Carta de despedida de maestro a alumnos de sexto grado.
El año ha concluido queridos estudiantes, ahora se van a separar de nosotros sus
maestros y de sus grandes y buenos compañeros, y tengo que darles una mala noticia. La separación no durará solo dos, tres, cuatro o cinco meses, sino para siempre. Tendrán que estar en una nueva escuela, la secundaria, pero estoy muy segura que querrán a su antigua escuela, la que los vio crecer, donde duraron 6 hermosos y maravillosos años y en ella han experimentado la alegría de haber trabajado, aprendido, jugado, donde han encontrado tantos buenos amigos, en donde cada palabra y llamada de atención que han oído de nuestras bocas tenía por objetivo su bien y educación, y no han experimentado un disgusto que no les haya sido útil para su bienestar. Lleven este afecto y agradecimiento con ustedes y den un adiós de todo corazón a cada uno de sus compañeros. Despídanse de todos con mucho afecto, dejen cariño y alegría en esta gran familia en la cual entraron de niños, los cuales llegaban apenas hablando, leyendo e incluso hasta escribiendo y ahora mis queridos alumnos han salido casi hechos todos unos jóvenes, unas personas fuertes, grandes, inteligentes, buenos y sin duda alguno aplicados. Esperamos que en un futuro no muy lejano nos visiten y nos platiquen sus experiencias, nos compartan sus logros y éxitos que sin duda alguna sé que serán muchos, tengan en cuenta que son y formarán parte de un lugar muy importante en cada uno de nuestros corazones. En lo personal, les deseo la mayor de la suerte en este nuevo viaje de su vida, sé que muchos tienen miedo de dar este nuevo paso a una nueva etapa, pero sé que ese momento será pan comido para ustedes, porque ustedes pueden con eso y mucho más, nunca olviden que para poder lograr nuestras metas y sueños es necesario el esfuerzo diario y nunca dejar de luchar y principalmente de creer en ustedes mismos. No tengo ni la menor duda que llevan las herramientas necesarias para emprender su camino, que recuerden que en el camino siempre habrá obstáculos que vencer, pero el triunfo consiste en no darse por vencido y más que nada aprender de cada uno de sus errores. De ante mano les puedo asegurar que ya son unos triunfadores, me siento muy orgullo de cada uno de ustedes y les agradezco de todo corazón las enseñanzas que cada uno de ustedes me brindo para mi formación. Me llevo la sonrisa de cada uno de ustedes, sus ocurrencias, sus muestras de cariño, sus peleas, sus enojos, sus quejas, sus travesuras, sus bromas y principalmente sus enseñanzas en mi corazón. No me queda más que decirles que les deseo lo mejor y no olviden por favor que los quiero mucho.!
En la vida hay momentos d plenitud que no pueden ser explicados por esos símbolos llamados palabras su significado solo puede ser articulado por el inaudible lenguaje del corazón