En esta práctica podemos ver como se nos plantea una sentencia del Tribunal Supremo en la que resuelve un recurso de casación respecto a un contrato de descuento, iniciado por Comercialización y Técnica SA, la cual formuló anteriormente demanda contra Banco Bilbao Vizcaya S.A (actualmente BBVA S.A y desde ahora en adelante en esta práctica recibirá este nombre). En síntesis, podemos decir que el asunto de la demanda y del propio recurso de casación, ya que ningún tribunal anterior falló a favor de por Comercialización y Técnica SA, es la no devolución por parte de BBVA S.A de los efectos cambiarios, que habían estado vinculados a un crédito abierto por Comercialización y Técnica S.A para el descuento de esos efectos cambiarios, una vez que por no haber podido cobrar BBVA S.A los efectos cambiarios la misma había procedido al cargo en cuenta del nominal de los efectos que habían sido descontados y que habían resultados impagados. Comercialización y Técnica S.A añade que la devolución de esos efectos por parte de BBVA S.A es una obligación esencial y que debido a esa no devolución los efectos no pudo cobrar el crédito de los mismos y por ese mismo motivo surge la deuda con el banco BBVA S.A. Por la otra parte, BBVA S.A indica que no entregó los efectos porque no había sido requerido en ningún momento para ello y que sí cumplió con todas las obligaciones a las que estaba sometido. Por tanto, debemos resolver si realmente existía la obligación o no por parte de BBVA S.A de devolver los efectos cambiarios a Comercialización y Técnica SA, ya que esa es la clave del asunto. Tras analizar todo el caso creo que el centro de la disputa se haya en que Comercialización y Técnica SA cree que BBVA S.A debe devolverle los efectos impagados, un pensamiento que es cierto solo en parte, expliquémonos. BBVA S.A debería devolver los efectos impagados al librador, en este caso Comercialización y Técnica SA, no obstante, no lo hace porque Comercialización y Técnica SA no ha pagado la deuda contraída con BBVA S.A por la póliza de descuento, por este mismo motivo BBVA S.A se queda con los efectos en posesión para asegurarse el cobro de la deuda a través de una posible vía ejecutiva como finalmente ocurre. Además esta postura es apoyada por sentencias tales como la de (la Audiencia Provincial de Cádiz de 12.5.98, Cantabria 29.9.98, Toledo 22.4.99 [AC 1999, 1139] y Valencia 10.10.97 y 21.9.96), en las cuales se indica que no podrán los deudores-libradores (en nuestro caso Comercialización y Técnica SA) recobrar los efectos hasta que liquiden el importe de las mismas a quien se hayan obligado (en nuestro caso BBVA S.A), por lo que podemos decir que BBVA S.A ha cumplido con todas sus obligaciones indicadas en el artículo 51 de la Ley Cambiaria y del Cheque y en ningún momento ha tenido la obligación de devolver los efectos a Comercialización y Técnica SA, pues esta no cumplió con su obligación del pago de la deuda originada en la póliza de descuento.