El Imperio romano no solo se caracterizó por su ambición
histórica, la brillantez de sus creaciones artísticas y tecnológicas y su evidente legado en nuestro pensamiento. También brilló por sus variadas formas de ocio, muchas de ellas todavía vigentes hoy. El ocio romano (otium) partió del ideal griego de fomento de valores como la libertad, la gratuidad y la satisfacción, aunque introdujo aspectos éticos como primar la participación masiva para garantizar el bien común. A continuación, describiremos las principales actividades de recreo, espectáculos, juegos y concursos que se realizaron en la Roma clásica, sobre todo en la época imperial, ya que en dicha etapa se produjo el máximo esplendor del ocio romano.