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didáctico
Alicia R. W. de Camilloni
Estela Cols
Laura Basa be
Silvina eeney
18 EL SABER DIDÁCTICO
Dedicamos, pues, esta obra, a nuestros colegas, los d1dactas, a los proe
sores en jercicio y en formación, a sus formadores y superviso� es Y a todos
_ ,
los interesados en que la educación, especialmente la educac1on escolar,
cumpla sus misiones principales y logre que los aprendizajes de todos nues
tros alumnos sean signiicativos en sus vanas d1mens1ones, sociales Y cul
turales, personales y laborales, y conduzca a la formación de personas autó ¿POR QÉ Y AA QÉ A DDÁCIA?
nomas, sabias, buenas y elices.
Presentamos a continuación nuesros argumentos en avor de la didáctica.
Con ellos nos proponemos demosrar que es una disciplina necesaria siempre
que se construya de acuerdo con ciertas condiciones que le dan legitimidad.
¿Y de la enseñanza de las ciencias a la enseñanza de las human
dades, Para trabjar esquemas y conceptos se había revelado de rran eectiăigad
as artes y otros dominios del conocimiento? También en este caso es válida la utilización del conflicto conceptual. John DeĄey lo había inado rotun
la traÎsfhrencia de la teoría del cambio conceptual. Nacida, entonces, como damente: «El conflicto es el disparador del pensamiento». Pero en un avance
una teoría en un ámbito especíico de la didáctica, con sus muchas ramiica posterior, el papel de la interacción entre los estudiantes se mostró como un
ciones en subteorías intenas, hoy se ha convertido en una teoría estelr de mecanismo que permite la aprición de nuevas respuestas que no abrían
la didáctica general, que ninguna de las didácticas especíicas puede ignoØar. podido ser logradas individualmente. De allí que el conlicto socio-coÓnitivo
La didáctica general había postulado con vehemencia, a partir de traba«os y no ya el conflicto conceptual individual, juegue un papel undam:ntal e�
de algunos psicólogos, como Piaget, Vigots¬y y Bruner, que aunque dos una didáctica constructivista. Este mecanismo consiste en la expresión
alumnos den respuestas semejantes, éstas pueden tener signiicados dife pública, antes de cualquier aprendizaje, de los modelos mentales que confi
rentes para ellos y que, de igual modo, una misma pregunta puede ser com guran el pensamiento de cada alumno, la conrontación y la discusión de
prendida de diversa manera por dos estudiantes. Los hallazgos de las didác los dierentes puntos de vista de los alumnos en pequeño grupo y en rupo
ticas especíicas pudieron comprobar estos asertos de la didáctica general clase y, inalmente, la vaÌidación o invalidación de hipótesis por medio de
y, al mismo tiempo, brindar ejemplos que permiten ilum¦nar con una nueva eąpeiencias Y rgumentaciones en un marco consruido por el proesor para
luz, la del e§emplo concreto, el principio general. avorecer la construcción social de los conocimientos. En ciertos casos y en
De la confluencia del principio general y los ejemplos empíricos nace dete:minadas condiciones, la situación de co-resolución produce la aparición
un principio generl reconstruido gracias a la mejor comprensión de los de dierentes respuestas que se deben a distintos puntos de centración de los
alcances de ese principio. Es el mismo, pero es nuevo. Es una construcción sujetos o a enoques distintos de los piciÕantes. En la búsqueda de acuerdos
en espiral. Hoy sabemos mejor que antes que para restituir el signiicado de o en la argumentación sobre las discrepancias se proundiza la comprensión
la respuesta y de la pregunta, es necesaio trabajar con los estudiantes de las teorías o los conceptos aunque éstos no cambien necesariamente. El
explícitamente sus signiicados. Invitarlos a pensar «en voz alta», pedirles conflicto conceptual, entonces, es doble: es un conlicto iÒterindividual, pero
explicación de los pasos que dan en la resolución de los problemas, pero también es intraindividual, en la medida en que el estudiante toma conciencia
también aceptar que den saltos en el razonamiento, darles libertad para ex de que hay otras respuestas plausibles y que puede llegar a dudar de la suya.
_
presar sus dudas e incertidumbres y, en particular, para cometer errores. El Esta idea, de este modo, se convirtió en un patrimonio teórico compartido
proesor experimentado, que conoce las ideas previas que suelen sostener por la didáctica general y las didácticas especíicas en su conjunto.
los estudiantes, puede hacer una exploración rápida al comienzo del curso El diseño de actividades didácticas es un terreno en el que se revela,
.
o de cada tema o unidad, para constatar qué y quiénes son los alumnos que igualmente, la conluencia de las ideas que son compartidas por la didáctica
comparten esas diĂersas ideas y concepciones, dejando siempre un margen general y las didácticas especíicas. Así como en la didáctica de las ciencias
libre para que se expresen oras distintas. De esta manera, al conocer algunos naturales se preparan actividades destinadas a la resolución de problemas
de los problemas que deberá enrentar en la enseñanza tendrá una base para centradas en los alumnos, en la enseñanza de las ciencias sociales, las ac
diseñar una primera programación para trabajarlos. tividades organizadas con el in de lograr aprendizajes signiicativos respon
Desde la didáctica general se postula que es necesario atender a una doble den a principios semejantes. Lo que Jerome Bruner denominó primero
demanda. La enseñanza, por una parte, debe ser individualizada y, por ese «aprendizaje por descubrimiento» y luego «aprendizaje por invención» cons
camino, con el apoyo del docente que le proporciona andamios, el alumno tituye un enoque didáctico especialmente •Íotivador en la enseñanza de
logrará un aprendizaje autónomo. Pero otra dimensión que también se debe todas las ciencias, ormales, naturales y sociales. Situaciones problemáticas
incluir en la enseñanza para la comprensión prounda es la que deviene de la en la enseñanza de las ciencias sociales, en las ×ue la inormación debe ser
consideración de las variables sociales en los procesos de aprendizaje. El buscada y empleada para prÔponer una solución en una situación enigmática;
aprendizaje colaborativo se encuentra actualmente entre las estrategias de donde el conocimiento del pasado adquiere, además de su propio sentido,
enseñanza que demuestran mayor valor didáctico. Las uentes de esta doble el de permitir comprender problemas actuales; donde las actividades indi
propuesta se hallan en la didáctica general de enoÖue socio-cognitivo. viduales y las tareas grāpales de aprendizaje colaborativo se conjugan; donde
36 EL SABER DIDÁCTICO
Diáctica geneal y didácticas especicas
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la enseñanÔa y la evaluación no se programan como tareas separadas sino
de vista epistemológico, las didácticas especíicas, todas o alguna de ellas,
que el aprendizaje genera recursos que acilitan la autoevaluación, son :ºdos
son disciplinas autónomas. Ninguna lo es, a nuestro juicio. Ni la didáctica
rasgos de la enseñanza con un enoque que no es eÑclusvvo de una umca
general ni las didácticas especíicas. odas aportan a la construcción de una
didáctica especíica. Empleamos este enfoque en una serie de actividades
acción pedagógica con sentido social, respetuosa del carácter integral que
diseñadas como introducción al estudio de las ciencias sociales, con el in
debe tener la educació¨ intencional.
de orecer modelos creativos de diseño de actiÏidades interdisciplinarias en
De manera semejante, la teoría de la evaluación de los aprendizjes,
las que, intencionadamente, no se interrumpe el camino entre las dencias
desarrollada desde comienzos del siglo XX, ha ido cªnstruyéndose sobre la
sociales, las ciencias natura¥es, la lengua y la matemática (Cam1llo¦ Y
base de principios generales, fundados sobre teorías epistemológicas, psico
Levinas, 1989).
lógicas y didácticas. Cuestiones tales como las concepciones acerca de qué
Veamos, inalmente, dos campos en los que la didáctica general ha
es conocer y saber, qué es lo que puede conocerse acerca de los saberes de
eectuado aportes que no hubieran podido surgir de modo integral desde
los alumnos, cómo obtener evidencias de cuáles y cómo son esos saberes,
ninguna de las didácticas específicas. Son ellos la teoría del currículo y la
cómo pueden apreciarse sus niveles de calidad, qué instrumentos de eva
teoría de la evaluación de os aprendizajes y de la calidad de la enseñanza.
luación emplear y de qué modos pueden hacerse esti§aciones sobre el valor
No cabe duda de que la historia de la teoría del currículo se construye
de los aprendizajes que los alumnos han logrado, son todas preguntas gene
con variados aportes provenientes de visiones abarcativas de las problemá rales que reciben también respuestas generales. Luego, en cada didáctica
ticas sociales, culturales, políticas y pedagógicas que se proponen dar
especíica de la disciplina, de la edad, del nivel de enseñanza, por ejemplo,
respuesta a las clásicas cuestiones relacionadas con las misiones de la escue�a
_ recibirán precisiones. De la misma manera que en las otras cuestiones que
y la ormación de las personas. El currículo es, seguramente, el mas compleJO
hemos ido planteando, el aporte de las investigaciones efectuadas en los
de los objetos de conocimiento de la didáctica. La teoría que se ha ido cons
marcos de las didácticas especíicas sobre estos temas ha ido eniqueciendo
tituyendo sobre el currículo desde el último cuarto del siglo XI� üene
el campo, no sólo de la didáctica general, sino también de las oras didácticas
carácter general. Las derivaciones y las aportaciones que ue rec1b1endo
específicas.
desde las diversas didácticas especíicas la han enriquecido sin alterar su
He intentado m«strr, a través de algunos pocos ejemplos, que las rela
carácter de undamento para las decisiones que se tomen respecto de lo que
ciones enre la didáctica general y las didácticas especíicas son complejas
se debe enseñar, cuándo y cómo enseñarlo. Del currículo sólo corresponde
y que las ecundaciones recíprocas son necesarias tanto para la didáctica
hablar, asumiendo el carácter fundamentl que reviste, desde la visión generl
general cono para las didácticas especicas de las disciplinas, los niveles,
de un proyecto pedagógico en el que el alÎmno no sea ratado como muchos
las edades y los distintos tipos de suetos e instituciones educativas. Los
suetos dierentes, cada uno visto desde la óptica de una teor�a prcial d� la
, a¬ortes son significativos y las interrelaciones son ériles, por lo tanto, para
enseñanza. El alumno es uno, indivisible, orgánico y, en lo posible, armomco,
todas. La didáctica general no puede reemplazar a las didácticas especicas
y no debe recibir, por ende, un mosaico de programas de ormación; Las
ni éstas a aquélla. Constituyen una familia disciplinaria con una fuerte im
didácticas específicas deben contibuir a desrollar un proÒecto pedagog1co
pronta de rasgos comunes. Aunque no siempre es ácil lograr armonía y
de formación buscando principios comunes, esrategias que se orienten a
poner orden y organización en la familia, vale la pe©a intentarlo. Por esta
fines semejantes y que respeten los undamentos didácticos generales. Sirvan,
razón hemos usado la metfora de Chistopher Alexander sobre la ciudad
como ejemplos, tanto la obra que sobre la teoría del currículo ha compilado
(Alexander, 1965). La didáctica tampoco ecun árbol, es una gran red de
Puilip W. Jacson (1992) cuanto la que han escrto William . Pinar y oros
conocimientos y de producción de conocimientos.
(1996), porque constituyen sólidos compendios de los discursos teó�cos
sobre el currículo que ofrecen bases para el ratamiento general y especiico
de estas complejas problemáticas.
En consecuencia, mirado el problema desde la cuestión curricular, no
haÓ posibilidad de acordar con una postura que airme que, desde un punto
D8 EL SABER DIDÁCTICO Didáctica general y didácticas especficas
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