoro de El Chorro, sino
que también coexistía la escalada tradi-
cional o clásica. Desde los años 70 se han
abierto vías como: Vía de las Cabras (IV+
100 m), La Chivito (IV), La Astral (IV),
J.P, A2/IV+, etc…, siendo en mi opinión
los 80 y 90 la época dorada para las aper-
turas de nuevas vías, con muchas posibi-
lidades por abrir, descubrir y con bellos
FOTOS: COL. PEDRO SOTO
itinerarios aún vírgenes. Una época en la
que lo normal era abrir desde abajo, ya
fuese en libre o en artificial, usando una
mínima cantidad de seguros, dejando vías
como Centauro (A1/V+, 280 m) a día de
hoy perdida, Numolite (V+, 300 m) hoy
prohibida, Espolón Masai (6a, 250 m) hoy
prohibida o Rayito de Luna (6a/b, 150 m),
por citar algunas, aunque también había
excepciones, como las buriladas de los
Tres techos (A2e, 250 m) hoy prohibida, o
las aperturas futuristas de Mustapha (8a,
100 m) hoy prohibida, Poema de Roca
(7c+, 130m) o Gigante verde (8a+, 200 m)
hoy prohibida, todas estas abiertas desde
arriba buscando la dificultad y el libre ex-
tremo en esa época.
Para mí, El Chorro significaba el lugar
perfecto no solo para hacer deportiva, sino
para hacer pared, que era lo que más me
apasionaba y por otro lado lo que más me
aterraba, pero ese dualismo era lo que me
motivaba. Al final la deportiva, era solo un
medio de preparación para la pared.
Vivencias que marcan
Las primera vías de pared me las mostró
Manuel González “Lolo” con el que pude
hacer muchas clásicas, aprender poco a
poco y progresar (en escaladas como Es-
polón Orderse, Flecha hacia el cielo, Avión
Roquero, Espolón Masai, Zeppelin, etc).
Recuerdo que en el año 93 lo pasé fatal en
el L3 del Espolón Masai, casi me pongo a
llorar de la tensión y de la impotencia de
no progresar por el miedo, así como el
embarque unas semanas más tarde en la
Zeppelin (6c+, 250 m), donde continué
recto escalando al final del 6c+ sin ver
más chapas, hasta darme cuenta de que
estaba perdido y con una caída potencial
de unos 20 m, solo llevaba cintas exprés y
el ocho, sin posibilidad de asegurarme a
nada. Los nervios empezaban a bloquear-
me cuando, por suerte, encontré ¡un cla-
vo solitario! al que me anclé y aseguré a
Lolo (después me cayó una gran bronca
por parte de mi compañero al ver nuestra
precaria situación); o el vivac a cosa he-
cha para tener esa experiencia en el Die-
dro de los Vencejos (6a/A2, 270 m), junto a
Enrique de Fuengirola, con unas hamacas
de red, sin sacos de dormir, en pantalón
corto, con un triste forro polar porque era
agosto y pasamos toda la noche tiritando
por el viento helado del cañón. También
guardo grato recuerdo de la primera esca-
lada que realicé a Los tres techos (A2e, 250
m) con Rubén De Francisco, en la que
solo llevábamos 30 exprés, dos estribos
viejos de aluminio y toda la progresión a
base de bloqueo de bíceps, ¡sin daisy
chains! O la idea que tuvimos en el 96 de
abrir un itinerario paralelo a Los tres te-
chos, que se quedó en un largo La casi casi
(A4+, 25 m) porque nos pegamos casi 20
h para abrirlo a base de grandes vuelos y
cambiándonos el cabo caliente (actual-
mente está destrozada porque la equipa-
ron sin respetar y es 8b). O esas agrada-
bles escaladas siempre con un poco de re-
saca que disfruté con “Tete” de Granada,
y esos sueños de intentar liberar los viejos
artificiales, o repetir las vías más temidas
o con leyenda. También eran mágicas
esas charlas en el bar de la Isabel o en el
refugio con los escaladores más vetera-
nos, preguntándoles dudas o temores so-
bre vías que querías escalar.
Han pasado muchos años de todo eso,
y durante todo este tiempo he repetido
muchas de las vías clásicas en compañía
de diferentes amigos y en solitario, he
abierto un buen puñado de vías siempre
desde abajo, con el menor número de ex-
pansiones y a ser posible en libre, aun-
que a veces he tenido que tirar de artifi-
cial en algunos momentos, todas reparti-
das en diferentes sectores (en algunos de
los cuales ya es imposible escalar por las
prohibiciones) y me siento afortunado
de haber vivido una época más libre, sin
restricciones o prohibiciones para la es-
calada en El Chorro.
No quiero decir que ahora no sea una
buena época, pero no es igual, veo que se
ha quedado toda la escalada en pared re-
ducida a las Frontales y a una parte del
Cerro Cristo y poco más. Sin contar con
el Tajo del Cabrero que está en Desplomi-
landia (con sus respectivas restricciones).
Pérdida histórica
También siento que se ha perdido un le-
gado histórico de transmisión de infor-
mación, de conocimiento de las vías clási-
cas y su situación, del estilo o ética de res-
petar los itinerarios existentes en pro de
la seguridad que dan las vías totalmente
equipadas desde arriba y pasadas a “pa-
lanca” en todo su recorrido. Un ejemplo
muy claro es que en los Rallys actuales de
12h de escalada no se incluye ninguna vía
que no esté equipada, el motivo es por la
seguridad, dando la sensación de que solo
existen las vías de pared llenas de para-
bolts. Y quiero dejar claro que la seguri-
dad no va en función al número de ex-
pansivos, sino en saber dónde están tus
Arriba, en el Primer Cañón abriendo el L2 de El
salto de los Vanuatus. Página izquierda, en los
noventa durante su repetición del Diedro de los
Vencejos (270 m 6a/A2) en los Tres Techos; y
abajo, Carlos Hernández abriendo el L5 (6c/7a)
de Educación para la ciudadanía, vía de 200 m
sin ninguna expansión abierta a vista junto a
Pedro Soto en mayo de 2012.
propias limitaciones y tus capacidades
para enfrentarte a un reto.
Por eso, siento que poco a poco en El
Chorro se va perdiendo un estilo tradicio-
nal de escalada, aunque por suerte aún
quedan escaladores –entre los que me in-
cluyo– que siguen apostando por la escala-
da tradicional y las aperturas desde abajo.
Quiero dejar claro que nunca me he
considerado un escalador local de El Cho-
rro, pero sí un gran enamorado de esta
mágica escuela. Todo lo he escrito de me-
moria y seguro que me he olvidado de
muchos datos y vías, os pido disculpas.
¡Salud y rebeldía compañeros! Espero y
deseo ver con mis ojos un resurgimiento
de nuevas generaciones que apuesten por
una escalada más limpia sin tanto hierro.
Pedro SOTO GUERRERO
DESNIVEL.COM I 65
 LA HUELLA TRADICIONAL DE en el 2011, el resto de líneas las han fir-
mado juntos. Entre ellas, destacan la Rei-

Paulo Roxo y
no dos Abutres como la escalada de la que
se sienten más orgullosos: «Pudimos en-
contrar un buen hueco en las Frontales
para abrir una línea lógica y muy larga.

Daniela Teixeira
¡La fisura diagonal del penúltimo largo
es fenomenal!».
En cuanto a la evolución, como mu-
chos otros, Paulo marca la reconversión
del Caminito del Rey como punto de in-
Hablamos con el portugués Paulo Roxo, aperturista de once vías
flexión definitivo para la escalada: «Es
en El Chorro, casi todas con su pareja, la también portuguesa innegable que el Caminito aporta mucho
para la economía de la región (eso creo)
Daniela Teixeira. Sus líneas son el reflejo de que, para quien sabe pero, para la escalada (es decir, para
nosotros) fue una tragedia. Muchas pa-
mirar, todavía puede encontrar aquí la aventura. redes se prohibieron y mucha historia de
la escalada se fue para siempre. También
el entorno cambió para peor con el in-

C
UENTA Paulo que conoce
El Chorro desde los años 90,
si bien en los inicios visitaba
la zona principalmente por
su escalada deportiva (“¡cuando El Cho-
rro estaba de moda”), sin llegar a consi-
derarlo un destino para la escalada clási-
ca en esos primeros años. Sin embargo,
su mirada cambió cuando empezó a ir
con su compañera de escalada y de vida,
Daniela Teixeira. «La primera vía que
abrimos juntos en El Chorro fue en ene-
ro de 2010 con la Vía-Zita y fue especial
no solo por ser la primera, también por
ser un homenaje a la abuelita de Daniela
que la llamábamos cariñosamente Dona
Zita. Desde aquella primera vía, casi
siempre volvimos a El Chorro para esca-
lar (y abrir) vías de escalada de aventura
y siempre desde abajo».
Excepto Desnorte Total en las Fronta-
les, que abrió Paulo con Bruno Gaspar
cremento del turismo masificado».
Reconoce que hace ya algunos años
que no visitan El Chorro, aproximada-
mente desde 2018, pero no descarta vol-
ver y encontrar nuevas aventuras. Es un
gran defensor de las aperturas desde aba-
jo: «Si todavía existe algún espacio lógi-
co, creo que las nuevas vías deberían se-
guir la línea de las vías clásicas, un poco
también por razones de sostenibilidad.
Hay un mundo entre abrir desde abajo y

66 I DESNIVEL.COM
Daniela y Paulo en una de sus muchas
escaladas en El Chorro. Derecha,
Paulo durante la apertura de Aniversario
gitano (205 m, 6b/A0), que realizó
en junio de 2018 con Daniela, buscando
su camino en cinco largos de
autoprotección en la Escalera Suiza.

equipar desde arriba colgado de una

cuerda. Desde arriba y con taladro es
muchísimo mas fácil todo. No tiene his-
toria y todo se acelera bastante. Abrir
desde abajo ya es otro tema. Todo el pro-
ceso es más lento y hay una especie de
control natural, pues no todos son aptos
(o quieren) adoptar ese tipo de escalada.
En El Chorro ya existen centenares de
vías deportivas. Por eso, en mi opinión,
sería importante dejar espacio para futu-
ras generaciones de aperturistas, lo poco
que queda (teniendo en cuenta que hay
sectores con alto potencial que se podrí-
FOTOS: PAULO ROXO

an regular debidamente, pero que ac-

tualmente están prohibidos)».

Redacción Desnivel

ALGUNAS VÍAS TRADICIONALES RECOMENDABLES

C
OMPARTO aquí una breve lista de vías
clásicas “modernas” de El Chorro,
variadas en grado y en dificultad, orde-
nadas cronológicamente y ubicadas en zonas
que no están prohibidas (porque en zonas pro-
hibidas hay verdaderas joyas esperando que se
anulen algún día esas prohibiciones absurdas).
• Ojos que no ven (7a+, 180 m), en Frontales
medias (por Ale “el Bu” y el Chino en 2009).
• Via-zita (175 m, 6b+/c) en Escalera Suiza (por
Paulo Roxo y Daniela Teixeira, en enero de 2010).
• El algodón no engaña (6c, 70 m), en Las
Canteras (por Carlos Hernández y Sandro Mora
Ottomano en 2012).
• Noviembre (pero hechos en carnavales) (6c,
170 m), en Cerro Cristo (por Alberto Corrales y
Jaime Anguiano en 2015).
• Aguardiente (7b/c, 100 m), en Momia (por
Carlos Hernández y Pedro Soto en 2016).
• Buscando Pokemon (7a+, 125 m), en Momia
(por Pedro Soto y Carlos Hernández en 2016).
• Matutano (6b+ Expo, 95 m) en Las Canteras
tivamente poco, que hay que incluir en la libreta
por su soberbia escalada, como son:
• Dahiyanirja (A2+ o 6c+, 100 m), en Las Can-
teras (L1 6b, liberado por Urba y Dani Gaona en
2015 y L2 6c+ liberado por Pedro Soto en 2015).
• Kalimba de Luna (A2 o 7b, 100 m), en Las
Canteras (L1 7b 45 m liberado por Dani Gaona y
Urba en 2015).
• Manolo Wonder (A2+ o 7b+, 100 m), en Las
Canteras (L1+L2 60 m liberado por Urba y Dani
Mollina en 2015).

• Be water knijo (6b+/A1 o 7b?, 150 m), en
Cerro Cristo (por Ale “el Bu” y Luis en 2010, aún
por liberar hasta donde sé).
• Gula (6c/A0, 175 m), en Escalera Suiza (por
Paulo Roxo y Daniela Teixeira en 2011).
• Desnorte total (6c+/A2, 255 m), en Frontales
(por Paulo Roxo y Bruno Gaspar en 2011).
• Reino dos abutres (6b/A1, 320 m), en Frontales
(por Paulo Roxo y Daniela Teixeira en 2011).
• Roscón de Reyes (6c+, 190 m), en Escalera
suiza (por Gabi, Javi y Manolo “Wonder” en
2011).
(por Carlos Hernández, Angel Chiappi y Pedro
Soto en 2017).
• Papa Delta (6c, 55 m), en Las Canteras (por
Carlos Hernández y Pedro Soto en 2017).
• Aniversario Gitano (205 m, 6b/A0) en Es-
calera Suiza (por Paulo Roxo y Daniela Teixeira en
junio de 2018).
• La delgada línea roja (6c, 190 m), en Frontales
(por Pedro Soto y Rubén de Francisco en 2021).
Y completo la lista con un pequeño surtido de
clásicas de la época dorada y liberadas hace rela-
• Escorpión (6b/A1 o 7c+, 290 m), en
Frontales (todos los largos menos el L2 por
Adam Chamizo después del reequipamiento de
2016 con dificultades de hasta 7a en libre, y en
2019 Pedro Soto libera el L1+L2 proponiendo
7c+. Pendiente su encadenamiento íntegro des-
de el suelo a la cumbre).
Pedro SOTO GUERRERO
Croquis de estas vías en los blogs de Pedro Soto
(http://sotoclimb.blogspot.com) y de Paulo Roxo
(http://rppd.blogspot.com). En ambos
encontraremos información de muchas otras vías de
escalada tradicional dentro y fuera de España.

DESNIVEL.COM I 67
 Asociación de Escaladores Andaluces
Buscando el diálogo
La AAEE lleva ya una década luchando por los derechos de los escaladores en
las zonas andaluzas, y entre ellas El Chorro, que ha sido sometida a unas prohibiciones que
en muchos casos responden principalmente a intereses económicos. Se han eliminado de
un plumazo sectores completos alegando motivos medioambientales poco fundamentados, sin
tener en cuenta la importancia histórica de la escalada en la zona. Conocemos aquí de
la mano de su presidente Manuel Gómez, los objetivos de esta asociación y sus reclamaciones.

E
L detonante de la creación de la
AAEE fue la publicación, en ju-
nio de 2012, de la resolución
que prohibía la escalada en Des-
plomilandia por parte de la Delegación te-
rritorial de Medio Ambiente de Málaga.
Paralelamente nos enteramos que en
mayo había salido una resolución similar
que prohibía definitivamente la escalada
en el Tajo del Molino (Teba). Desplomi-
landia está fuera del Paraje de El Chorro
en la zona norte, hacia los pantanos. Nico-
lás Rando convoca una reunión de emer-
gencia de escaladores para tomar medidas
y se encarga de realizar las alegaciones
pertinentes. Al tiempo, la resolución sale
favorable y se regula temporalmente la pa-
red del Tajo del Cabrero, de escalada clási-
ca durante el periodo de nidificación. El
25 de agosto se celebra una reunión de es-
caladores en Álora (Málaga) donde se
acuerda la creación de una asociación que
defienda al colectivo. En unos meses re-
dactamos unos estatutos, formamos una
junta directiva y se aprobaron legalmente.
Estructura, objetivos
y financiación
La AAEE la forman una junta directiva con
ocho delegados provinciales. La extensión
territorial de Andalucía es grande, con mu-
chas zonas de escalada que necesitan de un
responsable que sea de la zona y vaya solu-
cionando los problemas que surjan.
El principal objetivo de la AAEE es de-
fender el libre acceso a las zonas de escala-
da en Andalucía, buscando consensuar los
intereses de escaladores, equipadores, ad-
ministraciones públicas y propietarios par-
ticulares, buscando un desarrollo sosteni-
ble de la actividad.
Económicamente nos financiamos por
alguna donación o por aportaciones de pu-
blicidad en la web. No hay cuota de socio.
Evolución de las prohibiciones
y regulaciones en El Chorro
Desde mediados de los años 80 empiezan a
surgir problemas con la guardia civil debi-
do a que en la zona había hippies que viví-
an en las cuevas y casas de la vía del tren,
incluso hubo algún muerto en extrañas
circunstancias. La droga se movía por la
zona y los civiles iban identificando a todo
lo que se movía. Hacia el año 1986 apare-
ció “el Dinamita”, un delincuente de Álora
que, presuntamente, asesinó a dos extran-
jeros en la zona del Polvorín. Se escondía
por la zona y en el año 1987 lo detuvieron.
El 18 julio de 1989 se declara el Paraje
Natural del Desfiladero de los Gaitanes y, a
falta de un plan que regule la escalada, co-
mienzan los problemas con medio am-
biente, centrados en no transitar ni escalar
en el Caminito del Rey, la acampada en el
paraje, los buitres y la planta rupícola ru-
phicanus. Posteriormente empezaron las
multas y control de las vías del tren, sobre
todo a los senderistas que iban a ver el Ca-
minito accediendo por los túneles.
En 2006 se redacta el primer borrador
del Plan Ordenación Recursos Naturales,
que saca hasta 13 borradores hasta la
aprobación del citado plan en 2017, sien-
do definitiva el 11 de julio de 2018.
La construcción del nuevo Caminito del
Rey y su puesta en marcha el 28 de marzo
de 2015 expulsa de facto a los escaladores
de los desfiladeros, de las rutas por encima
de la pasarela y limitando o imposibilitan-
do los accesos a muchos sectores. En todos
estos años ha habido todo tipo de conver-
saciones y negociaciones por parte de la
Sociedad Excursionista de Málaga, la fede-
ración y la AAEE a fin de poder conciliar la
escalada con los temas medioambientales.
Actuaciones de la AAEE
Antes de la creación de la AAEE, en 2010,
Medio Ambiente hizo una reunión con
escaladores, se presentó un proyecto con
las zonas de escalada, accesos, etc. de El
Chorro. Realicé con los técnicos un par
de visitas encaminadas a demostrar la via-
bilidad de los accesos al interior del Para-
je sin tener que ir por la vía del tren y, gra-
cias a eso, en Desplomilandia, Polvorín y
Cotos se puede escalar.
En 2012 se creó la Mesa Provincial de
Gestión de la Escalada, formada por fede-
ración, AAEE, Diputación, medio am-
biente y algún ayuntamiento, con el fin de

68 I DESNIVEL.COM

Ta
jos
de
Alm
orc
hó
n
Zonas reguladas y prohibidas en el Paraje Natural Desfiladero de Los Gaitanes, según la resolución del 11 de julio de 2018,
de la Delegación Territorial en Málaga de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio. Mapa extraído del cuadernillo Escalada sostenible en
El Chorro, publicado por Junta Andalucía y Diputación de Málaga
debatir actuaciones y propuestas de uno y
otro. Es un órgano de gestión interesante,
pero desde la pandemia de la covid no se
ha reunido. En 2012 entra en escena el
proyecto Life Bonelli a nivel nacional, que
afecta directamente a escaladores de to-
das las comunidades, pero especialmente
a Navarra, Madrid, Baleares y Andalucía,
lo que conlleva actuaciones, regulaciones
y prohibiciones de todo tipo, muchas que
la AAEE no comparte.
Desde 2013 se intenta, con Diputa-
ción de Málaga, negociar la fórmula de
accesos de los escaladores a sectores de
dentro del Paraje de El Chorro, y a ree-
quipar vías en zonas del caminito (siem-
pre por debajo o enfrente). Se han pre-
sentado dos presupuestos y cuatro pro-
yectos sin haber llegado a acuerdos,
unas veces por falta de dinero y otras
por esperar a que medio ambiente sacara
el PORN de El Chorro.
Situación actual
y perspectivas de futuro
El colectivo escalador en general se impli-
ca poco, y su participación y apoyo a cau-
sas tan poco agradecidas y visibles como
son la defensa de las zonas de escalada es
os
alle ster
de B
Tajo
M
otos
Los C
s de
Placaoeste
Atrá s
ro
des f
Pare
muy limitada. Visitar zonas, realizar in-
formes, alegaciones, recursos... no tiene
“flow”. Lidiar con los gestores y políticos
es una tarea ingrata y, obviamente, ellos
lo saben y no ponen las cosas fáciles.
A fecha de enero de 2022 se ha recha-
zado el recurso de alzada presentado por
la AAEE para que se pudiera escalar en
algunos de los sectores más emblemáti-
cos e importantes del Chorro, como son
la zona de los Tres Techos, Belladona y
Numolite. Para la AAEE no hay justifica-
ción a una prohibición total, y en algunos
casos, ni siquiera a una regulación tem-
poral. El socorrido mantra medioam-
biental de “hay nidos” o “hay nidos his-
tóricos” es el as en la manga de la admi-
nistración para prohibir sectores. Ade-
más, en el caso de la zona de los Tres Te-
chos, la propuesta de acceder a las vías
rapelando desde la cumbre, es desestima-
do por verlo “dificultoso y que algunos
optarían por acceder por la vía del tren”.
La postura de una administración con
carencias en cuanto a personal y medios
se pone de manifiesto en establecer solo
dos escenarios: zona de escalada permiti-
da y zona prohibida, las regulaciones
temporales solo se dan en el sector del
N
s de
Placa este
s
Atr á
be
y Ára
za
Sui
ras
sc ale
t a l e sye
n LEYENDA
Paraje Natural
Regulación escalada
Libre
Libre condicionada
Prohibido
Corral, por un nido de alimoche que fue
tiroteado en 1992. La política a seguir es
“yo prohíbo y me cubro las espaldas”. De
regulaciones dinámicas ni hablamos, eso
es futurista, aunque ejemplos de manual
hay en Aragón y Cataluña.
Honestamente: no se nos quiere den-
tro del Paraje del Chorro y sus desfilade-
ros y paredes aledañas, y menos aún in-
terferir visualmente con los 300 mil
transeúntes del Caminito, que se paran y
colapsan la pasarela.
En la historia de la escalada en Andalu-
cía, El Chorro es un referente, por orogra-
fía, por diversidad, por los retos deporti-
vos alcanzados en algunas vías conocidas
a nivel mundial. Lástima que los gestores
y políticos no entiendan nada de gestión
de la escalada ni de los beneficios y sensa-
ciones que aporta a miles de escaladores
que año tras años visitan el lugar.
¿El futuro? La AAEE seguirá luchando
administrativamente contra las prohibi-
ciones sin fundamento de medio ambien-
te, conciliar posturas y abrir nuevas vías de
dialogo. En El Chorro cabemos todos.
Manuel GÓMEZ TRUJILLO
Presidente de la AAEE
www.escaladoresandaluces.com
DESNIVEL.COM I 69
 GUÍA PRÁCTICA

EL CHORRO
SELECCIÓN DE VÍAS HISTÓRICAS Y MODERNAS
Presentamos aquí algunas de las vías más interesantes de las paredes Frontales de
El Chorro, que han sido seleccionadas en función de su interés histórico (hemos ido
conociendo a sus protagonistas a lo largo de este número) o bien por la calidad de
sus recorridos. Ampliamos la propuesta de vías de varios largos con cuatro sectores
deportivos, dos de ellos de muy reciente equipamiento.

Aproximaciones hay distintas opciones, depen- Frontales Bajas: Actualmente

H
EMOS tratado de in-
cluir tanto las vías con
más solera –muchas
de las primeras as-
censiones que fueron surcando
las distintas paredes– como
algunas más modernas que se
han ido incorporando en los úl-
timos años a la amplia oferta
de El Chorro, que actualmente
ronda las dos mil vías. Aunque
la mayoría de las vías largas
se encuentran totalmente equi-
padas, no debemos subesti-
marlas; es importante valorar
el esfuerzo global que requieren
y nuestro nivel para elegir ade-
cuadamente los itinerarios.
En coche, dependiendo de la
procedencia, se llega al pue-
blo de El Chorro a través de
Ardales y Álora o del Valle de
Abdalajís. Esta última opción
es la más frecuentada por los
escaladores que vienen del
norte. Para ir a las Frontales
diendo de las vías que quera-
mos acometer. Importante: el
carril que parte de la estación
hacia los Albercones o hacia la
Escalera Árabe está prohibido
a la circulación de vehículos a
motor, dado que la zona es
Parque Natural.
aparcar el coche en las cerca-
nías de la estación de tren es
tarea difícil debido a los auto-
buses y a los visitantes del Ca-
minito del Rey (los lunes cie-
rran la pasarela). La mejor zona
para aparcar es la gran expla-
nada que hay junto a la presa

10 11
9c
9b
P
9a 9 7

Caminito 6
13
20 12 5
14 4
7 3
2
1 18 P
6
19

17
MA-5403 P
17a
4

8 17b
El Chorro P3
P Alberca 15 16
MA-5403 MA-5403
P 5 P
MA-5403

P
1

En rojo: sectores prohibidos. En naranja:

sectores regulados o prohibidos parcial-
mente. En verde: sectores permitidos (li-
bres o autorizados por los propietarios).

SECTORES: 1. Albercones. 2. Frontales Bajas. 3. Frontales Medias. 4. Placas de la Cantera. 5. Escalera Árabe. 6. Escalera Suiza. 7. Cerro Cristo. 8. Caliza. 9. Placas de Atrás*.
10. Cotos Bajos y Polvorín. 11. Cotos Medios y Altos. 12. Pared de los Venenos (solo permitido por debajo del Caminito del Rey). 13. Desfiladero suroeste. Tres Techos. 14. Des-
filadero Sur, África y Recodo (solo permitido por debajo del Caminito del Rey). 15. Las Encantadas*. 16. Beedies, Olivillo*. 17a. Donde*. 17b. Corral (prohibido del 1 marzo al 30
septiembre). 18. Rocabella*. 19. Frontales (zona alrededor de la vía Apocalipsis). 20. Cerro Cristo norte (sin vías). (* 9a, 9c, 15, 16, 17a y 18 autorizados por los propietarios).

70 I DESNIVEL.COM

de la Encantada, poco antes de
llegar a la barriada de El Chorro
(P1), hay mucho espacio y se
tolera la pernocta. Otra zona
posible es delante del camping
(P4) o junto a los apartamentos
La Garganta (P2). Lo más cer-
cano a la pared es justo antes
del carril de los Albercones,
junto al cartel informativo de
Parque Natural y sendero Haza
del Río (P3); para llegar ahí hay
que pasar por delante del bar
de Isabel y, a unos 300 metros,
girar a la derecha dejando las
casas atrás. Hay pocas plazas
(no obstaculizar el camino).
Aproximación: para ir a los
Albercones y el Castrojo, seguir
el carril durante unos 10 minu-
tos y llegaremos a la antigua
explanada donde se cargaban
de agua los trenes de vapor.
Para la zona de Amptrax,
Apocalipsis, Circo Suizo y Poe-
ma Roca, hay que coger unos
senderos que se desvían ser-
penteando a la derecha y hacia
arriba al poco de empezar el ca-
mino de los albercones. De 15 a
30 min. Para Poema Roca tam-
bién podemos seguir el carril
que sube por el valle hacia la
Escalera Árabe y desviarnos
hacia la izquierda en una curva
pronunciada a derecha. Unos
30 minutos de aproximación.
Frontales Medias y Altas:
Esta zona comprende todos los
sectores desde el sector Aus-
tria hacia arriba: Placas de la
Accesos y descensos de
las Frontales
P
7
P
6
P
P
P
5
MA-5403
P
4 P
3
P
2
P
1
Cantera, el Olimpo, Escalera de tren conducir hacia el Valle Suiza y el sector del Navegador. faltado que pasa por delante del
Suiza y Árabe, Sin futuro y Se- de Abdalajis, a unos 5 km y an- El sector Rinconcito Yeye lo en- cámping. En la cima debemos
rena. Hay varios accesos se- tes de una curva a derecha que contraremos justo antes de lle- buscar un collado característico
gún el sector elegido y en fun- baja hacia las Angosturas y el gar a la Escalera Suiza. y cruzarlo. La senda está mar-
ción de si tenemos coche o no. complejo turístico Rocabella, cada con hitos.
Los parkings serían cualquier sube hacia la izquierda y borde- Descensos La mayoría de las vías de la
de la estación de tren (P1, 2, 3 y ando el citado complejo turísti- Casi todas las vías largas aquí zona de Poema Roca no aca-
4), en la fuente de Matiañez o co, una pista de tierra. Seguirla reseñadas son rapelables. Algu- ban en la cumbre, llegan hasta
las Encantadas (P5) y el parking recta hasta su final, obviando nas precisan de experiencia y una gran repisa que se recorre
creado arriba del puerto de los desvíos, se pasa por la zona técnica para ir engarzando se- hacia la derecha hasta alcanzar
Flandes donde parte el sendero de parking del sector Rocabella guros en la bajada y evitar que el fin de la vía El Señor de las
al monte Huma (P7). Para los y en unos 5 minutos de coche las travesías o desplomes nos Tinieblas, por la que en 6 rápe-
sectores Donde o Rocabella te- llegamos al parking habilitado. separen de la pared. No obstan- les bajamos.
nemos el P6. Para llegar a los sectores, se- te, las vías que llegan hasta la La vía Lluvia de asteroides
Si vamos desde la estación guir a pie el camino señalizado cumbre tienen descensos an- precisa de un rápel (30 m) para
de tren: tomar el carril que, al hacia el Huma que a unos 600 dando. Desde Amptrax a Mar de quedarnos en un pequeño circo,
inicio del camino a los Alberco- metros se desvía hacia la dere- fuego (rapelables) se utiliza el hay que subir ligeramente pe-
nes nos lleva por el valle de Ha- cha, nosotros seguiremos des- descenso de bajada por la iz- gados a la pared de la derecha
zas del Río hacia el Huma, seña- cendiendo durante unos 10 mi- quierda de la pared (una hora) hasta alcanzar la arista, desde
lizado con marcas GR hacia el nutos hasta ver el sendero que que nos deja en el puente de la cual se baja igual que el sec-
puerto de Flandes y va serpen- va por debajo de la Escalera piedra y la bajada al tramo as- tor Amptrax. Hay hitos.
teando por el bosque. Hasta la
zona más alejada son 40 min.
Para llegar a la fuente de Ma-
tiañez, desde la estación de tren
tomar la carretera hacia el Valle
de Abdalajís, tras unos 2 km a la
izquierda vemos un transforma-
dor eléctrico, una alberca y una
pista de tierra a izquierda que
lleva a la fuente de Matiañez y
hacia el valle de Haza del Río.
Aparcar en esa zona o delante
de la pared de las Encantadas.
FOTOS: MANUEL GÓMEZ TRUJILLO
Seguir a pie la pista hasta llegar
al sector escogido. Unos 20 mi-
nutos a Poema Roca y 35 minu-
tos a la Escalera Suiza. El sector
Solarium lo encontramos a la
derecha de Poema Roca.
Para el parking del puerto de Acceso al Makinódromo
Flandes (P7) desde la estación
DESNIVEL.COM I 71
 GUÍA PRÁCTICA

SECTOR SOLARIUM
1. Sucias artimañas (7a). 18. Billy the kid (6b+).
2. Compacteibol (6b+). 19. Al Capone (7a+).
3. Nido de bolillos (6a+). 20. Agip (6b+).
4. Las amigas de 21. Nanuz (6a+).
Lulu (V+). 22. Fails
5. El osito polar (5+). (L16a, L2 7c+/8a).
2
6. Casiorea (6a). 23. Mundo bigote (7b+).
7. La Yurta (7a). 24. La mini Fugaz (6c).
8. Destrozado y sin 25. La Tachada (7a).
encadenar (7b+). 26. Odio profundamente
15
8 9. El erudito punk (7c+). el curry (6c+).
10. El blackout del 27. Trond proj.
vikingo (8a). 28. Gangrena brothers
11. Sin nombre (7c). (7b+).
12. Solarium (7b). 29. El gregario de lujo
1 19 13. Lobo Lopez (7b). (6b+/6c).
3 4 14. Clint Eastwood 30. Los PRO-blematicos
5 6 7
18 (L1 4+, L2 6b+, L3 6b). (5+).
14 16 17
9 10 11 12
15. El guiri volador (6c). 31. La bolsita perdida
13
16. Grano tiene (6c+). (5+).
17. Deprisa y 32. Umurga (6a).
con bulla (6c). 33. Johny Bravo (6a).

RINCONCITO
YEYE
14
1. Stay Free (7b+).
2. Corazon letón (7b+).
3. El rinconcito yeye (7c). r
la

4. Sin rendir pleteisia (7c+).

Po

5. Ropa vieja (7b+).

lla

6. Mindundis no more (7b+). 23

7. Party men (7a). e 22
r

8. La caricia del bolo (7a/+). 13 19

Est

9. Spanish bombs (6b+). 10 18

10. Manapolis (6b+/c). 12
11. Shalalala (6a+). 8 29
27 28
12. Assumpta (6b).
13. 25 años después (6a+). 11
14. Persona sospechosa (6b+).
15. Los puñetes (6c+).
16. Mierda y cuchara (7a).
17. Lo que quieres oír (6c/+).
22 31
18. Peon caminero (6b+/c).
2 3 7
19. Beiruth (5+/6a). 1 4
5
6 9 24 a 26
Ubicado a 10 min del P7 (antes 14 21
15 20
de llegar a Escalera Suiza). 17
FOTOS: JUAN

Equipado por Man Mancera con 16

33
32
ayuda de El Chorro Bolt Found y 30
Finca la Campana.

72 I DESNIVEL.COM

Las vías Fin de una vida,
Mal de Ojo y Estrella Polar se
bajan andando hacia la dere-
cha de las Frontales, saliendo
por el sector deportivo Escale-
ra Árabe y alcanzando el carril
que nos lleva a la estación de
tren o al parking superior. Al
llegar a la cima se busca un
collado pequeño muy caracte-
rístico y los hitos nos llevan
por el lado derecho de la cres-
ta hasta dar con el camino de
Escalera Árabe (45 min). Al
igual que el otro sendero se
encuentra muy marcado.
Makinódomo: debemos ir
hacia el camping y la zona de
salida del Caminito del Rey.
Seguir el camino balizado has-
ta encima del puente de hie-
rro, de allí subir por la ladera
hacia una gran pedrera que
bordeamos por la derecha o la
izquierda (varias sendas), tras
unos 100 metros de desnivel
de la pedrera, nos dirigimos
hacia la izquierda en horizon-
tal y luego ascendiendo hasta
la arista. Hay hitos y marcas,
buscaremos un portillón de
roca que permite pasar a la
otra vertiente y ya por una
buena senda llegamos al sec-
3
5 8
5 6 7
3
2
tor. Una hora y media desde la
estación.
Horarios
Los horarios de las vías van en
función de su longitud y el nivel
y experiencia de la cordada.
Las medias oscilan entre las 4
horas de las vías de 4/6 largos
hasta las 6/7 horas para las
vías más largas.
Mejor época
Aunque hay sectores con dis-
tintas orientaciones, predomi-
na la orientación sur, por lo
que el invierno es la mejor épo-
ca para escalar, prolongándose
en el otoño y la primavera.
Material
Las vías más modernas tienen
algunos largos con hasta 14
seguros, por lo que un juego de
16 cintas bastará para todas las
vías. Con una única cuerda de
80 m se pueden hacer todos los
rápeles. Dos cuerdas permiten
rápeles más largos. Lleva siem-
pre el casco tanto cuando esca-
las como cuando aseguras a
pie de vía o transites hacia los
sectores; las cabras u otros es-
caladores por arriba pueden ti-
rar involuntariamente piedras.
4
ESCALERA SUIZA
En la base del sector encon-
traremos numerosas vías de
un largo, de corte deportivo,
en general de grado medio
(predominio del Vº y sexto
grado). Detallamos aquí solo
las vías con más de un largo.
1. Alcalá de Guadaíra
(200 m, V+)
Equipada en Diciembre del
2018 por Manuel Rodríguez
con la ayuda de Andrés Her-
mosin y Isaac Ordóñez. Ma-
terial: 16 cintas exprés y
cuerdas dobles o cuerda de
70 m. Todas las reuniones
están en buenas repisas. El
descenso se rea liza por la
parte de atrás, por un siste-
ma de rápeles (¡de 35 me-
tros!) que comienza justo al
lado de la última reunión.
Desde aquí se puede acce-
der al sendero de la Escalera
Árabe, por el cual continua-
remos nuestro descenso. No
es recomendable rapelar por
la misma vía.
2. Rogelio
(250 m, 6b)
Buena vía de iniciación, que
permite empalmar varios
largos. El 6b+ es un paso a
bloque bien protegido (se
acera fácil). Para descender,
seguir subiendo unos me-
tros hacia la derecha hasta
encontrar la senda de baja-
da hacia la Escalera Árabe.
No se recomienda rapelar.
3. Los arcángeles
(L1 IV, L2 IV, L3 V+, L4 IV,
L5 IV+, L6 IV+ ¡68m!).
4. Blue Line
(350 m, V+)
Vía de escalada deportiva
abierta en 2017 por Tobias
y Grit Görtz, con la partici-
pación de algunos amigos.
Sigue una empinada rampa
a la derecha rodeada de ar-
bustos, hierba y árboles a
diestro y siniestro. No obs-
tante, se trata de una esca-
lada limpia sobre roca sóli-
da e intacta. Equipada con
parabolt. Material: 16 cin-
tas exprés. Descenso: una
vez terminado el último lar-
go hay que descender unos
10 metros hacia el norte
por un terreno fácil (II), y
seguir descendiendo hasta
un sendero que nos llevará
WWW,CARTOWALL.COM
a la Escalera Árabe (en
unos 45 minutos). No se re-
comienda rapelar.
5. Chilona
(L1 IV, L2 6a+, L3 6a),
vía deportiva.
6. Highway to Africa
(L1 V+ ¡32 m!, L2 6b),
vía deportiva.
7. Mali en Suzuki
(L1 6a+ ¡35 m!, L2 6c),
vía deportiva.
8. Piedra madre
(300 m, 6c).
Vía plaquera de grado exi-
gente. El recorrido hace al-
gún zig-zag. En general
bien equipada, con unas 16
cintas tendremos suficien-
te. No se recomienda rape-
lar la vía. Encontraremos el
camino de descenso por
detrás.
9. Navegador
(122 m, 7a+).
Vía de equipamiento depor-
tivo. Llevar cintas exprés.
Se puede rapelar por la mis-
ma vía.
DESNIVEL.COM I 73
 GUÍA PRÁCTICA

6
18 22
5
19
10

11

20 21

33
32

1
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13 34
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25
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65
66 67

68
69
70
71 72

74
75
76
77 78 79

ESCALERA ÁRABE
Sector deportivo situado a la
izquierda de la Escalera Sui-
za. Con sol todo el día y prote-
gido del viento, es el sector
estrella para el invierno, muy
frecuentado por su abundan-
cia de vías de grado medio.
1. Chatarra (6a+).
2. Resaca (6a).
3. Sopa con ondas
(L1 6b, L2 6c).
4. El beso de la flaca (V+).
5. Daños colaterales (6c+).
6. Lucas Grijander (7a+).
7. Lucky no come pan (V+). 19. Amor sandunguero 28. Placuneo 42. Solo afeitar (6a).
8. Producto (L1 6c, L2 6c). sin fronteras (7b). 43. El chato barato (IV).
nacional (7a+). 20. Colaboración 29. Árabe pedido (6c+/7a). 44. La sillita de la reina (IV).
9. Filou (6a). ciudadana (7a+). 30. Bladerruner (6a+). 45. La veta peta (IV).
10. Forjado en frío (7b+). 21. Alta traición (7a+). 31. Face of Flake (6b). 46. Diez años
11. Nunca mais (6c). 22. Engendro caneri 32. Aventur el Chorro (7b). de Mc Claud (6b+).
12. Blanca (6a). (L1 6a, L2 6a+). 33. El Crisol (L1 6b, L2 7a). 47. Rock fm (6a+).
13. El canalillo 23. Hockey night 34. Lococolo (7a+). 48. Zeig mir deine
de la Mari (6b+). in Canada (7a+). 35. Diedro torpedol (6c). Muskeln (6a).
14. Escalopendra guajani 24. El pilarito (III). 36. Arabesque (7a). 49. Sergio y Antonio (6a).
(L1 6b, L2 6c). 25. Brava bambina (7a+). 37. She's tu dinero (6c+). 50. Yo y mi resaca (V+).
15. Karius (6b). 26. Madonna 38. Birdy (7c). 51. Blobby left (6a+).
16. Baktus (6b+). cicciona (7a+/b). 39. Calvo potrón (7c+). 52. Blobby Right (6a).
17. Dr. Teeth (6a). 27. Mi abuela 40. Coming on strong (7a+). 53. La ducha
18. Zona cero (7a+). chochea (7a+). 41. Rock the kashab (7b). machucha (V+).

74 I DESNIVEL.COM
 Seguridad
Si decides iniciarte en escalar
vías largas equipadas debes
valorar seriamente tus conoci-
mientos y experiencia. Si rape-
las las vías largas, usa nudos
autobloqueantes como autoa-
seguro. Haz, siempre, nudos
en las puntas de las cuerdas.
Lleva cordinos, una pequeña
navaja y un tibloc o polea mini-
traxión para improvisar manio-
bras básicas de autorrescate.
Si no sabes en qué consisten:
infórmate y fórmate. Se han
47 49 51 dado varios accidentes morta-
48
les por errores fruto de la inex-
60 periencia en las técnicas de
52 53 54
aseguramiento y de rápel.
82
Cuidado con tirar piedras al
55
81 56 57 rapelar. Abajo hay sectores de
83
58 59 escalada deportiva, mejor baja
andando. Tras periodos de
fuertes lluvias suelen producir-
se desprendimientos de rocas
del embudo superior de la zona
de la Ébola, Amptrax...
Emergencias
El servicio de montaña de la
Guardia Civil cuenta con un
grupo de rescate en Álora, tel:
062 y 112.
Dormir, agua y
abastecimiento
46 El refugio de escaladores de la
entrada del pueblo cerró hace
tiempo. Para dormir, en la es-
tación de tren está el complejo
La Garganta con apartamen-
tos. El resto de alojamientos
está en la carretera hacia el
Valle de Abdalajís ofreciendo
habitaciones, camping o zona
de aparcamiento de furgonetas
61 62
63 64 según el establecimiento. Te-
nemos: La Campana, The Olive
WWW,CARTOWALL.COM
Branch, Climbing Logde, Roca-
bella y una gran variedad de
apartamentos y casas rurales.
El camping más cercano es en
el pantano de El Chorro, a unos
6 km dirección Ardales.
La tienda de escalada de
Aventur El Chorro, dirigida por
Andreas Kresse, está en la ca-
rretera del valle de Abdalajís, a
unos 3 km de la estación de
tren. En la barriada del Chorro
hay tiendas de comestible y va-
rios bares y restaurantes.
Agua hay en la estación de
tren, junto al local de la asocia-
ción de vecinos. También en la
fuente de Matiañez, en las En-
cantadas y en los Albercones.
Regulaciones y
prohibiciones
Está completamente prohibi-
do, bajo multa, transitar por
las vías del tren. Está prohibi-
do circular con vehículos a
motor por el carril Haza del
Río, que va desde la estación
de El Chorro hacia la Escalera
Árabe y Suiza.
El 11/07/2018 se aprobó la
Resolución que regula la esca-
lada en el Paraje del Desfilade-
ro de los Gaitanes, que hasta la
fecha queda así:
• Prohibido escalar por enci-
ma del Caminito del Rey.
• Prohibido escalar en los sec-
tores: Los Tres Techos, cara
norte de Cerro Cristo, Tajo del
Almorchón, cara oeste de El
Corral, Petit Desfiladero, La
Acequia y Brasil, Escenario de
Bufones, paredes por encima
de El Caminito del Rey, Tajo
Ballesteros, Belladona, Desfi-
ladero Norte y una franja de los

80
81
82 83 84

54. Chocolate Orante (6a+).
55. La placa me ataca (6b).
56. Schelmmer Reiser (IV).
57. Swiss Michael (IV+).
58. Gaumenschmaus (IV+).
59. Heidi y las 7 cabras (IV).
60. El ñosco volador (6b).
67. Tormenta
cerebral (6c+).
68. La hora
del guateque (6c+).
69. 6 estrellas (6c+).
70 . O te pones fuerte o
esperas a que sonría la
75. Nube gris (6a).
76. El amigo Lion (6a+).
77. Anacleto y Sofilee (V+).
78. Sobredosis de
espárragos (6a+).
79. Queso alemán (V+).
80. Toñi la reina
MANUEL GÓMEZ TRUJILLO

61. Peñita malaguita (7a+). suerte (7b+). del refugio (IV).

62. La ley innata (6c/+).
63. For fite (6b+).
64. Double Edged (6b+).
SECTOR Mc CLAUD
65. Proyecto Mireia (7a).
66. ? (6c+).
71. Rafa Walo's 81. Caminito a la
brother (7b). escalera árabe (6c).
72. Fisura flagoneti (6c). 82. Fuerte como
73. Clever Climb el limón (7b).
Adventures (6c). 83. Los 5 magníficos (7a+).
74. La esperanza lo último 84. El clan de los
que se pierde (6b). Mc. Claud (6a). Ejemplar de planta endémica Ruphicanus Africana, que ha motivado
algunas de las regulaciones a la escalada (se ruega respetar).

DESNIVEL.COM I 75

1
2 3 4
SECTOR MUNDO
1. Lluvia de asteroides
(250 m, V+)
Reequipada por Bernabé Fer-
nández. Llevar cintas exprés.
El L5 y L6 se pueden empal-
mar. Justa para su grado (lle-
var Vº asentado). Para descen-
der, trepar en diagonal hacia la
derecha hasta un rápel de 35
metros hacia atrás que nos lle-
va al camino de descenso.
2. Mira por dentro
(L1 6b 35 m, L2 6a+ 33 m).
Vía deportiva, se puede rape-
lar (cuerdas 70 metros).
3. Vía sin nombre
(L1 6a, L2 V).
Vía deportiva, rapelable.
76 I DESNIVEL.COM
6
5
4. Fanatik@s
(382 m, 6b+)
Larga y reciente vía, equipada
por Manuel Rodríguez entre
2019 y 2020, ayudado por un
grupo de amigos “fanatik@s.
Llevar cintas exprés. Se reco-
mienda cuerda de 70 metros,
y no rapelar. Para bajar, desde
la última reunión seguir por la
cresta hasta un punto en que
la puedes abandonar a la iz-
quierda por un terreno de tie-
rra que está marcado con hi-
tos y que sigue subiendo has-
ta una canal. Esa canal se
puede bajar y llegar a la zona
de las Placas del Olimpo, aun-
que no es lo recomendable. Lo
mejor es seguir unos hitos que
conducen a otra nueva cresta
13 14
10 11
12
9
8
7
por la que se sigue subiendo.
Continuar casi hasta el final,
donde hallarás una bajada
evidente a la izquierda, un
destrepe entre piedras que
conduce a la ladera que baja
hasta el camino de El Huma, a
través del cual descendemos
por la Escalera Árabe.
SECTOR MOMIA
5. Café con bourbon
(150 m, 7a o 6b+ obl).
Abierta por Stephan Girard en
1992. Atención pues hay
otras vías deportivas en la
placa de inicio. Esta se dirige
hacia una chorrera grisácea.
Vía deportiva, equipada para
rapelar (recomendado coser
alguna cinta al ir bajando,
15 21 22
16 19 20 23
17 24
18
pues desploma; con cuerda Vía deportiva, reequipada.
de 75 m se baja en 4 rápeles). Descenso rapelando.
6. Gaia SECTOR POEMA
(100 m, 7a+). DE ROCA
Vía deportiva equipada para La cueva presenta una vein-
rapelar. tena de vías deportivas de
grado alto (7b a 8b) que no se
7. Seco y Pedro reseñan aquí.
(100 m, 7a+)
Vía deportiva, suele repetirse 10. El fin de una vida
mucho el primer largo, por un (320 m, 7c)
característico diedro. Último Equipada por Ramón Enrique
largo común con Gaia. Carrera y Miguel Moya en el
año 2000. Recorre una linea a
8. Yonki latas la izquierda de la cueva Poe-
(6b) ma de Roca hasta situarnos
Vía deportiva de un largo. en el segundo jardín. A partir
de allí atraviesa por en medio
9. Out of Vogue de la gran placa. Llega hasta
(80 m, 7a+) arriba del todo. Llevar cintas
 GUÍA PRÁCTICA

Albercones Medios (aproxima-

da por ellos mismos en 2017.
Llevar cordinos, juego de
friends, de microfriends, de
empotradores, dos o tres gan-
chos, estribos y guíndola. Se
puede rapelar por la vía El se-
ñor entre las tinieblas, o bien
seguir trepando por la pared
hasta encontrar el descenso
de La Escalera Árabe. Los lar-
gos están liberados: L1 7b, L2
7c/+, L3 A2e, L4 7a+.
14. Máquina
cualquiera
(130 m, 7b+)
Escalada exigente y con am-
biente. Equipamiento deporti-
vo. Descenso rapelando.
15. Poema de roca
(135 m, 7c+ o 7b obl.)
Mítica vía, de gran belleza y
exigencia. Abierta con visión
futurista en 1991, por Stephan
Girard, Miguel Moya y Antonio
Gámez. Tiene el nombre pin-
tado a pie de vía y su primer
largo, cuajado de chorreras y
de magnesio, es inconfundi-
ble. Se puede descender por
la misma vía (ir cosiendo cin-
tas), o bien por la Máquina
26 cualquiera (más directa).
25 277
28 29 30
16. Escorpión
(300 m, 6b/A1 o 7c/+)
Escalada histórica, abierta en
octubre de 1985 por Felipe
Fernández y Carlos Pérez,
restaurada en 2016 por los
WWW,CARTOWALL.COM
20. Compacteibol
(6b+ ¡45 m!), vía deportiva.
21. Nido de bolillos
(6a), vía deportiva.
22. Las amigas
de Lulu
(V), vía deportiva.
23. Estrella polar
(280 m, 6b)
Equipada por Bernabé Fer-
nández. Llevar cintas exprés.
Recomendable vía que alcan-
za la cima en diez largos, re-
corriendo un característico
diedro en el L7. Descenso ca-
minando por el sendero hacia
Escalera Árabe.
24. Clint Eastwood
(L1 IV, L2 6b+, L3 6b),
vía deportiva.
SECTOR AUSTRIA
25. Edelweiss
(IV), vía deportiva.
26. Wienes Schnitzel
(L1 6b+, L2 6c), vía deportiva.
27. Full Moon
(L1 6a+, L2 6a+),
vía deportiva.
28. Bombay Sapphire
(110 m, 6a+)
Vía con equipamiento depor-
tivo. También se puede entrar
por otro largo a la izquierda
damente alrededor de la vía
Apocalipsis)
• Prohibido escalar del 1 mar-
zo a 30 septiembre el sector El
Corral en la zona de las En-
cantadas.
• Autorizado todas las Fronta-
les y Escalera Árabe y Suiza
con sus sectores. Cerro Cristo
pared sur, pared de África, pa-
red de los Venenos bajo el Ca-
minito y a la izquierda del
puente de hierro. Zona central
de las Placas de Atrás. Sector
Caliza. Los Cotos. El Polvorín.
Makinódromo. La Pared de las
Bañeras (segundo cañón) y el
Recodo (por debajo del camini-
to). Estos dos sectores están
pendientes de habilitar acce-
sos con Diputación.
• Autorizado, (a criterio del
propietario): Encantadas, Ro-
cabella, Beedies, Olivillo, Don-
de, Placas de Atrás este y Pla-
cas de Atrás oeste. Hasta la fe-
cha no hay problemas con los
propietarios (se ruega compor-
tarse con el máximo respeto
para que siga siendo así).
• Prohibido escalar por flora
endémica en tres pequeñas
zonas que están valladas y se-
ñalizadas de la Escalera Suiza:
el pilar del Navegador (vía 9
del croquis) y Mali in suzuki
(vía 7 del croquis).
Más información sobre regu-
laciones en la web de la Aso-
ciación Andaluza de Escala-

mismos autores. No os per- (IV). Se desciende por detrás, dores: www.escaladoresanda

FRONTALES MEDIAS
exprés.. Podemos empalmar
L1+L2 (sería 7b) y L5 + L6
(7c). Podemos bajar rapelan-
do por la misma vía, o bien
caminar por la cresta hasta
ell collado que da a las Placas
de la Cantera, y descender
hacia la Escalera Árabe
11. Muchachito
bombo infierno
(150 m, 7c+)
Vía deportiva equipada en
2006 por los alemanes Inés
Papert y Stephan Siegrist.
Descenso rapelando.
12. Pandemia letal
(140 m, 8b)
Vía abierta desde abajo por
Rubén de Francisco y Pedro
Soto los días 21 y 22 de Di-
ciembre de 2019. Los dos
primeros largos estaban
abiertos en los años noventa
(vía Hierbas Letales). Libera-
da por Andrea Cartas y Car-
los Padilla en abril de 2021.
Está equipada, pero reco-
mendable llevar algún mi-
crofriend por los alejes entre
las chapas. Se recomienda
salir a cumbre por El fin de
una vida, o rapelar por algu-
na vía vecina, ya que esta
desploma demasiado.
13. Visión de ciegos
(130 m, 6b/A2 o 7c/+)
Abierta por Felipe Fernández
Crespo y Carlos Perez Rico a
principios de los 90, restaura-
dáis el escorpión dibujado al
inicio del L7. Llevar un juego
de friends, microfriends, es-
tribos y cintas variadas. Lle-
gar hasta arriba por la cresta
y bajar caminando.
17. El señor
de las tinieblas
(280 m, 7a).
Tres largos con equipamien-
to deportivo. Descenso rape-
lando (es la línea de rápel
más directo para las vías de
esta zona).
18. Mal de ojo
(318 m, 7a)
Comienza en un diedro ca-
racterístico a la derecha de la
cueva, cuando ya termina la
pared. Nombre escrito a pie
de vía. Se puede rapelar.
SECTOR SOLARIUM
19. Sucias artimañas
(7a, ¡48 m!), vía deportiva.
con una serie de rápeles que
inician en un gran árbol (tres
rápeles de 25, 40 y 15 m).
29. Valentinis Day
(100 m, 6a).
Vía de corte deportivo equi-
pada para rapelar.
30. Clàssica do Vento
(260 m, 6b+/A0)
Abierta por Paulo Roxo y Da-
niela Teixeira en enero de
2016. Vía de corte clásico
que sigue una sucesión de
diedros y placas fisuradas.
En la placa superior discurre
por la fisura más obvia. Está
sin equipar, salvo un clavo
en el penúltimo largo. Mate-
rial: llevar un juego de
friends, microfriends y fisu-
reros. Descender caminan-
do por detrás. Desde el final
del cuarto largo es posible
acceder a los rápeles de la
vía anterior Valentinis day.
luces.com.
Croquis y más
información
En la web colaborativa www.
cartowall.com encontraréis los
croquis actualizados. También
en la web del Rally 12h de Esca-
lada El Chorro (www.rallyel
chorro.com) hay muchas vías.
En el blog del escalador Berna-
bé Fernández (www.bernabe
fernadez.com) y en los ya men-
cionados de Paulo Roxo y Pedro
Soto también encontraréis cro-
quis de muchas de las vías.
Guía Andalucía, guía de es-
calada deportiva, David Munilla
(Ed. Desnivel, 2007). Guía de
escalada de El Chorro (Javier
Romero, Autoedición, 2016).
Revistas Desnivel 160, 234,
261 y 257.
Redacción DESNIVEL
(con información de
Manuel Gómez, Juan Hofer,
Nicolás Rando y Pedro Soto).

DESNIVEL.COM I 77
 GUÍA PRÁCTICA

FRONTALES BAJAS Y LOS ALBERCONES

LOS ALBERCONES
Acceso por el techo que prote-
ge de caídas de piedras la vía
del tren, al final del cual hay
una ferrata antigua que condu-
ce al pie del sector.
1. Barón de Rivolta
(170 m, 6a+/b)
Vía equipada aunque con algu-
nos alejes entre chapas, reco-
mendable llevar algún micro-
friend. En el pie están marca-
dos el nombre de la vía y la
graduación de los largos. Des-
censo rapelando, pero aten-
ción porque no es en recta.
2. Arandela grober
160 m, V+/A1)
Abierta por Carlos Pérez y Fe-
lipe Fernández en 1999. Vía
clásica parcialmente equipa-
da, llevar un juego de friends ,
empotradores y varios clavos.
3. Espolón Oderse
(120 m, V+)
Vía clásica con algunos alejes
en los que no nos vendrá mal
llevar un juego de friends y de
empotradores. Abierta en los
70 por Adán “el Ferroviario” y
compañeros, aunque reequi-
pada en los 90. Está equipada
hasta el L4, desde aquí se
puede rapelar, o bien llegar
hasta la cumbre trepando y
bajar por la ferrata.
FRONTALES BAJAS
4. Rayo veloz
(135 m, 6c+)
Línea de rápeles.
5. Barrionuevo
(180 m, 6a)
Abierta en 2011 por José Ber-
nal y Daniel Zazo en memoria
de su amigo fallecido, Alejan-
dro Barrionuevo, ese mismo
año. Equipada (menos la últi-
ma reunión que se hace sobre
un puente de roca). Llevar cin-
tas exprés. Se desciende ra-
pelando por la misma vía (los
últimos cuatro rápeles son los
de la Rayo veloz).
6. Proyecto Amptrax
(170 m, 6a)
Gran clásica de El Chorro,
abierta por Miguel Moya y An-
tonio Gámez en 1987, reequi-
pada en los 90 por el mismo
Antonio con Manuel Portillo.
Para descender, desde la
cumbre seguir andando hasta
un collado, donde seguiremos
luego unos hitos por el sende-
ro de bajada. También se pue-
de rapelar por la misma vía.
Parcialmente equipada, llevar
un juego de friends.
7. Proyecto Amptrax +
La Cojera de luna
(180 m, 6b+)
Variante más moderna que
ofrece una salida más directa
y exigente a la Amptrax. Mis-
mo descenso.
8. Zmapp (180 m, 6b+)
Los tres largos que conectan
con la travesía de la fueron
equipados en 2015 por Juan
Serrano, José Antonio Crespo
y Nico Rando, mientras que
los dos largos finales han sido
equipados en Enero de 2020
por Ramón Enrique y Nico
Rando. Descenso caminando
por detrás.
9. Ébola (155 m, 6b+)
Equipamiento deportivo. Se 13. Corazón que no
puede rapelar. siente (220 m, 6c+)
Para llegar es preferible apro-
10. Negra peste ximarse desde el Circo Suizo,
(190 m, 6b+) hacer una ligera bajada y una
travesía a la izquierda. Dos pa-
11. La delgada rabolts con argollas al inicio.
línea roja (190 m, 6c)
Vía abierta desde abajo en 14. Mar de fuego
dos ataques, entre 2020 y (210 m, 7a)
2021, por Rubén De Francis- Vía con equipamiento deporti-
co y Pedro Soto. Via de auto- vo. Se puede rapelar.
protección, escalada técnica
chorrera de la de antaño con 15. Vía sin nombre
alguna esparraguerra, arbo- (L1 V+, L2 6b+)
les, bloques y algún gendar- Vía con equipamiento deporti-
me suelto. Sabor clásico en vo. Se puede rapelar.
tiempos modernos. Llevar 2
Juegos de friends hasta el 16. Vía de las cabras
3,5 o 4 de Camalots, juego de (100 m, IV+)
fisureros y cordinos para
puentes de roca. Descenso 17. Frente popular de
andando por detrás o rape- Judea
lando por la Apocalipsis. (120 m, 6c+)
Vía de equipamiento deporti-
12. Apocalipsis vo, va por la derecha de un
(210 m, 6c) diedro característico. Descen-
Vía de corte deportivo. Hay so en rápel por la misma vía.
una pequeña chorrera carac-
terística que marca el inicio. 18. Libertad para
Llevar cintas exprés. Descen- María (L1 V, L2 6c+).
so en rápel. Vía deportiva. Rapelable.

60
64
63 66 67 68
59
57
48 49 55
36 43 62
50
51
13 69
16 23
46
31 32
76 77
45
29 44
30
58 73 74 75
72
28 40
37
33 68 70 71
27 65
5 6 59 64 66
56 61
54
38 51 52 53 55
42 43 47 48
39 41
36
31 34 35
24 25 26 30 32
18 20 21 22
15 17 19
12 14
10 11
9
7 8

4
1 2 3

78 I DESNIVEL.COM
 12 11

8
6
7
6

16

15
13 14 117
6 11 12
8 9 18
10

5
3
2

11. Siempre fuimos 37. Ceskoslovensko (8c/+). 65. La columna de

punkies (L1 7c, L2 8a+). 38. Salto al perchero (8b). Gollum (7b).
12. Trainspotting 39. Tocino ibérico (8a+). 66. La puta valla (7c).
(L1 7b+, L2 7c+/8a). 40. Melampina 67. Life is sweet (6c+).
13. Rumbo sur (8a+, 45 m!). direct (8a+/b). 68. Osama in the sky (7b+).
14. Miedo Mola (8b, 45 m!). 41. Melampina 69. Proyecto
15. Samarkanda (8b+). (8a+, 35 m!). (pendiente equipamiento).
16. Libertad condicional (8b). 42. Fanatic 43 (8b). 70. (7c).
17. El Oráculo 43. Smashing direct (8a+). 71. Fantastic dream team
83 93
(L1 7c+, L2 8b). 44. Smashing completa (proyecto).
18. Rumbo norte (8b). (8a). 72. Apache (7a+).
19. El mono en el ojo 45. Smashing 73. (6b+, equipamiento
90 91 92 del tigre (L1 7c+, L2 8b). Pumpkins (7c+). vetusto).
86 87 88 89 20. Randi (L1 8a+, L2 8b)). 46. Atlas shrieked (8a). 74. El rey del churro (7a).
82 4 85 21. (7c). 47. Dicho y hecho (8a). 75. Sandonguita (7b+).
78 79 80
81 22. Ke trabaje Randi (8c). 48. Pepe el boludo (7c+/8a). 76. Anathema (7b).
23. KTR Ke trabaje Rita (8c). 49. La dentellada (8a+). 77. Paracaidista
24. Kuala Lumpur (8b+). 50. Porrot (7c+). cordobés (7c).
25. Mala memoria 51. Aristogata (7b+). 78. Heat exchange (6c+).
WWW,CARTOWALL.COM

(8b+, 45 m!). 52. Mutemroy (8a). 79. ?

MAKINÓDROMO
Sector deportivo situado
a la izquierda de la Escalera
Suiza. Con sol todo el día
y protegido del viento, es el
sector estrella para el
invierno, muy frecuentado
por su abundancia de vías
de grado medio.
26. Scarlett (8c+).
27. Al hakan (8c+).
28. Pepinazo Comercial
(8a+, 35 m!).
29. Pepinazo original (?).
30. Lourdes (8a).
1. (7a+, 35 m!). 31. ? (8b).
2. Robasueños (7a, 35 m!). 32. La más señora
3. (7a, 30 m!). de todas las putas (?).
4. Ir y venir (7b, 35 m!). 33. Conexión Lourdes (8a).
5. Mi primo el plano (7a+). 34. La más puta de todas
6. El patrón del mal (7c+). las señoras (8a+, 35 m!).
7. La narco man (8a). 35. Cous cous (8b+).
8. (7a+). 9. (7b/+). 10. (7b). 36. Suspiro (9a).
53. Dando tumbos (7c+).
54. Vete al infierno (7b).
55. ?
56. Hakuna Matata (7a+).
57. Sama (7a+).
58. Las Loi Laufen (7b).
59. Estoy Mortimer (7a+).
60. Salida de emergencia
(L1 6c, L2 7b+).
61. Proyecto.
62. Mysthic rhythm (6b+).
63. Rhythm Method (7a+).
64. La panda de
zampabollos (7b).
80. Canto pecato (7b+).
81. One Bastiamba (7b).
82. Post festum (7a).
83. Mega flash (7b).
84. Criminal curtido (7a).
85. Punk Street (7a).
86. Putanaki (7b+).
87. Reep (7b).
88. La Aprieta (7c+).
89. Aipkido (7a+).
90. Efecto ajo (8a+).
91. (7c).
92. (?).
93. (?).

DESNIVEL.COM I 79
 M A T E R I A L
MANOPLAS MERCURY DE BLACK DIAMOND
Manoplas dobles con
alta capacidad térmica
M ANOPLAS muy cá-
lidas, diseñadas
para usarse en
condiciones de mucho frío.
Ideales para la práctica de
deportes invernales como
alpinismo, esquí de monta-
ña o rutas de montañismo
invernal.
Su resistencia al agua es
muy eficaz y ofrecen tam-
bién una elevada capacidad
de aislamiento. En el interior
incorpora un forro de lana
que incrementa el confort al
80 I DESNIVEL.COM
P R O B A D O
1
FICHA TÉCNICA:
Fabricante:
Black Diamond (EE.UU).
Distribuidor: Megasport.
Actividad recomendada:
alpinismo invernal, esquí,
expediciones...
Materiales: membrana
BD.dry, PrimaLoft Gold 170
y 133 g, cuero.
Peso: 283 g/par (M).
Tallas: XS a XL.
Rango de temperaturas:
-31/-12ºC.
PVP aprox: 110 €.
3 te en la zona
1. Membrana impermeable y
transpirable, con tratamiento DWR . 2. Refuerzo de cuero en
palma. 3. Manopla interior de PrimaLoft Gold. 4. Elástico en
muñeca. 5. Doble cordón de ajuste
+ INFO: www.blackdiamondequipment.com
tacto y contribuye a una ma-
yor calidez en las manos.
Presenta una construc-
ción doble que nos permite
extraer la parte interior, con
lo que podremos usar de
manera separada la mano-
pla de membrana exterior,
combinándola con otros
guantes. También podemos
utilizar la manopla interior
de manera independiente,
prescindiendo de la mem-
brana que le aporta la im-
permeabilidad. El guante in-
terno recoge los dedos en
tres celdas diferentes,
uniendo meñique, anular y
2 (tecnología GTT
4 centaje de materia prima
5
corazón por un lado, y de-
jando el índice y el pulgar
por otro, permitiéndonos así
un gesto de pinza muy útil
a la hora de manejar cual-
quier tipo de material o eje-
cutar una maniobra.
La membrana es BD.dry
propia de la casa, con trata-
Valoración
Comodidad
Impermeabilidad
Funcionalidad
Diseño
Ajuste
Precio
Tiempo de la prueba: 2 meses.
miento de repelen-
cia al agua DWR
Empel, libre de
los contaminan-
tes PFCs). Ade-
más, la palma es-
tá reforzadas con
cuero, lo que opti-
miza su capacidad
de agarre. Como ais-
lamiento lleva fibra
sintética PrimaLoft
Gold (con un alto por-
reciclada), de mayor gro-
sor en el dorso que en
la palma.
Como buen deta-
lle, presenta un pe-
queño y disimulado
enganche en su par-
te superior para po-
der transportarlos
colgados en el arnés
o la mochila median-
te un mosquetón, de
manera que que-
den boca arriba,
evitando la entra-
da de nieve.
Cuenta también
con doble ajus-
de la muñeca,
que hace que
sea más preciso,
además de que no entre la
nieve y optimiza el aisla-
miento térmico.
Excelente confección que
logra buena manejabilidad
y calor, sin ser una manopla
voluminosa ni pesada.
Puntos fuertes: Comodidad;
algo importantísimo ya que
es un material que utilizare-
mos principalmente durante
largas jornadas y en un en-
torno a veces hostil y cam-
biante. Sus propiedades tér-
micas, que mantienen muy
bien la temperatura de una
zona del cuerpo tan sensi-
ble y delicada como son los
dedos de las manos. Y ver-
satilidad, pues se puede
usar prescindiendo de una
capa u otra en función de
nuestras necesidades.
Javi GUZMÁN
CUERDA EQUINOX ELITE DE MAXIM ROPES
Versátil, duradera
y muy manejable
T ENÍAMOS muchas ga-
nas de probar alguna
cuerda de la firma nor-
teamericana Maxim, que
está respaldada por un sólido
equipo de escaladores inter-
nacionales, y la verdad es
que no nos ha decepcionado.
El modelo probado perte-
nece a la gama Elite de la
firma. Estamos ante una
cuerda para uso en simple,
fabricada con el tradicional
sistema constructivo kern-
mantle (funda o camisa
con alma interior). La funda
está confeccionada con la
tecnología TPT (Twill Pattern
Technology) que es algo
así como fibras tejidas en
diagonal, según explican
desde la marca, con la que
aseguran que logra una
buena manejabilidad. Sea o
no por este trenzado espe-
cial de la camisa, es cierto
que la cuerda ofrece un ma-
nejo muy suave desde el
primer momento, pasando
por los mosquetones con
total fluidez. Además, esta
mayor proporción de funda
hace que sea más resisten-
te y por tanto duradera, sin
ser más voluminosa. El in-
terior
lleva tratamien-
to Endura Dry, que limita la
absorción del agua y au-
menta la durabilidad.
No es una de esas cuer-
das hiperligeras para esca-
lada deportiva que buscan
los fanáticos de la ligereza
(las cuales penalizan su
bajo peso con una duración
igualmente limitada), sino
que es más bien un modelo
de peso medio, que nos
servirá tanto para el pegue
“definitivo” como para volar
o hacer top ropes sin re-
mordimientos. Está conce-
bida tanto para usar en el
exterior como para escala-
da en rocódromos, siendo
la versatilidad una de sus
principales cualidades.
Los valores que presenta
en cuanto a la fuerza de
choque y nº de caídas son
los habituales para una
cuerda simple dinámica,
garantizando una buena
absorción del impacto en
caso de caída y una total
fiabilidad. Como buen deta-
1 República Checa.
1. Pegatina en los
cabos con indicaciones
técnicas. 2. Camisa con
tecnología TPT. • Centro marcado.
+ INFO: www.maximropes.com
FICHA TÉCNICA:
Fabricante: Maxim Ropes
(del grupo austríaco
Teufelberger).
Distribuidor:
Vertical Sports S.L.
Actividad recomendada:
escalada en roca o en
rocódromo.
Diámetro: 9,7 mm.
Peso: 61 gramos/metro.
Deslizamiento de funda: 0
Elongación: dinámica 0,31
y estática 0,058.
Fuerza de choque: 8,3 kN.
Nº caídas: 10
Nº husos: 48
Certificación:
EN 892, UIAA 101.
PVP aprox: 129,90 € (60 m).
2
lle, lleva el centro marcado
con negro, facilitando con
ello las maniobras y ofre-
ciendo una mayor seguri-
dad en los rápeles y los
aseguramientos.
Este modelo, al igual
que otras opciones de la
casa, está fabricado en la 1
Puntos fuertes: cuerda
muy cómoda de manejar, Valoración
fluida, que cumplirá con to- Ligereza
das las exigencias tanto Manejabilidad
para el escalador o escala- Polivalencia
dora experimentados como Durabilidad
para los principiantes. Diseño
Precio
Jesús VELASCO Tiempo de la prueba: 1 mes
DESNIVEL.COM I 81
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